ingeniería civil que se encarga del estudio de las propiedades mecánicas, hidráulicas e ingenieriles de los materiales provenientes de la tierra. Los ingenieros geotécnicos investigan el riesgo para los seres humanos, las propiedades y el medio ambiente, derivados de la ocurrencia de fenómenos naturales o propiciados por la actividad humana tales como deslizamientos de terreno, hundimientos de tierra, flujos de lodo y caída de rocas. Se aplica en las siguientes ramas de la ingeniería civil: Estructuras: Se aplica al diseño de fundaciones, edificios, puentes, etc. Hidráulica: En el diseño de obras hidráulicas como canales, represas, reservorios de almacenamiento, túneles, etc. A través de medios porosos, hidráulica de ríos, puertos, etc. Sanitaria: Diseño de redes de alcantarillado sanitarios y pluvial (zangas, entibados), diseño de plantas de tratamiento de aguas residuales (estudio del suelo de lecho, permeabilidad de los estratos), diseño de rellenos sanitarios, etc. Carreteras: Estudios geotécnicos de suelo en general de toda el área donde se pretende construir la carretera, estabilidad de taludes, compactación de suelos, etc. Medio ambiente: Estudios para conocer el grado de contaminación del subsuelo, permeabilidad de los estratos para conocer la velocidad de difusión de contaminantes, etc. Cualquier proyecto geotécnico debe cumplir dos requisitos: Asegurar la estabilidad de la obra: Estudio de las condiciones de rotura para prevenir el colapso (factor de seguridad por resistencia del terreno). Conseguir que las deformaciones o movimientos en servicio fueran aceptables, conocimiento de la rigidez del terreno frente a las cargas y otros cambios en el estado inicial del suelo como consecuencia de la realización del proyecto.