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All content following this page was uploaded by Daniel Starck on 07 May 2014.
INTRODUCCIÓN
Desde las primeras décadas del siglo pasado (Turic 1999; Disalvo 2002; Starck 2002a), han sido explotados
yacimientos de petróleo y de gas alojados en rocas de edades carbónicas y terciarias en el extremo norte de
nuestro país (Fig. 1). Es el propósito de este trabajo la descripción de los distintos tipos de entrampamiento que
caracterizan a estos yacimientos. Los entrampamientos de hidrocarburos alojados en unidades pre-carbónicas en
la misma zona son tratados en otra contribución.
Figura 1: Imagen satelital del extremo norte de nuestro país con la ubicación de los yacimientos descriptos.
AB: Aguas Blancas; Ac-MS: Acambuco-Macueta Sur; CD: Campo Durán; CT-AY: Cerro Tartagal-Alto de
Yariguarenda; LBB: Lomitas Bloque Bajo; Lo: Lomitas; Mj: Madrejones; Ña-CDS: Ñacatimbay Campo Durán
Sur; RP: Río Pescado; SP: San Pedro; To: Tonono; Tr: Tranquitas
La historia de exploración de esta cuenca ya ha sido reseñada en los trabajos mencionados al comienzo, por lo
que no se profundizará más en la misma. Sólo se destacará que la actividad en la cuenca estuvo signada por
episodios de gran actividad (las décadas del 20 y 30 y el período 1955-1965) separados por etapas de bajas
inversiones, durante las cuales las cuales las producciónes de los yacimientos cayeron a niveles bajísimos.
Actualmente en la cuenca se registra algo de actividad, aunque sin alcanzar los niveles de los picos mencionados
anteriormente.
MARCO GEOLÓGICO PETROLERO
Desde un punto de vista regional, las rocas carbónicas de la zona fueron depositadas en la Cuenca de Tarija,
mientras que las rocas terciarias corresponden al relleno de una cuenca orogénica (principalmente de antepaís)
relacionada al crecimiento de la Cadena Andina. Un episodio de generación de cuenca intermedio a los dos
mencionados (la Cuenca Cretácica del Grupo Salta) está representado marginalmente en el área en estudio.
Desde una óptica estructural casi todos los yacimientos se encuentran en el ámbito tectónico de las Sierras
Subandinas, relacionados a trampas con una fuerte componente estructural. Una excepción a esto corresponde al
Yacimiento Tonono, localizado en el ámbito del antepaís (“Chaco Salteño”).
Estratigrafía
Carbónico a Jurásico:
Como ya ha sido mencionado, las rocas carbónicas (y hasta Jurásicas) que nos interesan fueron depositadas en la
Cuenca de Tarija. Esta se desarrolla mayormente en Bolivia, ingresando su extremo sur en nuestro país, para
terminar contra el borde erosivo representado por la Dorsal de Michicola. La base de la sucesión de la cuenca
descansa discordantemente sobre rocas devónicas depositadas durante un ciclo tectosedimentario anterior. Esta
discordancia basal está relacionada a la tectónica Chánica. El techo de la sucesión está marcado por otra
discordancia, en este caso relacionado a la tectónica Araucana, que la separa de unidades depositadas durante el
cenozoico.
El relleno de la cuenca presenta importantes discontinuidades internas (discordancias) que permiten subdividirlo
en paquetes menores, que corresponden a los grupos definidos desde el punto de vista litoestratigráfico. Estos son
los grupos Macharetí, Mandiyutí, Cuevo y Tacurú (Fig. 2). Debido a los efectos de la erosión desatada en
relación a la Fase Diastrófica Araucana las distintas unidades presentan una distribución actual en la que van
quedando más restringidas hacia el norte a medida que se asciende en la columna estratigráfica. Los grupos
Macharetí y Mandiyutí son los únicos con importancia económica en nuestro país. Fueron depositados durante el
importante evento glacial que afectó al Gondwana a fines del Paleozoico. Tanto las facies reservorio como las
sello, están influenciadas por esta actividad glacial (Schulz et al., 1999, entre otros).
Grupo Macharetí:
Se apoya mediando una discordancia sobre el sustrato devónico, aunque en Cordillera Oriental alcanza a apoyar
sobre el Ordovícico. Esta discordancia refleja una componente tectónica responsable del basculamiento y erosión
del sustrato, a la que se suman los efectos de la importante caída eustática ocurrida durante el Carbónico medio.
Esta componente eustática es la responsable del corte de una importante red de paleovalles en el sustrato
precarbónico.
Tres unidades componen este grupo en Argentina: las formaciones Tupambi, Itacuami y Tarija, y la edad del
mismo, de acuerdo a los palinomorfos que porta sería Carbónica Superior.
La Fm Tupambi es la unidad más baja del registro carbónico en la porción argentina de la cuenca de Tarija.
Litológicamente corresponde a un paquete de hasta 500 m de areniscas blanquecinas, de aspecto sacaroide,
separadas por intercalaciones pelíticas. Las fuertes variaciones laterales que caracterizan a las unidades
carbónicas se ven reflejadas en el caso de esta unidad en importantes cambios de espesor y de facies en
distancias relativamente cortas. Gran parte de las variaciones de espesor se deben a la naturaleza irregular de la
superficie sobre la que se depositó la Fm Tupambi (los mencionados paleovalles). Esta unidad representaría
principalmente el registro de barras de desembocadura y cuerpos fluviales depositados en una paleogeografía
irregular. Si bien las variables condiciones de depositación resultan por lo general en fuertes cambios laterales,
en algunas posiciones de la cuenca se llegaron a depositar paquetes de arenas con espesores de más de 100 m.
Desde el punto de vista petrolero es la unidad que más hidrocarburos ha producido en la porción argentina de la
A la fecha unos 15 MMm3 de líquidos, y 42.000 MMm3 de gas fueron extraídos de esta unidad, prácticamente de
tres yacimientos (Campo Durán, Madrejones y San Pedro).
Figura 2: Sección estratigráfica esquemática de la “Cuenca de Noroeste”
La Formación Tarija corresponde a un espeso paquete (de hasta más de 500 m) de rocas diamictíticas oscuras de
origen glacial. Esta composición litológica le confiere un carácter de sello eficiente (Starck y Koslowski 1998).
Sin embargo, entre las facies diamictiticas se intercalan niveles (generalmente lenticulares) de facies de
areniscas. Estos lentes de areniscas han sido productivos en Aguas Blancas, San Pedro, Tranquitas, Vespucio y
Lomitas. En general las producciones acumuladas de estos reservorios no han sido muy importantes. Esta
formación presenta además intercalaciones pelíticas oscuras. Una de estas intercalaciones, ubicada en la base, es
denominada Formación Itacuami cuando alcanza un espesor considerable.
Grupo Mandiyutí:
Se apoya mediante una fuerte discordancia erosiva sobre el grupo anterior. En el borde oeste de la cuenca traslapa
al Gr Macharetí y apoya directamente sobre el sustrato precarbónico. La discordancia basal del grupo se
caracteriza nuevamente por la incisión de paleovalles de gran magnitud. Los mismos alcanzan a cortar más de
400 m dentro de la Fm Tarija y son claramente apreciables en las secciones sísmicas registradas en el Chaco
Salteño. Este grupo está compuesto por las formaciones Las Peñas y San Telmo.
La Formación Las Peñas se caracteriza por ser una unidad de espesores altamente variables y gran contenido de
arenas. Al igual que la Fm Tupambi, se depositó sobre una paleogeografía con fuertes paleorrelieves
(paleovalles) cortados, en este caso, en la infrayacente Formación Tarija. Se supone que también fue originada en
ambientes fluviales y deltaicos, confinados principalmente a los paleovalles. Debido a sus características
litológicas, la Fm Las Peñas se convierte en una importante roca reservorio potencial. Desafortunadamente, la
poca cantidad de situaciones de entrampamiento configuradas para niveles estratigráficos de esta unidad ha
conducido al hallazgo de pocos (y pequeños) yacimientos.
De esta manera la Fm Las Peñas es productiva en los yacimientos Cerro Tartagal-Alto de Yariguarenda,
Acambuco-Macueta Sur, Lomitas Bloque Bajo, Ñacatimbay-Campo Durán Sur y Campo Durán Las Peñas. Los
tres primeros productores de petróleo, mientras que los dos últimos lo son de gas y condensado. Las producciones
acumuladas a la fecha son del orden de los 800 Mm3 de líquidos y 2.000 MMm3 de gas.
La Formación San Telmo está compuesta mayormente por facies pelíticas y diamictiticas, presentando entonces
buenas cualidades como sello. Sin embargo algunas intercalaciones arenosas han brindado producciones de
petróleo y gas. Es interesante destacar que las arenas de mejores espesores y condiciones petrofisicas de esta
formación, pertenecientes al Mb Chimeo, han resultado siempre acuíferas (en términos petrofísicos quizás son
los mejores reservorios de la cuenca). La producción en los dos yacimientos conocidos para esta unidad
(Acambuco-Macueta Sur y Campo Durán San Telmo) proviene de delgadas intercalaciones en la mitad basal de
la unidad.
Grupo Cuevo:
Esta muy poco representado en nuestro país debido a la erosion precretácica. Si a esto se suma que las
estructuras anticlinales subandinas estan desventradas, por lo general, en unidades más antiguas, se tiene un
panorama en el que este grupo ha sido poco perforado. Su conocimiento procede entonces del estudio de las
secciones afloradas. Tres formaciones lo conforman: la Fm Cangapi, La Fm Vitiacua y la Fm Ipaguazu.
La Fm Cangapi corresponde a un paquete de areniscas eólicas blanquecinas y abigarradas que alcanzan unos 300
m de espesor. Hacia el techo intercala bancos carbonáticos, dando lugar al pasaje transicional a las calizas de la
Fm Vitiacua. Esta última se compone de una repetición de ciclos carbonáticos de espesores del orden del metro,
que alcanza hasta 90 m de espesor.
La Formacion Ipaguazu, muy poco representada en nuestro país, se apoya en forna neta sobre la Fm Vitiacua y
se compone de unos 60 m de facies finas rojizas.
Se supone una edad Pérmica para este grupo, si bien la Fm Ipaguazu podria alcanzar el Triásico.
Grupo Tacurú:
Corresponde a un extenso manto de arenas eólicas, que durante el Jurásico cubrió vastas regiones. La
distribución actual de este grupo en nuestro esta muy restringida a causa de la erosion precretácica. Sus
espesores maximos alcanzan los 600 m.
Con posterioridad al desarrollo de Cuenca de Tarija se desarrollaron en el noroeste argentino dos ciclos
tectosedimentarios más.
Grupo Salta:
Representa el relleno de la cuenca distensiva desarrollada durante el Cretácico y el Paleógeno.
Se reconoce una etapa de “sin-rift” , representado por el Subgrupo Pirgua, restringido a las fosas extensionales
(rifts), y una etapa de “post-rift” compuesta por los subgrupos Balbuena y Santa Barbara, los que traslapan sobre
los bordes de los mencionadas fosas. En el caso de la Cuenca de Tarija, ubicada al norte del “rift” Cretacico de
Lomas de Olmedo, se puede observar el traslape del Subgrupo Santa Barbara sobre las secuencias paleozoicas
(biseladas por la discordancia precretacica) del Alto de Michicola. El Subgrupo Santa Barbara, de edad
paleógena, esta representado en estas posiciones por la Fm El Madrejón, y por la “Serie Abigarrada”, unidad
informal incluida dentro de la Fm Tranquitas. El litosoma sefítico basal de esta secuencia paleógena es conocido
como “Conglomerado Galarza”, unidad de unos pocos metros de espesor, con una típica composición de clastos
de pedernal, derivados de los nódulos de la Fm Vitiacua.
Grupo Orán:
Involucra un espeso paquete de rocas clásticas continentales depositadas en cuencas sinorogénicas,
contemporáneas al crecimiento de la cadena andina. Llega alcanzar los 7000 m de espesor, y su edad abarca
desde el Mioceno medio hasta el reciente. Estas secuencias presentan el arreglo general grano y estratocreciente
caracteristico de las sucesiones sinorogénicas. Se puede distinguir una seccion basal, muy espesa y continua que
corresponde al relleno de la cuenca de antepais generada en respuesta a la reestructuracion de la Cordillera
Oriental, y varias secciones localizadas en la parte mas alta de la columna, contemporaneas a la estructuracion de
las Sierras Subandinas. Estas secciones son muy jovenes (menos de 5 m.a.) y permiten acotar la edad de las
estructuras subandinas.
Tradicionalmente en esta espesa columna se reconoce una sección arenosa basal, la Fm Tranquitas. Mientras que
el resto de la secuencia es agrupado bajo la denominacion de “Terciario Subandino” o tambien de Fm Chaco.
Estudios mas recientes (Hernández et al. 1999, entre otros) abordan la estratigrafía de estas sucesiones con un
enfoque más moderno, y brindan ademas algunas dataciones radimétricas y magnetoestratigráficas.
Estructura.
La configuración estructural presente del área se debe principalmente al accionar de la tectónica andina. Las
diferentes fases compresivas andinas plegaron y fallaron el prisma sedimentario de la mitad occidental de la
cuenca, involucrándolo en el Orógeno Andino. La mitad oriental de la cuenca fue poco afectada por la tectónica
andina y permanece, casi sin deformar, en el subsuelo del antepaís (“Chaco Salteño”).
En las latitudes en cuestión, el Orógeno Andino presenta un piedemonte externo caracterizado por una tectónica
de lámina delgada “(“thin skin”) conocido como Sierras Subandinas. Al oeste del mismo, en una situación más
interna, se desarrolla la Cordillera Oriental, con un estilo de lámina gruesa (“thick skin”) (Fig. 3).
CAMPO DURÁN
SIERRA DE LOS
CINCO PICACHOS SIERRA DEL DESECHO AGUAS RAMOS
NOGALITO PESCADO BLANCAS AGUARAGÜE
CHICO
+++ - - --- N.M
- - - - --
+++ - - - --
-- ---
+++ - -- -- - -
- - -- - - -- -
- - - -- - -
+++ - - -- -
+++++ - - -- -
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -- - -- - -- - -- - -- - -- - - - - - - -
++++++ - - -
-- -- -- - - - - - - - - - - -- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
- - - - - - - - -- -- -- -- ---- --- - -- -- ---- -- - - - - - - - - - - -10 km
++++++ - --- ---- -- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -- - - - - - - - - - - - -
- -- -- -- - - - - -
0 50 km
------
--- CÁMBRICO + ORDOVÍCICO Fms ICLA y HUAMAMPAMPA CARBÓNICO A JURÁSICO TERCIARIO
Figura 3: Corte estructural transversal de las Sierras Subandinas (tomado de Starck et al. 2002)
Las Sierras Subandinas consisten en una faja plegada y corrida, desarrollada a lo largo de varios centenares de
kilómetros en Bolivia y cuyos 150 km australes ingresan en el norte de nuestro pais (Fig. 1). En superficie se
componen principalmente de unos 7 trenes estructurales positivos orientados en dirección SSW-NNE y de gran
desarrollo longitudinal. Cada uno de estos trenes está conformado por anticlinales más o menos fallados en su
flanco (disposición “en echelon”). Estos anticlinales involucran a las distintas unidades del Carbónico al
Terciario, que se acomodan sobre un núcleo conformado por las pelitas de la Fm Los Monos fuertemente
deformadas. A este tipo de estructuras se relacionan los campos de hidrocarburos descubiertos entre los 20’ y los
70’. Con el avance de la exploración se pudo, demostrar que los anticlinales superficiales se encontraban
despegados por encima de estructuras positivas desarrolladas en niveles silúricos y devónicos. Tras tres décadas
de exploracion de estos anticlinales profundos, los que albergan yacimientos gigantes de gas, se tienehoy un
panorama mas acabado de las estructruras subandinas (Belloti et al, 1995; Starck y Kozlowski 1995; Starck et
al., 2002b entre otros). Estas se ajustarían a un modelo estructural en el que se reconocen los siguientes niveles:
El nivel estructural intermedio se caracteriza por la alta deformacion y complicaciones tectonicas en las que se
llega a triplicar el espesor estratigráfico de la Fm Los Monos. Estas complicaciones se desarrollan por encima de
la superficie de despegue ubicada en la base lal unidad, la que mecanicamente se comporta como un
bajacorrimiento desarrollado por encima de la cuña tectonica del nivel estructural inferior.
El nivel estructural superior presenta un plegamiento concéntrico en el que los núcleos de los anticlinales están
rellenos por las pelitas del nivel estructural intermedio. Es comun que estos anticlinales se encuentren afectados
por corrimientos en su flanco este, los que pueden alcanzar varios kilometros de desplazamiento. Menos común
es la presencia de bajocorrimeintos. Las trampas que se tratarán en este trabajo están localizadas en las
estructuras relacionadas a este nivel estructural.
Como ya se comentó esta estructuración es sumamente recientes, ya que se definió en los ultimos 5 millones de
años.
Contrastando con la fuerte deformacion de la faja plegada, el antepais (“Chaco Salteño”) se encuentra poco
estructurado, siendo el rasgo más conspicuo la suave pendiente regional de las secuencias precretácicas. Estas se
acomodan según un grosero homoclinal que inclina hacia el noroeste un par de grados. Esta pendiente regional
tambien afecta a la parte actualmente plegada de la cuenca y se debe principalmente al basculamiento
relacionado a la apertura de la fosa tectonica de Lomas de Olmedo a comienzos del Cretácico. Algunas fallas
normales, de rumbo aproximado ENE-WSW, que afectan a las secuencias paleozoicas representan las fallas mas
externas del campo distensivo cretacico (Fig.3). En la parte oeste del antepaís se suma al citado basculamiento el
efecto de la subsidencia flexural debida al crecimiento de la cadena andina.
SISTEMA PETROLERO
La Fm Los Monos, unidad más alta del registro Siluro-Devónico representa la única roca madre comprobada en
la zona. La misma se encuentra actualmente en ventana de generación de petróleo o de gas (dependiendo de la
posición estratigráfica dentro de la unidad y/o de la ubicación geográfica) y alimenta un Sistema Petrolero que
por medio de la migración secuencia arriba (Starck, 1999; Disalvo y Villar, 1999) permitió la carga de los
reservorios involucrados en las trampas en cuestión. Esta roca madre habría entrado en la ventana de generación
durante el Mesozoico, llegando al pico de generación durante la depositación de las espesas secuencias
cenozoicas.
La suma de una importante tectónica compresiva y una estratigrafía compleja, con fuertes cambios laterales ha
confluido en un escenario de entrampamientos variado. De esta manera las trampas conocidas presentan
componentes estructurales y estratigráficas en proporciones variables.
Dado que prácticamente la totalidad de los yacimientos descubiertos se encuentran ubicados en los ejes
subandinos, donde la prospección ha sido focalizada desde el punto de vista estructural, las trampas presentan
una fuerte componente estructural. Sin embargo este predominio del condicionamiento estructural no ha
impedido que las fuertes variaciones estratigráficas que caracterizan tanto a las secuencias Carbónicas como
Terciarias tengan tambien un fuerte control sobre la distribución de los hidrocarburos en la trampa, llegando a
veces a ser un factor determinante en el entrampamiento.
En el esquema de clasificación de trampas de Vicelette et al. (1999) los yacimientos que nos interesan
pertenecen entonces al Sistema Estructural y al Sistema Combinado Estructural/Estratigráfico.
Anticlinales compresivos
Entre las trampas estructurales se destacan los anticlinales con cierre en los cuatro sentidos. Estos se presentan
como culminaciones en los ejes estructurales positivos que caracterizan al nivel estructural superior de las
Sierras Subandinas. En esta situación, los reservorios que presentan buena continuidad lateral alcanzan
condiciones óptimas de entrampamiento. Este es el caso de la Fm. Tupambi. Como ya se mencionó esta unidad
presenta un importante contenido de arenas, las que a pesar de la variaciones laterales, alcanzan importante
continuidad lateral. Por otra parte el hecho de estar en contacto estratigráfico con la roca madre (Fm Los Monos)
y estar cubiertas por un sello eficiente (la Fm Tarija, Starck y Koslowski 1998) crea las condiciones ideales para
el entrampamiento de hidrocarburos. Los yacimientos de Campo Durán, Madrejones y San Pedro responden a
esta situación, y en conjunto produjeron más del 90% de los hidrocarburos extraídos de la cuenca. En el esquema
de clasificación de trampas propuesto por Vincelette et al. (1999) tendrían la siguiente sistemática:
Sistema: Estructural
Régimen: Pliegue
Clase: Anticlinal Local
Subclase: Simple/Limitado o atravesado por fallas
Superfamilia: Tectónico
Familia: Pliegue compresional
Es el yacimiento más importante de la Cuenca de Tarija. La historia de exploración y desarrollo del mismo
puede consultarse en Starck et al. (2002).
Se encuentra ubicado en una culminación anticlinal en el más externo de los ejes estructurales subandinos (Fig.
3). Presenta un hundimiento sur marcado, mientras que hacia el norte una suave silla (combinada con variaciones
faciales) lo separa del yacimiento Madrejones. Dos fallas longitudinales (Fallas C y CD) cortan al anticlinal (y al
yacimiento), dividiéndolo en tres bloques (Fig. 4). En el sur del yacimiento ambas fallas convergen. Se
describirán aquí las características de los bloques central y occidental (“Bloques I y II), que en conjunto
conforman una trampa anticlinal fallada. El bloque bajo oriental (“Bloque III”) será tratado más adelante en la
sección referida a los entrampamientos vinculados a fallas.
El anticlinal Campo Durán se presenta entonces como un anticlinal asimétrico del nivel estructural superior.
Debido a que el acortamiento general de la estructura no es muy importante (es del orden de los 2 km), el nivel
estructural intermedio no llega a tener crecimiento vertical notable y la estructura no alcanza mayores
complejidades. Sin embargo, la geometría del pliegue presenta una llamativa variación en sentido norte sur (Fig
4). De esta manera en el sector sur del yacimiento, se presenta como un anticlinal asimétrico, fallado en su flanco
este, con una cresta relativamente estrecha.. Hacia el norte la estrutura se ensancha, las fallas se separan en
planta, y la parte alta del pliegue comienza a hacerse más plana, inclinando suavemente hacia el oeste. En esa
dirección comienza a delinearse un “kink”, que hace que el pliegue tienda a parecer un pliegue cajón (o medio
cajón). Más hacia el norte, en el hundimiento de la estructura, la Falla C pierde rechazo hasta desaparecer
totalmente, mientras que la parte plana superior de la estructura es rotada hasta llegar casi a la horizontalidad.
Esta rotación se debería al
incipiente crecimeinto vertical de
la Fm Los Monos en la parte
trasera del pliegue. Más al norte
(en Madrejones) esta deformación
de la Fm Los Monos se resuelve
como un bajocorrimiento (Fig. 4).
La Fm Tupambi fue bastante
estudiada en Campo Durán y
Madrejones, donde puede
subdividirse en cuatro secuencias
(Penna y Rodríguez 1993; Starck
et al. 2002a). De esta manera se
reconocen las secuencias (de
abajo hacia arriba) Amarilla,
Rosa, Marrón y Violeta.
La Secuencia Amarilla puede
alcanzar espesores de hasta 200 m
y está constituida por areniscas
sucias, grises, finas a medias, que
se intercalan con pelitas.
La Secuencia Rosa se caracteriza
en la mitad norte del yacimiento
por albergar una sección arenosa
de unos 50 m de espesor y notable
continuidad lateral. Estas arenas
se muestran más limpias que las
de la secuencia infrayacente.
La Secuencia Marrón se
caracteriza por el predominio de
facies finas. Las intercalaciones
arenosas que presenta esta
secuencia adquieren importancia
hacia la parte norte del
yacimiento, como así también en
Icua y sur de Madrejones.
Por último la Secuencia Violeta
puede superar los 150 m de
espesor, con un importante
Figura 4: Mapa estructural y cortes seriados de los yacimientos Campo contenido de arenas. La
Durán (CD) y Madrejones (Mj). En el caso de Campo Durán el nivel granulometría de las mismas y la
mapeado corresponde aproximadamente al tope de la arena Violeta, en presencia de estratificación
el caso de Madrejones está referido al tope de la Sección Amarilla, entrecruzada observable en
ubicada unos 200 m más bajo. coronas sugieren condiciones
ambientales de mayor energía que
en las secuencias más bajas. Estas arenas se intercalan con otras más sucias (vaques), con peores condiciones
petrofísicas.
Las secuencias definidas presentan fuertes variaciones laterales, y las relaciones estratigráficas entre ellas son
por lo general erosivas. Quizás el caso más significativo de estas variaciones se note en la Secuencia Violeta, la
misma se apoya discordantemente sobre las secuencias inferiores, mediando un importante paleorrelieve. La
distribución de espesores para la Secuencia Violeta sugiere una paleovalle orientado oblícuamente a la
estructura, rellenado por un importante espesor de arenas reservorio. Estas variaciones adicionan cierta
compejidad estratigráfica al patrón estructural dominante del yacimiento.
Si bien las propiedades petrofísicas de la Fm Tupambi no son muy buenas, los importantes espesores netos y las
características de los fluídos explotados (principalmente gas y condensado) permitieron que los pozos de Campo
Durán produjeran con excelentes caudales (más de 500.000 m3/d de gas y más de 300 m3/d de líquidos).
La porosidad es principalmente primaria, si bien en algunos testigos se observa la presencia de fracturas. Puede
ser que en algunos pozos esta fracturación haya mejorado las permeabilidades de las areniscas. Por otro lado, el
comprobado carácter sellante de algunas fallas (el caso de la Falla CD), demuestra que los planos de ruptura, en
estas litologías, no garantizan conectividad. Esta situación podría derivar en la existencia de bloques aislados o
semiaislados con un deficiente drenaje de las reservas.
En cuanto a los fluídos de reservorio, el Yacimiento Campo Durán es, en términos generales, un yacimiento de
gas y condensado con un halo de petróleo volátil. Analizado con un poco más de detalle, se puede concluir que
se trata de más de un yacimiento, con contactos agua-petróleo y petróleo-gas independientes. Las columnas
mineralizadas de algunos de estos yacimientos superan los 300 m de gas, valores importantes, sobre todo si se
tiene en cuenta que en el cierre de la trampa hay contribución de fallas.
El Yacimiento Campo Durán lleva acumulados más de 8 MMm3 de líquidos y 29 MMm3 de gas (esta producción
incluye también el bloque bajo).
Yacimiento Madrejones:
Está ubicado a unos 10 km al norte de Campo Durán, con el que comparte muchas características. La trampa
nuevamente corresponde a un anticlinal, aunque en este caso está limitado en ambos flancos por fallas inversas
(hacia el este un corrimiento, y hacia el oeste un bajocorrimiento (Fig. 4). El yacimiento se desarrolla en este
bloque intermedio, el que presenta un suave relieve estructural y que hunde suavemente hacia el sur hacia la silla
que lo separa de Campo Durán. Hacia el norte el yacimiento tiene una pequeña continuación en Bolivia para
luego hundir marcadamente en esa dirección.
La profundidad media de este yacimiento, descubierto por el pozo M-2 en 1953 es de 3700 m.b.n.m. y fueron
perforados 38 pozos para desarrollarlo.
La Formación Tupambi sufre importantes variaciones entre Campo Durán y Madrejones. La Secuencia Violeta,
que aporta los mejores reservorios en la parte central de Campo Durán no se encuentra desarrollada en
Madrejones, donde el grueso de la producción proviene de las secuencias Rosa y Amarilla. La Secuencia Marrón
presenta un notable desarrollo de arenas en el extremo sur del yacimiento. Como resultado de la pérdida de
arenas, y del menor relieve estructural (siempre respecto a Campo Durán), el Yacimiento Madrejones alberga
una columna máxima de hidrocarburos de unos 200 m. Esta columna está constituida por gas húmedo (similar al
de Campo Durán), y sólo habría una fase de petróleo volátil en las arenas de la Secuencia Marrón en el sur del
Yacimiento. Parte del cierre de la trampa corresponde a cierre contra las fallas que flanquean al anticlinal, en las
cuales la Fm Tuapambi se superpone a la sellante Fm Tarija.
Las producciones por pozo fueron del mismo orden que en Campo Durán. Las acumuladas de este yacimiento
son de 4,2 MMm3 de líquidos y 13,8 MMm3 de gas.
El yacimiento San Pedro está localizado en la Sierra de San Antonio (Fig. 1) y se ubica en la culminación de una
estructura anticlinal de rumbo N-S. Fue descubierto en el año 1928 por la Standard Oil Company (SOC) de
Nueva Jersey. En la década del ’30 se llevó a cabo la fase más intensa del desarrollo, iniciándose la producción
de petróleo en 1932 y alcanzando un pico máximo de producción de 720m3/d de petróleo en Mayo de 1934. En
ese momento la producción de San Pedro representaba el 10% de la producción total del país (Reed 1946). El
campo ha estado en producción hasta el año 1961, fecha en que es abandonado. En el año 2002 se reinicia la
explotación de petróleo, mediante la reparación de algunos pozos de la SOC.
En su primera y principal etapa de explotación, el yacimiento acumuló 2.715.000 m3 de petróleo, siendo un
96,1% proveniente de la Fm. Tupambi y el 3,9% restante de la Fm. Tarija. En su segunda etapa de producción,
ha acumulado (junio 2005) 4481m3 de petróleo de la Fm. Tupambi, con una producción diaria de 4m3/d a través
de 1 pozo. La SOC ha perforado un total de 67 pozos, de los cuales 56 fueron productores de la Fm. Tupambi, 3
de la Fm. Tarija y 8 han sido estériles.
La principal fuente de información sobre el campo son los legajos de pozo de la SOC y el trabajo publicado por
Reed (1946). Actualmente no hay disponibles testigos coronas ni muestras de recortes de perforación, así como
0
0
-120
-400
0
-600
0m 500m
-100
-800
-200
0
A Eh=Ev A´
(proy)
A
Fm. Tranquitas
200
-1523
0
200
Fm. Tarija
0
-1000 -1000
-1000
-800
-1200
-600
Fm. Tupambi
-400
-200
-2000 -2000
7524000
200
200
SAN PEDRO
100000 1000
0
80000 800
-200
-600
-800
-400
-1000
7522000
60000 600
Qo m3/d Qa m3/d
Qg m3/d Qi m3/d
200
40000 400
20000 200
0 0
Ja 2
Ja 3
Ja 4
35
Ja 6
Ja 7
Ja 8
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Es el yacimiento más antiguo explotado en la cuenca Norte. Fue puesto en producción por la Standard Oil Co.
De Nueva Jersey en 1926 como una extensión austral del yacimiento Bermejo que explotaba en Bolivia. De
acuerdo a Zunino (1944) el yacimiento en conjunto (Bermejo Aguas Blancas) se presenta como un largo y
estrecho domo con cierre estructural en todo sentido. La producción consistía de petróleo negro (26 API, 0.896
g/cm3), y del lado argentino se logró una acumulada de unos 200 MMm3. Los niveles reservorio se localizaban
en la Fm Tupambi y en los lentes arenosos de la Fm Tarija.
Yacimiento Rio Pescado
Este yacimiento, localizado sobre la Sierra Baja de Orán a unos 30 km al NW de Orán fue descubierto por YPF
en 1932. Se encuentra alojado en una culminación anticlinal algo fallada del mencionado eje estructural
(Constantini et al.2002a). Los reservorios explotados en este yacimiento se encuntran dentro de la secuencia
orogénica terciaria y eran conocidos como “Complejo Petrolero” y Complejo Alto”.La ubicación precisa de
estos niveles era incierta, y se suponía que estaban ubicados en la base del “Terciario Subandino”. En el año
2000 se perforó el pozo RP-1001, el cual pemitió identificar por medio de los perfiles eléctricos que estos
reservorios se localizaban en la “Serie Gris Neta” y la “Serie de Transición” de la Fm Tranquitas
respectivamente (Constantini et al. 2002a).
La trampa esta constituida por una cúpula anticlinal elongada en sentido NNE-SSW de unos 3 km de largo por
menos de un km de ancho. El sello de la misma lo constituirían las facies finas ubicadas en el tercio inferior del
“Terciario Subandino”
El yacimiento tuvo una primera etapa de producción hasta 1956 en la que produjo 588 Mm3 de petróleo. En
1986 se lo reabrió, y hasta 1992 acumuló unos 35 Mm3 más. Por último en 2000 comenzó una nueva
reactivación, durante la cual acumuló (hasta la fecha) unos 82 Mm3.
Al describirse las características del nivel estructural superior se mencionó la presencia de corrimientos que
afectan el flanco oriental de las estructuras. Relacionado a los bloques bajos de estos corrimientos se han
descubierto varias acumulaciones comerciales de hidrocarburos. En estos casos la superficie de los corrimientos
constituye el cierre pendiente arriba de la trampa, mientras que los cierres laterales (norte y sur en este caso)
pueden estar controlados por variaciones estratigráficas. La complejidad estructural de este tipo de
entrampamientos, imposibles de visualizar por sísmica y difíciles de reconstruir a partir de geología de
superficie, hizo que el descubrimiento de los mismos se produjera al perforar las estructuras anticlinales
adyacentes y superpuestas. Debido tambien a la dificultad de prospección de estas trampas las mismas
constituyen todavía un “play” no demasiado explorado y con posibilidad de brindar nuevos hallazgos.
En las condiciones ideales el corrimiento provería un cierre eficiente al superponer sobre los niveles reservorios
unidades más antiguas de propiedades sellantes. Sin embargo, la mencionada superposición no es una condición
estrictamente necesaria, ya que se ha podido comprobar que en los yacimientos en cuestión los corrimientos no
siempre superponen rocas sellantes por encima del reservorio. Es obvio entonces que la zona de falla se
comporta como un sello eficiente en sí misma.
Tres yacimientos de estas características han sido descubiertos (y siguen en explotación) en la cuenca. Estos son:
Cerro Tartagal-Alto de Yariguarenda, Campo Durán Bloque Bajo y Lomitas Bloque Bajo.
De acuerdo a Vincelette et al. (1999) estos yacimientos se describirían de la siguiente manera.
Sistema: Estructural
Régimen: Falla
Clase: Inversa
Superfamilia: Tectónico
Familia: compresiva
Este yacimiento fue descubierto y puesto en explotación por la Standard Oil de Nueva Jersey en 1927. El mismo
fue descubierto al perforarse la culminación de Cerro Tartagal, ubicada sobre la Sierra de Aguaragüe (unos 12
km al NW de Tartagal). La exploración de la cúpula anticlinal aflorante sólo brindó producciones no comerciales
de la Fm Tupambi. Sin embargo los pozos fueron lo suficientemente profundos como para alcanzar el bloque
sobrecorrido, y poder reconstruir la geología existente por debajo del corrimiento. Los cortes estructurales de esa
época muestran una interpretación totalmente coincidente con la que se tiene hoy día. Los pozos que entraron a
la Fm Las Peñas por debajo del corrimiento comprobaron la mineralización de la misma y fueron puestos en
producción. Entre 1927 y 1965 acumularon 18000 m3 de petróleo. En 2001 Tecpetrol perforó el pozo Alto de
Yariguarenda x-1, a unos 3 km al norte de los pozos productivos de Cerro Tartagal con el objetivo de constatar
la extensión norte de la acumulación e investigar el contenido de fluidos de otras unidades del bloque bajo. El
pozo fue perforado siguiendo una trayectoria curva (utilizando la experienca adquirida en el desarrollo del
Yacimiento Lomitas Bloque Bajo) y resultó productivo de la Fm las Peñas (a la fecha lleva acumulado 20000
m3 de petróleo).
El Yacimiento de encuentra alojado en la Fm Las Peñas del Bloque Bajo. En esa posición el espesor
estratigráfico de la unidad es del orden de los 500 m, con una alta relación net/gross. La actitud estructural del
bloque bajo es la de un homoclinal con una fuerte inclinación al este, llegando a veces a la verticalidad o
inclusive a estar rebatidos. El espesor estratigráfico de la Fm Las Peñas representa entonces el ancho del
yacimiento en la dirección E-W. Como ya se mencionó el corrimiento, suborizontal en el sector del yacimiento,
representa el cierre hacia arriba y se ubica en una cota que alcanza los 100 m (sobre el nivel del mar) en su punto
más alto, mientras que el contacto agua petróleo se estima en –200 m. Puesto que el corrimiento acompaña la
tendencia estructural del anticlinal aflorante, es muy probable que también constituya los cierres laterales en
dirección al norte y al sur, al hundirse en esas direcciones. Se estima que el largo del yacimiento en sentido
norte-sur puede alcanzar los 6 km.
Se encuentra alojado en el bloque bajo de la estructura de campo Durán, al este y por debajo del ya descripto
yacimiento Campo Durán. La falla CD separa la acumulación alojada en la trampa anticlinal de la desarrollada
en el bloque bajo (Fig.4). La estratigrafía de la Fm Tupambi de este bloque es coincidente con la descripta al
tratar el yacimiento Campo Durán.
Desde las primeras etapas del desarrollo del yacimiento Campo Durán se trató de investigar el contenido de
fluidos del bloque bajo de la estructura. Algunos de los pozos que llegaron a este bloque pudieron comprobar un
contenido de fluidos distinto al existente en la trampa anticlinal. En otros pozos la sección atravesada de este
bloque fue puesta en conjunto con niveles del bloque suprayacente.
En 1996, la perforación del pozo CD-1001 comprobó la existencia de presiones en el bloque III mayores a las
existentes en los bloques I y II atrayendo nuevamente la atención.
Sin embargo, hasta ese momento ninguno de los pozos que afectaron a este bloque habia atravesado las mejores
secciones reservorio (principalmente la Sección Violeta del sector medio del yacimiento).
De esta manera en 2003 fue perforado el pozo CD-1003 con el objeto de evaluar las reservas presentes en estos
reservorios. Este pozo, sumado al CD-1004 perforado a continuación, con producciones iniciales del orden de
los 60 m3/d de petróleo y 200000 m3/d de gas, permitieron conocer el estado presente de las presiones y la
disposición de los fluidos en el bloque. Se pudo comprobar que las presiones en este bloque al momento de
perforar estos bloques eran de 150 kg/cm2 para la sección violeta, 200 kg/cm2 par la sección rosa y 250 kg/cm2
para la sección amarilla.
Estas presiones son más altas que existentes entonces en los otros bloques, lo que sumado a los distintos
contactos de fluidos, vuelve a indicar que se trata de una acumulación independiente. Sin embargo las presiones
observadas son inferiores a las presiones iniciales del yacimiento lo que indicaría que las reservas del bloque han
sido parcialmente drenadas de alguna manera.
La producción estimada de los pozos que interesaron el bloque es insuficiente para haber producido la caida de
presión observada en el mismo, por lo que no queda otra explicación que la de una pérdida a traves de la Falla
CD.
En las condiciones estáticas originales la diferencia de presiones entre los bloques situados a ambos lados de la
falla era inferior o igual a la capacidad sellante de la falla. Esto permitó el que los bloques se comportaran como
yacimientos independientes, con diferentes columnas de hidrocarburos y diferentes contactos de fluidos. La
estimación de las presiones del Bloque III a partir de las columnas de hidrocarburos (se carece de mediciones de
presión) indica que las presiones de este bloque podrían haber sido algo mayores (unos 8 kg/cm2) que las
conocidas en el Bloque I y II. Es posible entonces que si esta diferencia corresponde a la capacidad sellante de la
falla, se habría producido un pasaje de fluidos durante el llenado de la trampa (¿principalmente gas?) hacia los
bloques superiores, enriqueciendo en líquidos al Bloque III. La Falla CD presenta numerosos sectores en los que
se produce la superposición de arenas del Bloque II por sobre arenas del Bloque III (Fig.7 ), sectores por los que
pudo haberse verificado el pasaje. En esta situación la altura de la columna de hidrocarburos del Bloque III
estaría controlada por la capacidad sellante de la falla.
Figura 7: Diagrama de superposición (“Diagrama de Allen”) de la falla CD. En líneas contínuas (sin
relleno) las arenas Violeta, Rosa y Amarilla del Bloque II, En líneas cortadas (y con relleno) las
mismas arenas en el BloqueIII. El rayado oblicuo muestra las zonas de contacto entre arenas de los
dos bloques.Están indicados tambien los contactos agua-hidrocarburo en los dos bloques.
Debido a la historia de producción del Yacimiento Campo Durán se produjo una importante caída de presión
(cayó por debajo de los 100 kg/cm2) en el mismo. Indudablemente el diferencial de presión entre los bloques que
se alcanzó fue suficiente para producir el fallo del sello relacionado a la falla, produciendose un importante
pasaje de fluidos del Bloque III al Bloque II. De esta manera, reservas originalmente alojadas en el Bloque III
fueron drenadas a traves de pozos perforados en el Bloque II. Seguramente el pasaje se produjo nuevamente en
la porción central del yacimiento, donde el Bloque II fue más drenado y además donde el plano de falla presenta
las mayores zonas de contacto entre arenas (Fig.7). La mayor movilidad del gas respecto al petróleo quizás
controló el pasaje selectivo de este fluido, el que a su vez tendría un mayor impacto en la caida de presión del
bloque bajo. De acuerdo a esto, en posiciones del Bloque III más alejadas de la zona central del yacimiento,
donde se producen los mayores contactos entre arenas, deberían preservarse presiones más altas. Esto parece
confirmarse por las diferentes presiones medidas en los pozos CD-1003 y CD-1004, y por las diferencias
exitentes entre las distintas secciones arenosas del bloque.
El yacimiento con un contacto agua-petróleo ubicado en aproximadamente –3600 m, tendría una columna
máxima de hidrocarburos (petróleo y algo de gas) de 500 m. La longitud en sentido norte sur del mismo
superaría los 15 km y los cierres norte y sur estarían controlados por el hundimiento del plano de la falla CD en
esas direcciones a los que se le sumaría un deterioro de las facies reservorios (incluyendo el acuñamiento de
algunas de las secciones arenosas).
Debido a las fuertes variaciones estratigráficas que presentan los reservorios alojados en las unidades carbónicas
y terciarias, los cambios estratigráficos constituyen muchas veces un factor determinante en el entrampamiento.
En los yacimientos descriptos antes, las variaciones laterales de los reservorios no eran importantes en el
entrampamiento, o eran accesorios a la componente estructural. Sin embargo en los casos que serán descriptos a
continuación las componentes estratigráficas juegan un papel determinante en la configuración de la trampa. De
esta manera los acuñamientos pendiente arriba de niveles porosos dentro de la secuencia analizada constituyen
un tipo de entrampamiento bastante común en la cuenca. Estas situaciones han sido probadas sobre los distintos
ejes estructurales y demuestran la existencia de acumulaciones de hidrocarburos pendiente abajo de las
culminaciones estructurales presentes en dichos ejes.
De acuerdo a la sistemática de Vincelette et al. (1999)estos entrampamientos pueden clasifiacarse dela siguiente
manera:
Yacimiento Tranquitas:
Yacimiento Lomitas-Vespucio
El Yacimiento Lomitas constituye la continuación buzamiento arriba del Yacimiento Tranquitas. Fue
descubierto en 1927 por la Standard Oil Company de Nueva Jersey (SOC), produciendo hasta la década del 60.
El Yacimiento Vespucio correspondía a una pequeña pertenencia minera (2000 x 500 m) localizada dentro de los
cateos Lomitas de la SOC y explotada por YPF. Al igual que en el caso de Tranquitas, el Anticlinal de
Aguaragüe en el sector de Lomitas presenta un marcado hundimiento hacia el sur, por lo que las acumulaciones
de hidrocarburos tienen que estar controladas por cierres estratigráficos pendiente arriba (hacia el norte). De esta
manera los niveles explotados corresponden principalmente a lentes de areniscas localizados dentro de la Fm
Tarija. Fueron perforados un centenar de pozos, siendo de poco más de medio millón de m3 el volumen de
petróleo recuperado de estos yacimientos.
El yacimiento Acambuco/Macueta Sur está localizado en la Sierra de San Antonio (Fig 1) y se ubica en la
culminación de una estructura anticlinal local ubicada en el hundimiento sur del anticlinal de Macueta/San
Alberto. La zona productiva corresponde a areniscas fluviales ubicadas dentro de la Fm. San Telmo. Fue
descubierto por YPF en el año 1970 mediante la perforación del pozo Ac.x-1 y puesto en producción en 1977.
En las décadas del ´80 y ´90 Bridas completó el desarrollo del campo, con la perforación de 4 nuevos sondeos.
Al 30 de junio de 2005 la acumulada de petróleo es de 124.987m3 y la producción diaria promedio de 9m3/d. El
95% de esta acumulada proviene de los niveles arenosos de geometría lenticular ubicados en la Fm. San Telmo,
mientras que el 5% restante corresponde a la Fm. Las Peñas.El anticlinal de Acambuco/Macueta Sur
corresponde a un pliegue asimétrico, con cierre en los cuatros sentidos y con un limbo dorsal (flanco oeste)
tendido y un limbo frontal (flanco este) empinado. El tipo de estructuración correspondería a un plegamiento del
tipo fold bend folding (Iñigo 2004) y el acortamiento medido para la cubierta carbónica es de 3.5km (Iñigo
2004).
En superficie, la unidad más antigua aflorante corresponde a la Fm. Cangapi (Iñigo 2004). Para el techo de esta
unidad, se midió un cierre estructural propio de 125m (Iñigo 2004), mientras que para el nivel reservorio, en la
Fm. San Telmo, el cierre mínimo es de 83 m. Sin embargo, el factor estructural no es el único interviniente en el
entrampamiento puesto que la Fm. San Telmo muestra variaciones estratigráficas. Tanto el espesor como la
calidad del reservorio presentan importantes variaciones laterales, razón por la cual de los 5 pozos perforados en
la Fm. San Telmo, sólo dos han tenido producciones significativas de petróleo, mientras que los restantes han
tenido producciones marginales.
El espesor total del intervalo productivo varía entre 28m y 5m, el espesor neto de arena entre 22m y 4m y el
espesor útil permeable entre 11 m y 0 m. La porosidad promedio es del 14% en los mejores pozos y del 8% en
los más pobres.
Tal como se mencionó, la geometría de los cuerpos es lenticular, encontrándose los mayores espesores en el
centro de la estructura y disminuyendo hacia el Norte y especialmente hacia el Sur. De hecho, el pozo
MacSx-1001, el más alto de la estructura, atravesó tan sólo 5 m de arena, con un ensayo sin entrada, resultando
improductivo en este nivel.
El sello de la acumulación de Macueta Sur está dado por una secuencia de arcilitas castañas a grisáceas de
aproximadamente 35m de potencia que corresponderían a depósitos de origen lacustre (Fig. 9).
Con relación a los fluidos, el petróleo de Macueta Sur posee una densidad de 39º API y un contenido de gas muy
bajo. Si bien la posición del contacto de agua no se conoce, la altura de la columna está acotada entre el 85 y
125m, por lo tanto el contacto se ubicaría entre los 250 msnm y los 275 msnm. Al día de la fecha el campo no ha
producido agua, lo que sugiere la ausencia de un acuífero activo.
1003
1004
1002
1005
Ac.x-1 Línea
2D Cangapi
MacS-1001 Ac.x-1 Mac.S-1004
1001
Fm.
San Telmo
Fm.
Figura 9: mapa estructural correspondiente al tope del nivel productivo en el campo Macueta Sur, línea
sísmica 2D interpretada en la que se observa el estilo estructural y corte estratigráfico nivelado a la base
del nivel pelítico que sella la estructura. Pueden notarse las fuertes variaciones en el espesor de los niveles
productivos
Yacimientos Campo Durán (Las Peñas y San Telmo) y Ñacatimbay-Campo Durán Sur:
Estos yacimientos de gas y condensado se encuentran ubicados en los plunges del anticlinal de Campo Durán
(Fig. 10), por encima del yacimiento desarrollado en la Fm Tupambi. El Yacimiento Campo Durán Las Peñas
Fm fue puesto en evidencia en 1996 al perforarse el pozo CD xp-1001. Ese mismo año se produjo el
descubrimiento de Ñacatimbay-Campo Durán Sur. El yacimiento Campo Durán San Telmo fue definido al
intervenirse antiguos pozos y punzarse delgadas intercalaciones arenosas de la mitad inferior de la formación.
La ubicación de estos yacimientos en los hundimientos del anticlinal esta controlada por el acuñamiento
pendiente arriba de los niveles reservorios. En el caso del Yacimiento Campo Durán-Las Peñas el acuñamiento
parece estar controlado por un rasgo erosivo en el techo de la formación (Starck et al. 2002). A la fecha se han
obtenido de este yacimiento unos 1320 MMm3 de gas y unos 180 Mm3 de condensado.
La producción del Yacimiento Campo Durán-San Telmo proviene de varios niveles lenticulares de areniscas, y
alcanza a la fecha unos 600 MMm3 de gas y 70 Mm3 de condensado.
En Ñacatimbay Campo-Durán Sur la producción
provino de un cuerpo arenoso de la base de la
Fm San Telmo (o en la Fm Las Peñas según
Disalvo et al. 1999). Como en el caso de los
anteriores, se trata de un cuerpode dimensiones
limitadas, tal como lo demuestra la evidencia
sísmica (Disalvo et al. 1999) como así también
la perforación de pozos que resultaron
improductivos. La producción acumulada de este
yacimiento es de unos 850 MMm3 de gas y 130
Mm3 de condensado.
Yacimiento Tonono
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