Frutales. Cuba Propagación asexual o por partes vegetativas de la planta
En la propagación del guayabo se pueden utilizar
varios métodos asexuales o vegetativos, como: injertación, estacas de raíz, estacas de brotes enraizados en el tronco, estacas de ramas herbáceas o esquejes, estacas de ramas lignificadas, acodos o margullos aéreos o en tierra, cultivo de tejido, etc.
Injertación
Es la operación mediante la cual se procede a
injertar una o varias yemas de corteza herbácea o lignificada de una variedad o planta madre sobre una planta, portainjerto o patrón, para que mediante la unión o proceso de cicatrización de sus tejidos, ambas partes vivían unidas hasta la muerte.
Existen varios tipos de injertos que pueden utilizarse
en la propagación vegetativa del guayabo tales como el de chapa o escúdete de vástagos o ramas herbáceas, tangencial con patrón decapitado o no con ramas herbáceas o lignificadas, chapa de corteza de vástagos o ramas lignificadas; este último ha dado buenos resultados, posibilitando mantener por mucho mas tiempo el almacenamiento del material vegetativo de propagación cortado, de fácil ejecución para los aprendices y de fácil prendimiento aún cuando el portainjerto o patrón no dispone de suficiente savia y no requiere de condiciones especiales para su ejecución.
El injerto de chapa de corteza de vástagos o ramas
lignificadas se puede utilizar cuando los patrones tienen más de 0.5 cm de diámetro hasta aquellos que pudieran encontrarse en plantas adultas en plantaciones que se desean realizar un cambio de copa o variedad.
La injertación en el primer caso debe realizarse
entre 5-10 cm de altura en cualquier época del año, seleccionando aquellos vástagos o ramas redondas ya lignificadas, desprovistos de hojas u otras ramas; se debe extraer el ojo o yema en la corteza de forma cuadrada o rectangular con cortes de 0.5-2.0 cm por todos los lados según el diámetro que presente el patrón, procurando que la espátula o filo de la cuchilla de injertar al levantar o extraer la corteza, debe profundizar y cortar por debajo de la yema para evitar que esta se desprenda o quede adherida al vástago; una vez desprendida la corteza, se mantiene apoyada sobre el vástago con el dedo pulgar y se dan los mismos cortes en el patrón procurando que por todos los lados sean unos milímetros más ancho para favorecer un buen asentamiento y cicatrización correcta de la corteza; si queda muy ajustada, el propio proceso de cicatrización tiende a levantarla; posteriormente mediante el uso de una banda de nylon trasparente y del ancho y largo según el diámetro del patrón se cubre completamente comenzando un centímetro por debajo del corte inferior hacia un centímetro del corte superior; se tapa el ojo o yema, el nylon en forma de espiral siempre debe estirarse para que ambos tejidos tengan un buen contacto y el agua de lluvia, rocío o riego no penetren y así evitar el desarrollo de hongos y la pudrición del injerto; esta operación debe realizarse lo más rápido posible para evitar oxidación en los cortes, el ácido tónico que existe en la planta ataca el metal de la cuchilla y tijera de podar y forma una sal perjudicial. La cuchilla debe limpiarse cada vez que se termine de realizar el injerto o periódicamente.
Alrededor del mes, eliminamos el nylon con un
ligero corte en el amarre o en el lado contrario al injerto; si la corteza de éste a simple vista está verde o al levantar con la cuchilla un pedacito se encuentra verde, es indicio de que el injerto tendrá resultado; así lo dejamos una semana más; la yema del injerto debe comenzar a brotar a los 12 o 15 días aproximadamente. Para favorecer al brote y desarrollo más rápido de éste se corta con la tijera de podar todo el patrón entre 0.5-5.0 cm por encima de la chapa de corteza injertada dependiendo del vigor y salud del patrón. Si el mismo está débil y poco vigoroso se realiza un corte de media sabia entre dicha altura, eliminando todas las yemas apicales de las ramas del patrón o se realiza un anillo de corteza de 1-2 cm de ancho a unos 5 cm sobre el injerto, para evitar que se reseque o muera y se pueda injertar nuevamente el patrón. Cuando el injerto se haya desarrollado y este fuerte y vigoroso, se corta el tocón o pedazo del patrón que se encuentra por encima del punto de unión del injerto. Si existe buena iluminación en el vivero éstos crecen erectos sin la necesidad de un tutor; por el contrario, se coloca a este en el lado opuesto al injerto cuando el mismo tenga una longitud de 10 cm o más y se amarran ambos con un nylon o cordel con un lazo en forma de número ocho, hasta que el vigor del injerto le permita mantenerse erecto por sí solo.
Se elimina el tutor y el pedacito de tocón del patrón
con un corte de 15º –20 º de inclinación con una tijera de podar, antes o en el momento de llevar la postura a plantación que debe ocurrir alrededor de los 4-6 meses. El corte debe sellarse con alguna pasta antifungica o pintura para evitar entrada de hongos y favorecer una cicatrización rápida. Las plantas pueden plantarse sin podar o podándolas a la altura de 40-50 cm para favorecer la formación de una copa baja y bien equilibrada.
Posterior a la injertación, especialmente después de
cortar el patrón y en la plantación deben eliminarse con la mano los brotes o ramas que se desarrollan en el patrón por debajo y encima del injerto cuando son muy tiernos, con cuchilla de injertar o tijera de podar cuando están más endurecidos o lignificados para favorecer una cicatrización uniforme.
Las diferentes actividades fitotécnicas en el
semillero y vivero están relacionadas con el riego, eliminación de hierbas indeseables en los pasillos y envases y los tratamientos fitosanitarios contra plagas y enfermedades cuando estas aparezcan.
Estacas de raíz
Para la obtención de estacas se cortarán éstas con
un diámetro entre 1ó2 cm y una longitud de 15 a 20 cm, se colocan las mismas dentro de un cajón o medio apropiado, donde se coloca un sustrato o lecho de enraizamiento constituido por una mezcla de arena, tierra, polvo de carbón vegetal y turba o aserrín de madera no resinosa. Debe dejarse un tercio de la longitud de las estacas sin enterrar procurando que sea la porción más fina de las mismas.
Se le dará un riego adecuado. El lecho de
enraizamiento debe cubrirse con una tapa o cubierta de cristal o material plástico transparente, para mantener un ambiente de humedad y temperatura constante lo mas elevado posible, sin recursos artificiales. De 3 a 6 semanas después, las estacas habrán comenzado a retoñar o brotar y a las 10 semanas se podrá trasplantar. Se tratarán como plantas de semillero.
Pueden utilizarse otros sistemas más costosos como
es la utilización de canteros como lecho de enraizamiento constituido de abajo hacia arriba por graba ó mácala (piedra gruesa), grabilla de ½”-3/4” (piedra pequeña) zeolita de 0-3 mm de diámetro; todos ellos de 10-15 cm de espesor en el cantero; un sistema de neblinero del agua, dosificada a intervalos periódicos, un techo de nylon trasparente para favorecer la radiación solar y la aplicación en la base de la estaca de una hormona o complejo hormonal a base de ácido indolbutírico o para activar más rápido la formación de raíces.
Estacas de brotes enraizados en el tronco
Se cortan las plantas entre 30-50 cm de altura, para
favorecer el brote de todas las yemas durmientes que se encuentran en el tronco, se entresacan éstos brotes cuando están algo desarrollados (mayores de 10 cm de longitud procurando dejar los más vigorosos y mejor distribuidos alrededor del tronco; una vez que los mismos comienzan a lignificarse en la porción mas baja, se cubren con una mezcla de tierra y materia orgánica bien descompuesta para favorecer la formación de raíces en la base de los mismos. Entre 2-3 meses ya deben haber enraizado, los cuales deben cortarse o desprenderse del tronco con todo el sistema radical formado se cortan a la altura entre 30-40 cm suprimiendo las ramas que hayan podido formarse y dejar solamente un tercio de la longitud de las hojas en aquellos casos donde exista, se trasplantan a envases o bolsas adecuadamente, se riegan y se tratan como una planta de semillero trasplantada a vivero.
Entre 3-4 meses se ha desarrollado una planta que
puede utilizarse en plantación.
Estacas de ramas herbáceas o esquejes
Consiste en el enraizamiento de ramas herbáceas o
esquejes con uno o dos pares de hojas situadas en un lecho de enraizamiento compuesto con graba (piedra gruesa), grabilla de ½”-3/4” y zeolita con un altura de 10-15 cm de espesor en cada uno de ellos para favorecer un buen drenaje y evitar que la zeolita se contamine con humus de lombriz sacado por estas a la superficie; situado debajo de una malla plástica para disminuir entre 50-70% de luminosidad y un sistema de riego automatizado en forma de neblina de 20-30 segundos cada 5-7 minutos durante el día y parte de la noche según las condiciones climáticas presentadas. Los esquejes deben ser tratados o sumergidos en su parte basal en una solución de 2.5 a 3 mg/l de ácido indolbutírico IBA o 5 mg/l de indolacético durante 5- 10 minutos o puestos en contactos con una sustancia en forma de polvo de un complejo hormonal a base de ácido indolbutírico los cuales reciben diferentes nombre comerciales SEM, BIODIM-2, ROOTHONE F, etc.
Pueden colocarse de 80-120 esquejes/m 2;
procurando que no queden demasiado juntos, lo cual favorece el exceso de humedad y pudrición de los esquejes, al cabo del mes aproximadamente debe comenzar su enraizamiento, los cuales se trasplantan a bolsas de 24 x 12 cm o similares con un sustrato a partes iguales de tierra, turba ó humus, aserrín no resinoso, zeolita u otro material adecuado manteniendo éstas durante 10-12 bajo las mismas condiciones que enraízo. Posteriormente se trasladan a otro lugar con un 25-35% de luz y una frecuencia de riego mas espaciada, deben permanecer entre 1-2 meses bajo estas condiciones para que broten y finalmente se trasladen a pleno sol de 1-2 meses con una frecuencia de riego de 3 a 4 veces por día con una duración de 3-5 minutos según las condiciones climáticas.
Los esquejes deben convertirse en pequeñas plantas
y estar listos para ser plantados en el campo entre 4-6 meses.
Durante la fase de enraizamiento y a pleno sol los
esquejes deben ser asperjados con un insecticida, fungicida y nitrato de K a 10g/lts de agua, según el tipo de plaga o enfermedad que se presente y favorecer el desarrollo de las planticas. Estacas de ramas lignificadas
Las estacas de madera dura sin cortarle el follaje y
tratadas con hormonas de enraizamiento pueden ser enraizadas con relativo buen éxito bajo un sistema artificial de riego (nebulización) para producir una humedad continua sobre su follaje en un sustrato suelto a base de zeolita de 0-3 mm o una mezcla de humus, aserrín no resinoso, cachaza u otra materia orgánica bien descompuesta y tierra, todos ellos en iguales proporciones. Cuando las estacas enraizadas sean trasplantadas a envases es necesario mantenerlas por un tiempo bajo el sistema de riego por nebulización e ir disminuyendo a través de los días la frecuencia de esto e ir aumentando el volumen de agua a entregar.
Acodos o margullos aéreos y/o en tierra
Es un método fácil de propagación vegetativa del
guayabo y es relativamente simple. Las ramas que se elijan deben tener un centímetro o más de diámetro, realizándose a unos 20 centímetros de su base o bipurcación dos incisiones separadas unos 2- 3 centímetros ó más eliminándose posteriormente la corteza que media entre los dos cortes; esta zona desprovista de corteza se cubre con una capa de algún material absorbente como musgo, algodón, estopa, aserrín podrido de madera, tripa de palma descompuesta o la raíz ‘musgosa’ limpia y seca de una planta acuática llamada malangueta del género Eichornia que se desarrolla en lagunas, ríos y presas. Esta capa o superficie debe tener 5 ó 6 centímetros de diámetro y aproximadamente el doble en longitud, la cual previamente se humedece con agua que no quede plenamente saturado y se cubre el corte con la misma; en esta zona si se le añade en forma líquida o en polvo cualquier sustancia que contenga ácido indolbutírico (IBA) o naftalín acético (ANA) favorecerá mas rápidamente el enraizamiento del acodo. Para terminar se cubre el sustrato de enraizamiento con una banda de nylon trasparente de 12 ó 15 centímetros de ancho y 30 centímetros de largo según el tamaño de la incisión y el sustrato utilizado, se amarra con un cordel de nylon o alambre fino de manera que quede totalmente cubierto y no permita la entrada de agua y el escape de la humedad, la cual debe mantenerse hasta la total separación del acodo después de su enraizamiento (no es necesario regarlos), lo cual será entre 45-75 días aproximadamente. Se conoce ese momento cuando a través de la cubierta del acodo o nylon se observa que las raíces blanquecinas se tornan a un color crema oscuro.
Cuando los acodos se retiran de la planta; se
elimina parte del sistema foliar y se colocan sin cubierta plástica en envases y se manipulan como cualquier planta de vivero; en los primeros meses deben colocarse bajo sombra. En la guayaba el acodo en tierra o de raíz se ejecuta poniendo al descubierto una o más raíces de la planta que se desea propagar dándole un ligero corte, para estimular la formación de yemas adventicias y favorecer que estos broten, para posteriormente separarlas y manipularlas como cualquier planta trasplantada del semillero al vivero.
Se plantea que las plantas propagadas por acodos
estarán mal dotadas de raíces, ya que éstas serán de desarrollo localizadas en la superficie y en número notablemente reducido; deben plantarse algo profunda para contrarrestar en parte este inconveniente. Algunos autores plantean que al cabo de los dos primeros años desaparece esta desventaja.
Cuando los acodos se realizan sobre variedades de
porte pequeño, la disminución de la altura y las altas densidades reducen estos efectos.`