Está en la página 1de 1

La realidad de la vida humana, en este mundo globalizado, tiende a tener profundos cambios

que buscan el bienestar de la sociedad, pero al mismo tiempo acelera su destrucción. Las
revoluciones tecnológicas y científicas buscan facilitar la vida humana elevando la calidad
de vida priorizando la educación técnica. El desarrollo de la sociedad y de toda la humanidad
se debe a la lógica de medios y fines que está vinculado al sistema neoliberal. En este mundo
precipitado ¿qué sentido tiene estudiar filosofía? O ¿Qué rol tiene la filosofía en la
educación? La ciencia y la tecnología con todos sus avances ¿no anuncian la muerte de la
filosofía?
Para solucionar este problema es necesario considerar a la filosofía como un eje transversal
que pase por cada una de las carreras que se imparten en la universidad, ya que a partir de
ella se puede generar mejores y mayores cambios en las mallas curriculares. Dando lugar al
aumento de producción intelectual en cuanto a documentación, libros investigaciones y
proyectos que enriquezcan lo teórico y práctico fomentando y formando profesionales mejor
capacitados.
Otra medida consiste en la difusión por cualquier medio, radio televisión o prensa escrita,
que estudiar filosofía, en la escuela como en la universidad, tiene sus ventajas porque expresa
un beneficio para la vida, no sólo es aprender de memoria frases célebres o biografías de
personajes de la historia de la filosofía; la filosofía busca despertar un espíritu crítico frente
a la realidad.

Finalmente, la filosofía puede ayudar a buscar las alternativas a la crisis ambiental. El sistema
del mercado capitalista neoliberal tiene una forma de explotar los recursos naturales; para
conseguir su objetivo el sistema neoliberal necesita justificar su acción por medio de la idea
de progreso a través de esta idea se ofrece al mundo que la destrucción de la misma es
necesaria para alcanzar la calidad de vida óptima. Frente a esta ideología de la muerte la
filosofía puede cristalizar el discurso irracional del sistema neoliberal, una de sus propuestas
es: cuestionar la lógica instrumental del mercado, priorizar la vida de los sujetos que son
excluidos por medio de la idea de desarrollo, proponer la vida humana no como un fin en sí
mismo sino como un proyecto.
Para terminar frente a la crisis civilizatoria que pasa nuestra sociedad, nuestro mundo la
filosofía tiene todavía algo que decirnos: que no está muerta.

También podría gustarte