Michel Bernard
EL CUERPO
Un fenémeno ambivalente
PAIDOS Técnicas y Lenguajes CorporalesCapitulo 1V
EL ENFOQUE PSICOBIOLOGICO DEL CUERPO.
LA GENESIS DE LA CONCIENCIA DEL PROPIO CUERPO
El principal representante de esta tendencia es, sin duda alguna,
Henri Wallon, que supo mostrar el papel esencial de la motricidad
y-de fa funcion postural dei cuerpo en la evolucién psicologica del
nfo, En efecto, Wallon se propuso demostrar cémo el nifo llega
poco a poco a adquirir conciencia de su cuerpo como realidad una
y dindmica, dstinta de los objetos y do los demis sores vivos, humans
no humanos.
Los comienzos de la conclencia del cuerpo
Como se sabe, ef recién nacido no distingue su propio cuerpo det
mundo exterior: a os diez meses, un nto, que es capar de mostrar
lance se halla un objeto puesto en su mano, en st pie 1 en st cabera
(las partes méviles del organismo), confunde en cambio ese abjeto
Consigo mismo si se lo coloca sointe el pecho, Igualmente a tos dies
meses, una nina, que se golpea conta Ta pated, seiala a patel ei
{ar de mostrar la parte del cuerpo en que se ha lastimado, "Los dos cm
508 parecen inversos, pero arnbos derivan de la misma incerticummbye
En el primer caso, cl cucrpo absorbe algo que no pudo distinguirse
atin claramente, obedeciendo a una especie de solipsismo elemental
de la sensibilidad. En el segundo caso, eb gone pane de relieve ct
49agente exterior, y éste escamotes para su bencticio la sensibilidad
del sujeto”. *
Eca sensibilidad es, en efecto, bastante rudimentariay se desarrolla
paca a pacn; el nifin, hasta el cexto mes, va desenbrienda los movi
mientos de sus manos, pies y dedos con cierta sorpresa y los percibe
‘como objetos ajenos a él, Asimismo durante ese periodo y hasta des
puss de! afo, el nifio experimenta un vivo interés en palparse el cuer
po; primero se Hleva las manos a la boca, luego al pecho y por fin 2
Jos musios. Se lo ve también tirarse vigorosamente de una oreja que
toc6 por azar o marder objetas duros o morderse bruscamente un ”
brazo y lanzar un grito de dolor. Alrededor de la misma edad, diga-
mos al decimocuarto mes, ef nifio, a quien se le pide que dé su pie,
lo toma con las dos manos para tenderlo del mismo modo que ha he:
ccho antes con un zapatito. Esta insistencia del nifio en querer separar
su pie del cuerpo indica una falta de cohesién entre las impresiones
ue tiene y la sensacién més o menos confusa de su propia actividad.
Esto indicaria que el nifio no puede integrar las partes de su cuerpo,
las que, por lo demas, estin individualizadas y hasta personificadas,
“AL afio y once meses, elnino de Preyer? ofrece muchas veces st
bizcocho a su propio pie, como si se lo ofteciera a sus padres, y se
divierte esperancio a-que los dedos de los pies lo tomen""
Segiin Wallon, este animismo ingenuo se explica por un hecho ex:
{tafo pero muy significativo, a juicio del autor: el nifo al principio
identifica mejor los érganos y las formas corporales en otras personas
ue en I mismo. Por ejemplo, un nie de alrededor de un afo que in:
tenta mamar localiza exactamente en otras personas el lugar de los
senos de la madre, En cambio, alrededor de la misma edad llama
1H, Wallon, “Kineshésie ot image vauelle du corns propre" en Enfonee, 3,
mayoroctubre de 1955, pig, 258
Un eélebre psicdogo alemn de fines det siglo XIX, cuya obra principal es
ame de Fenton, taducida y publicaéa por Alcan en 1887
3H Wallon, Les ovigines du covoctére che> enfant, P.ULF., euartaediciin,
1970, pig. 216
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“euitas”, como los senos de su madre, alas dos puntas rojas que ve en
el codo del padre. Pareceria, pues, que del complejo global, que hasta
‘entonces fe hacia buscar exclusivamente a Ia madre, el nifio hublera
aislado impresionss particulares de lugar y de forma que pueden trans
feriese a cualquier otra persona, Son imégenes que flotan, pues, in
dlistintamente sobre las cosas y que siempre estén dispuestas a asi
rmilarse fo que tiene con ellas alguna analogia, siquiera remota, aunque
nunca pueden cobrar verdadera realidad.
De manera que el niio esté previamente abierto a las cosas, circuns
tancia que revela ante todo su fundamental dependencia respecto de
las personas que lo rodean. Wallon nunca dejé de insistir en el carde
ter esencialmente social del nifio y sit el origen de ese eardcter en
ol periado prenatal, en et periodo intrauterino, en el cual el feto esta
sujeto a esa simbiosis fisioldgica con 1 cuerpo materno, cuya sangre:
le aporta. et oxigeno, las hormonas y los alimentos necesarios para
su desarrollo somitico. hora bien, como se sabe, esta simbiosis ai
mentaria se prolonga mas alld del nacimiento, aunque en una forma re-
lativamente menos rigurosa, puesto auc el recién nacido continia de
pendiendo estrechamente de su madre en lo tocante a la alimentacién,
a Ia satisfaccién de sus necesidades orginicas y a la satisfaccion de
las exigenclas de una sensibilidad que es 1a més visible y, para él, la
‘mis imperiosa: su sensibilidad postural es decir, la necesidad que sien
te el nilio. de que se lo mueva y de que se lo camibie de posicién, E1
nio tiene, en efecto, la necesidad de que se Io alce, de que se lo act
rie, de que se lo calme haciéndole tomar actitudes favorables gue pue
ddan permitirle relajarse y entregarse al sueilo, Como no es capaz de ha
cer nada por si mismo, otras personas lo manipulan yen los movi
imientos de esas personas cobrarin forma las primeras actitudes del
niifio, De manera que sus primeros gestos provocados por sensacio-
nes de bienestar, de malestar o de necesidad se adaptarin y, en cierta
medida, se cofirin a las reacciones benéficas o maléficas, agradables
‘0 dosagradables de su mundo circundante. Y esta asociacién
oble efecto: por una parte, permite al nifo reconocer, identificar y,
por lo tanto, prever los actos de los demas en la medida en que ellos
son favorables o contrarios a los suyos propis, Se establece asi un
ST