PROBLEMA: EL ACOSO SEXUAL EN ESPACIOS PÚBLICOS HACIA LAS
MUJERES
TEMA: ¿CUAL ES LA CAUSA POR LA QUE SE DA EL ACOSO SEXUAL EN
ESPACIOS PÚBLCOS HACIA LAS MUJERES? INTRODUCCIÓN: El acoso sexual en espacios públicos o acoso callejero es una manifestación de acoso sexual y de violencia de género, que incluye tanto conductas verbales como no verbales, realizadas generalmente por los hombres en lugares públicos, quienes invaden el espacio físico y psicológico de una mujer desconocida en la mayoría de los casos, como también en mujeres conocidas pero este caso en menor jerarquía de una forma irrespetuosa, atemorizante e insultante. Este acoso se expresa mediante miradas lascivas, miradas de reojo o miradas directas, la víctima es objeto de piropos, silbidos, bocinazos, recibir “besos volados” gestos obscenos, comentarios sexistas y comentarios sexuales explícitos del cuerpo, tocamientos o manoseos, masturbación, experimentan bloqueo intencional del camino, ser “seguida” por un desconocido y demás acciones por parte de los hombres hacia el sexo femenino, claro está que estos actos son rechazados por la mujer. Es más, esto afecta de alguna manera su dignidad, sus derechos fundamentales como la libertad, integridad y el libre tránsito; originando en las mujeres el sentimiento de humillación o estado de hostilidad en lugares públicos. Este problema por mucho tiempo ha sido minimizado por la sociedad peruana, pero actualmente el acoso sexual hacia las mujeres se ha proliferado ferozmente, es “pan de cada día” que una mujer sufra acoso en cualquier lugar público, el género femenino constantemente está expuesto a esto y parece un problema de nunca acabar. Por otro lado, la gran mayoría de los hombres argumenta que este problema es causado por las mismas mujeres, ya sea por la forma en que se visten o su modo de caminar, en otras palabras, la misma victima tiene la culpa. Asimismo, piensan que los piropos no son parte del acoso, ya que, es de alguna manera una forma de halagarlas o elogiarlas, pero para que esto sea cierto, los piropos deben ser aceptados o consentidos por la mujer, si no es así pues claro está que es una forma de acoso callejero. Es necesario abarcar, que el sexo femenino se encuentra desprotegido, esto porque las autoridades no toman la debida importancia y en muchos casos no aceptan las denuncias, ya que para estos los casos son banales o intrascendentes. Claramente se observa que en pleno siglo XXI, está presente el machismo; que el hombre piense todavía que es superior a la mujer en todos los aspectos y por ello tenga la facultad de disponer como se le pegue la gana de ella, que a la mujer se le minimice, que su vida o su integridad no se tome en cuenta, que manosearlas o en el peor de los casos abusar sexualmente de ellas no tenga la debida importancia, ya que es una mujer. Añadir también que por el mismo hecho de que en el Perú se encuentra latente el machismo; en muchos casos la mujer también culpa a la víctima, argumentando que ella misma busca ser acosada. Nuestro objetivo con esta investigación es analizar las causas, del por qué se da el acoso sexual en lugares públicos, del por qué a través de los años nuestra cultura ha ido avanzando, pero negativamente. Las situaciones de acoso suelen realizarse con mayor frecuencia en las calles urbanas peruanas, esta interacción se lleva a cabo cara a cara y se ejecuta en un ambiente público, tales como la calle, la vereda, los transportes públicos(taxis , buses, estación del tren, etc.), instituciones educativas(universidades, colegios, institutos, academias), cerca de construcciones en proyección, seguidos por teatros, hoteles, restaurantes, ascensores, centros comerciales, eventos recreacionales, bares y otras locaciones en un porcentaje menor. Cabe resaltar que la mayoría de los hombres prefiere realizar acoso callejero o “halagar” a una mujer, cuando esta se encuentra sola caminando por las calles, pues, la encuentra indefensa, desprotegida y vulnerable. Así mismo, se encuentra una relación significativa entre la edad, el estado civil y la frecuencia del acoso sexual callejero puesto que con mayor frecuencia hay acoso callejero hacia las adolescentes y las jóvenes de entre 14-29 años, esto varia, ya que, algunas mujeres menores de 14 años también lo sufren como mujeres mayores de 29, debido que, para que una mujer sufra de acoso sexual no hay una edad en específico, pues si un hombre ve a una mujer bonita o “de buen cuerpo” sola en la calle, este se siente con la facultad de hacer uso de su hombría acosándola, acotando también que el espacio geográfico también es un punto importante. Aquellas mujeres que viven en zonas metropolitanas sufren mayor acoso sexual que las que viven en lugares más pequeños. ANGIE HUALLANCA TORRES