El concepto de Neurodesarrollo para la evaluación y tratamiento de las
alteraciones del control motor de origen central, debe su nombre a sus creadores, el Dr. Karel Bobath y su esposa Berta Bobath. Resulta importante reconocer previamente cuales son los aportes realizados por los Bobath que aún tienen especial vigencia, aparte de la idea original cual es la modificación de la ejecución de destrezas motoras por medio de los cambios de las aferencias sensoriales entregadas a través del manejo físico directo con gradual incremento de la responsabilidad del paciente sobre su propio cuerpo.
Son 10 los conceptos de los Bobath, que aún tiene especial vigencia:
1.- El problema primario de los pacientes con Parálisis Cerebral o
Accidente Vascular es la incoordinación de los patrones de postura y movimiento. Se refiere a las características derivadas directa o indirectamente de neuropatología del daño orgánico a lo que se suman las características individuales tanto genéticas como del ambiente, las experiencias previas y el estadio del desarrollo al momento de la lesión.
2.- Los impedimentos sistémicos pueden ser modificados, incrementando
el nivel de función, cuando los problemas de coordinación motora son tratados en un contexto de orientación a tareas específicas. La gradiente desde los impedimentos primarios de coordinación hasta los impedimentos secundarios que afectan estructuralmente al cuerpo, se ve favorecida por la repetición de las compensaciones especialmente de manera funcional. El uso de estrategias orientadas a tareas específicas y significativas es una herramienta vigente del Neurodesarrollo.
3.- Los impedimentos sensoriomotrices afectan a la persona en su
totalidad, en su funcionalidad, independencia, familia, comunidad y calidad de vida. Se refiere no solo al claro compromiso funcional y de participación sino a la autoimagen y de que modo afecta su rol social.
4.- Las variaciones del desarrollo motor a través de la vida entrega un
marco de referencia tanto para realizar la evaluación como para planificar la intervención sobre los problemas del paciente. Desde la perspectiva del Neurodesarrollo se reconoce la existencia de patrones generales en el tiempo y en la adquisición de las habilidades en el proceso de desarrollo y maduración, como también el deterioro y pérdida de algunas de ellas en el envejecimiento. El sólido conocimiento de estos procesos es un referente importante para identificar y favorecer la adquisición de las funciones apropiadas para la edad, como también para reconocer las desviaciones de la normalidad.
5.- Los terapistas de Neurodesarrollo se enfocan en el cambio de las
estrategias de movimiento como una forma de conseguir la mayor eficiencia del individuo en tareas apropiadas para la edad y también en preparación para otras futuras. La terapia se enfoca en la calidad del movimiento con especial énfasis en la alineación corporal durante las secuencias de movimiento. El movimiento normal es entendido como la capacidad de llevar a cabo diversas conductas motoras en forma conjunta y en condiciones diversas. El Neurodesarrollo se enfoca por lo tanto en la práctica variada de una misma tarea.
6.- Los movimientos se unen al procesamiento sensorial de dos maneras.
Desde sus inicios los Bobath identificaron la información sensorial como un componente importante para modificar las respuestas motoras. Le otorgaron al movimiento la calidad de estímulo sensorial capaz de activar receptores en un modelo de retroalimentación. La retroalimentación obtenida de los músculos, movimientos y ambiente también contribuye a la detección de errores, corrigiendo al movimiento en su ejecución. Además el Neurodesarrollo incluye el concepto de anticipación o control anticipatorio en el cual movimientos complejos y reacciones requieren de este control en preparación para las necesidades de control postural y de movimiento de la tarea previo a su ejecución. Normalmente estos son procesos conjuntos y los terapistas de Neurodesarrollo facilitan a través de la mejor alineación y estructuración de la tarea para favorecer la experiencia de ligar la postura con el resultado obtenido en una tarea específica.
7.- Las estrategias de intervención involucran el inicio activo y
participación por parte del individuo, generalmente guiada por el manejo físico directo del terapista. El terapista usa manejo directo sobre el paciente para facilitar la alineación postural y las sinergias motoras que permitan al individuo seleccionar y conseguir resultados motores exitosos. El manejo físico provee de límites e inhibe y controla los movimientos que interfieren con la acción, y que ocasionan impedimentos secundarios.
8.- Desde la perspectiva de Neurodesarrollo se utiliza el análisis del
movimiento para identificar los componentes que unen las limitaciones de la funcionalidad con los impedimentos sistémicos. Los clínicos identifican los componentes de movimiento del sistema musculoesquelético, observando el movimiento en los diferentes planos.
Además identifica los componentes biomecánicos del movimiento (base de
apoyo, centro de gravedad y alineación, transferencia de peso y rangos de movimiento dentro de una secuencia funcional. Los clínicos combinan esta información con los componentes neurológicos más la contribución de otros sistemas y el ambiente.
9.- La evaluación tiene lugar en cada sesión de tratamiento.
Este es un elemento muy importante dentro del concepto ideado por los Bobath. Las estrategias de tratamiento y las respuestas del paciente en las diferentes actividades propuestas permiten la identificación de aquellas más ventajosas en relación al éxito obtenido por el paciente, relacionándolo además con las metas propuestas para cada sesión.
10.- El propósito del Neurodesarrollo es optimizar la función.
Los mejores resultados se obtienen cuando la intervención ocurre en los períodos de recuperación y desarrollo, previo al establecimiento de compensaciones y patrones alterados de postura y movimiento. Asimismo se acepta que la plasticidad y reorganización neural pueden ocurrir a través de toda la vida y en cualquier período de esta.
El modelo actual de Neurodesarrollo agrega otros conceptos que se han
derivado de los mejores estándares entregados por la práctica clínica, incorporándose en forma reciente al modelo de Neurodesarrollo.
1.- El Neurodesarrollo acepta que la conducta motora humana emerge de
la interacción de múltiples sistemas internos del individuo, las características de la tarea y el contexto ambiental específico. Esta es la aceptación de la teoría dinámica de sistemas de control motor y de aspectos ecológicos que entregan a la persona y al ambiente un grado de responsabilidad enorme en paralelo con las alteraciones derivadas de una condición o lesión en particular.
2.- El movimiento se organiza alrededor de metas conductuales.
Los aspectos motivacionales son relevantes y nos llevan a desarrollar estrategias acordes a la individualidad de cada paciente. Los rendimientos y aprendizajes dependen de la adhesión a estrategias que nos favorezcan en la exploración y logros propios del nivel de participación del individuo.
3.- Todos los individuos tienen competencias y fortalezas en varios
sistemas. El análisis sobre fortalezas y debilidades, nos entrega información sobre el modo en que el paciente puede lograr el mejor rendimiento. Un sistema musculoesquelético indemne nos abre las puertas a maniobras de facilitación diversas y desafiantes. Un sistema cognitivo normal nos permite un grado de conexión y motivación para realizar y aceptar desafíos.
4.- El sello de de la función motora eficiente es la capacidad del individuo
para seleccionar varios mapas neuronales con un número potencialmente infinito de combinaciones de movimiento que son graduados por la fuerza de gravedad, la fuerza generada por la contracción muscular y las características ambientales. La VARIABILIDAD como concepto a incluir en la evaluación y tratamiento es la expresión de la capacidad de nuestros sistemas de anticiparse y adaptarse a múltiples exigencias en pos de un logro de participación. Los terapistas de Neurodesarrollo deben ser capaces de ofrecer alternativas y escenarios de funciones y tareas para desarrollar estas capacidades.
5.- El Neurodesarrollo utiliza el modelo de funcionalidad y discapacidad
basado en la Clasificación de la Función del año 2001 desarrollado por la OMS, para categorizar la salud y discapacidad del individuo.
6.- Los clínicos diseñan la intervención estableciendo resultados
funcionales en acuerdo con el paciente, familia y cuidadores. Acorde a la edad del paciente es que progresivamente se debe tomar en cuenta su motivación sobre determinadas tareas. Inicialmente es la familia la que puede comunicar los aspectos problemáticos en el desarrollo. El terapista debe saber escuchar y tomar en cuenta estos aspectos. Puede ocurrir que los objetivos planteados por el terapista, la familia y el propio paciente no tengan relación. No debemos olvidar que la motivación hará posible la adhesión por el tratamiento. El abandono de las terapias se relaciona con conflictos en este punto.
7.- Los programas de intervención son diseñados para servir al paciente a
través de toda su vida. Los problemas de participación de los pacientes son dinámicos en cuanto a que la expresión de la condición o lesión original impacta de manera diversa y evoluciona en torno a las variables ambientales y a la práctica de patrones funcionales para el paciente. El proceso de envejecimiento alcanza a la población con alteraciones neuromotoras, reduciendo la movilidad e incrementando el compromiso funcional de los pacientes. El reconocimiento de estos hechos se enlaza con el dinamismo y adecuación del Neurodesarrollo a las necesidades e individualidad del paciente.
8.- El aprendizaje o reaprendizaje de habilidades motoras y las mejoras en
su ejecución requieren tanto de práctica como de experiencia. El aprendizaje motor ligado a la motivación requiere de la repetición como de la variabilidad a modo de impactar positivamente en la internalización de los aprendizajes. En este sentido el manejo adecuado por parte del terapista de la frustración y el éxito son elementos que favorecen la perseverancia y éxito final del paciente.
9.- El tratamiento es más efectivo durante la recuperación o en las fases
de transición. La plasticidad cerebral tiene lugar posterior a los eventos que ocasionan el daño orgánico. Es importante que la adaptación de los sistemas a las nuevas percepciones que ocasiona este evento no genere el uso de estrategias limitantes de la funcionalidad y participación. En el paciente pediátrico esto se enlaza con la llamada detección precoz de las alteraciones del desarrollo y en el adulto con una atención oportuna para desalentar la generación de impedimentos primarios y secundarios.
10.- Los Clínicos de Neurodesarrollo asumen la responsabilidad de
entregar al paciente la evidencia disponible acerca de los métodos de intervención, resultados y servicios de atención disponibles. El Neurodesarrollo cuenta en la actualidad con una sólida base teórica que está acorde al conocimiento actual. La oferta de terapias milagrosas o crípticas en su explicación motiva a los terapistas a estar al día en le conocimiento tanto de neurociencias como de enfoques nuevos para evaluar y tratar. El terapista de Neurodesarrollo es además un interconsultor acerca de técnicas de apoyo a la terapia que en el caso de algunas, cuentan con justificación suficiente para complementar los tratamientos y técnicas propios del Neurodesarrollo.