Está en la página 1de 43
Capiruro IIT NATURALEZA Y FUNCION DE LA FANTASIA SUSAN ISAACS I. Métodos de estudio a) Métodos de observacién. b) El método del psicoandlisis; situacién transjerencial; la vida mental antes de los dos aitos, I. Naturaleze y funcién de la fantasfa Usos comunes del término “Fantasia”; la fantasia como contenido primario de fos procesos mentales inconscientes; alucinacién e introyeccién primaria; dificultades en el desarrollo temprano que surgen de la fantasia; fantasias y palabras; jantasias ¥, experiencia sensorial; la relacién de la fantasia temprana con los procesos prima- rios; instinto, fantasia y mecanismo; fantastas, imdgenes mnémicas y realidad, INTRODUCCION Una Revist6n de las contribuciones a la teorfa psicoanalitica mostraria que el término “fantasia” fue usado en diversos sentidos en las distintas épocas y por los diferentes autores. Su aplicacién comin se ha ampliado consi- derablemente respecto a sus primeras acepciones, Hasta hoy dicha ampliacién ha permanecido implicita en gran parte, Ya es hora de considerar mas explicitamente el significado y la definicién de Ja palabra (Ver Nota N? 1, p. 110). Cuando el significado de un término téenico se amplia de esta manera, deliberada o insensiblemente, suelen exigirlo fundadamente los hechos y las formulaciones teéricas!, Es necesario observar mas intimamente las + En una contribucién a la British Peycho-Analytic Society en 1943, el doctor Emest_ Jones comentaba respecto a esta extensién del significado de Ia palabra fante. sia: “Recuerdo wna situacién similar existente hace algunos afios acerea’ de 1a palabra sexualidad. Los eriticos se quejaban de que Freud cambiaba el significado de esta palabra y el mismo Frend estuvo de acuerdo en dos ocasiones; pero yo siempre Protesté que no hab{a modificado a significaciin de la palabra, sino ampliado el concepto, dndole un mayor contenido para hacerlo més comprensivo, Este proceso 70 DESARROLLOS EN PSICOANALISIS relaciones entre los hechos y aclarar nuestros pensamientos sobre las mis- mas. Dedicamos este capitulo principalmente a la definicién del término “fantasia”; es decir a la descripcién de las series de hechos que el uso del término nos ayuda a identificar, a organizar y a relacionar con otras series significativas de hechos. La mayor parte de lo que sigue consistira en el estudio més cuidadoso de las relaciones entre diferentes procesos mentales. Con el progreso de la labor psicoanalitica, en particular del andlisis de nifios pequefios, y el desarrollo de nuestro conocimiento de las elapas tem- pranas de Ja vida mental, las relaciones que percibimos entre los primeros procesos mentales y los ulteriores tipos de funcionamiento mental mas espe- cializados cominmente denominados “fantasias”, condujeron a muchos de nosotros a ampliar la connotacién de este término en el sentido que expon- dremos. (En muchos de los escritos del mismo Freud, incluso en una dis- cusién sobre la fantasia inconsciente, se manifiesta ya la tendencia a am- pliar el significado del término.) En necesario demostrar que algunos fenémenos mentales descritos por diversos autores, en general independientemente del término “fantasia”, implican en realidad la actividad de fantasias inconscientes. Vinculando estos fenémenos con las fantasias inconscientes a las que estan ligados, se comprenden mejor sus verdaderas relaciones con otros procesos mentales y se aprecian su funcién y gran importancia en la vida mental. No nos proponemos presentar en este capitulo ningin contenido par- ticular de la fantasia, sino considerar la naturaleza y funcién de la misma como un todo y su papel en Ia vida mental. Con fines ilustrativos usaremos ejemplos reales de fantasias, pero no pretendemos que agoten el tema ni que se hayan elegido sistematicamente. Es verdad que las evidencias mis- mas que establecen la existencia de fantasias desde las edades més tempra- nas, nos proporcionan ciertos indicios sobre su cardcter especifico; pero aceptar las pruebas generales de la actividad de la fantasia desde el naci- miento, y su papel en la vida mental considerada en su totalidad, no sig. nifica admitir automéaticamente ningin contenido de fantasias particular para una edad determinada. En capitulos posteriores consideraremos con cierta extensién la relacién del contenido con la edad. Este capitulo busca allanar el camino, mediante consideraciones generales, Comprender Ia naturaleza y funcién de la fantasia en la vida mental implica estudiar las primeras fases del desarrollo mental, es decir, las co- rrespondientes a los tres primeros afios, A veces se ha expresado cierto escepticismo acerca de la posibilidad de conocer la vida psiquica de los primeros afios, aparte de la observacién del transcurso y desarrollo de la conducta. En realidad estamos lejos de necesitar apoyarnos en hipdtesis infundadas o simples conjeturas, aim respecto al primer afio de vida. Cuando consideramos todas las observaciones sobre la conducta a la luz parece inevitable en Ia investigacién psicoanalitica, ya que numerosas concepciones. como por ejemplo la de la conciencia, usadas previamente sélo en su sentido cons. ciente, debieron ser ampliadas cuando se le agregé su significado inconsciente”. NATURALEZA Y FUNCION DE LA FANTASIA 7m del conocimiento analitico obtenido del estudio de adultos y de nifios de més de dos afios, relaciondndolas con principios analiticos, llegamos a nu- merosas hipétesis que implican un alto grado de probabilidad y alguna certidumbre respecto a los primeros procesos mentales, Nuestras concepciones sobre la fantasia en esos primeros afios se ba- san casi totalmente en inferencias, pero lo mismo sucede respecto a cual- quier edad. Las fantasias inconscientes son siempre inferidas nunca obser- vadas como tales; en realidad toda la técnica psicoanalitica se basa amplia- mente en inferencias, Como se ha sefialado con frecuencia, el paciente adulto tampoco nos refiere directamente sus fantasias inconscientes, ni sus resistencias preconscientes. A menudo observamos muy directamente emo- ciones y actitudes que el mismo paciente ignora; éstos y muchos otros datos de observacién (como los mencionados en las pags. 98-102) nos per- miten y obligan a inferir la actividad de tales o cuales resistencias o fan- tasias. Esto es verdad tanto en los nifios pequefios como en los adultos. Hasta ahora los datos a considerar pertenecen a tres categorias prin- cipales y las conclusiones que plantearemos estén basadas en la convergencia de estas Iineas de evidencia. a) Consideraciones sobre las relaciones entre ciertos hechos y teorias establecidos, muchos de los cuales, hechos y teorias, aunque familiares al pensamiento psicoanalitico, fueron estudiados hasta ahora de manera rela- tivamente aislada. Cuando se las examina con detenimiento, estas relaciones exigen los postulados que expresaremos més adelante, y gracias a estos postulados se logra una mejor integracién y una comprension més adecua- ‘da de las mismas. b) Pruebas clinicas obtenidas por los analistas en el anélisis de adul- tos y nifios de todas las edades. ¢) Datos de observacién (observaciones no analiticas y estudios ex: perimentales) de bebés y nifios pequefios obtenidos por los distintos medios a disposicién de la ciencia del desarrollo infantil. I. METODOS DE ESTUDIO a) METODOs DE OBSERVACION Antes de considerar nuestra tesis principal ser util revisar breve- mente algunos principios metodolégicos fundamentales que nos proporcio- nan el material para las conclusiones sobre la naturaleza y funcién de la fantasia y que estén ejemplificados en los estudios clinicos (psicoanali- ticos) y en muchas de las investigaciones recientes mas fructiferas sobre el desarrollo de la conducta. En los iiltimos afios se elaboraron distintas técnicas para el estudio de aspectos particulares del desarrollo infantil. Es notable que las obser- vaciones sobre el desarrollo de la personalidad y de las relaciones sociales, especialmente las encaminadas a comprender las motivaciones y procesos

También podría gustarte