Atrévete y realiza un examen auditivo de rutina, una otoscopia ve
el estado de tu conducto auditivo externo y oído medio, para saber si este tiene acumulación de cerumen que con el tiempo se convierte en tapón que disminuye tu capacidad auditiva de cada oído. La extracción se realiza mediante una jeringa con agua a cierta temperatura para no generar mareos, este procedimiento debe ser realizado por profesionales con conocimientos de la técnica, debido que puede generar una perforación de la membrana timpánica por la presión y dirección del agua.