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Unbaileimperfecto

IvánHernández
–ColecciónBuscoaliados–
www.coleccionbuscoaliados.com
«Unbaileimperfecto»
Ediciónrevisada:Enero2013
©2012­2013Textoydiseñodeportada:IvánHernández.
©Fotografíadeportada:IKO­Fotolia.com.
Todoslosderechosreservados.Prohibidal a reproduccióntotaloparcial
deestelibrosinelconsentimientodelautor.Estelibroseencuentra
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Índice:
Prólogo
Capítulo1
Capítulo2
Capítulo3
Capítulo4
Capítulo5
Capítulo6
Capítulo7
Capítulo8
Capítulo9
Capítulo10
Capítulo11
Capítulo12
Capítulo13
Capítulo14
Capítulo15
Capítulo16
Capítulo17
Capítulo18
Capítulo19
Capítulo20
Capítulo21
Capítulo22
Capítulo23
Capítulo24
Capítulo25
Capítulo26
Capítulo27
Capítulo28
Epílogo
Dedicadoalosbuscadoresdesueños,
alosnarradores de sueños,
alossueñosengeneral,
yalosincumplidosenparticular.
Prólogo
Mujeresaparcadasenlasesquinas,conundueñoquecambiacadanoche,
cadahora,cadatreinta lágrimasdepapel.
tetas—Mirad,a
. l í estála vieja—susurróunadeel as, recolocándoselas
—¡Eh,Lullaby!—exclamóotraalolejos—.¿Encuentrasalgohoy?
Laanciananoatendióasusrisas, perosíatodolodemás.
Capítulo1
Unodeellosparecíasegurodes
Grassner. í mismo.ElotrosellamabaJohn
—Viveenesebloque.Pisocuartoderecha.
—Vale.
—Sérápido,John.Nola dejespensar.
queélqueríao
Johnpretendíamostrarsetranquilo,perosucompañerointuyótodolo
cultar. . Malditosudor.
—¿Vas acagarlaotravez?
Johnagitólacabezamásyse tomóunaspastil as quetragósinagua.
—Vamos,John,es fácil deloquecrees.Vasdirectoalobjetivo
y...¡pam!—exclamóconunapalmadaenelvolantequehizoaJohn
brincarenelasiento.
—¡Sí,sí. ., el objetivoy. . pam!—leimitóJohnentrerisas
descompasadas—.Gra...gracias,Fern,porhaberconvencidoa
Pietrodequemedieseestaúltimaopor... l señor
lapolla.—Déjateder ol os, John.Nohemosvenidoaquíparaquemecomas
—Peroyo. . sóloqueríadecirteque...
—Saldelputococheyhazelputotrabajo.Cuandomelleguetu
comisiónmedaréporagradecido.
Johntragósalivaytomóaire.Sinmás,abriól
saliódeé l. a puertadelvehículoy
—Olvidasesto—dijoFernacercándoleunmaletín.
—Capullo—masculló
—Oh,sí,elmaletín.
largo.Televisanel partido.Fern—.Teesperoenel coche.Sitardasme
destino.LapuertasecerróyJohnsevioabandonadoasusuertefrenteasu
Sabíaloqueteníaquehacer.
Jamás.Primero,llamaríaaunpisocualquiera,peronuncaalcuartoderecha.
Tercero,llegaralpisocuartoycompletarla misión.
Segundo,cuandoalguiendescolgara,Johnmentiríaparapoderentrar.
Johnnoavanzó más al á delprimerpaso.
al que no hubiesellamadotodavía.
conel dedobailandoen el
airemientrasbuscabaalgúnpiso
«¿Esquenadieviveaquí?»,sepreguntaba
gestoapáticodesuprimo,apuntoderugircomoelmotordelcoche.No
Sóloquedabael intocablepisocuartoderecha.Johnimaginabael
quedabaotraposibilidad...
Pulsóla gotadeplataycerrólosojosala esperaderespuesta.
Nadiecontestó.
Johnresoplóy,sinmás,segiródevueltaal coche.Vencido.
Sinembargo,ydemanerainesperada,unavozquebradaymetálica
alcanzósunuca.
—¿Sí...?
Rápidamentesegiróyescupiósumentira:
—Car...cartero. un zumbidodeapertura.
Unosinstantesdesilencioydespués
Yaestabadentro.¡Sí,estabadentro!Johnsesentíapletórico.Estaba
eneli nterior adeunapirámide,habíaencontradolaAtlántida,alcanzado
elcentrodel Tierra,descubiertounplanetainhóspitoenlosconfines
deluniverso...,oquizássóloeraunedificiodepisosviejos.
Subiólasescalerasdemaneraapresurada,sintiempodepensar.No
queríaqueelmiedoquehabíadejado
e l en elportalsiguierasuspasos.
Podríahabercogido ascensor,peroleaterrorizabasentirclaustrofobia,
queesolellevase al pánicoydeahíalfracasomásabsoluto...otravez.
No,noerabuenaidea.Mejorsubirescalerasyseguirsudandocomoun
cerdo.
Llegóconlalenguafuera;subarrigamareadanoseloperdonaría
reguerodealgonegroyasquerosoporsufrente.
nunca.Sacóunpañuelosuciodesubolsilloysesecóelsudordejandoun
...Matthewintuyótormentayl
se e dijoaRufusqueentraraen casa.
Lacamisa lehabíadescolocadoyalgunosmichelinespretendieron
escaparentreloshuecos.Sinmucho arte
firme.Muy,peroquemuyfirme. serecolocólascarnesysepuso
Sesituófrenteala puertaypulsóel timbre.¡Quézumbidotan
horroroso!
Esperópaciente.
mirabanPorelenmínimoojodel
silencio. a mirillasintiócómoalguienseacercaba.Se
Johnestuvoapuntodecanturrear«Teestoyviendo...»,perole
parecióestúpidoypocoprofesional.
Insistió.
Lapersonaqueestabaal otroladodiomediavueltaysefue,
dejándoleasolasconsumaletínysusesperanzas.
Habíavueltoaf a l a r .
En realidad,todoeldíahabíasidoungranfal o.
Vale,nonosengañemos:todalasemana,todoelmes,
¡todasuvidahabíasidounmonumentalerrordecálculo! todoel año,
Regresaralcocheenesascircunstanciaseraalgoimpensable.
Perderíasuempleo—elprimeroenmeses—,ysudignidad.
Nopodíapermitirlo.
de
Antes irse, unaspalabrasnerviosasytorpesescritasporl
temblorosadeJohnseescurrieronpordebajodel a puerta. a mano
agachóarecogersusúplica.
Alotrolado,unachicadebrazosdelgadosymiradaalicaídase
joven.«Eslaprimeravezqueel carterote escribeunacarta.»,sedijola
Leyóconatenciónysorpresa:
«Hagaunpedido,porfavor,sólounoyconservarémiempleo.
669742275.Gracias,John.»
—¿AlimentoscongeladosPietro?¿Peroquécoño...?
dejóLajovencaminóal
caer elfolleto enelacubodecocinaconsugestodeimpasibleamarguray
la basura.
Unavezllegadoabajo,Johnentróenel cocheconunasonrisacasi
doblegadaporlamásqueperceptiblementira ensu mirada.
—¿Lohiciste?—preguntóFern.
—Claro—afirmóJohnsentadoene
ojosperdidosene l miedo. l coche,mirandoal frenteconlos
—Tehacostado,tío.¿Decuántoesel pedido?
—Decincuenta.
Ferntorcióloslabioscasi
—¿Cincuenta?Noestámalparasertuprimercliente.
vecesyle diola enhorabuena.orgullosodesuprimo,asintiórepetidas
Sealejaronsinmásconversación.
Johnimaginabasupropiogestotriste, temerosoyfracasado...pero
conunapequeñaesperanzaenformadellamadasalvadora.
Capítulo2
Noqueríaescuchar
Johnnoquisoverelsuspropiospensamientos.Abriólosgrifosdel
partido,peroencendiólateleysubióelvolumen.a
duchaysedesnudó.
en en
extrañamaníadeinsultarse
Semiró elespejoycomprobóqueseguíasiendoél.Teníal
lugardequererse.Cuandoelvapor
aguaempañóelcristalsemetióbajoe l chorrodeaguacaliente. ade
sillónfrentealaventana.
—Tedijequellovería, Rufus—dijoMatthewsentadoensuviejo
Elperroviejoseacercóyaullóalasgotasdelc
me —No Muy malosrecuerdos. r i s t a l .
de verano,Rufus.Eljardínseencharcay
traemalosrecuerdos.
soportolastormentas
Rufussetumbóensilenciosobre l
comoun a alfombratemplada.
Johndisfrutabadela ducha brevemomentodepaz.
Reflexionabaalavezquefrotabasucuerpo.Nadacambiaba.Siemprelos
inclusopensarenhacerlo.Preferíaolvidarsupeneahíabajo,colgando
perajoven,imaginandoescenassuciaseimposibles.Ahora
mismospasos,losmismosmovimientos,losmismosencuentrosconsu
iel. Pormomentosrecordabacómosemasturbababajoelaguacuando le cansaba
bajoelcrepúsculodesuexcesivovellocorporal.
Nadamássalir dela duchasedirigióalacocina,sinapenasdedicar
unossegundosasecarse.
LaluzblancadespertóaRufus.
—Yahasalidoelsol,chuchoperezoso—dijoMatthew l jardín.
incorporándose—.Vamos,levanta,veamoscómohaquedadoe
ARufusledabaunaperezaenormetenerque hacer crujirsushuesos
parapresenciare
losperros l mismojardínmuertounayotravez.Perocomotodos
era demasiado
Matthewabriólapuertafiela suamo.
invadiósuarrugadapituitaridela. a casayal segundounaromaconocido
—Melocotón.¿Quéhombreusajabónconoloramelocotón?¡Así
nuncaencontrarásanadiequet e quieraensucama,JohnGrassner!
Johnsequedóparadouninstante,pensativo.Alguienhabía
pronunciadosunombre.Imposible.
siquieraregalar.
encontrónadaquellevarse ala boca,asíquemiró
río alcanzóen ellascongeladordonde
encontrómuestrasdealimentoscongeladosquenohabíaconseguidoni
patasdeRufusquetemblóyretemblóycorriódentrodel
Abriólanevera.Unacorrientedeairef aescuálidas
casa.Johnno
Ésaerasudietabásicadesdequeempezóatrabajaren«Congelados
FetucciniTurínalinterior
Pietro,comidai delel microondasydejóquesu chef particular
taliana congelada».Asíquelanzóunabandejade
electromagnéticohiciera resto. el
Searrastróalsalónyencendió televisor.Suequipoibaganando
peroledioigual.
«Putosniñosricos»,pensó.
Seacercóal móvilymirósi habíaalgunallamada.Nada.
Elhornosonótintineante.
LosplatospreparadosdePietroademásdenotenerconservantesni
colorantes,traíancubiertosys
fregar.Tomóelenvaseysedejó ervicaeren
l eta, deelestamaneraJohnnoteníaque
Cenócondesganaunaextrañamezcladeplástico, sofá.
quesoyharina.
—Cualquierdíaledaráunataquea
nosotros,Rufus.¿Teimaginase l corazónymoriráantesque
l jardínoscuroparasiempre?
—Lo sé, losé,Johntieneque hacer algoparacambiar.Pero,¿qué?de
Estorpeconlaspalabras,estorpeconlasmanos,estorpeconlaschicas.
¿PorquéDoryquisoquedarseaviviraquí?¿Porquétuvolafelizidea
Rufusgimióunladrido.
permanecerporsiemprejamásenlalcalvadeestegordoi
noeligióauntriunfador,aalguiena nútil? ¿Porqué
quenohubieraquedarleánimos
paralevantarsecadadía?¿Porquénonosfuimosdeestelugarde
mierda?
Elperromiróasuamoydespuéscaminóal interiordela casa.
—Eso,vete,déjameaquíconestesebosoqueloúnicoquesabehacer
esalimentarseabasedebasuraprecocinada.
pies.Pasadosunossegundos,Matthewsintióunpequeñotemblorbajosus
—Dios...,yaestáintentandol l o r a r otrav
con losojosenrojecidosyenesusojos, e z . .
l gestoasustadizoquesiemprele
con fetuccinicolgandode
suslabios,
habíacaracterizado.
Asíera,Johnbuscabalágrimas
botasenelcuerocabelludodeJohn—¿Meoyes?¡Patético!
—¡Resultaspatético!—legritabaMatthewala vezqueclavabasus
Rufusescuchólosgritosexasperadosdesuamoysalióal exterior.
Detuvoasudueñoconunladridoyunempujónantesdequehiriesea
John.
—Nosoportoquel
mientrassemetía en lore comounanenaza...—mascullóMatthew
casadandounportazo—.¡Sinotienelágrimasque
l orar!
Elperroseacercóal bordedeljardínyobservóaJohn.Regresópara
curarlasmínimasheridasqueMatthewl
Aquelgestopareciócalmar e habíafirmadoensucalva.Las
lamiócondevociónsanadora.
aJohn,quesequedódormidofrenteal
televisor,sinhaberterminadonisiquierasucena.
Después,Rufusabriócondestrezal
Matthewl e esperabaene l s i l ó n , a puerta de suhogaryentróenél.
mientrasremirabafotografíasdeun
viejoálbumfamiliar.Unafamiliadetres queyasóloeradedos.
Pasaronlosminutos...
Derepente,sonóelteléfonomóvildeJohn.Unamelodíacelestial.
centelleos.Perosusronquidoseranpoderososy
Unaesperanzailuminandolaoscuridaddelaestanciaenbreves
ruidoala másabrumadoradelashumillaciones. sometíanacualquier
identificardossonidos ala perfección:eldesustripasrugiendoyeldel
Sinembargo,Rufusteníaunoídoespecial.Peseasuvejez,podía
móvildeJohn.Lógico:erangatoscantandounvillancico.Horrible.
Elperrotiró desuamoqueal instanteintuyósunerviosismo.
—¿Quésucede,Rufus?
Elperroladró,ladróyladró...ycorrióaarañarlapuerta.
coro
—¡Losgatos,elmaldito
Matthew. degatoscantores!¡Bah!—exclamó
Rufusinsistió aullando.EntoncesMatthewreaccionó:
—Lachica. . ¡Lachica!¡Sí, podríaserel a!
Elperroladróagitandoel raboygirandoencírculos,alocado.
—Yel tontodeJohnroncando.Estorequieremedidas
extraordinarias.
Matthewcorrióaunarmariodelquesacóunaescopetadecazaque
caminósegurocone
cejas.
cargóconunpardecartuchos.Casisinpensárselosaltóaljardíny
Apuntóaungranodel
l armaentrelasmanoshaciae
a narizdeJohn.Eraunblancof l desfiladerodelas
ácil,
demasiadogordoypurulento.Disparó.Diana.
Johnsaltóenel sofáylospocosfetucciniquequedabanenel plato
volaronporlosaires.
LosgatosseguíancantandoyJohnsealteróa
—¿Quépasa?—balbuceó. l instante.
Llegóa l teléfonoenelúltimomomentoypulsóelbotóndehablarconla
premuraynerviosismodelquedesactivaunabombaalost res segundos
dequeexplote.
—¡Sí,sí! ¿Diga?
Alotroladounavozapagadapronuncióunaspalabras:
—¿Esusted. . eltipodeloscongelados?
—Oh,sí,sí. . soyyo,seguroquelosoy.
—¿Sirvenadomicilio?
—Claro...,esnuestrotrabajo.
—¿Yahora?
—¿Cómo?
—Quesi sirvenacualquierhora. .
—Oh,no,ustedhaceunpedido,yentoncesotrodíamepasoy. .
—Nomeinteresaentonces.Chao...
—¡No,no,espere!¡Espere!
—¿Sí?
—Olvidéqueconel primerpedidoeligehora,cualquierhorade
cualquierdíadelaño.
—¿Seguro?
—Claro.
—¿Noloharáparano
perderel trabajo?
—No,¿porquédiceeso?
—Ustedloescribió,¿recuerda?
—Oh...,sí, yoloescribí.
—Vale,daigual.Sisirvenahora...perfecto.Meapetecepedirunos...
«Quenodigafetuccini,quenodigafetuc ini. .», sedecíaJohn.
—Fetuccini—dijoel a.
—¡No,joder,no!—exclamórabioso.
—¿No,joder,no?
—Perdone,quierodecir. . queno,quenonosquedan.
—Bueno,¿yquélesqueda?remiró
Johncorrióalcongeladory entrelasmuestrasdisponibles.
—Risotto,Ossobuco,Calamari...
—¿Algunarecomendación?
—Elrisot o, el risot o estábien.Legustará.
—Vale,traigaunrisot o. ¿Cuántotardaráenllegar?
risoJohnyaestabaenlacalle,llamandoagritosauntaxi,conunplatode
t o entrelasmanoscomoel quellevauncorazónparauntrasplante.
Capítulo3
Enestaocasiónnotuvoqueesperar,lapuertaseabrióa
presencia.Tampocosubióporlasescaleras,lohizoporelascensor,asíle l sentirsu
dabatiempoaprepararsusfrasesdecomercialagradecido,salpicadas
porguiñoscómplicesquesólobuscabanunafuturacompraadicional.
«Esteascensortraqueteaunpoco...»,pensó.
Habíallegadoalpisocuarto.Miróasuderecha;lapuertaestaba
cerrada.Todoestabaoscuro,muyoscuro.Atravésdeunapequeña
ventanaenlasescalerassecolabaunabriznadeluznocturna.John
intentóencenderlaluzperonofuncionaba.
Derepente,escuchóalgo.Sea s u s t ó . . , ymucho.
—¿Hola?—preguntóde manera estúpida.
NadierespondióyJohntragósaliva.
Al instantevolvióaescucharsonidosdepasos. ., tancercanosque se
cercanas...
lanzóaltimbredesuprimeracliente.¡Ypulsóypulsóypulsó!Pisadas
«Note gireessi,snottirloe, gseires. .», sedecíaesperandoquela jovenabrierala
puertadeunamalditavez.
Nopudor
giró.
Sequedóheladoal verunasombraatravesarla oscuridaddelpasillo
yperderseenlamisma.Arrastrabaalgo.
«¿Uncuerpo?»,pensósinmuchorazonamientoprevio.
el sustoconungritodepavor,unavozde
Peroantesdeenterrara sombra:
ultratumbasurgiódel
—Ya estabastardando...
Johnseagazapóenlapuertadela joven,conelgestodesencajado,a
puntodearañarlamaderacomoungatoasustado.
delEnesemismoinstantelapuertaseabrióyJohnseabalanzóa
a casa,cayendodebrucesal suelo. l interior
Desdeahíabajo,Johnadvirtióunosdelgadísimostobillosquehacían
pegaditosaunamujerqueparecíahuesos con
bailarunospiesdescalzossobrelatarima.Seacercaron p i e l , aél.
cubiertaporunabata
Iban
rasode uncolortanfeoquenomerecelapenanombrarlo,aunque
depodríadecirsequeeraalgoparecidoaunverdehorroroso.
Lajovenseagachóarecogerea cocina.Él,inmóvil,contemplabaabsorto
petrificadoJohn,sedirigióal l paqueteysindecirlenadaaltodavía
aesamujer,espigadayalgodesgarbada,depelosquegritaban
«¡Peluquería!»yuñaslargasy . . postizas.
—¿Cuántoes?—preguntóe l a desdel a cocina.
—6lágrimascon 95 escalofríos—respondióJohndec a r e r i l a .
—Simeayudasaabrirlo te daré7.Noquieroperderunauñaporesta
cenademierda.
Johnselevantóysedirigióhaciael a.
—Claro,yoseloabro.
Tuvodificultadesparahacerlo.Lajoven,mientrastanto,dejóescapar
unasonrisacamufladabajo esamata enredadadecabellonegroalverlos
desesperadosintentosdeJohnGrassnerporquitare
—¿Quieresquete aplauda?—preguntó l envoltorio.Cuando
loconsiguió,Johnselomostróorgulloso.
el a.
—¡No,porfavor,yosólo...!
La jovensecruzóconélysealejó.
—Ahoravuelvo.¿Melopuedesmeterenel microondas?Gracias...
Johnobedecióyesperóconpaciencia,consugesto
—Cla...,claro.
puertadelhorno,quequedabaala alturadesucara. reflejadoenla
—¡Oh,radiacionessolares!—exclamóMatthewsintiendoelpoder
electromagnéticoensurostro—.¡Mequemaráse l jardín,malditocalvo!
Rufusladró.
bil e—Aquítienes—dijol
te de10ensuhombro.a jovendetrásdeél ala vezqueagitabaun
—Oh,gracias.
ligeropasoa
Algirarse,labarrigadeJohnrozóal
trás. a jovenque,intimidada,dioun
—¿Túcomes muchoscongelados,no?—preguntóella de manera
peyorativa.
John no seatrevióaresponder,sóloesbozóunatontasonrisade
complacenciacomercial.
—Mevendríabienengordar...¿nocrees?
Hubounsilenciodeescasostres mesesentreel os.
loque—Nohacef alta querespondasahora,tómatetutiempo.Simegusta
Sacóemehasl envasedelhorno.Lo
traído, te pedirémás...
removióconuntenedordeplásticoyse
encaminóhaciasucuarto,sinqueJohnsupieraquéhacerocómo
reaccionar.
Alo
lejos, el a siguióhablando:
—¿Sabesquépasa?Quenomeapetecesalir ahacerla compra,con
todaesagentegolpeándomeydiciendo«perdone»ylasviejascolándose
Mientrasescuchaba la vozdelajoven,Johndudósidecirleque
enelmercado...Todoesolollevo muymal, porque... no
teníacambiooirsesinmás.Peroteníaquesoltarsuarsenaldefrases
comercialesquelavasenelcerebroaesachicacomol e habíanenseñado
señorPietroensudespachodedospordos. l mismísimo
eneseestupendocursodecincominutosimpartidopore
—Oye,¿siguesahí?—preguntóel a concomidaenla boca.
—¡Sí,sí!
—¿Yquéhaces?¿Porquénote vas?
—Eh...Ustedestabahablando,¿no?
segundosmás.
Entoncesel a nohablómás.Johnsequedóestupefacto.Esperóunos
—¿Te hasidoya?
—Eh...no.
—Peroyanoestoyhablando.
—Oh...perfecto.Losiento,perotengoquedecirlequenotengo
cambiode10.
Lajovenseacercóala cocinayle dioel envaseaJohn,totalmente
vacío.Secruzaronlasmiradasuninstante.Ellateníalosojosgrises.Él,
marrones.
—Quédatee
—Claro... l cambioparael próximopedido.Estababueno.¿Lotiras
ahoracuandobajes?
—¿Cómote llamas?
—John.
—¿Tienesapellido?
—JohnGrassner.Menudonombre.Pareceeldeunhéroede
—Grassner.
Claroque,mírate.Aveceslosnombresnopeganconel cuerpo. cómic.
Desdeel porchedesucasa,Matthewmirabaenojadoalsi a joven.
cogeríayledaría
gritabaescupiendosalivaconsaboralimonada—.¡Oh,
—¡Notedejeshumillarporeseesqueletoandante,Grassner!—pudierala
Bastarda,seguro! unosbuenosazotes!¡Asabercuálessunombre!¡Zorra
amoysetapabalasorejasconlaspatas,avergonzado.
ARufusnolegustabaescuchareselenguajetansoezdebocadesu
LaprudenciadeJohnl
vez. e impedíahacerchistesobromasconclientes,
ymuchomenosconsuúnicac
orgulloporenésima liente. Tansólosonrióysetragósu
Ladespedidanofuetal, él saliópor la puertayel a cerrósinmás.
manosaliódelanadayatrapóelenvasevacíodelr
inmediato.
Mientrasesperabaenla oscuridadaquellegaraeislotascensor,una
o, robándoselode
Johngritódelsustoysaltóal interior delascensor.
—Platobonito,¡seráunahojapalmada!¡Sí!—exclamóunavoz
mínimademujerqueseapagabaenlapenumbra.
Johnnopudoverdequiénsetrataba,estaba
corazónnosel e escaparadelpecho.Menudo día.másatentoaquesu
«Esteascensorchirríademasiado...»,pensóotra
descendía. vezmientras
Alsalir pasófrentealosbuzonesyunatisbodecuriosidadl
regresarsobresuspasosparabuscare l nombredeesachica. e hizo
No habíaescritonadaenelbuzóndelcuartoderecha.Tansóloel
número,comoene l restodebuzones,abiertosmuchosdeel os, otros
tachados...Entoncessediocuentadeloextrañodeeselugarvacíode
vida.
Capítulo4
Esanoche,casia
tiempo.Lohizoconnecesidad,conimperiosanecesidad.Alavieja
l alba,Johnsevolvióaquererdespuésdemucho
usanzadel
Al a juventuddehormonasalteradas.Seco,impasible,directo.
terminar,suspiróalosrecuerdosquetodavíarevoloteabanporsu
habitación.Pechosaladosenjóvenesángelesdeinstitutoquesealejaban
de despreciorecolocadas
guapos,losquefumabanyfollabantanbien.Personasquequisoperono
mujer.Risasalaespalda,r
secretosentreamigasquenohablabandeJohn,sinodelosaltos,los
pudo
bajoelmaquillajejuvenilquelasconvertíaenniñasconpretensionesde
comoyalohicierontiempoaisatsráfrenteaé
s. Susmiradasl. Carpetasprotectorasde
serde.
unajovenque,concomolosprimerosrayosdes
imagenSumemoriaseveló
vez,sinembargo,noleimportóquee le habíadespreciado.Peroesta
el resto,l a lohiciera. ol, lapidadapor la
Unafotodesumujersetambaleabaalbordedelprecipiciodelamesade
lamesa,atrincheradoentreabsurdosmontonesdefacturasypedidos.
ElseñorPietroesperabaensudespacho.Teníamilpapelesrepartidospor
ánimomásfrecuente.
roble.Parecíanervioso,preocupadocomosiempre.Erasuestadode
Johnllamóala puerta.
—Sí...—dijoelseñorPietro.
Eljovenabriódespacioycerrómásdespaciotodavía.ElseñorPietro
levantól a miradauninstanteyresopló.
—¿Qué?—preguntósinmirarle.
—Traíalosingresosdemiúltimopedido.
—Querrásdecirdetuprimerpedido.
—Trae,
—Bueno...,straeparaa
í. cá. . Dejaquelovea.
El señorPietrolomiróconatenciónycomenzóareírse.
—10miserableslágrimas,¡10miserableslágrimas!Conestononos
daniparaelberrinchedeunniño.¿Nopudistesacarmásentuprimery
únicopedido?¿Esque no teheenseñadocómoatacaralosclientes
quecomprenyescupansuspenasenformadebilletes ? para
¡Trabajanpara
l orar, noloolvides,tútienesquerecogersuslágrimas!
—Losé,peroesque...
—Es que. . ¿qué?Nomevalenexcusas,Grassner.Sinolloranellos
pormí,¿cómovoyamanteneresteimperio?¿Melopuedesexplicar?
JohnnosoportabacuandoetalilaseñorPietroseponíatanmelodramático.
secreíaelcésardelapastai na. Sinembargo,aJohnno le quedabal
Suimperioeraunapequeñaempresadecongeladosadomicilio,peroé
otraqueaguantarsusmalasmaneras.
Al ratopareciócalmarse un poco.John no habíaabiertolaboca en
ningúnmomento.
—¿Conseguirásquevuelvaapediralgo?—preguntóel señorPietro.
—Creoquesí.
—¿Creesquesí?
—¡Sí,s
—Largo.í, seguroquepidemás!—exclamóJohnreinventándosesu
espíritupositivo.
Nomanchescontusuciasonrisael despacho.
Justocuandosedisponíaas
señoradel a limpieza,setopóconéalir,l.Lucille,lasecretaria­recepcionista­
—Oh,John,atiqueríayoverte.
—¿A
—SeñorPietro,perdone—dijoLucilleporencima
mí?
John—,Fernestáenfermoysufurgonetaestácargada.delhombrode
—¿Y?—preguntóel señorPietro—.Veal grano,Lucille.
—Bueno,verá,Johnesnuevoytodavíanohemosrecibidoningún
vehículodeldesguacequenossirvaparaé l . Penséq u e . .
—No
Como piensestanto,Lucille, ya
boloñesadelmesqueviene.¿Quedaclaro? loharéyoporti.John,hazlaruta
Fern. pierdasalgunodesusclientesteconvertiréenpartedela de
gestooptimista.
LucillemiróaJohnyachicólosojos.Johntomóaireysegirócon
—SeñorPietro,¡noperderéninguno!Seloprometo. le
ignorabayLucillepasabal
Sequedóasolasconsuspalabrasdeemoción.ElseñorPietro
a fregonaentresuspiernas.
Peroantesdeirse,Johnrecibióunavoz en el cogote:
—¡Ynoolvideañadirasuprimerclienteenla lista deFern!¡No
quieroperderniuno!
Johnsegirónervioso.
—¡Oh,sí, señorPietro,la pondréenla lista!
—¿Esunamujer?
—Sí,sí, unamujer...
—¿Tienehijos?
—Creoqueno...
comida.—Vale,entonces,déjalaparael final. Sinhijosnonecesitamucha
—Parael final, perfecto,señorPietro.Buenosdías.
—¿Perotehahechounpedidoya,no?
—Claro,claro,señorPietro—dijoal
vieracómol e crecíaleal nariz. a vezquesegirabaparaqueno
parachoquestemblaba.Elhabitáculoolía ala
Las pegatinasdeloslateralesestabanalgodespegadas,había
Pietro.Johnrecorriólascallesensuflamantefurgonetadecongelados
golpesenlachapay
contodaesacomidacongelada no funcionaba.Peroestarallídentro,
coloniabaratadeFernylaradioytodosesospedidosenl a lista, le hacían
sentirpletóricoycasipersona.
Hastaquellegóalprimeratascoycomenzóaimpacientarse.
Deunrápidovistazomiróla lista declientes.
Bradburioyluegovolversobresuspasos
ciudadparallevarunosmalditost agliatel parae aunaabuelade
entregarunlotela callede pizzas
¡Eraimposiblehacertodoesoenundía!¡Teníaquerecorrermedia
enAmorArtesanalnúmerocinco!
ansiedadleestabasumiendoenunapesadillalaboralsinnisiquierahaber
todavelocidad,peroenlugardearrojarnoticias,arrojabalasañas.La
imaginabaasímismocomounniñoenbicicletarepartiendoperiódicosa
Estabadespedido,losabía.¡Peronopodíapermitirseeselujo!Se
empezadoahacernada.
¿Peroporquénosehabíaconvertidoenastronauta?¡Suvidaahora
seríamucho más sencilla!
Unpitidole despertódesubrevepesadilla.
Delantenohabíayacochesquel
habíadesaparecidoye l cochequel e ehabíapitadol
impidiesencieradelantóporl
cular. Elatascoa
izquierda.
—¡Graciasporavisar!—exclamóagradecidoJohn.
—¡Gilipollas...!—legritóelconductordelotrococheamilporhora.
—Esodigoyo,¡gilipollas!—repitióMatthewdesdelacalvadeJohn
—.¿Quieresporfavorpisare l aceleradoryhacerloquetienesque
hacer?¡Sitehundesentuspropiosmiedosnopodrásavanzarnunca!
amo.Rufuslevantóla mirada,sorprendidoporla serenidadfilosóficadesu
Johnaceleróypusoenel puntodemiraasuprimercliente.
Sumejorsonrisa.
Susmejoresmodales.
Unservicioexcelente.
Clientesatisfecho.
Asífueconelprimero,el segundo,el tercero...eltrigésimocuarto. .
elquincuagésimooctavo...
Lasonrisaflaqueaba.
Losmodalestropezaban.
Y el serviciosimplementefue. . apropiado.
Losúltimosclientesnoestabansatisfechos. ., ¡estabanhambrientos!
Pasadaslasdiezdela nocheterminóel reparto.
Elrespaldodesuasientocobijósucansancio.Resopló.
—Hastayoestoycansado—leinformóMatthewasuperro—.
Menudodíaagotador.Mírale,seestádurmiendo...durmiendodeltodo.
Comounbebé...
Rufusse
levantóycomenzóaladrar.
—¿Quépasaahora,Rufus?Nohagasruido—lechistó—,el chaval
semereceundescanso.
El perroladrómásaltoycorrióalanarizdeJohn.
—¿Sepuedesaberquédemonios...?¡Vuelveaquí,chuchopulgoso!
Rufusnolehizocasoy,sinmásdilación,meóaJohnenunojojusto
antesdequelocerrase.
Johnsedesperezóconelojoencharcado.Elfrotamientol
despertaryrecordaralgoimportante:e l a. Alinstantemirólaehora.hizo
—Seguroqueahoraescuandoempiezaatenerhambre...¿Mequedan
fetuccinis?
mirada.Johnbuscóenlapartetraserayalcanzóla cajadeseadaconla
«¡Bien!Pero...el a nohallamado.Metomaráporunlocosiaparezco
ahíyledoylacaja.¿Yquél e digo?¿Invital
me diráqueaimercasa?¿Son8lágrimas?
ir? Claroquequiero , claroquequieroir, pero
John,céntrate!¿Quieres
l a medespreciarácomotodasy e hetraídopastaydepostresalami?¡No,
dondemequepan...»,pensabaJohnsinactuar.
e¿Penséquetendríashambreyt metalosfetuccinispor
—Esunascoescucharsuspensamientos,¿eh,Rufus?—dijo
quedarsesiemprequietoy
delsalamiestámuyvisto!Noséquéesperaestechicodelavida,
Matthewmientrasencendíasupipa—.Essucio,débilycobarde,¡ylo
..
Enesemismoinstante,Johnacelerótanfuertequel
suamoporlossuelos.
queestabasentadoMatthewsevenció.Rufusserióentredientesalvera
—¡Éseese l a mecedoraenla
espíritu, John!—exclamóMatthewdesdeel suelo—.
Rufus,esperoquenopillemosningúnsemáforoporquesino,se lo
pensarádosvecesysea
Rufusaullóesperanzado.r epentirá. .
Capítulo5
—¿Otraveztú?¿Cómohasentradosinllamar?
—Lapuertadeabajoestabaabierta.al
—¿Quéquieres?—preguntóel a l cambio.
—.Tedijequetepodíasquedarcone otroladodela puerta,sinabrirla
—No,noeraeso.
—¿Entonces?Notehellamado,nonecesitonada.
—Penséquelegustaría.
Johnagitólacaja enel aire y un poco de escarchasedespegódel
cartónhelado.
—¿Quées?—preguntóel a.
—¿Fetuccini,recuerda?
—No,norecuerdo.
—Cuandomellamóusted. ., queríafetucciniynohabía.
—Oh,s
Johnbajólí, yarecuerdo,esanochecasinopudedormirpensandoquese
habíanagotadolosfetuccini.¡Quédolor,oh,oh,quétragedia!
a cajayladejócaeralsuelocondesgana,abriendo
dedosdel
oscuridad.Johnllamóa
Justocuando l ascensoryesperó.Alllegaralcuartopiso,lalos
se disponíaaentrar,algoledetuvo.
puertametálicaseabrióadestiempo,contraqueteosychirridos.
a mano.Lajovenobservabaatentasusmovimientosenla
—Yoquetúnoentraría enese cacharro—dijoella—.Llevasin
revisarsedesdehacecincoañosporlomenos.
—Usarélasescaleras.
—Mejor.
LajovensiguióatravésdelamirillaelcaminodeJohn,escaleras
abajo.Pasadosunossegundosprudenciales,abriól a puertayarrastrólos
fetuccinial interior desucueva.
—Estechicoestonto,muytonto—musitóMatthewaRufusmientras
Johncaminabahaciae l coche—.Menudaconversacióndebesugos.
Rufusladró.
pqué?¿Dequévatodoesto?Nohaydudadequesonraroslosdos,t
ara.—Sí,s
. ¡Cuidado,Rufus,meteorito!
í, el a nosequedaatrás. . ¡Nisiquierale abriólapuerta!¿Poral
Johnrecibióunpequeñoimpacto en la cabeza,queprontorebotóy
cayóalsuelo.
—Unbloil ete arrugado...
John abrió.Eran10lágrimas,peroenestaocasiónibanfirmadas.
«Quédateconel cambio.Gracias,Charlotte.»,leyóatento.
Pesea EljovenJohnmiróhaciaarriba.Lase
no versecara acara sesonrieronsinstrmás.Yel as delregresaronasus
cercanasdefarola.Sesintióobservadobajoellas.TambiénCharlotte.a ciudaderanluces
vidas.
—Charlotte...—susurrómilvecesenla furgonetadecaminoacasa.
—Miraloquetedigo,Rufus,comonosecallenosmudamosal
cabezadeunr a s t a f a r i —amenazóMatthewtapándoselosoídoscon a
fuerza—.¡Déjaloya,pesado!
Charlotte,Charlotte,¡Charlotte!
atragantabaentrerisasalrecordar
Mientrasellacenabafetuccini,sinquererlo,pensóenél.Casise
recomponíayapagabasufelicidadmomentáneaparadarseprisaen
sutorpezaytimidez.Luegose
acabar.Teníatrabajoporhacer.
Charlottedejóelenvasevacíoeneldescansillo.Lasombra
haceractodepresenciaylimpióla alfombracasial instante. volvióa
—Buenasnoches—dijoel a al otrolado.
no obtuvieronrespuesta. Notenía
manidasylanzómensajesygestosque
Sentadafrentealordenador,esperópaciente.Tecleóalgunasfrases
ganasdeseguirhaciendoel tontoesanoche.Estabacansada.
Secubrió.
l lamento.Seabrazóas
sintiólatigazosdeilusiónensupecho.Perodespués,laansiedadsurgida
porunfuturoinexactolallevóa
Charlotteseechóenla camaconl a batapuesta.Cerrólosojosy
í misma
buscandoprotección enel lechodesábanasblancas,ala vez queahogaba
sualmacontralaalmohada.Noqueríaescucharunllantoquenoe x i s t í a .
La luzentrabacontorpezapore
unaniñallamadaCharlotte... l cristal suciode lalaventana.Laluna
seintuíaenelcieloyCharlottereflejósumiradaene
recuerdosgrises.Losrecuerdosmásgrisesdelmundo.Losrecuerdosde
Eranlast res dela mañanacuandoJohnrecibiósullamada.Sabíaqueera
; eraunlagode
sumóvil.
el a, porquenadamássabersunombre,lohabíaañadidoenlaagendade
Temblódela emociónpeseaestardormitando.Descolgó.
—¿Diga?—preguntóJohnhaciéndoseelloco.
—Hola.Soyyo,Charlotte.
—Oh,esusted. . Graciasporsuslágrimas.
—Graciasporlosfetuccini.
Losdosseincorporarondesuscamas.
—¿Para...?—preguntó él
—Tellamabapara...
conánimodequeel a acabarala frase.
—Paranada.Sóloparaeso.
—¿Noquiereaprovecharparahacermáspedidos,señorita. .?
—Nipples.
castellano)
—¿Nipples?(notadeltraductor:«Nipples»significapezonesen
susadentros.
«¡Coño,Charlotte,cómole diceslodeNipples!»,segritóellapara
inmediato.
—¡No,no,Nipplesno!¡Nibbles,esoes, Nibbles!—rectificóde
—Nibbles,claro.¿Quéclaseel gracioso.
puta?—preguntóhaciéndose de personaseapellidaríaNipples?¿Una
Un molestosilenciotensóla conversación.
ue.—Oh,perdone,señoritaNibbles,nopretendíaofenderla.Yonohe
qdichoqueustedseau
. ¿Sigueahí? na. ., ¡niporasomo!Notieneaspectode...sólo
—Sí,sigoaquí.
—¿Y...quierehacermáspedidos?
—¿Quéaspectotienenlasputas?
—¿Cómo?
—Hasdichoquenotengoaspectodeputa.
—Claro,ustednoes. .
qué?—¿Ydequétengoaspectoentonces?¿Decirujana,deprofesora,de
—No meatreveríaaadivinarlo...
—Déjalo,noesnecesarioquemehumillescontuimaginación.Eres
sólounvendedordecongeladosadomicilio.Suficienteparatraerme
comida.Apunta. en sutrato.Lanzóporsuboca
algunosnombresdeplatos
Charlottesemostrósecayenojada
i t a l i a n o s . Johnescribíaatodavelocidadpara
noperderdetalledelpedido.
Quedarondentrodeunasemanaaunahoranormal.
CharlotteNibbles:númerodecliente1201.
Capítulo6
Charlottehabíaregresadoacasadespuésdejugarsolaporlosparques
delbarrio.Habíaintentadohaceramigos,perolasmadrestirabande los
niños,queseveíanforzadosarehuirla.Lasodiabaporhacereso.
Sequitólaszapatillasqueapestabanasudor.Laslanzóalospiesde
la ventanaabiertadesucuartoydespuéscorrióal a cocina.
Lacenanoestabapuesta.Eltelevisor, comosiempre,sí.
Charlottenoseatrevíaaexigirnada,sabíaloquehabía.
Sedirigióalaneveraylaabriósinhacerapenasruido,conmiedo.
Apenasquedabaleche,apenasquedabajamón,apenasquedaba
mantequillay elpan estaba enfuesucena,
loslímitesdelocomestible. un
Unsandwichmalformado queempujócon tragoodos
delechemientrasunaeternamoscavoladoravivíaenelfluorescente.
Sureflejopaliduchoenel espejodelpasillole diolasbuenasnoches.
Noselavólosdientesnisediounbaño,ynisiquierasepusoun
cambiarsedesde que llegaronaesacasa.
pijama.Sedejóabrazarporlassábanasdelcolchón,quellevabansin
Lapequeñanavegóunosinstantesporesemarmullidoenbuscade
unaposturaidealenlaquesussueñosnonaufragasen.
Unaspalabrassusurradasalotroladodelaparedladesvelaron.
Sonrióydespertósusilusionesdeinmediato.
Contodassusfuerzasapoyóllaotrolado.
parapoderescucharquédecíana cabezaenla pared.Ahogóla oreja
¡Quérabia,ibaaempezary noera capazdeescucharnada!
cocina.Deprisasebajódel a camayconsigilosedirigiódenuevoal
Entoncessintió cómoalgocaíaen elsuelo a
madre,descolgadadesdeelhombrodelsofá, apuntabaaunvasoqueen
delsalón.Lamanodesu
sugirotenuedejóunhilocurvadodealcohol.
Charlotteseacercósinquererdespertarlaylocogiódelsuelo,vacío
yadewhiskybarato.
rejita conelcristalconsintióunf
suoVolvióasucuarto premurayapoyó
r í o e
polarensupl vaso
i e l enl
. a pared.Alunirl
Ydespués...,e
sonidomásbellodetodos:
Uncuentoinfantil.
restodelmundo.Seimaginóqueerae
edredóntemplandosuspiesyconl
cartónquecolgabandeltecho,mientrassumadrenarrabaelmismo
Esanoche,Charlottefueniñaynounestorbocomolehacíasentire
a miradabrillanteenlosplanetasde
l otroniño,ensucama,consu l
cuentounayotravez.Sufavorito,ytambién el de Charlotte.
fdeseamorir?Sólounasinvida.
elizPerocuandolaluzseapagaba,Charlottenosoportabaimaginarlo
queeraeseniño,ysehundíahastadesearla muerte.¿Peroquéniña
Capítulo7
ElpedidoyahabíallegadoyJohnt ras él,quenoseatrevióamirar
apenasaCharlotte,aunquesusojosseofrecíana l encuentro.
—¿Cuántoes?—preguntóel a echandomanoal bolsillodesubata.
—Eh...43lágrimas—respondióJohnconla manoenla nucayla
miradaclavadaenunanota.
—Aquítienes.
Alacercarleeldinerosusdedosserozaronuninstanteysusmiradas
seencontraronduranteunbrevesegundo.
No sentirseestúpido,nopensaren
consecuenciasimaginadas.Soñar,soñarconalgomejor.
tantodañolehabíahecho.
marcadaafuego
LapuertasecerróyJohnsequedó las
en suretina.Teníaquetragarseesamalditatimidezque
con la imagende su miradagris
Llamóa la puertatemblando como unfríaldeallísind
malasmanerasdeCharlotte.Peronosei an. Estabapreparadoparalas
ecir. .
—Losiento—dijoel a nadamásabrir.
Johnsequedóhelado.Quisoabrazarla,estabamuertademiedofrente
quecubría
aél.Podíai sunturostroyqueapenasdejabaentreversusmejillas.
ir laslágrimasinvisiblesbajoesacapadecabellonegro
Charlotteserióalescucharsu
—¿Estábien,señoritaNibbles?
apellido.
—Hasidounanochedura.Nosé,nopuedopensarconclaridad.
—¿Puedohaceralgoporusted?
—No,nopuedes.Yosel silencio.
Charlottemantuvo ólo. . quería
—Nosepreocupe,nocreoque pedirteperdónporsertan
desagradablecontigosinningúnmotivo.
muchosotros.Estoyacostumbrado.hayasidomásdesagradableque
—Acostumbrarseasufrir yaser insultadoesunagilipol ez, ¿no
crees,John?Telodigoporexperienciapropia.
Charlottesedescubrióla mitaddelrostroechandosupeloaunlado.
Johnseencontróconsupielblanca,suslabiosagrietadosysumirada
apagadasobrelascenizasdesusojeras.
—Tengoqueseguirconel reparto,señoritaNibbles.
unasonrisa,cubriendosurostrootravez.
Lajovenasintióabrazadaasubatayjuntólapuertaconel sellode
—¿Quécoñohasidotodoesto,Rufus?¿Quéclasedeespectáculo
patéticohanprotagonizado?—sepreguntabaMatthewmientrascortaba
de
elcéspeddesujardín—.¡Deja
mucho quelohagas no encontrarás escarbar,chuchoinmundo!¡Por
nada, porque esteJohntiene el coco
vacío!¿Entiendes?¡Hueco!¡Ellapedíaagritosunabrazo!¡Ynovolverá
averlaenotrasemana,senosmorirádeuninfartoantesdequeconsiga
besarla!
RufusmiródereojoaMatthewsinentenderbiendequéhablabay
siguióalosuyo,buscandoideas.
Capítulo8
—Perdonaporllamaraestashoras. .
—Nopasanada—dijoél atrapadoentrelegañas,buscandola hora.
—¿Puedesvenir?—preguntóel a tras hacerunapausa.
—¿Ahora?
Johnintuyóunlevesuspiro,queCharlottepretendióacallar
apretandoloslabios.
—Voyahoramismo. en casi la vez.enlo se la se
Noquisoperdereltiempo
trabajosinapenasdarsetiempoapensar
Losteléfonossecolgaron la duchayseenfundósuspantalonesde
a Johnextrañodedesperezóysituación.olió.
Charlottel e abriól a puerta cone l mismogestoamargadodesiempre,
pesarosa,comounalmaerrante,muertaenvida,cabizbajayocultabajo
elrasoverde.
Nohabló,peroJohnsí seatrevióahacerlo:
—¿Quésucede?¿Porquémehallamado,señoritaNibbles?
—SeñoritaNibbles...,suenabien,¿nocrees?
—Bueno...
—PuedesllamarmeCharlotte,nopondréunaquejaacongelados
Pietroportutearme.Notemas.
Charlotteestaba
armariosconi r i t a n tene lentitudmientrasJohnesperabapaciente,sinsaber
lacocina;intentabaprepararseuncafé.Abría
bienquéhacíaallí,bajolaluzdelaentrada.Seinclinabalevementepara
encontrarlafiguradeCharlotteyendoyviniendodentrodela cocina.
—Vale.Con...leche
—¿Quieresuncafé,John?
—contestóalgotenso.
—Eh...,nohayleche.
—Puessolo.
—Nohaycafé—informóCharlottetras abriruntarrovacío.
—Puessincafé.
—Perfecto,uncafésincafé.Marchando.
mirasen,sentadosfrenteafrenteenl
Agitaronlastazasvacíasyel tintineodelascucharillashizoquese
a estrechamesadela cocina.
—Graciasporvenir—dijoel a, quehundíasumiradaen el espejismo
desubebidacaliente.
—Enserio,¿porquémehasllamado?
Ellaladeólacabezacongestoavergonzado.
—Penséenquitarmela vida.Estanoche.
Johndetuvola cucharillaylosdospermanecieronrecogidosenel
silencio.
—Peroenel últimomomentopenséenti.
—¿Enmí?
yo. —Enalguiensolitario —dijoel a alzandola mirada—.Alguiencomo
—Pero...,¿cómosabesqueestoysolo?
Charlotte,callada,simplementesonrió.Despuésregresóasucafé
invisibleyhabló:
llevasa—Alguiendetuedadoestácasadooestásoloparasiempre.Yno
nil o.
—Podríatenerpareja,convivirconel a. .
esclavo.—No,nopodrías.Tienespintadecalzonazos.Tecasaríasyseríassu
—Gracias—dijoécasal conironíaseca.
—Nadiesalede aestashorasparahacercasoaunapersona
comoyo.Tedefinescontusactos.
Johnreaccionóporuninstante.
—Creoque. . deberíairme.
Johnselevantólentamente.
—¿Te vas?¿Enserio?
—Creo quesí.
—¿Creesquesí?Ote vasono.
Seacercóala puertayalcanzóel pomo.
—¿Pensabasenfollarme?—preguntóel a.
Johnsegiró.
—¿Cómo?No,no,nopenséen. .
—Sí,lopensabas.Sitellevaseala camate quedarías,¿verdad?
—Vineporquemelopediste—dijoélsingirarse—.Parecíast
La cerró se r i s
e tle .
puertase trasél.Charlotte
asadela tazayla lanzócontrala pared,conrabia.quedóasolas.Estranguló
«¿Porquét
respuesta. e comportasasí?¿Porqué?»,sepreguntabasinencontrar
abrió.Johnestabaentrandoenelascensor.
Entoncesselevantóycorrióhacialapuerta.Tomóaireydespuésla
juntoaélylapuertasecerrótrasella.ÉlseCharlottesaltóa
giróa l sentirl a lpresenciade
interior
alguien,asustado,conla caradesencajada.
—Charlotte...
Justocuandoellaibaahablar,elascensortraqueteó,gimióun
chirridoensordecedorylaslucesparpadearona l instante.
—¡Mierda!
—Tranquila—dijoélpulsandoel botóndealarma.
—Notemolestes,nopagamosrevisiones,nadieresponderá.
TendremosqueesperaraqueLullabyregrese.
—¿Lullaby?¿Quién es?
—Es...bueno...,yala conocerás.
—¿Ycuándoregresa?
—Niidea.Esposiblequeyaestéensucasa.
Johnempezóagritar sunombre.
—Essorda,ocasi. Note esfuerces—dijoel a.
tarde.—Joder,ya,peroesqueentroatrabajaralasnueve.Nopuedollegar
—Sípuedes,otracosaesquete despidan.
Johncomenzóapensar.
—Graciasporlosánimos.
—A—John,eresunabolayyounp
lomejor si compensamoslospesosynosrepartimos...
alil o. Esimposible
compensarnada.
—Pongámonosenelcentro.LovienInternet.
—Oh,entoncesseguroquefunciona—expresóel a conironía.
Losdosavanzaronal centro.Sejuntaronsinapenasrozarse.
—¿Yahora?—preguntóella—.¿Cuálessonlaspalabrasmágicas?
—Saltar—contestóél.
—¿Saltar?¿Porquénomesuicidé...?—sepreguntóel a tras resoplar.
hacerlo.JohnsaltabacadavezmásfuerteyCharlotteibaasupropio
Alunísonocomenzaronadarpequeñossaltitos.Semirabanal
debrazosmientrassaltaba. l vientremínimodela joven,cruzada
ritmo.LatripadeJohngolpeabae
—Me sientotontahaciendoesto. confuerza.
Johnestabaemocionado,brincando
—Peroveoquetúte sientescomounmedallistaolímpico...
Derepente,el ascensorcomenzóaceder. . yadescender.
—¡Coño,si funciona!—exclamóel a.
Charlotteseanimó...ysaltóysaltóys
elásticadelaf altó. Derepenteysinsaber
eria. Paseabanporlen surostroysesintióniñaotra
Mirabaalosojosdeotroniño,John.Saltabanjuntosenuna
biencómo,unasonrisasurgió camavez.
a Lunaconbrincosinfinitosacámara
lenta.
Lamagiadurótansólouninstantemás.Johnsedetuvoysonrióa
Charlotte.
—Ya—ledijodeteniéndola,ala vezqueseñalabala luzdelpiso
tercero.Ellasedetuvo con ecosdefelicidadenlasplantas de suspies.
—Soloquedaabrirl
Charlotteseechóaunlado.Johnu
a puerta—indicóJohn—.¿Mepermites?
tilizó todassus
doblegarla mínimaaperturayhacerlaasímásgrande.fuerzaspara
—¿Teayudo?—preguntóel a expectante.
—No,yacasiestá...—contestóél apretandolosdientes.
LapuertasevencióyJohnsaliófuera,dondelesesperaba...un
fantasma.
—¡Ah!—gritóJohnasustado,cayendodeespaldasyarrastrándose
juntoalospiesdeCharlotte.
queveovuelves de tupaseo...y muyconbiensurtida.
—Lullaby...—susurróCharlotte pasmosatranquilidad—.Porlo
Charlotteseacercóaella.
—Sí—rióLullabyentredientes—.Miratodoloqueheencontrado.
Desdeel interior delascensor,Johnentornólosojospararedefinira
viejas,revestidamilvecesporharaposquee l a lucíacomounamodelo l
mayor,muymayor,conlamiradabrillanteydesubicada.Lasropas
fantasmaenlapenumbra.No,noeraningúnfantasma.Eraunaseñora
aparente,eranlargosydeshilachados,yunasonrisadedientesmellados
dealtacostura.Suscabellosblancosygrises,perdidosysinrumbo
porla edad estirabalasarrugasdesupiel.
—John—dijoCharlottegirándose—,esLullaby,la vecinadel
séptimo.Voyallevarlaasucasa.
Charlotteacompañódelbrazoala anciana,quenosoltabala bolsa
repletadecachivaches.Johnsequedóquieto,sinsaberquéhacer,
mientrasellassubíanlasescaleras.
Peroporsuerte,Charlotte se volvióuna vezmás yle preguntó:
—¿Vienes,John?Tienecafé. ., cafédeverdad.
Capítulo9
revoloteabapor encimadel
Eracierto.Elcaféerar eal. Tanrealcomolapalomadehumoque
besarla porcelana. atantaza,conesearomatanpuroqueinvitabaauncaracolla
moribundo.Suhogarestaba
Lullabysearrastrabapordentrodelaviviendacomo
decrépitocomoel a. Sinembargo,
ancianaparecíaf
cosas: eliz consusnuevasposesionesynoparabadedecirles
—Túserásflor ytúserássutal o.S.í,Yvosotros—refiriéndoseaunos
plásticosarrugados—,seréisnubes.¡ nubes!
parecíaacostumbrada ya asusmaneras.
JohnmirabaaCharlotte con gesto de circunstancia.Encambio,ella
preguntóCharlottedandootrosorboa bebida. Lullaby?—le
—¿Porquénotesientasydescansasunr su a t o , eh,
trabajo.—Nomegustahacerdesujetavelas.Vosotrosalovuestro.Tengo
—¿Alonuestro?Nohaynada...nuestro—explicóCharlotte.
Johnnohablaba,sóloseguíadereojolasaccionesdeLullaby.
—Yaf alta poco,yafalta poco...—sedecíal
l portazo. a ancianamientras
abandonabalacasacargadadebolsas.
Sequedaronasolastrase
—¿Dóndehaido?—preguntóJohn.
nadie.—Ala azotea.Allíestátranquila. Al menosesodice.Nodejaentrara
—Vetedeaquí,lárgate,nomegustaestes
John,que era itio —lesugirióMatthewa
incapazdeescucharle—.Tienesmiedo,¿verdad,Rufus?
El—Nomeextraña,¡cuántasuciedad!Quémalosrecuerdosmetrae
perroseagazapóentresuspiernas.
malditospiojos
todoesto.¡Portuculpasoñaré,malditoGrassner!¡Yquizásesos
marchala podadora.regresenatucalva!—exclamóMatthewponiendoen
—¿Tienesuntic oalgo?—preguntóCharlotte.
—No,¿por?—respondióJohn,extrañado.
—Noparasderascartela cabeza.
—Ah,eso.Nosé,mepicaamenudo.
deyasucortacésped—.¡Si nole cortoyo el pelo,mijardínestaría
motor—¡Claroquelepica!—exclamóMatthewporencimadelruidodel
plagado deesachusma! enmano
casa.Charlotteselevantótaza ycaminóbajolassombrasde la
—Lullabynosabecuidarsesola—dijoCharlottealolejos—.Todo
estápatasarriba.Peroellanoquierenadadenadie.Creoquenosodia.
nariz.Johnsiguiósuspasos.Alospocossegundostuvoquetaparsela
—¿Aquéhueleaquí?—preguntóJohnquecasillorabaácido.
—Dejemosla imaginaciónparacosasmásagradables,¿vale?Ya
tengosuficienteconquesemequedenlospiespegadosalsuelocuando
camino.Charlottesimulóunescalofríodeasco.
—¿Estásola?—preguntóJohn.
—Ajá.
—Recogebasuradel a cal e, ¿verdad?
—Sí.
—Diógenes.
—No,noloes.Almenosesodice.
—¿Entonces?—preguntóJohn.
mismapregunta.
—«Todoasudebidotiempo»,merespondesiemprequele hagoesa
—¿Ytúcreesquetieneunmotivoparatenerlacasaasí?
suelo.Charlotteseencogiódehombrosyterminósucafé.Dejóla tazaenel
—¿No lallevasalacocina?—preguntóé l .
—Ellaloprefiereasí. Le gustarecogerlosproblemasdelosdemásy
hacerlossuyos.
—Perounatazanoesningúnproblema.
—Ellanopiensaigual. .
JohnimitóaCharlotteydejól a tazatancercadel
en untintineo. Lullabyentrabaporlapuerta
unieron—¡Miracómolodejáistodotiradopore a otraquese
enese
l suelo,paraqueluegovenga
momento.
lachachayoslorecoja!,¿eh?
Lullabyseagachóarecogerlas.
Charlottesesonrióydetuvolas
intencionesdeJohnquesedisponíaaayudar,sujetándoledel
—Oh,ya osdaisla mano,tortolitos.Vatodosobre a mano.
Johnsintióunpálpitodeemocióneneseinstante.
Lullabyunavezerguida. ruedas—sonrió
Charlotteabriól a manoavergonzadayseretiró dandounpasoa
LullabyseacercóaJohnyledijo:
—Demasiadoschicosmalos...Verás,John,debessaberq ue. . trás.
—¡Nosvamosya!—interrumpióCharlottetirandodeJohn.
Laancianaserióacarcajadalimpiamientrasla parejaabandonabael
vertederodesuhogar.
—¡Nole
risas alolejohascontadonada!¿Verdad,niña?—legritabaLullabyentre
s.
—Teacompañoala calle—ledijoCharlottecerrandolapuerta.
—Nohacefalta, séel camino—bromeóJohn.
—Comoquieras.si
—Perobueno, teapetece...—dudabaJohnconlacabezabailando
entresushombros.
—No,no,comoquieras,vete.Llegarástardea tu trabajo. se
separaron.
JohnbajóacompañadodeCharlottehastael pisocuartoyal í
—Hastaluego—dijoel a singanasdehablar.
—Hasta...—antesdeterminarla frase, la puertasecerró.
Mientrasbajabalasescaleras,Johnescuchóalgunosgolpesyunos
gritosquelehelaronl
—¡Salpitandodeestacasadelocos,
a sangre.Erael a.
Matthewavoces. Grassner!—leaconsejaba
Johndecidiódarmediavueltayvolvera
llamarcuandoLullabyl e hablópore l l pisocuarto.Sedisponíaa
huecodel a escalera.
—Noes elmomento,joven, noes elmomento...
Unavezfueradea
Sinsabermuybienporqué,hizocasoaLullabyysaliódeledificio.
l í ysingirarse,
Charlotte,quea l Johndiolasbuenasnochesa
otroladodelascortinasdesucuartol e observaba,
encerradaenla ira desudesamparo.
Capítulo10
Charlotteperdíasumiradaenlasesquinasdeldespacho.Olíaapuroy
tambiénasudorentremezcladoconafter­shave.
Elhombredejóelhabano enel ceniceroyselevantódesusillón
cuero.CaminóhaciaCharlotte,queinclinabal a de
cabezacomounasúbdita
más.
—¿Metomasporimbécil?—preguntóél aunpalmodeel a.
mirarledirectamentealosojos.
—No,no,yonocreoqueusted...—respondióellasinatreversea
—19años...,¡ja! ¿Tienescarné?
—Claro—dijoe
Él ladetuvo. l a echandomanoaunpequeñobolso.
—Nomerefieroaesetipode
Mereferíaaesteotro. carné. Séqueesfalso. Todosloson.
Elhombrepasóe
quebrada l dedogordodesumanoderechaporloslabiosde
de asco.Despuésvinounsonidodecremallera.Semirarony
Charlotte.Ellanopudoevitarachicarlosojosysimularunasonrisa
Charlotteprocedió.
Arrodillada
—Vas frenteaél semetióel peneenla bocatragándosesus
escrúpulos.
afirmarel contratodetuvida—afirmabaél mientrassu
cuerposeestremecía.
Ellaescuchabasuspalabrascomounalluviadedeseosqueel a no
queríacumplir.Sugestodeasconoparecíaimportaraesehombre.
—Nohayunlocalmejorqueésteentodoel estado.Aquívienen
hombresimportantes...¡Eh,cuidadoconlosdientes!
Sumiembrosehabíaendurecidolosuficienteparadarun
allá.Latomódelpeloconpocasutilezayla mirócaraacara. pasomás
—¿Teestágustando?de
cabezatirandodelpelo
Ella,disimulandosusnáuseas,noquisoresponderperoélleagitóla
maneraqueasintiósin quererlo.Entonces,él
seapoyóenlalaa mesaconlospantalonescaídos.
delEsperó jovenCharlotte,queparecíaarrepentirse,conelregusto
a pieldelfalodeaquelhombretoscotodavíaensuboca.
casadeBuitre.Noladesaproveches.Tendrásunhogar,estarásprotegida.
—Teestoydandolaoportunidaddelabrarteunfuturoenmicasa,la
acercóaCharlottesequitólasbragasantee
é l . l silenciodeaquelhombre.Se
valen,—¿Yno laropa?Yaveoqueeresguapade
haytrabajo. cara perositustetas nome
Ellahizocasoomisoeintentóponersesobreél, queloimpidiócon
unempujónquelahizoterminarenelsuelo.
—Laropa—exigióél mientrassemasturbabafrenteael a.
cuerpo.Lajovensepusoenpieysequitóel vestidolivianoquele cubríael
Buitredetuvosufrotamiento.
—¿Quécoño...?—preguntóensimismadoensupecho,sinsalir desu
asombro.
Charlottesesintióínfimaensudesnudez.Élcomenzóareír. Ellano
entendíanada.
—Hevistotías conrabo,tíos concoño,tetas grandes,enormesy
pequeñas, pero lotuyo,lotuyoes...
tocarsesevioenvueltoeneldeseo,quelellevóal
ArrancóaCharlottedesusombraylaarrojósobrel
Aquelhombreparecíacautivado,hipnotizado.Sinnecesidad de
a aviolenciadelacto.
mesa.Ellagimióun
segundoantesdeserpenetradaporaquelhombredemiradaperdida.No
desnudez,
seatrevióadecirlelomuchoqueledolía.Élseguíafascinadoconsu
el actosexual.sinimportarlesugestopartidoosuobligadaparticipaciónen
En el últimoinstantesacósupeneempapadoysecorriósobresupiel
desnuda.
—Me harás deoro,jovencita—decíamientrasagitabasufaloque
regabadenievelapieldeCharlotte.
pantalonessinlimpiarselosrestosdesupropiosemen.Charlottese
levantóensilencioycaminóhaciasuropa,empapada.
Traslaeyaculación—quepareciónoacabarnunca—,sesubiólos
—¿Puedolimpiarme?
—Usatusbragas.
Ellanoquisoinsistir másyasílohizo.
—Dime,¿cuántostienesdeverdad?
—17.
—17...,perfecto.¿Ycómote llamabas?Charlotte,¿verdad?
Ellaasintiómientrassecubríaelcuerpopegajoso.
—ApartirdehoytevenderemoscomoNipples,CharlotteNipples.
—¿Nipples?
—Bonito,¿verdad?
Charlottenosupoquédecir.
—¿Tienespreguntas?
—¿Cuántoganaré?—preguntóel a al instante.
—Losuficienteparadartecuentadequehasvenidoal lugar
adecuadoparasalvartuvida.
—Cuandotengalosuficientemeiré. .
fuerza.—Claro,claro—sonrióél—.Aquínoretenemosanadieporla
—¿Cuándoempiezo?
—Enel pisodearribatienesunahabitaciónlibre,alfondo.Dúchate,
pídelemaquillajeaBetsy,l a gordadela entrada,ycogeropadelarmario
cdelaschicas,peronoteexcedas,quesenotequeeresputa.Ah,yuna
osa. .
—¿Sí?
—Ten cuidadoconlosdientes,sobretodositepidennatural.
—Vale.
—Ycuídate,note conviertasencarroñaote comeré—amenazó
Buitreconunguiñoinsoportable—.Nomegustanlasyonquisnilas
borrachascomotumadre...
Charlottesaliódeldespachoycaminóhacial
dondeesperabaBetsy,consugestoextraño
—Betsy,necesito. . a entradadellocal,
de envidiaperpetua.
—Guapa,ahítienesla puerta,puedesirte —leaconsejóBetsy—.
Tieneputasdesobra.Noseastontaybuscaalgomejor.Unavida.Esto
noesmásqueunafosacomún.Tumadrenohubierasoportadolaideade
quetúsiguierassuspasos...
—Dejaamimadrefuera
deesto.Yamejodióbastantel
paratenerquerecordarlatodoslosdías,comos i le debiesealgo.a vidacomo
—Ellatequería.
—¡Quésabrástú!
Charlotteextendióla mano.Betsy dejó caerunallaveyunaspinturas.
—Puerta14.Despuésbajaytepresentaréalaschicas.Sí,esos
zombiesquevespore l localsonmujeres.Sonmuyf e l i c e s , ¿nocrees?
arriba,entróenelcuarto yse metióenladucha de inmediato. Noquería
CharlotteabandonóaBetsyensuspensamientosysubióescaleras
pensardemasiado.Teníaprisaporconvertirseennada.
Capítulo11
Lullabysaliódecaza.Parecíanerviosa,conp
Johnesperóalolejos,ensufurgoneta,cobijadoenlanoche.Entonces
risa. Johnsaliódelvehículo
ycerróla puertaconsuavidad.Siguiósuspasoshastaponerseasualtura.
—Buenasnoches,Lullaby.
Laanciana ni seinmutóysiguiósucamino.Éllaacompañóen
silenciohastallegaraunoscubosdebasuradeuncallejón.Ellacomenzó
arebuscarentrelosdesechos.
—Ponlasmanos.Meserásdeayuda—leindicóe
—No voyacogerbasuracon las manos. l a .
—¿Basura?¿Quiénhabladebasura?
—Estámirandoenuncubo.
—Noseasignorante.Haymásbasurafueradeél quedentro.¡Abre
lasmanosoyatepuedesirpordondehasvenido!
Johnlohizoaregañadientesyldea viejacomenzóas
cacharrosinserviblesenlasmanos Grassner. oltarbolsasy
—¿Dedóndevieneeseolor?—sepreguntabaMatthew—¡Grassner,
porel amorde Dios!¿Leves,Rufus?¿Puedehaberalgomástontoenel
esa viejaasquerosa?
mundoqueseguira
Rufusladróconobviedad.
—¿Nosotros?¡Nosotrosnola seguimos,esél quiennoshatraído
hastaaquí,chuchopulgoso!Vamosdentrodecasa,bajarélaspersianasy
encenderélapipaparapoderrespiraralgoagradable.
JohnyLullabycaminabancalleabajoconlasmanosrepletasde
desperdicios de todotipo.
—¿Porquémeseguías?—preguntóel a.
malos...—Usted...,verá,dijoalgodehombresmalos.Demasiadoshombres
—¿Y...?
—Estuvoapuntodecontármelocuandoel a. ., ¿noseacuerda?
—No.
papelerasycontenedoresenbuscadenuevostesoros.
SiguieroncaminandomientrasLullabyhacíaparadasesporádicasen
compungida.
—Charlotteesbuenachicaperonola quierenadie—dijoellaalgo
—¿Quién no laquiere?—preguntóél.
—Nadie.
alcanzópocodespués.
Johnsequedóparado,pensativo,mientrasla ancianasealejaba.La
—¿Nadie?¿Peroporqué?—insistióJohn.
—Ellatampocosequiere.
Lullabysedetuvoysegiró.
—Séquevendrías,John.Yesomealegra.Peroal
convierteenunamotadepolvo.
explicóella—.Charlotte
—¿Cómosabíaquevendría? a vezmeaterra—
es débil,demasiado,necesitaproteccióny esola
Lullabyrióensilencioyachicólosojos.
—¡Noparas depreguntarenlugardeactuar!
—¿Elqué?
JohnrecibióunpescozónyMatthewsaltódesus il ón,
—¡No preguntesmás!—exclamóLullaby—.¡Actúa! pipaenmano.
LaancianaselargódellugardejandoaJohnbajola luzdeunafarola.
—¿«Actúa»?—sepreguntóJohnentrandoenrazón.
—Ysigue. . —resoplóla ancianaalolejos.
Capítulo12
a ancianasealejaranlosuficienteparaempujarlapuertadela cal e.
delEntróysubiólasescalerascomounpenitente.
Pusoelpieentremedias;nodejóquesecerrase.Esperóaquelospasos
habíanhechorecaereneselugarotravez. LaspalabrasdeLullabyle
EstabafrentealalpuertadeCharlotte.Temíallamar,tenerquehablar,
sonreírynopareceré . . actuar.
Derepenteunaestrel a cayódelcielo.
viounasombrar
Eraunallavequerebotómetálicaene
eír enloalto. l suelo.Johnalzólamiraday
—¿No pretenderáque...?
la barbaincipiente yse olió el aliento.al Setimbreprimero.Esperó.Se
tocóJohnagitólacabezaydecidióllamar
pretendiópeinarse. recolocóelpantalóny
cabeza.—Sí,sí, túsigueintentándolo—mascullóMatthewagachandola
Noquisoinsistir. Sabíaqueestabadentro,perosenegabaainvadirsu
intimidad.
«Pero...¿ysi le hapasadoalgo?¿Ysi. .?»
Johnabrióla puertatanrápidocomopudoyentrósinmás
miramientos.Atravesó e l
Parecíamuerta, pasilloquepermanecíaaoscurasyllegóhasta
elcuartodeCharlotte.
f r í a bajoe l tamizadoazuldel a luna.
Un botedepastil as velabasucuerpodesdel a serevolvióenunsueño
la mesilla.John,
asustado,apuntoestuvodetocarlacuandoe
imperfecto.Susrostrosquedaronfrenteafrente.Dormida,dulce.
Aterrorizado,boquiabierto.
Suspiróysequedómirándola
calmado,quisodejarlaasolas. durantetodaunavida.Después,yamása
Ensucaminohacialasalidaencendióalgunasluces,encontrandol
brevehistoriadeCharlotteasupaso.Pocascosasl
Quizásunaestanteríarepletadelibrosinfantiles
en era
e algoinesperado en
llamaronlaatención.
e l
mientrasseguíacaminando
aquellugar.Johntomóunoa
de unapuerta.Buscó l azarylohojeósindemasiadointerés
silencio.Sindarsecuentasetopócon
el interruptordela luzyal pulsarlose
marco
mostróanteé l algoquele dejóestupefacto.
susespaldas.
—¿Quéhacesaquí,John?Mehasasustado—dijoel a bostezandoa
Johnsegiródeinmediatoysinencontrarunarespuestaconcisa
balbuceóunadisculpa.
favor.
lasmanos—.Mehasarrugadol a esquina. No melostoquesmás,por
—Vale,vale, me quedaclaro—leperdonóe l a quitándoleellibrode
Charlottedejóel libroensuestantería.
—Perdona,noeramiintencióne
asusté—sej ntrar. Llamé,nocontestabas,me
ustificó Johnconaspavientostorpes.
—¿Teasustaste?¿PorculpadeLullaby?
—¡No!Measustéporti. .
Charlotterió.
—¿Pormí?Miraqueerestonto.¿Dequémequeríassalvar?
Johnnoseatrevióapronunciarlaspalabrasfatídicasytragósaliva.
—Ya hasvistosuficiente—dijoel a apagandolaluzdelextraño
cuarto—.Yasabesloquesoy.
Johnnególevementeyentornólosojos.
—¡No,noséloqueeres!
Charlotteresopló.
—Aver. . —dijoel a encendiendodenuevola luz—.¿Quéestodo
esoqueves?
—Bueno,veamos...unordenador,unasil a, unacama,unawebcam...
—Ypollas,muchaspollasdegoma,dilo, ¡si esloquemásseve!
labiospequeñitos.
—Y...pollas,muchaspollasdegoma—pronuncióJohnconlos
—Bien,¿tequedaclaroahora?
—¡Claroquelequedaclaro,guarra!—gritóMatthewdesdeloalto—.
¡Vámonos,John,estachicano te conviene!
Rufusgruñó.
—¿Porqué,Charlotte...?—preguntóJohn.
—¿Porqué?Nopuedocreerlo,te tengoqueexplicarporquéhago
esto.¿Tehepreguntadoyoatiporquéeresrepartidordecongelados?
—No,pero. .
—Ah,claro. ., quenoeslomismo.No,yaséquenoeslomismo.
Perolosdoslohacemosporcreer.el mismomotivo,yesononos hace tan
diferentescomopuedas
—Yonohedichoquetú...
—Loestáspensando.Séquelohaces.
Johnsequedópetrificado,parecíaquele estuvieseleyendola mente.
—¡Claroquelopensamos!—gritóMatthewotravez—.¡SiDory
viesetodoesearsenaldepenesexpuestosenl a estanteríacomosi fuesen
trofeosdecazasedesmayaríadelsusto!¡Lagentetienemarcosdefotos,
jarrones,figuritas. ., peronoeso!
Rufusaulló.
—Bueno,sí, loestoypensando—reconocióJohn.
—Y...,¿algunaopiniónal respecto?
Johnsepensómuchoquédecir.
—¿Ganasmucho?—preguntóconmiradainteresante.
Charlotteestallóderisa.
—Anda,pasa,yaverás—leanimóel a.
Ambosentraronene l cuarto.
—Con esacamaritadeal íamecamaconectoaunaaplicacióncon
ellosquieran.Trabajodesdel y me paganporel o. la que
personasdetodoelmundopuedenvermeypedirmequehagaloque
—Sécómofunciona.
—Meloimaginaba.¿Lohasusadoalgunavez?—preguntóel a
achicandolosojos.
—Nuncahetenidosuficientedineroparagastarloen. .
—...enmujeres.Pues...exceptopore
perfectodepervertido.
—¡Eh,nosoy l temadeldinero,tienesel perfil
ningúnpervertido!
—Todoslosois.Llevomuchodedicándomeaesto.Ydaigualloque
medigas,aquíseconectagentequenuncaimaginarías.
—¿Ves suscaras?
—Oh,sí, ymuchasvecesmepidenquelesmiresusenormespollas
dediezcentímetros.
—¿Ymiras?
—Esuntrabajo,John.
—¿Yganasmucho?
—¿Otravez?No,losuficienteparavivir.
—Siemprepenséquel
no a s . .
ventajadeque
—Dilo,John,notecortes.Somosputas,virtuales,peroputas.Conl
metesentantoslíonospeganenfermedades,notenemoschuloynot
s. ea
—Perotepodríanreconocerporla cal e.
mejoraquí.
—Filtrolosclientesporestados.Detodosmodos,salgopoco,estoy
Johnobservabadecercalospenesdesiliconaylátex.
—le
—Puedestocarlos,estánlimpios
Él negóconunasonrisa. informóel a.
—¿Tegustaríavercómotrabajo?—preguntóCharlotte.
—¡No,porfavor,no!Novineparaeso. .
—Yentonces,¿paraquéviniste?
—Bueno,yo. . Lullabymedijoque...actuase.
—¿Queactuases?Esaviejaloca. . —dijoCharlotteentrerisas.
AntesdequeJohndiesemásexplicaciones,Charlottelecogiódel
manoyl e sacódecasa.Subieronlasescalerashastallegara l a
últimopiso
yllamóa la puerta.
Escucharonunospasosacercándosehacial
—¡Lullaby!¡Abreahoramismo! a entrada.Un
decerradurasresonóenel descansilloyla puertaseabrió. repiqueteo
—¿Sí?
—Note hagasla loca.Túle distela llave,¿verdad?
—Semecayóporel huecodela escalera. . —dijoLullabyconuna
sonrisitadeinocencia.
—Ya,seguro...Ydime,¿esésteel hombredelquemehablabas?
LasmandíbulasdeJohn,MatthewyRufussedesencajaron.
guapoyatlético.
—¿Notegusta?—preguntóLullabyextrañada—.Esalto,fuerte,
—No,noloes.¡Estásciega!
Lullabyentornólosojos.
—Veomuchomejorquetú, jovencita.
Laancianajuntóla puerta.
—¡Nomedejesconla palabraenla boca,Lullaby!—gritóCharlotte
—.¡Tengomuchaspreguntasquehacerte!
Lasbisagrasvolvieronagemir.Lullabyyaestabaa
CharlotteyJohnentraronenaquellugar.
sentadaenunaviejasilla
—Adelante,Charlotte,pregunta.Ytú, l fondodela sala
de maderajuntoa sumesa camillacuando
lado. príncipe,siéntateaquíami
Capítulo13
Eranrecortesder
defútbol.Eltarotemásextrañodelmundo.
vistas, algunoscódigosdebarrasyunospocoscromos
torpezaelmazodecartasf
JohnobservabaatentocómolasmanosdeLullabybarajabancon
alsas. Miraba dereojoaCharlotte,atentaalos
movimientosentumecidosdela anciana.
—¡Vamos,ya!—gritóCharlotte.
movimientodecuello.
Lullabysedetuvo.Conunasonrisamiróala parejaconunleve
—¡Quémiedoda,Rufus!—exclamóMatthewentredientes.
—Puedoverte...—lecanturreóLullabyaMatthewdereojo.
ene l
Matthewsequedóclavado
tampoco. sitio. Rufusnoseatrevióamoverse
—Me...¿mehavisto?—sepreguntóMatthewseñalándose—.¿Esa
viejahadichoquemehavisto?
—Yte oigo—mascullóla anciana.
—¿Conquiénhabla?—lepreguntóJohnaCharlotte,queal instante
seencogiódehombros.
Lullabysiguiócon
suscartasrecicladas.Eligióunascuantasa
lasdejósobre el tapetelleno de manchas. l azary
—Vale,genial—resoplóJohn—.UncromodePaulHarrisII dela
ligadel99,uncódigodebarrasdeundesodoranteyunvalededescuento
de5lágrimas.¿Nosvamos?
—¡John,unpocode
paciencia!—lepidióCharlotte.
—Lullabysabe muybien quépreguntasle hehecho.
—Perotúibasapreguntaralgo—ledijoJohn.
—¿Cómo?¡Sinohasdichonada!
—Leoenlamiradayescriboenladeotros—explicóLullaby
hundiendosudedoíndiceenunadelasbolsasdesusojos.
—Pero...
—¡Silencio!—exigióla ancianaconungritoqueahuyentóaRufus.
JohnsaltóenlasillayCharlottecamuflósurisa.
—PequeñaCharlotte—inicióLullaby—,lasrespuestasatus
quetodoapartirdeahoraserádistintoparavosotros.
preguntassemuestranaquí,antevosotros.Trespequeñasmuestrasde
—¿Todo?—preguntólala joven.
—Todo—sentenció anciana.
—¿Yseráparabien?
Lullabynopronunciópalabra.Hizounapausaycontinuó:
—Tenéisqueelegirel segundoizquierda,fueenel 99cuando
abandonaronesehogar.
—¿Paraqué?Noentiendo...—dijoCharlotteagitandola cabeza.
—¿Yel restodecartas?—preguntó
—Noseasimpaciente,jovencita.
John.
Lullabysonriódemediolado.
—Latristeza escapazdelimpiarel alma—dijoel a señalandoaJohn
consudedohuesudo—.Tuslágrimasborraránsuspenas—expresó
volviendola miradahaciaCharlotte—,yviceversa.
Johnachicólosojossinentendernada.
—Peronadiepuedellorar—dijoé
—Pisosegundo,puertaizquierda—repitióLullabysacandounallave
l.
deunllaverosuperpobladoquellevabaocultoentresusropajes—.Y
ahoralargo,tengoquei r al baño.
La ancianaselevantóycaminóporel pasillosoltandoflatulenciasde
despedida.
—No quierovolveraentraren
Charlottehaciendobailarl las casasdelosdemás—dijo
a llaveentresusdedos.
—¿Entrar?¿Paraquétenemosqueentrar?—preguntóJohn
poniéndoseenpie.
seacercóa
Charlottesemostróbajol
él. a penumbraconla miradaserena.Sealzóy
—John,tengoquecontartealgo,algoquequizásteresulte...raro.
—¿Más raro que unaviejaleyendo el futuroatravésde la basura?No
locreo...
—Esonoesnada—afirmóel a agitandola cabeza.
—Sorpréndemeentonces.
—Noseréyoquienlohaga.Acompáñame.
JohnyCharlotteabandonaronla viviendaybajaronlasescaleras
hastallegaralsegundopiso.Nohablaronduranteelcaminoyelviejo
Mattheweraelúnicoqueleaconsejabaqueselargasedeaquellugaruna
yotravez.
—Ésta
es—indicóel a, señalandola viviendaconla l ave.
—Noirásaentrar...
—EspropiedaddeLullaby.Notemas.
—¿Propiedad?Bromeas. la cabeza.
Charlottenegómuydespaciocon
—Todo el edificio es suyo—leexplicóCharlotte.
—¿Todo?Peroestovaleunafortuna—dijoJohn—.¿Porquénadie
viveaquí?Seríar ica.
—Yloera—dijoella—.Todaslasviviendasestabanalquiladas.
pobreza.¿Quémotivostiene?
—Peroentonces,noentiendoquevivacomovive,entrebasuray
—Losodiaba—dijoCharlotteconseguridad.
—¿Porqué?
—Porqueellosmeodiabanamí.
—¿A ti?¿Quiénpodríaodiarte? al
tartamudeó:
Charlotterefrenósuimpulsoromántico escucharaJohn,y
—¿Qui...quieressaberlo?
Johnasintió. Charlottesedirigióala puertaeintrodujola llaveenla
cerradura.Lagiró.
—Adelante,John.Bienvenidoatunuevohogar.
JohnGrassner,embobado,caminóa
río yapagado. l interior conunaextrañamueca.
Trasél,Charlotte,quedeinmediatojuntólapuerta,dejando
descansillof el
Capítulo14
Aquelhombreestabaenseriosproblemas.Mientrasapagabae
desabrochabalacorbata mientrasregañabaasushijos, quenoparabande
enunceniceroatestadodecolillasyrebosantedeceniza,se l cigar il o
corretearasualrededor.
—Niños,niños,dejadavuestropadreenpaz.Albert,aquíapestaa
tabaco. Ya sabesloquehadichoel médico—dijola mujermientras
abríala ventana.
loco.—Ahorano,Melissa.Entrelosniños,e l doctorytúmevolveréis
—No essóloporti,Albert, es porlosniños.Noessanoquerespiren
estehumomaloliente.
solacalada.Lamanol igarcasiil oayapuntoestuvodefumárselodeuna
Albertencendióotroce temblaba l volveracerrarlaventana.Melissa
resoplóysellevóasushijos arastras, cerrandola puertadel
despacho.
Habíaolvidadoquiéneraentreaquellamarabuntadenúmerosrojos.
Eratarde,teníaquehaberlodejadotodoterminado.Imaginabaasumujer
haciendol
despegarseadecena,obañandoalosniñosoquiénsabequé.Peronopodía
Derepente,Melissaentróaldespachoy,conungesto,
susilla,desusproblemas,desusmiedos.
ritos. le dijoa
Albertquesaliera.Ensilenciosedirigierona la entradaymirarona
travésdelamirilla.Alotroladoseescuchabang
—¿Quésucede?—preguntóél envozbaja.
—Eslaviejaylosdeenfrente—respondióel a, dejándolemirar.
—Estáloca.Deberíamosllamaralapolicía,aserviciossociales,
haceralgo.
—Es nuestracasera—dijoel a preocupada.
Alberttragósaliva.
—Albert—lechistóMelissa—,¿haspagadoestemesala vieja?
Norespondió.
—Albert,responde,¿haspagado?
—Yo...
—Oh,Dios...
movimientosdesusvecinos.Derepente,l
delsusto.
alzóelbastón,clavándoloenl
Albertestabapetrificado,conea mirlilojopegadoal
a. Elhombreser
a ancianasegiróhaciaellosy
a puerta,atentoalos
etiró haciaatrás
—Vosotrosseréislossiguientes—rió la anciana.
AlbertyMelissasemiraron,seapiadaron el unodelotrotantocomo
seodiaron.Losniñosestabanajenosasusvoces,conlasmiradaspuestas
enlosdibujosanimadosdeltelevisor.
—¿Porquénohaspagado?
—Muysencillo,Melissa.Notenemosdinero,desdequecomenzóla
crisisnovendotornillossuficientesparaalimentarosypagarlasfacturas.
—Perohablamosdenuestrohogar,Albert.Esloprimero,eslomás
básico.Esnuestrah istoria.
Albertnoqueríaargumentarloobvio.Caminabadeunladoaotro
lavándosel a cara demiedos.
—PeroLullabyerabuena
—sedecíaél—,loera.Nosquería.
—¿Lavieja?Nomehagasr
desumenteene l momentoene elírquedejóqueesamujerentraseene
, Albert.Laviejalocaperdióel controll
edificio.
Melissapuso cara desorpresa.
—¿Charlotte?¡Québienconocessunombre!—exclamóe
—¿Charlotte? l a.
—Noparáisdehablardeel a porteléfono—dijoél ensudefensa.
—Nosdamotivosparahacerlo.Desdesullegadatodohaidoapeor.
—¿Apeor?
—Todassabemosaquésededica.
—Rumores,Melissa,rumores.
—Nosaledecasa—ledijoMelissa.
—Ytraehombres.
—No seasridícula, no traehombres.¿Túhasvistoalguno?
Melissanorespondió. han
—Daigual,otrassí lo visto.Ademásesantipática,nosaluda,
huelemalytieneelpelohechounasco.
—Melissa,cariño,¿tehasmiradoúltimamenteenel espejo?
Lamujerseenfurruñó.EntoncesAlbertsequedópensativoy,luego,
boquiabierto.
—Oh,
—¿Quésí —dijoél acercándoseasumujer—.Ahorasí quelo
entiendotodo.
esloqueentiendes?—preguntóel a.
Nunca.—Laactituddelacaseraconlosvecinos.Nuncasecomportóasí.
Melissaabandonóla estancia,rabiosa,ycaminóhaciael cuartode
baño.Albert la siguió conaires detectivescos.
Melissaestabafrentealespejo.Alberttrasella.
Enel reflejodesusimágenes se encontrabanCharlotteyJohn.
¿port—Lullabyechóalagentedesuscasasal
i? —presintióJohn. a mínimaoportunidad...
Charlotteasintióconundébilgesto.
—¿Porqué?—insistióé
—Es l. yse
posiblequeAlberttuvieserazón hubiesevueltoloca,oque
simplementesehubiesecansadodeestarrodeadadefalsedad.
¿Quémásdaloquepensarandet
—Peroeranpersonasquele pagabanmuchodineroporviviraquí.
i?
—No losé—dijoella—.Realmente
unpequeñomotivoparat
salvaráalgúndía. nolo sé. Lullabytienesiempre
odo. . yparanada.Dicequelabasuranos
mujer,nocreoquet
—Labasuraesbasura.Nodeberíaspasardemasiadotiempoconesa
e convenga.
—¿Quiéneresahora,mipadre?—preguntóCharlotte—.Vamos,no
mejodas.Lullabyeslaúnicapersonaquemehaqueridodeverdad.
—Perotampocoparecehacertef
inesperadaverborrea.
—John,¿quées eliz —dijoJohnsobreexcitadoporsu
serfeliz?
Enesemismoinstanteentraronenel bañoloshijosdeAlberty
Melissa.Gritabancomolocosquehabíanvistounanunciodeunaf
pero susreflejosr, eria
quesehabíaasentadoalasafuerasdel
díasocomerseelbrócolipormuyasquerosoqueéstefuera.
prometieronmilcosasimposiblescomocepillarselosdientestodoslos
MelissayAlbertnoestabanparafiestas, a ciudad.Suplicaroni
Charlottey
Johnseilusionaronuninstante.
—¿Teapetecesalir deestelugaraunqueseaporunanoche?—
preguntóJohn.
niños.—Noséquédecirte.Quizástodosedesvanezcaynohayaferia ni
ego.—Noiremosnosotros,iránellos—dijoJohnseñalandoasualter­
CharlotteselopensóuninstanteysonrióaJohnatravésdelespejo.
vamosal
—Niños,poneoslaszapatillas—dijoMelissaasushijos—.Nos
a feria.
—¡Bien!—exclamaronlospequeñosal unísono.
Matthewestabaaniquiladoporla fantasíayla realidad.
lafrente—.Esaspersonas,esosn iños. . tanrisueños, ¿cómoes posible
—Rufus,noentiendoquéestápasando—dijosecándoseelsudorde
queahoraJohnyCharlotte...seansuspadres?
Rufusseacercó,pidiendounacariciadetrásdelasorejas.Matthew
pensabaenvozalta:
—Dory,te hubieseencantadoverlos,si tuvidanosehubiese
detenidoporculpadeesospiojosbastardos...Podríamoshabertenido
h¡Menudol
ijos, podríamoshaberlosllevadoalaferiacomoahorairánloshijosde
ío! nosean ellossinosus. . ¡Quédolordecabeza!
CharlotteyJohn,aunque
MatthewrecordóhundidoensusillóncómofuesuvidajuntoaDory,
ycómole hubiesegustadoterminarsusdíasjuntoael a, denohabersido
dolor,tantafuriaytantanecesidaddevenganzahabíanacabadoconlas
poraquelencuentrofortuitoconaquelloscriminalescapilares.Tanto
ilusionesdeMatthewque,desdeaqueldía,ycomotributoasuqueriday
paranosufrirunav isita inesperada de aquellosalosquenopodíasecóniver.
Unalágrimaseposóensusarrugadasmejillas,peroMatthewla
difuntaesposaasesinada,decidiócadamañanacortarelpelodeJohn
antesdequeRufusadvirtiesequesudueño,enocasiones,eratandébil
queeracapazinclusodellorar.
Unjardíneternamentepodadoparaquenoresurgierael dolorjamás.
Capítulo15
Llegaronalaferiarodeadosdecánticosinfantiles,versosllenosde
atraccionesfrenéticas,miradasnerviosasintercaladasconrisas
superpuestasalaemoción.Losniñosparecíantanfelicescomo
demostrabasusinceridadeterna.Charlottelosmirabaconenvidiasana.
Exigíandinero
echómanoalbolsillo para montarseentodoporlomenosmilveces.John
desu alter­egoAlbertyencontróunbil ete
arrugadode10lágrimas.Seloentregóalospequeños,quedeinmediato
sedisputaronlapertenencia.
—Tranquilos,haysuficienteparalosdos—dijoJohn.
Charlotteseagachófrenteaellosyporboca de Melissalos
tranquilizó:
—Cincoatracciones cada másuno.Elegidbien.Cinco.
Losniñossemiraronyel avispadodeellostiró delbil ete yechó
acorrer.Elotrolesiguió,gritandoasusespaldas.
—¿Vamostras ellos?—preguntóAlbert.
—Claro.
Juntosperosintocarsecaminaronconunojoene
ensush i
dej o s . Losvieronbrincarenlas camas l caminoye l otro
elásticasydeahísubiralos
coches choque.Elruidodelambienteensordecíalasconversaciones,
queselimitabanasonrisasypreguntasaloído.
Losaromasdulcesavivaronlosantojosde
unalgodóndeazúcardeinmediato.Cuandosegiraronene Melissa,queselanzóapor
l puestopara
No estaban en loscaballitos nien elbarcopirata,tampocoenla
buscarasushijosnolosvieroncerca.Comenzaronabuscarlos.
casetadetiro nienel teatrodemarionetas.Preguntaronypreguntaron
hastadarconsur
espejos. astro. Delpulpohabíanrecaídoenel laberintode
—Vamos,Melissa,noesnada,sonespejosnadamás.Pasemos,será
—Siempremehadadomiedoestesitio —confesóel a.
divertido.
—No,no,pasatú.
fácil—Venga,losniñospuedenestarasustados,noesunlugardelquesea
salir. en
ElgestodeAlbertyesasúltimaspalabraspusieron
mejormadre.Albertsonriósudecisión. unaprieto
emocionalaMelissa,quesesintióobligadaaejercerdebuenaesposay
Sinembargo,habíanolvidadoqueunavezdentroyanoseríanellos...
—John...
—Charlotte... las
Seleyeronloslabiosen imágenesreflejadas.
—Nopuedocreerqueestemosaquí—expresóincrédulaCharlotte.
—Niyo.Estodotanextraño,¿verdad?—dijoJohn.
—Nomerefieroal hechodeserpareja,detenerniños,deteneruna
vidaencomún.Merefieroahabersalidode
estagente. casa parajuntarmecontoda
—Oh,pero. . realmenteestoesunaespeciedesueño,¿no?—
preguntódubitativo.
Ellaseencogiódehombros;noteníaunarespuestaclara.
—PerotúconocesbienaLullaby—insistióél.
Charlotteignorósuspalabrasysiguiócaminando.
—dijoe—Hapasadomuchotiempodesdel
l a. a últimavezquepiséunsitio así
—Amímesucedelomismo.Nosabíaquehubieseferia alasafueras
delbarrio.
—Ynola hay—dijoel a.
Eneseinstantetodosesilenció.Elmurmullodelaferia,loshumos
delabarbacoa,losengranajesrechinandoyl a músicaatodovolumen...
seperdieron.
Losespejosfueroncristal. . yluegoaguaqueencharcólatier a.
pincharon,ylosrestosdegomaycuerdallovieronsobreunaf
liberaronparavolarl
Enelcielolosglobosqueundíapertenecieronaniñasyniñosse
ibres. Perotantoseelevaronquelasestrellaslos
eria
derruidadeimaginación.
CharlotteyJohnsemiraronperplejos,mientraselsueloseinundaba
decoloresarrugados.
Ellasequedóabsortaobservando
Losglobospinchados,a l ene
contactocone l l cielo las explosionesmágicas.
aguadeloscristalesmustios,se
luminosos.
diluían,formandounpequeñouniversodeondasdecoloresycharquitos
John,enlugardemirarel extrañosuceso,sehabíaprendadodel
rostrodeCharlotte,vibranteybellísima.
—Zumodeglobo—murmuróel a, encontrandoaJohnconla mirada.
—¿Zumode. .?
Charlottebuscóunvasodeplásticoenunodeloscubosdebasura.
Apenascomprobóqueestuvieselimpio,parecíanoimportarle.Notenía
tiempoqueperder.
—Ayúdamearecogerrestosdeglobosantesdequetoquenel suelo
—lepidióCharlotte.
—¿Paraqué?
—Yalo
desplomándoselasilusionescromáticas,quefueronrellenandoelvaso
Élimitósusrápidosmovimientosdemanos.Delcieloseguían
verás.
pocoapoco.Unapequeñacapadeglobosazules,otranaranja,otra
verde...Asíhastallenarlodeltodo.
Charlotteentoncesseagachóeinclinóelvasoenunodeloscharcos
pararecogerunpocodeagua.Despuésselevantóyloagitó,tapándolo
conla palmadesumano.
se
Losglobos diluyeroncasialinstante,peroloscoloresseguían
ibailandounossobreotros,comosedimentosdeaguayaceitedelarco
ris.
—Pruébalo—ledijoel a.
Johnnegóconlacabeza.
—No,no,songlobosyaguasucia.el
ACharlottenoparecióimportarle temordeJohn.
—Yoquetúnoloharía.Tesentarámal,Charlotte—leadvirtió.
Ellaestabaconvencidayhundiósusonrisaenla bebidaimposible.
Porencimadelvasosobresalíansusojos,quedejaronlamiradaclavada
enlosdeJohn,boquiabierto.
Charlotteexhalóunpequeñosuspirodesaciedad.
—Estárico, John.Vamos,notengasmiedo.
—Pero,¿paraqué?
DerepentelospiesdeCharlottesedespegarondelsuelo.Johnse
quedóestupefacto.
—Eszumodeglobos,¿quéesperabas?—preguntóel a conungesto
deobviedad.
ElvasoseliberódesumanoycayóenlasdeJohn,impertérrito
mientrasCharlottevolabaaloa
—Rufus,recuérdameque lto.
medicación—dijoMatthew. le digaal doctorquemecambiela
Johnveíacómoellaseelevaba tan livianahaciaelespacioquetemió
perderladevistay,sinpensárselomás,sebebióe l restodelzumo.
Él,encambio,seelevómuchomásdespacio.
Alalcanzarla,Charlottele recibióconunasonrisa.
—Hasvenido—dijoel a, feliz.
Johnsonrióconungestoextraño.
—¿Tienesvértigo?—preguntóCharlotte.
Johnasintió.no
—Entonces te aconsejoquemireshaciaabajo.
—Graciasporla advertencia.Perosiemprequesediceesouno
terminahaciéndoloy...¡ah!
JohnsepegóaCharlottetanfuertequeapuntoestuvodeahogarla.
—¡Cuidado,nomeaprietestanto!¡Tranquilo!—exclamóel a.
—Puesagarrarsea
—¡Medamiedocaer!
otrapersonaentumismasituaciónnoesmuy
buenaidea.Vamos,digoyo.
—¡Peroaquínohaynadaparaagarrarse!¡Quierobajar!
—Rufus,estechicosiemprehaciendoelridículo—dijoMatthewcon
la manotapandosucara.
—¡John,vamos,tranquilo!Estaraquínoesningunalocura.Miraatu
alrededor.
lados.—¡Nohaynada!—exclamóseparadoyadeel a, mirandoaambos
—¿Ynoesesoperfecto?
JohnmiróaCharlotte.Unalevebrisaelevósuscabellosquefueron
peinadosporunalluviadee scomo
trel asnuncaantesl
. Lalunaenvidiósupiel,suslabios,
sumiradat
Ylohizo,sinqueel miedofueraede l culpable. a necesidaddeabrazarla.
r i s t e . Johnsintió
Ellaabrigóconsusbrazos alambrelaespaldadeJohn.
Acurrucaronsuscuellos,acariciandosussentidos.
Latimidez,lasoledad,el silencio.
—Megustaestaraquí—lesusurróel a.
Johnnodijonada.
—Nosomosnada,nosomosnadie...—murmurabae
Él más l a entredientes.
optimista.laabrazócon fuerzaperosinllegaraahogarsudesazón
—Perojuntos,juntossomos...—Charlotteexhalóunsuspiro—.
Lullabyprometióhacerlorealidad.Algúndía...
—¿Algúndíahará. . qué?—preguntóJohn.
—Nada...
Fueel a la queenestaocasiónabrazóconmásfuerzaaJohn.
Derepentecomenzaronadescender,muydespacio.Apenas
advirtieronquesuspiesvolvíanaunirsea l suelo.Siguieronjuntosenun
abrazomutuo.
Laferia,losglobosyloscharcoshabíandesaparecido.Losniños
tampocoestabanyellosdejarondeserunaparejaamargadaymadura
parasiempre.
Undescampadopolvoriento,conalgunasfarolasa
eratanluminosoahora.Sumiradavolvíaaestarperdidaenel
eraahorasunuevoescenario.
Sesepararona l fondodelcamino,
l encontrarseconlarealidad.ElgestodeCharlotteno
miedos.Johnnosupoquédecir,peroseanimóabalbucear: sacodesus
—Yo,yo. ., estoquehapasado...,¿significaalgo?
—¿Aquéterefieres,John?
—Alzumodeglobo,al abrazo,ati. Aestarjuntos. .
—Estesitio esunasco—dijoe
entrelosrecuerdos,comos l a ala vezquesumiradarevoloteaba
i conocieraaquellugardealgo—.Vámonos.
Charlottecaminóhacial
con a carretera.
Johnsequedó
arcén el corazónentumecido.Siguiósuspasosalejados
porelEn delacarretera,bajolaslucese léctricas.
eseinstante,uncochesedetuvoaescasosmetrosdeCharlotte.
Delvehículodescendióunamujerconbotasaltas,faldacortaypecho
hinchado.Sequedóallí,esperandol
conductorbajólaventanilla: a llegadadeotrocliente. Derepente
elcochediomarchaatrásysedetuvoalaalturadeCharlotte.El
—Nopuedocreerlo.¡Quévenmisojos!
Charlottele miródereojoysiguiósucaminocadavezmásrápido.El
cochelasiguióasua ltura.
—¡Charlotte,vamos!¿Nomerecuerdas?Llevabasiglossinverte,
¿ahoratrabajasenestazona?
—Nosédequémehabla—dijoel a sinalzarla mirada,conel paso
cadavezmásrápido.
te echabademenosenellocal de
—Joder,Nipples,todoelmundoe lodijeron?Lachupabascomonadie,
Buitre.Dejamosdeirporti,¿not
follabascomonadie,erasl a mejor.Ytucuerpodesnudo,¡oh,Dios!
¡Pagaría500lágrimasporverlootravez!
Charlotteechóacorrercontodassusfuerzas.Johnl a perdiódevista,
metrosmásatrás.
EntonceselcochesedetuvoyesperóaJohn,queparecíaconvencido
endecirlecuatrocosas:
—Perdone,caballero,creoqueseconfundeconel a. .
Johnsequedóperplejo:
—¿Fern?
—¿John?¡Coño,John!¿Quéhacesporaquí?
—Eh...,vinealaferia con el a.
Fernsecarcajeó.
—¿Qué feria, loco?Serásputero...
Johnsegiróytomóaireantesdeseguirhablando:
—Ninguna,déjalo.
—¿Laconoces?—preguntóFern.
—Unpoco...esunaclienta.
—¿Unaclienta?¡Penséqueeraal revés!—exclamóFernentresucias
carcajadas.
—Fue
mi. . primeraclienta.
noche.Johnsequedóobservandola sombradeCharlotte,alejándoseenla
consejodeamigoyprimo:no ladelbloqueviejo,eraella.John, un
—Asíquetuprimeraclienttae,enamoresdeunaputa.Yamehapasado
yesunasco,acabasmal.Siempremal.Pagayfol a, punto.Porcierto, ¿y
tucoche?¿Cómohasvenido?
«Peroel a noesninguna...»,pensabaJohn,dubitativo.
—¡Eh,John!¡Eh!
—¿Sí?
—Tucoche...Tehepreguntadoquecómohasvenido.
—Vineandando.
—¿Tevasdeputasapie?Eresdeloquenohay.¿Tellevo?
yrecuerdosatumujer.
—No,prefierovolverdandounpaseo.Gracias,Fern.Buenasnoches,
Fernmiró concarade desagradoaJohnmientrassubíalaventanilla.
—Andayqueteden...
El coche se alejó.LamujerquehabíadejadominutosantesFern se
acercóaJohnyleechómanoa l paquete.
—¿Necesitasrelajarte?—lepreguntóla mujerdelabiossiliconados.
rastroJohnlde insultos.
e apartóla manoycaminóensoledad,dejandotras desí un
—AlmenosganéunospeluchesparaDoryenla casetadetiro —le
dijoMatthewconorgulloaRufus—.Vayamosadejárselos,seguroque
le gustan.
Rufus
corriócalvaatravéshastaalcanzarla sepultura,bañadayade
crepúsculoyrocíodesudor.
Matthewdejólospeluchessobrela tumba.
yaséqueestá en suderecho,peronodeja
—El tiposenos de ser...unachicadel
ha enamorado,Dory—leconfesóMatthew—.Sí,s
peronoa c a l e .í ,
niunpelo.Johnesdemasiadotontoy
SuprimoFerntienerazón.Vale,vale,parecebuenachica
sucederáperodesdehaceunosdíasel esfácilengañarlo.Noséqué mefío
si sonsuspensamientososucorazón...suelonoparaderetumbarynosé
Rufusmiróextrañadoantela románticaaseveracióndesuamo.
—Sí,Rufus,ya,yalosé.Unhombrecomoyonodeberíaleertanta
poesía,peroaDoryl e gustabatanto. ., ¿verdad,amor?
Capítulo16
—¡Quévenmisojos!
—Betsy...
—¡Chicas,Fernhavuelto!—exclamóBetsy.
Ninguna se volvió,permanecieronagazapadasentregintonics,ala
cazadeunpardemaduritospatéticos.
chaqueta—.¿Quét
—Dejaquetevea—dijoBetsysacudiéndolelassolapasdel
al tumujer?¿Ytusniños? a
—Tan insoportablesnotcomoe siempre—mascullóconsorna.
—Hacíamuchoque pasabasporaquí. .
—Necesitounacopa.
Betsy,ninguneada,le dejópasar.
—Gilipollas...—murmuróel a, recolocándoseel orgullo.
Fernparecíavivirundéjàvu.Pidióalgodebeber.
Noconocíaala camarera.Demasiadojoven.
—¿Fern?
Unadelaschicasserpenteóhaciaél.
Fernalzólhaa copasinmirarla.
—¿Qué sido de ti?Hacíatiempoyaquenosolvidaste.
¿Problemas?
inmutó.Lamujeracariciósuhombroydeahípasóal cuello.Fernnise
—Queteden...—dijoelladespechada.
batiBetsyabandonól a entradadellocalycaminóhaciaFernatándosela
tatransparentebajolaslucesdeesaeternaciudadnocturna.
—¿No hayningunaquetellamela atención?—lepreguntóBetsycon
interés—.Haygéneronuevo...
Fernseguíasinabrirla boca.
—Enserio,Fern,¿quéhacesaquí?
—AyerviaNipplesenundescampado.
Betsysequedópetrificada.Seacercómásaé
—¿A Nipples?¿A...nuestraNipples? l .
trago.—Asíes—afirmóFernmientras se tomabala bebidadeunsólo
—Y...¿quétal está?
Fernseencogiódehombros.
—Echóacorrer,sinmás.
—Oh,yaveo.Sentistenostalgia. .
nofueraporque echó correr.Desdeentoncesnodejodepensarl í enmismos
—¿Nostalgia?Quisefollármela.Podríahaberlavioladoa
—Eresunromántico,Fern—lesusurróBetsyaloídoalavezque el a. .i
estrechabasushombros—.Siemprelohassido.¡Otracopaparae ariñol.señor,
Tres horasdespuéselhígadodeFerndijobasta.Betsylellevóhasta
Julie!Lisa,¿puedesquedarteunratoenlaentrada?Gracias,c .
uncuartolibre yle tumbóenla cama.Mientrasle quitabaloszapatos
comprobóqueteníaunaerección.Betsylequitól
lentregemidos
ala cantidadqueleparecíaj u s t a . a carteraytomódeella
Despuéslebajólospantalones,lelevantó
camisaylomasturbóhastaqueeyaculósobresuincipientebarriga,
ebrios.Delbañocogióunrollodepapelhigiénicoyle
limpiócontorpeza.
Lodejóal í tiradoel restodela noche.
Buitre.Justocuandosedisponíaabajarlasescalerassecruzóconsujefe,
—Betsy,joder,sabesquetienesqueestarenla puertaparacontrolar
quiénentraynodejarquesalganadie.
—Perole dijeaLisaque. .
susitio?Cadaunaalosuyo.Ellachupa,túatiende.
—Lisatienelío. ¿Tengoquerecordartequetodavíatienelastetas en
—Pero...teníauncliente—dijoel a contemorsin darmás
explicaciones.
—¿Cuántohassacado?
Buitreextendiósumano.Betsydejóla cantidad.
—¡Joder!—exclamósorprendido.
EllaesperóaqueBuitrelocontase.Después,él seloguardósindarle
nisiquieralasgracias.
Betsyreprimiósusganasdedecirlecuatrocosasyselargó.Buitre
a aperturaseescuchó una puerta
caminóescalerasarribaypasóalladodeuncuartoconl
ligeramenteabierta.Atravésdel balbuceo que
le estremeció:
—Nipples,
nocor as. .
—¿Cómo?—sepreguntóBuitre,quenodabacréditoasusoídos.
Buitreentródeinmediato enel cuartoyagitóconbrusquedadaFern.
—¿HasdichoNipples? ¿Has dichoNipples?
varias.—Eh...—mascullóFernentreefluviosdealcoholyensoñaciones
—¿HablabasdeCharlotte?¿CharlotteNipples?
—¿Havuelto?—preguntóFernincrédulo,conunasonrisaabsurda.
—¡No,joder!Teestoypreguntandosi la hasvisto. .
—Eh...
malestar.
Ferngritócomounaniñaasustada,despertandodeinmediatodesuebrio
BuitrearrastróaFernhacialaduchayabrióel grifodelaguafría.
—Ahora,dime,¿hasvistoaNipples?de
Ferndescolgósucabezaamodo afirmación.
—¿Dónde?
—Esunadenuestrasclientas—mascullóconloslabiostemblorosos.
—¿Clienta?
—CongeladosPietro.
—¿Pietro?
—Comidacongeladaadomicilio...
—¿Quécoño...?¿Tienessudirección...?
puta.—¿Tútambiénlaechasdemenos,eh,cabrón?Echóacorrerla muy
—Quierosudirección—exigióBuitre.
—Teladaría,perosondatosprivados...
EsanegativanosentónadabienaBuitre,quepisoteóaFerncon
durezasobreelsueloempapadodel a duchahastaquerecapacitóensu
charcodesangre.
—¡Estábien,estábien!¡Tela daré!
Buitresedetuvo.
mojado.—Tengotodoslosdatosenla furgoneta...—dijoél, magulladoy
abajo,antela
EntoncesBuitresaliódelbañotirandodeélylolanzóescaleras
salaesanoche. presenciadelaschicasylospocosclientesquehabitabanla
intuyóquéestabasucediendoycorrióhacialaschicas.
hacialasalidaporlasgarrasdeBuitre.Susojoslodecíantodo.Betsy
BetsycruzóunarápidamiradaconFern,queeraarrastradootravez
—Creo queBuitrelahaencontrado—dijoe
—¿A quién?—preguntóotraentredientes. l a .
—ANipples...
Segundosdespués,Buitreentróconunpequeñopapelenlejaomano
ensangrentada.Elruidodeunmotordecocheseoíayaalol s. Las
regresaronasushistoriaseternasdeinfelicidad.
chicasdisolvierone
Buitreseacercóall gruposindecirnadamás.Miraronhaciaabajoy
a barraypidióunacopa.
—Not e vayas,Betsy,tenemosquecelebrarlo—expresóalegre
Buitre,quel
—Celebrar,¿elqué?
a tomódelbrazo.
—preguntóel a conunamueca.
—¿Nipples?Pero...Buitre,
—ElregresodeNipples.
nocreoqueel a. . quiera.
Buitre se sonriómientrasdabauntragolentoasuvaso. l, haciendo
—Betsy,¿dudasdemipoderdeconvicción?—preguntóé
ladrarsusnudilloscoronadosporbuldogsdeoro.
LaveteranaBetsynodijonadamásytomódeuntragosubebida.
Dejóel vasoysequedóahíquieta,hastaquesuamola dejómarchar.
Capítulo17
conCharlottecometióunerrori
l a manoapoyadaenl a
nfantil: abrirsinpreguntar.Pensabaqueera
John,oquizásLullaby,peroantesdelanzarunbrevesaludo,é l yaestabaa
puerta.Ellaintentócerrar,perounempujónl
venció.
—¡Lárgateollamaréala policía!
Buitreestallóenunacarcajada.
—¿Desdecuándoeresamigadela pasma?
CharlottepretendióempujarconímpetuperoBuitreentrósinapenas
esfuerzo.
puerta.—Asíqueahoravivesaquí...—dijoBuitremientrascerrabala
Después,diounospasosyechóunrápidovistazo.
—¿Estássola?
Charlottesecruzódebrazossinalzarla mirada.
—Teveoalgo. . descuidada.Nodeberíashaberabandonadotuhogar.
—¿Hogar?¿Unacasadeputasmihogar?Túflipas. .
Buitrellegóhastael despachodeCharlotte.
—¿Ahoratededicasalnegociodelaswebcams?
Charlottenosabíasa espaldaaBuitre;demasiadopeligroso.
peronoqueríadarlel i echaracorrerahoraquepodía.Estuvot e n t a d a . .
Permanecióalejadadeél,clavada enla entrada.
—Unajodidaputadeinternet.¡Veoqueestásbiensurtida!¿Noechas
demenoslasdeverdad?
Derepentesonóunestrepitosogolpecontrae
asucuarto.
—Perdona,Nipples,creo l suelo.Charlottecorrió
restosdelordenadorportátil. queseharoto—ledijoBuitrepisandolos
—Hijode. . —mascullóNipplesagachándosearecogerlaspiezas.
alto.—Éstaesla alturaala quemegustaverte—ledijoBuitredesdelo
temblar.Siguiórecogiendo,peroantesdelevantarseescuchóelsonidode
unacremalleradeslizándose.
Entoncesleescupió.Ellanoseatrevióacontestar.Comenzóa
—¿Recuerdasnuestraprimeravez?Vamos,Nipples,porlosviejos
tiempos.
Charlotteselevantóysedispusoas
haciaabajo. a l i
der dea l í , cuandoél
delpelo.Despuésla obligóaarrodillarse nuevoanteéltirandodee l a enganchól a
—Hagamosuntrato, Nipples.Vuelveymecorreréfuera.
Elfaloerectoseerigíaanteel a. Buitrenoeraunhombredepalabra.
Losabía.
—¿Nohaytrato?—supusoél ala vezquesacabaunapequeñanavaja
delbolsillo.
Elcentelleoafiladoal abrirlacegóaNipples.Buitretomóunodesus
mechonesyselocortómuydespacio.Despuésdejó caer l a lluvia de paja
negrasobree
—Abrelal a.
supene. bocaydi: «A»—dijoél mientrasle acercabala puntade
Charlotteseparóloslabios,quetemblabanamilporhora,asediados
pore l pánico.Entonces,él leciintrodujosumiembroenl
violenta.
Buitrelanzóunsuspiro.
Ellarecordósuregustoá do. . yle vomitóencima. a boca,demanera
—¡Mehaspotadoenla polla!¡Mehaspotadoenla polla,putazorra!
—Yonoq u i s e . . —sedisculpóe l a arrastrándosehacial
—¡Me hasjodidomiszapatosde500lágrimas!¡Puta!—legritó a salida.
pisándolaenelhombro.
Elgolpebruscolatumbófrenteaél.
—¡Límpialos!
. De labatasacóunpañuelo.
bilisEllasequedómirandol a pieloscuraybril ante, ahoraempapadade
—No...—suplicóe l a .
—¡Con lalengua!—exigiófuera de sí.
Charlottehizocasoomisoeintentólimpiarlosconel pañuelo.Al e
hacerlo,Buitrelepisólamuñeca,atrapandosumano,yconelotropiel
comenzóasalirsangreaborbotones.
lanzóunapatadaalacara,dejándolainconsciente.Delanarizle
Despuéssemasturbósobreel a, inmóvil.
—Tellevaréarastrassiesesoloqueq
gemidoslibidinosos,mirando
gusta,queset
echasdemenosesto...
Charlotteregresaba uieres. . —mascullabaentre
al techo—.¿Eh,puta,eh?Esloquete
e corranencima,¿eh?Teconozcobien,Nipples.Séque
repente,vioaalguiena desusueñoforzadoentreimágenesconfusas.De
unaspalabrassecas: otroladodela puerta.Alguienquepronunció
l
—Largodeaquí.
Buitre se detuvo.eres
—¿Quiéncoño tú?—preguntó él achicandolosojos.
—Guárdateel «arma»ynohagastonterías.
Alverquenobromeaba,enfundóel falo.
—Lullaby...—balbuceóCharlottedesdeel suelo.
ropajes.Parecíaseguradesuspalabras,apuntándolepordebajodesus
—Lárgateynovuelvas—leaconsejóla ancianaaBuitre.
sobrelamesa.Buitrelomiródereojo.
Enesemomento,elteléfonodeCharlottecomenzóasonar.Estaba
—¿«John»?—leyó
—¡He en l a pantalla—.¿Estunuevochulo?
conel
dichoquetelargues!—insistióLullaby,
alpechodeBuitre. cañónenfilado
—Tranquila,abuela.Vineahablardenegocios,sóloeso.Esperoque
enoseréyoquienlahagaentrarenrazón.
l próximodíaestémásreceptiva.Miofertaesbuena.Detodosmodos,
Entonces,sedirigióhaciael a congestoamenazanteysoberbio:
—Yte aconsejoquenohuyas,porquesabesquetardeotempranot
demenos.Demasiado.Sabesbienquesoytuúnicasalida.
volveréaencontrar.Tehasfolladoademasiadost íos queteechanmuchoe
Charlottenodijonada.Lospasosalejados
—Noleescuches,Charlotte.¡Largo!
lugarle dieronunatreguaasuangustia. deBuitreabandonandoel
Lullaby se cercioróde cerrar bienlapuertaantesdedescubrirsu
arma:unmangodeparaguasmásviejoquee
El l a .
teléfonosonó otravez.Lullaby entró alcuarto,locogióylodejó
caerenlasmanosdeCharlotte.Despuéscomenzóallevarselaspiezas
rotasdelordenadorsinauxiliaralajoven.
—Más
iluminada. floresyalgunasabejas. . —sedecíala ancianaconla mirada
Charlotte,conla manomagullada,miróquiéneraydescolgó:
—¿John?
Capítulo18
Lapuertaestabaentreabierta.Johnlaencontróenelsofá,hechaun
pequeñoovillodenada.Estabaoscuroyencendióla luz.
—Apaga,porfavor.
Johnasílohizo.
haciae—¿Quésucede,Charlotte?¿Hapasadoalgo?—preguntócaminando
l a.
—Nosoyunabuenacompañía,John.Amiladocorrespeligro.
—¿Peligro? No locreo—dijoextrañado—.¿Eresunaespeciede...
vampirooalgoasí?
Charlottesonrióunsegundo.
—Hablo en serio. Teharías un favor si mequitarasdeturuta de
reparto.Élsabetunombreyesonoesbueno.
—¿Quién?
—Buitre.
—¿Buitre?¿Quiénsellamaasí?
dije,—Dejadehacerpreguntasylárgate—ledecíaMatthew—.Telo
Rufus,estachica no traeránadabueno...
—Buitrees...unalargahistoria—dijoellaagazapadaensus
recuerdos.
—¿Unalargahistoria. .?
Johnencendióeltelevisorconel mandoadistanciaycomenzóa
—No echannadainteresante.Tengotiempodeescucharte.
pasarcanales.Cansado,pulsóelbotóndeapagado.
Charlottesegiróhaciaél, perpleja.Despuésrió:
—Note pegannadaesasfrases.
salón.Johnsealegróal verlareír. Podíaversusonrisaenla penumbradel
—Tementí—confesóel a.
—¿Mementiste?¿Enqué?¿Note gustanlosfetuccini?
—¡No,meencantan!Merefieroala feria.
—¿Laferia?Uf. . Te
—Lopasémuybien. dijequeaquelsitio eraun asco,pero nolo
fue.Paranada.
—Todavíalorecuerdo como unsueñoraro,¿notepasalomismo?
Charlotteseencogiódehombros.
—Ojalátodoslossueñosfueranasí—expresóel aaabrazadaas
misma—.Ahoranomedaríamiedoqueencendierasl í a
luzymevierasl
cara.
—¿Cómo?
Johnselevantóypulsóel interruptorsinmáspalabras.
—Diosmío,¿quiéntehahechoeso?—preguntóélmientrasse
acercaba.
Ellanoseatrevióamirarleala cara.
—Buitre.
—¿Buitre?
—Era...michulo—reveló
tras deshacerel nudodesugarganta.
—¿Tuchulo?¿Enserio?
—¿Túcreesquehabloenbroma,John?
Johnsesentóasulado,observandosunarizhinchada.
—Notienebuenapinta.Voyaporhieloala furgoneta...
—¡No,porfavor!—lesuplicóel a conla miradaperdida.
—Pero...
—Estoybien,John.Enserio.
Johnresopló.
—¿Porquéte hahechoesto?¿Hasdichoque«era»tuchulo?¿Qué le
debes?¿Dinero?¿Cuánto?Tengoalgunosahorros...
—No,John,noessólocuestión de
conceptodela posesión. Paraél somosdinero.Buitretieneunextraño
menosqueanimales.
—Puedoimaginarlo.
—No,nopuedes.Porsuerteparati, nopuedessaberlo.
Johnencontrabamiedoensumirada,ensusgestos.
—Erasuniñafavorita,comoéldecía...Alprincipiomecostó
adaptarmeaesavida.Pero l a necesidadvencealascoyeldineroacalla
losescrúpulos.Siempresucede.Lohevistoenmíyenmuchaso
Princesastransformadasenbasura.Encarroña,comoéldecía. tras.
—¿Trabajabasenlacalle?
—No,enunpubmoteldemierda.
—¿Cerca deaquí?
—A variashorasencoche.
—¿Porquénohuistemáslejos?—preguntóJohn.
EstoybienconLullaby.Detodosmodos,daríaigual.Yamelodijoél.
—Avecesmelopregunto,perocreoqueésteesmiverdaderohogar.
Demasiadoshombresenamoradosdemicuerpo.Chivatosinfelices.
—¿Enamorados?
—¿Comprendesahoralovaliosaquesoyparaél?
—Pero,¿porqué?
Charlottesegiróentornandolosojos.
tú no—Perdón,noqueríadecirquenof
.. ueras. . valiosa.Quierodecir,que
—Sí,John,dilo, nodoy el perfil de puta.Losé. Pero,¿pagaríaspor
acostarteconmigo?
Johntragósalivaynoseatrevióaresponder.
—¿Haspagadoalgunavezporacostarteconalgunamujer?
—¡Claroquehapagado!—sechivóMatthewdesdeloalto.
Johnasintióala vezqueserascabala calva.
—¿Yerancomoyo?—preguntóel a, interesada.
Johnasintió.
—¿Conmástetasymásculo?
Estavez,Grassnernegóconlacabeza.
—¿Másguapas?
Charlottesepusoalgotensaanteel silenciodeJohn:
—¡Sí,venga,dilo,notecortes...!
EntoncesCharlotteselevantóysepusoaescasospasosdeél.
—John,nuncafuilamásguapanilamása
horas lta delreinodeBuitre.se
paraalmetérmela.Horasquesetraducíanencopas.Copasquese
Nunca,peroeralamejor.Eradiferenteyporesolosclientesesperaban
moríanpormicuerpodesnudo,para
pagaban milpormildesuprecioreal.Hombresquecadanoche
mismoquediezdemiscompañeras. lamerlosindescanso.Yovalíalo
—¿Porquétefuiste?
aparcarmividaenestelugar.Escapé,sinmás.
—Mecansédeserunasimplemarioneta.Ahorrélosuficientepara
—¿Buitrenotepusotrabas?
Novalen nada,perofuera deesoal íjamás.Hacensuvidaahí,son
unodeverdad.
despojos. Buitreles hace creerque
valeninclusomenos.Esungranpsicólogoynoscobramuchomásque
—Ningunadesusputasabandona
—¿Ytucasonoeradistinto?
—Hayalgoquemeliberabacadanoche.Algoquemehacíapensar
paranovolvermeloca.
—¿Elqué?
—Eso—indicóCharlottehaciendoungestohaciaunaestantería.
—¿Libros?—preguntóél.
—Cuentosinfantiles—matizóella—.¿Recuerdas?Medoblastela
esquinadeuno.
Johnachicólosojos.Ellasonrió.
había en ofrecerteunarealidaddemasiadopalpable,inclusol
fantasíaesdemasiador
desembocan eal. YyonoqueríapisarelAlsueloenelqueme
—Nuncahesidoamigadelaslecturaslargas. final todas a
en paz.tocadovivir. Deseabaflotar enunanubeypoderleeryleeryle r. .
JohnobservóelpasodeCharlottehaciala estantería.Deentretodos
eligióunlibroylohojeó.
—¿Teleíancuentoscuandoeraspequeño?
—Supongo—dijoJohn.
—¿Nolorecuerdas?
Johnseencogiódehombros.
—Yorecuerdoperfectamentequeno—confesóella—.Deberías
hablarcontuspadresypreguntárselo.
—Hace muchoque no habloconel os. No entenderíanaquéviene mi
pregunta.
ellos?—Seguroquesí—afirmóel a cerrandoel libro—.¿Tellevas mal con
—No,essóloque...nosoyunhombremuyapegadoala familia.
—¿Yporesonohasformadouna?—preguntóel a.
—Yo...
—Perdona,John,meestoymetiendodondenomellaman.
Charlottesequejódeldolordesunariz.
—John...
—¿Qué?
—No mehaspreguntadoporquéeradiferenteal resto.
—¿Tengoquehacerlo? no
—¿Note interesasaberlo?
—No,noeseso.Essóloque...
megustahablardeesostemas.
—Perote gustabapagarporsexo.
—Sí,pero. .
el resto.—Necesitoquesepasporquépagabanpormídiezvecesmásquepor
Charlottesedesabrochó el nudodesucinturón.Apuntoestuvode
liberarsedesubatayquedarsedesnudafrenteaJohncuandoéstese
levantóparadetenerla:
—¡Nolohagas!
Ellasedetuvo.
—¿Porqué?—preguntóextrañada.
—Noquierosentirlomismoquesintieronellosal verte.
CharlottesequedóprendadaenlaspalabrasdeJohn,temerosas,
sencillasysinceras.
—Serámejorquebajeapore
desparpajo para cambiar de tema.l hielo. . —añadióél sinmucho
—John—dijoel a antesdequeél bajaseporlasescaleras.
—Dime—dijoél girándose.
—Ten...,tencuidado,porfavor.NomefíodeBuitre. .
Johnhizoungestoafirmativoacompañadoporunabrevesonrisay
continuósucamino.
Muydeprisa,Charlotteseacercóala ventana.Observódesdeloalto
ycontuvolarespiración.John seacercóeneasufurgonetay
quedóquieto,pensativo.Demasiadotiempomeditando.Golpeól l a abrió.Se
a chapa
conrabia.Entonces,decidido,semetió l vehículo ycerró la puerta.
Charlottesuspiró,desangeladaantelamudadespedida.Unasonrisa
comprensivasurgióensucaramagulladaycorriól a cortina.
Entoncescaminóporelsalónarrastrandolospies,singanasdenada.
Respirósilencioysoledad.Soledadquehechizabasucorazónyl a
invitabaal desfiladerodelaspenassinsolución.
Peroderepente,l
ladoestabaé l , a puertaseabriócomoporartedemagia.Alotro
conunabolsadehieloenunamano,unacajadefetuccini
enla otrayunaspalabrasquedespertaronsuánimo:
—¿Cenamos?
Capítulo19
pensamientosnidesucorazón.Cadatarde,despuésdetrabajar,acudíaa
JohnnoborróaCharlottedesurutadereparto.Tampocolohizodesus
losrecibíacomobesosquenuncasedaban.
deseaba.SuspequeñosinsultosresultabancariñososensuslabiosyJohn
verlayellayanoseatrevíaahacerseladuraniaseralguienqueno
laspalabrasresidíael poderdesuamistad. Peronoimportaba,porqueen
—Charlotte,deberíasveniramicasa.Allíestaríasmássegura.
—NopuedodejaraLullabysola,John.
¿No tedioningunafecha?¿Algúnplazolímite?
juegos.—Perosabesqueespeligrosoyqueuntipoasínoseandacon
—Noes suestilo.
—Yaveo.
—Notemas,Lullabysiempreestaráamilado.
—Yyotambién,Charlotte.Note dejarésola.
Derepente,losaltavocesdelnuevoportátil zumbaronestridentes.
—Menudocacharromehasconseguido—leincrepóCharlotteentre
risas—.¿Vescómosuena?
—Eslomejorquehabía
pesaroso. enel almacéndePietro—sedefendióalgo
—Bromeaba—ledijoconunguiño.
—Ajá.
—¿Esunclienteelquellama?
—En
Johntomóaireylosoltó:
serio,¿porquénolodejas?
Charlottesegiró,apuntodeiniciar la videoconferencia.
—John,nomedigasloquetengoquehacer.Estonotienequever
nadacone l mundodeBuitre.Nada.
Johnhizounamuecadesutil comprensión.
—Esdinero.AyudoaLullabyamantenerel edificioenpie. .
—Comoquieras.Estutrabajo.Teesperofueradelcuarto.
Charlottesuspiróalavezqueél cerrabala webcam,Johnimaginabaun
escuchabacómotecleabayhablabaporl a puerta.Mientras
futurojuntoaella.
—¿No hacemuchocalorhoy,Rufus?—preguntóMatthewmientras
seabanicaba con unperiódicoviejo.
El perroarrastrabala lenguayasintiódesplomándoseen e l
en se suelo.
—Desdequepiensatanto el a le recalientanlasneuronas—le
informóasuperro.
Entoncesentraronenla casayMatthewsedejócaerensusil ón.
Tomóelmandodeltelevisoryseleccionóelcanalsueños.
—Mírale,siemprepensandoenlomismo,Rufus.Notieneremedio.
Estácolapsandotodosloscanales.
neuronalquelesaledelacoronilla Creocomoquedarédebajal
Matthewobservóla escenaeneltelevisor. sigamosasí. a antena
—ADorylehubiesegustadomuchoestenuevos
quiereaGrassner».¡Quéingenuoese l pobre! erial: «Nipples
En lapantalla,CharlottecorríaatravésdeunpradoyJohn,comoun
tontoenamorado,seguíasuspasos.Ellareíayreíahastaqueé l la
alcanzaba.Después,sobrel
—Siemprelomismo,estechicodeberíaleermás.Pasodevere
a hierbase. . l
o, es repugnantetantobesoytantababa.
rporlacasa.Seacercóalcuartodebaño,dondehabíaun
estJohnestabaalosuyo,entresuspensamientoscalientesycaminando
deaumentoparamaquillaje.Seobservómuydecerca. pequeñoespejo
—Miraquesoyfeo—sedijoasí mismo.
—Menudodescubrimiento—mascullóMatthewapagandoel
televisorconcaradeasco.
PordetrásaparecióNipples.
eres?—¡Hola!—exclamósimpática—.¿Quéhaces?¿Viendolofeoque
—¿Yasehasterminado?—preguntó é l disimulando.
os pasaalostíos?
—Sí, hacorridoen cero coma.Hasidoquitarmelabata,corriday
desconexión.Yanoaguantannada,¿qué
John se encogiódehombros.
—¿Quieresuncafé?
—Claro—dijoél.
—Perfecto,voyponiendola. .
—¿Soymuyfeo?—interrumpióJohn.
Charlottesequedóquieta,despuésnegódemanerarápida,disimuló
conunasonrisaysediomediavuelta.
—Charlotte,espera.
—John,aver,noinsistas. ¿Quéquieresquete diga?¿Loquesientoo
loqueveo?
—No,nohablabad
—Estásde e. . Yosóloquería. . invitarteasalir. Atomarun
café,perofueradeaquí.
coña,¿enunbar?
Johnasintió.
—¿Conestaspintas?—preguntóel a.
—Vestidaconropa.Sinl a bata.
—No sé. ., meda miedosalir aplenaluzdeldía.Nocreoquesea
buenaidea.Lagente...,yasabes,demasiadoshombres.
de aquí.—Noesdenoche,nocorrespeligro.Vayamosaunbarquehaycerca
—¿Cómodecerca?
—Muy,muycerca.Ala vueltade la esquina.Hacencafédelbueno.
Charlottesequedóboquiabierta.
—¿Notegustami café?
Johnsonrióycontestó:
—¿Quéquieresquete diga?¿Loquesientooloquepruebo?
—¡Toma,toma,toma!—exclamóMatthewdesdel
¡Chúpateésa,Nipples!
Charlotterecibió a calvadeJohn—.
suspalabrasdebuenaganaysoltóuninsulto
cariñosoantesdedecirquesí.
Todavíanosehabíapuestoe l
sentababienl a solcuandopisaronl a c a l
luzdoradadelatardecer.Sehabíaenfundadounose . ACharlottel e
—¿Dónde es? —preguntómirandoa
mismocolorocultabasucuerpodelgado.
vaquerosviejosyunaszapatillasdedeporteblancas.Unablusadel
unladoyaotro.
Juntoscaminaroncalleabajo.Johnesbozabaungestodeorgullo
—Poraquí—dijoé l.
caminarjuntoae l a . Encambio,Charlottemirabacontimidezsupina por
haciaabajoypaseabadandopasitoscortosyrápidos.Parecíatener
muchaprisa.Johnprocurabaseguirsupasoperolecostaba,obligándole
adarzancadascadavezmásgrandesparanodarl
persiguiéndola. a sensacióndeestar
—Charlotte,notanrápido,te haspasado—dijoél paradoenla
esquina—.Esaquí.
—Oh,oh,claro.Perdón.
JohnabriólapuertadelbarydejóqueCharlottepasaradelantedeél.
el aSehabíaperfumadoyJohnflotóenl
lereprendióalolejos: a fragancia.Enel sueñoetéreo
—¡Vamos,John, nome dejessola!—lechistóenvozbaja.
—Voy,voy.en
hombreespigadoquenilosmiróalacaralestomónotamental,sinhacer
Sesentaron unapequeñamesa,rodeadosderuidosdebar.Un
nisiquieraamagodeescribirensulibretil a manchadadegrasa.
—Pues,quéquieresquete diga,John—dijoCharlottedandoun
sorboasutaza—,micafépocotienequeenvidiaraéste.
—Esverdad.
—¿Entoncesparaquécoñohemosvenido?
—Nolosé—dijoJohn—,porhaceralgodistinto, supongo.
—¿EnlascasasdeLullaby?Paso...medamiedo.
—Podríamoshabernosmetidoenlasotrascasas.
Charlotterió.
—¿Miedo?Siesgenialpodervivirsusvidas.Sush
—Lo cuentascomosi fueralo más normaldelmundo. i s t o r i a s .
—Bueno,enrealidad,nohaymuchadiferenciaconloquehace
restodela gente.¿Quiénnohaimaginadoalgunavezserotro? el
—Ya,perounacosaesimaginarloyotramuydiferenteesque
suceda.Charlotte,digasloquedigas,esraro.
Matthew
—Puesmenosmalquenosabequeestamosensu cabeza
entrecarcajadas—.Claro,quetambiénesraroquemijardínsea —masculló
sucalva.
Rufusladróamododerisa.
ejemplo.¿Quésentidotiene?
—John,loqueesraroesla vidaensí. Estelugarapestoso,por
bien.—Creo quelagentevieneaquíatomaralgo,ahablaryapasarlo
es tu
—Vale, tuteoría,John.Ahoraobservaa
cómoserasgaelsobredelazúcarantesde alrededor.Muchos
estánsolos.Hojean el periódico y disfrutanecharde tonterías
sucontenidoenelcafé.
comoescuchar
—Esqueabrirsobresesgenial—argumentóJohn.
—Exceptocuandosabesquévasaencontrardentro.Entoncesse
convierteen...aburrido.
Johnasintióconla cabezabailandosobresushombros.
—Hagamosunacosa—propusoCharlotte—.Concentrémonosen
unodeesossobresyhagamosquedentronohayaazúcar...
—Yolohago,peroyatedigoquenovaafuncionar.Esto
edificiodeLullaby. noesel
—¡Un pocodeilusión,hombre!—exclamóella—.¡Túmehashecho
venir,asíqueahoraapechugaconmislocuras!
sobre.—Vale,vale,comoquieras—dijoé l apartandoel café—.Elige
Charlotteoteó el firmamento de labarradel bar.
—¡Ésedeallí!Aquelhombre
quecuandoloabraencuentre... notardaráenabrirlo. Vamosahacer
—¿Mariposas?—propusoJohn.
—¡Mariposas!Esoes.
Johnresopló.
—Vamos,ala detres,piensayconcéntratemucho,mucho,mucho.
Piensaenmariposas,decolores,degrandesa las, preciosas,enormes,
luminosas...
—Lohago,lohago...—dijoél—.Aunquetampocohevisto
demasiadasmariposasen mi vida. . lo
—¡Callaysigueconcentrado!Alláva,
espectáculod tieneentresusmanos.Lo
estárasgando,loestárasgando...Prepárateparacontemplarun
e. .
Elazúcarseahogóenel café.
—...azúcar—dijoel a, congestoapagado.
Johnacudióensurescate.
—No,Charlotte,¿cómovaaseresoazúcar?
—John...,esazúcar—repitióresignada.
Charlottesemuriódelarisa.
—¡No!¡Esmariposaenpolvo!
—¡Perosi esblanco!—exclamóCharlotte—.¡Metimas!
—¿Yo?¡Jamás!
Despuésdelasrisas,Charlottesedirigióa
John:
—Graciasporaguantarmistonterías,John.
—Hasidodivertidoseguirtufantasía.
—Nomereferíaaesto,sinoatodoengeneral.
—¿Atodo?—preguntóJohnapoyándoseenel respaldodesusil a.
—Sí...,atodo.Eresunabuenapersona.Buenadeverdad.
Johntomósutaza,bebióysequemóla lengua.Todoparadisimular
sutimidez.
—Gracias—respondióél mirandohaciaotrolado.
—John,¿porquéapenasnosmiramosalosojos?
—No sé...Faltadecostumbre,miedo...
—Vamos,mírame.
Johndudó.Ellale detuvoporlasmanosantesdequecogierala taza
otravez.
—John,porfavor.Amítambiénmecuesta. .
Entoncessusmiradasseunieron,formandounacadena
inquebrantable.
—Noeres
feo,John.Paranada.
—¿Losientesolopiensas?—pretendióbromearél.
—Lopienso,losientoylocreo—aseguróellaconfirmeza.
—Charlotte...
—Dime.
—¿Creesquetúyyo. . podríamos...?—preguntóél conla boca
pequeña.
—¡Vamos,dilo!—legritóMatthew.
—¿Podríamos...qué?—leanimóCharlotte.
—¿...serpareja?
unasonrisa.
Charlottecontuvol
quedóseca. AJohnselaerespiraciónyexhalóunsuspiroacompañadode
hizounnudoenel estómagoyla lenguasele
—Sabesquenoteconvengo—dijoel a sinapenassepararloslabios.
justiJohnidentificóesaspalabrascon«mejoramigo».Charlotteintentó
ficarse:
—Corres peligro ami lado.Temoque te hagandaño.Te mereces
algomejor.
—Peroyo. . quieroestarcontigo—afirmóJohnperdiendootra vezel
contactovisual.
piensas.—John,piénsalo.Nosoymásqueunaputadewebcam.Túmismolo
—Puedescambiardevida.Trabajaren. .
—¿Endónde,John,endónde?
—Bueno...puedohablarconel señorPietro.
—Nojodastuvidaporarreglarlamía.No.John,tengomiedoa
cambio.Notengoestudios.Medapánicos a l i r al a c a l e , lme l
enfrentarmea
sobraconlostíos.Esdinerofácil.YayudoaLullabycomoella
compañeros.Paramíessencillohacerloquehago,tengoexperienciade
mundo,trabajarcomotú, enunlugarcutre,conmalsueldoypeores
ayudaamí.
—Es dinerofácilquenote hacefeliz, Charlotte.
—¿Québuscamostodosenestavida?Lágrimas.Esloquemás
deseamos.Llorar.
—PeroCharlotte,¿acaso
verdad,sindinerodepormedio?conocesaalguienqueseacapazdellorar de
—¡Quéimportaeso!¡Todossabemosqueesimposiblel
—¿Tan l o r a r !
imposiblecomoconvertirel azúcarenmariposas?—
argumentóJohn.
—Muchomás...—sentencióel a sinmásganasdehablar—.
Anochece,tenemosqueirnos.
lasombra.
Enelcaminodevuelta,laslunasllenasiluminabanelasfalto,fríoen
—Alfinalnomerespondiste...—lerecordóélcontimidez.
lil os tristes dela ciudad. la deJohnypasearonjuntosbajolos
faroCharlottesonrió,uniósumanoa
—¿Todavíaconeso?Estásloco. .
Capítulo20
—Eresgilipollas—ledijoFern,a l volante.
—Loes,lo es—mascullóMatthewdesdela coronilla—.¡Llevo
pensándoloaños!
Johnmirabaporla ventanasinabrirlaboca.Poreloídoizquierdo
escuchabainsultosypore l derechounamolestavibraciónenel cristal.
—¿Follabien,verdad?—preguntóFern.
—Nonoshemosacostado.
cada más
—Dios,estoresulta vez patético.
Fernpisó más fuerteel acelerador.
—Noséporquét
tú e llevo.
—Eres el quemetisteaCharlotteenestelío.
—Tío,¿recuerdascómomedejóla carael tipoése,verdad?
Johnasintió.
—Noseránila mitaddeloquete hagaati cuandosepaquiéneres.
—Creoquellegaremosaunacuerdo.
—Joder,John,hablascomounmafiosodetres al cuarto.¿Aquién
pretendesintimidarconesaspintas?¿Dedóndecoñohassacadoesa
chaquetadeimitacióndepiel?
—¿Imitación?—sepreguntó—.
Putochino...
—Yatelahanvueltoacolar...¡Mira,allíes!
El—Losiento,tendrásquei
cochesedetuvomuyalejadodelclubdecarretera.
r desdeaquí,John.Paso
mujernovolveríaacreerselodelapalizayel robo. dequemevea.Mi
—Gracias,Fern.¿Meesperarás?
—Mediahoraymelargo.
piernasnol
Johncaminóhaciaelpubyentrótrastomaraire.Intentabaquelas
e temblasen.Betsyviosutimidezimplícitayseapartócon
unasonrisa.Asusespaldas,hizoseñasaunadelaschicasparaque
acudieraylerecibieraentreachuchonesypalabrasbonitas.
—Nuncate hevistoporaquí—lesusurróunadeellas—.¿Meinvitas
aalgoymecuentastuspenas?
Johnlaignoró.
ver
—Quiero aBuitre—dijosinquererentablarconversación.
—¿A Buitre?¿Paraquési puedesaberse?
—Negocios.
—¿Erescomercial?¿Vendescondonesopapelhigiénico?Esdelo
—dijoentrerisas.
quemásgastamosporaquí,ademásdelgarrafónquelesponemosaestos
Enesemomento,la camarerallenabaunvasodealgoquesimulaba
serwhiskydelcaro.
—¿Podríahablarconél?—insistióJohn.
—John.
—¿Tellamas...?
—John,yosoyLiuyt
importanteesr e digoquelomejorantesdeunareunión
elajar cuerpoye spíritu.
Liulehizo un guiñoyacarició
t e
su hombro.
—Ydespués,ya dirédóndeestáBuitre.
John dinerode su bolsil o.
sacó
—Notengotiempo,Liu.¿Puedesdecírmelo?
escondió
Liutomóeldineroantesdequeningunaotrapudieraverloyselo
Buitre. enel escote.Despuéshizoungestoindicandoe l despachode
encontrara l í dentro. Un tiporudo,untiposucio,violento,
Johncaminómuydespaciohacial conel pelo
a puerta. No sabíaquéseibaa
engrasadoyalgúndientedeoro,unasmanosfuertesyungestoa
amenazanteydedesprecioabsolutohaciatodoe ltivo, l.
l mundoquenofueraé
Llamóalapuerta,peronadierespondió.Sesintiómínimoalinsistir.
Endefinitiva,comoélmismo.
miradaaLiu,lehizoungestoye l a le hizoseñasparaqueabriese a
Volvióallamarynada,absolutamentenada.Segiróybuscóconl
despacio.
Johntragósalivaygiróe
unamiradarápidaa l interior.l pomo.Despuésempujóla puertaylanzó
—¿Per...perdone?
Nohabíanadie.Eneseinstante,Betsyestabaasusespaldas.
—Losbañossonal fondo,caballero.
Johnsegiróasustado.
—BuscabaaBuitre.
—¿Paraqué?
—Negocios.
Betsylemiródearribaabajoyescupióunasonrisa.
—Sehalargado hace unbuenratolo. .
JohnmiróconenojoaLiu,quea lejossehizola loca.
—¿Cuándovolverá?—preguntóél.
Betsyseencogiódehombros.
—Niidea,hasalidodecaza.
—¿Decaza?—preguntóextrañado.
verdad.—Esomedicesiemprecuandosaleahacernegocios...negociosde
—¿Quéclasedenegocios? un
comprararte?
—Chicas.¿Quéesperasde tipocomoBuitre?¿Quevayaa
—¿Ysabesdónde las busca?
—Enestaocasión,sí.
bil eBetsysequedócallada,esperandoalgo.Johnl
tes. e soltóunparde
—Setrata deunaviejaconocida—continuóel a.
—¿Conocida?
—Nipplesvuelveacasa.
Johnsequedópetrificado.
—¿Ni...Nipples?¿CharlotteNipples?
BetsyapenaspudoasentircuandoJohnatravesabae
cochedeFern,a l quepidióquearrancasedeinmediato.l campohaciael
—¡Tienesqueirtanrápidocomopuedas!
—Pasodecorrer,tío.
—Toma,te darécincomillágrimas, es todoloquetengo.
Fernsequedófascinadoanteaquelfajodebil etes. Ypisóel
aceleradorcomonuncaanteslohabíahecho.
—¿Aquévienetodoesto?¿HashabladoconBuitre?
—No está.CreoqueCharlottecorrepeligro—dijoJohnintentando
llamarlaporteléfono—.Mierda,nolocoge.
estásdando.
—Agárrate...yguárdateel dinero,capullo.Joder,menudatardeme
—¿Policía?Verá... lo
Fernlecogióelteléfonoyselo colgó.
tusl—No,no,no,John,yocorro quetúquierasperono memetasen
íos, ymenosconlapolidepormedio.
—¡Estábien,perocorre,porfavor,corre!
—Rufus,agárratequevienencurvas...ynuncamejordicho—dijo
Matthewconelgestopreocupado.
Capítulo21
Saltódelcocheaescasosmetrosdeledificio,antesdequeFernpudiera
detenerlo.Sindespedirse,siguiósucaminoacasa.
—Denada,capullo—mascullóFernmientrasvolvíaaarrancar.
e l
Johnsubiólasescalerascomoalmaquelleva diablo.Ensucamino
secruzóconLullabyquesalía abuscarbasuraymásbasura.
sucedido.
increpólaanciana,haciendosospecharaJohnquealgoterriblehabía
—¿Dóndeestabascuandoel a te necesitaba,eh,Grassner?—le
más leestremeciófuever uncharcode sangreen el pasil ao.casa. Ylo
queLapuertaestabaabierta,reventada.Igualqueelrestodel
—¡Charlotte!—gritódesesperado. la oscuridadde
sucuarto.Johncorrióhaciae
Laencontróagazapadaenunaesquina,temblandoen
l a.
Nadamástocarlasusmanossellenarondesangre.
—Estásherida.Tengoquellevarteaunhospital,te curarán...—dijo
tomándolaenbrazos.
Enesemomento,Charlotteparecióregresardelpánico.
—John...,hasvenido—balbuceóel a conunalevesonrisa.
—Losiento,Charlotte,losiento,deverdad.Yosóloquería. .
—¿Cómo?—exclamaronal unísonoJohnyMatthew.
—Acabéconellos,John.
—LoshombresdeBuitrevinieronyyo. .
Charlotterespondióalcanzandoel interruptordelaluz.Johnapunto
—¿Sushombres?
estuvodeperderlasfuerzascuandovioe
frenteaé l. l espectáculosanguinolento
acurrucándoseen
—Tuvequematarlos,John,tuvequehacerlo—dijoe
losbrazosdeJohn—.Noquisieroni r s el. Querían
a
llevarmeconel os.
Johnnoseatrevióaacercarsedemasiado.Peronohabíaduda,dos
cuerposmuertosdesangrándoseene l cuarto.
últimopedido.
—Aunolecortélayugularconel corta­pizzaquemeregalasteenel
policía.—Noquierodetalles,Charlotte,ahórratelos.Tenemosquellamarala
—¡No,porfavor!
—Tenemosquecontarlesloque ha sucedido.
—Hematadoadoshombres.Esohasucedido.
—Enlegítimadefensa,Charlotte.
—Peronadiemecreerá.John,quedémonos.Quierolimpiarestoy
olvidarmedetodo.
—No,Charlotte,estonopuedeseguira
Tenemosquesalir
—¡No,John!—chillóe sí. Volveránmásymás...
de aquí.Iremosaotroestado,podríamos...
l a aterrorizada—.No,porfavor,no
saquesdeaquí. . me
—Tranquila,tranquila—leconsolóala vezquesecontagiabadesus
temblores—.Estábien,Charlotte.Estábien.Nonosiremos...
Ellasollozabasinencontrarllantoyé
recomponer su miedo enhaycalma. l la abrazóhastaquepudo
—¿YBuitre?¿Qué deél?¿Lehasvisto,Charlotte?
—No—respondióentredientes—.Seguramentesehayalargadoa
verquenobajabansushombres,a l escucharlosdisparos. l
—¿Disparos?
—Unodeellosdisparóaciegasyalcanzóasucompañero,entonces
yomelancécone l corta. .
Charlottevolvióahundirseenlaescenareciente,sumiradaseperdió
enelrecuerdoybalbuceótemblorosa.
mejor—Tranquila,tranquila.Nopiensesene
al íasí. so. . Tellevaréalsofá,estarás
John lohizoydejódescansaraCharlotte.
Asusespaldas,Lullabyentrósinllamarnisaludar.Arrastróuno de
loscuerposhaciaelexterior.
sonabandiabólicas.
—Basuraorgánica—murmurabaLullabyentrerisas queaJohnle
—¿Quéharáconellos?—preguntóél.
—¡Seránmisguardianesdela entrada!—exclamóLullabyvictoriosa
entredelirios.
cuidarJohnnoquisoentendernadayperdíatodosutiempoyatenciónen
de Charlotte.
—¿Dóndeestabaella?—preguntóJohn.
—Habíasalidoabuscarbasura,yasabes.
—Siento no haberestado...
—Nopasanada.Novivesaquí,John.Nopuedoecharteencaraque
estuvierasdurmiendo entu casacuandoamíintentabanllevarme.
Johnsequedóensilencioynoquisoencontrarla miradade
Charlotte.
—Verás,Charlotte.Laverdadesque...noestabadurmiendo.
voz.Ellasegirólevementeyachicólosojos,extrañadaporel tonodesu
—Fuiaver. . aBuitre.
Charlotteseincorporó,perpleja.
menos!—¿Cómo?¿Estásloco?¡Siyovalgopocoparaél, túvalesmucho
—Peronoqueríaquevolvieraaport i . Pensaballegaraunacuerdo.
—¿A unacuerdo con alguienasí?¡Ya te dijequetudinerono era
suficiente!
—¡Eran 5000lágrimas!
—¿Cincomil?¡EsoescalderillaparaBuitre!
—Estodoloquetenía—explicóél.
—¿Peronoentiendesqueesoesloqueganaél enunanoche?
—Losé,pero,¿quéotracosapodíahacer?Túnoquieresi
nomequieresteneratuladotodo el día. . rte deaquí,
—...esonoescierto—sedefendióel a.
—¡Síloes!¡Siemprebuscasexcusascuandohablodenosotros!
—¿A mí?
—¡Tengomiedo!¿Vale?
—Aqueterminesodiándome,aquesientasloqueyosiento,aquelo
pasesmal,aquemimiedolotermineshaciendot uyo. .
—¡Siestamosjuntoselmiedodesaparecerá!
—¡John,Buitrevolverá,unaytodaslasvecesquehagafaltapara
llevarmevivaomuerta!¡Ledaráigualtenermeenuncuartocomiendo
personal!¡Ysitúestásenmediodelosdos,nodudaráenacabar
pollasocolgarmecomountrofeoensudespacho!¡Soysuasuntocontigo
también!Yeso,John,esalgoquenomeperdonaríajamás.
—Charlotte...
—Séunchicolisto ysaldemivida.
entreabiertasuplicabaserselladaconunbesoqueapaciguasesualma.
Johnlamiróensilencio.Encontrópavorensumirada,suboca
quieres.—Charlotte,sólosaldríadetuvidasi supieradeverdadquenome
Ellasonrióyvolvióarecostarse enel sofá.
—John,noquieroquetuvidaestéllenademiedoscomolamía. No
esnormalllegaracasayencontrartecondosmuertosenelpasillo.
—ParaesotenemosaLullaby—bromeóél.
Lullabyseacercó.
—¡Teheoído!—lereprimióaJohnconunacol eja.
—¡Ay!¿Peroustednoestabasorda?
—Noparamishijos.
Lullabysiguióarrastrandoel otrocuerpo.
—¡Ylasangrelafriegastú!—lecastigólaanciana,contono
exigente.
JohnsegiróotravezhaciaCharlotte.
—¿Sushijos? de
Charlotteseencogió hombros.
—Yahasoído,John—dijoCharlotteconungestogracioso—.Te
tocalimpiarmisangría.
—Entonces...,esosignificaque...¿quieresquemequede?
—No—dijoel a reteniéndoleconunfuerteabrazo.
Mientrastanto,en la carretera,Buitregolpeabaelvolanteala vezque
marcabaunosnúmerosensumóvilconfrenéticaviolencia.
Capítulo22
—¿Quéhaces?—preguntóJohn,asombrado.
—Cierroel negocio.
—¿Cómo?
—Loqueoyes,cambiodevida.
fuertes.—Peronotienesentido,parecíasconvencida,tusargumentoseran
—Losé,losé,peroheperdidoclientes. Nolesgustanlaschicascon
losojosamoratados.
—Pero, ¿y losgastos de la casa?¿Y Lullaby?
—Hepensadomuchoestosdíasatenordel
en a caídadeingresos.
—¿Tienesalgunaotraopción mente?
—Tú—dijoponiéndoleel ordenadorenlasmanos.
—¿Yo?
fatal—Sí,séquesuenaegoísta,séquesuenasuperficial,séquesuena
, pero. . si quierocambiardevidanecesitotuayudamásquenunca.
—¿Miayuda?
—Eh...,tudinero.
Charlotte
—Oh...
tratababienomal. erademasiadodirecta.TantoqueavecesJohnnosabíasi le
—Te hasquedado un poco...impactado,¿no?
todo—Yoveníadev
. . isita ymeencuentrocontodoesto.Tandirecto
—Puesespera,quehaymás.
—¿Más?
alto.CharlottesearrodillófrenteaJohn,quemirabaasustadodesdelo
—John,¿quierescasarteconmigo?
un: Nosuporesponder,le temblabatantoel cuerpoquesólopudosoltar
—¿Enserio?
Ellaselevantóydijo: de
note—No,escoña,peroasílo
parecerá tanfuerte. pedirtequete vengasavivirconmigo
—Eh...,¿hasdichoquequieresque...?
—Sí,John,quieroquete vengasavivirconmigo.Aquí.Haysitio
paralosdos,lopasaremosbien.¿Quémedices?
—¿Quequéte digo?Puesque...sí. Claroquesí.
—Noparecesmuyconvencido.
—Esque. a.lnosésirecuerdasquehacetiempotuvimosestamisma
conversación
—PeroJohn,yatrevéseytúme
hedichoqueheestado
dijiste que. .
estosdías,yqueahorasólobuscol a pensandomuchotodos
maneradeserf eliz. Hellegadoala
conclusiónqueteniéndoteatinonecesitomuchomás.Bueno,atiyatu
dinero.
John se quedósinhabla.Ellaparecíadecirlascosasrestando
importanciaalaspalabras,peroé l ahuecabasualmaparadejarmásy
le llenaban.
másespacioaesassensacionesquetanto
—bromeóella—.Bueno,¿quémedices,aceptas?
pobreza,cuandoencuentretrabajoyaveremossitambiénenlariqueza
—Prometosertefielenlariquezayenlapobreza.Porahoraenla
antes,te lojuro.Diques í , diques í , diques í . . Buscarétrabajocuanto
AJohnleentró
eralmejor,que
a la risa alveraCharlottetannerviosaeilusionada.No
imagentípicadelachicaquetantolegustaba,
tan perosu miradagris
estabataniluminadayparecía ilusionadaporencontrarunfuturo
personalidad.seenamorómásdeel a al descubrirlosinfinitosmaticesdesu
Asintióconunasonrisa.
—¡Bien!—exclamóCharlottelanzándoseasusbrazosybesándole
enlamejilla. le cogieranelteléfonopara
buscabaempleoyapenasconseguíaquede parejasinserpareja.Ella
decir:«No,sinexperienciaimposible,demasiadojoven,demasiado
Pasaronlosdías.Díasnormales,días
mayor...».Buscabaenlaprensa,eni nternet, perosuexperiencialaboral
eranosóloinexistentesinotambiénunsecretomuybienguardado.
ParaJohn,queCharlottenoencontrasetrabajo,nol
problema.Adorabaestarasulado.Eraunpequeñogransueñohecho
realidad.LanormalidadconlaqueCharlotteletratódesdeunprimer
románticaentreellos.Eras
momentolehizosentirsebien.Siempreexistíaunapequeñabarrera e resultabaun
util, peroahíestaba. Eso significabaque,pese
seralgo más queamigos,peronadamásqueamigos.
atodosucariño,nohabíabesosnitampocosexo.Sehabíanhabituadoa
—¿Comemos?—preguntóe l a.
Ellahizoungesto
—¿Quieressalir?
decircunstancia.
—¿Nosquedamosentonces?—preguntóJohn.
—Nosquedamos.
—Comosiempre...
—Nolodigasasí,John,parecequenotegustecomeren casa.
John,resignado,introdujocomidaprecocinadaenel microondas.
—Enserio,Charlotte,estaríabiensalir algúndíadeestelugar.
—Noseastonto,smi i lopasamosgenialenlascasasdelosdemás.
un
—Charlotte, ideadediversióndista
otro,buscandoenelpasadodel a pocodesaltar deunpisoa
vidadelosdemás.Haycines,t eatro,
parques...
—Losé,John.Perof u e r a . .
túenformayomedemadurita
túseas unamujerconmenopausia
algoraro,muyraro.
fvecinosdeabajo,yluego
otroque transformedeldelenunloco
ilat—Loentiendo.Peroreconocequesergayundíaene
elia yllegues sextoqueyosolitariopor
quintoy e rechace,es
lnotterceroyalla
aguantaalos
—Noestátanmal. ., ycorremosmenospeligro.
—Comodigas. .
—Note enfades,John.
—¿Ycuandoencuentresalgo,quéharás?Tendrásquesalir ala cal e.
—¡Losé, losé,nomepresiones!
Lacampanitadelmicroondassonó.
Comieronensilencio,pensativos,algoenojados,comprensivosconel
otroperodemasiadoorgullososcomoparareconocerlo.Después
ancianosdeultraderecha.
decidieronecharselasiestaenelprimerpiso,dondefueronunaparejade
—Senosestállenandoelasa sábanas,con
parabademoversebajo
—Losé,cariño,perol l portaldechusma—susurróé
caseraesl a quela espaldadolorida.l, queno
más,ahoranotendríamosqueestardealquilmanda.Sihubierastrabajado
er.
—Tegastastenuestrosahorrosenel bingo.Deberíadartevergüenza
exigirmenada.
—Aquellosfueronbuenostiempos.
—Sí,muybuenos.
—¡AndrewJohnston,dejadefrotartupeneflácidocontramisnalgas!
—exclamóe l a alavezqueserevolvíadeasco.
—Deberíair almédico.Mehanhabladodeunaspastil as azules. .
esta—Correaquetelasreceteytómatetodoe
l a ymedejasdormir enpaz. l boteenteroaversite
agitarse.
Elancianosediomediavuelta,resignado.Entoncescomenzóa
—Andrew...,¿teestás. . masturbando?
Andrewsedetuvo.
—¡Malditasea!Nosemelevanta. .
—Atuedadesmejor,muchomejor.Seguroquepensaríasentener
unarelaciónextramatrimonial con esatal. . Charlotte.
—Nomentesal diablo—lechistóAndrew.
—Sí,serámejor.LalocadeLullabyhaidovaciandoe
suculpa.Sepiensaqueessuh ija. l edificiopor
Andrewcontinuómasturbándose.
—Andrew,¿otravez?
—¿Cómoesposiblequesigas
Elancianonodijonadaysiguióalosuyo.
queestáspensandoenesafulana!
Elcolchónseestremecíahastaquee conlomismo?¡Eresuncerdo!¡Seguro
l timbresonó.Alotrolado
puertaLullabyexigíael pago.Andrewsedetuvoyselevantó. dela
—Lediréqueabandonamosel edificioel mesqueviene,Susanne.
—Venderémisjoyas,Andrew,¡noquieroquedarmeenla calle!
una—Yanohayjoyas.Además,erastúl
puta. a quenoqueríasviviral ladode
—¡Ynoquiero!Almenossaldréconla cabezabienalta.
JohnaAndrewsecruzódelantedelespejodel
lde otrolado. a entradayvioasureflejo
lado—Cabrones...—dijoJohnal
lapuerta. a vez queescuchabadisparosalotro
Corriendoacudióal
deformadaporlalente. a mirillaysequedó de piedraalverla escena
Susannecruzóel pasilloponiéndoseunabataligeraatadaala cintura.
—Esosdisparos,Charlotte...
—Tranquilo,sondisparosdelpasado,John.Recuerdos.
—¿Pero...?—unescalofríorecorrióaGrassnerporlaespalda.
—Lohizopor
Charlotteasintió.
mí,noselotengasencuenta...
Capítulo23
—John,noletengasmiedo—dijoCharlotte,sentadaene
casamientrasé l caminabanerviosodeunladoaotro. l sofádesu
—No le tengomiedo,Charlotte.Mepreocupanoconocerl
sóloeso.Yquel a realidadnoseatal. a verdad,
—Larealidadsiempreloes.
—¡Éstano!¡Esunapesadilla,dentroyfueradecasa!
Johnnoparabaquieto.
haciendoungestodedisparoconl
quétienequehacerparaarreglarlascosas.¡Pam,pam!—exclamóJohn
—Charlotte,¿PorquénopedimosayudaaLullaby?Ellasabebien
a mano.
Charlottecomenzóareírse.
—Noséquéte parecetangracioso.
—Tú,John.Estáshechounmanojodenervios.
—¡Loraroseríanoestarlo!
—John,Lullabyhacemuchoquedejóla violenciadelado.
—¡Normal,seacabaronlosvecinos!
—John,noeslaprimera
Charlottesepusoenpie.
vezquet
—No empiecesconlomismo... e lod i g o . .
—¡Sí,síempiezo!Yotelopedí,túaccediste,peronadiete obligaa
cumplirconnada,niconmigoniconlas
Johnpareciópensárselodosvecesyesoagrietól
ituación. . a confianzaque
Charlottehabíadepositado en él.
—Vete,John.Parasiempre,salporla puertayvuelveatucasa.Con
tuvidarealytusproblemasreales.Tedijequenomerecíal a penaperder
el tiempoporaquí.
Éllevantóla miradaparaencontraraCharlotteconungesto
comprensivo.
—Vamos,adelante,yoestarébien—dijoel a acercándoseala puerta.
actuar.Johnsefrotólafrente,cansadodepensar,cansadodenosabercómo
—Charlotte,¿noentiendesqueLullabyesuna...?
—Madre para mí.
—¡Peromatóport i !
—¿Qué madre noloharía?
—Peroesagenteeranpersonascomotúycomoyo.¿Acasotúeres
particularley?
perfecta?¿Todoelmundotepareceigualantelosojosdevuestra
—John...
—No,no,Charlotte,déjamehablar.Noentiendoqueestés
defendiendoaunaviejaqueloquehahecho esmatar un
personascon l a excusa defendertefrenteael os. grupode
de
—Peroel nolohizoconmalaintención... a
—¿Teestásescuchando?Enesteedificiohabíafamiliasenteras,
desdeabueloshastaniños,ye l a loshamatadoatodos.
—No,elladicequenoestánmuertos.
—¡Es unaloca!
—¡No hablesasídeLullaby,John!
—¡Nodefiendasloindefendible,Charlotte!Cualquierpersona
pocodesentidocomúniría ala policíaacontarlosucedido. conun
—Lapolicíanoencontrónada.Además,¿quiénibaacreerte?
—Losmeteríaenlascasasyalsentirlo que yosientodentrodeel as,
entraríanenrazónyencerraríanaLullabyparasiempre.
—Te equivocas—aseguróella—.Teencerraríanati. Paraellosno
sonmásquecasasabandonadas.
—¿Esocrees?—preguntóJohnconciertotonodeamenaza,
dirigiéndosealasalida.
—Noseráscapaz... enpaz!
con lapolicíaysaldremosdedudas—dijoél.
—Not
—Volverée loperdonarénunca.¡Déjala
—Lohagoporti, Charlotte. ¿No loentiendes?
Charlottenoquisoresponder,miróal sueloyesperóaqueJohn
cerraselapuerta.
—Gilipollas...—murmuróCharlotteenfadadaque,sinembargo,
caminóalaventanaparaversupartida.
Enel camino,Johnsecruzócon
Lullabyquetraía másbasura.
—¿Elfinal?Loca...—mascullóJohnconungestodespectivo
—¿Dóndevas,príncipe?Notardesqueelfinal estácerca.
atenderlamásal á delcrucedemiradas. sin
salir—«Loca»—rióLullabyentredientes—,medice«loca»e
ala calleconesosdosahífuera. . l quevaa
Nadamáspisarla acera, laspuertasdelvehículoseabrieron.Sin
mediarpalabradoshombres
conpasofirme.Apenas congestoagresivocaminaronhaciaJohn
lassombrasdeuncallejón. pudoavanzarunospasos,cuandofuearrojadoa
Charlotte,quelohabíavistotododesdearriba,corrióhacialapuerta
peronopudoa brirla. Enesemismoinstante,Lullabylahabíacerrado
conllavedesdefuera.Yparecíaestarrayandol a maderaal otrolado.
—¿Lullaby?¿Quéhaces?—exclamóCharlotte—.¡Ábreme,le
matarán!
sentencióLullaby.
—Sufreporél lomismoqueél sufreporti, te vendrábien—
—¡Lullaby,abrelapuertaporfavor!—gritódesesperadaCharlotte,
golpeandolapuertacontodassusfuerzas.
Entonces,corrióalaventanayla abriódeparenpar.Nohabía
posibilidaddesaltar.Muertesegura.
Lacalleestabaensilencio.Malasunto.
Sólolequedabaunaoportunidad.
Losdostiposestabanapuntoderajar lastripasaJohndespuésde
marcarletodoelcuerpoabasedegolpessecosconpunterasdeaceroy
puñosamericanos,cuandounodeellosrecibióunallamada.
—EsBuitre—ledijounoal otro,descolgando—.Jefe. .
Elotroesperóunossegundosconla navajaala alturadel
lJohn,cuandoelquehablabaconBuitrelehizoungesto
a mano. a barrigadecon
de negación
Johnsedesplomóensangrentadoene
la cejapartida.Elprimerocolgóe l teléfono.l suelo,vomitandosangreycon
—TuamigavolveráabajarselasbragasparaBuitre. . —lesusurróa
Johnantesdepatearleunpocomás.
—Te
Johnsehasalvadola vida—dijoelotroentrerilsaas, escupiéndole.
arrastróporelcallejónhastallegara desembocaduradel
mismo.DesdeelsueloobservóaCharlotteentrandoene lensangrentado
vehículojunto
alosdoshombres.Sumiradaperdidasecruzócone
deJohn. l i r i s
él—, —Chico,tienesmalacara—dijoLullabyqueaparecióaunpalmode
casi tantocomoyo.¡Quécuentomáshermoso!Laprincesa
atrapadapore l dragón.
Lullabyintentóayudarle.
—¿Quéprincesa?¿Quédragón?¡Nometoque,viejaloca!Necesito
unmédico...
queacabarconBuitre.
—Nonecesitasunmédico,sinoestarconel a, peroprimerotienes
—Llamaréalapolicía.Es lo quetendríaquehaberhechodesdeun
primermomento.
—Estásloco,losmejoresclientes de
uniformados.Nuncatefíesdelagente queBuitresonhombres
aparentalimpiezaybondad.
—¿Lodiceporusted,asesina?
—Yonomatoanadie,John.Sólorecolocolasalmasene
dondedebene star. l lugar
—¿Lasalmas?
—Venconmigoyte ganarástupapelenestahistoria.
—¡John,correala policía!—exclamóMatthew.
—¡Cállate!—leexigióLullabyalviejodelacalvadeJohn.
ter o—¡Mehavisto!¡Otravez!—gritóasustado,conRufusaullandode
r.
—¿Con quiénhabla?—preguntóJohn.
Lullabynocontestó
caminabadoloridoy contorpeza.Segúnsubíalasescaleras,Lullabydejó
yayudóaJohnaentrarenel edificio,que
caeralgunaspalabras:
—Nosoybruja,niasesina,nisiquierasoymala.
—Entonces,¿quées?
Al se
pasarporelpisodeCharlotte,John fijóenlapuertayachicó
losojos.Eranletras perdidasentrerayajosloqueencontró.
Capítulo24
LullabydejócaeraJohnenelsuelocomounsacodepatatas,despuésde
casihaberloarrastradoporel pasillohastael salón.
—Pontecómodo—ledijoacercándoleunas
e l i l a .
Johnapenaspudohacer intentodelevantarse.Lullabyencendió
unaviejaradioqueencontróenuncajón.Sintonizóuncanaldemúsica
coral,queprontoinvadiólostímpanosreventadosdelherido.
decía.Desdeelsuelopresenciabalosaspavientosdel
Laancianacomenzóahablar,peroJohnapenaspodíaescucharloque
a viejaacontraluz,
lanzandolasmanosalaire,enojada,conel gestopartidoentrela risa yel
desencanto.
—. —¿Tú laoyes,Rufus?—lepreguntóMatthew conla manoen el oído
¡Bajeesamalditamúsica,vieja!
John.EntoncesLullabysegiróenfurecidayclavósudedoen la calva de
—¡Cállesedeunavezyentreencasa!—legritóLullaby—.¡Estoy
explicandoalgoimportante!
—¡Apartesusuciodedodemíotendréque. .!
Laancianarióentredientesyunoshilil os debabassele descolgaron
desuslabiosagrietados.
—Lullaby...—gimióJohndesdeel suelo—,¿podríabajar. . la
música?Noconsigoentenderlabien,meduelenlosoídos.
LullabyseacercóaJohnylesusurró:
—Yahe terminadodecontartetodoloquenecesitassaber. .
—¿Cómo?
—Lotienesdentro,yyanopodrásdejardehacerloquee l corazónte
dictamine.Turazónhavolado.¡Estáslococomoyo!
EntoncesLullabyse
queapagódeinmediato.levantócarcajeándoseycaminóhaciala radio,
Elpitidoinfinito reposabaenel tímpanodeJohn.
Lullabyestabarebuscandoentre
Aduraspenasconsiguióponerseenpieysedesplomóenlas
loslibrosdeunaestantería.Éll ailmiraba
a.
dereojo,rodeadodepenumbra.
encuadernacióndeshilachada.Sinmáspreámbuloslodejócaerene
regazodeJohn.
Lasmanosdecrépitasdela viejatomaronunlibrodetapasgruesasy l
«Escritop o r . . LullabyShilton»,leyóensilencio.
—¿Lo escribió. . usted?
—Asíes,joven.
—Pero...notienetítulo.
—Todavíaestoybuscandounoapropiado.Ensuspáginasencontrarás
todoloquenecesitasparaactuar.
Johnabrióel libroycontemplóalgoquele dejóperplejo.
—Pero...yono. .
—No,ahorano,John.Debesrecuperarlasfuerzas,conseguirtu
armaduraycorrerasalvarla.
Conmiedoycautela,Johntomódeliantenueoscuridaddel
revólver.Elcañónbrillabaplateadoenl terior ahuecadodellibroun
—Tencuidado,estácargado—leadvirtióLullaby. a sala.
Nuncahabíatenidounarmaensusmanos.Pesaba.
—¿Cargado?
—Estuespadayestáafilada.
Johndejól
acercóaé l. a pistolaotravezenel interiorycerróel libro. Lullabyse
—Nopuedo.Nosabríausarunarma.Medanmiedo...
—¿Estássegurodequererabandonar?
Sesentíataninseguroycontantomiedocomopodíaintuir la anciana
bajosulabiopartido.
—¿Laquieres?
Johnnorespondió.
—¿Esoesunno?
sangre.—¡Estoyasustado!¿Puedeentenderlo?—exclamóescupiendo la
quieres,elmiedoteayudaráasalvarla.
—Puedoentenderquetengasmiedo,peronoquenola quieras.Si
—Pero...¿cómo?Metiemblael cuerpoconsólotocarel arma.l
¿Cómovoyasercapazdeapuntar?Yyanohablemosdeapretare
gatil o. .
Lullabyrecapacitóyconunasonrisaseñalóla calvadeJohn.
—Tienesalguienquepuedeayudarte...
Johnmiróhaciaarribasinmoverla
cabeza.
—¿Conquiénhabla?
—¡No,viejachocha,yonopiensoenseñaraGrassnerausarun
revólver,bastantetuveyacuandoaprendióausarl a plancha,quecasinos
quemalacasa!
—¿Esoesunsí?—preguntólavieja con miradailusionada.
yno—¡Bah!—refunfuñóMatthew—.Peroqueconstequelohagoporé
porti. Rufus,trae la cuerda. l,
Rufusasílohizoyregresóconel a.
—Mevoydeviaje—ledijoasuperro.
Elchucholadróalegreyfeliz.
—Deberíasestartriste.
Rufussediocuentadesutorpezaylanzóunaullidodepena.
—Sí...,hasonadomuyconvincente—resoplóMatthew.
LullabyaplaudióladecisióndeMatthew.
—Prontocambiarásdeopinión—ledijoLullabyaJohn.
ElmagulladoJohnnoentendía el comportamientoextrañodel
anciana.Peroderepentecomenzóaentenderelporq ué. . a
—¡John!¿Meoyes?
Delsusto,Johnsecayódebrucesal suelo.
—¿Qué?¿Cómo?¿Quiénmehabla?
colgado—¿Not e acuerdasdemí?—rióMatthewmientrassebalanceaba
de lacuerda,alaaltura de suoído.
—¿Recordarte?¿Dedóndesaleesavoz?
—¡Detucabeza!
—¡Oh,no!¿Otraveztú?¿Eldela plancha?—recordóJohn—.Pero
esasvoces,¡noeranreales!Deliraba,sóloeso.Melodijoe l médico.
—Sí,sí, loquetúdigas,John.Elmédicosiempretienerazón.Pero
antesdequeacudasaé
cambiardeopinión. l tengoquecontartealgoquequizáste haga
—¿Algo?
—Algoquete hagarecapacitarsobretuvalíaytupoder.
—Notengoningúnpoder.Estoyherido,nopuedoapenasmoverme,
¿cómovoyasercapazdei r asalvaraCharlotte?
—Empezamosbien. . —mascullóMatthew.
col —¡Escuchatuvozi
eja. nterior, zopenco!—leexigióLullabyconuna
—¡Eh,vieja, nogolpeesal chicoquememaaaaato!—exclamó
Matthewvolandodeunladoaotro,comountarzánavejentado.
—¿Mivozinterior?—sepreguntóJohn.
—¡Sí,yo!Elqueahorat e habla.
—Perosinunca me habla¡pero
s. .
—Nomerecíala pena... ahorasí!
—¿Porquéahorasí?—preguntóJohn.
—Escucha...Llevoviviendotodala vidaentucabezayhetenidola
desgraciadepresenciartupatéticavida.
—Bueno,tampocohasidotan. .
—Sí,John,reconocequetuvidahasidomásquepatética.Desdee
colegiocone l malditoataquedelospiojos,ydespuéstusproblemas conl
muriótuautoestima.
general.Ytúnohacíasnadapormejorar,tedejabasmachacar,hastaque
elacnéytutimidezabsurda,quetealejabadelasmujeresydetodosen
—¿Yporqué
nomeayudaste?—lerecriminóJohn.
—Estabaocupadocortandoe
—¿El l césped.
—¡Tucésped?
pelo!
—Entonces,¿fuistetúel culpabledemicalvicie?
culpa!—¡Sí,peronoslibramosdeesospiojos!¡Mimujermurióporsu
—¿De quémujermeestáshablando?—dijoJohnagitandola cabeza
—.Creoquemeestoyvolviendoloco.
—Unamalditainvasióndepiojos.Esachusmaquenoteníadónde
queundía...acabaroncone
caersemuertallegóyformóguetosentretusmelenasgrasientas.Hasta
l a.
—Notieneningúnsentido. . en
desdeaqueldía,decidídejartecalvo
—Peronomequedéquieto.No.Losmatéatodos.Unoporuno.Y...
homenajeamimujer.
—Gracias,todoundetalleportuparte.
—¡Bah!Tuvidayaestabaarruinadaantesdequeyote dejasecalvo.
—¡Noloestaba!
—¡Síloestaba!
—¡Puess
¡Eresmivozi i nloestaba,tendríasquehaberhechoalgoparaayudarme!
—¡Notemerecíasterior!
quelofuera!
—¡Silencio!—exigió
—¡Sí,estutrabajo!
personales. Lullaby—.Dejadparaluegovuestrasrencillas
JohnyMatthew seesamar,
tranquilizaron. Cada más
despertaryqueDoryestéamilado.Yséque,pordesgracia,esono
tranquilo—.Séloque
—John,losdossabemosquelaquieres—dijoMatthewalgo
amardeverdad. díasueñocon
sucederánuncajamás.Porqueellayanoexiste,peroCharlottes
Piénsalo,nopuedesdejarquel e pasenadamalo. í.
quieretantoque seha sacrificadoporti.Volveráahacercosassuciaspor
—¿Sabes,John?—dijoLullaby—.Matthewtienerazón.Charlottete
elsimplehechodequetúconservestuvida.Havendidosufuturopara
salvarte.
Johnrecapacitó.Elcorazóncomenzóalatirlecadavez más rápido.
Derepente,todaslasinstruccionesqueminutosanteslehabíalanzado
Lullabybajoelmantodela músicacoralseiluminaronensumente.
palabrasenmiimaginación!
—¡Loveo,Lullaby,loestoyviendo!—exclamóJohn—.¡Tus
—Éseesmitrabajo...—susurróe l a con orgullo.
—Pero...elrevólver, no séusarlo.
—Ahíentroyo,amigo—leindicóMatthew.
—¿SalvarásaCharlottedelasgarrasdeBuitre?—preguntóel a con
airesgrandilocuentes.
Johnintentólevantarseperosólopudoalzarel revólverenel airecon
lamanotemblorosa:
—¡Estoyacojonado,perosí, loharé!
Capítulo25
«Unhombrequenoeshombre,
escalvoysinvalor.
Buscaunadoncella,
reclamasuamor.
Enunlugarlejano,
unbuitreoundragón,
retieneaunaprincesa,
quellorasinllorar...» de
—¿Peroquierescallarte
puestaenl unavez?—exclamóJohn,conla mirada
a carretera—.¡Medesconcentras!
Matthewestabaaparcadoconsuguitarraenel huecodela orejade
oído.
John.Detuvosucantinelayserecostóenlospelosquelesobresalíandel
—Estámullidito—murmuróMatthewconunbostezo—.Conduce
concuidado...
Habíanpasadovariosdíasdesdela últimavezquevioaCharlotte.
John,casirecuperado,apenaspodíaver por uno de losojos,queseguía
hinchadoyamoratado.
Al í, alolejos,la
neonesye l nieblacubríae
fulgortímidodel a l caminohaciael motel,queentrelos
luna,adquiríaunaspectot étrico y
peligroso.
John
decidióaparcaralolejos, máscercadela carreteraquedelpub.
Alfrenar,Matthewsesobresaltó:
—¿Qué?¿Cómo?
—Hemosllegado—lecomentóJohn.
—¡Perfecto!—exclamóentrebostezos—.¿Listo,chaval?
Johnsacódela guanterael arma.
—Compruebaquetengael seguroquitado—leaconsejóMatthew.
—Loestá.
—Sonseisbalas.Recuerda,sóloseis.
—Odioesenúmero.del Tan el las la
arenahacialaentrada
tierrahacíai
gordocalvomagulladoyarmadoentraríasegundosdespués.
Johnsaliódesufurgonetaycaminólentamenteporuncaminode
ntuir supresencia.Allídentro,nadiesospechabaqueun
local. sólo sonidode pisadasen
Betsysequedóblanca.
—¿Dóndeestá?—preguntóJohncongestoserio.
—¿Quién?—respondióel a clavandosusojosenel arma.
Johnachicólosojos.
—Muybien,chaval,muybien,estátemblando,esbuenaseñal—le
susurrabaMatthew.
Betsyhizoun
gesto.
—Arriba.Estáconuncliente.
Johnsiguiósucamino.Elrestodechicasdejaronsusfalsoscortejos
conotroshombresparaf ijarse enel desharrapadoJohn.Peroaquel
lo sabía.Todos
revólverle dabaunextrañopoderqueantesnotenía.Él
losabían.Subió las escaleras.
—¡Yotecubrolasespaldas!—exclamó
gatillodesuescopeta de mediocentímetro. Matthewconel dedoenel
—Gracias,peroenunlugarcomoéstesólopodrásmatarladil as.
dadl—¡Bah!¡Ladillas!¡Hematadopiojose
aUncara! con l triple degrandes!¡Ladillas,
largopasillo puertasquedabanalashabitacionesdelmotelse
presentóanteél.Unaauna,Johnfueabriéndolas.
hombresreaccionabanconinsultos,pero Al hacerlo,algunos l
verel arma,salíancorriendodespavoridos.tantoelloscomolaschicas,a
Sóloquedabaunapordescubrir.Giróel pomoyempujólapuerta
muydespacio.
deespaldasaé l. enla cama,conea bataquesiemprelacubría,
Allíestaba.Depie,apuntodequitarsel
l
Elclienteestabatumbado e l de miembroerectocubierto
hombros.Cuandosedisponíaadejarlatelacaer,élladetuvo:
porunagomabarata.Elladeshizo nudo sucinturónydescubriósus
—Charlotte...
Ella,nerviosa,segiróal instanteal escucharsuvoz.
—John...,¿quéhacesaquí?Penséque...
—¿Quiéncoñoerestú?—preguntóel hombredesdela cama—.
¡Lárgatedeaquí,gilipollas,llevomesesesperandoestemomento!
—Charlotte,apártate,porfavor—lepidióJohnconelarmaenalto.
—¡Esel motivoporel quetúestás
—¡No,John,essólouncliente!
aquí!
CharlottecorrióhaciaJohn.Seenganchóal brazoqueportabael
—¡Corre! —legritóCharlotte asu cliente. l armacomopudo.El
armaylaconsiguióbajar.
Johnestabatanrabiosoqueintentólevantare
hombrevioe
amenazadaysaliódeallícomoalmaque
l revólvereltiemposuficienteparasentirsuvida
preservativocomoúnicaprendadevestir.llevael diablo,conel
—¡Hayunhombrearmadoallíarriba!—gritabaelclienteno
consumadodeCharlottemientrascorríahaciasucoche.
—John,¿quétehicieron?—preguntóel a descubriendosusheridasa
mediocurar.
tact—No,noesnada—mintióé
o. l demaneratímida,enamoradodesu
—Tenemosquesalir deaquí,John.Subealguien—leinformó
Matthew.
Johnsegiródeinmediatoy miróal fondodelpasil o. Erandos
hombres.Ibanarmados.
istNoola,tardaronendispararnada más verle.Unadelasbalasreventó
pmarcodelapuerta.LaparejaseagazapóyJohnmostróe l cañóndelael
quesugiriópeligroaaquelloshombresqueseescondieronenlas
habitacionesaledañas.
—Notenemossalida,¡nosmatarán!—exclamóel a abajavoz.
—Saldremosdeaquí,note preocupes.
—Pero,¿cómo?
—Tengounplan—dijoJohnagitandola pistola.
—¿Sabesusarla?
—¡Claro!
—¿Desdecuándo?
—Noquierass
será aberlo. .
—Sí, lomejor...—mascullóMatthew.
Otrodisparoalcanzóelmarco.Traselimpacto,Johnseatrevióa
mostrarsefrentealoshombresydisparó.Elcañónestallóye
viajóalavelocidad l proyectil
loshombresdeBuitre. delrayoparaincrustarseene l cráneodelprimerode
—¡Lehasdado,leéhasdado!—gritóMatthewdandobrincos.
l todavíateníala esperanzadesalirconvidade
comounaamenaza,y
Elquequedabaconvidasintióaquelenfrentamientocuerpoacuerpo
atliría.dUndisparotancerterosólopodíavenirdeunverdaderoexperto
or, llegóapensar.
Echóacorrer,peroantesdedare
porlaespalda,escupiendosangrepor
precipitóescalerasabajoantes decaerleprimerpaso,unabalaleatravesó
de Buitre.
l pecho.Sucuerpoinertese
alospies
—Inútiles—dijoé l entredientes,tomandol a pistoladelmuerto.
Caminó al bordedela escalera.
—¡Nopodrássalir deaquí,Charlotte!¡Losabesbien,ésteestu
hogar!Esloúnicoquesabeshacer,reconócelo.Todost e queremos,¡ati
yatusecreto!
—¡Veteala mierda,Buitre!—gritóel a al otrolado.
—Charlotte,nomuerdaslamanodelquet
entregáisahora,prometoquetuamigo e dadecomer.Sios
no sufriráantesdemorir.
Buitreesperóensilencio,paciente.Segundosdespuésunarma
escalerasabajodesdee l primerpiso.Elproxenetasonrióysesintió voló
vencedorensugesto.Caminóescalerasarribayenelcaminorecogióe
armaentregada.
Nohabía l
nadieal otrolado,sóloel cuerpodelprimerhombre
aniquilado.
—¿Pero...estaarma?—se
tratabadelapistolade su hombre.preguntóBuitreal comprobarquese
Derepenteunalevebrisalerozólasorejasycorriódeprisahaciae
cuartodondeCharlottesolíat rabajar. l
Sólole diotiempoavercómoCharlotteselanzabaal vacío.
Johnhacíadecolchónhumanoconsuenormebarriga.Conlaayuda
deCharlottesepusoenpie.Losdosestabansobreunt
quehacíalasvecesdeporchealrededordelmotel. ejadil o dechapa
—¡Allíalfondohayunasescalerasparabajar!—leindicóCharlotte
—.¡Vamos!
esguince...
—Mitobillo...—sequejóJohn—,creoquemehehechoun
En—¡Meeseinstante, un disparoaceleró el partemédico.
sesientomuchomejor!¡Corramos!
John arrastrótiradodeCharlottehaciael coche,mientrasBuitre
caminabahacialasalidaconunapérfidamiradadesuperioridad.
Enel camino,BuitresetopóconBetsy,la únicaquequedabadentro
dellocalylaúnicaqueintentódetenerle.
—Buitre,no. .
Antesdeterminarl
de supistola,peroe
culata—¡Déjalai a frase,BuitreapartóaBetsydeungolpeconl
r, somosbuenaschicas,Buitre!¡Saldremos
l a seenganchóasupierna. a
el a! adelantesin
—¡Calla,putavieja!—legritódisparándoleenla cabeza.
EsosbrevessegundosenlosqueBetsyretuvoaBuitre,sirvieronpara
quelaparejaalcanzaselafurgoneta.
Charlotte,alvolante,arrancó.
—¿Sabesconducir?—balbuceóJohn.
—Entuestado,esapreguntacarecedesentido—argumentó
Charlotte.
Las ruedaspulieronlatierrayelasfalto,yelarma.
muroalaposibilidaddedisparo.Buitrebajó
Después la nubedehumosirvióde
Rabióuninstante.
sucoche. cogiósuteléfonomóvilymarcóunnúmeroal a vezquesubíaa
—Vadym—saludóyaenmarcha.
—Oh,Buitre—respondióalguienal otroladoconacentoucraniano
—,¡cuántotiempo!
—Necesitohablar de negocios.
—Hablemos.
—¿Tieneshombresdispuestos?
—¿Dispuestosaqué?
—Yasabes.
—¡Nosabenhacerotracosa!—exclamóentrerisas—.¿Cuántosy
cuándo?
—Todosyahora.
—¿Todosyahora?¿Estásloco?¡Estamosenmediodeunapartida,y
estoyapuntodeganar!
—Nocreoqueganestantocomoloquepuedesllevarteestanoche.
Vadymsegiróenlasil a.
—¿De cuántoestamoshablando,Buitre?
—De...CharlotteNipples.
—¿Nipples?¿Disteconella?
—Sí,perohayuntipoquemeestátocandoloscojones.Bueno,¿qué
medices?
SehizounbrevesilencioyVadymsoltósuoferta:
—Laexplotaremosseismesescadauno.
—¿Seismeses?
—Custodiacompartida,Buitre—sentencióentrerisas.
—Estábien—dijoacelerando—.¿Cuántoshombrestienes
disponibles?
—Unosdiez.¿Dóndequieresquenospresentemos?
John.—Esperamillamadaperovetearrancandoe
Buitre,conl l coche—concluyó
a mirada clavada en las lucestraserasdelafurgonetade
Capítulo26
—Tellevaréaunhospital,John.
—No,Charlotte.Vayamosatucasa.
—¿Amicasa?No,niloca,tenemosquebuscarayuda.
—Lullabymedijoquenuestraúnicasalidaeraregresaral í.
—Peroesunsuicidiohacerlo.Esel únicositio quedeberíamosevitar.
retrovisor.
Charlotte,atentaalacarretera,lanzabarápidasmiradasaJohnyal
—No tenías que habervenido.Mierda, creo quenosestásiguiendo...
—murmuróalavezqueaceleraba.
—Peroyo. . nopodíadejartecon él —balbuceóJohn,entredolores.
—Estababien,John.Ytúestabasasalvo.
—PeroCharlotte,el cuentodecíaque. .
—¿Quécuento?
—Lullaby...esescritora, ¿losabías?
—Escritora...—mascullóCharlottecondesprecio,quevolvióa
buscarelcochequeibatrase
Buitrehabíaapagadolasluces
l os.
ytomadoundesvío.Charlottesuspiró.
—No.
—Hazmecaso,porfavor—pidióJohn.
—¡No,John,necesitasqueteveaunmédico,tenemosqueescapar!
—Porf avor. .
—Entonces,¿porquéconducesporel caminoderegresoacasa?
—¿Cómo?—sepreguntóCharlottesinsaberquésucedía.
queeIntentófrenar,girarelvolante...peronadapudohacerporimpedir
l vehículosecondujesesoloporla carretera.
Entonces,aunariesgodetenerunaccidente,levantólasmanos,
boquiabierta.LafurgonetadecongeladosPietrosiguiósucamino.
suceder...
—¡Estábien!—exclamóresignada—.Penséquenovolveríaa
Lullabyescribíaconunaplumaviejaenunospapelesyaescritos:
—Cómo odio que se den cuenta de la irrealidaddesusemociones...
tantosborronesprovocanerrores.¡Torpe,Lullaby,torpe!
Entoncestomóunfolio en blancoycomenzóaescribirelcapítulo27.
Capítulo27
—Charlotte,espera,nopuedosubirlasescaleras.
—¡Alascensor!—exclamóel a pulsandoel botón.
—Peropodemosquedarnosencerrados...
—Nonosquedaotrasalida.
—Charlotte,subetúporlasescalerasyyoloharéenel ascensor.
espaldas.
—No,vamosjuntos—dijoel a ala vezquesecerrabalapuertaasus
paseoverticalatrompicones.
chirrido,otromás,unpequeñoredoblemetálicocontraloscimientos.Un
Laspoleasdelascensorcomenzaronagirarmuydespacio.Un
—Charlotte—murmuróJohntirado
hilos? en el suelo—,¿quésonesos
—¿Quéhilos?—preguntóCharlottemientrassubíanlasescaleras.
—Losdetustobil os. . —pronuncióperplejo.
Nadamásdecirlo,otrosmássedescolgarondesusdelgadasmuñecas.de
Aldarsecuenta,losrecogió,losmordió,tiródeellosparaarrancarlos
sup—¿Quéson,Charlotte?
iel. Peronoseiban.Estabarabiosa.
—Nolosquiero,nolosquiero—mascullabaentretironesbruscos,
sinlogrardespegarlosdesucuerpo.
Mientrastanto,elascensorsehabíaelevadoaloscielosyhabían
alcanzadoe l cuartopiso.
Peronosedetuvo.
—¡Maldita sea! —exclamóCharlotte.
«¡clin!»Susmiradasaferradasalaslucesnumeradas:cinco,seis, siete,
Lapuertaseabrióaduraspenas.Alotroladoestabael a.
Loshilosviajaronhastabesarunpardemaderasentrecruzadasque
portabaLullaby.
—Puedohacerlosola,Lullaby—ledijotirandodeloshilos.
—¿Locreesdeverdad?—preguntóel a sacudiendolasmaderas.
—¿Peroquécoño...?—sepreguntabaJohnsindarcréditoasusojos.
Rufusasustado.
—¡Esodigoyo!¿Quénaricessucede?—repitióMatthewconun
—Olvidastetupasadoparaluegorecordarqueseguíassiendoesclava
interiordesucasa.
detudestino—murmuróLullabymientrasarrastrabaaCharlotteal
—¿Sudestino?—decíaJohn,arrastrándosetras el as.
—¡Sí,John,sudestino!—gritóla ancianaal fondo,queparecíahaber
borradosusorderadeunplumazo—.Notardes,prontollegarán.
Lapuertasecerródegolpe.Elmarcoescupiópolvoazulqueseposó
sobreunacucarachaqueregresabaasuescondite.
Fueronalacocina.
—¿Estássegura,Charlotte?
—Sabesque
—Sí,Lullaby.
si lohago,novolveránacrecer.Tusmiedossequedarán
contigoparasiempreytendrásquelucharcontraellossinmiayuda.
Charlotteasintió.
visi—Hazlo,porfavor.Nuncacambiarés
Lullabysacóunast
bles. i nomeatrevoahoraqueestán
ijeras decocinadeunodelos
dela encimera.Charlottesegiróparanopresenciarlo.cajonesdedebajo
—Abrázala,John.Lonecesitará.
—¿Cómo?
—¡Quelaabraces!
—Voy,voy...
lastijeras,quefuerondirectamentealosh
Charlotteseechóasusbrazos.LamiradadeJohnsequedófijadaen
ilos.
Yloscortó.
Unoauno.
Concadacorte,unlatigazo de liberaciónsacudíalossentimientosde
fotografíasdelpasado.Tristeza,desamparo,soledad...todoloqueera
tensabayseabrazabamásaél.Lasemocionessedoblegaronentre
Charlotte.Eraundoloragudo,llenoderecuerdos.Johnsentíacómose
siempreviviríaenellaynoenlaimaginacióndeLullaby.
Trase
—Yaeenellsúltimot
apoyada ijeretazo,aCharlottesedesplomót
tá,pechodeJohn.
John—dijol riste enel suelo,ibre.
ancianaacercándose—.Ahoraesl
e pidoquela cuides.Lachicalo merece.
Sólot—Yo...—musitóJohn.
—¡Yallegan!—exclamóLullabysindejarlecontinuar—.Escucho
motores.
—¿Motores?¿Peroustednoestabasorda?
—¡Bah!
—¿Tantos?
Lullabymiróporlaventana.
¡Litrosdetinta!—observósorprendida—.¡Tenemosquehervirtinta!
—¿Tinta?¿Quéestádiciendo?¿Dequéhabla?
—¡DeBuitreysushombres!—exclamóbuscandoollasentrelos
armarios.
—Rufus, creo quemeheperdido —le dijoMatthewsacudiendola
cabeza—.Aversicomprendeslomismoqueyo.
Rufusgimió.
manos,nospersigueunproxenetaasesinoyunaviejalocaquiere
—Charlotteesunaprostitutaal a quel e hansalidohilosdelas
hacernospastaparacenar. ¿Voy bien? un
Rufusasintiócomobuenamentepuedeasentir perro.
—Perfecto,creoqueeshoradeirmeadormir.Estechicodebería
habersequedadoenparo—mascullóMatthew.
—Charlotte,¿estásbien?—preguntóJohn.
—Losiento,John,losiento. . —dijoel a entredientes,somnolienta.
—Nolosientas.Estáscansada,sóloeso.
Ellaseacurrucóunpocomás.
—Tortolitos,¡enpie!—exclamóLullaby—.Laguerravaadar
comienzo.
Charlottealzóla miradaparaencontrarseconlosojosdeJohn.
—¿Tortolitos?—murmuróellaentrerisasdébiles.
—Vamos,vamos,
Johnacompañósusonrisa.
noperdáisel tiempo.John,ventanadelsalón.
Charlotte,ventanademicuarto.Lat
loquetenéisquehacer. inta burbujea,casiestáya.Yasabéis
LullabysedirigióaJohn.
—Devuélvemeel revólver—leexigióconungestorápido.
—Aquítiene.
—¿Cuántasbalasquedan?
—Creoquecuatro.
—Vale,ellossonalmenosdiez.
—¿Diez?—preguntóJohn,temeroso.
—Intentaréacabarconcuatro,peronoprometonada—dijoLullaby
dirigiéndosealasalida.
—Pero,¡notevayas,espeligroso!—lesuplicóCharlotte.
—Nomeheidoyyameechasdemenos...—murmurabaLullaby
mientrass alía dela casa,sinnisiquieragirarse.
—Lullaby,no. .
Johnmiróporl
coches. La a ventana.LoshombresdeBuitresalíandesus
parejasemiróysupieronalinstanteloqueteníanquehacer.
Entrelosdosarrastraronlasollascontinta hirviendohacialasventanas.
—Ahoraonunca,John.
Almismotiempoinclinaronlasollasydoscascadasdefuegonegro
seprecipitaronsobrealgunoshombresdeBuitre,quea l instantese
propiassombras.
revolcaronenelsueloentredoloresinsoportables,apagándoseensus
AntesdequeBuitrepudieraterminar
—Malditoshijosd e. .
quealcanzaronaotrosdesushombres. la frase, escuchóunosdisparos
—¿Cómo?—sepreguntóBuitreagazapadotras sucoche.
—¿Cuántasveceshadisparado?—preguntóCharlotte.
—¿Dos?¿Tres?
—¿Cuántoshombresquedan?
Johnmiródereojo.
—Demasiados,sincontaraBuitre.
Sevolvieronaoírdisparos.Despuéssilencio.Charlottemiróestavez.
—Siguensiendot r e s . ¿Quéhacemos?
En eseinstantellamarona la puerta.Semiraronasustados.
—Voyyo—dijoella—.Vigilasusmovimientos.
Johnasintió.
Alospocossegundos,Johncorrióal pasil o.
—Charlotte,hanentradoal portal.¿Lullaby?¿Quéhapasado?
—Estáherida,¡ayúdame,peroantescierrala puerta!
Lallevarona
encontrarl a l sofádelsalón.Entretodoslosharaposeraimposible
entradade l a bala.Lastelas recosidassefueronempapando
desangrecaliente.Lullabyestabacadavezmáspálida.
—Miniña,nohepodidoacabarcone l os.
—Shhh,tranquila,Lullaby.
—Peroyo fuila culpable...
—Sí,h
—No,noloeres.
ija, teprometíunfinal feliz. .
—Nuncameprometistealgoasí.
—Hija,noesbuenosaberlosfinalesantesdeempezarla aventura,
¿verdad?
CharlottemiróaJohncondulzura.
—Nonecesitootrofinal queéste, Lullaby.
ancianaconlavozapagada.
—Peronoescompleto,ycorréispeligro.Faltaalgo...—gimióla
—¿Elqué?
mesa.—John,porfavor,alcánzameaquellacuartil a. .y la plumadela
—Noteesfuerces,Lullaby—lepidióCharlotte—.No
que. . es necesario
—¡Síloes!—exclamóla ancianaaduraspenas.
—Aquítiene—ledijoJohnaLullaby,quetomóel papelyla pluma
entretemblores.
—Gracias,hijo. Peronotengotinta. .
—¡Oh,
—¿Tinta?
sí, esperad!—balbuceóconilusión.
Laancianahundiólaplumaenlatelahúmeda,yunasgotasde
carmínnocherezumaronenl a puntademetal.
Demaneratorpe,Lullabyescribióunaspalabrasqueentregó
segundosdespuésal
—¿Alaazotea? a pareja.Loleyeronjuntosbajola tenueluzque
escapabadelanoche.
—Johntienerazón—preguntóJohn,preocupado—.Nopodremossalir
deallí,¡nosalcanzarán!
tenemosllaveparaentrar. —reafirmóCharlotte—.Además,Lullaby,no
—Confiad en mí.Vuestrahistoria es bellaperofalta algo. . el epílogo
—sentencióLullabyjustoantesdemorir.
muy despacio,lamentandosumuerte,acariciandosusmanosde
cabeza,Sequedaron en silenciounosinstantes.Charlottenegabaconla
dedosdelgadosyarrugadoscomolospapelesquesiempreestabanasus
pies. .
Entonces,Johnencontróundetalleparticularenl
l a vez a plumadeLullaby.
—Charlotte,fíjate —indicóJohna quetomabalapluma.
—Elextremodelapluma es una. .
—...llave—concluyóél.
—¿Túcreesqueabrirála entradadela azotea?
Johnseencogiódehombrosycuandosedisponíaahablar
escucharonmovimientoenlapuerta.
—¿Tienessuarma?—preguntóJohn.
—Sí,aquí—respondióentregándosela.
—Mierda,sóloquedaunabala.
—Necesitamosllegararriba.Pero,¿cómo?
queeCharlottecorrióalacocinayencontróuncuchilloquepesabamás
l a. Ensusmanosenclenquesparecíaunaespada.Seescondióy
apagólasluces.
—Úsaladeescudo—lesusurróCharlotteaJohn.
—¿A Lullaby?
baja.—Ellalohaescrito, noescosamía—sedefendióCharlotteenvoz
—Vale,vale.
Johntiró dela viejaempapadaensangreyla pusoenpie.
Lacerraduradelaentradareventódeundisparo.Lapuertasevenció
yunassombrasseadentraronenl a casa.
Unospasoslentosycautosresonaronenla tarimavieja.
loshombres.
—Nonostoquesloscojonesyentrégate,Nipples—amenazóunode
Charlotteestabapendiente del sonidodesuszapatos,cadavezmás
cercanos.
een Enl pechodelenemigo,yasílohizo.
elmomentopreciso,Charlottevisualizóel cuchillohundiéndose
Ungritodesgarradorensordeciólosmovimientosatientasde ostil as
aquelloshombrescuandoelfríometalrasgólapielyquebrólasc
deunodeellos,quevomitósangreal instante.
Cuandoel otrointentóreaccionar,Johnl
sangre,tiñendo las paredesdeescarlata. e disparósuúnicabala,que
terminóalojadaensucuellofornido,delquecomenzóabrotarmás
Corrieroncasiaoscurashaciala
salida,peroal í estabaél: Buitre.
Sinpensárselodosveces,JohnempujóaLullabycontodassus
fuerzashaciaBuitre,quecayódebrucesa l suelo.Pasaronsobreél tan
rápidocomolesfueposibley,antesdequepudierazafarsedelaanciana
muerta,ellosyahabíanalcanzado...laazotea.
Capítulo28
Lapluma­llaveviajódirectamentealacerradura.Johnlagirónervioso.
Charlotte,expectante,le animóentoncesaempujarla puerta.
—Noseabre—dijoél.
—¿Cómo?¡Lallavehagirado,tienequeabrirse,aparta!
Johnlepermitióquelointentaseel a. Mientrastanto,estuvo
pendientedelosmovimientosdeBuitre.
—¡Corre,seestálevantando!
—¡Joder, nome metasprisa, parece quela cerraduraestáoxidada!
¡Lallavenogirabien!
—¡Vamos,vamos!
—¡Va,va,parecequeya. .!
Lapuertasevencióycayeronal otrolado.
—¡Corre,cierra!—exclamóCharlotte.
Johnasílohizo.
—Perovaarmado,notardaráenentrar. . ¿Charlotte?
—John...
Losdossequedaronperplejos,boquiabiertos,conlosojoscomo
platosmirandoa l horizonte.
—Charlotte,¿puedesverlomismoqueyo. .? —preguntótemblando.
—Ajá...
—¿Es real?
—Ajá...
—Peroes. . imposible.
—Ajá...
Anteellos se erigíaunmastodónticouniversode...basura.Sí,basura
plásticosentrecartones. Cabezas demuñecassinojos,briksquehacían
sobrebasura.Losmetaleszigzagueabanentrelosplásticos,ylos
lasvecesdel adril os, tenedoresredoblados,cablespordoquier,t
deshilachadas,tensadas como banderas
a l de
de elas
paísesimposibles,engarzadas
hálitodeneumáticospinchadosporclavosoxidados.
enpalosdeescobaquebailaban son unabrisaprovocadaporel
Fascinados,eranincapacesdearticularpalabra.PeroprontoCharlotte
volvióens í:
—¡Fíjateal í, pareceunaentrada!
—¿Unaentrada?¿Dónde?de les
Corrieronalencuentro
conocidos. doshombresempaladosque resultaban
—SonloshombresdeBuitre—dijoel a, estremecida.
—Losrecuerdo.
Dossoldadosqueimpedíane
ramasoxidadas.
fondo,unextrañotúnel de basural quepasoconsusmiradasperdidasysus
bocasabiertasdeparenpar,congusanosviajandoporsuso
—Tenemos rificios. Al
parecíauninfinito bosquede
queentrar—dijoel a.
Johntomóaa puertadeundisparo.
doblegadol ire, mirótrasélysintióla presenciadeBuitre,quehabía
—¡Vamos!—gritótirandodeel a.
Buitrellegóal
espantapájaros
metrosdeventaja. a entradacuandoellosyallevabanunoscuantos
—¿Peroquécoñoestodoesto?—sepreguntabaobservandoalos
puedocreerlo. decarneyhueso—.¿Fred?¿Angus?¿Soisvosotros?No
elparaguasdevarasinterminablesquecruzabanloscielosdeaquellugar
Mientrastanto,CharlotteyJohnestabanresguardadosdeBuitrebajo
imposible.Elvientoprovocabaquelasbolsas
exhalandosuspirosfétidosentresusheridas, ylasde basurarespirasen,
ramas de losfalsos
árbolesseagitabancentelleandoy vibrandocomounarpatocadaporlos
dedosinvisiblesdeundiosocioso.
Derepenteelcaminosebifurcóendos.
—¿Pordónde,John?
—Nosé.Eligetú. un al
Charlottemiródereojoa ladoy otro,yporfin se decidió:
—¡Porelcentro!
—¿Cómo?
—Sí,John,sígueme.
Juntosseintrodujeronenlomásprofundodelbosquedebasura,
dondenohabíaprincipionif inal. Todoeracadavez más oscuro.
—Damela mano,John.
—Medueleel pie,Charlotte.Mucho.Nosési podrécontinuar...
—Puedes,John,puedes.SiBuitrenosdescubrenosmatará—le
susurrómientrastirabadeé l.
Buitrehabíaalcanzadola bifurcación.Conungestonerviosomiróal
suelo,buscandohuellasdelatoras.Miróyremiróynadaencontró.
Perola brisaremovióunarbusto de estropajosyagitósinpretenderlo
amenazantealavezqueseinternabaeneilróbosque.
uncinturónderasoverde.Elproxenetat deélysonriódemanera
—¿Vesalgo,Charlotte?
—No,cadavezestámásoscuro.Perohayqueseguir,nopodemos
detenernosnivolvera trás.
Enzarzadosentretoneladasdebasuraqueparecíanahogarsuspiernas
ytirar de susbrazos con cablesrojos,azulesyverdes,semovíande
maneratorpeylenta,perosindescanso.
Enel caminosecruzaronconunextrañosaucelloróncuyasramas
erandecenasdeteléfonosantiguosdescolgados. Al pasarjuntoaellos
escucharonvocesacompañadasderisas metálicasychirriantes,que
estremecieronsuhuidasindestinoaparente:
«Lullabynosmató...Yanadienosconocerá...Jamás...Yvosotros
seréispartetambién...detodoe
palabrasperdidas enmáselsilenciosdelto. .aebasura...nosoismásquebasura...
llecturacómo
. . palabrassinmás...»
alambregruesoyafiladol
John,cadavez asustado,nosintió
e atravesó musloizquierdo. ensucamino,un
Elgritodesgarradoal sentirlodentrodespertóalasgaviotasdepapel
querevolotearonnerviosashastapasarporencimadeBuitre,queachicó
losojosylosdescubrióenl a penumbra.
—¡Quietos!—lesordenó.
Segiraronal instanteyencontraronel cañóndelarmadeBuitre
frenteaellos.
—¿Quétal? ¿Depaseoporel vertedero?—preguntóBuitreala vez
queseacercaba.
JohnsecolocódelantedeCharlotteaduraspenas.
—No irácontigo —le advirtióJohn.
—Dejaquedecidaella.
Charlottesacól
zorroasustado.
Buitre,agitandoe a cabezapordetrásdelhombrodeJohncomounalte. . el
—Nipples,miraloqueheencontradoenelcamino—leindicó
l cinturón—.Hetenidosuerte,lástimaquemef
resto.
—Nosoytuya,Buitre.Nosoydenadie.
—Te equivocas.Sinmí,túno eres nadie.Noeres másque unaputa
desegunda.Conmigo,sinembargo,eresCharlotteNipples.
—Déjalaenpaz,Buitre.
l bosque.Amanecía. ire.
—¡Cállate,gordobastardo!—exclamóBuitre,disparandoala
Unhuecodeluzseabrióene
—Tedejaréqueagonicesentrebasura,peroconvida,site apartas.
Johnnoquisomeditarsupropuesta.
—No.
—¿No?Estábien. . —susurróBuitremientrasdirigíael puntode
miraalpechodeJohn.
—¡Espera!—gritóCharlotte.
Buitrerelajóel dedodelgatil o.
—Siguessiendounachicalista. . —murmuróBuitre.
ahora.—Pero,Charlotte—lesuplicóJohn—,nolohagas,note rindas
—John,necesitasquete veaunmédico—dijoCharlottecaminando
haciaBuitre.
—Eresun hombreafortunado,John.Era mi últimabala.
CharlotteseacercóaBuitreyle sonriódemaneraagridulce,aun
palmodeél.
—Volvamosacasa,Nipples.
limpialEnesemomento,CharlottesevolvióhaciaJohnyconl
e dijo: a mirada
—Tequiero.
Sinesperarrespuesta,tiró delalmano
pudierareaccionar,sedisparóene pecho.armadadeBuitrey,sinqueéste
sobrelabasura.
ElcuerpodeCharlottesedesplomócomounamarionetasinhilos
—¡No!—gritóJohnquecorrióhaciae l a .
Al verqueseacercabaJohn casienarastras,lepropinóuna
patadaquelotumbódeinmediato.Caminóhaciaélyl
Charlotte.
Buitresequedóconlosojosclavados la sangrequebrotabade
e pisóelcuello
paraahogarlemientrasleapuntabaconel arma.
Apretóel gatil o. Milveces.John,agonizando,sereíanervioso.Con
amoratando:
apretandoelcuellodeJohn,ydisfrutabaviendocómosupielseiba
auténticaira,Buitrearrojóelarmaentrelosmontículosdebasura.Siguió
quevea—Mehasjodidoe l negociodemivida,peroahorate reventaréhasta
cómo te estallanlosojos,hijodeputa.
Johnmirócasiinconscienteaunladoylanzó
encontraría. la manosinsaberqué
Nopudoverbienquéteníaagarrado,nosabías
nisiquieras i l e salvaríadel a i estabaafiladoono,
situación,peroloclavócontodassus
fuerzasenla piernadeBuitre,queleliberóal instantedesucondenade
muerte.
retuvobajosucuerpoorondoy,poseídoporlarabiayelsufrimientomás
cuandoJohnsacófuerzasdeflaquezayselanzóaporél.Supesol
EldoloralpretendercaminarhizotropezaraBuitre.Fueentoncese
extremo,golpeóelrostrodeBuitreconsaña.Bajosuspuños,lapieldel
proxenetasedeformaba,sangraba,seennegrecía,losdientessaltaban
quebradosdeunabocaquesuplicabaperdónentrebalbuceos
sanguinolentos.
Johnnoescuchósuslamentos,nisussúplicas,nisurendición.Aquel
hombreeramalo,perverso,atroz,merecíal a muerte comoelenquelapierna
más.
Estabaconvencido,Johnlearrancóloquelehabíaclavado
y,conungritosalvaje,rematóaBuitrehundiéndoseloenel pecho.
Murióbajosusmanosynuncasearrepintió.
Charlotte.
Después,agotadoyconlospuñosensangrentados,searrastróhacia
pensarquesufuturo
Sinpalabras,acariciósup en comúnhabíadesaparecido
iel, cadavezmásfría.paraJohntemblabaal
siempre.
Noquisoverladesnudaaunque el viento asíloconlasugería.Nuncalo
cinturóndelator.
habíahechoynuncaloharía.Cubriósucuerpo batayla atócon el
Latomóensusbrazos,sentadoenel suelo,apoyadaensuregazo.
Esperóaenderezarsuslamentosyconvertirlosenpalabras,enuna
despedidasinreceptor:
—Loscuentosnodeberíanacabara
queríahaberseguidocontigohastaelf era isní ,
a l Charlotte—lesusurraba—.Yo
demisdías. MeEresimaginéenmi
tantascosasc o n t i g o . . , yninguna t
mecabezalaposibilidaddeperdertetanpronto...¿Sabes? r i s t e . Ninguna.Nocabía lomejorque
aunquealprincipiometratabasf
sonreíraunquenuncatelod
mierdapormuchoquenosquieranhacercreerlocontrario.Perocontigo,
hasucedidoenla vida.Loúnicobueno,diríayo.Lavidaesunaputa
ijera.atEragenial,mealegrabaseld
al, todoeradistinto. Megustabaverte ía. ., por
ahora,sólotengo
seguirviviendo situnoesatulado.Peroantes,prometosacartedeaquí.
recuerdo.Mesientovacío.Notengonecesidad de
corazón,elquemeobligabaabuscarteentremispensamientos.Pero
esoqueríaverte,poresoeratanpesado.Enrealidadnoerayo,sinomi
Alguiencomotúno merece estarentrebasura,sinoentreflores.
Johnsepusoenpie.Nohizocasoasudolorniasus
conpasofirmesinsabermuybienelcaminoderegreso.heridas.Caminó
unodeellos,una
Elbosqueparecíarenovarsuscaminosencadagolpedeviento.En
le trajo recuerdos.cúpuladedeshechosinserviblesmostróaJohnalgoque
—Sonel os, Charlotte—ledijoala difunta.
—Fíjate,Rufus,soncuerposdepersonas...
Rufusseescondiótras la mecedoradelporche.
deunrápidovistazoqueeranapuntesdehistoriasinacabadas.Historias
papelesarrugados.LabrisaempujóalgunosalospiesdeJohn.Pudover
vecinosdeledificiodeLullaby.Bajoe
Ahorcadosenlosfalsosárbolesestabantodosycadaunodelos
l os, siempreunamontañade
puntodeacabar
queLullabynosupofcon elinoasl.izar. Personajesqueterminóodiandohasta el
Peroesonuncasucedió con Charlotte.
«Elepílogo»,recordóJohn.
Unasonrisabrotóensurostroymiróasualrededor.
Allíestaba,frenteaél: unasalidaenla penumbra.
Yluz,muchaluzal otrolado.
—¿Estamosmuertos,Charlotte?
Conlamiradaperdidaenlaesperanzacaminócojeandotanrápido
comopudohastaquee l fulgorinfinito cegósusojosyalcanzóel. .
Epílogo
Logriseraahoraunocéanodecamposverdes,salpicadodefloresque
vibrabanbajolaluzdeunsolqueatraíalavidaa l á dondesusrayosse
se cortabaalolejosconel azulbrillantedelcielo,
posasen.Elhorizonte
ynavegabannubesporsumarinvertido.
dolor.Johnseguíasiendogordoycalvo,peronosentíaningúntipode
enbrazos.
—Ojalápudierasverlo,Charlotte.Esincreíble—lesusurrabaconel a
—Síqueloes,chaval—mascullóalegreMatthew—.¡Esel maldito
paraíso!
tliarcejaarDerepente,Rufustuvo
deél,nervioso. amo para
un pálpito.Corriendomiródesdeelbordede
deJohnypudoveralgoincreíble.Regresójuntoasu
—¿Qué te pasa,viejochucho?¡Déjameenpaz!
Rufusladróygruñóyvolvióatirar deél.
—¡Estábien,estábien,perroloco!Aver,¿quéquieresenseñarme?
Matthewseinclinólosuficienteparaverlo.
—¡Oh,diosmío!¡Nopuedocreerlo!YGrassnerahí,empanado,
comosiempre.
Johnadmirabae
unicorniosye l l trote deextrañosanimalesquenoerancaballosni
revoloteodeavestraslúcidasdecoloresincreíblesquese
verdelima.Uncastillo
unríodeaguaf
perpetuayrocasdet zadedulce,reposandosobrevallesybosquesylagos
posabanenlasramasdeárbolesdelasquebrotabanhojitasdecolor
resa, iquenacíadeunamontañasalpicadapornieve
cristal alfondo,unaaldeadecuentocercanaa
deaguaturquesa.
Matthew
sehabíadeslizadohastala orejadeJohn.
—¡John!
—¿Matthew?Oh,erestú, Matthew.¿Puedesverlo?
—¡Claroquepuedoverlo,imbécil!Pero,¿quiereshacerel favorde
mirarloimportante?
—¿Loimportante?
—¡ACharlotte!
Johnbajólamiradaysequedóboquiabierto.
Lasangre...noestabaa l í .
Nervioso,ladejó enel suelo.Entonces,intrigado,tiró de la batapara
descubrirelpechodeCharlotte.
Nuncalahabíavistodesnuda.Nuncajamás,hastaesemomento.
—¿Esporestoporloquete llamabanNipples...?
Entonces,negósufascinaciónporel cuerpodela jovenyviomás
alládelaheridaborrada...
Ahoraloentendíatodo.Fascinado,encontróqueel valordeCharlotte
comoserhumanoresidíaenalgotanbásicocomosencillo:sucorazón...
quelPeroseguíahelada.
atía deunamaneraespecial.
—Charlotte,noestásherida.Nadapuedehabertematadoentonces.
¿Porquéestástanf ría? ¿Porquénorespiras?¿EsporLullaby?
John la tomóentresusbrazos.
¿Necesitasdesushilosparaqueellatemaneje?
—Charlotte,escúchame.Notienesquetenermiedoaserunapersona
real.Tetienesquevalerportimisma,nadietecontrolará.Sólotendrás
cariñoyamor.Hemosllegadohastaaquíporquetúasíloq
Charlotte,despierta,e l a meescribióparat i , uisiste.
¿recuerdas?Nopuedes
dejarmesoloahora...
Desilusionadola dejóacostadaenla hierbafresca.
—Esunser. .itio bonitoparaquedarse,Charlotte.Haytantascosasquete
gustaríav
—¡Estúpido!—exclamóMatthew,descolgadoensuoreja—.¡Déjate
depalabreríayacabae l cuentodeunavez!
—¿Acabarelcuento?
—¡Elbeso!¿Telotengoquedecirtodo?
—¿Elbeso?
yo!—¡Sí,elbeso!Latienesahípidiéndotelo.Si nolo hacestú, ¡loharé
—Estábien,estábien...—recapacitóJohn.
Johnla miró,arrodilladoasulado,tragósalivayseinclinósobreel a
Johnsintióqueeracomobesaruncubitodehielo...
hastatenersuscarasfrenteafrente.Ensilencio,suslabiosseunieron.
Peroel cubito. . seder itió.
Eltonopálidodela pieldeCharlottecomenzóatonarserosado,
templado...,¡vivo!
Losojosgrises
dela jovenseencontraronalosdeJohnque,
asustado,seseparóuninstante.
—John...
—Estásviva. . ¡Estásviva!—exclamóentrerisas.
La abrazócontodassusfuerzasyquisocomérselaabesos.Se
revolcaronpore l mantoverdeysequedaronseparados,agazapadassus
miradasbajolasbriznas.Susmanosseunieronsinapenasbuscarse.
—¿Quéestodoesto,John?—preguntóe
admirandol a bellezadelpaisaje. l a incorporándose,
—Notengonila másremotaidea. . Peroesperfecto,¿nolocrees?
—Demasiadoperfecto,John.
—Peroescomotienequeser, Charlotte.LodijoLullaby,te lo
prometió.
Charlottenegóuninstanteantesdeproseguir:
paravivirenotrafantasía.
—John,nopertenecemosaunmundoasí. Nopedícortarmishilos
Johnmeditóuninstante.
—Peronopodemosvolver,Charlotte.
—¿Porqué?¿PorBuitre?
—No,Buitreestámuerto.Yolomaté—dijosincreersemuchosus
propiaspalabras,encontrándoseconsuspropiospuños,ahoraintactos.
—¿Entonces?Volvamos.
seponía—Peronohaysalida—ledijoencogiéndosedehombrosal a vezque
en pie—.Yfíjate,noencontrarástodaestabellezaalotrolado.
Charlottesiguiósuspasosyleabrazópordetrás.
—Sí,no
—¿Raro?
—Hablasraro,John.
parecestú. Aquínadaescomotienequeser. .
—¡Peroesgenial,nosóloestelugar,sinoqueademásyohablecomo
siempre—¿Túcrees
he deseado!Temerecesteneralgoa
queesestolo sí.
quequierotener?—preguntóCharlotte.
Johncontuvola respiración.
—Erestú—concluyóel a acurrucadaensuespalda.
—¿Yo?
—Sí,John,quierobailarcontigobajola l uvia.
Johnsevolvió.
—¿Estássegura?
—Sí.
Sebesarondemaneraapasionada. de
llegaranadarsecuenta.
Entonces,elcielosefuecubriendo nubesgrisessinqueellos
Comenzóalloverdemanerafinaypocoapocoloscolores
borrando. se fueron
Yloscamposdehierbafuerona
enfarolas sfalto. Losárbolesrenacieroncomo
alolaslargodecallesinfinitasdeotoño.Lospájaros eran ahora
edificiosyelsolsetransformóenluna,unadeesaslunasllenasclavadas
semáforosy
CharlotteyJohnseguíansumidosenuneternobesosilencioso,
rocasdetizadulcefueronautomóvilesdestartalados.
caladoshastaloshuesos.Unamelodíadepianoparecíasurcarsuamor.
Entoncesellaseseparóunsegundoyledijoconunasonrisa:
Élaceptócon
—¿Bailamos?
encontradola vida.ungestoinfantil. Habíaperdidolaspalabrasperohabía
Matthewobservabal a escenadesde su s i l
lluvia.Sinpalabrasselevantóysalióalexterior.Caminóhaciaó n , resguardadodel
su difuntaesposa.Rufusesperaba enel porche,conmiedoamojarse. l a a
tumba
dePeroprontoseanimóacorrerbajolalluviahastallegarjuntoasuf
amo.Elancianolorecibióconunacariciaentre las orejas. iel
—Doryestaríaorgullosadeél, ¿verdad,Rufus?
El perroasintióconunladrido.En
vieracómoletemblabanloslabios.Entonces
emocionótantoalverloquetuvoquecubrirsel
alospies ese mismoinstanteunpelitonació
de la lápida,comosi fueraunapequeñaf seadejóllevarporla
lor. Matthew se
bocaparaquenadie
emociónybesósupropiamano,queluegoposósobreelmármol
húmedo.
Despuésselevantóyconunasonrisale dijoasuperro:
futuro.Yasíloharemos,Rufus.Ellosselomerecen,ynosotrostambién.
—Seacabócortarelcésped.Doryquierequevivamossinmiedoal
Volvamosacasa. en las de
unvalsingenuoysincero
JohnyCharlottellenaronel quelloraron
callesdela ciudaddepasostorpes,en
felicidad.
Eranricos,peronoporlaslágrimasi
dellorar,sinoporquerersedeverdad. n f i n i t a s quenadiemás era capaz

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