El concepto de vectorización surge como respuesta a los inconvenientes que representa la
distribución tisular indiscriminada que sufren los principios activos en una terapia sistémica convencional. Esta distribución no selectiva es la responsable de que solo una fracción, más o menos importante, de la dosis administrada pueda alcanzar el tejido diana, mientras que el resto de la misma se distribuye a otros órganos o tejidos, con el consiguiente riesgo de que aparezcan efectos secundarios no deseables. El objetivo de la vectorización es la liberación del PA de forma preferente a nivel del órgano o célula diana. Requisitos para los transportadores de medicamentos 1- Tamaño y forma adecuados para la vía de administración a la que se destinan. Para una administración I.V., el tamaño ha de ser lo más pequeño posible (siempre inferior a 1 micra), con objeto de evitar la obstrucción de los capilares sanguíneos. 2- Biocompatibilidad y biodegradabilidad. Los sistemas transportadores de medicamentos deben ser biocompatibles y biodegradables. Además, los productos de degradación que se formen a partir del material constitutivo del sistema deben ser no tóxicos y fácilmente eliminables. 3- Adecuada capacidad de asociación de principios activos. La asociación principio activo- transportador ha de ser lo suficientemente estable como para que no se produzca una liberación prematura de la molécula activa, pero, al mismo tiempo, debe ser reversible para que, en el lugar de acción, el PA se libere en las mejores condiciones para que produzca su efecto terapéutico con la máxima eficacia. 4- Facilidad para su producción a gran escala y en condiciones de esterilidad. 5- Estabilidad durante el almacenamiento: se debe garantizar que las propiedades FQ del transportador y el PA se mantengan. Sistemas transportadores de medicamentos Dentro de los sistemas transportadores de medicamentos desarrollados hasta el momento, los que suscitan mayor interés son los sistemas coloidales, debido sin duda a su capacidad de transportar cantidades importantes de PA. Entre ellos los mas interesantes son los liposomas y las nanopartículas. LIPOSOMAS Son estructuras vesiculares constituidas por una o mas bicapas lipídicas concéntricas que encierran un numero igual de compartimento acuosos. Estas bicapas lipídicas están formadas, fundamentalmente, por fosfolípidos y colesterol y se organizan de forma similar a las membranas celulares. Los PA que se incorporan a estas estructuras presentan diferente localización en función de su solubilidad, de modo que los PA lipófilos se asocian a las bicapas lipídicas que constituyen la pared del liposoma, mientras que los hidrofílicos lo hacen en los compartimentos acuosos. TIPOS DE LIPOSOMAS Se pueden distinguir varios tipos de liposomas atendiendo sobre todo a su tamaño y al numero de bicapas de fosfolípidos que forman la pared: -Liposomas multilaminares (MLV). Formados por varias laminas o bicapas y varios compartimentos acuosos concéntricos. (0.5-5 micras) -Liposomas unilaminares (UV). Formados por una única lamina o bicapa y un solo compartimento acuoso central. Entre ellos: - Liposomas unilaminares pequeños (SUV). 25-200nm. - Liposomas unilaminares grandes (LUV). 200nm a 1 micra. PROCEDIMIENTO DE ELABORACION Se forman a partir de diferentes fosfolípidos, con o sin colesterol. Normalmente, los fosfolípidos son fosfatidilcolinas naturales o sintéticas (dimiristoil, dipalmitoil). También es posible utilizar otros fosfolípidos, como las esfingomielinas o las lisofosfatidilcolina, pero en estos casos es siempre necesaria la adición de colesterol. COMPORTAMIENTO IN VITRO E IN VIVO El interés que suscitan los liposomas como vectores o portadores de medicamento depende en gran medida, de su capacidad para lograr que cumplan dos objetivos fundamentales: - Alcanzar las células del tejido diana. - Colocar el principio activo en la situación mas favorable para que produzca su efecto. Mecanismo de interacción Diana-Liposoma a) Endocitosis por células con capacidad fagocitaria del sistema reticuloendotelial, como macrófagos o neutrófilos. b) Adsorción en la superficie celular a través de uniones débiles e inespecíficas de carácter hidrofóbico o electrostático. c) Fusion con las membranas de las células sanguíneas por inserción de los lípidos de la pared del liposoma en dichas membranas, produciéndose al mismo tiempo el vertido del contenido del liposoma en el citoplasma de la célula sanguínea. d) Transferencia lipídica entre los fosfolípidos del liposoma y los componentes de las membranas celulares o subcelulares. e) Sistema reticuloendotelial. Sistema más funcional que anatómico, pues está integrado por células que se encuentran en todo el organismo. Está compuesto por macrófagos móviles, macrófagos tisulares fijos y algunas células especializadas de la médula ósea, bazo, hígado y ganglios linfáticos. APLICACIONES TERAPEUTICAS Tratamiento de procesos patológicos asociados a las células del sistema reticuloendotelial o a los órganos donde estas se acumulan mayoritariamente. En un intento de limitar este destino mayoritario, se han propuesto diferentes alternativas. Una de ellas consiste en asociar, a la superficie de los liposomas, anticuerpos monoclonales capaces de dirigirlos hacia receptores antigénicos específicos localizados en la superficie de determinadas células. Otra posibilidad tiene su fundamento en el uso de determinantes carbohidratados. Formulaciones: anfotericina, doxorubicina y amikacina. NANOPARTICULAS Son sistemas coloidales de tamaño inferior a una micra y generalmente de naturaleza polimérica. Dependiendo del método de preparación, se pueden diferenciar dos tipos de estructuras - Nanosferas: Son sistemas matriciales constituidos por el entrecruzamiento de oligómeros o unidades de polímeros, en los que el principio activo se puede encontrar atrapado en la red polimérica, disuelto en ella o adsorbido en su superficie. - Nanocapsulas: son sistemas reservorio constituidos por un núcleo liquido oleoso rodeado de una membrana polimerica. En este caso el principio activo suele encontrarse disuelto En el núcleo oleoso, aunque también puede estar adsorbido en la superficie. PROCEDIMIENTOS DE ELABORACION Los métodos de elaboración de los sistemas nanopartículares pueden ser muy variados. Puede distinguirse entre aquellos que utilizan el polímero preformado y los que parten de los monómeros para constituir el polímero durante la preparación de las nanopartículas. Polímeros preformados: - Polímeros naturales - Polímeros sintéticos Polímeros naturales: Se distinguen de manera especial aquellos que utilizan proteínas (albumina y gelatina) y polisacáridos (alginatos). Los métodos preparativos coinciden en la utilización de una emulsión W/O, en la que la proteína se somete a una desnaturalización por el calor o una reticulación con agentes químicos, o bien parten de una solución acuosa de la macromolécula que se somete a un proceso de separación de fases (desolvatación o gelificación iónica).
El primer método propuesto para preparar nanopartículas de macromoléculas
naturales consistió en la desnaturalización de la albumina a altas temperaturas. Como método alternativo para evitar la aplicación de calor, se propuso el empleo de agentes reticulantes de la proteína como el formaldehido o la 2,3 butanodiona, lo que hace posible la encapsulación de moléculas termolábiles. Sin embargo el inconveniente de ambos métodos sigue siendo la eliminación de las elevadas cantidades de aceite utilizadas. La técnica basada en la desolvatacion de las proteínas soluciona este problema al desarrollarse totalmente en un medio acuoso, sin la necesidad de calor. POLIMERO SINTETICO Destacan en este grupo las nanopartículas elaboradas con poliésteres de carácter hidrofóbico como el poliácido láctico y los copolímeros de este con el ácido glicólico. El método de elaboración más conocido es el de emulsión-evaporación del disolvente, en el que el polímero se encuentra en la fase interna de una emulsión O/W disuelto en un disolvente clorado (diclorometano). Las nanopartículas se obtienen tras la evaporación de este último bajo presión reducida. Nanopenetración En este método se produce la precipitación instantánea del polímero tras la adición de una solución orgánica del mismo sobre una fase acuosa. El único requisito exigible en esta técnica es que el disolvente del polímero (acetona o metanol) sea miscible con la fase acuosa a la que se incorpora. A partir de este método se pueden obtener nanocapsulas incorporando un aceite miscible con el solvente del polímero e inmiscible con la fase acuosa, con lo que el polímero precipitara (precipitacion interfacial) alrededor de una gotícula oleosa y se formara una estructura capsular. Estudios de distribución y posibles aplicaciones terapéuticas Al igual que sucede con los liposomas, las posibilidades que ofrecen las nanopartículas de modificar pautas de distribución de un PA se ven limitadas por la captación preferente por parte de las células del sistema reticuloendotelial. Asi, en estudios de distribución en animales realizados con nanopartículas biodegradables de distinta naturaleza se ha observado una acumulación mayoritaria de las mismas en el hígado (40-80% de las dosis administrada, los pulmones (0.7-3%) y el bazo (0.6- 2%).