EL POBRE RIVERA

En una ocación entra el Mayor a la oficina y le dice al secretario “què chino no durmió,
està perezoso hoy”,

èl le responde: mi mayor es que la niña molestó anoche.

el SI. Rodriguez, también secretario, escuch la conversación mientras pasaba a preparar

un café.

Mientras disfrutaba su café, por allí pasó el IT. Narváez jefe de telemática quien pregunto
a SI. Rodríguez ¿mi Mayor se encuentra en la oficina?, a lo que respondió “sí, pero esta
como molesto, porque acabo de atalajar al pobre Rivera por perezoso y por muérgano”,
en vista de esto el IT. Narváez regresa a su oficina, encontrando allí a su ayudante la PT.
Lorena, quien le pregunta ¿mi intendente, si logró hablar con mi Mayor?, y este responde
“no, preferí esperar porque estaba muy molesto con el perrazo del Rivera, por perezoso y
muérgano”, Lorena exclama “ah bueno mi intendente, me voy a almorzar”.

Lorena en el restaurante pensaba en Rivera, mientras pedía el almuerzo y la mesera le

pregunta:

- Lorena ¿qué tiene que la veo pensativa?

- Estaba pensando en que no venga por ahí mi Mayor, está furioso porque Rivera es un
perezoso, muérgano y perrazo, quién sabe qué hizo.

-La mesera continúa con sus labores y mientras sirve a los otros policiales que allí se
encuentran, no puede evitar contar a estas personas acerca del enojo del Mayor,
exclamando cada vez que comienza a contar la historia “recuerdan a Rivera el secretario
del mayor, el que vive en Soacha, dicen que el Mayor ya no se lo aguanta, yo creo que
ese muchacho hasta bandido debe ser”. Dentro de los comensales se encontraba un
amigo de Rivera, el patrullero Pinzón, quien angustiado por los comentarios llama por
celular a Rivera y le dice.

- Curso qué fue lo que hizo que está pintuco, por ahí andan diciendo que usted es un
bandido y que mi Mayor ya no lo quiere en la oficina, mejor péguese la pasada a talento
humano, no vaya y sea el diablo que esté en el listado de la erradicación en el Catatumbo,
Rivera exaltado por el estado de salud de su hija y los comentarios, corre a buscar a su
jefe y en frente de otros uniformados le reclama al oficial.

- Mi Mayor con todo respeto, si a usted le parece que yo soy un bandido, dígame que me
le he robado o le recuerdo los contratos que firmó hace días, si es tan varón dígame las
cosas en la cara y si me va a trasladar hágale que yo a eso no le tengo miedo.

El oficial disgustado por el reclamo de Rivera, ordena que sea incluido en el listado de
candidatos para erradicación en el Catatumbo.