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Evaluación de las conceptualizaciones de la escritura de los niños de primer año

Primer año básico. Escuela Eduardo Campbell, Penco. Abril 2019

Estas evaluaciones permiten identificar los saberes de los niños, regular la enseñanza de acuerdo a
las posibilidades de cada uno y diseñar intervenciones específicas para problematizar sus saberes.
Si se toman con cierta regularidad, permiten analizar el avance en los saberes de los niños
respecto de sí mismos.

En sus trabajos de investigación, Emilia Ferreiro (1991) ha caracterizado el proceso de


conceptualización de la escritura como la construcción de sucesivas formas de diferenciación tanto
de los aspectos cuantitativos como cualitativos (cantidad y calidad de marcas empleadas
respectivamente) donde es posible distinguir tres grandes períodos:

→ En el primer nivel de conceptualización de la escritura se logra la distinción entre el modo de


representación icónico y el no-icónico y con esa distinción, logran reconocer dos de las
características básicas de cualquier sistema de escritura: la arbitrariedad y linealidad.

→ El segundo nivel se caracteriza por el esfuerzo de los niños por construir formas de
diferenciación entre las escrituras. Esos criterios de diferenciación se expresan en la cantidad
de letras que una escritura debe tener para que sea legible y en la necesaria variación interna
para que una serie de grafías pueda ser interpretada.

→ En el tercer nivel los niños ingresan en el período de fonetización, es decir, buscan


correspondencias sistemáticas entre las emisiones sonoras y los segmentos gráficos.

Entre los niños de primer año, podemos hacer una distinción general entre niños pre-fonetizantes
(Javier Miranda, Vicente Inzunza y Maite Silva) y fonetizantes (Aleyn Alvarado, Borja Cartes, Julieta
Valderrama).

Javier Miranda

Escribe su nombre de esta forma:

Le doy las letras móviles de su nombre y le pido que las


ordene para que diga su nombre. Las ordena así:
En forma descontextualizada reconoce muy pocas letras, apenas tres vocales y la M.

 No conoce la P, pero la usa al escribir su propio nombre y la elige como inicial de PATO y
BOTE.
 A pesar de no conocer la U, la elige como inicial de UVA e IGUANA.
 Conoce la I por su nombre, pero la elige como inicial de DEDO.
 Elige la R –letra que no conoce- como inicial de AVIÓN. Aunque tampoco conoce la A, letra
que llama O al verla descontextualizadamente.
 Ni conoce la L, pero la elige como inicial de LUPA.
 No conoce la S –la llama “dos”- pero la elige como inicial de SOPA.
 Tampoco conoce la C, pero dice que es la inicial de CASA.
 Sí conoce la E, pero no la elige como inicial de ENANO, sino que prefiere la A.

¿Por qué?

 Elige la M como inicial de MANO.


 Elige la O como inicial de ORUGA.

Vicente Inzunza

Para su nombre escribe solo VICEN y dice “No sé más”. Cuando le pido leerlo, lo hace como si
estuviera completo: “Vicente”, en forma global.

Se niega a escribir la primera palabra (MARIPOSA). Ante la insistencia, dice “i” y escribe la letra.
Tras un momento, le pregunto se está lista o le falta y contesta “No sé”. Le pido escribir GUSANO y
antes de escribir repite GU, GU. Escribe una U más parecida a una V y nada más.

Conoce muy pocas letras. Casi todas las vocales, excepto la A, a la que llama O.

 Sin embargo, elige la A como inicial de ENANO.


 Asimismo, usa vocales que sí conoce como iniciales pero sin pertinencia: E para AVIÓN,
PATO y SOPA, I para CASA.
 Elige consonantes que desconoce (B, S, R) como iniciales de algunas palabras, solo una con
pertinencia (BOTE).

¿Por qué?

 Usa con pertinencia algunas vocales que conoce: las iniciales de UVA, IGUANA y ORUGA.
Aleyn Alvarado

Escribe su nombre convencionalmente. ¿Cómo lo lee?

Sostiene una hipótesis silábica al escribir: piensa en las sílabas que escucha y las repite. Dispone
del repertorio provisto por su nombre, pero no lo utiliza. Tampoco el resto de las vocales y la M
que conoce en forma descontextualizada. ¿Por qué?

Cuando le pido escribir la palabra GUSANO, dice “Empieza con GU, GU”, escribe una O y mientras
con la mano izquierda hace el gesto de cuernos (solo el índice y el meñique levantados) con el
dorso hacia mí, dice “Ese se parece como GU”. Ante la pregunta ¿Le faltan?, responde “Sí, me falta
la SA… no sé escribirla”.

Le pido escribir PALOMA y dice “Que empieza PA, PA, PALOMA como PAPÁ”, pero no se anima a
escribir. Le digo que escriba TORO y hace el mismo gesto de cuernos mientras dice: “Igual empieza
con U”. Luego: “Primero la TO y después la U” y “Ahora la O. Empieza TO, TO. TO, RO, O”

 No conoce la S, sin embargo la elige como inicial de MANO. En cambio, descarta la M, que
sí conoce.
 Tampoco conoce la P, pero la elige como inicial de PATO.
 Tampoco conoce la R y la elige como inicial de LUPA. Y eso que conoce la L.
 Tampoco conoce la S pero la elige como inicial de SOPA.
 Lo mismo para la B, que no conoce pero la elige como inicial de BOTE.
 Por último, no conoce la G y sin embargo dice que es la inicial de CASA.

¿Por qué?

 Usa con pertinencia la mayoría de las vocales que conoce (reconoce las iniciales de UVA,
AVIÓN, IGUANA y ENANO), pero como inicial de ORUGA elige la U. ¿Será porque la
escuchó?

Borja Cartes

Escribe su nombre en forma convencional y lo interpreta globalmente. Sus producciones son


silábicas. Para MARIPOSA escribe MIOS y, aunque lo interpreta globalmente como “mariposa”,
está representando una letra por cada sílaba. Al interpretar sus siguientes escrituras atribuye una
sílaba oral a cada letra escrita:

Escritura: U S O

I I I
Justificación: gu sa no

Escritura: O I L
I I I
Justificación: go ri la

Aparte de las vocales solo conoce cuatro consonantes. Sin embargo

 no tiene problemas en reconocer las iniciales de DEDO, PATO, BOTE, letras que no conoce.
 No conoce las tres consonantes de su nombre.
 Usa una letra que no conoce en sus escrituras, la P.
 Sí conoce la A, pero la elige como inicial de ENANO.
 Conoce la I, pero la elige como inicial de CASA.

¿Por qué?

 A pesar de llamarla “sa”, la S le sirve como inicial de SOPA.


 Reconoce las iniciales de UVA, ORUGA, IGUANA y AVIÓN.
 También reconoce las iniciales de LUPA y MANO.

Dominique Pizarro

Escribe su nombre pero al pedir que lo lea, explica que no sabe leer. Le pido escribir MARIPOSA y
me pregunta ¿la A? Sus producciones e interpretaciones son silábicas:

Escritura: A I O A

I I I I
Justificación: ma ri po sa

Escritura: U A O

I I I
Justificación: gu sa no

Escritura: A O A

I I I
Justificación: pa lo ma

Escritura: O I A

I I I
Justificación: go ri la
Sus criterios de legibilidad -las características que tiene que tener lo escrito para que pueda ser
interpretado- aceptan que no haya variedad al interior de las palabras, es decir que se repita la
misma letra en forma contigua. De esta forma, puede producir la escritura OO para TORO.
Tampoco sostiene una cantidad mínima por escritura, ya que puede poner solo una para escribir
SOL (O).

 No conoce la D ni la S, pero las elige como iniciales de DEDO y SOPA.


 No conoce la G pero la elige como inicial de CASA.
 Tampoco conoce la P, pero la elige para ser la inicial de PATO y BOTE.
 Conoce la I, pero la elige como inicial de LUPA.

¿Por qué?

 Reconoce todas las iniciales vocales.


 Conoce la M y la elige como inicial de MANO.

Julieta Valderrama

Escribe alfabéticamente y lee sus producciones en forma global. Desde estos conocimientos no
tiene problemas para descubrir las iniciales y solo desconoce una letra al verla en forma
descontextualizada: la X, que llama la hache.

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