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INVESTIGACIÓN

Revista  Ciencia  Escolar:  enseñanza  y  modelización


Vol.  1,  nº  1,  2011,  27-­‐41

La  lectura  en  la  construcción   Jorge  N.  Cornejo*

escolar  de  la  ciencia:  el  relato  


de  una  experiencia

Resumen
Žƒƒ…–—ƒŽ‹†ƒ†ǡŽƒ’”‘†—……‹×†‡Ž‹„”‘•…‹‡–ÀƤ…‘•ŠƒƒŽ…ƒœƒ†‘ƒŽ–‘•‹˜‡Ž‡•ǡ Palabras   clave:   Libros,   lectura,   Ciencia,  
tanto   en   cantidad   como   en   calidad,   lo   que   la   transforma   en   un   importante   Žˆƒ„‡–‹œƒ…‹× …‹‡–ÀƤ…ƒǡ ‹˜—Ž‰ƒ…‹×
recurso   en   la   formación   de   los   estudiantes,   como   una   herramienta   para   …‹‡–ÀƤ…ƒǤ
ayudarlos   a   pensar   la   ciencia.   Pensar   la   ciencia   para   comprenderla,   para  
constituirla   en   un   cuerpo   orgánico   de   conocimientos,   y   no   en   una   mera  
colección  de  fórmulas  y  procedimientos  operativos.  El  objetivo  del  presente  
trabajo  será  presentar  una  experiencia  llevada  a  cabo  en  el  Colegio  Bertrand  
Russell,  escuela  secundaria  privada  de  la  Ciudad  Autónoma  de  Buenos  Aires;  
‡š’‡”‹‡…‹ƒ“—‡ǡƒ–”ƒ˜±•†‡’‡•ƒ”…‘Ž‹„”‘•,  condujo  a  los  estudiantes  a  pensar  
la  ciencia.  Fueron  sus  fundamentos:  la  valorización  de  la  lectura  como  un  recurso  
fundamental  en  los  procesos  de  enseñanza  y  aprendizaje,  la  importancia  de  
tomar  contacto  con  libros,  pensar  críticamente  la  ciencia,  la  intertextualidad,  
‡Ž”‘Žƒ…–‹˜‘†‡ŽŽ‡…–‘”ǡŽƒŠ—ƒ‹œƒ…‹×†‡Žƒƒ…–‹˜‹†ƒ†…‹‡–ÀƤ…ƒǤ‘’ƒ”ƒ‘•
la   experiencia   con   ideas   presentadas   para   la   adquisición   de   las   habilidades  
lectoras   en   los   niños,   y   encontramos   convergencias   entre   la   alfabetización  
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proceso  continuo  y  permanente,  que  comienza  con  las  primeras  letras  y  se  
prolonga  en  los  logros  más  elevados  de  la  ciencia,  el  arte  o  la  tecnología.

Abstract
Š‡ ’”‘†—…–‹‘ ‘ˆ •…‹‡–‹Ƥ… „‘‘• Šƒ• ”‡ƒ…Š‡† Š‹‰Š Ž‡˜‡Ž•ǡ „‘–Š ‹ “—ƒ–‹–› Keywordsǣ‘‘•ǡ”‡ƒ†‹‰ǡ…‹‡…‡ǡ…‹‡–‹Ƥ…
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*     Gabinete   de   Desarrollo   de   Metodologías   de   la   Enseñanza.   Facultad   de   Ingeniería.   Universidad   de   Buenos   Aires.  


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Introducción con Orozco (2000), un saber cualquiera


que se transmite exclusivamente con ca-
Históricamente, el libro y la lectura han rácter instrumental despoja al mismo de
constituido una herramienta fundamental todo interés vital, es decir, de todo sentido
para la construcción de la ciencia, desde humanístico.
la caracterización del libro de texto como Por el contrario, la introducción de
el paradigma mismo de una disciplina tópicos correspondientes a la historia y a la
y como un vehículo pedagógico para la cultura en sentido amplio en la enseñanza
perpetuación de la ciencia normal (Kuhn, y el aprendizaje de las disciplinas científi-
1962), hasta la revalorización de la lectura cas y tecnológicas puede favorecer el desa-
de textos científicos como recurso didácti- rrollo de habilidades de razonamiento y de
co, postulada actualmente por, entre otros, pensamiento crítico, así como contribuir a
los autores que mencionaremos a conti- una mejor comprensión de los conceptos
nuación. Tal revalorización es paralela a un científicos (Reis et al., 2001). Se trata de
interés creciente por favorecer, por parte generar un sinergismo entre disciplinas que
de los estudiantes, la construcción de una trabajan unidas para resolver problemas
visión integral y unificada de la ciencia y conjuntos, producir ideas nuevas y cons-
del saber científico. truir el lenguaje de la ciencia escolar (To-
En efecto, de acuerdo con Hernán- rrejón Vergara y Escobedo Farías, 2010).
dez y Prieto (2000), uno de los incon- Según Arriasecq y Greca (2005), debería
venientes principales que presenta en la mostrarse que el conocimiento científico
actualidad el estudio formalizado de los actual es el resultado de un largo proceso,
saberes científicos proviene de su desco- en el que la construcción y contrastación
nexión, que obliga al estudiante a tratar de ideas y teorías es constante y se encuen-
las distintas materias como si fueran uni- tra permanentemente afectada por factores
dades en sí mismas. El saber aparecería así de diversa índole: filosóficos, culturales,
desvertebrado y atomizado, sin otorgarle sociales y estéticos, entre otros. En forma
al alumno la oportunidad de entrever una similar se expresan Khishfe y Lederman
visión de conjunto. Esto se relaciona con (2006), cuando postulan que, tanto en la
una concepción meramente operativa del enseñanza como en el aprendizaje, tanto
saber científico y tecnológico, en la que en la formación científica como tecnológi-
se pretende que el alumno aprenda pri- ca, debe buscarse la construcción de un sa-
mariamente a operar y a formular y sólo ber vertebrado, integrado, no-atomizado,
secundariamente a comprender. Las con- que permita elaborar visiones de conjunto,
secuencias inmediatas de tal pretensión reflejo de un intelecto activo y en constan-
generan en los estudiantes una carencia te evolución. Según estos autores, la cien-
de flexibilidad y de profundidad reflexiva cia deberá enseñarse y aprenderse no como
y una abundancia de mecanización, cuyo un saber meramente operativo, sino como
resultado último es la pérdida del senti- un todo racionalmente construido, inmer-
do verdadero del aprendizaje. De acuerdo so en un contexto socio-histórico, tejido a

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partir de numerosas tramas interconecta- tos de divulgación científica, estimulando


das. permanentemente la capacidad crítica del
Si bien las investigaciones sobre la alumnado. Resaltamos la importancia de
lectura en la educación en ciencias se en- la divulgación científica, pues la investi-
cuentran dispersas (Yore et al., 2003), gación de Nigro (2010) ha mostrado que
podemos encontrar diversos autores que los diferentes géneros de textos utilizados
han expresado que la lectura es una de las en clase pueden estar asociados a diferen-
herramientas más importantes para cons- tes tipos de lecturas, y que la lectura de
truir una presentación amplia de la ciencia obras de divulgación se asocia tanto a un
en la escuela y, a la vez, permitir que esta aumento en la velocidad de lectura como
formación influencie positivamente el ac- a una actitud más positiva de los alumnos
cionar futuro de los estudiantes (Jiménez con relación al texto, a una mejor com-
y Perales, 2001). Por ejemplo, Sardá et al. prensión inmediatamente posterior a la
(2006), plantean la lectura como com- lectura y a la producción de textos escritos
prensión, utilización y reflexión sobre tex- más extensos. Torrejón y Escobedo (2010)
tos para alcanzar metas propias, desarrollar han resaltado el valor de la divulgación
conocimiento y potencial propios y para científica como un medio para generar en
participar en la sociedad. Los autores ci- los jóvenes interés por el aprendizaje de la
tados plantean que este es un trabajo que ciencia. Para Roca (2005), la tendencia en
puede contribuir a la formación de ciuda- la escuela no ha ido en esta dirección, ya
danos que fundamenten científicamente que, ante la poca motivación y dificultades
sus actuaciones en relación a las temáticas del alumnado por leer textos científicos, se
socialmente relevantes, es decir, que ad- ha optado, siempre según este autor, por
quieran el hábito de fundamentar, racio- simplificar al máximo las demandas, pro-
nal, rigurosa y críticamente, su toma de porcionándoles materiales muy simples y
posición en tales cuestiones. Inversamen- adaptados y planteando preguntas sobre el
te, la lectura puede servir para que aque- texto que mayoritariamente sólo obligan a
llos ciudadanos con formación científica o una lectura literal.
tecnológica desarrollen la práctica de sus De acuerdo con Márquez y Prat
respectivas disciplinas teniendo en cuenta (2006), la lectura no es sólo uno de los
los principios éticos, las cuestiones sociales recursos más utilizados durante la vida
y las necesidades humanas. escolar, sino que puede convertirse en el
Según Da Silva y Almeida (1998), es- instrumento fundamental, a partir del
tar interesado en leer, y ser capaz de leer cual, se puede seguir aprendiendo durante
comprensiva y significativamente textos toda la vida Según Sanmartí (2007) las
de ciencias o de divulgación científica es personas han de ser capaces de modificar
fundamental para participar en una so- sus conocimientos y de apropiarse de nue-
ciedad en la que la ciencia misma avanza vos saberes a lo largo de toda su vida. Para
rápidamente. La escuela, entonces, debería esta autora, esta competencia pasa por la
incentivar el placer por la lectura de tex- lectura autónoma y significativa de todo

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tipo de textos, especialmente los de divul- lectura y la escritura no tienen una función
gación científica no estrictamente escola- accesoria, sino que son elementos consti-
res, ya que son los que circulan fuera de la tutivos básicos, noción expresada enfáti-
escuela y los que les posibilitan establecer camente por Sutton (2003), al afirmar que
relaciones entre lo que se habla dentro y hablar, observar y escribir es tan impor-
fuera de ella. Torrejón y Escobedo (2010) tante como manipular los aparatos, y que,
plantean que, a través del proceso de lec- de alguna manera, el lápiz del científico es
tura y escritura de textos de connotación más importante que otros equipamientos
científica, los jóvenes pueden articular en de laboratorio.
distintos niveles de su realidad, una com- Simon (2010) ha sintetizado estas
prensión unificada del mundo en que vi- ideas diciendo que la escritura, la creación
ven y en el que desarrollan sus actividades. científica y la invención tecnológica com-
Prat y Sanmartí (2009) analizaron cómo parten muchos aspectos y a menudo están
la lectura crítica de textos de contenido conectadas, y reivindica que la escritura de
científico de diferentes fuentes favorece la ciencia es una parte integral de la prác-
un aprendizaje de las ciencias socialmente tica científica. Según este autor, habitual-
relevante, y concluyeron que la lectura de mente la producción y la comunicación
artículos científicos orientados a la solu- de la ciencia son consideradas como dos
ción de problemas sociales ayuda al alum- estadios separados y sucesivos, de los que el
nado a conectar la ciencia escolar con el segundo depende del primero y no posee
mundo real. independencia creativa. Por el contrario, él
Para Olson (2001), los textos escritos considera que la comunicación y difusión
pueden ser considerados herramientas que de la ciencia es parte integral de la ciencia
les posibilitan a los seres humanos resolver misma, de donde la lectura, como comple-
problemas, producir creaciones y actuar in- mento, debe ser una parte integral de la
telectualmente. De acuerdo con esta idea, formación científica. De hecho, el autor
la escritura y la lectura “instrumentalizan” referido indica que la lectura en sí misma
el pensamiento y, por consiguiente, posi- juega un papel en la configuración de la
bilitan la construcción del conocimiento. ciencia.
Nigro (2010) indica que los científicos, en
su cotidiano profesional, no son la excep- Leer  en  clase  de  ciencias  
ción a este hecho. Al respecto, Florence y
Yore (2004), verificaron que los científi- A partir de lo anterior, el trabajo con tex-
cos principiantes, al pasar por el proceso tos, su lectura y su escritura, podría ser
de ingresar en la comunidad de científicos concebido como un componente fun-
expertos, demuestran apreciar que la escri- damental de la alfabetización científica,
tura, la edición y la revisión de los trabajos (Nigro, 2010; Norris y Phillips, 2003)
por ellos escritos influencia la calidad de y/o en la construcción de una forma-
su propia actividad científica. Esto signi- ción científica integral (Cornejo, 2008).
fica que, para la comunidad científica, la Concibiendo la ciencia como un conoci-

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miento social construido y estructurado Tal como afirmamos en la Introduc-


en modelos (Giere, 1988), que tiene por ción, la ciencia no debe confundirse con
objetivo explicar, comprender y predecir una mera labor de aplicación técnica. Para
el funcionamiento del mundo, y siendo Boyer (1949), por ejemplo, la ciencia es
la lectura de textos de ciencias un recur- tanto un hábito de pensamiento como una
so para hacer evolucionar los modelos de forma de vida y las matemáticas son tanto
los estudiantes (Marbá y Márquez, 2005), un aspecto de la cultura como una colec-
formar a nuestros alumnos para que sean ción de algoritmos. En efecto, la ciencia en
capaces de leer y comprender textos cien- general es parte de la cultura, y el ejercicio
tíficos se convierte en un objetivo que la de la lectura puede servir como vehículo
escuela debe asumir. para conducir a los estudiantes hacia la
En la educación media argentina, el realización de este hecho.
hábito de la lectura se halla bien estable- Hoy nos encontramos en un momen-
cido en algunas asignaturas, a partir de to en que la producción de libros científi-
la propia naturaleza de las mismas, tales cos, ya sean de texto o de divulgación, ha
como literatura o historia, por ejemplo. alcanzado altos niveles, tanto en cantidad
Sin embargo, la lectura es escasa o nula en como en calidad. Seríamos culpables de
tres materias fundamentales dentro de las una imperdonable omisión si, como edu-
Ciencias Exactas y Naturales: matemáti- cadores, dejásemos pasar la oportunidad
ca, física y química. Excluyo la biología, de utilizar esta vasta producción editorial
no por una desconsideración de su valor como un recurso en la formación de nues-
dentro de esa rama de las ciencias, sino tros estudiantes, como una herramienta
porque, quizás por implicar un mayor vo- para ayudarlos a pensar la ciencia. Pensar
lumen de conocimientos, en ella la lectura la ciencia para comprenderla, para apre-
de textos y fragmentos se encuentra sólida- henderla, para constituirla en un cuerpo
mente establecida. orgánico de conocimientos, en una verda-
Podríamos entonces preguntarnos: dera visión del mundo, y no en una mera
¿los docentes de ciencias reconocemos el colección de fórmulas, términos y procedi-
valor de la lectura como una herramien- mientos operativos.
ta para transmitir no sólo conocimientos La experiencia que relataremos en el
específicos de la materia, sino también ac- presente trabajo forma parte de un pro-
titudes, posturas, ideas, vivencias, de aque- yecto más amplio, desarrollado por do-
llas personas que construyeron el edificio centes-investigadores de la Universidad de
de la disciplina? ¿Leemos, tanto docentes Buenos Aires, cuyo objetivo fundamental
como alumnos, libros de ciencias? ¿Pensa- consiste en resaltar el rol de la lectura en
mos la ciencia y su enseñanza a través de la educación científica en general y en la
los libros? ¿O no las estaremos sometien- ciencia escolar en particular, entendiendo
do, por esta carencia de lectura, por este ambas como un proceso de adquisición
olvido del libro, a un proceso de empobre- de saberes, habilidades y valores integra-
cimiento intelectual? dos y vertebrados entre sí, no sólo como

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la consecución de destrezas técnicas espe- Descripción  de  las  actividades


cíficas.
El profesor indicó a los estudiantes que ad-
quiriesen un texto de divulgación científi-
La  experiencia
ca (La trama secreta del Universo, de Lucy y
Los objetivos generales de la experiencia Stephen Hawking), y estableció un interva-
fueron: lo de tiempo durante el cual debían leerlo.
Utilizar la lectura como recurso didácti- Se acordó que, en la medida de lo posible,
co en una clase de ciencias. no se utilizarían fotocopias, porque uno de
Generar, en los destinatarios de la ex- los propósitos de la experiencia era familia-
periencia, los principios del amor por rizar a los estudiantes con un libro de cien-
el conocimiento, por la lectura y por el cias, vivir tanto su contenido como sus as-
libro en sí mismo. pectos materiales, descubrir tanto el texto
Realizar, en el contexto de una clase de como el paratexto, apropiarse no sólo del
ciencias, que la lectura de textos cientí- espíritu, sino también del cuerpo del libro.
ficos es una lectura viva en la que una Se incentivó a los alumnos a que buscasen
parte de la vida de la humanidad se textos académicos afines, en forma, temá-
comprende y se re-crea en el intelecto del tica o contenido, al libro a ser estudiado,
sujeto lector. así como la concurrencia a bibliotecas para
Los objetivos específicos de La expe- acceder a tales obras. Se enfatizó la noción
riencia fueron: de la intertextualidad, cómo cada libro cita
Leer un texto de divulgación científica. y remite a otros libros, cómo cada texto, si
Concurrir a bibliotecas. se nos permite la expresión, es portador de
Buscar textos de ciencias. otros textos; cómo cada libro, y aún cada
Relacionar lo leído en los diversos tex- página de cada libro, es una suerte de bi-
tos. blioteca que nos introduce y comunica con
Discutir y recomendar textos de cien- un pequeño (o gran) Universo de obras.
cias. Los textos de ciencias presentan ade-
Humanizar la visión de la ciencia y de más una característica particular. Debido
la actividad científica. a su misma naturaleza, no siempre es ab-
solutamente necesario leerlos en forma
continua, de la primera a la última página.
Destinatarios Pueden ser leídos de distinta forma, se-
guirse linealmente el texto, comenzar por
Este proyecto se realizó en el Colegio “Ber-
los resúmenes y sinopsis para luego pasar al
trand Russell”, institución secundaria pri-
cuerpo principal del libro, dejar las notas
vada de la Ciudad Autónoma de Buenos
y referencias históricas para el final o em-
Aires, Argentina. Se trabajó en la asignatu-
pezar por ellas, etc. El concepto de Bayard
ra Física (5° año).
(2008), acerca de que, en un texto, no hay
sólo un recorrido de la primera a la últi-

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ma línea, sino muchos originales que un bro se transformó, por obra de sus lectores,
buen lector sabe inventar, puede aplicarse en muchos libros y, ahora a diferencia de
con mucha certeza a los libros científicos. Eco, esto no significó la muerte del autor:
Por otra parte, refiriéndonos ahora a la lec- por el contrario, los alumnos debían, en
tura en general, la visión que inicialmente todo momento, relacionar lo leído con la
se tenía de la misma la pensaba como una vida, obra y aspiraciones de los autores del
actividad pasiva, completamente dirigida texto. Así buscamos humanizar la ciencia,
por el texto, y como un proceso donde el presentarla como el resultado del trabajo
significado ya estaba construido (Yore et de hombres y mujeres con sentimientos,
al., 1998); esta visión ha dado paso a la luchas y aspiraciones, que desarrollaron
de la lectura como un proceso activo de su obra en el marco de contextos socio-
construcción de significados a partir de un históricos que los influyeron fuertemente.
texto. De acuerdo con ello, en esta expe- Según Prat y Sanmartí (2009), por otra
riencia hemos seguido la noción de Olson parte, la referencia a las ideas y al contexto
(1994), para quien la lectura es un proceso del autor estimula el desarrollo de habili-
en el que el lector, de manera conciente, dades cognitivas tales como la inferencia,
genera una interacción entre tres “mun- la identificación de propósitos y el recono-
dos” diferentes: el mundo de papel que cimiento de ideologías subyacentes.
viene definido en el texto, el mundo del Todos los objetivos del trabajo (valo-
lector con sus conocimientos, y el mun- rizar la lectura, tomar contacto con libros,
do exterior. Hacemos hincapié en que pensar críticamente la ciencia y el libro
este proceso se puede producir conciente científico, intertextualidad, rol activo del
e intencionadamente, y no limitarse a un lector, humanización de la ciencia y de la
mero juego inconsciente: por eso fue muy actividad científica), fueron explícitamen-
importante que los alumnos explicitaran te expuestos a los alumnos, reconociendo
en forma concreta el recorrido de lectura el hecho que la investigación en didáctica
elegido, las razones que los llevaron a ele- ha puesto de manifiesto que comunicar los
girlo, y los resultados obtenidos. objetivos mejora el aprendizaje del alum-
Se trata de comprender que los tex- nado (Marbá et al., 2009). Y los mismos
tos son la materia prima a partir de la cual alumnos advirtieron la afinidad de la pro-
cada persona construye su propio significa- puesta con temáticas de corte borgeano, en
do (Marbá et al., 2009); en línea con Eco particular la referencia a cada libro como
(2008), la intención es que el lector ponga continente de otros libros y a la biblioteca
algo de su parte, que sea un lector activo, como una metáfora del Universo: la clase
que su lectura recree el texto. Los alumnos, de ciencias y la de literatura encontraron
por lo tanto, tenían libertad para realizar así un inesperado punto de convergencia.
la lectura en la forma y según el recorrido Cuando se cumplió el plazo prescrip-
que eligiesen, pero luego, como dijimos, to, la discusión en clase del texto adquirió
en la puesta en común, debían explicitar características cuasi-rituales. Los alumnos
el camino que habían seleccionado. El li- mantuvieron el libro sobre el banco, junto

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a los textos afines que hubiesen encontra- tiones más directamente vinculadas a la
do. El profesor aportó un cierto número naturaleza de la labor científica y a las re-
de textos científicos, que colocó sobre su laciones entre la ciencia, la tecnología, el
escritorio, a la vista de los estudiantes. El ser humano y la sociedad. La participación
“lema” y el “logo” de la discusión fueron de los estudiantes fue activa e importan-
tomados de un dibujo en el manuscrito te, fundamentalmente porque hallaron un
G de Leonardo da Vinci, tal como lo des- espacio en el que discutir cuestiones que
cribe Vallentin (2004). Consisten en unos atañen a los problemas científicos de la ac-
rectangulitos colocados como los lomos de tualidad. La palabra escrita fue, así, motor
los libros de una biblioteca, de forma tal de debates en los que la palabra hablada, lo
que el primero cae hacia atrás y provoca la oral, resultó el instrumento fundamental.
caída de los restantes, como las fichas del Esta insistencia en el uso del lengua-
dominó. El lema que acompaña el dibu- je no debe ser minimizada. Para Sanmartí
jo, escrito por da Vinci, es: “El uno derriba (2007), aprender ciencias pasa por apro-
al otro. Con estos cuadraditos se entiende la piarse de nuevas formas de ver, pensar y
vida y los estudios humanos”. Los alumnos hablar sobre los hechos, distintas de las
comprendieron que esto simbolizaba que formas cotidianas de ver, pensar y hablar,
la búsqueda del conocimiento es continua, afirmando que, a través del lenguaje de la
que en la ciencia todas las ideas tienen un ciencia, los escolares pueden acceder a una
tiempo de vida limitado, reinando hasta cultura diferente: la cultura científica. De
que son reemplazadas por otras mejores, acuerdo con Marbá y Márquez (2005), el
y que los libros y las bibliotecas son una lenguaje es una manera de compartir los
metáfora de la vida misma. La selección de modelos científicos que tiene cada indivi-
un pensamiento de da Vinci no fue casual, duo. Con el lenguaje modelizamos, cons-
puesto que la vida y la obra de este creador truyendo relaciones de significado entre
son un ejemplo de la ansiedad y el esfuerzo palabras. A través de él podemos expresar
permanente por saber más. cómo relacionamos los distintos concep-
Se discutió el contenido general del tos y podemos saber cómo los relacionan
libro. Algunos alumnos leyeron en voz otras personas. De acuerdo con las auto-
alta varios párrafos seleccionados por el ras citadas, el lenguaje se convierte en la
profesor, o por ellos mismos. Se relacionó manera que tenemos los seres humanos
el contenido del libro con el de los demás de compartir nuestro conocimiento cien-
textos. Cada estudiante que efectuaba un tífico y, por lo tanto, hacer evolucionar
aporte desde un libro que no fuera el in- nuestros propios modelos.
dicado, debía mencionar su título, autor Finalmente, lo leído y discutido en
y, de ser posible, mostrar el libro al resto los libros se relacionó con el contenido del
de la clase, indicando cómo llegó a sus libro de texto “oficial” de la asignatura y,
manos. en las evaluaciones regulares de la materia,
Desde el punto de vista estrictamen- se incluyeron preguntas relativas a lo tra-
te científico, se hizo hincapié en las cues- bajado.

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En síntesis, la secuencia de pasos del docente, y manifestaron haber leído y


proyecto fue la siguiente: reflexionado sobre algunos capítulos
Los estudiantes adquieren un libro de de los mismos. De hecho, una alumna
divulgación científica. aportó textos que el mismo docente
Lectura del mismo. no conocía.
Los estudiantes buscan formas alter- Otros compararon lo presentado en
nativas de leer el texto. clase con conceptos o hechos que ha-
Los estudiantes concurren a bibliote- bían aprendido en otras vías de divul-
cas y buscan libros de ciencias afines gación científica (TV, Internet, etc.),
al texto leído. pero en cualquier caso contrastándolo
Los estudiantes se recomiendan textos con el contenido del libro.
entre sí. Se despertaron algunas vocaciones
Puesta en común: comienza con el científicas, tan importantes y nece-
dibujo y el aforismo de da Vinci. Se sarias en la actualidad. Citando tex-
colocan diversos libros a la vista de los tualmente a una alumna: “Después de
alumnos, en el aula. esto la ciencia me interesa mucho. Pude
Puesta en común: lectura en voz alta aprender de qué se trata en realidad la
de párrafos del texto. actividad científica”.
Puesta en común: se presentan y El valor de la posibilidad de discutir,
muestran otros libros, aportados por y el interés por hacerlo. Cita textual:
los estudiantes. “Una cosa que lamento de la finaliza-
Puesta en común: se discute la huma- ción de las clases son todas las cuestiones
nización de la ciencia. de física que quedaron sin discutir”.
Puesta en común: se relaciona lo estu- Esta experiencia puede parecer sen-
diado con el libro de texto oficial de la cilla: de hecho, la lectura y discusión de
asignatura. libros, las referencias intertextuales, son
Evaluación, consistente en una discu- prácticas rutinarias en lengua o literatura.
sión abierta con los estudiantes acerca Pero constituyen algo revolucionario en la
de sus impresiones sobre la experiencia. clase de ciencias.
En particular, se los consultó sobre sus Y la experiencia no fue sólo de lectura,
opiniones relativas al valor de trabajar sino también de contacto con el libro. El
con libros de divulgación científica. énfasis depositado en la materialidad del
texto, en que los estudiantes vean, palpen,
Evaluación interactúen material y objetivamente con
libros, no debe ser minimizado. La idea
En general, los alumnos respondieron fa- es que el docente sea el mediador en la
vorablemente a la experiencia, hecho evi- transformación de los alumnos en sujetos
denciado en cuatro aspectos: lectores. Por ello es importante que los
Distintos estudiantes aportaron textos estudiantes vean a sus educadores como
complementarios al propuesto por el modelos lectores que portan libros, los lle-

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van al aula, hablan de ellos y comparten ‡ƪ‡š‹‘‡•ƤƒŽ‡•


su lectura.
Se trata aquí de vivenciar el “paratex- De acuerdo con Sanmartí (2007), los in-
to”, definido como la forma, impresión, y vestigadores científicos crean conocimiento
cualidades materiales del texto (Chartier, experimentando, hablando y escribiendo.
2008), las que ubican al libro en un con- Para la consolidación de un conocimien-
texto de producción social e histórico y lo to no sólo son importantes las ideas y los
transforman en un objeto que forma par- experimentos que posibilitan obtener evi-
te de las redes de discusión que circulan dencias para sostenerlas, sino también las
en una época determinada, con un modo discusiones entre científicos, que ponen a
específico de producción y difusión. Un prueba las nuevas maneras de hablar acerca
lector nunca se enfrenta a un texto abs- del nuevo saber, y los artículos escritos que
tracto, ideal, desprovisto de materialidad, posibilitan comunicarlo. Según esta autora,
sino que, por el contrario, maneja objetos de manera similar los jóvenes que aprenden
cuyas modalidades gobiernan la lectura y ciencia realizando una actividad científica
dan las claves posibles de su propia inter- escolar no sólo reconocen nuevas ideas e
pretación. El contacto con el libro, como identifican apoyos y refutaciones, sino que
objeto material, es, entonces, fundamental también aprenden a hablar y escribir sobre
para la construcción del “sujeto lector” que ellas, de forma que ese hablar y ese escri-
buscamos. bir les posibilita dar un mejor significado a
Pablo Neruda, en su “Oda a las cosas” aquellas ideas y experimentos. Es decir, se
(1954), escribió aprende ciencias no sólo experimentando,
“Ay, cuántas cosas puras ha construido el sino también aprendiendo a hablar, leer y
hombre: de lana, de madera, de cristal, escribir ciencia. Esto lo sintetizan Arca et
de cordeles, mesas maravillosas, navíos, al. (1990), cuando expresan que experien-
escaleras. Amo todas las cosas, no porque cia, conocimiento y lenguaje son tres palabras
sean ardientes o fragantes, sino porque no emblemáticas en la educación científica, y
sé, porque este océano es el tuyo, es el mío: que cada una de ellas presupone de algún
los botones, las ruedas, los pequeños tesoros modo las otras dos, ya que se encuentran
olvidados…todo tiene en el mango, en el íntimamente interrelacionadas, sin un or-
contorno, la huella de unos dedos, de una den jerárquico entre ellas.
remota mano perdida en lo más olvidado Como dijimos, la experiencia descri-
del olvido…” ta es sencilla y habitual desde el punto de
Entre esas “cosas” que Neruda amaba, vista de materias como lengua o literatura,
incluyamos los libros. Y para llegar a amar- pero revolucionaria para las asignaturas de
los, conozcámoslos, sintamos su cuerpo, su tipo científico. Nosotros creemos que pue-
textura, su materia, su realidad. de haber un grado de convergencia entre
la clase de ciencias y la de literatura, aún
respetando la distancia que necesariamen-
te debe existir entre ambas.

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El valor de la erudición, la necesidad Esta multiplicidad de materiales im-


de pensar sobre lo escrito, la importan- plica el trabajo con distintos lenguajes, con
cia del autor, son nociones de las ciencias diferentes formas de expresar las nociones
literarias que los docentes de Ciencias científicas. El lenguaje de las obras de di-
Exactas y Naturales podemos aprender e vulgación parece abrir un canal para que
incorporar. los estudiantes se acerquen al lenguaje del
La ciencia debe ser pensada, razonada, libro de texto. Nuevamente, es el lenguaje
reflexionada. Pensar sus métodos, su forma el que establece diferencias entre un libro y
de trabajar, sus implicaciones sociales, su otro, pero esta diversidad de “idiomas” no
esfuerzo por construir una visión del mun- es contradictoria, sino complementaria.
do, su relación con la tecnología. Y el libro En síntesis, una actividad como la
se revela como el instrumento fundamen- propuesta puede contribuir a acercar a los
tal para realizar tal reflexión, como el apo- estudiantes a los libros de ciencias, estimu-
yo por excelencia del pensamiento. lar su lectura y permitir una mejor y más
Un detalle interesante de esta expe- humana comprensión de la naturaleza de
riencia es que, una vez finalizada, varios la ciencia y de la actividad científica. Por
alumnos, espontáneamente, regresaron al supuesto, también se presentaron algunos
texto “oficial” de la asignatura y estudia- problemas. Desde un punto de vista prác-
ron, por su propio interés, algunos temas. tico, el principal consistió en una cierta
El trabajo con textos generales de ciencias, “inercia” manifestada por los jóvenes para
y con obras de divulgación científica, por realizar esta experiencia, que implica adop-
lo tanto, lejos de reemplazar al manual de tar una postura activa para la consecución
estudio, contribuyó a su revalorización e del conocimiento, y que no puede realizar-
incentivó su empleo. se sólo con un buscador de Internet. In-
De hecho, la idea es que el estudio ternet es un excelente complemento para
del libro de texto propiamente dicho sea la esta actividad, por constituir un vasto ar-
culminación de los procesos de enseñan- chivo de datos, informaciones y conceptos
za y aprendizaje, y que en tal culminación científicos (de hecho, esto fue una de las
converja y confluya todo lo leído y estu- razones que originalmente condujeron a
diado previamente. Si bien, como afirma su creación), pero sin el contacto, físico e
Solaz-Portolés (2009), el libro de texto intelectual, con el libro (mejor dicho, con
continúa utilizándose en ciencias como un “los libros”), tanto con su forma como con
recurso didáctico básico en países y situa- su contenido, la experiencia no podría rea-
ciones educativas distintas, permaneciendo lizarse.
como uno de los principales determinantes Esto nos conduce a una nueva re-
del currículum en ciencias, consideramos flexión: aprender, a través de los libros, no
que la promoción de la lectura científica sólo a pensar la ciencia, e incluso no sólo
en la escuela implica hoy recurrir también a vivir la ciencia, sino también a realizar el
a otros materiales, tales como las obras de sentido de la búsqueda del conocimiento,
divulgación científica. y hacer propia dicha búsqueda. Para San-

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martí (2007), en el contexto actual, en el observar, experimentar, hablar, discutir,


que la información nos llega fundamen- escribir (Sanmartí, 2007).
talmente a través de Internet, no se puede Es interesante advertir cómo algunas
renunciar al reto que representa conseguir ideas relativas a la alfabetización inicial
que nuestros alumnos lean comprendiendo de los niños pueden ser provechosamen-
el significado de un texto y que aprendan te aplicadas a la alfabetización científica
a disfrutar leyendo ciencia. Esta sensación de jóvenes y adultos. Por ejemplo, Cuter
de gozo con la lectura no es una simple (2007), señala que, entre las condiciones
metáfora. Volviendo a Sanmartí (2007), básicas para que los niños aprendan a leer,
una de las funciones de los que enseñamos se encuentran:
ciencias a los jóvenes es ayudarlos a reco- la interacción permanente con los
nocer la importancia del lenguaje en cual- libros, que implica tanto su lectura
quier aprendizaje y, muy especialmente, como su manipulación
del placer que supone hacerse compren- que haya una biblioteca en el aula o,
der y comprender lo que dicen los demás. en su defecto, que haya en la misma
Han de poder experimentar el gozo que se libros a la vista
siente cuando se comprueba que un texto que la lectura del docente sea una ac-
escrito comunica bien las ideas, cuando un tividad sistemática
discurso oral está bien organizado y es con- que los chicos dispongan de tiempo
vincente, o cuando al leer se comprende el para conversar entre ellos acerca del
contenido y se puede establecer una varie- texto que están leyendo y que se reco-
dad de relaciones con lo ya conocido. Para mienden libros unos a otros
Torrejón Vergara y Escobedo Farías, el leer que se destine un momento para la
debe constituir un placer, mientras que, en lectura en voz alta
la opinión de estos autores, durante déca- Basta aún repasar superficialmente la
das la lectura y otras disciplinas se enseña- experiencia que hemos descrito para adver-
ron con un enfoque mecánico que permi- tir las similitudes que presenta con esta serie
tía sólo comprender ciertas oraciones y no de normas elementales para la alfabetización
necesariamente profundizar en un libro, es inicial. Quizás esto no deba sorprendernos,
decir, pensar y emocionarnos. puesto que simplemente pone al descubier-
No pretendemos expresar, por supues- to el hecho que la alfabetización es un pro-
to, que es posible aprender ciencia, o efec- ceso continuo y permanente, que comienza
tuar una construcción escolar de la ciencia, con las primeras letras y se prolonga en los
sólo mediante la lectura. En efecto, en el logros más elevados de las alfabetizaciones
proceso de aprender ciencias, de apropiar- científica, artística o tecnológica.
se de sus modelos teóricos, raramente se En cualquier caso, el libro está siem-
aprende sola y exclusivamente a través de pre presente, quizás porque la palabra está
la lectura, sino que esta última desempeña siempre presente en todo acto, en todo
distintas funciones en conjunción e inte- proceso de alfabetización. Alfabetizarse no
racción con otras actividades cognitivas: es sólo aprender un lenguaje, ya sea el len-

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guaje cotidiano o el lenguaje científico, en miento. Es, por lo tanto, aprender a pensar
tanto instrumento de comunicación con y en esta experiencia buscamos que la alfa-
otros, sino también aprender un lenguaje betización científica implique y resulte de
en tanto instrumento y materia del pensa- aprender a pensar con libros.

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