Cuarenta años representan un buen espacio de tiempo para hacer balance y para otear el futuro. A cuarenta años de la inauguración del concilio Vaticano II es ciertamente oportuno ver qué supuso dicho evento eclesial, en qué se ha avanzado y cuáles siguen siendo las tareas pen- dientes. Este es el objetivo del artículo que presentamos.
A 40 años del Vaticano II, una mirada al proceso eclesial acontecido,
Christus, nº 733, (2002) 12-17
Al conmemorar los 40 años cilio que favoreciera la unidad en-
del inicio del concilio Vaticano II, tre los cristianos y propugnó que conviene recordar que los consul- todos los obispos del mundo tores del Papa Juan XXIII no veían aportaran sus puntos de vista al necesaria su convocatoria. Argu- servicio evangelizador de la Igle- mentaban que bastaba con la pa- sia.A la muerte de Juan XXIII, el 3 labra del Pontífice para definir al- de junio de 1963, es elegido Papa guna verdad y que Trento y el Va- Pablo VI, quien continúa y lleva a ticano I ya habían definido clara- buen puerto el concilio. mente el núcleo central de nues- El concilio Vaticano II partía de tra fe. La iglesia católica no sufría las posturas teológicas y pastora- ninguna crisis por posturas cismá- les de los concilios de Trento y del ticas o heréticas. ¿Para qué, pues, Vaticano I, y de la realidad social y un concilio? religiosa del siglo XX, posterior a Sin embargo, Juan XXIII y un la segunda guerra mundial. Los selecto grupo de pensadores y padres conciliares, a la luz de la pastores consideraban necesaria tradición y de los signos de los una renovación de la Iglesia en sus tiempos, llegaron a conclusiones estructuras, pensamiento y prác- sobre el ser y misión de la Iglesia tica pastoral, para adecuarla a los que representaban un cambio “co- nuevos retos de la situación social pernicano”. El eje de comprensión y religiosa del mundo. La palabra y vida de la Iglesia cambia de la clave que sintetizaba esta postura “Iglesia jerárquica”, hacia la “Igle- era aggiornamento. sia Pueblo de Dios” (capítulo 2 de Tras un oportuno discerni- Lumen Gentium). El mundo, de ser miento, Juan XXIII convocó, me- considerado lugar de pecado, pasa diante la constitución apostólica a ser considerado como lugar e Humanae salutis, un concilio ecu- historia de salvación, al servicio ménico (25 de diciembre de del cual está la Iglesia como sacra- 1961). Fueron invitados los cristia- mento de unidad y salvación del nos de Oriente y de las iglesias género humano. históricas de Occidente. El Papa En los textos conciliares apa- dejó claro que pretendía un con- recen expresiones que manifies-