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CAPITULO XIII

OPERACIONES TACTICAS BASICAS

SECCION A

OPERACIONES OFENSIVAS

I. CONCEPTOS GENERALES
A. Las operaciones ofensivas son aquellas emprendidas para atacar al
enemigo. Su desarrollo llevara implícito el ejercicio de la iniciativa.

La superioridad de la conducción y de la tropa se exterioriza mejor en esta


clase de operaciones, la superioridad numérica no siempre es una
condición previa para el éxito.
B. La finalidad de las operaciones ofensivas sera cumplir uno o mas de 1os
siguientes propósitos.

1. Aniquilar fuerzas enemigas.


2. Imponer nuestra voluntad sobre la del adversario.
3. Capturar fuerzas enemigas.
4. Privar al enemigo de medios necesarios.
5. Conquistar terreno.
6. Desviar la atención enemiga a otras zonas.
7. Afrentar al adversario.
C. Las operaciones ofensivas obraran por la maniobra, el poder de fuego, la
potencia de choque y la dirección en que son conducidas.

1. Toda operación o procedimiento utilizado para fomentar la


perturbación en la moral y en la retaguardia del que resiste,
contribuirá al éxito más rápido de la operación ofensiva.
2. A su vez toda operación ofensiva requiere seguridad y solidez en la
retaguardia, sea cual fuere la magnitud de las fuerzas que se
empeñan.
3. Las operaciones complementarias y subsidiarias serán valiosos
auxiliares que incrementarán las posibilidades de éxito en las
operaciones ofensivas.
D. En las operaciones ofensivas se buscará principalmente:

1. Sorprender al enemigo.
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2. Lograr por la maniobra importantes ventajas sobre él,
particularmente buscando la superioridad en el lugar decisivo.
3. Explotar estas ventajas para destruirlo o aniquilarlo.
Todos los medios y recursos serán utilizados para lograr esos objetivos.

II. CONSIDERACIONES BASICAS


A. El comandante concebirá las operaciones ofensivas en términos de
objetivo, tiempo y espacio. El análisis de la misión y el examen de la
situación le indicarán la mejor combinación de estos factores para obtener
seguridad de éxito.

1. Las misiones ofensivas frecuentemente tendrán objetivos


materiales en el terreno, aunque una fuerza enemiga podrá ser
designada como objetivo; particularmente cuando se busque su
aniquilamiento.
2. Para conquistar su objetivo una fuerza avanzara a través, sobre o
alrededor del enemigo.
B. El ambiente operativo ejercerá marcada influencia sobre las operaciones
que ejecuten las fuerzas. Los amplios espacios geográficos donde
normalmente se deberá operar, determinaran que casi siempre las fuerzas
sean escasas y facilitarán la realización de todo tipo de maniobras y por
ende el logro de la sorpresa. Esta ventaja que el terreno ofrece debe ser
adecuadamente explotada, recurriendo a las fuerzas que resulten más
aptas.
C. Normalmente los resultados decisivos serán obtenidos mediante la
ejecución de hábiles maniobras por fuerzas móviles, potentes, rápidas y
de gran autonomía, constituyendo agrupamientos de armas combinadas
debidamente balanceadas.
D. Las operaciones ofensivas serán concebidas, ya sea para dividir las
fuerzas enemigas y derrotarlas en detalle como para explotar una
situación favorable que permita no solo la propia maniobra destinada a
crear y/o aprovechar vulnerabilidades en la posición enemiga, sino
también la mayor concentración posible de los medios para lograr una
adecuada relación de fuerzas que aseguren el éxito en el lugar decisivo.

E. La rapidez y agresividad son dos exigencias para el éxito de las


operaciones ofensivas.

1. Para asegurar una ejecución rápida, el comandante deberá obtener


el mayor rendimiento del personal y de los medios de movilidad
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disponibles. Seleccionará la mejor combinación de tropas, vehículos
terrestres y aeronaves, necesarios para proporcionar a la fuerza el
grado deseado de movilidad requerida por su plan general de
maniobra.
2. La agresividad se logrará motivando o impulsando a los
combatientes con una adecuada acción de comando, donde el
ejemplo personal tendrá real preponderancia
F. En situaciones en que se presenten frente a frente fuerzas adversarias
que se desplacen buscando obtener una ventaja táctica, el comandante
deberá actuar con máxima velocidad y agresividad para lograr que esa
ventaja se vuelque a su favor. Estas situaciones podrán originarse en la
aproximación para tomar contacto y en la explotación. El desarrollo de
este combate será distinto según sea la situación inicial de ambos
adversarios. Cuando el atacante deba actuar sin mayores preparativos,
desde la marcha de aproximación tendrá marcada influencia la iniciativa
de los comandos y la capacidad y agresividad combativa de las tropas.

G. En nuestros TT.OO. en muchas circunstancias la defensa se verá obligada


a ocupar con reducidos efectivos, posiciones con grandes, frentes y
profundidades, que le impondrán ocuparlas en forma discontinua.

1. Estas vulnerabilidades deberán ser aprovechadas por el atacante


para lograr el objetivo perseguido en la forma más efectiva y con el
menor costo.
2. La situación determinante para que el comandante resuelva cual
será la operación ofensiva a emplear (maniobra envolvente,
explotación lanzada sin ataque previo; ruptura o ataque frontal para
arrollar una parte débil de la posición, etc.).
H. La sorpresa deberá ser buscada en todo aquello que pueda afectar la
capacidad de combate del enemigo: Lugar, dirección de ataque, forma de
ejecución, fuerzas empeñadas; etc. Todos los recursos que presenten al
enemigo algo inesperado y que pueda trastornar sus planes deben ser
puestos en práctica. Todas esas medidas deberán ser adecuadamente
complementadas con otras de seguridad, encubrimiento y engaño, etc.

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I. Una operación ofensiva en todas las formas de ejecución del ataque o en
la explotación, puede ser interrumpida en forma temporaria. Ello podrá
ocurrir cuando se ha conquistado el objetivo previsto, cuando en el
conjunto de la operación en desarrollo no convenga continuar en la misma
o bien cuando no se cuente con las fuerzas y/o medios necesarios para su
prosecución.

J. Las horas de obscuridad, especialmente en terreno muy compartimentado;


podrá señalar también esa conveniencia, pero solo como caso de
excepción y por tiempo muy limitado, dado que las operaciones durante la
noche deben proseguirse con las limitaciones propias de la poca
visibilidad, pero buscando no perder la iniciativa ni el ímpetu de la
operación.

III. PLANEAMIENTO DE LAS OPERACIONES OFENSIVAS


A. Los principios, normas y procedimientos de planeamiento expresados en
esta sección son de aplicación a toda clase de maniobras ofensivas con
sus distintas variantes y combinaciones.
B. El planeamiento para una maniobra ofensiva será iniciado por los
exámenes de situación del Estado Mayor y del comandante, incluyendo su
concepto inicial, y seguido por las actividades para el desarrollo de la
misma.

1. Al confeccionarse los planes se deberán adoptar toda clase de


previsiones que posibiliten la explotación de cualquier situación
favorable que se presente durante la ejecución de la operación.
2. El fracaso en el aprovechamiento de las oportunidades que se
presenten, traerá como consecuencia operaciones lentas en las
cuales el atacante sufrirá importantes pérdidas.
C. Fundamentos de la ofensiva.

Todo comandante concebirá las operaciones ofensivas basándose en los


fundamentos de la misma que son:
1. Objetivo.
2. Maniobra
3. Distribución de fuerzas
4. Coordinación y control
5. Seguridad
6. Flexibilidad
7. Sorpresa
8. Plan de apoyo de fuegos
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D. Previo a la ejecución de toda operación ofensiva el comandante deberá
materializar un plan que normalmente comprenderá:

1. Misión
2. Enemigo
3. Terreno y condiciones meteorológicas
4. Objetivo
5. Determinación del esfuerzo principal, esfuerzo secundario y reserva
6. Fuerzas disponibles
7. Formación para el ataque o explotación
8. Organización para el combate
9. Medidas de coordinación y control
10. Seguridad
11. Planes para la continuación del ataque luego de conquistarlo
12. Planes de alternativa
13. Apoyo de las armas
14. Apoyo de las tropas técnicas
15. Apoyo de SPAC
IV. CONSIDERACIONES SOBRE LOS ASPECTOS CONTENIDOS EN EL PLAN
A. Misión

1. Es el factor primordial en la realización del examen de situación y


consecuentemente en el plan de la operación. Los elementos
integrantes de ambos deberán ser continuamente relacionados con
la misión para constatar si contribuyen a su cumplimiento.
2. La misión, en cualquier clase de operación ofensiva, puede imponer
conquistar una zona, aniquilar, arrollar o aferrar a una fuerza
enemiga. A efectos de facilitar el planeamiento, la coordinación y el
control; la misión normalmente será materializada en determinados
objetivos del terreno y excepcionalmente en tropas, cuya conquista
permitirá el control de la zona o facilitara la destrucción de la fuerza
enemiga.
B. Enemigo

1. La reunión de información y la elaboración de inteligencia será


continua durante el planeamiento y en la ejecución de la operación.
Se explotaran todos los medios de reunión y fuentes de información
disponibles para proporcionar a quien comanda las fuerzas,
informaciones exactas y oportunas sobre el enemigo.

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2. Se deberá obtener toda la información posible que permita aclarar
la situación del enemigo. Esta deberá estudiarse a fin de determinar
sus efectivos, composición, dispositivos, ubicación, posibilidades y
procedimientos.

a. Se exploraran sus vulnerabilidades y se evitaran, en lo


posible, sus partes fuertes.
b. El conocimiento del dispositivo enemigo influirá entre otros
factores, en la selección del tipo de maniobra ofensiva a
ejecutar y en la organización para el combate a adoptar.
c. El conocimiento de los procedimientos, posibilidades y
vulnerabilidades del enemigo, permitirá a un comandante
determinar con más exactitud las ventajas y desventajas de
cada solución posible.
C. Terreno y condiciones meteorológicas

1. Terreno

a. Su influencia deberá ser considerada combinada con los


restantes factores de la situación
b. En general interesan en las maniobras ofensivas: Las
posibilidades de observación, para el enlace, la vigilancia y
los campos de tiro, las cubiertas contra la observación, y el
fuego terrestre enemigo; los obstáculos materiales y
artificiales que restringen la maniobra ofensiva o la protegen;
los puntos críticos cuya posesión es ventajosa para bloquear
o apoyar la maniobra, las direcciones de aproximación,
constituidas por fajas de terreno que proporcionan
continuidad al desplazamiento, disponibilidad de
observación, cubiertas, campos de tiro, espacio para la
dispersión y para la maniobra, las facilidades para el
movimiento, considerando la movilidad de la fuerza, los
obstáculos naturales y artificiales, el tránsito a campo
traviesa, la red de caminos y sendas, y el efecto que ejercen
sobre estos factores las condiciones meteorológicas.

2. Condiciones meteorológicas

a. Las condiciones meteorológicas que podrán presentarse en


el momento de la operación (temperatura, precipitaciones,
visibilidad, nubosidad, vientos, laminación solar, lunar y
crepuscular) deberán ser establecidas recurriendo a
pronósticos y estadísticas adecuadas, para poder analizar su
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influencia sobre las operaciones del enemigo, las propias, y
sobre el empleo de medios y armas especiales.
b. Por lo general, su influencia se hará sentir especialmente
sobre: la transitabilidad que requiere el ataque, la visibilidad e
iluminación para el enlace y apoyos de las armas y tropas
técnicas, sobre las condiciones de aeronavegación, que se
traducen en la posibilidad de recibir apoyo o ataques aéreos,
y sobre los materiales y estado físico de las tropas.
D. Objetivo

1. Se seleccionaran los objetivos de las operaciones ofensivas


después de un cuidadoso análisis para determinar las zonas o
terrenos que deberán ser capturados o controlados para cumplir
con la misión o para contribuir a su cumplimiento.

a. Los objetivos así seleccionados constituirán la base para la


determinación del plan general de maniobra.
Los mismos serán considerados en relación con la actitud del
enemigo, el terreno y las condiciones meteorológicas
pronosticadas.
b. Estos factores, una vez comparados con el poder de corn-
bate, dispositivo y posibilidades de las propias fuer-zas,
indicaran las SS.PP.

2. El objetivo podrá estar constituido por una característica importante


del terreno o una fuerza enemiga. La asignación de un objetivo a
una fuerza podra imponerle su conquista y mantenimiento bajo su
control hasta que sea relevada o bien su destrucción.
Estas misiones deberán ser posibles, dentro de las limitaciones de
tiempo y espacio y dentro de las necesidades de la fuerza a la cual
le han sido asignadas.
3. Los objetivos deberán ser fácilmente reconocibles, pudiendo ser
empleados para lograr unidad de acción y esfuerzos, para conducir
la operación por fases o para facilitar un cambio en la dirección del
ataque.
4. Solo se asignaran objetivos intermedios cuando ello contribuye al
cumplimiento de la misión de la fuerza, facilite la ocupación del
objetivo final y/o asegure el control de las fuerzas de maniobra.
En las operaciones ofensivas con elementos blindados o
mecanizados excepcionalmente se asignaran objetivos intermedios.
5. Un objetivo debe tener las siguientes características:

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a. Su conquista debe ser posible dentro de los límites de tiempo
y espacio impuestos por la misión.
b. Su conquista debe asegurar la destrucción del enemigo en
su posesión o la amenaza de su captura debe obligarlo a
abandonarla.
c. Debe permitir la convergencia de esfuerzos.
d. Debe ser fácil de identificar.
e. Su ocupación debe facilitar las operaciones futuras.
E. Determinación del esfuerzo principal, esfuerzo secundario y reserva

1. Esfuerzo principal

a. En las operaciones ofensivas será conveniente determinar un


esfuerzo principal y uno o más esfuerzos secundarios.
Esfuerzo se designara como principal aquel que procurara
los resultados decisivos y tendrá las mayores posibilidades
de éxito. El comandante de la fuerza deberá procurar brindar
flexibilidad en la asignación de los objetivos para el esfuerzo
principal, pues aun cuando alguno parezca ofrecer la mejor
posibilidad de cumplir exitosamente la misión, durante el
desarrollo de la operación podrá surgir otro que ofrezca una
mayor contribución al éxito de la misión.
b. El esfuerzo principal tendrá prioridad en la asignación de
apoyo de combate. Al mismo tiempo se le proporcionaran los
apoyos que posibiliten obtener una superioridad decisiva
sobre el enemigo.
c. El esfuerzo principal tiene como características: frente
estrecho, fuerte apoyo de artillera, tanques, aviación,
ingeniería, etc. Así como un escalonamiento profundo de
reservas importantes.

2. Esfuerzo secundario

El o los esfuerzos secundarios deberán contribuir al éxito del


esfuerzo principal mediante la ejecución de una o más de las
siguientes tareas:

a. Conquistar o controlar un terreno que facilite la ejecución del


esfuerzo principal o destruir las fuerzas que lo dificulten.
b. Aferrar o contener el enemigo.
c. Engañar al enemigo sobre la ubicación del esfuerzo principal.
d. Forzar al enemigo o empeñar a su reserva prematuramente

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e. Impedir el refuerzo a las tropas enemigas que enfrenten al
esfuerzo principal.
f. Los esfuerzos secundarios se caracterizan por su falta de
profundidad, reservas mínimas y frentes amplios.

A los esfuerzos secundarios se les asignaran los medios


imprescindibles (mínimos necesarios) para el cumplimiento de la
misión impuesta.

3. Reserva

a. Una parte del poder de combate será mantenida como


reserva para ser empleada en el momento y lugar decisivo a
fin de obtener una rápida y oportuna decisión.
La misma será empleada para explotar el éxito del ataque,
mantener su impulso y proporcionar seguridad.
La reserva será uno de los principales medios a disposición
del comandante para influir en la acción, una vez que la
operación este en desarrollo.
b. La fuerza y composición de la reserva variaran con la misión,
las fuerzas disponibles, la operación táctica, el terreno, la
probable reacción enemiga y el conocimiento de la situación.
Normalmente deberá contar con la mayor cantidad de las
siguientes características: movilidad, rapidez, potencia de
fuego y blindaje, lo que facilitara su empeñamiento oportuno.
c. Cuando la situación sea clara y las posibilidades del enemigo
sean ilimitadas, la reserva podrá constituirse con efectivos
menores. En tanto cuando la situación sea confusa la reserva
se podrá constituir inicialmente con la masa de las tropas y
estará preparada para ser empleado en cualquier lugar.
La reserva deberá ser suficientemente fuerte como para
obtener una decisión cuando sea empeñada, pero las
fuerzas asignadas a la misma no deberán debilitar
indebidamente el esfuerzo principal. Deberá contar con
apoyos adecuados, incluidos el transporte necesario; tanto
aéreo como terrestre, para obtener la movilidad requerida.
d. Una vez que la reserva haya sido empeñada, se organizara
de inmediato una nueva reserva. Cuando ello ocurra se
deberá informar al comando superior.
F. Fuerzas disponibles

1. Después de haber determinado los objetivos y el plan general de


maniobra, se distribuirán las fuerzas disponibles y los apoyos
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necesarios. Los medios disponibles rara vez permitirán que las
fuerzas de ataque y la reserva cuenten con igual poder de combate.
Además no será conveniente actuar con excesivo poder de
combate contra el esfuerzo principal del enemigo, cuando en otra
parte pueda ser empleado con mayor efectividad y economía sin
afectar el cumplimiento de la misión.
2. Los elementos de combate y apoyo que participen en una
operación ofensiva no siempre serán orgánicos sino que serán
conformados en relación directa con la misión y el objetivo a
conquistar o retener.
3. Por sobre todos estos aspectos se impone otro de gran importancia
que es el valor combativo de la fuerza y que se basa en la calidad y
fuerza espiritual de los hombres que la componen. Ello debe ser
motivado y explotado por todo comando, cualquiera sea su nivel
G. Formación para el ataque o explotación

1. El análisis de la misión, del terreno y condiciones meteorológicas,


del enemigo y las propias tropas disponibles permitirán determinar
la formación inicial para la operación que ofrecerá las mejores
posibilidades de éxito. Esta formación podrá sufrir modificaciones
durante el desarrollo de la acción, debido al cambio de algunos de
los factores señalados.
2. Normalmente los elementos blindados y mecanizados, por sus
características particulares, están capacitados para cambiar
rápidamente dicha formación e incluso su organización para el
combate en forma que mejor satisfaga el cumplimiento de la misión
impuesta.
3. La organización para el combate de una fuerza, en todo tipo de
operación ofensiva, se basa en la necesidad de cumplir en la mejor
forma posible una misión determinada. La vinculación de
dependencia que se adopte será particular de cada clase de
operación ofensiva y deberá permitir el empleo más eficaz de los
medios puestos a disposición.
H. Medidas de coordinación y control

1. Los planes de ataque incluirán las medidas de coordinación y


control necesarios para los distintos aspectos de la operación.
2. Como mínimo serán prescritos los objetivos y la hora de iniciación
del ataque.
3. Podrán incluir, además, medidas adicionales tales como: la
asignación de zonas de acción, ejes de avance, dirección de
ataque, líneas de partida y líneas de fase.
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4. Asimismo se evitara una indebida restricción de la libertad de
acción de los comandantes subordinados. En situaciones fluidas se
prescribirán las mínimas restricciones necesarias para evitar
interferencias
I. Seguridad

1. En la operaciones ofensivas, la seguridad se obtendrá empleando


fuerzas de seguridad (a los flancos, retaguardia y vanguardia) y
fuerzas de cobertura.
2. Las operaciones en frentes muy extendidos, que será nuestra
norma, por las características de los probables TT .OO., no solo
dificultara el apoyo mutuo sino también la seguridad entre los
distintos agrupamientos.
3. El empleo de medios técnicos y tropas (reconocimientos) podrán
permitir superar en parte estas dificultades.
4. La retención de una reserva adecuada, de gran movilidad y rapidez
para los desplazamientos, como así también el conocimiento de
contramedidas inminentes del enemigo; y la reunión precisa y
oportuna de información, serán esenciales para la seguridad.
J. Planes para la continuación del ataque luego de conquistado el
objetivo

1. Los objetivos serán asegurados luego de su conquista, utilizando


las menores fuerzas y el máximo empleo de fuego de apoyo. El
resto de las fuerzas se reorganizaran para continuar el ataque sin
demoras.
2. Determinados elementos de combate mantendrán el contacto con el
enemigo y obtendrán información que le servirá al comandante para
planear futuras acciones no previstas en el planeamiento inicial.
3. La continuación del ataque con tropas frescas en una nueva
dirección de ataque o la explotación del éxito por la reserva podrán
requerir un sobrepasamiento. El sobrepasamiento será ejecutarlo a
la mayor velocidad posible a efectos de ofrecer la menor congestión
de tropas y medios y consecuentemente la menor vulnerabilidad.
K. Planes de alternativa

1. En el planeamiento de las operaciones ofensivas se elaboran


planes de alternativa para hacer frente a situaciones que signifiquen
un cambio importante en el plan de la operación principal.
2. La aplicación de estos planes será frecuente en operaciones
fluidas, por ello su preparación previa posibilitara reducir el tiempo
necesario para su puesta en ejecución.
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L. Apoyo de las armas

1. Apoyo de fuego

a. El plan de apoyo de fuego en las operaciones ofensivas,


deberá ser elaborado en concordancia con el plan general de
maniobra. Dicho plan estará constituido normalmente por los
planes de fuego de artillería y aéreo, pudiendo incluir además
otros fuegos especiales como el nuclear, químico, biológico y
de iluminación.
b. En él se preverá el apoyo de fuego en apoyo directo de los
elementos atacantes de la fuerza y en apoyo general de toda
la fuerza. Se adoptaran previsiones para dotar a la reserva
de adecuado apoyo de fuego para la oportunidad de su
empleo.
c. Una consideración importante en todas las operaciones
ofensivas sera la decisión de efectuar o no un fuego de
preparación. Dicha decisión se basara en el reconocimiento
del dispositivo enemigo, munición disponible y los resultados
esperados, considerando la pérdida de la sorpresa.

2. Apoyo de defensa aérea

a. Normalmente en toda operación defensiva, se contara con


superioridad aérea local como mínimo. La misma se lograra
no solo con las operaciones que ejecute la Fuerza Aérea,
sino también con una activa y preponderante acción de la
ADA. (proyectiles autopropulsados y armas de tubo). En
consecuencia, la ADA. podrá tener tantas responsabilidades
y actividad como en las operaciones defensivas.
b. Asimismo, toda operación ofensiva lleva implícita por sus
características y finalidad perseguida, el concepto de
movimiento de las fuerzas que la ejecutan, circunstancia que
podrá dificultar la adopción de ciertas medidas de ADA.
pasiva, fundamentalmente el enmascaramiento
c. En el empleo de los medios de ADA. además de la
protección que normalmente presta a los puestos de
comando, posiciones de artillería, unidades blindadas,
reservas o instalaciones logísticas, será necesario tener en
cuenta el apoyo a brindar previo a la iniciación del ataque, en
que por la reunión de los efectivos que participaran, será un
momento crítico por la vulnerabilidad que presentaran para
un ataque aéreo enemigo. Asimismo, deberá preverse el
empleo de los medios de ADA. (Fundamentalmente
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autopropulsados), que deberán acompañar a las fuerzas
durante la ejecución del ataque.
d. En el caso de una explotación, el apoyo de ADA. a brindar,
tendrá características similares a las que se expresan en el
Capítulo XVII, Artículo VIII.

3. Apoyo de comunicaciones

a. El apoyo de comunicaciones en las operaciones ofensivas se


concretara en el establecimiento de un sistema tal que
permita a los distintos niveles de comando, emplear el poder
de combate, en el grado, lugar y momento más conveniente.
b. Este sistema deberá caracterizarse especialmente por su
flexibilidad para apoyar las distintas operaciones con los
menores cambios.
c. Las comunicaciones básicas serán las radioeléctricas,
complementándose con los otros medios.
d. Los centros o puestos de comunicaciones mantendrán una
movilidad tal que les permita acompañar los desplazamientos
de los comandos. Estos desplazamientos, en los niveles
superiores, se realizaran por saltos. Deberá mantenerse
permanentemente una reserva de medios de
comunicaciones para enfrentar situaciones críticas o apoyar
una situación imprevista.

4. Apoyo de ingeniería

a. Las actividades específicas fundamentales que ejecutaran


las tropas de ingeniería para concretar su apoyo en las
operaciones ofensivas serán: facilitar el franqueo de todo tipo
de obstáculos que requieran el empleo de medios
especiales, repasar y/o mantener la red vial existente y,
eventualmente, construir caminos y sus obras de arte.
b. El citado apoyo tendrá como finalidad trascendental, eliminar
o restringir las condiciones adversas del terreno y obstáculos
existentes para brindar adecuadas condiciones de
transitabilidad a las tropas que operen ofensivamente. Con
ello, se les podrá posibilitar el logro de una eficiente
movilidad y el mantenimiento del ritmo planeado para la
operación.

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M. Apoyo de las tropas técnicas

1. Apoyo de inteligencia

a. El apoyo de inteligencia en las operaciones ofensivas será


ejecutado por todos los órganos de inteligencia a fin de
obtener una inteligencia detallada que proporcione una base
firme para la preparación de los planes.
b. El esfuerzo principal será dirigido hacia la identificación,
magnitud y composición de los blancos y a la rápida difusión
de dicha inteligencia al elemento de apoyo de fuego.
c. Así mismo tendrá gran importancia conocer:

1) Organización del terreno del enemigo.


2) Identificación de sus fuerzas.
3) Ubicación y extensión de los obstáculos naturales y
artificiales.
4) Posiciones de artillería y de morteros.
5) Ubicaciones de lugares de almacenamiento.
6) Instalaciones de comando y reservas.
7) Características de las direcciones de aproximación
hacia la posición y dentro de ella.

2. Apoyo de Operaciones Psicológicas

a. El apoyo de operaciones psicológicas requerirá una estrecha


coordinación a efectos de contribuir al logro del objetivo
común.
b. Esa coordinación alcanzara a la operación principal y a las
actividades de encubrimiento y engaño, contra inteligencia,
seguridad, comunicaciones, censura, información a las
tropas, ejercicio del mando, relaciones con la comunidad y
asuntos civiles.
c. Las operaciones psicológicas buscaran lograr algunas de las
siguientes finalidades:

1) Disminuir la moral y la eficacia enemiga.


2) Apoyar los planes de engaño.
3) Sostener la moral de las propias tropas.
4) Contrarrestar la propaganda, subversión enemiga, etc.
5) Influenciar en la conducta de poblaciones extranjeras
hostiles, amigas y neutrales.

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Todo ello con la finalidad dc disminuir la capacidad operativa
del enemigo y exaltar el arrojo y voluntad de lucha de las
tropas atacantes.

3. Apoyo de Aviación de Ejercito

El apoyo dc aviación de ejército en las operaciones ofensivas se


materializara fundamentalmente en el cumplimiento de las
siguientes misiones:

a. Participar en la ejecución de operaciones aeromóviles como


una parte de la operación principal.
b. Sobrepasar zonas defendidas o barreras transversales.
c. Apoderarse de puntos críticos, particularmente en la
persecución, explotación y la aproximación para tomar
contacto.
d. Reforzar o evacuar fuerzas aisladas.
e. Desplazar reservas de pocos efectivos.
f. Abastecer elementos críticos.
g. Concentrar fuerzas dispersas para la ejecución de una
maniobra determinada.
h. Desplazar fuerzas para combatir elementos de guerrillas u
otros subversivos.
i. Desplazar patrullas y elementos de reconocimiento.
j. Evacuar pacientes.
k. Desplazar comandos y mantener enlaces.

4. Apoyo de Policía Militar

El apoyo de policía militar en acciones ofensivas incluye:

a. Control de tránsito en la zona de primera línea para facilitar el


movimiento de vehículos de acuerdo a las prioridades
establecidas y al plan general de maniobra.
b. Rápida reunión y evacuación de prisioneros de guerra y
civiles refugiados.
c. Control y dirección de individuos extraviados o refugiados
para evitar interferencias en los movimientos tácticos.
d. Proporcionar escolta y seguridad a personas o efectos que
puedan constituir un blanco rentable para el enemigo.

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N. Apoyo de SPAC.

1. Consideraciones básicas

a. Los SPAC. sirven para la conducción de las operaciones. En


consecuencia deberán procurar por todos los medios que las
necesidades de los servicios no constituyan una traba a la
realización de las operaciones.
b. Todas estas medidas deberán estar previstas con respecto a
la conducción de las operaciones a fin de que las fuerzas no
retarden su accionar a la espera de aquellas.
c. En nuestro caso particular donde las operaciones se llevaran
a cabo en zonas sumamente extendidas, los SPAC. deberán
no solo intensificar sus esfuerzos, sino también sus
previsiones, dado que normalmente se dispondrán de pocos
medios de apoyo y efectivos que no siempre podrán ser
remplazados.

2. Apoyo de Personal

a. En nuestras operaciones ofensivas y referidas a los


conceptos básicos expresados, cobran especial importancia
el mantenimiento de los efectivos y reemplazo de personal.
b. Lo expresado precedentemente se apoya en el hecho real de
que nuestros recursos humanos y fuentes de reemplazos son
particularmente limitados. Ello obligara a realizar un mayor
esfuerzo en el mantenimiento de la moral, disciplina, ley y
orden, para el logro de una mayor eficiencia de combate,
dado que nuestras fuerzas, aun siendo poseedoras de la
libertad de acción, serán constantemente obligadas a
esfuerzos y exigencias superiores a los que han sido
considerados como normales de toda operación ofensiva.

3. Apoyo logístico

a. Nuestras probables operaciones ofensivas exigirán un gran


esfuerzo al apoyo logístico a efectos de poder mantener el
ritmo e ímpetu que deberá caracterizarlas.
b. Es por ello que en forma similar a lo expresado en el apoyo
de personal, será necesario adoptar medidas para asegurar
el abastecimiento, fundamentalmente de abastecimientos
Clase III y V; como así también el mantenimiento de los
medios de combate disponibles.

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c. La rápida y eficiente evacuación y hospitalización de
personal será una función que adquirirá también relevante
importancia para poder reintegrar en el menor tiempo posible
al personal necesario para futuras operaciones.

4. Apoyo de asuntos civiles

a. El apoyo de AC. durante las operaciones ofensivas tendrá


como principal finalidad evitar que las operaciones de las
tropas se vean perturbadas por las actividades civiles.
b. Las operaciones de AC. deberán favorecer la conducción de
las operaciones en desarrollo y las futuras. Durante el
combate adquiere especial importancia el control de civiles,
tanto refugiados como personas desplazadas, que puedan
llegar a dificultar la conducción de las operaciones.
c. Asimismo, será conveniente efectuar una adecuada
explotación de la población en aquellos aspectos
relacionados con inteligencia, contrainteligencia, operaciones
contra elementos subversivos y abastecimiento.

V. FASES DE LA ACCION OFENSIVA

La ofensiva pasa por diferentes fases, siendo continuación una de la otra,


muchas veces sin solución de continuidad o con pausas sumamente breves,
estas fases son:

A. Aproximación
B. Toma de contacto.
C. Ataque.
D. Explotación.
E. Persecución.

VI. EJECUCION DE LAS OPERACIONES OFENSIVAS

A. Las operaciones ofensivas se caracterizan por el fuego y la maniobra, que


combinadas y controladas, crearan una preponderancia del poder de
combate; el ataque, agresivo en su acción culminara en un violento y
poderoso asalto a la zona decisiva.

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B. Una vez que el ataque haya sido lanzado, la flexibilidad y velocidad en el
empleo del poder de combate será de suma importancia. El ataque se
caracterizara por una serie de rápidos avances y asaltos, por medio de la
maniobra y el fuego, hasta que se conquiste el objetivo final.

C. El ataque se ejecutara vigorosamente, explotando todas las situaciones


favorables, empeñando todos los recursos necesarios y exigiendo el
máximo esfuerzo de las tropas. La posibilidad del fracaso de la operación
nunca debe ser motivo para trabar desde un principio la energía de su
ejecución.

D. Si el avance se retrasara en cualquier parte de la zona, el centro de


gravedad del ataque será desplazado rápidamente a otro lugar que
ofrezca mayores posibilidades de éxito. El ataque mantendrá un impulso
continuo y no se demorara para mantener la alineación de las unidades
para aferrarse estrictamente al plan de ataque establecido.

E. Una presión aplicada en forma constante (de día y de noche) contra un


enemigo debilitado, le negara toda posibilidad de recuperación; de resarcir
sus pérdidas o la oportunidad de tomar la iniciativa.

F. Ataque y movimientos nocturnos son operaciones normales que ofrecen


una excelente oportunidad para lograr el engaño y la sorpresa. Las
normas del ataque diurno serán de aplicación, sin embargo, se requerirán
medidas especiales para mantener la dirección y el control. El grado de
éxito a alcanzar por los ataques nocturnos esta en relación directa con el
estado de instrucción. La actitud combativa de las tropas, el
reconocimiento previo, la simplicidad del plan, la efectividad de las
medidas de control y la capacidad de vigilancia nocturna. Los objetivos
para el ataque nocturno estarán generalmente limitados en profundidad
por la dificultad en mantener el control, particularmente si el enemigo se
encuentra alertado.
La iluminación del campo de combate y los equipos de vigilancia
aumentaran la eficacia de las unidades que operan de noche y facilitaran
el empleo de los fuegos de apoyo.

18 - 71
G. El impulso del ataque será mantenido por:

1. Adecuada y constante acción de comando.


2. Oportuno empleo de la reserva.
3. Transporte aéreo de elementos de combate y apoyos.
4. Asignación de una nueva dirección a las fuerzas sobre un objetivo
intermedio, cuando ello fuera necesario.
5. Adecuado apoyo de las armas, tropas técnicas y SPAC.
6. Eludiendo resistencias que no pueden ser fácilmente arrolladas o
que sean tan fuertes que puedan interferir en el cumplimiento de la
misión.
7. Desplazamiento oportuno de los elementos de apoyo de fuego.

H. El impulso del ataque se materializara con el constante movimiento de los


distintos escalones de ataque, tan rápidamente como sea posible; hacia la
conquista de sus objetivos. Las resistencias enemigas que por su fortaleza
puedan disminuir el ritmo del avance, serán eludidas, pero deberá
mantenerse su control o aferramiento por efectivos menores que eviten
que las mismas, una vez sobrepasadas puedan operar como fuerzas
infiltradas sobre la retaguardia del primer escalón o sobre los sucesivos
escalones que ejecuten la operación. La decisión de eludir esas
resistencias deberá tener en cuenta dichos peligros.
Si esas resistencias son débiles, serán arrolladas con decisión y
agresividad. Contribuirán a ello el adelantamiento y oportuno empleo de
todos los elementos de apoyo necesarios para garantizar la continuación
del ataque.

I. Las detenciones durante el ataque serán mínimas, ya que permitirán al


enemigo reorganizarse y hacer perder el ímpetu del mismo.

Cuando las unidades deban descansar y reabastecerse, en lo posible


serán reemplazadas por unidades frescas o reservas, para mantener el
impulso del ataque. Para aquellas unidades autorizadas a detenerse, las
órdenes deberán incluir el tiempo y la forma de detención, misiones y
posiciones de las unidades de apoyo, medidas de comando y control.

Algunas unidades podrán ser desviadas hacia zonas fuera del alcance de
los fuegos de apoyo de la posición; en ellas se buscará evitar la
congestión y proveer el adecuado encubrimiento.

19 - 71
J. El comandante deberá mantenerse informado del progreso del ataque, de
las reacciones del enemigo y de la situación que enfrenten las unidades
subdivididas para maniobrar más efectivamente las fuerzas y emplear los
fuegos en la conquista de sus objetivos. Ello permitirá tener una clara
visión de conjunto de la operación que posibilitará, a posteriori, un
adecuado y oportuno empleo de sus apoyos y reservas para el éxito de la
operación en su conjunto.

K. Durante el ataque, el control podrá estar descentralizado en los


comandantes subordinados en un grado tal como para permitirles a estos
reaccionar lo más rápidamente posible ante los cambios de situación.
Sobre la base del conocimiento de la situación y la idea de maniobra del
comandante, los comandantes subordinados modificarán y
complementarán su plan.

Las fuerzas atacantes avanzarán rápidamente hacia y dentro de las zonas


de defensa enemiga, tanto por tierra como por aire. Cuando se encuentre
una resistencia enemiga que deba ser reducida, la primera consideración
a tener en cuenta por el comandante será lograrlo con sus elementos
adelantados, apoyados por el fuego, a fin de que rápidamente arrollen y
destruyan al enemigo.

Si se debe ejecutar un ataque más metódico, los escalones de ataque


avanzarán hasta la distancia de asalto a la posición enemiga bajo la
protección de fuegos de apoyo y niebla artificial. Luego, un corto, violento
y bien coordinado ataque de las fuerzas de asalto deberá destruir al
enemigo por el choque, los fuegos o la combinación de ambos.

Cuando se vislumbre un deterioro total de la defensa, el ataque podrá


perder su impetuosidad en busca del éxito sin que ello signifique la total
descoordinación del resto de la operación.

VII. SEGURIDAD DURANTE EL ATAQUE

A. Las fuerzas que desarrollan el ataque, sin que afecte el ímpetu del mismo
que ya de por sí proporciona seguridad, deberán incluir en sus planes,
medidas y procedimientos a poner en práctica para su propia seguridad.
Ello evitará la interferencia imprevista del enemigo, mantener la integridad
del dispositivo y asegurar el mantenimiento de la libertad de acción.

B. Violentos y rápidos ataques, frecuentemente proporcionan la mejor


seguridad.

20 - 71
C. El comandante pondrá en ejecución las medidas previstas a efectos de
contrarrestar los ataques enemigos. Asimismo todo enemigo eludido debe
ser contenido o mantenido bajo vigilancia para su posterior aniquilamiento.

D. Fuerzas de cobertura, patrullas, flanguardias, reservas escalonadas y


fuegos protegerán flancos expuestos y claros entre las unidades de apoyo
y de SPAC. cuando existan zonas de retaguardia de los escalones de
ataque que no hayan sido totalmente limpiadas.

E. Durante la ejecución de las operaciones ofensivas, existirá una constante


amenaza de que el enemigo emprenda acciones con elementos blindados
o aeromóviles. Esta circunstancia cobra particular importancia en nuestros
probables teatros de operaciones por su gran magnitud. En consecuencia,
será menester adoptar las previsiones necesarias a fin de detectar en
forma i temprana su presencia y poder contrarrestarlas.

VIII. MANIOBRA OFENSIVA

A. La maniobra ofensiva es una operación que busca en principio, el


aniquilamiento del enemigo. Las fuerzas atacantes maniobrarán para
lograr ventajas sobre el enemigo, chocar con él y destruirlo. La situación y
la propia intención pueden determinar la necesidad de limitar sus fines a la
obtención de un éxito de magnitud restringida.

B. Se distinguen los siguientes tipos de maniobra ofensiva:

1. Frontal.
2. Ruptura.
3. Desbordamiento.
4. Envolvimiento.

Frecuentemente una fuerza atacante combinará estas clases de maniobra


ofensiva; por ejemplo, un escalón podrá maniobrar frontalmente mientras
otro ejecuta una maniobra desbordante.

IX. MANIOBRA OFENSIVA FRONTAL

A. La maniobra ofensiva frontal es aquellla dirigida contra el frente del


dispositivo enemigo. Se la emplea para aferrar, rechazar o arrollar y
destruir a un enemigo más débil.

21 - 71
B. La maniobra ofensiva para aferrar consigue su finalidad sólo cuando
impide al adversario abandonar la posición o sustraer y desplazar la mayor
parte de sus efectivos para otros empleos.

Para mantener el aferramiento, la maniobra deberá proseguirse en la


noche, de lo contrario al llegar la obscuridad el enemigo estará en
condiciones de recuperar su libertad de acción.

C. La maniobra para rechazar sólo puede aspirar a tener éxito cuando


consigue penetrar y conmover la posición enemiga en forma tal que si el
enemigo no interrumpe el combate y se repliega, corre el riesgo de que se
produzca una penetración o ruptura en su dispositivo.

D. La maniobra para arrollar y aniquilar exige como condición una gran


superioridad de fuerzas y medios.

E. La maniobra ofensiva frontal puede en cualquier momento transformarse


en una maniobra ofensiva de penetración o rup¬tura, al igual que en una
explotación; sobre todo cuando se busca rechazar o aniquilar y en
particular cuando la defensa ocupa frentes muy extendidos en relación con
los efectivos disponibles.

F. La maniobra ofensiva frontal contra una posición adecuadamente


organizada para la defensa, será de ejecución difícil y costosa y
normalmente impondrá una lucha larga y tenaz.

X. MANIOBRA OFENSIVA DE RUPTURA

A. Es aquella en la cual la fuerza atacante penetra a través de la posición


defensiva del enemigo, abriendo y consolidando una brecha que rompe la
conexión de la defensa; posibilitando la explotación y la destrucción en
detalle de sus fuerzas.

B. La maniobra de ruptura se ejecutará en tres fases: (Ver figura Nª 19).

1. Penetración a través de la posición enemiga y formación de la


brecha.
2. Ensanchamiento y afianzamiento de la brecha.
3. Ruptura con la conquista de objetivos que destruyan la continuidad
de la defensa del enemigo.

22 - 71
C. La ruptura será ejecutada, por consiguiente, penetrando la posición
enemiga en un sector elegido; hasta conquistar sus últi¬mas
organizaciones defensivas importantes.

Paralelamente a esta acción, será necesario mantener aferrado al


enemigo en el resto del frente.

A continuación, la brecha así formada deberá ser afianzada me¬diante


actividades de limpieza y prevención de contraataques enemigos. Esta
actividad comenzará normalmente durante la fase anterior de formación
de la brecha, a medida que el ataque vaya penetrando en la posición.

Si fuera necesario, nuevos ataques ensancharán lateralmente la brecha,


procediendo a consolidar el nuevo terreno conquistado. De este modo
quedará expedito el paso para que otras fuerzas, a través de la brecha
formada, afianzada y ensanchada, inicien la explotación. Si las
circunstancias fuesen favorables, la explotación podrá comenzar antes.

D. Una maniobra ofensiva de ruptura, para tener éxito requerirá la


concentración de un poder de combate superior en el punto seleccionado
para abrir la brecha de la posición enemiga. Su ejecución se ve facilitada
cuando se dispone de una considerable potencia de fuego y el enemigo
ocupa frentes amplios y con poca profundidad. Además se ejecutará
cuando los flancos no puedan ser atacados o cuando el tiempo disponible
o cuando exigencias impuestas por la misión, no permiten realizar otro tipo
de operación.

Cuando exista gran preponderancia en el poder de combate, será posible


realizar varios ataque de ruptura, simultáneos o múl¬tiples. En tales casos,
las fuerzas de explotación podrán con¬verger sobre su único objetivo
profundo o podrán conquistar objetivos separados. Cuando no sea posible
ejecutar más de un ataque de ruptura, se lo efectuará en el lugar que
ofrezca mayores posibilidades de éxito.

E. Ruptura de cerco

1. La ruptura de cerco se logrará fundamentalmente mediante la


ejecución de una maniobra de ruptura, para posibilitar que las
fuerzas rodeadas recuperen la libertad de acción para operar.
2. Ello podrá realizarse con el apoyo por parte de otra fuerza o sin él.
El apoyo de otra fuerza en muchos casos impondrá la ejecución de
una operación de conexión (Capítulo XIV, Sección G, Artículo
XXVIII).

23 - 71
3. Una fuerza estará cercada cuando el enemigo ha logrado cortar en
los 360° todas las direcciones de evasión y refuerzo. Esta
circunstancia podrá presentarse en toda clase de operaciones,
especialmente cuando las fuerzas actúen en situaciones fluidas o
ampliamente dispersas.
4. La ruptura de cerco, será una de las situaciones más críticas que
una fuerza deberá afrontar, razón por la cual, todo comando deberá
adoptar esa decisión lo más temprano posible antes que el enemigo
esté en aptitud de reforzar el mismo.
La necesidad de una rápida decisión no deberá de ninguna manera
llevar a la ejecución de una ruptura de cerco, sin contar con planes
adecuados.
5. El planeamiento de la operación impone una cuidadosa elección de
la zona más débil del dispositivo enemigo, con la fijación de
objetivos que aseguren la ruptura y posterior mantenimiento de la
brecha. La hora de ataque será seleccionada según las
circunstancias, aprovechando las horas de obscuridad o menor
visibilidad como más convenientes, lo que de ninguna manera
significa que las horas de luz dejen de ser adecuadas para ello.
6. El secreto y el engaño serán fundamentales para asegurar el éxito
de la operación, ya que posibilitarán el logro de la sorpresa. Ello se
buscará mediante alguno de los siguientes procedimientos:

a. La ejecución de un ataque simulado que buscará convencer


al enemigo de que se trata del esfuerzo principal.
b. La realización de tráfico de comunicaciones simulado y con
datos erróneos.
c. El encubrimiento de las vinculaciones con una eventual
fuerza de apoyo.
d. El desplazamiento y concentración de los elementos que
deberán ejecutar el esfuerzo principal lo más tarde y próximo
posible a la hora de su ejecución.

7. En el esfuerzo principal deberá emplearse como combatiente al


máximo del personal, incluso los que desempeñan funciones de
apoyo logístico. Toda arma o vehículo que no puede ser sustraído
del cerco deberá ser destruido.
8. Un aspecto importante que podrá afectar la moral del personal lo
constituirá la evacuación de bajas. En consecuencia, todos los
comandos deberán adoptar todas las previsiones posibles para
trasladar sus heridos conjuntamente con las tropas que atacan.
Esto constituye no sólo una obligación moral, sino también un
arbitrio de la conducción de operaciones sicológicas, para lograr la
mayor eficiencia de combate.
24 - 71
9. En algunas circunstancias y siempre que la situación y el terreno lo
permita, deberán infiltrarse algunos elementos fuera del centro para
operar dentro del dispositivo enemigo o en su retaguardia a fin de
posibilitar un mayor éxito de la operación principal de ruptura del
cerco.
Esto se presentará con mayor frecuencia en zonas de selva o con
cubiertas contra la observación.
10. La ejecución de la infiltración como único procedimiento de ruptura
de cerco, será aplicable para reducidos efectivos que se encuentren
cercados.

XI. MANIOBRA OFENSIVA DE DESBORDAMIENTO


.
A. El desbordamiento es aquel que será dirigido hacia la conquista de un
objetivo en la retaguardia inmediata enemiga, buscando cortar los caminos
de repliegue y retirada; obligando al enemigo a combatir simultáneamente
en dos direcciones y exponiéndolo a ser aniquilado en la posición. (Ver
figura Nº 20).

B. Esto será logrado con un esfuerzo principal que accionará sobre un flanco
libre, evitando la fuerza principal en su desplazamiento hacia el objetivo y
un esfuerzo secundario que aferrará al enemigo para impedir su
desprendimiento y reducir su capacidad de reacción contra el esfuerzo
principal. En algunas situaciones, el esfuerzo secundario buscará también
engañar al enemigo sobre la ubicación o existencia del esfuerzo principal.
El éxito de un ataque de desbordamiento dependerá en gran parte, de la
capacidad del esfuerzo secundario para aferrar al enemigo.

C. La maniobra de desbordamiento se verá facilitada si se cuenta con una


movilidad superior y la sorpresa. La aviación de ejército tendrá particular
valor para aumentar la movilidad del escalón desbordante.

D. Cuando la situación permita elegir el tipo de operación a emplear por el


atacante; la maniobra de desbordamiento será preferible al de ruptura o al
frontal, dado que ofrecerá la mejor oportunidad para aplicar el poder de
combate con las mayores ventajas.

E. Una variación de la maniobra de desbordamiento, es el doble


desbordamiento. Esta operación buscará pasar simultáneamente
alrededor de ambos flancos del enemigo.

25 - 71
La fuerza atacante deberá poseer superioridad en poder de combate y
movilidad. Requerirá una coordinación exacta en tiempo y espacio.
Deficiencias en cualquiera de estos factores podrán llevar a la fuerza
atacante a una derrota en detalle.

XII. MANIOBRA ENVOLVENTE

A. La maniobra envolvente es aquella donde la fuerza atacante buscará


pasar alrededor del enemigo, evitando su fuerza principal para conquistar
un objetivo profundo en la retaguardia enemiga. (Ver figuras Ne 21 y 22).

B. La finalidad de esta operación será: forzar al enemigo a abandonar su


posición para combatir en terreno elegido por el atacante o distraer
fuerzas importantes para enfrentar la amenaza del envolvimiento.

C. Cuando sea necesario, un esfuerzo secundario aferrará al enemigo,


regulando esta acción a las necesidades del esfuerzo principal.

D. Dado que la fuerza que ejecutará el envolvimiento estará normalmente


fuera de la distancia de apoyo de los otros elementos de la fuerza, deberá
ser suficientemente móvil y fuerte para operar independientemente.

E. El encubrimiento y el engaño tendrán particular aplicación en esta


operación, dado que normalmente la sorpresa será una condición esencial
para su ejecución.

XIII. EXPLOTACION

A. Consideraciones básicas

1. La explotación es una operación que por su accionar busca destruir


la capacidad enemiga para reorganizarse, establecer una defensa
organizada o ejecutar una operación retrógrada ordenadamente.
(Ver figura N2 23).

a. Esta operación consistirá en el pleno aprovechamiento de las


ventajas de una situación favorable, consecuencia de un
combate exitoso; en el que se buscará convertir un éxito local
en un éxito de mayores proyecciones, o de la localización de
una vulnerabilidad explotable en el dispositivo enemigo. Esas
vulnerabilidades se podrán materializar frecuentemente en
nuestros probables TT.OO. debido a las características de
los mismos y los amplios espacios que deberán cubrirse
normalmente con reducidas fuerzas.
26 - 71
b. Lo expresado precedentemente no señala, por sí sólo una
garantía de éxito para la operación si la misma no se
encuentra enmarcada por una situación tal que el enemigo
no disponga de reservas u otras fuerzas en aptitud y
capacidad como para ser desplazadas para hacer frente a la
explotación.

2. La explotación puede llevarse a cabo en cualquiera de las


operaciones tácticas, preferentemente en las ofensivas.
Su desarrollo adquiere por lo tanto distintas características, dado
que en las operaciones defensivas o retrógradas, serán de menos
envergadura, pues explotarán normalmente un éxito local en tanto
que, en las ofensivas, las mismas se ejecutarán en la búsqueda de
objetivos y resultados de mayores consecuencias para el adversario
y beneficios para las propias operaciones.
3. La transición del ataque a la explotación será normalmente gradual
y resultará difícil precisarla; sin embargo podrá producirse también
bruscamente. Esto último ocurrirá con mayor frecuencia en
operaciones fluidas.

a. A fin de poder ejecutar esta operación con un total


aprovechamiento de sus efectos, deberá considerársela
siempre en los planes de alternativa. La explotación por sus
efectos sicológicos contribuye a anular o reducir la capacidad
de reacción del enemigo, posibilitando su posterior
aniquilamiento.
b. El éxito táctico logrado en una explotación podrá tener gran
trascendencia en el marco estratégico operativo.

B. Planeamiento

1. El planeamiento de la explotación podrá ejecutarse con mu¬cho o


poco tiempo disponible, buscando siempre continui¬dad. Para ello
deberán adoptarse las necesarias previ¬siones de apoyos, entre las
cuales adquieren particular importancia la continuidad en el apoyo
de fuego, el apoyo de ingeniería que le permita salvar los
obstáculos tanto materiales como artificiales que deba enfrentar la
fuerza, como así también los apoyos de comunicaciones y
logísticos (en especial abastecimientos Clase III y V). Los SPAC.
serán conducidos casi siempre en forma descentralizada.
Siempre deberán fijarse objetivos decisivos. Los mismos serán
seleccionados durante el planeamiento pero en al¬gunas
oportunidades recién se podrán concretar definitiva¬mente durante
el desarrollo de la operación.
27 - 71
2. Las misiones de las fuerzas de explotación incluirán la conquista de
objetivos profundos para cortar líneas de comunicaciones enemigas
y desorganizar las instalaciones de comando y control enemigas. La
misión asignada al comandante de la fuerza de explotación deberá
ser suficientemente amplia como para no restringir ni limitar su
libertad de acción en aprovechar las oportunidades que se le
presenten con miras a desorganizar y destruir al enemigo. El
comandante deberá comprender que las tropas y sus jefes
frecuentemente estarán cansados en el momento en que la
explotación se produzca y que por ello se exigirá un comando
enérgico.
3. Si bien la operación deberá ser planeada para un momento
determinado, se deberá estar preparado en toda circunstancia para
explotar las oportunidades que le ofrezca el enemigo.

C. Ejecución

1. La explotación se iniciará normalmente cuando se reconozca que la


fuerza enemiga tiene dificultades para mantener su posición o
cuando se detecte una vulnerabilidad.
2. Estas situaciones se manifestarán normalmente por los siguientes
indicios:

a. Éxitos decisivos de propias fuerzas.


b. Debilitamiento de la resistencia enemiga, especialmente de
sus fuegos de apoyo.
c. Incremento en el número de prisioneros capturados y en
equipos abandonados.
d. Presencia de un claro que el enemigo no está en condiciones
de cerrar en oportunidad.

3. Una vez comenzada la explotación será ejecutada implacablemente


para negar al enemigo cualquier pausa, por medio de una presión
ofensiva continua en el avance hacia el objetivo final. En ningún
momento se dejará de ejercer sobre el enemigo dicha presión.
4. Las fuerzas de explotación avanzarán normalmente en el mayor
frente compatible con su movilidad, red de caminos y otras
características del terreno. Únicamente serán retenidas aquellas
reservas que sean necesarias para asegurar flexibilidad a la
operación, impulso en el avance y mínima seguridad. Fuerzas
aeromóviles serán utilizadas para conquistar objetivos críticos en el
avance para cortar líneas de retirada enemigas. Rápidas
incursiones y ataques desbordantes a cargo de fuerzas terrestres y
aeromóviles, retardarán o impedirán la reorganización enemiga. Las
28 - 71
acciones se caracterizarán por la audacia, el rápido empleo de la
potencia de fuego disponible y el empleo rápido y sin vacilaciones
de las unidades no empeñadas. La fuerza de explotación será
empeñada en la dirección decisiva.

5. Las fuerzas que encabezan la explotación normalmente se


constituirán teniendo como núcleo unidades de tanques o infantería
blindada.

a. Se podrá utilizar aeronaves de aviación de ejército para


proporcionar mayor movilidad a los elementos a pie.
b. Las fuerzas aeromóviles facilitarán un avance rápido,
conquistando puntos críticos por donde deberán pasar las
fuerzas terrestres de explotación (puentes, lugares de
franqueo, etc.) antes de que sean ocupadas por el enemigo.
En estos casos se deberá tener en cuenta la conexión entre
la fuerza terrestre y la aeromóvil.

6. Se deberá tener permanentemente en cuenta la seguridad del


abastecimiento terrestre, puesto que los elementos más
adelantados podrán estar operando detrás de fuerzas enemigas
sobrepasadas o en territorio enemigo con la población hostil. En
ciertos casos será necesario recurrir al abastecimiento aéreo.
7. La ejecución descentralizada será una característica de la
explotación. No obstante, el comandante mantendrá el control
necesario para evitar que sus fuerzas se disgreguen
excesivamente. Las medidas de control se emplearán en la menor
cantidad posible.
8. Ataques sin preparación o con preparación abreviada, serán de
frecuente ejecución en este tipo de operación. Las fuerzas de
explotación eludirán o aferrarán empleando el mínimo de fuerzas
necesarias a aquellas resistencias enemigas que por su insuficiente
poder de combate no comprometan el cumplimiento de la misión.
9. Se deberá informar al comando superior y a las fuerzas que
avancen detrás, sobre aquellas fuerzas enemigas que hayan sido
eludidas.
Los elementos de los escalones siguientes se emplearán para:
operar contra las fuerzas enemigas eludidas, reforzar a los
elementos vanguardia o ejecutar un ataque coordinado con los
mismos, o bien para una combinación de estas misiones de
acuerdo a las exigencias de la situación.
10. La explotación continuará tanto de día como de noche, sin tener en
cuenta las condiciones meteorológicas existentes y al desgaste que

29 - 71
ella imponga, exigiendo que los comandos de todo nivel ejerzan
una acción constante sobre sus tropas.
A medida que avance la fuerza de explotación, las fuerzas que la
sigan y apoyen, asegurarán sus líneas de comunicaciones y
efectuarán operaciones de limpieza, destruirán los núcleos de
resistencia eludidos, ampliarán la zona de explotación desde el eje
de avance de las fuerzas de explotación y bloquearán el
movimiento de refuerzos enemigos hacia esa zona.

11. Se establecerá un estrecho enlace entre el comandante de la fuerza


que encabeza la explotación y los comandantes de las fuerzas que
le sigan.
12. El comando de la fuerza de explotación impedirá la dispersión de su
poder de combate en la obtención de éxitos de menor cuantía o en
reducir pequeñas fuerzas enemigas. Su finalidad será alcanzar el
objetivo con el máximo poder de combate, tan rápidamente como
sea posible.
13. El control será necesario para impedir el alargamiento de la fuerza
de explotación si el enemigo es capaz de reagruparse
inesperadamente para atacar dicha fuerza. Otras fuerzas y los
fuegos de apoyo serán empleados para debilitar o controlar fuerzas
enemigas que no puedan ser eludidas o contenidas. La seguridad
contra reacciones locales del enemigo se logrará por rápidos
avances para mantener una presión constante sobre las fuerzas
enemigas y para neutralizar la inteligencia y el sistema de vigilancia
enemigos.

XIV. PERSECUCION

A. La persecución es la continuación de una operación ofensiva en la que se


busca aniquilar a una fuerza enemiga que intenta retirarse. (Ver figura Nº
24).

En una explotación, cuando la desmoralización comience y las fuerzas


enemigas se desintegren bajo una continua presión, la misma podrá
convertirse en persecución. La persecución podrá ejecutarse también en
cualquier operación ofensiva en que el enemigo haya perdido su
capacidad para operar efectivamente e intente desprenderse. En una
persecución, el enemigo perderá su capacidad para influir la situación y
actuará según acciones del perseguidor.

30 - 71
B. En la conducción de la persecución, se mantendrá una fuerza de
persecución frontal contra las fuerzas en retirada, mientras una fuerza de
persecución envolvente tratará de anteponerse a las mismas. Un doble
envolvimiento a la fuerza principal enemiga en retirada, será ejecutado
cuando las condiciones lo permitan. Deberá hacerse el máximo empleo de
elementos aerotransportados y aeromóviles en la persecución envolvente
para adelantarse a las fuerzas enemigas acelerando su destrucción y la
progresión de la propia fuerza.

C. Para alcanzar resultados decisivos, se deberá proceder con audacia;


aceptando riesgos importantes, perfectamente calculados.

La persecución será conducida agresivamente y bajo control


descentralizado. Los comandantes permanecerán bien adelante,
impulsando la operación y deberán actuar enérgicamente ante cualquier
indecisión en las tropas. La persecución será llevada a cabo hasta el límite
de la resistencia de las tropas y de los materiales.

D. La continuidad del apoyo de los SPAC. será vital para el éxito de este tipo
de operación.

1. El consumo de abastecimientos Clase III será particularmente


elevado, debiendo para ello adoptarse las previsiones necesarias.
2. El abastecimiento aéreo podrá ser empleado para mantener el
ímpetu de la persecución, como así también la seguridad en razón
de que, algunas fuerzas enemigas sobrepasadas podrán operar en
la retaguardia propia creando problemas críticos de orden logístico.

E. No se deberán permitir que retaguardias enemigas o fuerzas destacadas a


sus flancos distraigan a la fuerza principal del cumplimiento de su misión.
Si la fuerza principal del enemigo lograse establecerse firmemente en una
posición, se la atacará de inmediato, empleándose la operación ofensiva
más conveniente.

F. El apoyo aéreo proporcionará un valioso complemento para la


persecución. El reconocimiento aéreo mantendrá a los comandos
informados sobre las ubicaciones y actividades de las fuerzas enemigas.
El apoyo de la fuerza aérea táctica buscará infringir el mayor daño posible
al enemigo en retirada, concentrándose sobre las vías de retirada, sus
columnas y reservas.

31 - 71
SECCION B

OPERACIONES DEFENSIVAS

XV. CONCEPTOS GENERALES

A. Operaciones defensivas son aquellas operaciones tácticas destinadas a


resistir, rechazar, destruir o impedir un ataque enemigo.

B. La finalidad de una operación defensiva podrá ser:

1. Crear condiciones más favorables para una acción ofensiva.


2. Economizar fuerzas en una zona a fin de permitir aplicar un poder
de combate decisivo en otra.
3. Canalizar una fuerza enemiga.
4. Reducir la capacidad de combate del adversario.
5. Negar el acceso del enemigo a una zona o el dominio de la misma.

XVI. CONSIDERACIONES BASICAS

A. En la defensa se deberán aprovechar todas las oportunidades que se


presenten para tomar la iniciativa y destruir al enemigo.

El defensor tomará la iniciativa:

1. Seleccionando la zona donde operará.


2. Obligando al enemigo a que actúe de acuerdo con el plan de
defensa.
3. Explotando las vulnerabilidades y errores del enemigo mediante
operaciones ofensivas.

Además, tratará de mantenerla contraatacando cuando el enemigo


ha obtenido éxito.

B. La conducción de operaciones defensivas será una difícil prueba para un


comandante de tropas.

1. El defensor deberá utilizar plenamente aquellas ventajas que él


posea o pueda procurarse.
2. Deberá aceptar riesgos y tratar de conservar sus medios, a fin de
emplearlos en forma decisiva y sin vacilaciones; en el momento
oportuno. Deberá resolver el serio problema de conducir tropas que
no perciban el éxito evidente del combate ofensivo.
32 - 71
3. La preparación sicológica de las tropas y el mando enérgico en la
conducción de la defensa serán esenciales para man¬tener una
moral alta, un alistamiento continuo y una actitud agresiva. Las
tropas deberán comprender que una defensa bien ejecutada puede
constituir un medio para destruir al enemigo.
4. De esto surge que las operaciones defensivas requerirán del
conductor una gran capacidad de conducción y de las tropas una
gran habilidad de ejecución.

C. Las operaciones defensivas serán, normalmente, más efectivas cuando


les sean impuestas a los comandantes subordinados las menores
restricciones posibles.

Sin embargo, estas operaciones, por su naturaleza, plantearán


restricciones que no presentan las operaciones ofensivas, al requerir una
mayor coordinación en el empleo de los medios.

XVII. FUNDAMENTOS

El comandante concebirá las operaciones defensivas, basándose en los


fundamentos de la defensa que son:

A. Utilización apropiada del terreno.

1. El terreno será un factor determinante en la selección de la zona de


la defensa y en la ubicación y distribución de las fuerzas.
2. El defensor retendrá el control de aquellas partes del terreno que
sean esenciales para la observación, las comunicaciones y la
maniobra de las reservas; y le negará al enemigo la utilización del
terreno que pueda comprometer el éxito de la defensa.
3. Las condiciones defensivas naturales del terreno deberán ser
incrementadas mediante la construcción de obras de fortificación;
instalación de obstáculos y/o barreras, etc. para reforzar la posición
o canalizar al enemigo hacia sectores adecuados para
contraatacarlo.
4. Los obstáculos del terreno, constituirán un factor principal en la
determinación del esquema general de la defensa, incluyendo la
distribución de las fuerzas y la ubicación de las reservas.
5. Deberán ser consideradas todas las probables direcciones de
aproximación del enemigo hacia la zona de defensa. Una adecuada
valorización de ellas y de los terrenos críticos servirá de base para
determinar el dispositivo de las fuerzas que han de ocupar la
posición, como también para el planeamiento de los fuegos y
asignación de misiones a las fuerzas de seguridad.
33 - 71
6. El terreno elegido deberá proporcionar además, a las fuerzas
defensoras, una buena observación, campos de tiro, ventajosas
cubiertas y encubrimiento adecuados.

B. Apoyo mutuo.

Se lo obtiene con la máxima coordinación en el empleo de los apoyos de


toda índole, que beneficien y faciliten la defensa.

C. Organización de la defensa en profundidad.

1. En la defensa será esencial contar con una profundidad tal que le


permita contener o canalizar el ataque enemigo y ejecutar
contraataques.
2. Una defensa poco profunda será de por sí vulnerable, ya que el
enemigo podrá penetrarla antes que se lo detenga o que se puedan
tomar contramedidas eficaces.
3. La profundidad de la defensa se logra mediante:

a. El dispositivo adoptado (posiciones, obstáculos, barreras y


obras de fortificación).
b. La dinámica de la defensa (acción retardatriz, contraataques
y ataque de desarticulación.
c. La maniobra de los fuegos.

D. Defensa en toda dirección.

1. La organización de la posición defensiva tenderá principalmente a


hacer frente al ataque enemigo a lo largo de las direcciones de
aproximación más probables. Sin embargo, siempre existirá la
posibilidad que el adversario pueda atacar desde una dirección
distinta a la apreciada o considerada como más probable.
2. También el enemigo podrá atacar la retaguardia mediante un
envolvimiento terrestre o aéreo o una acción de guerrillas en gran
escala.
3. Deberá evitarse que el adversario obtenga una ventaja decisiva
mediante una acción sorpresiva, para lo cual se deberá adoptar un
adecuado dispositivo inicial con previsiones para cambiar la
ubicación de las tropas y de los fuegos para hacer frente a cualquier
contingencia. Además deberá asegurarse que todos los elementos
dependientes se encuentren preparados para la defensa en todas
las direcciones (360°).

34 - 71
E. Coordinación de los planes de fuego.

El plan de defensa comprenderá una cuidadosa coordinación e integración


de todas las medidas defensivas.
Los planes de fuego son preparados para apoyar directamente a los
elementos de la zona defensiva de primera línea y controlar las zonas
ocupadas; para integrar las barreras y/o cubrir obstáculos; y para apoyar
acciones ofensivas, tales como los contraataques.

F. Coordinación del plan de barreras.

Las características defensivas naturales del terreno, serán reforzadas


mediante la ejecución e instalación de obstáculos y/o barreras.

Estos trabajos serán empleados para lograr efectos de interceptación


sobre el movimiento del enemigo, tratando de no imponer restricciones a
las maniobras planeadas de la propia fuerza; especialmente el movimiento
de las reservas.

G. Flexibilidad.

1. La organización de la defensa deberá permitir el traslado de fuerzas


y el transporte de fuegos, a fin de hacer frente al ataque a medida
que éste progrese.
2. Reservas móviles y rápidas y una gran potencia de fuego a su
disposición, proporcionarán al comandante una mayor libertad para
conducir la defensa.

H. Seguridad.

1. Se deberán tomar todas las medidas necesarias para evitar que el


enemigo logre una sorpresa táctica, especialmente teniendo en
cuenta que el atacante tendrá libertad de acción en la elección de la
hora, lugar y dirección del ataque: como así también sobre el poder
de combate a aplicar. Por tanto, será necesario asegurar la
obtención de una alarma temprana e información exacta y oportuna
sobre las fuerzas enemigas que se aproximen.
2. Las medidas de seguridad incluirán el adelantamiento de elementos
de seguridad en dirección a las más probables direcciones de
aproximación disponibles por el enemigo y hacia los flancos y
retaguardia. Será esencial contar con seguridad en todas las
direcciones (360°), en especial teniendo en cuenta las
características de nuestros probables TT.OO.
35 - 71
I. Empleo máximo de operaciones ofensivas.

1. En la defensa deberán aprovecharse todas las oportunidades que


se presenten para obtener la iniciativa a fin de operar
ofensivamente y destruir las fuerzas enemigas.
2. Las fuerzas deberán estar preparadas para accionar ofensivamente
cada vez que se les presente la oportunidad.
3. El contraataque y el ataque de desarticulación constituirán factores
de éxito en la defensa.

XVIII. ESQUEMA DE LA DEFENSA

A. Una posición de defensa estará estructurada sobre la base de tres zonas.

1. Zona de seguridad.

a. La zona de seguridad se extenderá desde la LPR. hacia el


frente y los flancos.
b. Las fuerzas de la zona de seguridad suministrarán
información sobre el enemigo, retardarán su avance, lo
engañarán y lo desorganizarán tanto como sea posible.
Además constituirán un encubrimiento contra el
reconocimiento enemigo.
c. Algunos elementos de las fuerzas de la zona de seguridad
podrán permanecer detrás de los elementos adelantados del
enemigo.
d. La composición y el apoyo de las fuerzas de seguridad
incluirán medios de reconocimiento y observación de gran
alcance, tanto terrestres como aéreos; gran potencia de
fuego y, excelentes y seguras comunicaciones. Además
deberán disponer de un alto grado de movilidad.

2. Zona defensiva de primera línea o posición de resistencia.

La zona defensiva de primera línea o posición de resistencia se


extenderá desde la LPR hacia la retaguardia. Incluirá la zona
ocupada y organizada (posiciones de cambio, bloqueo, etc.) por los
elementos empeñados en primera línea, con sus correspondientes
reservas.

36 - 71
3. Zona de la reserva.

a. La zona de la reserva se extenderá hacia la retaguardia,


desde el límite posterior de la zona defensiva de primera
línea o posición de resistencia, hasta el límite de retaguardia
del elemento que se considera.
b. El escalón de reserva, que ocupa la zona de reserva; estará
constituido por aquellas fuerzas no empeñadas, mantenidas
bajo control directo del comando. Constituirá el principal
medio que dispondrá el defensor para influir en el desarrollo
de las operaciones y recobrar la iniciativa.

B. A cada una de estas zonas se le adjudicarán fuerzas y fuegos como parte


del plan de defensa, constituyendo escalones defensivos que tomarán su
denominación de la zona en que actúen. Esa adjudicación de fuerzas y
fuegos variará según la forma de defensa que se adopte.

XIX. FORMAS DE LA DEFENSA

A. La forma de la defensa a adoptar por el defensor dependerá de:

1. Análisis de la misión.
2. Terreno (sus características y las restricciones que se establezcan).
Frente y profundidad de la zona a defender.
3. Potencia relativa combativa de las fuerzas oponentes.
4. Situación aérea.
5. Disponibilidad o no de armas nucleares por los adversarios.
6. Movilidad relativa.

B. Las formas de la defensa son tres:

1. Defensa tenaz
2. Defensa móvil
3. Defensa en amplio frente.
.
C. Defensa tenaz (Ver figura Nº 25).

1. Esta defensa tenaz se basará en la retención o control de un


determinado terreno.
2. La acción defensiva se apoyará en la capacidad de los fuegos y de
las tropas emplazadas en la zona defensiva de primera línea, para
detener o rechazar al atacante.
3. En su sentido extremo, la defensa tenaz, presentará para el
defensor pocas alternativas, al tener que mantener la LPR a
37 - 71
cualquier costo. Por ello planeará aceptar un combate decisivo,
cerrando al atacante el espacio delante del límite anterior de la PR
con un gran volumen y variedad de fuegos.
4. En la zona defensiva de primera línea o PR se emplazarán
suficientes fuerzas como para dominar el terreno que se está
defendiendo y obligar al atacante a emplear su máximo poder de
combate para tratar de efectuar una penetración.
5. El poder de combate asignado al escalón defensivo de primera
línea o PR será mayor que el correspondiente al escalón reserva.
6. La reserva será empleada para reforzar o relevar tropas
emplazadas en la zona defensiva de primera línea o PR; bloquear
y/o contraatacar a aquellas fuerzas que hayan penetrado dentro de
la PR a fin de retomar el control de la zona defensiva de primera
línea o PR y terrenos que la defensa haya decidido retener.

D. Defensa móvil (Ver figura Nº 26).

1. Esta defensa se basará en la ofensiva que ejecutará la reserva,


para destruir las fuerzas atacantes canalizadas por las fuerzas de
primera línea hacia un terreno determinado.
2. La zona defensiva de primera línea o PR será ocupada por el
mínimo necesario de fuerzas, con la finalidad de dar la alarma
frente a un inminente ataque; canalizar al atacante hacia un terreno
predeterminado, y hostigarlo para perturbarlo y desorganizarlo.

a. El escalón defensivo de primera línea o PR. empleará


procedimientos de la acción retardatriz, de la defensa y
algunas operaciones ofensivas, combinándolas a fin de
lograr la separación de las fuerzas atacantes y/o su
encauzamiento hacia aquellas zonas donde serán
vulnerables al propio contraataque.
b. El poder de combate asignado al escalón defensivo de
primera línea o PR, será notablemente menor que el
correspondiente al escalón reserva.

3. La reserva que estará constituida por la masa de las fuerzas, será


empeñada decisivamente en la acción ofensiva.
4. Teniendo en cuenta las características específicas, ésta forma de
defensa requerirá una detallada acción de encubrimiento y engaño
a fin de lograr inducir al atacante a que se someta al juego del
defensor.

38 - 71
E. Defensa en amplio frente (Ver figura Nº 27 y 28).

1. Se denominará así a la operación defensiva que deba realizar una


fuerza a la que le ha sido asignada una zona de defensa en frente
sensiblemente mayor al que podría cubrir manteniendo un
adecuado apoyo mutuo entre sus elementos componentes.
Esta situación podrá combinarse con la asignación de una gran
profundidad en la zona defensiva, lo que significará en definitiva
una mayor dispersión de la fuerza.
2. Esta forma de la defensa deberá ser considerada como normal en
nuestros TT.OO. y será la que con mayor frecuencia deberán
ejecutar nuestras fuerzas.
3. La defensa en amplio frente, tratará en ciertas situaciones de negar
al enemigo el dominio de una zona, desgastarlo y demorar su
avance, aprovechando al máximo las características del terreno
para evitar, fundamentalmente, que el mismo pueda ejercer el
control total sobre un territorio propio. Esto tendrá especial
importancia cuando la concertación de una tregua pueda ser
inminente.
4. La defensa en amplio frente tendrá las siguientes características.

a. El terreno que no podrá ser cubierto en forma continua en su


totalidad, será ocupado en sus zonas críticas con la
característica de "puntos de apoyo" cubriendo las
principales direcciones de aproximación del enemigo.

1) El dispositivo así determinado tratará de obligar al


atacante a distraer parte de sus fuerzas para enfrentar
esos puntos de apoyo, los que evitarán ser eludidos,
llegando en caso necesario a operar ofensivamente
con este fin.
2) Esos elementos deberán ser autosuficientes y podrán
ser sobrepasados por el atacante, ya que su misión
será permanecer en una zona para no ceder el control
total al enemigo. Ello no significará que deban
permanecer estáticos en un lugar, sino que deberán
hostigar al enemigo, desgastarlo y obligarlo a distraer
fuerzas para enfrentarlos.

b. La profundidad de la posición será obtenida por la


distribución escalonada de fuerzas y reservas.

39 - 71
1) Los espacios vacíos serán cubiertos por vigilancias,
reconocimientos, obstáculos (reales y/o simulados) y
fuego.
2) La separación entre las zonas de seguridad, defensiva
de primera línea o PR. y zona de reserva no será en
este caso fácilmente identificable.

c. La conducción general será centralizada para obrar


coherentemente. La ejecución será descentralizada.

1) En esta zona de defensa será normal la división de la


reserva y la descentralización de los apoyos de las
armas, tropas técnicas y SPAC.
2) Esta conducción requerirá excelentes comunicaciones
radioeléctricas.

d. La reserva estará basada en agrupamientos de reducidos


efectivos, de gran movilidad, rapidez y potencia de fuego,
capaces de operar en cualquier dirección y oportunidad. Se
tendrá especialmente en cuenta la necesidad de
aeromovilidad por parte de la misma.
Sus misiones generales, en este tipo de operación, podrán
ser:

1) Reforzar a un elemento fuertemente comprometido.


2) Reforzar a un elemento a fin de asegurar el
mantenimiento de un terreno crítico.
3) Contraatacar a un atacante a fin de destruirlo o
rechazarlo.
4) Facilitar el desprendimiento de fuerzas aferradas que
deban ser recuperadas.

e. La posición será organizada normalmente en tres zonas:

1) Zona de Seguridad.
2) Posición de Resistencia.
3) Zona de Reserva.

f. La Zona de Seguridad

1) Esta zona comienza en la línea de contacto con el


enemigo y se extiende hacia retaguardia hasta el
límite anterior de la LPR.

40 - 71
2) La misión de la Fuerza de Seguridad es ubicar al
enemigo y empeñarse en combate con éste con
suficiente poder de combate como para obligarlo a
desplegar; planificar un ataque y concentrar fuerzas
para atacar; y así revelar la ubicación y dirección de su
esfuerzo principal.
3) Esto deberá ejecutarse dentro del espacio suficiente
como para permitir a las tropas que ocupan la Posición
de Resistencia, concentrarse para destruir el esfuerzo
principal enemigo.
4) Para lograr dicho efecto, la Fuerza de Seguridad debe
rechazar los elementos de reconocimiento enemigos,
derrotar sus vanguardias, obligar al enemigo a
desplegar el grueso de sus tropas y medios de apoyo
de fuego para organizar un ataque en regla.
5) Mientras el enemigo desplaza fuerzas, adelanta su
artillería, y se concentra para un ataque en masa, se
verá obligado a revelar sus fuerzas y por dónde intenta
atacar.
6) Una Fuerza de Seguridad también buscará ocultar el
emplazamiento de la PR. al enemigo.
7) Para hacer esto, la Fuerza de Seguridad pudiera tener
que combatir delante de la PR. hasta un determinado
momento, para dar tiempo a que se completen los
preparativos para la defensa en la PR. Cuando así
sea, se deberá especificar claramente el tiempo a dar
a la PR., en las órdenes a impartir a la Fuerza de
Seguridad.
8) La Fuerza de Seguridad se empeña en combate tan
adelante de la PR. como le sea posible. Sus
batallones y otros elementos componentes,
combatirán desde una serie de posiciones que brinden
apoyo mutuo. Dichas posiciones estarán emplazadas
de manera tal de hacer máximo empleo de la
protección que ofrece el terreno y, están destinadas a
reducir al mínimo la vulnerabilidad de los sistemas de
armas del defensor, mientras que harán máxima la
eficacia de éstas.
9) Teniendo en cuenta lo especificado en 2., para las UU.
que forman parte de la Fuerza de Seguridad, sus
operaciones guardarán una marcada similitud con las
que ejecutarán las UU. que forman parte de la PR.
10) Cuando se lo ordene hacerlo, la Fuerza de Seguridad,
pasará el enemigo a las Fuerzas de la PR, y se
41 - 71
desplazará hasta una zona predeterminada en la
retaguardia de la PR. y se preparará para nuevas
operaciones. Normalmente ocupará una posición en la
profundidad de la retaguardia de la PR. donde se le
dará tiempo para reorganizarse, reabastecerse y
prepararse para un nuevo empleo.
11) La magnitud de la Fuerza de Cobertura dependerá de
la misión, enemigo, terreno y fuerzas disponibles. Esta
fuerza normalmente contará con elementos dotados
de gran movilidad y potencia de fuego. Las unidades
blindadas mecanizadas y aeromóviles, constituirán
normalmente los elementos más adecuados,
convenientemente reforzados con artillería e
ingeniería.
12) Normalmente la Fuerza de Cobertura estará bajo el
control de la GUB.

g. La Posición de Resistencia

1) La acción decisiva se desarrolla en la PR., cuyas


fuerzas son concentradas para destruir el esfuerzo
principal enemigo.
2) Dicha concentración serán efectuada mediante la
ejecución de movimientos laterales por parte de
fuerzas que defendían sectores menos amenazados
por el esfuerzo principal enemigo que fue detectado
por la Fuerza de Seguridad.
3) Así, habrá diferencias en la densidad y potencia
relativa combativa que se encontrará en diferentes
sectores de la LPR., ya sea que estén en la zona
donde se concentran las propias fuerzas o en la zona
donde se economizan fuerzas.
4) En la zona donde se concentra el propio poder de
combate, las posiciones defensivas se ocuparán en
profundidad a lo largo de las principales direcciones de
aproximación utilizadas por el enemigo para atacar la
propia posición.
5) Tan pronto como estén en condiciones de ser
empleadas nuevamente, los remanentes de la fuerza
de seguridad serán utilizados en las acciones que se
desarrollan en la PR.

42 - 71
h. La zona de retaguardia.

1) El Cuerpo de Ejército controlará la zona de retaguardia


de las divisiones.
2) El puesto de comando de la GUB. y los elementos de
apoyo no ubicados en la PR., de las GG.UU.CC.,
normalmente se establecerán en la zona de reta
guardia de la GUB.
3) La reserva de la GUB. podrá o no ocupar una posición
inicial en la zona de retaguardia del cuerpo. Habrá
oportunidades en que ocupe una posición inicial en la
zona de retaguardia de alguna GUC.

F. Variación de la Defensa.

La defensa tenaz, la defensa móvil y la defensa en amplio frente;


constituirán formas típicas de la defensa, sin embargo en su aplicación
práctica el conductor combinará formas de acuerdo a las necesidades y
exigencias impuestas por la situación.

XX. DINAMICA DE LA DEFENSA

La dinámica de la defensa incluirá: El contraataque, el ataque de desarticulación


y la acción retardatriz.

A. Ataque de desarticulación.

1. Es una operación ofensiva planeada por la defensa y lanzada


normalmente contra las fuerzas enemigas que se están
organizando o reuniendo para ejecutar un ataque.
2. El ataque de desarticulación tendrá las siguientes características:

a. Se empleará para retardar, desorganizar o destruir la


capacidad del enemigo para lanzar una ofensiva.
b. Su objetivo será la destrucción del personal y equipo
enemigo, no la toma del terreno u otros objetivos físicos.
c. El objetivo seleccionado deberá facilitar el cumplimiento de la
misión defensiva de la unidad.
d. No deberá ser realizado si la pérdida o destrucción de la
fuerza que lo ejecutará pusiera en peligro la capacidad del
comandante para cumplir con la misión defensiva.

43 - 71
B. Contraataque

Es una operación ofensiva planeada por el defensor con la finalidad de:

1. Rechazar o destruir las fuerzas enemigas que hayan penetrado a la


PR.
2. Reconquistar un terreno ocupado por el atacante.
3. Aniquilar al enemigo que previamente ha sido canalizado hacia una
zona determinada.

C. Acción retardatriz (Ver Capitulo XIII Operaciones Tácticas Básicas -


Sección C, Operaciones Retrógradas).

Es una operación retrograda planeada por la defensa mediante la cual se


infringe al atacante que avanza, los mayores daños posibles y el máximo
retardo sin que la fuerza retardante se vea decisivamente comprometida o
aferrada.
Podrá ser ejecutada por alguno de los escalones defensivos o por parte de
ellos.

XXI. APOYO DE LAS ARMAS

A. Apoyo de fuego.

1. Como contrapartida a las limitaciones que a la maniobra de las


tropas imponen las operaciones defensivas, la maniobra de los
fuegos adquirirá una mayor relevancia.
Todos los fuegos de la defensa deberán ser perfectamente
integrados y coordinados a fin de no dejar prácticamente zonas sin
batir. Esto resultará de particular importancia a efectos de cubrir
aquellos sectores no ocupados con tropas.
2. El apoyo de fuego comprenderá a los fuegos desde las más largas
distancias, hasta los que deban ejecutarse dentro la PR. Los
mismos tenderán a dificultar el apresto y retardar, desgastar y
encauzar la aproximación del enemigo; quebrar su ataque delante
de la LPR; como así también rechazarlo o crear las mejores
condiciones para la ejecución de reacciones ofensivas, si éste llega
a penetrar en la PR.
3. En todos los casos, fundamentalmente en la defensa móvil, se
deberá dotar a la reserva de un apoyo de fuego lo suficientemente
importante como para permitirle actuar con las mayores
posibilidades de éxito.

44 - 71
En consecuencia, los planes de apoyo de fuego en las operaciones
defensivas, requerirán un grado de completamiento e integración,
que en otras operaciones podrá no ser posible y/o necesario.

B. Apoyo de defensa aérea

1. La defensa, por sus características, estará más aferrada al terreno


que los otros tipos de operaciones. El defensor normalmente
adoptará un dispositivo más estático y sus instalaciones tendrán
una mayor permanencia. Generalmente estará en condiciones de
inferioridad aérea con respecto al enemigo.
En consecuencia, las medidas conducentes a proporcionar defensa
aérea a las fuerzas empeñadas en una operación defensiva tendrán
gran relevancia.
2. Las medidas de defensa aérea pasiva, fundamentalmente la
dispersión, el enmascaramiento y reforzamiento del terreno, podrán
verse facilitadas por el hecho de mantener a las tropas en
posiciones más estables; sin embargo esta misma circunstancia,
impondrá mayores exigencias a los medios de defensa aérea, a fin
de proteger aquellos efectivos e instalaciones más críticos.
3. Los medios, normalmente serán insuficientes para proporcionar una
protección adecuada a todas las fuerzas; ello llevará al defensor a
realizar un minucioso estudio para conjugar los medios de defensa
aérea disponibles y las necesidades.
En este sentido, deberá tenerse en cuentas que, a los
requerimientos normales de defensa aérea de puestos de
Comando, reservas, posiciones de artillería, e instalaciones
logísticas importantes y/o con abastecimientos críticos, deberán
agregarse aquellos puntos de apoyo o posiciones cuyo
mantenimiento resulte de vital importancia para el cumplimiento de
la misión defensiva. Asimismo, aun cuando no sea lo normal,
deberá preverse el empleo de los materiales de tubo de defensa
aérea, en la ejecución de tiro terrestre, en particular en la defensa
contra blindados.

C. Apoyo de ingeniería

1. Los elementos de ingeniería participarán en la preparación y


ejecución de la operaciones defensivas mediante la realización de
un sin número de tareas específicas que tendrán por finalidad
incrementar la fuerza defensiva y limitar el esfuerzo ofensivo
enemigo.

45 - 71
2. Las tareas fundamentales de apoyo de ingeniería en la defensiva
serán trabajos importantes de organización del terreno y asegurar la
transitabilidad de las propias tropas en la zona de defensa.

D. Apoyo de comunicaciones

1. Las características generales de las operaciones defensivas,


favorecerán el desarrollo de sistemas de comunicaciones densos,
perfeccionados y múltiples alternativas en relación directa al tiempo
disponible para su preparación.
2. Pese a ello, razones de encubrimiento y engaño no permitirán
desde un principio el empleo simultáneo de todos los medios
disponibles, los que serán explotados cuando estas medidas no
sean necesarias o queden fuera de funcionamiento otros sistemas.

XXII. APOYO DE TROPAS TECNICAS.

A. Apoyo de inteligencia.

1. El apoyo de inteligencia en las operaciones defensivas será


ejecutado en forma similar a las operaciones ofensivas.
2. Su gravitación estará dirigida hacia la identificación del esfuerzo
principal del enemigo y al empleo de sus elementos blindados y
aeromóviles/aerotransportados.
Asimismo tendrá gran importancia conocer:

a. Movimiento de unidades enemigas.


b. Ubicación de puestos de Comando.
c. Aumento de actividades de reconocimiento enemigo.
d. Aumento de la actividad de patrullas.
b. Ubicación de instalaciones logísticas.

B. Apoyo de operaciones sicológicas.

El apoyo de operaciones sicológicas en las operaciones defensivas será


similar al desarrollado en las operaciones ofensivas dando mayor énfasis
a los siguientes aspectos:

1. Sostener la moral de las propias tropas.


2. Contrarrestar la propaganda y subversión enemiga.

Estos aspectos cobran fundamental importancia en razón de la situación


desventajosa que afronta toda fuerza en la defensiva.

46 - 71
C. Apoyo de aviación de Ejército.

El apoyo de aviación de Ejército en las operaciones defensivas se


materializará fundamentalmente en el cumplimiento de las siguientes
funciones:
.
1. Participar en operaciones ofensivas de magnitud limitada.
2. Posibilitar la recuperación de puntos críticos.
3. Desplazar reservas, en especial en la defensa móvil y en amplio
frente.
4. Efectuar abastecimiento logísticos que requieran urgencia.
5. Combatir contra elementos subversivos mediante el desplazamiento
rápido de efectivos.
6. Evacuar pacientes.
7. Observación y reconocimiento aéreo.

D. Apoyo de policía militar.

El apoyo de policía militar en la operaciones defensivas seguirá los


lineamientos establecidos para las operaciones ofensivas con la salvedad
que en la defensa móvil y en la defensa en amplio frente, algunas de las
siguientes funciones impondrán un mayor esfuerzo a estas tropas
técnicas.

1. Reunión y evacuación de civiles refugiados.


2. Control de individuos extraviados y/o refugiados que puedan
provocar interferencias en los movimientos tácticos.
3. Proporcionar escolta y seguridad a personal o abastecimientos que
serán blancos rentables más accesibles para el enemigo por la
existencia de grandes espacios.

XXIII. APOYO DE SPAC.

A. Apoyo de personal.

En nuestras operaciones defensivas, cualquiera sea el tipo que se


desarrolle, cobra especial importancia al mantenimiento de la moral y
todas las actividades concurrentes al mismo. Ello será consecuencia de
los normalmente limitados recursos humanos disponibles. Asimismo, las
actividades de disciplina, ley y orden posibilitarán el logro de una mayor
eficiencia de combate necesaria en toda fuerza y que no es poseedora de
la libertad de acción, y que estará exigida en forma superior a lo que
pueda ocurrir en operaciones ofensivas.
47 - 71
B. Apoyo logístico.

1. Todas las operaciones defensivas impondrán un gran esfuerzo de


apoyo logístico por la extensión de nuestros teatros de operaciones
y los escasos medios disponibles.
Esta característica cobrará aún mayor importancia en zonas de
escasos recursos locales y limitadas vías de comunicación.
2. Será fundamental en estas operaciones adoptar previsiones para
un adecuado abastecimiento en artículos Clase III, como así
también el mantenimiento, recuperación y abastecimiento rápido de
los medios de combate disponibles. La rápida y eficiente
evacuación y hospitalización del personal será de gran importancia
no sólo para su rápido reintegro a las operaciones, sino también
será concurrente al mantenimiento de la moral.

C. Apoyo de asuntos civiles.

El apoyo de asuntos civiles, en las operaciones defensivas guardará


similitud en su ejecución a las desarrolladas en las operaciones ofensivas;
cobrando mayor importancia la adecuada explotación del apoyo de la
población civil a las operaciones en desarrollo y futuras reacciones
ofensivas previstas.

XXIV. PLANEAMIENTO DE LA DEFENSA.

A. El plan de operaciones para la defensa, será el resultado de un completo


estudio del comandante y su estado mayor para resolver, de la mejor
manera, el cumplimiento de la misión impuesta.

B. El examen de situación que realiza el Comandante y su EM. deberá


considerar:

1. La misión asignada.
2. El terreno, sus características. Necesidades de retención de
determinadas zonas.
3. El frente y la profundidad de la zona de responsabilidad asignada.
4. La movilidad relativa de las fuerzas.
5. El poder de combate terrestre, aéreo y nuclear relativo.

48 - 71
C. El defensor mantendrá en general, sobre el atacante, la ventaja de la
elección y reconocimiento previo del terreno, lo que le facilitará ejecutar un
planeamiento más detallado y profundo y aún tomar medidas con gran
anticipación que le permitan realizar obras de gran envergadura tales
como caminos, fuentes o depósitos que servirán a la posterior ejecución
de la defensa.

D. El defensor, una vez definida la forma de defensa a adoptar, determinará


las zonas de seguridad, defensiva de primera línea y de reserva; la
constitución de los escalones asignados a las mismas y las zonas del
terreno que deberán ser retenidas o podrán cederse al enemigo.

E. En el planeamiento se deberán coordinar los siguientes factores


principales:

1. Las fuerzas que ocuparán la posición y que operarán


defensivamente o en forma retardante.
2. Los fuegos, que se ejecutarán para destruir o neutralizar a las
fuerzas atacantes o para interdictar zonas del terreno o para apoyar
las acciones ofensivas de la defensa.
3. Los obstáculos, barreras y/o devastaciones, convencionales o QB.,
que reforzarán el terreno y servirán para encauzar, demorar o
detener al enemigo.
4. Las medidas de encubrimiento y engaño, que serán necesarias
para negar al enemigo el conocimiento del propio dispositivo y la
forma de defensa adoptada.
5. Los elementos que actuarán ofensivamente, y que podrán permitir
al Comando retomar la iniciativa en las operaciones.
6. El tiempo disponible, para el planeamiento, para la organización de
la posición y para la ejecución de la defensa.

De la ajustada coordinación de los factores mencionados surgirá el plan


de defensa, el que deberá contemplar todas las alternativas posibles de
acuerdo al tiempo disponible.

XXV. EJECUCION DE LA DEFENSA

A. El éxito de una defensa dependerá en gran parte de la oportuna y exacta


información.

Por ello será necesario realizar un esfuerzo de reunión de información


continuo y agresivo, a fin de posibilitar al defensor la disposición de una
adecuada inteligencia para determinar los probables efectivos,
composición, dirección y oportunidad de un ataque enemigo.
49 - 71
B. A menos que la sorpresa ofrezca mayores posibilidades de éxito, las
fuerzas atacantes deberán ser batidas por el fuego de aviones y artillería a
las mayores distancias a que sea posible.

C. Las fuerzas del escalón de seguridad, juntamente con reconocimiento


aéreo, serán normalmente el primer elemento de la defensa que
establecerá contacto con el enemigo en avance.

Dichas fuerzas alarmarán, engañarán y proporcionarán información.


Asimismo tratarán de infringir al atacante el máximo de bajas y de
obligarlo a desplegarse, ejecutando el mayor retardo sin dejarse aferrar en
forma decisiva. Algunos elementos de la zona de seguridad podrán
permanecer en la misma, aún después de ser sobrepasados por el
enemigo.

D. El dispositivo del atacante delante de la posición, podrá favorecer la


ejecución de un ataque de desarticulación. En este caso, el comandante;
deberá evaluar los riesgos que impliquen su concreción en relación con
los efectos que podrá producir en el cumplimiento de la misión.

E. A medida que el atacante se aproxime a la zona defensiva de primera


línea o PR., será tomado bajo el fuego de todas las armas; dentro de sus
alcances efectivos, para demorar o quebrar su ataque. Estos fuegos, sin
embargo, podrán ser deliberadamente demorados a fin de lograr la
sorpresa.

F. Una vez que el enemigo establezca el contacto con las fuerzas del
escalón defensivo de primera línea o PR., estas iniciarán su acción para
detener, rechazar o desorganizar el ataque.

G. Si el ataque no pudiera ser rechazado o contenido, se deberán adoptar las


medidas para controlarlo de tal forma que permita el contraataque eficaz
de la reserva.

H. El cumplimiento exitoso de la misión por parte del escalón defensivo de


primera línea, impondrá a las fuerzas integrantes del mismo, una
combinación de mantenimiento del terreno, retardo y bloqueo. El mayor
énfasis de las acciones tendentes a tales resultados dependerá
fundamentalmente de la forma de defensa que se adopte.

50 - 71
I. A medida que la presión del enemigo vaya en aumento las fuerzas de la
zona defensiva de primera línea o posición de resistencia podrán ser
forzadas a ejecutar una acción retardatriz. Sin embargo a algunas fuerzas
se les podrá ordenar mantener un determinado terreno y de ser necesario
permanecer en él aunque sean sobrepasadas por el adversario, a fin de
entorpecer, demorar o canalizar el avance de las fuerzas atacantes e
impedir que ejerzan el control total del territorio ocupado.

J. Las iniciativas del defensor podrán ser mantenidas fundamentalmente


mediante las reacciones ofensivas de su reserva, a fin de destruir el
enemigo, reconquistar un terreno o producirle el máximo de retardo y
desgaste en su avance.

XXVI. DEFENSA CONTRA BLINDADOS

A. La mayor eficacia contra blindados enemigos será obtenida mediante el


ataque a sus zonas de reunión, a fin de destruirlos antes que enfrenten la
posición. Por lo tanto será esencial su temprana localización.

Como ello no será siempre factible, deberá organizarse la defensa


antitanque de la posición, de manera tal de obtener el máximo
aprovechamiento de los obstáculos naturales y artificiales; conjugados con
el empleo de todos los medios de lucha contra blindados.

B. La defensa antitanque cubrirá las direcciones de aproximación que


presenten las mayores amenazas a la posición y se extenderá en la
profundidad de la posición de resistencia.

C. Los fuegos de artillería, inclusive los químicos, podrán ser empleados


contra los tanques para destruir sus tripulaciones y para separar o destruir
a la infantería que los acompañen.

D. Si las fuerzas blindadas enemigas lograsen penetrar en la zona defensiva


de primera línea o PR. las armas antitanques ubicadas en la profundidad
buscarán detener su avance, en tanto las fuerzas del escalón defensivo de
primera línea permanecerán en sus posiciones para impedir que la
infantería enemiga acompañe a sus tanques, como así también, para
contribuir a la destrucción de los que hayan penetrado.

En esa oportunidad, las fuerzas de reserva, fuertes en tanques, serán


empeñadas para destruir la penetración.

51 - 71
SECCION C

OPERACIONES RETROGRADAS

XXVII. CONCEPTOS GENERALES

A. Una operación retrógrada es un movimiento de tropas hacia retaguardia


para alejarse del enemigo o intercambiar el mínimo espacio por un
máximo de retardo. Ella podrá ser impuesta por la acción enemiga o
efectuada voluntariamente; pero sólo cuando con ello se pueda obtener
una ventaja importante.

Para lograr el éxito debe ser ejecutada de acuerdo con planes bien
organizados, por cuanto una operación retrógrada desorganizada frente al
enemigo podrá culminar con una derrota.

B. Las operaciones retrógradas se clasifican en: acción retardatriz, repliegue


y retirada.

C. Estas operaciones normalmente serán ejecutadas junto con operaciones


complementarias y subsidiarias, pudiendo en ciertos casos recurrir a
operaciones aerotransportadas y aeromóviles.

D. Las operaciones retrógradas, voluntarias o impuestas por la acción


enemiga, serán ejecutadas para lograr una o más de las siguientes
finalidades:

1. Hostigar, desgastar, resistir y retardar al enemigo.


2. Permitir el empleo de toda o parte de las tropas en otro lugar.
3. Atraer y colocar al enemigo a una situación desfavorable.
4. Evitar el combate en condiciones desfavorables.
5. Ganar tiempo sin empeñarse decisivamente.

XXVIII. FUNDAMENTOS

El comandante concebirá las operaciones retrógradas basándose en los


siguientes fundamentos:

A. Empleo apropiado del terreno y las CM.


B. Mantener la libertad de acción.

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C. Producir el máximo desgaste al enemigo.
D. Planeamiento centralizado y ejecución descentralizada.
E. Seguridad.

XXIX. CONSIDERACIONES BASICAS

A. Terreno y condiciones meteorológicas

1. La adecuada utilización del terreno permitirá ocasionar un retardo


considerable a una fuerza retardante y la oportunidad para
infringirle un severo desgaste.
2. En los planes se preverá la máxima utilización de los obstáculos
naturales (ríos, pantanos, desfiladeros, etc.). Se deberán elegir
posiciones que proporcionen campos de tiro y observación que
cubran grandes espacios. Ello permitirá combatir al enemigo desde
las más largas distancias, batiéndolo con los fuegos a medida que
avance hacia la posición.
3. Se instalarán obstáculos artificiales de todo tipo.
4. Una buena red vial facilitará los movimientos, el control y agilizará
los desplazamientos.
5. El terreno que ofrezca buena transitabilidad a campo traviesa,
permitirá adoptar una dispersión más amplia y reducir la
vulnerabilidad a un ataque aéreo enemigo.
6. Las condiciones meteorológicas favorables, proporcionarán buena
observación, permitirán obtener los mejores resultados de los
fuegos y facilitarán los movimientos a campo traviesa.

B. Coordinación y control.

1. En las operaciones retrógradas se deberá efectuar una


coordinación y control más detallados y más restrictivos que en otro
tipo de operaciones.
2. Se deberán tomar medidas para asegurar que el enemigo no eluda,
envuelva o se anteponga a la fuerza o efectúe una penetración que
impida el cumplimiento de la misión.
3. La coordinación y control detallados se lograrán mediante el uso
intensivo de las medidas de control (líneas de fase, puntos de
comprobación, límites laterales, etc.).

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XXX. APOYOS DE LAS ARMAS

A. Apoyo de fuego

1. Los requerimientos de apoyo de fuego de artillería en las


operaciones retrógradas deberán responder al concepto de
planeamiento centralizado y ejecución descentralizada.
2. Los fuegos de la artillería de campaña se planearán sobre las
direcciones de aproximación del enemigo, zonas de reunión y
concentraciones de tropas sobre y detrás de las propias posiciones
para apoyar la operación.
3. Los blancos que tendrán prioridad para la artillería estarán
constituidos por los elementos adelantados del enemigo, sus
medios de apoyo de fuego y las reservas locales.
4. La FAT. será empleada para retardar el avance del enemigo
mediante la interdicción de sus fuerzas en lugares críticos.
Proporcionará además cobertura de columna.
5. La FAT. proporcionará reconocimiento aéreo cercano, a fin de
determinar la ubicación y dispositivo de las fuerzas enemigas. Se
deberá tener especialmente en cuenta los intentos que realice el
enemigo para envolver y atacar los flancos.

B. Apoyo de defensa aérea.

1. Las operaciones retrógradas impondrán grandes exigencias a la


defensa aérea.

a. Las actividades que desarrollan las tropas en este tipo de


operaciones tienen algunas características que son comunes
a las operaciones defensivas y a los movimientos, pero no
gozarán de ninguna de las ventajas que para la defensa
aérea., impongan las mismas.
b. Por el contrario, se acrecentarán las dificultades para la
eficaz ejecución de la defensa aérea.

2. En la retirada, el casi permanente movimiento de las tropas a


retaguardia, no permitirá a estas, adoptar las más eficientes
medidas de defensa aérea pasiva, fundamentalmente el
enmascaramiento.

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3. En la acción retardatriz, la ejecución del movimiento a retaguardia;
con las desventajas ya expresadas, se verá agravada por el hecho
de mantenerse al contacto con el enemigo terrestre. A ello cabe
agregar la ocupación de posiciones de retardo por períodos
relativamente cortos, lo que no permitirá la ejecución de obras que
posibiliten la más aceptable protección contra los ataques aéreos.
Además, tanto al momento de iniciar el repliegue a una nueva
posición de retardo, como durante su ocupación; constituirán
momentos críticos para proporcionar la necesaria defensa aérea.
4. Es así, como las normales medidas de defensa aérea pasiva,
enmascaramiento, dispersión, fortificación del terreno, etc., no
podrán ser desarrolladas en la amplitud deseada.
5. Por todo ello, resultará necesario planificar cuidadosamente el
empleo de los medios de artillería de defensa aérea y de la Fuerza
Aérea, a fin de compensar en el mayor grado posible, las
deficiencias apuntadas. La fuerza Aérea deberá proporcionar
fundamentalmente cobertura de columna durante los movimientos a
retaguardia, mientras que los elementos de artillería de defensa
aérea serán afectados principalmente a la protección de puestos de
comando, reservas, posiciones de artillería y de aquellos lugares o
zonas que posibilitan y/o facilitan los movimientos de las tropas,
puentes, nudos carreteros, zonas de reunión; etc.

C. Apoyo de ingeniería

1. El apoyo de ingeniería a las operaciones retrógradas se


materializará fundamentalmente en facilitar el movimiento hacia
retaguardia y en dificultar el avance del enemigo.
2. El apoyo de ingeniería deberá escalonarse a fin de asegurar el
apoyo a los distintos elementos de la fuerza que realicen la
operación retrógrada.
3. Las principales tareas que podrán realizar los ingenieros en apoyo
de las operaciones retrógradas serán:

a. Planificación y ejecución de demoliciones a lo largo de las


direcciones de aproximación del enemigo.
b. Mantenimiento y reparación de la red vial existente y de las
obras de arte.
c. Asesoramiento y colaboración en la preparación general y
ejecución del plan de obstáculos y/o barreras.
d. Intervención en la ejecución de medidas de encubrimiento y
engaño.
e. Eventuales actividades de planificación y ejecución de
devastaciones.
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D. Apoyo de comunicaciones.

El apoyo de comunicaciones a las operaciones retrógradas deberá


caracterizarse:

1. Por la flexibilidad y la disponibilidad de medios de alternativa que


permitan al comando la coordinación y control de las operaciones
durante todo su desarrollo.
2. Por facilitar el encubrimiento y engaño a ejecutar por las tropas, a
fin de permitir la concreción de la operación.
Esto exigirá de los elementos de comunicaciones grandes
esfuerzos a fin de realizar en forma simultánea varias misiones,
actuando en forma descentralizada sobre amplios espacios.

XXXI. APOYO DE TROPAS TECNICAS

A. Apoyo de inteligencia

El apoyo de combate de inteligencia deberá caracterizarse en las


operaciones retrógradas por la temprana información, entre otros, de los
siguientes aspectos:

1. Dirección en que se desplaza el enemigo.


2. Efectivo y composición de la fuerza del esfuerzo principal.
3. Ubicación de las fuerzas blindadas enemigas.
4. Posibilidades del enemigo para impedir o bloquear la operación
retrógrada.

Esta información permitirá realizar los ajustes necesarios a los planes.

B. Apoyo de aviación de ejército

El apoyo de aviación de ejército en las operaciones retrógradas podrá


materializarse principalmente en:

1. La ejecución de reconocimientos de las posiciones de retardo y/o


vías de retirada.
2. La carga aérea de elementos aeromóviles.
3. El reglaje del fuego, la evacuación aérea y el movimiento de
pacientes.
4. La carga aérea de elementos para la seguridad de los flancos y/o
aquella fuerza que pueda ser aferrada.

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C. Apoyo de policía militar.

El apoyo de policía militar a las operaciones retrógradas, centrará su


esfuerzo en las siguientes actividades:

1. Control del tránsito, para posibilitar que se efectúen los


desplazamientos hacia retaguardia en la forma planeada, evitando
con ello interferencias o demoras que hagan peligrar esa operación.
2. Control de la circulación de pobladores, a fin de que no interfieran
las operaciones que realicen las fuerzas. Dicho control podrá incluir
algunas de las siguientes medidas.

a. Prohibición de efectuar desplazamientos.


b. Determinación de zonas o lugares prohibidos.
c. Evacuación de determinadas zonas.
d. Internación de personal peligroso.

D. Apoyo de operaciones sicológicas

1. El apoyo de operaciones sicológicas en las operaciones retrógradas


deberá considerar, en su desplazamiento, una especial atención a
las restricciones que determina este tipo de operación de combate.
2. El planeamiento de las operaciones sicológicas para el apoyo a las
operaciones retrógradas deberá considerar entre otros, los
siguientes objetivos.

a. Crear una imagen favorable de las propias fuerzas.


b. Coadyuvar al control del enemigo y de civiles amigos en la
zona de combate.
c. Contrarrestar la propaganda enemiga.
d. Mantener y aumentar la moral de la propia fuerza.

XXXII. APOYO DE SPAC.

A. Consideraciones básicas

1. Los elementos de SPAC., se retendrán bajo control centralizado;


cuando ello permita proporcionar un apoyo eficaz a las principales
fuerzas dependientes. De lo contrario se los descentralizará en la
medida que fuera necesario.
2. En el planeamiento se deberá contemplar lo siguiente:

a. Un apoyo adecuado para toda la operación.


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b. La evacuación de abastecimientos y equipos fuera de
servicio.
c. La destrucción de abastecimientos y equipos, excepto los de
sanidad, que no sea posible evacuar.
d. La rápida evacuación de las bajas de personal.

3. Durante las operaciones retrógradas los elementos e instalaciones


de SPAC. se ubicarán bien a retaguardia. Tales ubicaciones
deberán contribuir a asegurar un servicio ininterrumpido, una
protección máxima y efectuar los menores desplazamientos.
4. Se deberá mantener la máxima dispersión compatible con el control
y las previsiones para la seguridad de los elementos de los
servicios para apoyo de combate.
5. Los desplazamientos se efectuarán anticipadamente y
normalmente, bajo la protección de la obscuridad. Esto disminuirá la
congestión del tránsito y eliminar la interferencia con los
movimientos de los elementos de combate.

B. Apoyo de personal

1. Las operaciones retrógradas demandarán en todos los niveles una


ejecución agresiva y poner de manifiesto un gran coraje personal, a
fin de mantener el espíritu ofensivo dentro de los distintos
elementos. Para lograr ello todos los servicios de personal no
escatimarán esfuerzos en su accionar.
2. El apoyo de personal será dirigido, normalmente y con especial
énfasis, sobre el mantenimiento de la moral a fin de evitar la
desmoralización de las fuerzas.

C. Apoyo logístico

1. El planeamiento logístico para una operación retrógrada evitará la


innecesaria destrucción, pérdida o acarreo de los abastecimientos
por parte de las fuerzas en contacto con el enemigo.
Para lograr este objetivo será necesario limitar la corriente de
abastecimientos hacia las zonas de primera línea e iniciar una
temprana evacuación con los excedentes de los abastecimientos.
2. En las operaciones retrógradas se adelantarán un mínimo de
elementos para proporcionar el apoyo imprescindible de
abastecimiento, de mantenimiento y de sanidad a las fuerzas en
contacto con el enemigo, permaneciendo la mayoría de los medios
del apoyo emplazada bien a retaguardia.

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3. Un servicio que tendrá una gran incidencia en el mantenimiento de
la moral será el de sanidad, el cual para evitar la desmoralización
de las fuerzas deberá arbitrar todos los medios a fin de acelerar la
evacuación de pacientes.

D. Apoyo de asuntos civiles

El apoyo de asuntos civiles en las operaciones retrógradas centrará su


esfuerzo en los siguientes aspectos:

1. En el control efectivo de los movimientos de la población civil, ya


que el desplazamiento de masas desorganizadas disminuirá la
maniobrabilidad de las fuerzas para ejecutar la operación
retrógrada, por las interferencias que puedan causar.
2. En el control de los refugiados y desplazados, ya que podrán
constituir un medio del enemigo para perturbar las propias
operaciones.
3. En la evacuación de aquellas personas que en caso de caer en
manos del enemigo, serían un medio de perturbación o limitación a
la conducción de las operaciones.
4. En la evacuación o destrucción de aquellos recursos de la
economía civil que pueden acrecentar la capacidad del enemigo o
que son necesarios para las propias fuerzas.
5. En el máximo empleo de las fuerzas de seguridad y otros
organismos civiles.
6. En el encuadramiento de la población civil que permanezca en la
zona a ocupar por el enemigo y en el apoyo logístico a brindarle.

XXXIII. ACCION RETARDATRIZ

Es una operación mediante la cual una fuerza, cuyos principales componentes


no están ya en contacto con el enemigo, se mueven alejándose del adversario.

A. Consideraciones básicas

1. La acción retardatriz es una operación mediante la cual se trata de


infringir al enemigo que avanza, los mayores daños y el máximo
retardo sin que la fuerza retardatriz se vea decisivamente
comprometida o aferrada.
Al ejecutar esta operación se intercambiará el mínimo espacio por
la mayor ganancia de tiempo posible.

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2. Se considerará que una fuerza estará decisivamente comprometida
o aferrada cuando haya perdido su libertad para maniobrar y su
capacidad para iniciar una acción planeada mediante el empleo de
la maniobra y la potencia de fuego.
3. Los frentes generalmente extensos en que se realizará la acción
retardatriz determinarán, normalmente, que en determinados
lugares, se empleen destacamentos de seguridad, los cuales
frecuentemente tendrán que cumplir misiones muy difíciles.
4. Se deberá adoptar medidas y previsiones contra los blindados
enemigos, cuando se le asigne esa capacidad.

B. Procedimientos en las acciones retardatrices

1. Los procedimientos a los que recurrirá la acción retardatriz serán


variados, ellos irán desde una operación simulada hasta un ataque
con objetivo limitado, barreras, operaciones no convencionales,
incursiones, operaciones aeromóviles, etc.

a. El comandante seleccionará los procedimientos a los que


recurrirá, siempre teniendo en cuenta que debe tratar de
ocasionar al enemigo el máximo de retardo y de desgaste
con la mínima pérdida de espacio y sin dejar aferrar sus
fuerzas.
b. Un proceder variable, unido a la movilidad, rapidez, sorpresa,
encubrimiento y engaño, aumentará la eficacia de la acción
retardatriz.

2. Normalmente y en combinación con los procedimientos señalados,


el comandante ejecutará la acción retardatriz con sus fuerzas
desde:

a. Posiciones sucesivas.
b. Posiciones alternadas.
c. Una combinación de las dos anteriores.

3. Se podrán ejecutar operaciones ofensivas cada vez que se


presenten oportunidades para:

a. Ocasionar serias bajas al enemigo.


b. Engañar al enemigo.
c. Controlar un terreno dominante.
d. Desprender a una fuerza aferrada.

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4. La elección de la acción retardatriz desde posiciones sucesivas o
alternadas se basará en la amplitud del frente, las fuerzas
disponibles, el grado de amenaza enemiga y el período de retardo
requerido.
5. La acción retardatriz desde posiciones alternadas solamente podrá
realizarse cuando la fuerza esté en condiciones de cumplir con la
misión ocupando dos posiciones simultáneamente. Normalmente se
empleará cuando el frente sobre el que se realizará la operación
sea relativamente angosto.
6. La acción retardatriz desde posiciones sucesivas podrá utilizarse
cuando la fuerza tenga un frente relativamente amplio.
7. Los dos procedimientos enunciados podrán emplearse en
combinación o una rápida transición de un procedimiento a otro, de
acuerdo a la situación.

C. Escalones de las posiciones de retardo

Las posiciones de retardo normalmente tendrán los siguientes escalones:

1. Zona de seguridad.
2. Zona defensiva o PR.
3. Zona de retaguardia.

D. Planeamiento

1. El planeamiento y control de las operaciones será centralizado,


pero su ejecución descentralizada. Dentro de los planes generales
impartidos por una fuerza, se les otorgará a los comandantes
dependientes, la máxima libertad de acción. Esta libertad de acción
permitirá explotar cualquier ventaja u oportunidades que puedan
originarse en los menores niveles y posibilitará incrementar el
retardo a ocasionar en ellos.
2. Un plan para ejecutar una acción retardatriz deberá contener como
mínimo los siguientes aspectos:

a. Ubicación general de la posición inicial de retardo

El plan podrá ser bien específico, hasta el punto de designar


la posición inicial de retardo; pero normalmente indicará una
zona general, permitiendo así a las fuerzas dependientes
recomendar o seleccionar su posición exacta luego de un
reconocimiento de la zona. Si cuando se resuelva iniciar la
acción retardatriz las fuerzas estuviesen en contacto con el

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enemigo, no será necesario designar una posición inicial de
retardo.

b. Zona en que se efectuará la acción retardatriz

1) El comando superior especificará el sector en el cual


las fuerzas dependientes serán responsables de la
acción retardatriz. Se determinarán los límites laterales
y se indicarán los puntos de coordinación para la
posición inicial de retardo y para las siguientes
posiciones de retardo designadas.
2) Cuando una fuerza sea desplegada para recibir a
otros elementos del comando superior que se
repliegan, tendrá libertad para operar en toda la zona
de responsabilidad de dicho comando.

c. Período de retardo

Se deberá especificar a los comandos dependientes el


tiempo que deberá retardar al enemigo delante de una línea
determinada.

d. Ubicación de la nueva zona de seguridad del comando


superior.

1) La ubicación de la nueva zona de seguridad del


comando superior y la distribución de los elementos
que la ocuparán, será una información de principal
interés para los comandos dependientes, en razón de
que se tendrá que planear su ocupación o un posible
repliegue a través de la posición.
2) Si durante el planeamiento inicial no fuese posible
conocer la ubicación de la nueva posición de
seguridad, se deberá proporcionar esa información, a
la fuerza retardatriz, como para permitirle elaborar
planes oportunos.

e. Limitaciones impuestas a la operación.

Se deberán determinar aquellos aspectos que puedan limitar


la operación. Ellos podrán estar dados por el empleo de
agentes QBR. durante una fase o toda la acción retardatriz o
por cualquier otro de los diferentes procedimientos a los que
se recurra para retardar el enemigo y que puedan constituir
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una limitación a la actividad que estén desarrollando las
fuerzas en su conjunto.

3. Se deberán seleccionar posiciones de retardo que permitan


ocasionar al enemigo un máximo retardo y al mismo tiempo los
mayores daños y desgastes posibles, y que puedan ser ocupadas
con pocas fuerzas.

Se deberán seleccionar posiciones de retardo que posean:

a. Alturas transversales a la dirección de avance del enemigo.


b. Cursos de agua no vadeables, pantanos, lagos y otros
obstáculos.
c. Terrenos altos, con buena observación y amplios campos de
tiro.
d. Caminos de repliegue con un encubrimiento adecuado.
e. Una red vial o zonas que proporcionen una buena
transitabilidad a campo traviesa para el repliegue.

Las posiciones de retardo sucesivas deberán estar


suficientemente distanciadas entre sí, a fin de que el
enemigo deba reagrupar sus fuerzas antes de continuar su
ataque desde una posición a la siguiente.

4. Al organizar las posiciones de retardo se explotarán todos los


obstáculos naturales y se complementarán con artificiales para
mejorarlas en la medida que ello sea posible. Todos los obstáculos
(naturales y artificiales) deberán ser cubiertos por el fuego a fin de
aumentar su valor y lograr el máximo de retardo.
5. La magnitud de las fuerzas retardatrices necesarias a emplear a lo
largo del frente, dependerá del poder de combate enemigo; de las
fuerzas disponibles, del frente a cubrir, de la naturaleza del terreno,
de la profundidad del sector y del período de retardo requerido.
6. La acción retardatriz desde posiciones sucesivas será la que más
frecuentemente se ejecutará. En ella, la mayor parte de la fuerza se
encontrará continuamente empeñada, debiéndose mantener una
pequeña reserva móvil y potente.
La acción retardatriz desde posiciones alternadas normalmente no
dispondrá de reservas.
7. En todos los casos, las posiciones de retardo no se organizarán con
una gran profundidad.

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E. Ejecución de la acción retardatriz

1. En la ejecución de una acción retardatriz, las fuerzas tomarán


contacto con el enemigo a las mayores distancias para causarles
bajas y forzarlo a ejecutar un despliegue prematuro, que lo demore.
Sin embargo, en determinadas situaciones los fuegos de gran
alcance podrán ser deliberadamente retenidos con la finalidad de
engaño.
2. Las fuerzas que retardan se esforzarán para ofrecer la suficiente
resistencia para impedir la infiltración y forzarán al enemigo a
concentrarse para atacar. La fuerza enemiga concentrada será
atacada y destruida por el fuego, y donde sea posible sus efectos
explotados por medio de la maniobra.
3. Si la operación no tuviera como finalidad engañar o canalizar al
adversario, la fuerza que efectúa una acción retardatriz someterá a
la columna enemiga en avance a repetidos ataques contra el flanco,
con fuerzas móviles agresivas; produciendo las mayores pérdidas
posibles, sin llegar a una decisión.
4. Acción retardatriz desde posiciones sucesivas (Ver figura Nº
29).

a. La acción retardatriz desde posiciones sucesivas


contemplará el mejoramiento y la ocupación de cada posición
natural de retardo.
b. La artillería de largo alcance abrirá el fuego contra el
enemigo, utilizando al máximo su alcance.
c. Cuando se haya logrado ocasionar el máximo retardo y sea
evidente que continuar ocupando la posición traerá como
resultado que la fuerza se vea decisivamente comprometida
o aferrada, se iniciará el repliegue.
d. Cuando se reciba la orden de repliegue una parte de la
fuerza mantendrá contacto con el enemigo y continuará su
acción retardatriz, replegándose combatiendo hacia la
siguiente posición de retardo.
e. Las fuerzas que permanezcan en contacto deberán contar
con la mayor preponderancia de elementos blindados
posible. Estas fuerzas, ante la amenaza de verse
decisivamente aferradas o comprometidas, se replegarán
lentamente y combatiendo hacia la posición siguiente.
f. La reserva podrá ser empleada para:

1) Proporcionar fuerzas de seguridad delante de la


posición de retardo.
2) Efectuar un contraataque.
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3) Proteger un flaco amenazado.
4) Asegurar zonas vitales de la retaguardia
5) Preparar sucesivas posiciones de retardo.
6) Efectuar ataques de desarticulación para facilitar el
desprendimiento de las fuerzas
7) Proporcionar apoyo de fuego a una fuerza que se
repliega.

5. Acción retardatriz desde posiciones alternadas. (Ver figura N°


30).

a. Al emplear este procedimiento la fuerza se organizará en dos


elementos. Un elemento ocupará la posición de retardo inicial
y se empeñará contra el enemigo, mientras que el otro
elemento ocupará y mejorará la segunda posición de retardo.
b. Aquellas fuerzas que ocupen la posición de retardo inicial,
combatirán con el enemigo ejecutando una acción retardatriz
continua desde la posición de retardo inicial y entre ésta y la
segunda posición de retardo. Cuando las fuerzas alcancen la
segunda posición de retardo se replegarán a través o
alrededor de las fuerzas que ocupan dicha posición y
continuarán hacia la tercera posición de retardo, iniciando la
preparación y ocupación de la misma.
c. Las fuerzas emplazadas en la segunda posición de retardo,
asumirán la misión de retardar al enemigo; cuando las
fuerzas de retardo inicial se hayan replegado a través de
ellas.
d. Este procedimiento se repetirá, manteniéndose
alternativamente cada elemento en contacto con el enemigo;
el que asumirá, por turno, la responsabilidad de lograr el
retardo requerido.
e. Este procedimiento tendrá la ventaja de proporcionar más
tiempo para mejorar las posiciones de retardo y para efectuar
el mantenimiento del material y dará un descanso a las
tropas.

XXXIV. REPLIEGUE

A. El repliegue es una operación que se utiliza para desprender a una fuerza


desplegada que se encuentra en contacto con el enemigo, en el desarrollo
de cualquier tipo de operación ofensiva, defensiva o retrógrada. Será más
frecuente en estos últimos tipos de operaciones y en todas tendrá similar
forma de planeamiento y ejecución.

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B. Podrá ser impuesto por la acción enemiga o efectuado voluntariamente.

Normalmente los realizados bajo presión enemiga se ejecutarán de día o


cuando, en períodos de escasa visibilidad u obscuridad; sea descubierto o
interferido un planificado voluntario.

En cambio los a ejecutar voluntariamente deberán tratar de desarrollarse


durante la noche o bien, en lapsos de escasa visibilidad y/o al amparo de
rigurosas contramedidas propias sobre la detección visual y electrónica del
enemigo.

C. En la ejecución de cualquier tipo de repliegue, que por imperio de la


situación debe realizarse de día; se pondrá especial énfasis en el
acrecentamiento de las medidas de defensa aérea y antitanque
adoptadas. El refuerzo de bocas de fuego (artillería de defensa aérea,
piezas y armas antitanques) y el aumento de las medidas pasivas de
defensa aérea, coadyuvarán al logro de presentar al adversario un fuerte
impedimento a su accionar.

D. La finalidad primaria de repliegue será la de sustraer fuerzas en contacto


con el enemigo para su empleo en el cumplimiento de otras misiones y en
función de complementar la ejecución de cualquier tipo de operación
básica.

Participará fundamentalmente en algunas de las finalidades establecidas


para las operaciones retrógradas y defensivas.

E. En las operaciones ofensivas, el repliegue estará encaminado


principalmente a tratar de lograr el engaño sobre las intenciones del
atacante en determinada zona del frente en contacto con el enemigo;
facilitar la reunión de efectivos empeñados para ser lanzados en otra
dirección de ataque que la situación brinde como explotable en
determinada oportunidad o, se desee obtener mayor flexibilidad en el
dispositivo adoptado para obtener ventajas en la maniobra. Repliegues
parciales serán más frecuentes que los generales en este tipo de
operación y, en general, permitirán realizar ajustes en sectores de frente
de combate que el comando considere necesarios según la situación
imperante. Además la operación de repliegue durante una operación
ofensiva, podrá ser utilizada ante el desarrollo no exitoso de la misma y
como paso inicial de la ocupación de una posición a retaguardia.

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XXXV. PLANEAMIENTO

A. Al planear su repliegue, una fuerza podrá imponer a sus elementos


dependientes que adopten previsiones para efectuar, tanto un repliegue
voluntario como involuntario.

El éxito de un repliegue voluntario (normalmente nocturno) se basará en el


engaño mientras que el de un involuntario (normalmente diurno) residirá
en el combate que se deberá efectuar durante el movimiento hacia
retaguardia.

B. Un plan de repliegue incluirá esencialmente la maniobra y el apoyo de


fuego, preparados concurrentemente y estrechamente integrados:
Además deberá contar con los detalles esenciales de seguridad de apoyo
de las armas, tropas técnicas y de los servicios para apoyo de combate.
Será de suma importancia determinar detalladamente el establecimiento
del sistema de comunicaciones necesario para ejercer el control.

C. En general, un plan de repliegue deberá contener, sin limitarse


necesariamente a los que se mencionarán a continuación, los siguientes
elementos:

1. La nueva posición a ocupar y el dispositivo de las fuerzas dentro de


ella.
2. La hora y secuencia para el repliegue de todos los elementos
dependientes, que deberá basarse en la necesidad de preservar la
integridad de la fuerza.
3. Los sectores, líneas de fase y vías de repliegue a utilizar por las
fuerzas dependientes.
4. Previsiones para la fuerza de cobertura y su ubicación.
5. Medidas de encubrimiento y engaño.
6. Organización para el combate, incluyendo las oportunidades en que
se harán efectivos los refuerzos y los apoyos.
7. Previsiones para la disposición o destrucción de abastecimientos y
equipos (excepto el de sanidad) en una forma y oportunidad que no
comprometa el plan de repliegue.
8. Previsiones para el apoyo de fuego (A y FA.) y otros apoyos de las
armas y tropas técnicas.
9. Previsiones para los servicios para apoyo de combate.
10. Previsiones para la evacuación de bajas.

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11. Previsiones para el desprendimiento en un repliegue involuntario y
acciones iniciales a tomar en caso de que el enemigo ataque
durante el repliegue voluntario.
12. Medidas para el control del tránsito.
13. Plan de comunicaciones.

XXXVI. EJECUCION DE REPLIEGUE

A. Tan pronto como la idea de maniobra haya sido desarrollada sobre una
base firme, el comandante impartirá una orden preparatoria con
suficientes detalles como para permitir el planeamiento y la ejecución de
los reconocimientos durante las horas de luz por parte de los
comandantes dependientes.

B. El repliegue podrá facilitarse mediante la ejecución de ataques con


objetivo limitado. Estos ataques forzarán al enemigo a parar su ataque o a
asumir la defensa, permitiendo de este modo que el repliegue se ejecute
con la mínima interferencia.

C. La reserva podrá utilizarse para cubrir el repliegue. Podrán asignársele


misiones de reconocimientos de caminos y de zonas, o bien conquistar y
mantener un terreno que se considere esencial para el cumplimiento
exitoso de la misión.

D. La realización de un repliegue donde no existe presión enemiga


(voluntario y normalmente nocturno) dependerá primordialmente de la
velocidad de ejecución y de las medidas de engaño. El humo,
especialmente empleado durante lapsos de escasa visibilidad, y la
utilización de caminos cubiertos ayudarán a reducir la capacidad enemiga
para observar los movimientos que se ejecuten, pero también dificultarán
el propio control.

1. Se deberá prever la interferencia que pueda realizar el enemigo con


tropas aerotransportadas y/o aeromóviles.
2. A fin de contar con la mayor cantidad de horas de oscuridad, el
repliegue deberá iniciarse tan pronto como ello lo permita.
3. Se prohibirán todas las actividades diurnas que puedan hacer
peligrar el ocultamiento del repliegue previsto, como ser un
movimiento de vehículos hacia retaguardia y se adoptarán todas las
previsiones necesarias a fin de que los ruidos no delaten el
repliegue. Asimismo, se logrará el engaño simulando un tráfico
radioeléctrico normal y ejecutando los fuegos habituales y otras
actividades corrientes.

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4. La fuerza en contacto con el enemigo normalmente destinará parte
de efectivos (retaguardias de combate) para que permanezcan en
contacto con el mismo a fin de proteger al grueso en su movimiento
hacia la retaguardia y simular una actividad normal.
5. Las principales fuerzas se desplazarán hacia la retaguardia en la
siguiente sucesión:

a. Los elementos para reconocer y preparar la nueva posición.


Estas fuerzas se desplazarán por pequeñas fracciones
aisladas.
b. Los elementos de los servicios para apoyo de combate. La
artillería que no sea esencial para apoyar a las fuerzas que
permanecen en contacto y la reserva que podrá destinarse
como fuerza de cobertura.
c. El grueso de la fuerza
d. Las retaguardias de combate que han permanecido en
contacto con el enemigo.

E. La ejecución de un repliegue efectuado bajo presión enemiga (involuntario


y normalmente diurno) dependerá de la maniobra, potencia de fuego y
capacidad de control. Su desarrollo exitoso se verá facilitado por una gran
movilidad y rapidez, minucioso control, el empleo eficaz de fuerzas de
apoyo, la ubicación adecuada de la potencia de fuego, etc. En un
repliegue involuntario todos los elementos posibles de la fuerza destinarán
fracciones de seguridad para cubrir y recibir a los elementos que se
repliegan sin dejar retaguardias de combate en contacto con el enemigo.
Estos elementos que se repliegan se moverán coordinadamente hacia
retaguardia, empleando sus acciones en forma agresiva y con
procedimientos retardantes y, normalmente, sin utilizar zonas de reunión.

1. Cuando no sea posible ejecutar un repliegue simultáneo, el


comandante deberá determinar el orden de sucesión del repliegue.
Replegar primero las fuerzas más aferradas por la presión enemiga
significará correr el riesgo de someter a los elementos principales
de la fuerza al cerco y destrucción. Replegar primero las fuerzas
menos presionadas por el enemigo podrá determinar una pérdida
de todas o la mayor parte de las fuerzas más fuertemente
aferradas. La decisión deberá basarse en el plan que mejor
preserve la integridad de la fuerza y contribuya al cumplimiento de
la misión.

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2. Cuando el repliegue involuntario se desarrolle en el marco de
operaciones retrógradas o defensivas las reservas serán
desplegadas bien adelante para que colaboren en el repliegue
mediante el fuego o el ataque terrestre. Cuando el repliegue se
ejecuta bajo presión enemiga, la reserva frecuentemente ejecutará
un ataque de desarticulación para desorganizar, desbaratar y
retardar el ataque enemigo. Las reservas también podrán ser
utilizadas para proteger el repliegue, bloqueando las direcciones de
aproximación enemigas.
3. Si durante la ejecución de una operación ofensiva, algunos
elementos propios de algún sector del frente de ataque, son
obligados a replegarse por la acción de intensos fuegos u otras
contramedidas enemigas las reservas podrán facilitar el
desprendimiento y repliegue de dichos elementos influyendo desde
nuevas direcciones de ataque sobre el dispositivo adversario.
Asimismo, un incremento de los fuegos propios sobre el
mencionado sector enemigo y medidas adicionales de
encubrimiento (especialmente humo) coadyuvarán al logro del
repliegue involuntario.

XXXVII. RETIRADA

A. Consideraciones básicas.

1. Una retirada constituirá una operación retrógrada en la cual una


fuerza, cuyos principales elementos componentes no están ya en
contacto con el enemigo, se mueve alejándose del adversario a fin
de evitar el combate bajo las condiciones existentes.
2. Para iniciar la ejecución de este tipo de operación será necesaria la
aprobación del comando superior.
3. Una retirada podrá efectuarse luego de un repliegue o antes de que
se establezca contacto con el enemigo.
4. Cuando un repliegue precede a la retirada, esta comenzará una vez
que las fuerzas principales hayan roto el contacto con el enemigo y
se encuentren formadas las columnas de marcha.
5. Una fuerza de retirada podrá estar expuesta a ataques aéreos, de
guerrilla y por fuerzas aerotransportadas o aeromóviles; a fuegos de
largo alcance y a operaciones psicológicas por parte del enemigo.
El movimiento también podrá ser impedido o dificultado por los
refugiados y el personal ci vil de la zona.

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B. Ejecución de la retirada

1. Se deberán asignar caminos y objetivos de marcha bien definidos y


en ciertos casos posiciones a retaguardia, a cada una de las
fuerzas principales que se retiran.
2. Durante la etapa inicial de la retirada, el control podrá
descentralizarse en los comandantes dependientes. Sin embargo, a
medida que el grueso aumente la distancia que los separa del
enemigo, se reasumirá el control.
3. La operación podrá ejecutarse como una marcha táctica o
administrativa.
4. El encolumnamiento de la fuerza se adecuará en función del
empleo en el lugar de finalización de la operación.
5. La retirada normalmente se efectuará durante la noche o en
condiciones de poca visibilidad, a fin de contrarrestar en parte las
posibilidades del enemigo (aérea, nuclear, etc.). Ello determinará un
incremento de los medios de control.
6. La seguridad del grueso estará dada por las vanguardias,
flanguardias y retaguardias.
7. Normalmente, cuando la retirada se ejecute, luego de un repliegue,
será necesario contar con una fuerte retaguardia, la retaguardia
empleará la acción retardatriz para demorar el avance enemigo e
impedir que interfiera el movimiento del grueso. Cuando la
retaguardia deba empeñarse contra el enemigo, el grueso, al
alejarse, constituirá una nueva retaguardia.
8. A fin de evitar los intentos del enemigo para envolver a las fuerzas
que se retiran, se deberán emplear todos los medios de
reconocimiento a fin de obtener una temprana información.

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