Los efectos de la sobrepoblación son tan reales como eventualmente subjetivos y
aun personas con educación universitaria no logran identificar en la vida cotidiana lo que es efecto visible de una causa difusa y anterior en el tiempo. Por 16 de Abril de 2016 - 00:00 HS Con frecuencia además el tema es ignorado o soslayado, e incluso manipulado, por prejuicios religiosos o conveniencias políticas. Este artículo pretende aclarar dudas ocultas o no confesadas.
Nuestros últimos dos Censos de Población (1992 y 2007) han tenido
subregistros exagerados por diversos motivos y a esta fecha no hay un dato oficial confiable del número real de habitantes que tenemos, mucho menos de su tasa real de crecimiento. Aproximaciones demográficas técnicamente elaboradas indican que tenemos ya casi 8.0 millones (M) de habitantes, fronteras adentro y 4.1 M ubicados en otros países. Los datos oficiales, nunca expresados formalmente, mencionan 6.6 M adentro y 3.3 M afuera. El próximo Censo de Población (quizás 2017), si es elaborado correctamente, definirá las cifras reales al menos fronteras adentro. INFORME METEOROLOGICO El centro de pronóstico meteorológico realiza el monitoreo y la vigilancia de las situaciones atmosféricas en todo el país y de las condiciones regionales en Centroamérica y el Caribe. Este pronóstico se efectúa mediante una red de estaciones meteorológicas ubicadas a nivel nacional y por imágenes de nubosidad vía satélite o lluvia por el radar. El pronóstico meteorológico tiene como propósito alertar por riesgos de lluvias fuertes, alta temperatura, temporales, vientos rafagosos, entre otros fenómenos naturales, así se facilita información oportuna a empresas, investigadores científicos, transporte, aeropuertos, y a la población en general, especialmente la de alto riesgo ambiental. Actualmente se cuenta con 120 estaciones pluviométricas, climatológicas, sinópticas convencionales y telemétricas. La información técnica que se obtiene sobre el clima respecto a la humedad, viento, precipitación, temperatura y presión del aire, entre otros, se envía a la oficina central del MARN en San Salvador y vía satélite al Centro Mundial de procesamiento de datos en Washington, de donde se retransmite por canales exclusivos hacia nuestro Servicio Meteorológico. También se dispone de sistemas especializados de monitoreo ambiental vía satélite, como el Sistema Meteorológico de Interpretación y Despliegue Avanzado de Imágenes (RAMSDIS), insumo importante para acompañar al pronóstico meteorológico rutinario, el pronóstico especial o emisión de alertas.