Las características de los sistemas sub-volcanicos (es decir, profundidades, tamaño de reservorio/s,

y procesos) fueron principalmente inferidos por la correlación de las texturas de los anfíboles y
resultados termobarometricos con las secuencias eruptivas. Las profundidades de cristalización de
los anfíboles son calculadas contabilizando pesos promedio específicos de 2.70 y 2.89 g/cm³ corteza
continental (Lucassen et al. 2001) y oceánica (Carlson y Raskin 1984), con la excepción de Mount St.
Helens (ver la siguiente sección). En todos los casos, estas profundidades representan la distancia
calculada desde la cumbre del cráter.

Mount St. Helena (Washington)

Mount St. Helens (MSH) es uno de los volcanes más estudiados en el mundoque, después de una
latencia de ~150 años, tuvo dos ciclos eruptivos principales (es decir, 1980-1986 y 2004-2006)
caracterizados por la emisión de productos daciticos ( por ejemplo, Rutherford y otros 1985,
Scandone y Malone 1985, Lees y Crosson 1989, Pallister y otros 1992, 2008, Rutherford y Hill 1993,
Heliker 1995, Blundy y otros 2006, 2008 y Mastin et al., 2008; Moran et al. 2008; Rutherford y Devine
2008; Scott et al., 2008; Thornber et al., 2008).

Moran et al. (2008) estudiaron la sismicidad cortical superficial de MSH que se produjo durante
1980-2006. Desde la cumbre del cráter, el sistema sub-volcánico MSH se puede dividir en una (a)
zona de terremoto frecuente (~ 0.0-3.9 km, debido al ascenso del magma y la formación de los
domos de dacitas), (b) período de reposo (~1987-2000) -zona sísmica activa (en lo sucesivo, zona
sísmica intermitente; ~3.9- 10.3 km) y (c) zona asísmica a profundidades C ≥ ~10.3 km (Fig. 6). Los
estudios petrológicos sugieren que, durante la quiescencia eruptiva, una zona cortical superficial
hecha de una buena mezcla de pasta cristalina de dacitas, se somete a inyecciones repetidas de
magmas a temperaturas más altas y a la asimilación de material de techo dacítico y roca gabbroica
circundante. Se cree que las erupciones se desencadenaron por un reabastecimiento adicional de
magma básica / intermedia y / o la ex solución del fluido y expansión en esta zona de reactivación
(recarga) (Pallister et al., 2008; Thornber et al., 2008).

La Figura 6 muestra pares de P-T para anfíboles de MSH seleccionados (es decir, Rutherford y Hill
1993, Heliker 1995; Rutherford y Devine 2008; Thornber y otros, 2008), calculados según las Ecs. 4
y 1 del presente trabajo, que se agrupan en función de su textura y fechas de erupción (es decir,
fenocristales en 2004-2006, 1980-1986 y depósitos del 18 de mayo de 1980, y anfíboles euhedral
de gabros incluidos en los depósitos de 1980-1986). Las profundidades informadas de la cumbre del
volcán se estimaron con la profundidad en función de la fórmula P (2b) de Blundy et al. (2008),
determinado para un edificio truncado de 2.55 km de altura (desde el nivel del mar).Las
temperaturas de los anfíboles abarcan un rango general de 792-1,010 ° C, lo que es consistente con
la termometría de óxido Fe-Ti (de 800 a [950 ° C; Pallister et al., 2008; Rutherford y Devine 2008). El
enfoque ocasional del magma a las condiciones de solidus, que se infiere que ocurre en el sistema
subvolcánico de MSH (por ejemplo, Pallister et al., 2008; Thornber et al., 2008), se confirma por la
presencia en 1980-1986 de varios anfíboles con bajas temperaturas de cristalización que trazan en
la zona rica en cristales, cerca del límite superior de anfíboles consistentes (Fig. 6). La profundidad
mínima de 3.6 ± 0.4 km indicada por los anfíboles se encuentra aproximadamente en la base de la
zona de terremoto frecuente. Los anfíboles euhedrales dentro de las inclusiones laminadas de
gabbronorita cristalizaron en la zona sísmica intermitente (* 6,4 y 8,5 km) a temperaturas de 822 y
879 ° C, mientras que un anfíbol pokilítico subeuhédral en una norita de olivino-hornblenda sugiere
una acumulación heredada de cristales en condiciones próximas a la temperatura límite de
estabilidad de anfíbol (1,010°C, 419 MPa). Un fenocristal zonificado sin colapso (breakdown) de la
dacita del 18 de mayo de 1980 (Rutherford y Hill 1993) indica un camino P-T en la curva desde la
zona asísmica al borde de la zona asísmica intermitente (16,2 × 10,1 km), lo que también sugiere
que durante la inactividad de 150 años la zona intermitente estaba libre de magma o en condiciones
casi sólidas. Sin embargo, las inclusiones fundidas en la dacita del 18 de mayo de 1980 indican una
presión tan baja como 150 MPa (Blundy et al., 2006). Por lo tanto, para evaluar completamente la
aplicabilidad de nuestro modelo, se necesita un mayor número de análisis de anfíboles para los
productos en erupción del 18 de mayo de 1980.

Los valores de fugacidad de oxígeno entre NNO - 0.4 y NNO? 2.0 indicado por los anfíboles están en
el rango obtenido por los pares de óxido de Fe-Ti (-0.7 \ DNNO \? 3; Pallister et al., 2008). Los P, T y
fO2 altamente variables son consistentes con el amplio intervalo de H2Omelt que se infiere que está
en equilibrio con anfíboles de MSH (es decir, 4.7-11.3% en peso). El anfíbol que indica el H2Omelt
más alto (es decir, 11.3 ± 1.7% en peso) se acerca al límite de anfíboles consistentes (Al # 0.20, 964?
C, 830 MPa) y muestra la mayor profundidad (30.8 ± 7.7 km). Estas condiciones físico-químicas no
están lejos de las de un experimento, que produjo anfíboles ligeramente inconsistentes (Al # 0.25,
960 MPa, 841? C, H2Omelt 10.3% en peso, NNO? 2.7; Prouteau y Scaillet 2003). Vale la pena señalar
que Gardner et al. (1995b) limitaron experimentalmente el contenido de agua en el fundido de los
productos de dacite MSH históricamente en erupción entre un 3,7 y un 6,5% en peso.
Soufriere Hills (West Indies)

Durante la crisis eruptiva de 1995-1996, la parte superior de la corteza debajo del volcán Soufriere
Hills experimentó dos cortes sísmicos, a * 3.4 y 6.0 km (Aspinal et al., 1998) que pueden remontarse
a los límites de un depósito de andesita, en el cual los principales procesos de mezcla de magma
normalmente ocurren antes de las erupciones más explosivas (p. ej., Murphy et al., 2000; Rutherford
y Devine, 2003; Buckley et al., 2006). Esto es consistente con los resultados recientes de Luckett et
al. (2007) quienes relacionaron los hipocentros de terremotos híbridos con la presencia de un
cuerpo de magma a una profundidad de 3-4 km y el estudio de Christensen et al. (2008) que indicó
un reflector sísmico a 5-6 km. Los experimentos de reflexión / refracción sísmica SEA-CALIPSO costa
adentro-costa afuera de Christensen et al. (2008) también indicó que el MOHO debajo de Soufriere
Hills está a una profundidad de aproximadamente 30 km (Fig. 6). (2008) también indicó que el
MOHO debajo de Soufriere Hills está a una profundidad de aproximadamente 30 km (Fig. 6). Los
pares de óxido Fe-Ti en los dos productos volcánicos y experimentales de Soufriere Hills sugieren
que durante la mezcla la temperatura aumenta de * 830 a 880 ° C a aproximadamente NNO? 1
(Devine et al., 1998), mientras que el raro ortopiroxeno homogéneo en la andesita y los
clinopiroxenos en el antiguo basalto de Soufriere Hills da temperaturas QUILF en el rango de 1.020-
1.080 ° C (Murphy et al., 1998).

En resumen, los productos bien mezclados de 1995-1996 están hechos de dos tipos de anfíboles
compositivos que se han denominado más o menos hornblenda (cristales altos de Si principalmente
encontrados en las andesitas) y pargasita (anfíboles bajos en Si en los enclaves máficos; Murphy et
al. 2000; Rutherford y Devine 2003; Buckley et al. 2006). Aunque estos anfíboles muestran
composiciones de magnesiohornblenda y tschermakit pargasita, para simplificar, preferimos
mantener los nombres dados por los autores anteriores. La Figura 6 informa las zonas magmáticas
inferidas de la termobarometría de anfíboles del presente trabajo para estos cristales. Los
fenocristales de Hornblende confirman la presencia de una cámara poco profunda a 3.1-5.2 km
(766-847? C) mientras que los pargásitos sugieren un depósito básico más profundo (es decir, 12.7-
23.5 km, 946-994? C) confinado a bastante más allá de la profundidad del MOHO .
Consistentemente, los hornblendes cristalizaron a valores relativos de fO2 más elevados (DNNO?
1.3 a? 2.0) y menor H2Omelt (5.5-6.2% en peso) que los cristales de pargasita más profundos
(DNNO? 0.4 a? 1.0, H2Omelt 8.4-10.7% en peso).
Redoubt (Alaska)

Durante la crisis eruptiva 1989-1990, bajas velocidades de onda P-S y ubicaciones de hipocentros de
terremotos en la corteza superior debajo del volcán Redoubt mostraron una zona magmática bien
definida (plexo de magma) a una profundidad entre 9.5 y 4.8 km desde el cráter de la cumbre,
caracterizada por una sección más alta (base a * 6.6 km) hecha de fracturas complejas y conductos
abortados, a lo largo de los cuales, el magma puede migrar y / o estancarse (Benz et al., 1996, Fig.
6). En este período, el volcán Redoubt entró en erupción con los productos andesita-dacita
deducidos como derivados de la mezcla de magma (por ejemplo, Nye et al., 1994; Swanson et al.,
1994). El producto inicial es una piedra pómez de dacita, que contiene principalmente anfíboles
bajos en Al2O3 (7-10% en peso) sin bordes de ruptura o delgados (Wolf y Eichelberger 1997). Por el
contrario, los magmas de andesita que entraron en erupción tienen anfíboles tanto de bajo como
de Al (Al2O3 13-16% en peso). Swanson et al. (1994) dividieron los anfíboles en fenocristales
alargados (tanto altos como bajos), y cristales poiquilíticos. Durante la extrusión, se depositaron dos
tipos de gabros cognado portadores de anfíboles, es decir, hornblenda-plagioclasa de grano medio
y cumulus-piroxeno-plagioclasa (Swanson et al., 1994).

Aunque solo hay disponibles algunas composiciones de anfíboles de la literatura, la geometría bien
establecida y la ubicación de este depósito magmático de la corteza superior, junto con estudios
precisos de composición y textura de los anfíboles del volcán Redoubt (es decir, Swanson et al.,
1994; Wolf y Eichelberger 1997), da una buena oportunidad para evaluar la precisión de nuestras
ecuaciones termobarométricas.

Los fenocristales bajos en Al, los anfíboles poiquilíticos y los cristales euédricos en un hornblenda-
piroxeno-plagioclasa gabro (4.1-9.9 km; 807.915? C), se correlacionan bien con todo el rango de
profundidad del plexo magmático (Fig. 6). Los fenocristales alargados de Al-Low de la dacite
temprana sugieren un régimen de flujo en la zona compleja de fractura y conducto entre 4,1 y 6,1
km. Aunque el magma andesítico en erupción temprana contiene principalmente anfíboles
pargasíticos (alto-Al), también muestra un grupo de magnesiohornblendes menos abundantes con
Al2O3 en el rango de 7-10% en peso (Wolf y Eichelberger 1997). Vale la pena señalar que los
anfíboles con composiciones de alúmina que se aproximan al 10% en peso, son consistentes con la
parte inferior de la cámara de magma poco profunda (es decir, plexo de magma). La hornblenda-
piroxeno-plagioclasa gabro debe representar parte de los conductos solidificados (4,4 km), mientras
que los dos anfíboles poiquilíticos (textualmente consistentes con regímenes de flujo bajo)
posiblemente cristalizan en la base del plexo magmático y en algún bolsillo de magma en la parte
más inferior o la zona compleja de fracturas y conductos. El magma básico en equilibrio con
fenocristales de alto Al, se originó a partir de profundidades de 23.5-29.3 km (1.005-1.014? C) y,
presumiblemente, llevó acumulados antiguos cumuladas de hornblenda-plagioclasa (13.0 km, 939?
C) a la cámara poco profunda y luego a la superficie.

Los pares de óxido Fe-Ti que indican temperaturas de 840-950 ° C a 1-2 unidades log sobre el buffer
NNO (Swanson et al., 1994; Browne y Gardner 2006) son consistentes con la temperatura y fO2 de
los anfíboles en el plexo magmático ( 807-914? C, DNNO? 1,0 a? 1.7, H2Omelt 5.3- 7.3% en peso).
Por el contrario, los anfíboles altos de Al parecen haber cristalizado a una menor fO2 (DNNO \ geq
0,2 a \ sim 0,7) y mayores contenidos de agua (9,4 - 10,4% en peso).
El Reventador (Ecuador)

Después de una latencia de 26 años el 3 de noviembre de 2002, el volcán El Reventador inició un

nuevo ciclo eruptivo (2002-presente) con una erupción climática, que duró * 24 hy produjo
depósitos piroclásticos con composiciones de andesita. La emisión de andesita híbrida andesita-
basáltica (que contiene abundantes acumulaciones de gabro) del cráter de la cumbre (Lava-1) y un
respiradero parasitario (Lava-2) comenzó el 6 y el 21 de noviembre, respectivamente (Hall et al.,
2004; Ridolfi et al. al. 2008; Samaniego et al. 2008). La fase eruptiva de 2002 a presente fue
anunciada el 6 de octubre por un terremoto volcánico-volcánico de magnitud 4,1 con un nivel
hipocenterat de 10.8 ± 2.3 km (epicentro 5 ± 1.2 km SO del cráter de la cima, Fig. 6) seguido por
nueve réplicas sísmicas (comunicación personal M. Segovia, Instituto Geofísico, Escuela Politécnica
Nacional, Quito, Ecuador).