Está en la página 1de 4

CASO NULE:

Una clara muestra de la corrupción que se vive en Colombia ha sido el llamado carrusel de
contratación en Bogotá, protagonizado por los hermanos Manuel y Miguel Nule Velilla y su primo
Guido Nule Mariño, el cual involucra congresistas, alcaldes, concejales y contratistas, además de
algunas personalidades como los hermanos Moreno (Samuel, exalcalde mayor de Bogotá e Iván
exsenador de la República), la exdirectora del IDU Liliana Pardo, el excontralor de Bogotá Miguel
Ángel Moralesrussi, el exsubdirector técnico del IDU Inocencio Meléndez, entre otros que fueron
parte de los hechos.

Son aproximadamente 16 los procesos por los que se les llama al Grupo Nule, entre ellos delitos
de peculado por apropiación, fraude procesal, cohecho, concierto para delinquir y falsedad en
documento privado.

Usaron anticipos para sobornos:

El informe 596826 del CTI, elaborado el 31 de marzo del 2011, señala que en un contrato ganado
por los Nule en unión con la firma Consco se registró un anticipo de 1.750 millones de pesos,
correspondiente al 30 por ciento del valor del negocio. Esa plata, dice la Fiscalía, no se usó en lo
que tenía que emplearse: las obras de la malla vial. Mauricio Galofre, socio de los Nule, aceptó en
un interrogatorio que el dinero fue utilizado "para el pago de comisiones".

El contrato 071 del 30 de diciembre de 2008, que se ganó la Unión temporal GTM por 87.000
millones de pesos, nunca tuvo control efectivo del IDU. La Fiscalía dice que la entidad alteró
información para favorecer a los Nule. El atraso de la obra en mayo del 2009 estaba en el 95,7 por
ciento. Pero dos meses después, en una nueva evaluación, ese indicador negativo había bajado al
19,5. Lo que pasó fue que se reprogramó la obra, para hacer creer que estaba avanzando.

Movían plata entre empresas:

Los Nule subcontrataban con empresas de su mismo grupo las obras adjudicadas por el IDU. Así
ejecutaron obras civiles, ellos mismos se suministraron materiales y hasta se alquilaron la
maquinaria para las obras. En un mismo contrato, a MNV le entraron 18.000 millones; a Gas
Kapital, 3.600 millones, y a Tecnociviles, otros 8.000 millones de pesos."Nosotros hacemos
subcontratos -reconoció Manuel Nule el 19 de diciembre del 2010- . Los dineros de los anticipos
no se van necesariamente a las obras". Habló de al menos 25.000 millones que se usaron así.

Documentos adulterados:

Los Nule se ganaron el contrato 137 del 2007 en el último mes de la alcaldía de Luis Eduardo
Garzón. Era el tramo más importante de TransMilenio por la calle 26, que quedó en su firma Unión
Temporal Transvial, por 315.000 millones de pesos. Según la Fiscalía, se adulteraron documentos
de al menos dos compañías. En otro contrato, Galofre reconoció que el uso de socios extranjeros
fue la puerta perfecta a la falsificación de certificados de experiencia y estados financieros. Y
aseguró que funcionarios del IDU lo sabían y nunca hicieron nada.

Contratista e interventor:

Mauricio Galofre, socio y familiar de los Nule, tuvo doble participación en uno de los dos contratos
adjudicados al Grupo el 26 de diciembre del 2008. Galofre figuraba como contratista en el
contrato 071 del 2008, adjudicado a los Nule, por 93.000 millones de pesos, para hacer
mantenimiento vial en las localidades de San Cristóbal, Santa Fe, La Candelaria y Rafael Uribe. Y a
la vez era representante legal de PRO-3, la interventoría que debía vigilar el buen desarrollo del
contrato, y a la que se le desembolsaron 8.000 millones de pesos el 30 de diciembre del 2008.

Miguel, Manuel y Guido Nule fueron sentenciados a 15 años de cárcel. Sin embargo, pagarán sólo
7 años y medio, pues aceptaron el cargo de peculado por apropiación y recibieron la rebaja de la
mitad de la pena.

Quedan pendientes cuatro delitos, que les darían 15 años más. Las multas ascienden a 40 mil
millones.

LAS 15 CONFESIONES DEL CARRUSEL DE LA CONTRATACIÓN:

Dinero.com revela las 15 confesiones más importantes que se han destapado en el proceso de
investigación del caso de corrupción que ha generado uno de los más grandes traumatismos en la
infraestructura de la capital:

•El Grupo Nule y el escándalo derivado del abandono de las obras y las denuncias de sobornos
expuso al Estado colombiano a la pérdida de cerca de US$806,9 millones como anticipo de
contratos.
•Según la firma contratista, recibió presiones y millonarias exigencias en dinero por parte de
congresistas y funcionarios de la Alcaldía de Bogotá para resultar favorecidos con los contratos de
obras públicas. En el escándalo estaban involucrados el excontrolador de Bogotá Miguel Angel
Moralesrussi, así como la exdirectora del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), Liliana Pardo.

•Miguel Nule, contratista, aseguró a finales de 2010 que tanto el entonces contralor Moralesrussi
como el senador Iván Moreno estaban exigiendo el 6% de comisiones sobre los contratos.

•El 7 de febrero de 2011, en la audiencia en la procuraduría donde se juzga a Moralesrussi y al


congresista Germán Olano, el jefe del Ministerio Público validó una grabación de una conversación
entre Miguel Nule y Germán Olano, donde se habla de supuestos pagos al contralor de Bogotá.

•En el juicio disciplinario contra los dos funcionarios declaró el ex representante de las empresas
del grupo Nule, Mauricio Galofre, quien reveló que oyó al abogado Álvaro Dávila hablar de
comisiones que serían repartidas al contralor, al alcalde Samuel Moreno y a su hermano Iván
Moreno.
•Los abogados de los hermanos Manuel y Miguel Nule Velilla y de su primo Guido Nule Mariño, el
5 de abril de 2011, dijeron que buscarían un preacuerdo para que los contratistas tuvieran una
rebaja en la condena contemplada por ley a cambio de su colaboración con la justicia.

•El ex alcalde de Bogotá, Luis Eduardo Garzón, fue vinculado por la Contraloría General de la
República a la investigación fiscal sobre la entrega de los contratos para desarrollar las obras del
TransMileno de la Calle 26 en Bogotá, que estuvieron a cargo del Grupo Nule, pero, en enero de
2011, “Garzón jamás me pidió plata. Nunca en las administraciones anteriores. En la de Peñalosa,
no; en la de Mockus, no; en la de Garzón, no. ¿Iván Moreno?, sí. Pedía el 6%. Ya lo dije y ya
entregué las facturas, las pruebas a la Fiscalía”, le dijo a Dinero.com Miguel Nule, uno de los socios
del controvertido Grupo Nule.

•En agosto de 2012 la Contraloría realizó una Auditoria Especial a algunos proyectos de
concesiones viales en los cuales las empresas del Grupo Nule eran controlantes y la firma
interventora. Los procesos de responsabilidad fiscal relacionados suman a la fecha presuntos
detrimentos patrimoniales por la suma de $211.419.574.511.

•Esta semana, Manuel Nule Velilla, perteneciente al Grupo Nule, dijo a la Fiscalía que en el
contrato 137, que establecía los términos y condiciones de la construcción de las obras de la calle
26 en febrero del 2010, fue cedido irregularmente al Grupo Empresarial Vías de Bogotá tras la
presión mediática del exalcalde Samuel Moreno Rojas, quien advirtió que se trataba de obras
atrasadas para inducir a las aseguradoras a solicitar o forzar la caducidad de los contratos.

•Nule Velilla dijo que la exfuncionaria Pardo Gaona permitió que la empresa que recibió la cesión
del contrato no pagara la amortización y se le condonó una deuda de $69.000 millones de las arcas
del Estado.

•También reveló que hubo una entrega de $7.500 millones en bienes y en efectivo, en comisiones
para el excongresista Germán Olano, el ex contralor distrital Miguel Ángel Moralesrussi, la
exdirectora del IDU Liliana Pardo Gaona, el ex asesor jurídico del IDU Inocencio Meléndez y el
contratista Julio Gómez.

•El excontratista Miguel Nule calificó como extorsiones las continuas peticiones que los hermanos
Iván y Samuel Moreno hacían a los favorecidos con la adjudicación de los contratos de la malla vial
de la capital del país.

•Miguel Nule dijo que Moralesrrusi pedía el 8% por los contratos 071 y 072 y sobre los mismos
debía entregar un porcentaje al excongresista Germán Olano, aunque no explicó cuánto.

•Según Nule, la campaña a la alcaldía de Samuel Moreno fue invadida por millonarios aportes para
mantener la cuota burocrática de Liliana Pardo en esa administración del Instituto de Desarrollo
Urbano (IDU), y así Julio Gómez podría manejar a su antojo esa entidad.
•Miguel Nule dijo que Samuel Moreno percibía entre el 6 y 8 por ciento de comisión mientras que
Moralesrrusi y Pardo exigían dinero por otros lados. Hasta los subcontratistas que tenían que
terminar o arrancar obras con el anticipo, debían entregar un porcentaje a los funcionarios “lo que
nos ponía a perder plata a todos”.

PECULADO POR APROPIACIÓN. El servidor público que se apropie en provecho suyo o de un


tercero de bienes del Estado o de empresas o instituciones en que éste.

CONCUSIÓN. El servidor público que abusando de su cargo o de sus funciones constriña o induzca
a alguien a dar o prometer al mismo servidor o a un tercero, dinero o cualquier otra utilidad
indebidos, o los solicite

COHECHO. Se trata de que el servidor público y el particular se encuentran en un mismo nivel, de


tal manera que el servidor público ya no está fijando sus condiciones, sino que éstas se negocian.

El servidor público que reciba para sí o para otro, dinero u otra utilidad, o acepte promesa
remuneratoria, directa o indirectamente, para retardar u omitir un acto propio de su cargo, o para
ejecutar uno contrario a sus deberes oficiales

CELEBRACIÓN INDEBIDA DE CONTRATOS. El servidor público que en ejercicio de sus funciones


intervenga en la tramitación, aprobación o celebración de un contrato con violación al régimen
legal o a lo dispuesto en normas constitucionales, sobre inhabilidades o incompatibilidades. se le
aplica también contratista, consorcio, uniones temporales, consultores, interventores, y asesores
externos que se consideran particulares que cumplen funciones públicas

CONCIERTO PARA DELINQUIR. Este delito se presenta cuando dos o más personas se reúnen
o conciertan para celebrar un convenio o un pacto que tiene como fin la organización de dichos
individuos en una sociedad con fines delictivos, sin que se especifique qué tipo de delitos se
cometerá, el momento y el lugar ni contra quién o qué se va a atentar, pero sí cuál va a ser su
actividad principal: delinquir.

FRAUDE PROCESAL Y FALSEDAD EN DOCUMENTO PRIVADO. La falsedad en documento privado


es una conducta tipificada como delictuosa en nuestro código penal colombiano, en su artículo
289, de la siguiente manera: “El que falsifique documento privado que pueda servir de prueba…”.
También en el mismo artículo, contempla la sanción a este tipo de conducta: “incurrirá, si lo usa,
en prisión de uno a seis años”. Nótese que la particularidad de este artículo, es que resulta
reprochable jurídicamente la falsedad en documento privado, cuando se hace el “uso” de acuerdo
con su naturaleza, de dicho documento. Por otro lado, el fraude procesal, está consagrado como
delito en el artículo 453 del mismo código, que establece: “el que por cualquier medio fraudulento
induzca en error a un servidor público para obtener sentencia, resolución o acto administrativo
contrario a la ley, incurrirá en prisión de seis a doce años, multa de doscientos a mil salarios
mínimos legales mensuales vigentes e inhabilitación para el ejercicio de derecho y funciones
públicas de cinco a ocho años.”

También podría gustarte