Está en la página 1de 4

TECNOLÓGICO NACIONAL DE MÉXICO

INSTITUTO TECNOLÓGICO DE CERRO AZUL


(I.T.C.A.)

MATERIA:
FUNDAMENTOS DE LA MECANICA DE LOS MEDIOS CONTINUOS
CATEDRÁTICO:
ING. JOSE ANTONIO TREJO CASTELLANOS

ALUMNO:
HECTOR HUGO DEL ANGEL LUGO

N° DE CONTROL: 17500064

ESPECIALIDAD:
CIVIL

CERRO AZUL. VER.


Las raíces de un polinomio son números tales que hacen que un polinomio valga
cero. Podemos decir también que las raíces enteras de un polinomio de coeficientes
enteros serán divisores del término independiente. Cuando resolvemos un
polinomio igualandolo a cero obtenemos como soluciones las raíces del polinomio.
Como propiedades de las raíces y factores de los polinomios podemos decir que los
ceros o raíces de un polinomio son por los divisores del término independiente
pertenecientes al polinomio. Entonces a cada raíz por ejemplo del tipo x = a le
correspondería un binomio del tipo (x-a). Se puede expresar un polinomio en
factores si lo escribimos como producto de todos los binomios que tengamos del
tipo (x-a) que sean correspondientes a las raíces, x=a, que obtengamos. Aquí les
dejo un ejemplo:

Debemos tener en cuenta que la suma de los exponentes de los binomios es igual
al grado del polinomio, también tengamos en cuenta que todo polinomio que no
tenga término independiente admitirá como raíz x=0, en otra forma, admitirá como
factor x. Por ejemplo:

Llamaremos “primo” o “Irreducible” a un polinomio cuando no hay posibilidad de


descomponerlo en factores. Observemos el siguiente ejemplo:

A continuación, les dejaré un sencillo ejercicio con su resolución :


Para adentrarnos más en el tema es necesario tener claro el teorema fundamental
del álgebra, el cual fundamenta que un polinomio en una variable no constante y
de coeficientes complejos, tiene tantas raíces como su grado, ya que las raíces se
cuentan con sus multiplicidades. Se está afirmando con esto que cualquier ecuación
algebraica de grado n posee puntualmente n soluciones complejas. Un polinomio
de grado n tiene como máximo n raíces reales. Las raíces complejas de un
polinomio de coeficientes reales continuamente se presentan de a pares, un
polinomio de grado impar tiene mínimamente una raíz real. Hay que tener en cuenta
también que un polinomio puede no poseer raíces reales. Un polinomio que tenga
raíces reales y distintas es uno de los casos más simples que podemos encontrar.
Por ejemplo en el siguiente polinomio en que se puede corroborar que sus raíces
son, 3 ; 2 y -1.

En caso de que los coeficentes del polinomio sean complejos las raíces complejas
no estarán necesariamente relacionadas. Los polinomios pueden tener entonces
raíces complejas, y sus respectivas conjugadas. Por ejemplo un polinomio

: Tiene una raíz compleja y su correspondiente conjugada. Para calcular una


raíz compleja determinaremos su parte real, ya que la parte imaginaria, menor que
cero se obtiene a partir de su módulo y de su parte real.

Sabemos que un numero “a” por ejemplo, es raíz de un polinomio P(x) si P(a) =0.
Por el teorema del resto, si “a” es raíz del polinomio P(x) diremos que P(x) es
divisible por x – a, ya que el resto de dividir P(x) entre x-a es cero. Generalmente a
estos valores se los denomina x1, x2, x3, etc. Se aplica este teorema para verificar
cual de los valores da como resto cero. El método Ruffini nos sirve también para
hallar las raíces de un polinomio y así proceder a factorizar en binomios de la forma
(x – a) siendo “a” un número entero.

El método de Ruffini para polinomios nos permite dividir un polinomio de grado 2


o mayor con el fin de obtener uno de un grado menor, para seguir en la búsqueda
de las raíces que aún no se conozcan. Sirve mucho en el caso de polinomios de
tercer grado, ya que si logramos descifrar alguna de sus raíces podremos obtener
uno de grado 2 y finalmente mediante la fórmula de Bhaskara, averiguar las dos
raíces restantes.

La aplicación del método de Ruffini en polinomios consiste en utilizar la raíz que


conocemos del polinomio para dividirlo. En realidad, si sabemos que “-1” es raíz,
entonces el binomio “(x+1)” forma parte del producto de binomios que da como
resultado el polinomio, entonces lo que hacemos es dividir al mismo por ese
binomio.

La tabla de Ruffini (ver imagen) consiste en colocar la raíz en el costado y, en la


parte superior ir introduciendo los coeficientes grado a grado sin saltarse ninguno.
Por ejemplo, en caso de ser un polinomio grado 4 que no tenga término de grado 3,
en su lugar pondremos un 0.

El primer coeficiente se copia sin sufrir modificaciones en la parte inferior.


Luego multiplicamos éste por la raíz y el resultado se coloca en la columna
siguiente, en la línea del medio. Posteriormente, realizamos la resta entre los
términos de esa columna y obtendremos el resultado que se ubicará en la parte
inferior de la misma. Repetimos el procedimiento y, de haber hecho bien los
cálculos, en la última columna el resultado de la resta será 0.

Habrás obtenido entonces una serie de números en la parte inferior de cada


columna. Pues bien, son los coeficientes de tu nuevo polinomio ordenados de mayor
a menor. Ten en cuenta que el de mayor grado tendrá un grado menos que el
polinomio que dividiste.

También podría gustarte