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TEMA 8 PROCESOS PENALES ORDINARIOS ACTUALMENTE VIGENTES

Proceso para los delitos más graves (es el proceso ordinario en sentido estricto)

Introducción

Inicialmente era el proceso penal tipo, pero en la actualidad su aplicación es excepcional. Aun así, sigue siendo el
proceso penal que cuenta con una regulación más completa y detallada (arts. 259 a 749 LECRIM). Esta normativa es
aplicable supletoriamente en los restantes procesos, es decir, que las condiciones y modalidades de instrucción, así
como el desarrollo de los recursos regulados en este tipo de proceso es de aplicación a los procesos del resto de los
procesos.

El ámbito de aplicación de este proceso es: Delitos castigados con pena privativa de libertad superior a nueve años,
salvo que el delito no sea competencia del Tribunal del Jurado, tanto si se trata de pena única, como en el caso de que
la ley prevea también otra pena conjunta o alternativa.

En el mismo proceso podrán ser enjuiciados también los delitos –incluidos los leves- que tengan conexión con el delito
más grave, aunque se trate de delitos castigados con penas inferiores a la mencionada (la relación de delitos conexos
viene establecido en el art. 17 LECRIM: más adelante será analizado el tema de la conexión de delitos)

Fase de Instrucción

El conocimiento de la fase de instrucción corresponde al Juzgado de Instrucción o al Juzgado Central de Instrucción en


los casos que sea competente la Audiencia Nacional, mientras que el conocimiento de la fase intermedia en este
proceso corresponde al mismo tribunal que tenga competencia para conocer de la fase del juicio oral: salvo que haya
acusados aforados, ese tribunal es la Audiencia Provincial o, en determinados delitos, la Sala Penal de la Audiencia
Nacional.

En este proceso penal, la fase de instrucción recibe la denominación de “sumario1”, mientras que la imputación se
realiza mediante el denominado “auto de procesamiento”. En el procedimiento ordinario hay, por exigencia de ley, un
“auto de procesamiento” que puede producirse al comienzo, durante o al final de la instrucción y su objeto de imputar
formalmente a alguna persona, determinados hechos que se castigarán, si se acreditan con una pena de privación de
libertad de más de 9 años. Se indicarán en este auto los sujetos, los hechos que se les imputan, los indicios o razones
a partir de los cuales, el instructor, considera que se justifica la imputación formal de estas personas por estos
determinados hechos. La imputación, en el sentido formal, que delimita respecto a que personas y sobre qué hechos
se podrá enjuiciar en el futuro, junto a los demás requisitos, se produce en la fase de instrucción mediante el auto de
procesamiento.

El auto de procesamiento, por tanto, es una característica de la fase de instrucción del proceso por delitos graves que
no están en los demás tipos de procesos. Frente a este auto, cabe, recurso de apelación ante la sala de apelación del
TS, con el objeto de excluir a determinadas personas, determinados hechos o de cambiar la calificación o reducir o
excluir las medidas cautelares impuestas por el juez en el auto de procesamiento, sin que el recurso sea suspensivo
de aquello que se ha acordado. Las acusaciones pueden solicitar que se amplíen a más personas y más hechos, pero
no a través del recurso de apelación, sino ante el juez directamente.

Si, tras la instrucción, se determina que la pena privativa de es menor de 9 años, el juez instructor continuará esta
instrucción y se dará la conversión en un procedimiento abreviado.

En este proceso los escritos de acusación y defensa se denominan escritos de calificación provisional

Existe una diferencia, en cuanto a la fase de instrucción, entre el proceso abreviado y el proceso ordinario: En el
procedimiento ordinario, por exigencia legal, ha de haber un auto de procesamiento que ha de producirse en cualquier

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Técnicamente “sumario” lo es solamente la instrucción del proceso por delitos graves.
momento de esta fase, ya sea al principio, durante o al final. Pero el objeto de ese auto es el de imputar formalmente
a determinadas personas por determinados hechos que se castiguen con una pena superior a nueve años de privación
de libertad. Asimismo, se ha de razonar en dicho auto de procesamiento la posible tipificación de los hechos y los
indicios que en instrucción resulten de la comisión de los mismos2. El auto de procesamiento, por tanto, es una
característica del final de la instrucción del procedimiento ordinario y que no está en los demás.

Las acusaciones pueden solicitar a más personas y más hechos que se incluidos en el proceso, pero no mediante el
recurso de apelación, sino directamente ante el propio juez. En cualquier caso, si se confirma el auto, o no hay recurso,
existe otro auto, el cual es una resolución explícita y característica del sumario llamado “auto de conclusión del
sumario”. Este se da cuando el procesamiento es firme y, en principio, no parece que se pueda investigar nada más.
Una vez que se dicta este auto, comienza la fase intermedia.

Fase intermedia

Cuando el auto de procesamiento es firme y se da por finalizada la instrucción, se da el auto de conclusión del sumario.
Una vez que se dicta este auto de conclusión comienza la fase intermedia. La fase intermedia tiene como finalidad,
una vez que se constate que, en principio, la instrucción se ha completado y no aparecen causas evidentes de nulidad,
tiene la perspectiva de determinar ante que órgano judicial se va a abrir el juicio y en base, en concreto, a qué hechos,
es decir, preparar el juicio con los escritos de acusación y de defensa.

Después del auto, se remiten las actuaciones y se envía todo a la sala de enjuiciamiento y se emplaza a las partes para
que se personen en la sala en el plazo de 10 días. Cuando las partes se personan ante la Audiencia Provincial, es cuando
propiamente se inicia la fase intermedia. Se remiten las actuaciones al Magistrado Ponente, el cual toma conocimiento
de ellas. Las partes personadas pueden, en primer lugar, solicitar por parte o de oficio el sobreseimiento de las
actuaciones o la necesidad de que la instrucción se complete con nuevas diligencias, así como plantar artículos de
previo pronunciamiento.

La fase intermedia en el procedimiento por delitos graves se hace ante la Audiencia Provincial o la Sala de lo Penal de
la AN mientras que en el resto de los procedimientos se lleva a cabo ante el órgano de instrucción.

La fase intermedia puede finalizar con alguna de las siguientes 3 soluciones

• La revocación del sumario, con el objeto de practicar nuevas diligencias que alguna de las partes estime
necesaria para la adecuada preparación del juicio oral. Esto es, que se retrotraigan las actuaciones a la
instrucción, que se anule el auto de conclusión y que se lleven a cabo determinadas diligencias
complementarias para completar la instrucción.
• Sobreseimiento (remisión)
• Apertura de juicio oral, que podrá desembocar en: a. Sobreseimiento o b) Formalización por las partes de sus
escritos de calificación provisional

Hay un trámite específico en el periodo intermedio al objeto de si concurre el sobreseimiento. El sobreseimiento libre
es como una sentencia absolutoria y por lo tanto cabe los mismos tipos de recursos ante esta. En este caso, la AP ha
de ver si la decisión de concluir el sumario se ha adoptado correctamente o no. El Ministerio Fiscal y las acusaciones
pueden solicitar que se retrotraigan a la instrucción, es decir, que se anule el auto de conclusión, mandando a la Sala
que el instructor practique las diligencias indispensables.

Antes de presentar los escritos de calificación provisional, las partes pueden plantear artículos de previo
pronunciamiento: Cuestiones jurídicas que pueden impedir la válida prosecución del proceso, tales como la falta de

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Muchas veces hablamos de imputación de hechos. Se trata de atribuir un hecho delictivo en sentido material. Esto se lleva a
cabo desde que la policía detiene al sujeto, hasta que es llevado ante la autoridad judicial y el juez le atribuye determinados
hechos. En cuanto a la imputación formal, pero, que delimita lo sucesivo a que personas y que hechos se van a poder juzgar en un
futuro.
competencia del tribunal, la cosa juzgada, la prescripción del delito, la nulidad de actuaciones, violaciones de las
normas que establecen las garantías procesales que determinen la nulidad de parte o todas las actuaciones, etc.

Se da traslado a las partes del escrito de acusación donde se incluye la calificación de los hechos (indicación del delito
o delitos constitutivos de los hechos, grado de participación grado de consumación y circunstancias modificativas),
pena, responsabilidad civil, prueba que se propone para el juicio.

Juicio oral

El juicio oral comienza formalmente con el auto de apertura. Desde un punto de vista material, dicha fase tan sólo
sucede con la formalización de los escritos de calificación provisional, pues sin acusación no puede existir juicio y,
como se ha señalado, todavía puede truncarse la apertura del juicio oral, si prosperara un artículo de previo
pronunciamiento.

Así pues, el juicio oral se inicia con los escritos de acusación y defensa y finaliza mediante Sentencia, sin que el Tribunal
(la AP), a partir del trámite de calificación, pueda utilizar la fórmula de sobreseimiento.

Esta fase se divide en:

• Conformidad
• Actos previos
• Juicio
• Ejecución de la prueba
• Conclusiones definitivas
• Informes
• Última palabra
• Sentencia

Orden de las partes y su intervención:

Acusación pública particular y la defensa y luego el responsable civil. Después se examinan los testigos propuestos por
la acusación, luego a por los de las defensas. Pero siempre en cuanto al examen de cada clase de medio probatorio,
testigo, peritos siempre cuando dice por su orden lo que quiere decir es el fiscal, las acusaciones particulares y luego
la defensa. Y el orden de los informes y las conclusiones es el mismo también.

Reglas de valoración de la prueba:

Básicamente las mismas, pero con la presunción de inocencia y el principio “in dubio pro reo”. El grado de certeza que
se requiere en el proceso penal es muy superior al que se requiere para estima una demanda en el ámbito civil o
laboral.

Contra la sentencia que dicte la Audiencia Provincial o la Audiencia Nacional cabe recurso de casación ante la Sala de
lo Penal del Tribunal Supremo

Procedimiento abreviado (arts. 757-794 LECRIM)

Introducción

El ámbito de aplicación del procedimiento abreviado queda delimitado por la concurrencia de las dos siguientes
circunstancias:

a) Que se trate de delitos castigados con pena privativa de libertad no superior a nueve años, y/o cualquier otra
pena no privativa de libertad;
b) Que no resulte aplicable el juicio rápido (al estudiar el juicio rápido, se indicarán los requisitos necesarios para
la aplicación de este juicio)
Pero en el mismo procedimiento abreviado también podrán ser enjuiciadas los delitos leves que tengan conexión con
el delito o los delitos a los que se refiera el proceso

Además, el procedimiento abreviado funciona en la práctica como proceso penal tipo en un doble sentido:

a) Es el más utilizado;
b) En el caso de que existan dudas iniciales sobre la concreta naturaleza o la gravedad del hecho delictivo, se ha
de incoar un procedimiento abreviado

Fase de instrucción

La fase de instrucción del procedimiento abreviado recibe la denominación legal de “diligencias previas”, y es algo más
sencilla que la del proceso para delitos más graves (“sumario”).

En las diligencias previas se incrementa la actuación de la policía judicial, es decir, se le atribuyen funciones que en el
sumario corresponden exclusivamente al Juzgado de Instrucción. Ejemplo importante: mientras que en el sumario
el “ofrecimiento de acciones” lo ha de realizar el Juzgado de Instrucción (a través del secretario judicial), en las
diligencias previas debe efectuarlo la policía judicial, sin perjuicio de que, posteriormente, el Juzgado de Instrucción
(a través del secretario judicial) reitere ese ofrecimiento de acciones (el ofrecimiento de acciones consiste en informar
a las víctimas del delito del derecho que tienen a ejercitar las correspondientes acciones penales y civiles derivadas
del delito, personándose en el proceso, si lo desean, como partes acusadoras)

En el procedimiento abreviado no hay auto de procesamiento. Pero sí puede haber, como en cualquier proceso penal,
una resolución del Juez de Instrucción mediante la que se impute un delito a una persona determinada

En el curso de la instrucción pueden aparecer indicios de que se ha cometido un hecho delictivo más grave del que
inicialmente se suponía, y que esté castigado con privativa de libertad superior a nueve años. En este caso, el Juez de
Instrucción ha de decretar un cambio de procedimiento, continuándose la tramitación conforme a las normas propias
del proceso para delitos más graves. Pero el cambio de procedimiento no lleva consigo el cambio de Juez Instructor

Si durante la fase de instrucción del procedimiento abreviado el inculpado reconoce los hechos a presencia judicial
los hechos que se le imputan, y estos hechos están castigados con pena privativa de libertad no superior a tres
años, y/o con pena de multa, y/u otra pena de distinta naturaleza cuya duración no exceda de 10 años, el Juez
de Instrucción puede acordar un cambio de procedimiento, continuándose la tramitación conforme a las normas
previstas para el juicio rápido. Igualmente, si el Juez de Instrucción considera que los hechos son constitutivos de delito
leve, acordará la incoación de un juicio de esta clase

Fase intermedia

La fase de “preparación del juicio oral”, la cual también se desarrolla ante el Juez de Instrucción, a diferencia de lo que
sucede en el proceso común por delitos graves, que corresponde al órgano de enjuiciamiento (AP). Esta fase de
preparación del juicio oral, técnicamente conocida como “fase intermedia”, comienza desde el momento en el Juez
dicta el “Auto del Procedimiento Penal Abreviado” o resolución acordando seguir los trámites del procedimiento
abreviado y tiene por finalidad la de resolver, tras la tramitación pertinente, sobre la procedencia de abrir o no el juicio
oral y, en su caso, la fijación del procedimiento adecuado y del órgano competente para el posterior enjuiciamiento.

Dentro de esta fase quedan comprendidas las siguientes actuaciones:

a. Traslado de las diligencias previas, originales o mediante fotocopia, al Ministerio Fiscal y a las acusaciones
personadas, incluida la defensa
b. Petición de diligencias complementarias, quedando restringida dicha facultad a los supuestos de imposibilidad
de formular acusación por falta de elementos esenciales para la tipificación de los hechos, si bien, la práctica
de estas diligencias debe ser acordada necesariamente por el Juez cuando la solicitud provenga del Ministerio
Fiscal.
c. Solicitud de sobreseimiento, habiendo incorporado la posibilidad de que se concede al juez instructor de que
haga saber la petición de sobreseimiento al MF a los directamente ofendidos o perjudicados comparezcan a
defender su acción, si lo consideran oportuno
d. Petición de apertura del juicio oral, con la presentación del escrito de acusación
e. Escrito de defensa
f. Traslado de las actuaciones al órgano jurisdiccional encargado del enjuiciamiento.

En el procedimiento abreviado no hay, a diferencia del procedimiento ordinario, un auto de procesamiento que
constituya la imputación formal de determinados hechos a determinadas personas. Asimismo, tampoco hay un auto
de conclusión del sumario. Lo que sí que encontramos son resoluciones judiciales en las que se imputa formalmente
determinados hechos a determinadas personas. Esto es, que cumple la misma función que el auto de procesamiento
en el ordinario, así como un auto de apertura de juicio oral que, salvo nulidad de la instrucción, abre el juicio oral y
acaba la instrucción. Se llama comúnmente “auto de transformación” o de “apertura de procedimiento abreviad”.
Cabe contra este, recurso de reforma3 y posteriormente, recurso de apelación.

Una vez que el auto de transformación es firme, se da traslado a las partes al objeto de que formulen un escrito en el
que las partes acusadoras:

a. Soliciten el sobreseimiento si consideran que no hay razones para atribuir ese delito a la persona imputada o
que los hechos no constituyen una infracción penal
b. Excepcionalmente, solicitar las prácticas de diligencia que resulten indispensables para formular la acusación.
Esto es, de alguna forma, completar la instrucción.
c. Formular escrito de acusación.

El escrito de acusación (=conclusiones provisionales) ha de indicar:

Común a todos los procesos


• Solicitar la apertura de juicio oral por parte de la acusación
• Determinar ante qué órgano se ha de abrir el juicio oral
• Contra quien se dirigen las acusaciones
• Relatar los hechos
• Se califican los hechos (Grado de ejecución y circunstancias modificativas)
• En virtud de los hechos y la calificación se solicita la imposición de determinada pena
• Se proponen determinadas pruebas para que se practiquen en el juicio oral
• Se cuantifica la responsabilidad civil y se indica quién es el responsable si no son las partes acusadas
• Se solicita la adopción o mantenimiento de medidas cautelares

Una vez formulados los escritos de acusación, se le da traslado a las defensas, con el objeto de que formulen los
correspondientes escritos de defensa, pudiéndose estos limitar a negar los hechos simplemente. La ley establece que
si la defensa deja pasar el plazo que se le concede para formular el escrito de defensa, se sobrentiende que niega los
hechos. La defensa puede proponer pruebas tanto en el momento en el que se va iniciar el juicio oral, como mediante
cuestiones previas. El TS ha avalado que es perfectamente lícito y que el tribunal vulneraría el derecho a la defensa si
inadmitiese esa prueba que se propone al inicio del juicio oral, aunque no se haya propuesto en los escritos de defensa.

Una vez que se formulan los escritos de acusación, y con independencia de que se haya formulado escrito de defensa
o no, el juez de instrucción debe acordar la apertura del juicio oral ante el órgano que corresponda.

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Recurso no devolutivo que procede contra determinadas resoluciones dictadas por los Juzgados de Instrucción. Es el que
puede interponerse contra todos los autos del juez de instrucción, debiendo interponerse ante el mismo juez que hubiere
dictado el auto. Es juez competente para conocer del recurso de reforma el mismo ante quien se hubiere interpuesto. Dicho
recurso se formalizará siempre en escrito, autorizado con firma de letrado. El recurso de reforma es forzosamente previo al de
apelación. Pero pueden interponerse ambos recursos en un mismo escrito, en cuyo caso el de apelación se propondrá
subsidiariamente, por si fuere desestimado el de reforma.
Fase de Juicio Oral

En este proceso el conocimiento del juicio oral corresponde, según la gravedad de los hechos delictivos, a un órgano
unipersonal (normalmente, será el Juez de lo Penal o, en determinados delitos, Juez Central de lo Penal) o a un órgano
colegiado (que será, por regla general, la Audiencia Provincial, aunque, en determinados delitos, puede ser la
Audiencia Nacional). Si la pena más grave solicitada por las acusaciones es superior a los 5 años, el enjuiciamiento
corresponde a la Audiencia Provincia o la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional. Si no excede estos 5 años, el
enjuiciamiento corresponde al Juzgado de lo Penal o los Juzgados Centrales de lo Penal, si estamos ante delitos de la
Audiencia Nacional.

Por regla general, el juicio oral no se podrá celebrar si no está presente el acusado. Pero, mientras que en el proceso
ordinario esta regla general es absoluta, en el procedimiento abreviado admite una importante excepción: en este
procedimiento se podrá celebrar el juicio oral sin la presencia del acusado cuando, siendo injustificada la ausencia, la
pena solicitada por la acusación (o la más grave de las solicitadas) no exceda de 2 años de privación de libertad o, si
fuera de distinta naturaleza, no exceda de 6 años. Pero incluso en este caso es indispensable la presencia e
intervención del abogado del acusado, aunque se trate de un abogado designado de oficio.

El desarrollo del juicio oral se ajusta al esquema general ya estudiado, pero con algunas especialidades, como las
siguientes:

a) Al inicio del juicio oral, se abre un turno de intervenciones en el que las partes pueden denunciar las
infracciones procesales que se hayan cometido y pueden asimismo proponer pruebas complementarias a las
que habían solicitado en sus escritos de acusación y defensa. Las cuestiones previas, por tanto, se hacen al
inicio del juicio oral
b) El Juez de lo Penal puede dictar sentencia in voce en el acto del juicio, documentándose posteriormente

Fase de impugnaciones:

a) Contra la sentencia que dicte el Juez de lo Penal cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial (si la
sentencia la ha dicta- do el Juez Central de lo Penal, cabe recurso de apelación ante la Audiencia Nacional);
b) Contra la sentencia que dicte la Audiencia Provincial o la Audiencia Nacional cabe recurso de casación ante el
Tribunal Supremo

Juicio rápido (arts. 795-803 bis LECRIM)

Introducción

La aplicación del juicio rápido exige la concurrencia de las siguientes circunstancias

• Que se trate de delitos castigados con pena privativa no superior a cinco años, y/o cualesquiera otras penas cuya
duración no exceda de 10 años
• Que el procedimiento se haya incoado en virtud de un atestado policial
• Que la policía haya detenido a una o unas determinadas personas como posibles autoras del delito, o que, aun sin
haber detención, haya una o unas de- terminadas personas que figuren como denunciados en el atestado policial
• Que se trate de alguno de los siguientes delitos:
o Los previstos en el art. 173.2 CP (violencia doméstica);
o robo o hurto;
o delitos contra la seguridad del tráfico;
o daños;
o delitos contra la salud pública previstos en el art. 368 CP (tráfico de drogas);
o delitos flagrantes relativos a la propiedad industrial o intelectual;
o o cualquier otro hecho punible cuya instrucción resultará presumiblemente sencilla
• Que no exista conexión entre alguno de los delitos mencionados y otro delito no comprendido en ese listado
• Que el Juez de Instrucción no decrete el secreto de las actuaciones
En la práctica se ha impuesto totalmente la denominación de “juicio rápido”, aunque el nombre que utiliza la ley es
más amplio: “Procedimiento para el enjuiciamiento rápido de determinados delitos”

Fase de instrucción

La fase de instrucción del juicio rápido recibe la denominación de “diligencias urgentes”

La actuación de la policía judicial en las diligencias urgentes es más intensa que en las diligencias previas y, por
supuesto, que en el sumario:

• Se atribuye a la policía judicial una función novedosa en nuestro ordenamiento, que consiste en determinar,
inicialmente, si se cumplen todos los requisitos para seguir el juicio rápido o, por el contrario, se ha de seguir otro
tipo de proceso penal.
• Si la policía judicial considera que procede tramitar el juicio rápido, ha de citar a los inculpados que no estén
detenidos, a las víctimas y a los testigos para que comparezcan ante el Juzgado de Guardia en un día y hora
determinados. A estos efectos, la policía judicial ha de tener en cuenta la agenda de los Juzgados de Instrucción.
En lo que se refiere a los inculpados que estén detenidos, la policía judicial ha de ponerlos a disposición del Juzgado
de Guardia dentro del plazo legal ordinario.
• La policía judicial efectúa también el ofrecimiento de acciones a las víctimas del delito, sin perjuicio de que,
posteriormente, el Juzgado de Guardia deba reiterar ese ofrecimiento.
• Una vez la policía judicial concluya la investigación y efectúe las actuaciones mencionadas, ha de remitir al Juez de
Guardia el atestado, junto con los objetos y pruebas obtenidos, poniendo a disposición de dicho Juez al detenido,
si lo hay.
• A partir de este momento procesal, comienza a actuar el Juez de Guardia, que es la denominación que se da al
Juez de Instrucción al que, por turno, le corresponde estar en servicio de guardia un determinado día, debiendo
llevar a cabo las actuaciones correspondientes a los procesos penales que se inicien durante ese día.
• El Juez de Guardia debe completar la instrucción iniciada por la policía judicial.

Asimismo, el Juez de Guardia debe determinar si se cumplen los requisitos necesarios para aplicar el juicio rápido, o
si, por el contrario, se ha de seguir otro tipo de proceso penal, o se ha de decretar sobreseimiento libre o provisional

Al igual que en el procedimiento abreviado, en el juicio rápido no hay auto de procesamiento

Fase intermedia

En este proceso la tramitación de la fase intermedia corresponde al Juez de Guardia

El ordenamiento pretende que esta fase se desarrolle con mucha celeridad, permitiendo que las partes puedan
formular las acusaciones y las defensas por escrito y oralmente

Además, será el propio Juzgado de Guardia el que fijará el día y la hora para la celebración del juicio oral ante el Juez
de lo Penal. Para fijar el día y hora del juicio oral, el Juzgado de Guardia ha de tener en cuenta la agenda de
señalamientos del Juzgado de lo Penal. En el mismo acto el Juzgado de Guardia citará a las partes para que
comparezcan ante el Juez de lo Penal en la fecha y hora indicadas, a fin de celebrar el juicio oral. Si lo piden las partes,
el Juzgado de Guardia también citará para dicho juicio oral a los testigos y peritos que indiquen las partes. A
continuación, el Juzgado de Instrucción remite todas las actuaciones al Juzgado de lo Penal ante el que deba celebrarse
el juicio oral

Si el acusado presta su conformidad inmediata con la acusación o con la más grave de las acusaciones, y concurren
otros requisitos el Juez de Guardia debe dictar sentencia oralmente en el acto, rebajando al acusado un tercio de la
pena solicitada por la acusación o por la más grave de las acusaciones. Es la “conformidad premiada” o “conformidad
incentivada”. De esta manera se trata de simplificar y acelerar la tramitación del proceso. Una condición muy
importante para que se de la conformidad premiada es que el abogado defensor, esté conforme con la negociación,
que reconozca la culpabilidad y que se ratifique el acusado. Asimismo, se requiere que la conformidad sea con la más
grave de las acusaciones, y en caso de que hubiera varios acusados, todos han de conformarse, pues sino se ha de
celebrar el juicio.

En todos los supuestos de conformidad, el juez tiene la posibilidad y, además, la obligación de rechazarla, si considera
que los términos en los que se ha aceptado infringen el principio de legalidad.

La conformidad como forma de terminación del proceso penal es posible en cualquier procedimiento, salvo que
suponga asumir una pena privativa de libertad superior a 6 años. Teóricamente, fuera del juicio rápido, no se da la
conformidad premiada (1/3 menos pena). En los demás procedimientos, se aplicará la pena con la que se ha llegado a
conformidad entre las partes.

Si no se alcanza la conformidad y se solicita la apertura del juicio oral, la defensa puede formular el escrito de defensa
en las siguientes 48h, ya que sería el propio juzgado de guardia, al acabar la misma, generalmente, el que cita ya a las
partes y testigos para el juzgado que corresponda en determinada hora y fecha.

Principio de oportunidad → es una matización al principio de legalidad, en virtud del cual se justifica que dándose una
serie de circunstancias, las infracciones del derecho penal más leves que no supongan un ataque grave a determinados
bienes jurídicos junto a otras circunstancias, pueda abrirse un ámbito a la negociación.

4.9. El procedimiento por aceptación del Decreto del MF: art. 803 bis → no lo ha explicado, leer el artículo por si acaso

Juicio oral

En este proceso la competencia para conocer del juicio oral corresponde a los Juzgados de lo Penal (o, en determinados
delitos, al Juzgado Central de lo Penal)

Contra la sentencia que dicte el Juez de lo Penal cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial (si la sentencia
la ha dictado el Juez Central de lo Penal, cabe recurso de apelación ante la Audiencia Nacional)

Proceso ante el Tribunal del Jurado

Introducción

Está regulado en la Ley Orgánica del Tribunal del Jurado de 1995 (LOTJ) y es de aplicación para los siguientes casos:

El proceso ante el Tribunal del Jurado sólo es aplicable a los delitos indicados en el art. 1 de la LOTJ. El supuesto más
importante es el relativo a los delitos de homicidio, pero, respecto de estos delitos, la competencia del Jurado queda
limitada a los casos de homicidio doloso y consumado.

Artículo 1. Competencia del Tribunal del Jurado.

1. El Tribunal del Jurado, como institución 2. Dentro del ámbito de enjuiciamiento previsto en el apartado anterior, el
para la participación de los ciudadanos en la Tribunal del Jurado será competente para el conocimiento y fallo de las
Administración de Justicia, tendrá causas por los delitos tipificados en los siguientes preceptos del Código
competencia para el enjuiciamiento de los Penal:
delitos atribuidos a su conocimiento y fallo a) Artículos 405 a 410, ambos inclusive (homicidio e infanticidio).
por esta u otra Ley respecto de los contenidos b) Artículos 362 a 366, ambos inclusive (infidelidad en la custodia de presos
en las siguientes rúbricas: e infidelidad en la custodia de documentos).
a) Delitos contra la vida humana. c) Artículos 385 a 396, ambos inclusive (cohecho y malversación de caudales
b) Delitos cometidos por los funcionarios públicos).
públicos en el ejercicio de sus cargos. d) Artículos 400 a 404 bis c), ambos inclusive (fraudes y exacciones ilegales,
c) Delitos contra el honor. negociaciones prohibidas a funcionarios y tráfico de influencias).
d) Delitos de omisión del deber de socorro. e) Artículo 489 ter (omisión del deber de socorro).
e) Delitos contra la intimidad y el domicilio. f) Artículos 490 a 492 bis, ambos inclusive (allanamiento de morada).
f) Delitos contra la libertad. g) Artículo 493 (amenazas).
g) Delitos contra el medio ambiente. h) Artículos 553 bis a) a 553 bis c), ambos inclusive (delitos
medioambientales).
La competencia del Jurado también se extiende a algunos de los delitos que sean conexos con los previstos en el art.
1 de la LOTJ (no a todos los delitos conexos) (art. 5 LOTJ)

Art. 5 LOTJ: La competencia del Tribunal del Jurado se extenderá al enjuiciamiento de los delitos conexos, siempre que
la conexión tenga su origen en alguno de los siguientes supuestos:

a) Que dos o más personas reunidas cometan simultáneamente los distintos delitos;

b) que dos o más personas cometan más de un delito en distintos lugares o tiempos, si hubiere precedido concierto
para ello;

c) que alguno de los delitos se haya cometido para perpetrar otros, facilitar su ejecución o procurar su impunidad.

No obstante lo anterior, y sin perjuicio de lo previsto en el artículo 1 de la presente Ley, no podrá enjuiciarse por
conexidad el delito de prevaricación y aquellos delitos conexos cuyo enjuiciamiento pueda efectuarse por separado.

Asimismo, cuando un determinado hecho pueda constituir dos o más delitos, la competencia para su enjuiciamiento
corresponde al Tribunal del Jurado si alguno de esos delitos fuera de los previstos en el art. 1 de la LOTJ

La función del jurado es la determinación de los hechos que constituyen el veredicto. Esto es, la relación de hechos
sobre los que el jurado ha de pronunciarse sobre si los considera probados o no, es decir, si considera que esos hechos
van a someterse a juicio.

La idea sobre la que se basa este procedimiento es que el jurado es soberano absolutamente para pronunciarse sobre
determinados hechos, y a partir de ahí, el presidente hace una calificación de los mismos.

Fase de instrucción

En general, la fase de instrucción se ajusta al esquema previsto para el procedimiento abreviado, pero con algunas
especialidades:

• Una vez el Juez de Instrucción acuerde la incoación de este proceso, debe citar a las partes acusadoras y al acusado
a una comparecencia
• En esa comparecencia, las partes acusadoras podrán pedir el sobreseimiento o la continuación del proceso. En
este último caso, las partes acusadoras han de concretar los hechos que imputan al inculpado y deben indicar las
diligencias de instrucción que, a su juicio, deberían practicarse. El acusado puede oponerse a las peticiones de los
acusadores, y asimismo puede solicitar la práctica de diligencias de instrucción. El Juez de Instrucción decide si
procede acordar el sobreseimiento por no existir suficientes indicios de criminalidad contra una persona de-
terminada, o si, por el contrario, ha de continuar el procedimiento, decretando en este caso la práctica de las
diligencias de instrucción que considere procedentes

La idea del legislador es que la fase de instrucción de este proceso se limite a recoger los indicios y elementos
necesarios para la posterior calificación.

Fase intermedia

La fase intermedia de este proceso comprende los siguientes actos:

• Practicadas las diligencias de instrucción que el Juez hubiera acordado, las partes acusadoras han de presentar sus
respectivos escritos de calificación, en los que pueden solicitar la apertura de juicio oral o el sobreseimiento. Si
piden la apertura del juicio oral, en el mismo escrito han de concretar la acusación. Estas acusaciones han de ser
notificadas a los acusados, para que éstos puedan presentar sus respectivos escritos de calificación
• Una vez presentados los escritos mencionados, el Juzgado de Instrucción convoca a todas las partes a una
audiencia preliminar, en la que se discutirá si procede decretar el sobreseimiento o, por el contrario, se ha de abrir
el juicio oral. Para decidir sobre esta cuestión el Juez de Instrucción ha de tener en cuenta no sólo las pruebas y
datos obtenidos en la instrucción, sino también las pruebas que, a petición de las partes, se practiquen durante
esta audiencia preliminar
• Si el Juez de Instrucción entiende que procede acordar la apertura del juicio oral, pero que el hecho delictivo está
excluido de la competencia del Jurado, ha de acordar el correspondiente cambio de procedimiento, continuando
la tramitación de conformidad con las normas previstas para el proceso ordinario o para el procedimiento
abreviado, según la clase de delito de que se trate
• Si el Juez de Instrucción considera que procede abrir el juicio oral, y que el hecho delictivo es competencia del
Jurado, acordará la apertura de dicho juicio oral, concretando los hechos que podrán ser enjuiciados y las personas
que podrán ser juzgadas como acusadas o responsables civiles. Asimismo, citará a las partes para que comparezcan
ante la Audiencia Provincial, remitiendo a este tribunal todas las actuaciones y pruebas obtenidas

Fase de juicio oral

5.5. A continuación, se nombra, por turno de reparto, a un Magistrado de la Audiencia Provincial, que se encargará de
continuar tramitando el proceso

5.6. Las partes podrán plantearle a este Magistrado diversas cuestiones previas: a) obstáculos procesales que impidan
la continuación del proceso; b) vulneración de derechos fundamentales que se hayan podido producir; c) petición de
inadmisión de pruebas ilícitas propuestas por otra parte; d) ampliación del juicio a algún hecho que el Juez de
Instrucción haya excluido indebidamente; e) exclusión de algún hecho que el Juez de Instrucción haya incluido
indebidamente en el auto de apertura del juicio oral

5.7. Resueltas las cuestiones previas mencionadas, si el Magistrado entiende que se ha de continuar el proceso, dictará
el auto de hechos justiciables, en el que especificará, con la debida separación, los hechos y circunstancias sobre los
que ha de versar el juicio oral. En el mismo auto el Magistrado resolverá sobre la admisión de las pruebas propuestas
por las partes. Y señalará día y hora para la celebración del juicio oral ante el Tribunal del Jurado, que será presidido
por ese mismo Magistrado

5.8. Asimismo, se procederá a nombrar a los Jurados que van a formar el tribunal al que corresponderá conocer del
juicio oral

5.9. El Tribunal del Jurado se constituirá con 9 jurados titulares y 2 suplentes, siendo presidido por el Magistrado de la
Audiencia Provincial al que se ha hecho referencia (es el Magistrado-Presidente del Tribunal del Jurado)

5.10. El desarrollo del juicio oral se ajusta al esquema general, pero con algunas especialidades que serán estudiadas
en el tema dedicado específicamente al estudio del juicio oral

5.11. Concluida la vista del juicio oral, el Magistrado-Presidente somete al Jurado, por escrito, el objeto del veredicto,
en el que preguntará al Jurado qué hechos ale- gados por las partes considera probados y cuáles considera no
probados. El Magistrado-Presidente debe especificar, con la debida claridad y separación, cada uno de los hechos y
circunstancias alegados por las partes que somete al veredicto del Jurado. Como conclusión del escrito, el Magistrado-
Presidente preguntará al Jurado si considera que el acusado debe ser declarado culpable o no culpable del delito que
se le imputa

5.12. A continuación, el Jurado comenzará la deliberación, para llegar a un veredicto. La deliberación se efectúa en
secreto, a puerta cerrada y sin la presencia del Magistrado-Presidente

5.13. Para llegar a un veredicto de culpabilidad, son necesarios 7 votos. Para lograr un veredicto de no culpabilidad,
bastan 5 votos

5.14. Efectuada la votación, el Jurado consignará por escrito el veredicto en la correspondiente acta, pasando una
copia al Magistrado-Presidente. Si éste observa alguna irregularidad grave (omisiones, contradicciones o falta de la
mayoría de los votos necesaria), devuelve el acta al Jurado, para que subsanen esas infracciones. Si, después de 3
devoluciones, no se han subsanado los defectos, el Magistrado disuelve el Jurado, y convoca nuevo juicio oral con otro
Jurado. Si tampoco en este nuevo juicio oral se pudiera obtener un veredicto, se dicta sentencia absolutoria
5.15. Obtenido el veredicto, el Magistrado-Presidente pasa a redactar la sentencia, en la que incluirá literalmente el
contenido del veredicto. Por tanto, si el veredicto es de no culpabilidad, absolverá al acusado. Si es de culpabilidad, el
Magistrado calificará jurídicamente los hechos e impondrá la pena que corresponda.

5.16. Contra la sentencia dictada por el Magistrado de la Audiencia Provincial, ca- be recurso de apelación ante el
Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Autónoma. Este Tribunal podrá revocar la sentencia si considera que el
Magistrado ha incurrido en error en la calificación jurídica de los hechos o en la determinación de la pena. Y también
podrá declarar la nulidad de actuaciones, mandando repetir el juicio oral si aprecia la existencia de alguna infracción
procesal grave. Pero dicho Tribunal no podrá, en ningún caso, sustituir la declaración de hechos probados efectuada
por el Jurado por una declaración de hechos probados distinta

5.17. Contra la sentencia que dicte el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Autónoma, cabe recurso de
casación ante el Tribunal Supremo. Al resolver el recurso de casación, el Tribunal Supremo está sujeto a las mismas
limitaciones que se han indicado respecto del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Autónoma.

Especialidades en el procedimiento:

• La vista comienza con las alegaciones previas en la que cada parte se dirige al jurado al objeto de “presentar
el caso”.
• La ley cuida mucho de que no se de lectura a las declaraciones de los testigos que declaran en el juicio. Si hay
contradicción con lo que han dicho en instrucción y lo que dicen en el juicio, se les puede interrogar, pero los
miembros del jurado no deben acceder a las declaraciones que han hecho.
• Alguna vez se solicita que se exhiba, que el jurado visite determinado lugar, y si el presidente del tribunal lo
considera oportuno, se desplaza a verlo.

Posibilidad de terminación del proceso:

1. Conformidad
2. A la vista de la prueba practicada se retiran las acusaciones.
3. Art. 49 LOTJ: Disolución anticipada del Jurado (especialidad del Tribunal del Jurado)
• Una vez concluidos los informes de la acusación, la defensa puede solicitar del Magistrado-presidente, o
éste decidir de oficio, la disolución del Jurado si estima que del juicio no resulta la existencia de prueba de
cargo que pueda fundar una condena del acusado.
• Si la inexistencia de prueba de cargo sólo afecta a algunos hechos o acusados, el Magistrado-presidente
podrá decidir que no ha lugar a emitir veredicto en relación con los mismos.
• En tales supuestos se dictará, dentro de tercero día, sentencia absolutoria motivada.

Una vez que se abra el juicio, en los demás casos, el tribunal ya no puede dictar la disolución del jurado.

Juicio por delitos leves (arts. 962-977 LECRIM)

Introducción

Es el proceso previsto para algunas de las antiguas faltas (las que no han sido despenalizadas) y algunas modalidades
atenuadas de los delitos menos graves: art. 13 y 33.4 CP. Los delitos menos graves que suponen pena privativa de
libertad de pocos meses, además de ser multas normalmente, y que generan antecedentes penales, pero que se
cancelan en el plazo de 6 meses.

En este proceso la intervención de abogado y procurador es facultativa, a diferencia de los restantes procesos penales,
en los que dicha intervención resulta necesaria

A diferencia de lo que ocurre en los restantes procesos, en el juicio por delitos leves no se pueden adoptar medidas
cautelares personales ni patrimoniales, con una sola excepción: cabe la detención del presunto autor del delito leve si
no consta que tenga un domicilio conocido y no da fianza suficiente para asegurar que estará a disposición judicial
cuando vaya a ser juzgado
Fase de instrucción

En este proceso la fase de instrucción es extremadamente sencilla, por regla general:

• Si es la policía judicial la que tiene conocimiento de la comisión del delito, y se trata de lesiones, malos tratos,
violencia doméstica o hurto flagrante, la propia policía realiza las siguientes actuaciones:
o Ofrecimiento de acciones a las víctimas;
o Información sucinta y por escrito al inculpado acerca de los hechos que se le imputan;
o Citación al denunciante, al denunciado, a los testigos y a las víctimas, para que comparezcan en una fecha
y hora determinadas ante el Juez de Guardia, al que la policía remitirá el expediente. A estos efectos, la
policía judicial tendrá en cuenta la agenda de los Juzgados de Instrucción. Al efectuar la correspondiente
citación, la policía debe advertir al denunciante, la denunciado y a las víctimas que tienen derecho a ser
asistidos por abogado en el juicio oral y que deben asistir a dicho juicio con las pruebas de que intenten
valerse. También deberá citarse al Ministerio Fiscal, salvo que se trate de un delito leve sólo perseguible
a instancia de parte
• Si la policía judicial tiene conocimiento de la comisión del delito leve distinto a los mencionados anteriormente su
actuación es aún más sencilla que en el supuesto precedente:
o Ofrecimiento de acciones a las víctimas;
o Identificación del autor del delito;
o Remisión del atestado y, en su caso, de la denuncia al Juzgado de Guardia
• Si es el Juzgado de Guardia el que tiene conocimiento directo de la comisión del delito leve, dicho Juzgado se
limitará a incoar el procedimiento, pasando de inmediato a la fase intermedia

Fase intermedia

En el supuesto de que sea la policía judicial la que tiene conocimiento de la comisión de un delito, y se trata de lesiones,
malos tratos, violencia doméstica o hurto flagrante, una vez llegue el atestado al Juzgado de Guardia, éste acordará la
inmediata celebración de juicio oral en los dos casos siguientes:

a) si han comparecido todas las personas citadas;


b) cuando no han comparecido todos los citados, pero el Juez de Guardia considere que no es necesaria la presencia
de las personas que no hayan comparecido.
c) En los demás casos, el Juzgado de Guardia señalará día y hora para la celebración del juicio oral, con citación del
denunciante, imputado, testigos, víctimas y, en su caso, Ministerio Fiscal

En los otros dos supuestos, el Juez de Guardia acordará también la inmediata celebración del juicio oral si resulta
posible citar, durante el tiempo que dure el servicio de guardia, a todas las personas que deban ser convocadas al
juicio oral. En los demás casos, el Juzgado de Guardia señalará día y hora para la celebración del juicio oral, con citación
del denunciante, imputado, testigos, víctimas y, en su caso, Ministerio Fiscal

Pero una novedad muy importante es que si se trata de delitos leves públicos y el MF considera que el hecho es de
muy escasa gravedad a la vista de su naturaleza y las circunstancias del autor y no existe un interés público en la
persecución del delito, puede solicitar el sobreseimiento. La Circular FGE 1/2015

Juicio oral

Se sigue el esquema general, pero con algunas especialidades:

• Por regla general, el juicio oral se puede celebrar, aunque el imputado no comparezca, salvo que el Juez considere
que es necesaria la declaración del mismo
• No requiere intervención alguna ni de abogado ni procurador
• Si el imputado reside fuera del lugar del juicio, puede dirigir un escrito al Juzgado formulando las alegaciones que
considere oportunas, o puede apoderar a un abogado o procurador para que actúe en el juicio en su nombre
• Si no se ha formulado acusación, la denuncia tiene valor de acusación y al inicio del juicio, se informa de la denuncia
al denunciado al objeto de que tenga constancia de los hechos de los que se le acusa
• Aunque el Fiscal no acuda al juicio oral, éste se puede celebrar, si comparece el denunciante o querellante y ratifica
los hechos afirmados en su denuncia o querella. En este caso, la declaración del denunciante en el juicio afirmando
los hechos denunciados tiene el valor de acusación
• El Ministerios Fiscal puede, en caso de delitos leves, pero delitos públicos, solicitar el archivo si no ha habido ni
lesiones ni daños significativos. Es otra excepción al principio de legalidad, porque estaríamos ante un delito
público que se debe juzgar, pero se hace una nueva concesión al principio de oportunidad.

Contra la sentencia recaída en el juicio por delitos leves cabe interponer recurso de apelación. Esta sentencia puede
condenar también a los responsables civiles si han sido citados al juicio

Particularidades de este procedimiento:

• No requiere intervención de abogado ni procurador.


• En principio, puede celebrarse el juicio, aunque no se persone en él el denunciado, salvo que el juez considere
necesario oírle
• Si no se ha formulado acusación, la denuncia tiene valor de acusación. Al inicio del juicio se informa de la denuncia
al denunciado o denunciados al objeto de, tanto si se conforma como si no, se tenga constancia de los hechos de
los que se le acusa
• El fiscal, cuando no haya denunciante, puede, en el supuesto de delitos públicos, que no hayan causado daños
significativos ni lesiones, puede solicitar el archivo.

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