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MARTÍN PINEDO AUBIÁN - Casos Prácticos

Caso Práctico 5 – ¡¡¡Págueme Compadrito!!!

Cristian Baca y Carlos Alberto Cordero son amigos desde hace más de 15 años. Ellos se
conocen desde que eran estudiantes de Ingeniería en la Universidad y Cristian es
padrino de Hércules, el hijo mayor de Carlos Alberto y que tiene 8 años.

Carlos Alberto no ha tenido mucha suerte en el ejercicio de su profesión, ya que se casó

muy joven y tuvo que sacrificar cualquier mejora profesional –que implicaba ausentarse
por largos períodos de tiempo al interior del país- por el hecho de cuidar a sus tres
hijos, Hércules, Aquiles y Ulises, de 8, 6 y 3 años respectivamente, ya que su esposa
Florencia lo abandonó hace 2 años para irse con su amante. Aún así, Carlos Alberto ha
sido padre y madre para sus hijos, tratando de brindarles un ambiente adecuado para
su desarrollo dentro de sus posibilidades.

Cristian, por el contrario, ha sido quien más ha destacado entre sus colegas, llegando a
ser dueño de su propia empresa dedicada a la elaboración de proyectos de ingeniería a
nivel nacional. Soltero y sin hijos, siente un gran aprecio por su ahijado Hércules, a
quien trata de ver cada vez que su apretada agenda se lo permite.

Cierto día, Carlos Alberto visita a Cristian y le comunica que el pequeño Hércules se
encuentra enfermo de neumonía producto de un descuido y requiere de manera
urgente la suma de US$ 500.00 para cubrir el costo del tratamiento de emergencia.
Cristian, conmovido por la súplica de su compadre, procede a prestarle la suma
solicitada, con el compromiso de que sea devuelto en el plazo máximo de un mes,
siendo además que por el vínculo espiritual entre ellos no cree necesario suscribir
documento alguno que pruebe la existencia del préstamo.

Han pasado 3 meses y Carlos Alberto no da señales de vida, por lo que Cristian solicita
la conciliación para ver si es que puede recuperar la suma prestada.

© M. Pinedo A., 2001