Cipolla, C. (1991) Entre Historia y Economía. Barcelona: Crítica, pp.
15-34. El autor define a la historia y la economía como el estudio de los hechos y de las circunstancias económicas de la humanidad, a escala individual o colectiva, pertenecientes al pasado. También da a entender que el historiador no puede inventarse o hacer suposiciones de lo que escribe, por ello ante el desarrollo de determinada tesis el historiador debe seguir un proceso metodológico. A mediados del siglo XX la historia económica tuvo un boom, muchas de sus ramas de estudios se convirtieron en cursos concretos. Más que nada la historia económica se ocupa de hechos del pasado, es decir que no se pueden modificar ni anular, es decir este pasado se puede remontar desde unos pocos días atrás hasta miles de años. Se describe la diferencia que existe entre el historiador económico y el economista, expresando que esta diferencia se manifiesta principalmente en el tipo de variable que estudia cada uno y el tiempo al que se remite para hacer sus estudios, y la finalidad que buscan. La diferencia que existe en el tipo de variables que estudian cada uno (economista e historiador económico), el autor hace referencia principalmente a las variables endógenas y exógenas que consideran al momento de plantear el problema a solucionar. Pues bien, la diferencia que existe entre el tiempo al que se remiten (historiador y economista) para ser sus estudios, y la finalidad que buscan; se da, porque uno se encarga de estudiar el pasado, para describir los hechos que caracterizaron a esa época (historiador) y el otro, se encarga de estudiar el presente para determinar el futuro (economista). A mi parecer es completamente imposible escribir una acontecimiento tal y como paso, puesto que tiene una infinidad de detalles y es por eso que la historia es selecta. Es decir esto significa que es el historiador es quien decide cuales acontecimientos son de importancia para su investigación y cuáles no. Lo cual no implica que un acontecimiento carezca de valor historia, puesto que el dato que es inútil para una tesis puede ser el fundamento de otra. Así que la teoría es necesaria a la hora de construir la historia económica, la economía no solo es un conjunto de teoremas y postulados también es una forma de modelar el pensamiento, es por eso que la buena historia económica no rechaza los argumentos económicos si no que los acomoda a la época estudiada.