Está en la página 1de 6

QUÉ ES EL FACTOR BIÓTICO

Es el factor resultante de las


actividades de un ser vivo o de
cualquier componente vivo en un
entorno, tales como las acciones de
un organismo que afectan la vida de
otro organismo.

Los componentes bióticos son


todos los seres vivos de un
ecosistema. Son los animales, las
plantas y los microorganismos (Ejemplo bacterias). También se incluyen los residuos de los seres vivos
y organismos muertos, y las diversas formas en que afectan al crecimiento y desarrollo de las plantas.

La forma más simple de entender si algo es biótico es preguntarse… ¿Es un elemento viviente?
Directamente, si la respuesta es sí, entonces sabemos que es biótico (Todo lo relacionado con los
organismos vivos, como se caracterizan o cómo interactúan con otros organismos de una
misma especie o distinta) y no abiótico.

Por ejemplo, en el medio ambiente de una codorniz, son los elementos vivos que interactúan en ella de
una forma u otra, como las presas de la codorniz; insectos, semillas, etc. Y los depredadores de la
codorniz, como los coyotes.

Son los componentes vivos del medio ambiente que influyen en la manifestación del factor genético
sobre la expresión fenotípica. Los macroorganismos se refieren a los animales como los seres humanos
y otros mamíferos, aves, insectos, arácnidos,
moluscos y plantas, mientras que los
microorganismos incluyen hongos, bacterias, virus y
nematodos.

Cuáles son las clases de factores bióticos

Los elementos bióticos que incluyen flora y fauna


(Incluyen a todos los seres que tienen vida, ya sean
animales, plantas, bacterias etc). Esta distinción se
basa en sus necesidades nutricionales y del tipo de
alimentación.

Los distintos organismos vivos de un ecosistema


obtienen la materia y energía del medio de manera
muy variada (Recordemos que aquellos que lo hacen
de una misma forma se agrupan en lo que se
denominan niveles tróficos), se clasifican en tres
principales grupos:

Clases de factores bióticos


Recordemos que los seres vivos que hay en la tierra atendiendo a la forma de alimentarse se clasifican
en:

1.- Productores o autótrofos

Se definen como seres vivos que pueden


alimentarse a sí mismos. El ejemplo perfecto
son las plantas y sus flores o las algas. Por
supuesto, necesitan el ambiente que las rodea;
con la luz solar, el agua y los nutrientes, pero
posteriormente realizan su trabajo para crear
su propia comida a través de la fotosíntesis o
la quimiosíntesis y producen materia orgánica.

Los productores son extremadamente


importantes: sin ellos no podría existir vida
alguna. Las primeras formas de vida en la Tierra fueron productores. Cuando aparecieron, no había
otras formas de vida así que tuvieron que alimentarse por si mismo, aprovechando la energía
inorgánica para ser utilizada como alimento (Ejemplo; Las plantas se alimentan del sol). Se distinguen
dos tipos:

Plantas y bacterias

 Fototrofos. Son los organismos fotosinteticos, los que usan la luz solar (Las plantas) para
alimentarse.
 Quimiolitrofos. Para alimentarse usa la energía procedente de reacciones químicas
inorgánicas, inorgánicas y exotérmicas. Son las bacterias, viven en lugares raros como las
fuentes termales.
2.- Consumidores o heterótrofos

Son los que consumen el ecosistema forestal que los


rodea. Pueden ser omnívoros (Ejemplo el cerdo),
carnívoros (ejemplo el león) o herbívoros (Ejemplo el
ciervo), que dependen de lo que hay a su alrededor
para alimentarse. Se clasifican en:

 Herbívoros o consumidores primarios.


Incluyen desde el plancton hasta grandes herbívoros
como la jirafa o el elefante.
 Carnívoros o consumidores secundarios.
Son aquellos que se alimentan de animales herbívoros. Incluyen lobos, zorros, gatos, arañas,
coyotes, etc.
 Consumidores terciarios. Aquellos animales que se alimentan de carroña. Incluyen hienas,
zopilotes, buitres, etc.

3.- Descomponedores o detritívoros

Son los llamados descomponedores. Los que


comen los organismos muertos. Por ejemplo
serían los insectos y gusanos.

Los descomponedores incluyen bacterias del


suelo, hongos, lombrices, moscas y otros
organismos que descomponen materiales
muertos o productos de desecho de otras formas
de vida. Se diferencian de los consumidores, ya
que éstos suelen consumir otros organismos
mientras están vivos.

La anterior distribución, la podemos incorporar


dentro de los tipos de factores bióticos terrestres y acuáticos. Para diferenciarlos tenemos el siguiente
cuadro:
3. Ejemplos de factores bióticos

Los hongos e insectos reducen la materia


orgánica en descomposición.

Algunos ejemplos de factores bióticos pueden


ser:

 Los bosques. Grandes aglomeraciones


de árboles de buen tamaño, que sirven
de hábitat a muchos animales y
suministran materia orgánica constante
a los detritófagos del suelo.
 Los hongos e insectos. Dos de los
grandes tipos de descomponedores, que reducen la materia orgánica en descomposición (hojas
muertas, trozos de corteza, restos de animales muertos, mudas de piel, excrementos) y asimilan
todos los nutrientes presentes en ella, dejando el resto para nutrir de nuevo la tierra.
 Los grandes depredadores. Grandes felinos, serpientes, aves de rapiña: los grandes
consumidores de carne animal, que se alimentan exclusivamente de animales más pequeños.
Mantienen controladas las poblaciones y eventualmente mueren, sumándose a la materia
orgánica por reciclar.
 El fitoplancton. Presente únicamente en los entornos marinos, se trata de una variedad de
microorganismos fotosintéticos que sostienen toda la pirámide trófica marina, pues son alimento
para formas mayores de crustáceos (krill) e incluso de grandes animales como las ballenas.
 Los herbívoros de buen tamaño. Tales como bueyes, antílopes, ñus, elefantes, etc. Se
alimentan de toneladas de materia orgánica vegetal, que luego sirve de sustento a los grandes
depredadores y a los carroñeros que vendrán después.

FACTORES ABIÓTICOS

Los factores abióticos son todos aquellos elementos de naturaleza física o química que intervienen en
la caracterización de un biotopo o ecosistema determinado. Se distinguen de los factores bióticos
en que no tienen que ver con la vida o con los seres vivos, sino con factores inanimados y ambientales,
como pueden ser el clima o la naturaleza de los suelos.

El término abiótico, de hecho, se emplea en la biología y la ecología para designar a todo aquello que
no forme parte o sea producto de la vida orgánica tal y como la conocemos. Estos elementos
presentes en el medio ambiente se denominan también factores inertes, como el geológico o
geográfico.

Un ecosistema determinado se compone de la suma de estos dos tipos de factores: los bióticos
(contemplados en la biocenosis) y los abióticos (contemplados en el biotopo). Ambos tipos de factores,
no obstante, pueden diferenciarse con fines de estudio, pero poseen densas y variadas relaciones en
la realidad: los factores abióticos inciden sobre los bióticos y modelan el curso de su evolución (a
través de procesos de adaptación, por ejemplo, o de selección natural) y a su vez los factores bióticos
alteran la naturaleza de los primeros.
Por ejemplo: El nivel de salinidad de las aguas del mar
puede incidir sobre las criaturas que habitan en él,
permitiendo que aquellas capaces de adaptarse
proliferen y aquellas que no se extingan o migren a otras
regiones. Similarmente, la proliferación de ciertos tipos
de microorganismos puede aumentar o disminuir la
concentración de ciertas sustancias en las aguas,
modificando la constitución química de las mismas.

Puede servirte: Cambio Climático.

2. Factores abióticos físicos

La luz solar es la principal fuente natural de energía del


planeta.

Los factores abióticos de naturaleza física son aquellos


vinculados con las fuerzas que actúan sobre los
ecosistemas en la Tierra, por ejemplo:

 La luz solar. La principal fuente natural de energía


del planeta es la luz del sol, una forma de emisión
electromagnética de ondas lumínicas (visibles),
infrarrojas y ultravioleta (UV), que incida en la
temperatura de las grandes masas de agua, aire y
tierra, que se calientan y dilatan durante el día y
enfrían y contraen en la noche.
 La temperatura. Los niveles de temperatura de cualquier medio, sea acuático, gaseoso o
terrestre, inciden en el desarrollo posible de la vida y en el tipo de relaciones de un biotopo. Por
ejemplo, en las regiones árticas congeladas, la vida es más escasa y adaptada al frío, ya que
el agua se congela y forma grandes trozos de hielo o permafrost (suelo congelado) durante gran
parte del año.
 La presión atmosférica. La presión que ejerce la masa de gas de la atmósfera sobre los
distintos elementos de un ecosistema es también un factor determinante. Por ejemplo, la presión
que ejerce el agua sobre las criaturas que habitan los nichos marinos es inmensa, mucho mayor
a la que existe en la superficie.
 El clima. La región climática en que un ecosistema se ubique tiene mucha relevancia en los
procesos que ocurran dentro de él. Si la región es cálida y tropical, por ejemplo, habrá un
margen abundante de precipitaciones, por lo tanto mucha humedad y gran crecimiento vegetal.
En cambio, en las regiones desérticas escasea la vida vegetal, a pesar del agobiante calor.
 El relieve. Otro factor físico importante es el relieve de la región, ya que la altura incide tanto
en la temperatura como la presión atmosférica (a mayor altura menor presión y menor
temperatura).

3. Factores abióticos químicos


Los factores abióticos químicos, en cambio, tienen que ver con la constitución de la materia y las
distintas reacciones que tienen lugar con ella dentro de un ecosistema determinado, como pueden ser:

 pH. El pH es una propiedad química de los


medios, tales como el agua o el suelo, y que
apunta a su nivel de acidez o de alcalinidad, es
decir, a la cantidad de iones de hidrógeno
disueltos en ellos. Un medio muy ácido o muy
alcalino resulta corrosivo y contrario a la vida
orgánica.
 Química de los suelos. La cantidad y el tipo de
elementos químicos que predominen en un tipo
de suelo son determinantes a la hora de explicar
atributos como la fertilidad, la absorción del
agua, etc.
 Química del aire. La vida y la mayoría de los procesos bióticos tienen que ver con el intercambio
de gases: la respiración animal toma oxígeno y produce CO2, mientras que la fotosíntesis todo
lo contrario. Por ende, las características del aire pueden facilitar o impedir el desarrollo de un
ecosistema, o someterlo a condiciones de exigencia.
 Química del agua. Elementos como la salinidad, la concentración de los nutrientes o del
oxígeno, los eventuales contaminantes, etc. determinan la calidad del agua para albergar la vida
y por lo tanto el tipo de ecosistema que en ella tiene lugar.

También podría gustarte