SOLUCIONES LABORALES PARA EL

SECTOR PRIVADO

FUNDAMENTOS DE LA TUTELA
DE LA REMUNERACIÓN
Joel CÁCERES PAREDES(*)

Desde una perspectiva doctrinal, el presente informe hace una revisión de

EJECUTIVO
RESUMEN

los fundamentos de la protección del salario o remuneración, el cual tiene un

reconocimiento especial tanto a nivel constitucional como legal. Al respecto,
el autor destaca las distintas concepciones de la remuneración y luego deter-
mina los principales aspectos de su contenido.

Para lograr dicha finalidad, analizaremos pre-

Introducción
En el presente artículo ensayaremos cuáles son
las razones-fundamentos por los cuales el sala-
rio o remuneración posee una especial protec-
ción en el Ordenamiento Jurídico. A nuestro
parecer no basta señalar que ello es así porque
tiene la calidad de derecho fundamental reco-
nocido en la Constitución o en los Tratados In-
ternacionales de Derechos Humanos (lo cual a
nivel jurídico es una razón bastante atendible),
sino que trataremos de buscar el porqué debe
ser así: porque debe existir una especial cen-
tralidad en preocupación y protección del des-
embolso salarial a los trabajadores.
Ahora bien, la justificación de la protección de
la remuneración que realizaremos en el pre-
DOCTRINA LABORAL
viamente las formas de concepción o caracte-
res que posee la remuneración, atendiendo al
carácter complejo de una relación de trabajo,
para luego identificar los fundamentos de la
protección del salario ya determinado.
I. Formas de concepción de la
remuneración
Debido al carácter complejo de la relación de
trabajo(2), el resultado pecuniario de ella: el sa-
lario puede también ser entendido desde los
distintos puntos de vista de los sujetos que, de
alguna u otra forma, participan en la relación
laboral: trabajador, empleador y Estado. Así
pues, “el salario es para el empresario, el pre-

sente trabajo se circunscribirá esencialmente a cio del trabajo, y en justicia conmutativa no

la tutela que esta debe percibir en el momen- puede ser más que el equivalente del esfuerzo
to en que es pactada en un contrato de trabajo y del rendimiento. El salario es para el trabaja-
o aquella determinada mediante la autonomía dor un medio de vida, pero no solo medio de
colectiva o las normas estatales(1). vida escueto, de vida biológica, que cubra los

(*) Abogado por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Con estudios de Maestría de Derecho Constitucional y Dere-
chos Humanos en la misma casa de estudios. Miembro del Grupo de Estudios del Derecho del Trabajo y la Seguridad Social,
Luis Aparicio Valdez –GEDTSS–.
(1) No enfocaremos pues nuestro análisis a las otras funcionalidades de la temática salarial, tales como su relación con los nive-
les de pobreza o su carácter distribuidor.
(2) Las relaciones laborales alberga una entidad objetiva ciertamente compleja, en cuanto fenómeno social que implica intencio-
nes, expectativas, motivaciones, razones y creencias de cada uno de los actores, entre otra variedad de factores que entran en
juego (BILLAR DÍAZ, Pedro Fabián. Las relaciones laborales y el camino de la interdisciplinariedad. Fundación de Cultu-
ra Universitaria, Montevideo, 2009, pp. 20-23).

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SOLUCIONES LABORALES PARA EL SECTOR PRIVADO
costos de producción del trabajador,
de acuerdo con la vieja ley económi-
ca liberal, sino un medio de vida ca-
lificado, en cuanto que ha de cubrir
las necesidades de una vida libre, es
decir de una vida personal y familiar,
moral y digna”(3).
En tal sentido, de forma preliminar
señalamos que el salario puede ser
entendido como aquella retribución
que el empleador realiza al trabaja-
dor por el vínculo de subordinación
jurídica, de acuerdo a las reglas del
contrato de trabajo y que, además,
repercute en la satisfacción de las ne-
cesidades de índole material y espiri-
tual del trabajador y en los costos de
producción del empresario(4).
Si bien es cierto el salario puede con-
ceptualizarse y analizarse según las
teorías económicas, jurídico y de po-
lítica económica social, esto es, de
acuerdo con el enfoque multidiscipli-
nario que se puede adoptarse, encon-
tramos en su identificación diversos
rasgos que caracterizan la existencia
de un desembolso calificada como
remuneración.
Por ello, dentro de los caracteres
transversales que podemos encon-
trar en el estudio del salario, encon-
tramos los siguientes:
1. Carácter retributivo
El carácter retributivo del salario es
uno de los elementos más importan-
tes a tomar en cuenta a la hora de lo-
grar una aproximación de este con-
cepto. Etimológicamente la palabra
salario siempre ha estado vinculada
a alguna forma de retribución (el sa-
lario estaba preconcebido como el
pago en sal) y esta se presentaba,
efectivamente, como la contrapresta-
ción por el trabajo dado.
Se puede, sin embargo, realizar dife-
rentes matices en determinar qué es
lo que contrapresta el salario, pero
no puede dejarse de analizar a la
remuneración como retribución que
el acreedor del trabajo otorgar al deu-
dor de este. Como se ha señalado,
102 SOLUCIONES LABORALES Nº 84 / Diciembre 2014
“en un sentido amplio, remuneración personal, tanto la de carácter indivi-
es toda retribución o pago hecho por dual de cada trabajador, como la glo-
el empleador al trabajador en razón bal respecto a la mejora de los ingre-
de la prestación de sus servicios”(5). sos en su relación con el producto
bruto interno o de los niveles de sa-
El carácter retributivo está determi- tisfacción de los trabajadores.
nado por la propia proscripción del
trabajo gratuito establecida en el ar- 3. Carácter de costo de producción
tículo 23 de la Constitución Políti-
ca, cuando señala en su tercer párra- Adicionalmente al capital, el trabajo
fo que: “nadie está obligado a prestar (contraprestación del trabajo dado)
trabajo sin retribución o sin su libre desde el punto de vista del emplea-
consentimiento”. dor se presenta como eje fundamen-
tal a la hora de determinar los cos-
2. Carácter de sustento tos de la actividad empresarial. En
efecto, el salario también se conci-
La remuneración puede entender- be como “el coste más directo al que
se también como sustento personal hace frente el empresario como con-
del trabajador mediante el cual este traprestación al trabajo que recibe y
se beneficie materialmente de su per- que sirve, además como base para
cepción a través de su manutención y determinar otros costes adicionales,
la de su familia. como las cotizaciones a la seguridad
social”(7).
De ahí que desde la política social,
la remuneración, entendida desde el 4. Carácter de renta de trabajo
carácter de sustento, puede ser anali-
zada con relación a la disminución de Cuando decimos que la retribución
la capacidad adquisitiva de los traba- dada al trabajador tiene el carácter
jadores y, por ejemplo, la reducción de renta de trabajo, nos estamos re-
de los niveles de pobreza de la pobla- firiendo, en estricto, a la posibilidad
ción. En efecto, “desde una perspec- de gravar con tributo la renta genera-
tiva política-social el salario tiene el
da por los ingresos de trabajo perso-
carácter de sustento, no en el sentido nal y subordinado.
minimalista sino el de ser medio para
alcanzar una vida digna”(6). Nuestra normativa tributaria regu-
la las denominadas Rentas de Quin-
El salario es pues medio de bienes- ta Categoría, las cuales son definidas
tar material y espiritual del trabaja- como aquellas rentas que provienen
dor en cuanto ciudadano pleno, con- del trabajo prestación en relación
forme lo establece el artículo 24 de de dependencia, así como otras ren-
la Constitución. Por ello, uno de los tas de trabajo independiente expresa-
principales caracteres de la remune- mente enumeradas en la ley. En tal
ración, es la perspectiva de ingreso sentido, el impuesto a la renta de los
(3) BORRAJO SACRUZ, Efrén. “Configuración jurídica del salario”. En: RDP. N° 50, p. 9.
(4) Como señala Jean-Claude Javillier “el salario es bien lo entregado en contrapartida por el trabajo
prestado por el trabajador, bien lo que corresponde a una garantía de continuidad de las rentas de la
que debería beneficiarse todo ciudadano, ante la imposibilidad de trabajar” (JAVILLIER, Jean-Claude.
Derecho del Trabajo. Instituto de Estudios Laborales y de Seguridad Social, 1981, p. 363).
(5) SANGUINETI RAYMOND, Wilfredo. El contrato de Locación de Servicios frente al Derecho
Civil y al Derecho del Trabajo. Cultural Cuzco, 1988, p. 148.
(6) VIDA SORIA, J., MONEREO PÉREZ, J. L. y MOLINA NAVARRETE, C. Manual de Derecho del
Trabajo, citado por ARCE ORTIZ, Elmer. Derecho individual del trabajo en el Perú. Desafíos y De-
ficiencias. Palestra, Lima, 2008, p. 327.
(7) ALFONSO MELLADO, Carlos. “Salarios y Negociación Colectiva”. En: Estudios Sobre el Salario
(Coord.: Aparicio Tovar, Joaquin), Bomarzo, Albacete, 2004, p. 9.

trabajadores que prestan servicios en
el marco de un contrato de trabajo,
repercute en el ámbito de la recauda-
ción tributaria que, a su vez, influye
en el ámbito de la política fiscal.
5. Carácter de protección
Como ahondaremos más adelante,
las remuneraciones de los trabaja-
dores son objeto de protección. Por
ejemplo, se salvaguarda su reducción
(inmotivada), su depredación e inuti-
lización para el fin que cumple (me-
dio de satisfacción material de nece-
sidades), su imposibilidad de pago
cuando hay trabajo realizado pen-
diente de retribución.
Esta égida salarial, consideramos no-
sotros, se sustenta más por el estatus
del que la percibe: el trabajador de-
pendiente, por el propio hecho de la
funcionalidad que cumplen dentro de
la sociedad.
6. Carácter de igualdad salarial
Más que una característica propia e
intrínseca de las remuneraciones, la
percepción de un salario equitativo
se circunscribe dentro del denomi-
nado, principio de igualdad salarial:
igualdad a la hora de recibir y deter-
minar los salarios por igual trabajo o
por el trabajo de igual valor, salvo,
claro está, que exista una razón ob-
jetiva justificadora que permita hacer
la diferenciación salarial.
En efecto, como señala Krotoschin
sobre la igualdad de salarios, “la
fundamentación jurídica de la obli-
gación de igualdad de trato se en-
cuentra en principios generales de
igualdad, en el deber de previsión
del empleador o en una cláusula tá-
cita del contrato”(8).
II. Fundamentos de la tutela
del salario
La doctrina jurídica ha señalado di-
versas razones fundantes que justi-
fican la existencia de un manto de
DOCTRINA LABORAL
protección a la hora de alterar el con- ser el caso, para la de su familia. En
tenido del salario. Así pues, podemos tal sentido, deberá diferenciarse el
identificar a dos de ellas como las ra- carácter alimentario de la remunera-
zones neurálgicas que fundamentan ción de aquella cuota alimentaria que
la protección salarial, a saber: i) Su se debe a algunos parientes y que se
equiparación al carácter alimentario regula en el Derecho de Familia.
del salario, y ii) evitar o aminorar la
dependencia económica entre traba- Sin embargo, a decir de López Ba-
jadores y empleador. Vamos a anali- santa, “ello no quita que el salario
zar cada uno de dichos fundamentos. tenga en común con la ‘cuota ali-
mentaria’ una finalidad de subsis-
1. El carácter “alimentario” del tencia para quien recibe una u otra
salario prestación”(10). En efecto, en estricto
el salario no es cuota alimentario o
El carácter “alimentario” del salario de contenido netamente alimentario,
está predeterminado de acuerdo con sino que posee una característica es-
la especial función que este cumple: pecial de medio de subsistencia equi-
paliar las necesidades materiales del parable a los alimentos.
trabajador y, de ser el caso, de su fa-
miliar o, como señala nuestro Texto La consideración “alimentaria” del
Constitucional, procurar el bienes- salario recobra vital importancia en
tar material y espiritual del trabaja- el análisis laboral en tanto y cuanto
dor y de su familia. En efecto, como la población económicamente acti-
señala, Guillermo Cabanellas: “el sa- va de un país está constituida mayo-
lario convenido (…) está destinado ritariamente por trabajadores que se
a cubrir las necesidades primordia- valen de un salario (diario, mensual,
les del trabajador, ya que constitu- semanal) para la materialización de
ye el medio normal que tiene de sus- su proyecto de vida, la mejora en la
tentarse”(9), señalando asimismo que calidad de vida y progreso profesio-
“la naturaleza jurídica del salario es nal y material de su familia. En efec-
de carácter alimentario (…) los sala- to, “la temática salarial como fuen-
rios, especialmente cundo los servi- te de renta de la mayor parte de la
cios absorben toda la actividad del población es un elemento esencial en
trabajador, tiene un carácter alimen- la política económica general y por
tario indiscutible”. ello no puede quedar absolutamente
al margen de la intervención de los
Ahora bien, cuando se hace mención poderes públicos por la importancia
al carácter alimentario de la remune- social que tiene”(11).
ración, nos referimos a aquellos ca-
sos mayoritarios donde el trabajador Bajo parámetros que nuestra Cons-
destina el monto que recibe de remu- titución Política identifique a la re-
neración para su manutención y, de muneración en relación directa a su
(8) KROTOSCHIN, Ernesto. Tendencias actuales del Derecho del Trabajo, citado por NAJARRO
PONCE, Óscar. “Principios del Derecho del salario”. En: El salario. Estudios en Homenaje al Pro-
fesor Américo Plá Rodríguez, Amalio M. Fernández, Montevideo, 1987, p. 89.
(9) CABANELLAS, Guillermo. Contrato de Trabajo. OMEBA, Buenos Aires, 1964, p. 328.
(10) LÓPEZ BASANTA, Justo. “El salario”. En: De Buen, Néstor y Morgado, Emilio, (coords.). Insti-
tuciones del Derecho del trabajo y de la seguridad social. AISDTSS-UNAM, México D.F., 1997,
p. 447.
(11) ALFONSO MELLADO, Carlos. “Salario y Negociación Colectiva”. En: Estudios sobre el salario.
Edit. Bomarzo, 2004, p. 10.
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SOLUCIONES LABORALES PARA EL SECTOR PRIVADO
especialidad funcionalidad en nues-
tra sociedad: procurar el bienes-
tar material y espiritual de él y su
familia. Como señala Alonso Olea
interpretando el precepto consti-
tucional español –muy similar al
nuestro(12)– “La remuneración es la
que ciertamente se debe por el traba-
jo, pero no forzosamente por aquel
tipo de trabajo ejecutado por cuenta
de otro. Quien tiene la condición de
trabajador por cuenta propio, busca,
indudablemente, en el servicio que
desempeña, también una remunera-
ción. En ese sentido, el concepto se
extiende a otros campos que extrali-
mitan la pura y simple relación labo-
ral. Y este es, creemos, el significado
del artículo 35.1 de la Constitución
Española de 1978 cuando proclama
el derecho de todos los españoles (no
solo de los trabajadores por cuenta
ajena) ‘a una remuneración suficien-
te para satisfacer sus necesidades y
las de su familia, sin que en ningún
caso pueda hacerse discriminación
por razón de sexo’”(13).
De esta manera, el precepto consti-
tucional de la especial función de la
remuneración del trabajador (procu-
rar el bienestar material y espiritual
de él y su familia) no se agota en los
trabajadores en relación de depen-
dencia jurídica, sino que puede ex-
tenderse a los trabajadores autoem-
pleados o autónomos que no laboran
necesariamente bajo un vínculo de
naturaleza laboral, pues el carácter
alimentario es una cualidad o carac-
terística que se presenta también en
aquellos trabajadores que únicamen-
te ostentan su propia fuerza de traba-
jo y sus propios recursos para mate-
rializar su manutención diaria y la de
su familia. Como señala Arce Ortiz,
en los casos de trabajadores no de-
pendientes que venden el producto
final de su trabajo a una empresa, el
conflicto que se materializa es el de
naturaleza económica (más del deri-
vado de la ejecución personalísima),
es decir, el relativo al precio del pro-
ducto que determinará la ganancia
del trabajador “independiente”(14) y
con ello la procura de un ingreso que
104 SOLUCIONES LABORALES Nº 84 / Diciembre 2014
le permita un nivel de vida adecuado siempre mucho más que un ingreso
a sus intereses. ocasional, nos jugamos nuestro pro-
pio valor social y con él, el conjunto
Esto es particularmente importante de nuestras condiciones de vida”(15).
en el caso de las relaciones económi-
cas de nuestra realidad, por cuanto el He ahí la importancia del salario o,
número de trabajadores autónomos hablando en términos extensivos, del
es relevante: 35.1 % de trabajado- ingreso personal proveniente del tra-
res independientes. Por ello, consi- bajo: que ello determina nuestro pro-
deramos necesaria la relevancia de pio valor social, el de nuestra familia,
poder implementar medidas de me- el de nuestra posibilidad de desen-
canismos de protección salarial a los volvimiento, el de nuestra descen-
trabajadores autónomos, con mayor dencia, valor social que se determi-
precisión e importancia, a los que la- nará, hablando de la base material de
boran por cuenta ajena. las relaciones humanas, con la condi-
ción económica del trabajador en de-
Un rasgo neurálgico que se deprende terminado contexto social que desa-
del fundamento alimentario del sa- rrolla en el mercado de productos y,
lario es la determinación de este ha- además, con la valoración social del
cia el nivel de vida y de las condi- dinero que le da nuestra actual socie-
ciones económicas determinativas de dad capitalista(16).
las relaciones intersubjetivas del tra-
bajador. Así pues el trabajo desde un 2. Compensar la dependencia
punto de vista social debe enfocar- económica entre trabajador y
se como la representación de la rela- empleador
ción social que esconde: el trabajo no
como actividad, sino como relación Además del carácter alimentario que
social. Así pues, como señala Jorge posee el salario, existen otros funda-
García, en relación al valor social del mentos importantes por los cuales se
ingreso proveniente del trabajo: “con establecen algunas medidas legislati-
las oscilaciones de las relaciones de vas de protección de la remuneración.
proporcionalidad en los intercam- En efecto, el propósito general de di-
bios de las mercancías, con las osci- chas medidas es también el “de pro-
laciones de sus precios, nos jugamos teger al trabajador contra prácticas
(12) ALONSO OLEA, Manuel. “Salario y Régimen Retributivo en el Estatuto de los Trabajadores”.
Libro en Homenaje al maestro Mario de la Cueva. Instituto de Investigaciones Jurídicas, México
D. F., 1981, p. 246.
(13) La Constitución española de 1978 señala en su artículo 35.1 que: “Todos los españoles tienen el deber
de trabajar y el derecho al trabajo, a la libre elección de profesión u oficio, a la promoción a través
del trabajo y a una remuneración suficiente para satisfacer sus necesidades y las de su familia,
sin que en ningún caso pueda hacerse discriminación por razón de sexo” (el resaltado es nuestro).
(14) ARCE ORTIZ, Elmer. “El trabajador autónomo (De la dependencia jurídica a la dependencia econó-
mica)”. En: Laborem. N° 7, Lima, 2007, p. 94.
(15) GARCÍA, Jorge et ál. “Una introducción al trabajo como relación social”. En: Lo que el trabajo es-
conde. Materiales para un replanteamiento de los análisis sobre el trabajo. Traficantes de Sueños,
Madrid, 2005, p. 40.
En ese sentido, Viviana Zelizer señala como una de las características actuales de la diferenciación
social del dinero que: “El clásico inventario económico de las funciones y de los atributos del dine-
ro, basados en el presupuesto de que hay una sola clase de dinero para todo propósito, es inadecuado
y estrecho, Al centrarse de un modo exclusivo en el dinero como fenómeno de mercado, fracasa en
la captación del complejo espectro de características del dinero como un médium social. Se hace
necesaria una codificación diferente, más inclusiva, porque ciertos dineros pueden ser indivisibles
(o divisibles, pero no en proporciones matemáticamente previsibles), no fungibles, no transportables,
profundamente subjetivos y, por lo tanto, cualitativamente heterogéneo” (ZELIZER, Viviana A. El
significado social del dinero. Fondo de Cultura Económica, 2011, Buenos Aires, p. 35).
(16) VV.AA. Las normas internacionales de trabajo: un enfoque global, OIT, Suiza, 2002, p. 251. En:
<www.ilo.org/wcmsp5/groups/public/---ed_norm/---normes/documents/publication/wcms_087694.
pdf>.

que pudieran tender a hacerle dema-
siado dependiente de su empleador y
[por tal] garantizar que el trabajador
reciba a tiempo, y en su totalidad, el
sueldo que ha ganado”(17).
En efecto, la historia del Derecho del
Trabajo es la historia de los intentos
por compensar las desigualdades ge-
neradas por la existencia de la rela-
ción laboral, lo cual se encuentra de-
terminada por poder empresarial del
empleador que ejerce en el seno de
las relaciones de trabajo. El poder
empresarial, en tal sentido, es tam-
bién uno de contenido económico(18),
por cuanto es el empleador el propie-
tario de los medios de producción y
que, por tanto, las ganancias empre-
sariales le van a ser percibidas y abo-
nadas directamente.
No obstante ello, “no debe confun-
dirse esa debilidad económica con la
mera situación (jurídica) de subor-
dinación, que solo existe cuando se
constituye de esta, sino al revés. La
‘debilidad económica’, en la genera-
lidad de los casos, existe antes y des-
pués de la relación laboral con un de-
terminado empleador”(19).
De esta manera, podemos señalar
que el poder empresarial respecto al
pago de los salarios –y que garantiza
su protección– se materializa en las
siguientes situaciones: a) El emplea-
dor como único deudor del trabaja-
dor, b) la post numeratio, esto es, el
hecho de que el trabajador prime-
ro presta sus servicios y el emplea-
dor, con posterioridad a este, abona
la obligación salarial, c) la irrespon-
sabilidad del trabajador de las conse-
cuencias del fracaso empresarial.
a) El empleador como único deu-
dor del trabajador
Gran parte de tiempo disponible de
los trabajadores lo emplean en la
ejecución de servicios laborales, lo
cual, además de las significancia so-
cial de por sí que genera, implica que
en la mayoría de casos la única ac-
tividad económica de los trabaja-
dores dependientes de un país es la
DOCTRINA LABORAL
provenientes de sus servicios de na- b) La post numeratio
turaleza laboral.
La post numeratio consiste en el
Esto trae como correlato que la de- pago posterior al que tiene derecho
sigualdad de contenido económi- del trabajador luego de que presta
co entre el empresario y el trabaja- sus servicios o que cumple con po-
dor se manifieste en que mientras el nerlos a disposición. El empleador,
primero en sus operaciones comer- en ese sentido, primero se beneficia
ciales ostenta la calidad de acree- del servicio o, en todo caso, cumple
dor de varios agentes económicos, con la obligación de estar a disposi-
el segundo únicamente tiene un úni- ción del empleador (mediante la su-
co deudor: el propio empresario, el bordinación jurídica) y luego recién
cual depende esencialmente de él, de paga los salarios. Como señala Ló-
su bonanza y sostenibilidad econó- pez Justo, “el salario se paga después
mica para satisfacer su crédito labo- de cumplida la tarea o, al menos, de
ral. Como expresa Huerta Rodríguez, ofrecida la posibilidad de cumplirla,
“como consecuencia de esta vincula- salvo cuando se gana sin necesidad
ción obligacional (laboral), el traba- de trabajar (licencias pagas, suspen-
jador tiene un solo deudor por el tra- siones ‘injustificadas’)”(21).
bajo realizado a favor del empleador.
La característica de la post numeratio
En buena cuenta, como consecuencia se produce básicamente porque el
de la ejecución del contrato de traba- factor trabajo en una unidad econó-
jo, la disminución o detrimento de su mica debe primero generar la rique-
patrimonio se debe exclusivamente za, producir la renta empresarial (de
porque una sola persona, el emplea- la mano con los bienes de capital),
dor se beneficia de tal disminución para que esta, a través del pago los
patrimonial”(20). salarios deba ser distribuida entre los
factores intervinientes. Allí radica la
Entonces, que el empleador sea el esencialidad de la característica post
único deudor de las acreencias labo- numeratia(22) del salario, y es por ello
rales del trabajador tiene como efec- que la tutela salarial debe enfocar-
to principal la concentración y de- se también en la garantía de una me-
pendencia de parte del trabajador del jor rol distribuidor de las ganancias
éxito empresarial para que el pago de obtenidas.
los salarios no se encuentre en peli-
gro. Existe pues una manifestación Dos son los rasgos respecto al pago
de dependencia económica de los su- de salarios que manifiestan la debili-
jetos laborales en las relaciones sala- dad de contenido económico del tra-
riales que ambos asumen, la cual sir- bajador respecto al empleador y que
ve de fundamento para procurar la se desprenden de la característica de
garantía del salario en situaciones de la post numerario, a saber: la impo-
crisis empresarial. sibilidad de devolución del trabajo y
(17) PASCO COSMÓPOLIS, Mario. “La protección del salario”. En: El Salario. Estudios en Homenaje
al Profesor Américo Plá Rodriguez, Amalio M. Fernández, Montevideo, 1987, Tomo II, p. 12.
(18) LÓPEZ BASANTA, Justo. El salario. Buenos Aires, 1988, p. 277.
(19) HUERTA RODRÍGUEZ, Hugo. El privilegio del crédito laboral en el Perú. Montivensa, Lima,
2011, p. 33.
(20) LÓPEZ, Justo. Ob. cit. p. 293.
(21) Esta característica se relaciona directamente con el punto ulterior a este: la ajenidad en los riesgos o
fracasos empresariales del trabajador.
(22) BRONSTEIN, Arturo. “La protección de los créditos de los trabajadores en caso de insolvencia del
empleador. Examen comparativo”. En: El Salario. Tomo II, Estudios Homenaje al Profesor Américo
Plá Rodríguez, Ed. Amalio Fernández, Montevideo, 1987, p. 124.
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SOLUCIONES LABORALES PARA EL SECTOR PRIVADO
el estado de incertidumbre generado
por la entrega primera del trabajo y la
posterior obligatoriedad del emplea-
dor (la cual puede ser incumplida por
diversas razones).
En efecto, dado el carácter perso-
nalísimo de la prestación trabajo, el
mismo que no puede desprenderse ni
diferenciarse de la persona del traba-
jador, la devolución del esfuerzo fí-
sico desplegado durante un periodo
determinado convierte en irrealiza-
ble la devolución de trabajo dado,
de tal forma que el empleador no
tiene más que abonar la remunera-
ción correspondiente luego de ha-
berse efectuado la prestación laboral.
En este marco, la sujeción del traba-
jador respecto al pago de su salario
es clara, por cuanto únicamente tie-
ne que “esperar” y confiar en la via-
bilidad del negocio y de su buen de-
sempeño (desempeño mediante el
cual él es protagonista) para satis-
facer su acreencia laboral, dado que
“a diferencia de muchos acreedores
de deudas de dinero, por ejemplo los
bancos, los trabajadores no están en
condiciones de obtener garantías rea-
les del empleador”(23).
c) Ajenidad en los riesgos em-
presariales
Vásquez Vialard, luego de identifi-
car los elementos definitorios o pre-
supuestos de una relación laboral
subordinada (dentro de la cual se en-
cuentra la ajenidad), señala que el
trabajador: “durante un periodo de
tiempo, pone su capacidad de traba-
jo a disposición de otro (‘ajenidad’)
que tiene la facultad de dirigirlo den-
tro de los términos de lo pactado o
106 SOLUCIONES LABORALES Nº 84 / Diciembre 2014
de lo que corresponda según la ley, el fundamenta y prevalece a la hora de
convenio colectivo o costumbre, y lo identificar la dependencia económi-
‘utiliza en su provecho’. Como con- ca relativa a la forma de cómo se de-
secuencia de ello, el fruto que produ- sarrolla los servicios laborales y la
ce esa acción, ya sola, o bien junto que corresponde a las situaciones de
con la de otros, directamente o a tra- fracaso empresarial.
vés del empleo de maquinarias, per-
tenece al que la ha recibido y di- Como se ha señalado: “El trabajador
rigido. El trabajador, a cambio de queda exonerado del riesgo y de la
ella, percibe un importe en dinero, responsabilidad correspondiente al
“fijo” o en relación al éxito de la ta- mismo; ni la quiebra de la empresa
rea, etc.”(24). ni la insolvencia del acreedor de tra-
bajo deberían en principio afectarle.
La ajenidad como elemento de la re- Esta ajenidad al riesgo de la empresa
lación laboral puede materializarse es al propio tiempo una garantía con-
en dos aspectos: la ajenidad en los tra posibles perjuicios y una muestra
riesgos del negocio empresarial y la de las diferencias que existen entre el
ajenidad en los frutos del trabajo. En contrato de trabajo y el de la socie-
efecto, mediante esta ajenidad, “el dad”(26). Es por ello que la protección
trabajador no goza de los frutos de lo del salario cobra especial y más re-
producido (que quedan en poder del levante importancia en los supuestos
empleador), ni participa en la organi- de crisis de la empresa (reestructura-
zación del trabajo, ni tampoco asume ción o liquidación), dado que es en
los riesgos”(25). esta situación en que está más pro-
penso a no cumplir con su funciona-
En ese sentido, la ajenidad de los lidad: llegar al trabajador y procurar
riesgos de los resultados del negocio su finalidad de manutención.
(23) VÁZQUEZ VIALARD, Antonio. Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social. Tomo 1, 8ª ed.,
Atrea, Buenos Aires, 1999, p. 262.
(24) GRISOLIA, Julio A. Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social. Depalma, 2ª Ed., Buenos Aires,
1999, p. 33.
(25) CÓRDOVA, Efrén. “Naturaleza y elementos del contrato de trabajo”. En: De Buen, Néstor y Mor-
gado, Emilio, (coords.). Instituciones del Derecho del trabajo y de la seguridad social. AISDTSS-
UNAM, México D.F., 1997, p. 307.
(26) Como señala Rodríguez Piñero, Miguel. “Si no se regula el conflicto mediante un reconocimiento del
derecho de huelga, que permita conseguir una serie de objetivos sociales, económicos y políticos por
la clase trabajadora, es la propia estructura social la que se encuentra en peligro, al convertirse esa
clase de oponente en revolucionaria que lucha contra el resto de la sociedad en una lucha de clases
violenta. La autonomía colectiva, la libertad sindical y el derecho de huelga son mecanismos que sin
suprimir el potencial revolucionario e innovador de la clase trabajadora encauzan esas potencias sin
rupturas, sin una subversión global del sistema” (Rodríguez Piñero, Miguel citado por RENDÓN
VÁSQUEZ, Jorge. Derecho Colectivo de Trabajo. Edial, Lima, 2004, p. 26).