Está en la página 1de 13

Alimentos transgénicos

Alimentos de origen animal o vegetal modificados genéticamente para


mejorar sus características y los cultivos

Los alimentos transgénicos son aquellos que han sido modificados genéticamente con
genes exógenos de otras plantas o animales.

La ingeniería genética posibilita acelerar los procesos, pasando los genes deseados de una
planta a otra o de una animal a una planta y a la inversa.

La Administración de Drogas y Alimentos (FDA ) de los Estados Unidos regula la


producción y etiquetado de los alimentos transgénicos.

Las modificaciones genéticas se realizan con mayor frecuencia en vegetales (para lograr
frutas sin semillas, frutas de mejor color o sabor, etc), pero también están comenzando a
realizarse sobre algunos alimentos animales.

La soya y el maíz son los vegetales que más han sido modificados genéticamente para
hacerlos más resistentes a las plagas e inclemencias del tiempo.

Alimentos modificados genéticamente


Los alimentos que con mayor frecuencia se modifican genéticamente son:

 Canola: 100%
 Remolacha azucarera: 95%
 Soya: 93%
 Algodón: 93%
 Maíz; 86%
 Papaya: Un 80% de la papaya china es modificada genéticamente
 Azúcar: El azúcar refinada es generalmente modificada genéticamente
 Lactosa: Las vacas son alimentadas generalmente con paja genéticamente
modificada e inyectadas con la hormona BGH/rBST que es también modificada
genéticamente

Otros alimentos que contienen frecuentemente ingredientes transgénicos son:

 Endulzantes artificiales
 Aceite de canola
 Proteína de soya
 Salsa de soya
 Salsa de tomate
 Tofu
 Mantequilla de maní

Ventajas y desventajas de los alimentos


transgénicos:
Ventajas:

 Mayor resistencia a las enfermedades, plagas, herbicidas, etc., por lo cual son
plantaciones más fáciles de mantener
 Este tipo de alimentos pueden recibir determinadas características no naturales;
pueden incorporársele nutrientes u otras características como sabor, olor, forma,
color, etc., que no tienen de manera natural
 Alimentos con mayor contenido en minerales, vitaminas, proteínas y menos grasas
 Mayor tiempo de conservación
 Reducción de los costos en agricultura
 Aumento de la producción

Desventajas

 Rechazo ante genes extraños


 Productos transgénicos sin las etiquetas correspondientes
 Posibilidad de que los genes no desarrollen el carácter de la forma esperada
 Regeneración de nuevos agentes que produzcan alergias o intolerancia alimentaria
 Posible resistencia a los antibióticos
 Riesgos para el medio ambiente debido a que la resistencia lograda de los alimentos
transgénicos es como consecuencia del uso de herbicidas mucho más potentes lo
cual implica una mayor contaminación

ALIMENTOS

La comida transgénica es nociva para la salud


La modificación genética de los animales, vegetales y sus derivados, ha sido la
respuesta de muchas compañías químicas para multiplicar la producción de
frutos, replicar características deseables y eliminar cualidades no deseadas en
productos de consumo humano.
Desde el punto de vista de las compañías de la industria de la alimentación, la
modificación transgénica de los productos alimenticios, resuelve problemas de
ventas, distribución y almacenaje de alimentos procesados.
Sin embargo, ambas industrias han dejado de lado a la parte más importante
en lo referente a los alimentos y es garantizar que estos efectivamente nutran a
las personas.
Desde la inserción de los alimentos transgénicos a las cadenas alimenticias de
diferentes países se han realizado largas investigaciones, experimentos y
estudios, que han constatado hasta el momento los siguientes efectos
negativos sobre la salud, derivado directamente del consumo de
alimentos trans.

 Aparición de nuevas alergias, debido a que estos alimentos contienen


nuevas toxinas y alérgenos con impacto negativo en el organismo. Una
prueba de esto, fue el conocido caso del Maíz Starlink (2000) en Estados
Unidos. En la cadena alimentaria se encontraron trazas de maíz
transgénico no autorizado que provocó serias reacciones alérgicas.

 Aparición de genes resistentes a los antibióticos en bacterias patógenas


para el organismo. Esto quiere decir que algunas de las bacterias recibirán
la fuerza que necesitan para ser inmunes a ciertos medicamentos.

 Mayor incremento de contaminación en los alimentos, por un mayor uso de


productos químicos en el proceso de cultivo.

 Reducción de la fertilidad, pues en un experimento hecho con ratones, se


llegó a la conclusión de que aquellos que se alimentaron con maíz
modificado genéticamente, fueron menos fértiles en comparación con
aquellos que comieron maíz natural.

 Se sospecha que a largo plazo, estos productos pueden influir en la


aparición de ciertas enfermedades crónicas, como el cáncer.

Es bien sabido que el objetivo de los alimentos trans es el de proveer las


condiciones necesarias para la producción en masa de ciertos productos,
sacrificando los elementos nutritivos de los alimentos.
En pocas palabras, la industria química nos vende veneno en paquetes
etiquetados como alimento.
Por tu salud, di no a la comida transgénica
5 daños a la salud por alimentos transgénicos
Consecuencias del consumo de alimentos trangénicos Fuente: Photos.com
.

Mucho se habla de los alimentos transgénicos, pero ¿qué tanto sabes de ellos?

Son aquellos que fueron sometidos a un proceso que consiste en la implantación de un


organismo vegetal o animal, cuyo material genético ya ha sido transformado o modificado
previamente.

El consumo de alimentos transgénicos puede tener diversas ventajas, tanto para el


organismo, como para la industria alimenticia, como una comida de mejor calidad y
adicionada con más nutrientes; no obstante, con el paso del tiempo, se han observado
diversas consecuencias en la salud

En la actualidad casi cualquier alimento puede ser genéticamente modificado, lo que


significa que estos pueden formar parte de una dieta regular aún sin tener conocimiento de
su origen, por ello la importancia de conocer algunas consecuencias de su
consumo
1. Intoxicación. Además de generar una reacción que puede ser simple como una
intoxicación, los alimentos transgénicos pueden causaralergias como resultado de su
consumo frecuente.

2. Resistencia a medicamentos. Debido a la transferencia de la resistencia a antibióticos,


por el consumo de OGM que contienen marcadores genéticos con resistencia a antibióticos,
algunos medicamentos dejan de tener su efecto sobre determinadas enfermedades
infecciosas.

3. Envenenamiento. Mayores residuos de agroquímicos en los alimentos, diseñados para


resistir un empleo mayor de químicos, suelen contener pesticidas y otros productos, los
cuales han sido relacionados con enfermedades crónicas, como el cáncer .
4. Mutaciones genéticas. La recombinación de virus y bacterias en losalimentos
transgénicos, potencialmente podrían dar origen a nuevas enfermedades o cepas más
patógenas de algunas enfermedades como las gastrointestinales.
5. Daño al hígado. De acuerdo con un estudio publicado en la revista aplicado a ratas, el
consumo frecuente durante dos años de alimentos transgénicos pueden dar lugar a daño
hepático, además de un mayor riesgo de tumoraciones.

Si bien aún se está recabando evidencia de las consecuencias por la ingesta de alimentos
transgénicos o genéticamente modificados, la FAO (Food and Agriculture Organization
of the United Nations, ha emitido diversas alertas para que este tipo de comida esté
plenamente identificada a través de su etiquetado, además de recomendar un consumo
moderado.

7 alimentos transgénicos más comunes


Al ser un alimento de primera necesidad, a las vacas se les suelen inyectar sustancias para
que produzcan más cantidad de leche, disminuyendo su calidad

El material genéticamente modificado suena aún como territorio de la ciencia ficción, pero en
realidad, gran parte de lo que comemos a diario es un organismo genéticamente
modificado. Sean estos alimentos modificados realmente saludables o no es todavía un
tema de debate y, muchas veces, ni siquiera sabemos que estamos comprando algo
genéticamente modificado. ¿Cuáles son los 7 alimentos transgénicos más comunes?

1) Maíz
Casi el 85 por ciento del maíz cultivado en los E.E. U.U. ha sido modificado
genéticamente. Se encontró que los alimentos de la marca Aun, que elabora alimentos de
copos de maíz entero, contienen maíz modificado genéticamente. Muchos productores
modifican el maíz porque son resistentes al herbicida glifosato, que se utiliza para matar las
malas hierbas.

2) Soja

La soja es el alimento más modificado genéticamente en Estados Unidos. El mayor


productor de E.E. U.U. de semillas híbridas para la agricultura, Pioneer Hi-Bred International,
creó una soja genéticamente modificada que fue aprobada en 2010. Se modificó para tener un
alto nivel de ácido oleico, que se encuentra naturalmente en el aceite de oliva. El ácido
oleico es un ácido graso omega-9 monoinsaturada que puede reducir el colesterol LDL
(tradicionalmente considerado como colesterol “malo”), en sustitución de otras grasas.
3) Calabaza y calabacín
Los números genéticamente modificados de esta verdura son relativamente pequeños,
pero la calabaza y el calabacín amarillo genéticamente modificado se pueden encontrar en dos
especies diferentes en los E.E. U.U. Las especies contienen genes de proteínas que protegen
contra los virus. Al igual que sus homólogos de otros alimentos modificados genéticamente,
no somos capaces de notar la diferencia entre no una calabaza normal y una modificada.

4) Alfalfa

El cultivo de la alfalfa modificada genéticamente fue aprobado en 2011 y consta de un gen


que lo hace resistente al herbicida Roundup, permitiendo a los agricultores rociar el producto
químico sin dañar la alfalfa.

5) Canola
La canola se modifica genéticamente desde su aprobación en 1996 y, a partir de
2006, alrededor del 90 por ciento de los cultivos de canola de Estados Unidos son
genéticamente modificados.

6) Remolacha azucarera
Una verdura muy controversial, la remolacha azucarera se aprobó en 2005, se prohibió en 2010
y luego desreguló oficialmente en 2012. La remolacha azucarera genéticamente modificada
constituyen la mitad de la producción de azúcar en E.E. U.U., y el 95 por ciento del
mercado de la remolacha azucarera del país.

7) Leche
Para aumentar la cantidad de leche producida, a las vacas se les da a menudo rBGH
(hormona recombinante del crecimiento bovino), que también está prohibida en la Unión
Europea, así como en Japón, Canadá, Nueva Zelanda y Australia. PUBLICIDAD

¿Para qué sirven los animales transgénicos?


Recientemente se han creado en Uruguay las primeras ovejas transgénicas de América del
Sur, cuyo cometido es curar enfermedades de todas las especies, incluídos nosotros. En
general, la palabra transgénico no tiene muchos adeptos, pero pocos verdaderamente saben
los beneficios y las desventajas de los animales y plantas transgénicas. ¿Para qué sirven
los animales transgénicos?

Animales transgénicos
Los animales transgénicos son animales modificados genéticamente, ya que se inserta
un gen específico dentro de la cadena genética del animal, para conseguir un fin en
particular. Pueden crearse mediante diversas técnicas - transferencia de células madre
embrionarias, microinyección de ADN-. Existe una amplia lista de animales transgénicos,
pero la pregunta sigue siendo ¿para qué?.

Los animales transgénicos tienen grandes beneficios para la humanidad, principalmente


en campos como la farmacéutica, la medicina, la agricultura, la industria y la investigación
científica.

Éstos podrían ayudarnos a descubrir los misterios detrás de síndromes genéticos o


enfermedades crónicas; incluso también a generar nuevos fármacos para tratar diversas
enfermedades, así como también el trasplante de órganos de animales a humanos, el
llamado xeno trasplante. Los animales más comunes para este tipo de trasplantes son los
cerdos, por sus similitudes con los humanos probablemente sean los que menos tasa de
rechazo tengan.

En el caso de los fármacos, hoy en día se utilizan diversos provenientes deanimales


transgénicos, más comunes de lo que crees: la insulina, la hormona del crecimiento y los
medicamentos anticoagulantes son algunos ejemplos.

Mediante la inserción de determinados genes en ratones, se pueden estudiar a ciencia cierta


las enfermedades, saber cómo funcionan y probar diferentes tratamientos hasta encontrar el
mejor. Por ejemplo, la empresa DuPont y Harvard están creando ratones transgénicos que
desarrollan varios tipos de cáncer.

Actualmente estos experimentos se han realizado principalmente en ratones, aunque se


espera comenzar a hacerlo en animales más grandes, cuyas similitudes con los humanos
sean mayores.
Además, los animales transgénicos mejoran cuantitativa y cualitativamente determinados
elementos como la leche en el caso de las vacas, el crecimiento y la protección frente a
enfermedades.

El caso de la leche es especialmente curioso, ya que las vacas transgénicas han logrado
generar leche sin lactosa; así como también leche enriquecida que puede proporcionar una
mayor nutrición a bebés y ancianos. En Canadá, fueron un poco más allá, y utilizaron los
genes de una araña en una cabra, de forma que pudieron extraer seda de la leche de este
último animal. También existen pollos transgénicos que sintetizan proteínas humanas en la
clara de los huevos.

La ética en la biotecnología es un tema muy delicado. Se deben plantear algunas preguntas


acerca de las prácticas genéticas en animales, por ejemplo, si existen o no protocolos, o si
el sufrimiento de otras formas de vida es necesario para una mejora de la vida humana.

Yendo un poco más allá, incluso de plantea si el creciente número de animales transgénicos
-así como también plantas- no llevará a cambios en la evolución natural, y qué
consecuencias sobre la naturaleza tendrá esto.

Ahora que ya sabemos para qué sirven los animales transgénicos, te hago una pregunta:
¿Estás a favor o en contra de los animales transgénicos? ¿Por qué?
Alimento transgénico
.
La ingeniería genética o tecnología del ADN recombinante es la ciencia que manipula
secuencias de ADN (que normalmente codifican genes) de forma directa, posibilitando su
extracción de untaxón biológico dado y su inclusión en otro, así como la modificación o
eliminación de estos genes. En esto se diferencia del mejoramiento genético clásico basado
en la selección, que modifica los genes de una población de forma indirecta, mediante cruces
dirigidos.2 La primera estrategia, de la ingeniería genética, se circunscribe en la disciplina
denominada biotecnología vegetal. Cabe destacar que la inserción de grupos de genes y otros
procesos pueden realizarse mediante técnicas de biotecnología vegetal que no son
consideradas ingeniería genética, como puede ser la fusión de protoplastos.3
La mejora de las especies que serán usadas como alimento ha sido un motivo común en la
historia de la Humanidad. Entre el 12 000 y 4000 a. C. ya se realizaba una mejora
por selección artificialde plantas. Tras el descubrimiento de la reproducción sexual en
vegetales, se realizó el primer cruzamiento intergenérico (es decir, entre especies
de géneros distintos) en 1876. En 1909 se efectuó la primera fusión de protoplastos,4 y
en 1927 se obtuvieron mutantes de mayor productividad mediante irradiación con rayos
X de semillas. En 1983 se produjo la primera planta transgénica.5 En estas fechas, unos
biotecnólogos logran aislar un gen e introducirlo en un genoma de la bacteria Escherichia
coli (E. Coli).6 Tres años más tarde, en 1986, Monsanto, empresa multinacional dedicada a la
biotecnología, crea la primera planta genéticamente modificada. Se trataba de una planta de
tabaco a la que se añadió a su genoma un gen de resistencia para el antibiótico Kanamicina.
Finalmente, en 1994 se aprueba la comercialización del primer alimento modificado
genéticamente, los tomates Flavr Savr, creados por Calgene, una empresa biotecnóloga.7 A
estos se les introdujo un gen antisentido con respecto al gen normal de la poligalacturonasa,
enzima que provoca la degradación de las paredes celulares en los frutos maduros, de
manera que el fruto aguanta más tiempo sin estropearse una vez cosechado, y tiene mayor
resistencia a los daños por su manipulación, como rasguños o golpes. Pero pocos años
después, en 1996, este producto fue retirado del mercado de productos frescos, en gran
medida a causa de su insipidez, y también porque, aún sin descomponerse, acababa
resultando poco apetecible, con una piel blanda, un sabor extraño y cambios en su
composición. Estos tomates se siguen usando para la elaboración de conservas y zumos.8
En el año 2014, los cultivos de transgénicos se extienden en 181,5 millones de hectáreas de
28 países, de los cuales 20 son países en vías de desarrollo.9 En el año 2015, enEstados
Unidos, el 94 % de plantaciones de soja lo eran de variedades transgénicas, así como el 89 %
del algodón y el 89 % del maíz.10
Ciruelas transgénicas.
Los caracteres introducidos mediante ingeniería genética en especies destinadas a la
producción de alimentos comestibles buscan el incremento de la productividad (por ejemplo,
mediante una resistencia mejorada a las plagas) así como la introducción de características de
calidad nuevas. Debido al mayor desarrollo de la manipulación genética en especies
vegetales, todos los alimentos transgénicos corresponden a derivados de plantas. Por
ejemplo, un carácter empleado con frecuencia es la resistencia a herbicidas, puesto que de
este modo es posible emplearlos afectando sólo a la flora ajena al cultivo. Cabe destacar que
el empleo de variedades modificadas y resistentes a herbicidas ha disminuido la
contaminación debido a estos productos en acuíferos y suelo,11 aunque en algunos casos, el
uso de estos herbicidas (glifosato y amonio glifosinado) puede ir acompañados de otros
herbicidas más contaminantes.11
Las plagas de insectos son uno de los elementos más devastadores en agricultura.12 Por esta
razón, la introducción de genes que provocan el desarrollo de resistentes a uno o
varios órdenes de insectos ha sido un elemento común a muchas de las variedades
patentadas. Las ventajas de este método suponen un menor uso de insecticidas en los
campos sembrados con estas variedades,13 lo que redunda en un menor impacto en el
ecosistema que alberga al cultivo y por la salud de los trabajadores que manipulan
los fitosanitarios.14
Uno de los factores que suelen mencionarse respecto a la prohibición de cultivos transgénicos
es la imposibilidad de la coexistencia entre los cultivos convencionales y los genéticamente
modificados, debido a la entrecruza del polen llevada a cabo por el viento o los insectos
polinizadores. Sin embargo, el gobierno de Cataluña demostró que con el aislamiento de los
cultivos, estableciendo una distancia de 30 metros entre uno y otro, así como un retraso de 11
días en las fechas de siembra, se ha logrado en España la existencia simultánea de las dos
alternativas en el cultivo de maíz[cita requerida].
La FAO Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura estima que
por efecto del cambio climático, para el 2050 el decremento en la productividad agrícola será
del 9 al 12 % de las cosechas.
El uso de especies transgénicas en la agricultura no sólo aumenta la productividad promedio
al minimizar las plagas de insectos y maleza, sino que también hace un uso más racional de
los agroquímicos, reduciendo los costos económicos,15 sanitarios y ambientales asociados.
Los cultivos transgénicos también presentan mayor resistencia a climas adversos y crecen en
tierra seca y salina, lo cual podría representar una solución al problema de reducción en las
cosechas.
Gregory Jaffe, director de biotecnología en el Centro para la Ciencia en el Interés Público
asegura que: «Los cultivos transgénicos actuales son seguros para comer y su plantación no
entraña riesgos para el entorno».
Se han aprobado más de cien cultivos transgénicos para consumo tanto humano como animal
en un lapso de 15 años, y de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, son tan
seguros como los convencionales.
Recientemente se están desarrollando los primeros transgénicos animales. El primero en ser
aprobado para el consumo humano en Estados Unidos fue un salmón AquaBounty (2010),
que era capaz de crecer en la mitad de tiempo y durante el invierno gracias al gen de la
hormona de crecimiento de otra especie de salmón y al gen "anticongelante" de otra especie
de pez.16
Por otro lado, la práctica de modificar genéticamente las especies para uso del hombre,
acompaña a la humanidad desde sus orígenes (ver domesticación), por lo que los sectores a
favor de la biotecnología esgrimen estudios científicos para sustentar sus posturas, y acusan a
los sectores anti-transgénicos de ocultar o ignorar hechos frente al público.17
Por su parte, los científicos resaltan que el peligro para la salud se ha estudiado
pormenorizadamente en todos y cada uno de este tipo de productos que hasta la fecha han
obtenido el permiso de comercialización y que sin duda, son los que han pasado por un mayor
número de controles.18
La Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO por sus siglas en inglés) por su
parte indica con respecto a los transgénicos cuya finalidad es la alimentación:19
Hasta la fecha, los países en los que se han introducido cultivos transgénicos en los campos no han
observado daños notables para la salud o el medio ambiente. Además, los granjeros usan menos
pesticidas o pesticidas menos tóxicos, reduciendo así la contaminación de los suministros de agua y los
daños sobre la salud de los trabajadores, permitiendo también la vuelta a los campos de los insectos
benéficos. Algunas de las preocupaciones relacionadas con el flujo de genes y la resistencia de plagas
se han abordado gracias a nuevas técnicas de ingeniería genética.
)

La Organización Mundial de la Salud dice al respecto:


Los diferentes organismos OGM (organismos genéticamente modificados) incluyen genes diferentes
insertados en formas diferentes. Esto significa que cada alimento GM (genéticamente modificado) y su
inocuidad deben ser evaluados individualmente, y que no es posible hacer afirmaciones generales sobre
la inocuidad de todos los alimentos GM. Los alimentos GM actualmente disponibles en el mercado
internacional han pasado las evaluaciones de riesgo y no es probable que presenten riesgos para la
salud humana. Además, no se han demostrado efectos sobre la salud humana como resultado del
consumo de dichos alimentos por la población general en los países donde fueron aprobados. El uso
continuo de evaluaciones de riesgo según los principios del Codex y, donde corresponda, incluyendo el
monitoreo post-comercialización, debe formar la base para evaluar la inocuidad de los alimentos GM.20

Transferencia horizontal
Se ha postulado el papel de los alimentos transgénicos en la difusión de la resistencia a
antibióticos, pues la inserción de ADN foráneo en las variedades transgénicas puede hacerse
(y en la mayoría de los casos se hace) mediante la inserción de marcadores de resistencia a
antibióticos.21 No obstante, se han desarrollado alternativas para no emplear este tipo de
genes o para eliminarlos de forma limpia de la variedad final22 y, desde 1998, la FDA exige
que la industria genere este tipo de plantas sin marcadores en el producto final.23 La
preocupación por tanto es la posible transferencia horizontal de estos genes de resistencia a
otras especies, como bacterias de la microbiota del suelo (rizosfera) o de la microbiota
intestinal de mamíferos (como los humanos). Teóricamente, este proceso podría llevarse a
cabo por transducción, conjugación y transformación, si bien esta última (mediada por ADN
libre en el medio) parece el fenómeno más probable. Se ha postulado, por tanto, que el
empleo de transgénicos podría dar lugar a la aparición de resistencias a bacterias patógenas
de relevancia clínica.24
Sin embargo, existen multitud de elementos que limitan la transferencia de ADN del producto
transgénico a otros organismos. El simple procesado de los alimentos previo al consumo
degrada el ADN.2526 Además, en el caso particular de la transferencia de marcadores de
resistencia a antibióticos, las bacterias del medio ambiente poseen enzimas de restricción que
degradan el ADN que podría transformarlas (este es un mecanismo que emplean para
mantener su estabilidad genética).27 Más aún, en el caso de que el ADN pudiera introducirse
sin haber sido degradado en los pasos de procesado de alimentos y durante la
propia digestión, debería recombinarse de forma definitiva en su propio material genético, lo
que, para un fragmento lineal de ADN procedente de una planta requiriría una homología de
secuencia muy alta, o bien la formación de un replicónindependiente.8 No obstante, se ha
citado la penetración de ADN intacto en el torrente sanguíneo de ratones que habían ingerido
un tipo de ADN denominado M13 ADN que puede estar en las construcciones de
transgénicas, e incluso su paso a través de la barrera placentaria a la descendencia.28 En
cuanto a la degradación gastrointestinal, se ha demostrado que el gen epsps de soja
transgénica sigue intacto en el intestino.29 Por tanto, puesto que se ha determinado la
presencia de algunos tipos de ADN transgénico en el intestino de mamíferos, debe tenerse en
cuenta la posibilidad de una integración en el genoma de la microbiota intestinal (es decir, de
las bacterias que se encuentran en el intestino de forma natural sin ser patógenas), si bien
este evento requeriría de la existencia de una secuencia muy parecida en el propio ADN de
las bacterias expuestas al ADN foráneo.8 La FDA estadounidense, autoridad competente en
salud pública y alimentación, declaró que existe una posibilidad potencial de que esta
transferencia tenga lugar a las células del epitelio gastrointestinal. Por tanto, ahora se exige la
eliminación de marcadores de selección a antibióticos de las plantas transgénicas antes de su
comercialización, lo que incrementa el coste de desarrollo pero elimina el riesgo de integración
de ADN problemático.23

Inserción de "ADN foráneo"


Un aspecto que origina polémica es el empleo de ADN de una especie distinta de la del
organismo transgénico; por ejemplo, que en maíz se incorpore un gen propio de una bacteria
del suelo, y que este maíz esté destinado al consumo humano. No obstante, la incorporación
de ADN de organismos bacterianos e incluso de virus sucede de forma constante en cualquier
proceso de alimentación. De hecho, los procesos de preparación de alimento suelen
fragmentar las moléculas de ADN de tal forma que el producto ingerido carece ya de
secuencias codificantes (es decir, con genes completos capaces de codificar información.26
Más aun, debido a que el ADN ingerido es desde un punto de vista químico igual ya provenga
de una especie u otra, la especie del que proviene no tiene ninguna influencia.30
Esta preocupación se ha extendido en cuanto a los marcadores de resistencia a antibióticos
que se cita en la sección anterior pero también respecto a la secuencia promotora de
la transcripción que se sitúa en buena parte de las construcciones de ADN que se introducen
en las plantas de interés alimentario, denominado promotor 35S y que procede del cauliflower
mosaic virus (virus del mosaico de la coliflor). Puesto que este promotor produce expresión
constitutiva (es decir, continua y en toda la planta) en varias especies, se sugirió su posible
transferencia horizontal entre especies, así como su recombinación en plantas e incluso en
virus, postulándose un posible papel en la generación de nuevas cepas virales.31 No obstante,
el propio genoma humano contiene en su secuencia multitud de repeticiones de ADN que
proceden de retrovirus (un tipo de virus) y que, por definición, es ADN foráneo sin que haya
resultado fatal en la evolución de la especie (de hecho estas secuencias víricas han sido de
gran importancia en la evolución de las especies, tanto de humanos como de otros animales32
); estas repeticiones se calculan en unas 98.00033 o, según otras fuentes, en 400.000.34 Dado
que, además, estas secuencias no tienen por qué ser adaptativas, es común que posean una
tasa de mutación alta y que, en el transcurso de las generaciones, pierdan su función.
Finalmente, puesto que el virus del mosaico de la coliflor está presente en el 10%
de nabos ycoliflores no transgénicos, el ser humano ha consumido su promotor desde hace
años sin efectos deletéreos.35

Alergenicidad y toxicidad
Se ha discutido el posible efecto como alérgenos de los derivados de alimentos transformados
genéticamente; incluso, se ha sugerido su toxicidad. El concepto subyacente en ambos casos
difiere: en el primero, una sustancia inocua podría dar lugar a la aparición de reacciones
alérgicas en algunos individuos susceptibles, mientras que en el segundo su efecto deletéreo
sería generalizado. Un estudio de gran repercusión al respecto fue publicado por Exwen y
Pustzai en 1999. En él se indicaba que el intestino de ratas alimentadas con patatas
genéticamente modificadas (expresando una aglutinina de Galanthus nivalis, que es
una lectina) resultaba dañado severamente.36 No obstante, este estudio fue severamente
criticado por varios investigadores por fallos en el diseño experimental y en el manejo de los
datos. Por ejemplo, se incluyeron pocos animales en cada grupo experimental (lo que da lugar
a una gran incertidumbre estadística), y no se analizó la composición química con precisión de
las distintas variedades de patata empleadas, ni se incluyeron controles en los experimentos y
finalmente, el análisis estadístico de los resultados era incorrecto.37 Estas críticas fueron
rápidas: la comunidad científica respondió el mismo año recalcando las falencias del artículo;
además, también se censuró a los autores la búsqueda de celebridad y la publicidad en
medios periodísticos.37
En cuanto a la evaluación toxicológica de los alimentos transgénicos, los resultados obtenidos
por los científicos son contradictorios. Uno de los objetivos de estos trabajos es comprobar la
pauta de función hepática, pues en este órgano se produce la detoxificación de sustancias en
el organismo. Un estudio en ratón alimentado con soja resistente aglifosato encontró
diferencias en la actividad celular de los hepatocitos, sugiriendo una modificación de la
actividad metabólica al consumir transgénicos.38 Estos estudios basados en ratones y soja
fueron ratificados en cuanto a actividad pancreática39 y testículo.40 No obstante, otros
científicos critican estos hallazgos debido a que no tuvieron en cuenta el método de cultivo,
recolección y composición nutricional de la soja empleada; por ejemplo, la línea empleada era
genéticamente bastante estable y fue cultivada en las mismas condiciones en el estudio de
hepatocitos y páncreas, por lo que un elemento externo distinto del gen de resistencia al
glifosato podría haber provocado su comportamiento al ser ingerido. Más aun, el contenido
en isoflavonas de la variedad transgénica puede explicar parte de las modificaciones descritas
en el intestino de la rata, y este elemento no se tuvo en cuenta puesto que ni se midió en el
control ni en la variedad transgénica.41 Otros estudios independientes directamente no
encontraron efecto alguno en el desarrollo testicular de ratones alimentados con soja
resistente a glifosato42 o maíz Bt.43
Un argumento frecuentemente esgrimido en contra de los alimentos transgénicos es el
relacionado con la gestión de los derechos de propiedad intelectual y/o patentes, que obligan
al pago de regalías por parte del agricultor al mejorador. Asimismo, se alude al uso de
estrategias moleculares que impiden la reutilización del tomate, es decir, el empleo de parte
de la cosecha para cultivar en años sucesivos. Un ejemplo conocido de este último aspecto es
la tecnología Terminator, englobado en las técnicas de restricción de uso (GURT),
desarrollada por el Departamento de Agricultura de EE.UU. y la Delta and Pine Company en la
década de 1990 y que aún no ha sido incorporada a cultivares comerciales, y por supuesto no
está autorizada su venta. La restricción patentada opera mediante la inhibición de la
germinación de las semillas, por ejemplo.44 Cabe destacar que el uso del vigor híbrido, una de
las estrategias más frecuentes en mejora vegetal, en las variedades no tradicionales pero no
transgénicas también imposibilita la reutilización de semillas. Este procedimiento se basa en el
cruce de dos líneas puras que actúan como parentales, dando lugar a una progenie con
un genotipo mixto que posee ventajas en cuanto a calidad y rendimiento. Debido a que la
progenie es heterocigota para algunos genes, si se cruza consigo misma da lugar a una
segunda generación muy variable por simple mendelismo, lo que resulta inadecuado para la
producción agrícola.21
En cuanto a la posibilidad de patentar las plantas transgénicas, éstas pueden no someterse a
una patente propiamente dicha, sino a unos derechos del obtentor, gestionados por la Unión
Internacional para la Protección de Nuevas Variedades de
Plantas. Argentina, Brasil, España, Bolivia y Chile se encuentran en esa unión, siendo un total
de 66 endiciembre de 2008 (entre los países no participantes destaca EE. UU.).45 Para la
UPOV en su revisión de 1991, la ingeniería genética es una herramienta de introducción de
variación genética en las variedades vegetales.46 Bajo esta perspectiva, las plantas
transgénicas son protegidas de forma equivalente a la de las variedades generadas por
procedimientos convencionales; este hecho necesariamente exige la posibilidad de emplear
variedades protegidas para agricultura de subsistencia e investigación científica. La UPOV
también se pronunció en 2003 sobre las tecnologías de restricción de uso como la Terminator
mencionada anteriormente: de acuerdo con la existencia de un marco legal de protección de
las nuevas variedades, se indica que la aplicación de estas tecnologías no es necesaria.47

También podría gustarte