Corre, corre, Edipo.

SACERDOTIZA, URIEL Y CREONTE

Boca cerrada, misma melodía que la introducción que hace el piano.

SACERDOTISA Edipo refulgente,

magnánimo rey de todo el país:
mira toda esta peste,
nos asecha y nos tiene con horror.
Caemos ante el dolor.
Sálvanos de estos eventos tan irascibles,
te imploro una solución.

EDIPO Tebanos calmen, calmen, calmen su furor

Que su rey está buscando solución
No crean que indiferente hacia ustedes soy
Pues su rey jamás los va a defraudar
Aguarden que Creonte ha ido donde Apolo está
Él llegará y nos traerá la verdad

CREONTE Ya llegué con nuevas,

Y con alegría puedo decir que hay solución.
EDIPO Dime ya, de prisa, que fue lo que el dios Apolo a ti te reveló.
CREONTE No es necesario hablar frente a todo el mundo,
EDIPO Habla, el pueblo debe oír.

CREONTE Entonces contaré lo que el Dios me mostró:

Vive un asesino oculto en el país.
Del antiguo rey Layo la vida arrancó,
y en sus manos pesa, hoy, la maldición

EDIPO Prometo que hallaré al que causa esta peste infernal

Lo encontraré y a Tebas traeré la paz.

CORO Oh Zeus, te imploro que seas mi salvador.

Pon al tormento fin

La vida del pueblo en Tebas es atroz,

se respira muerte cuando sale el sol.
Los gritos llenan con sus ecos toda la ciudad,
la ensordecen los lamentos de dolor.
EDIPO No teman, al culpable he de castigar
De esta tierra partirá o morirá.

Oh hijos, este juramento inquebrantable es.

A Tebas la tranquilidad volverá.
TODOS A Tebas la tranquilidad volverá.
Boca cerrada, misma melodía