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¿CÓMO ENSEÑAR CIENCIA POLÍTICA?

DIETER NOHLEN
La ciencia política tiene una larga historia marcada por grandes convulsio-
nes e íntimas vinculaciones con el desarrollo político mismo, con caracterís-
ticas propias, influidas por el propio desarrollo político del país. Las re-
flexiones sobre la disciplina y sobre cómo enseñarla tienen este trasfondo
histórico y contextual. Se analizan cuatro dimensiones de reflexión: 1) el
campo o cuerpo de conocimiento que engloba la ciencia política; 2) la lógica
y metodología de la disciplina; 3) el método comparativo, y 4) la enseñanza
de la disciplina que se distinga de la política cotidiana.

INTRODUCCIÓN ces, pasa a dominar la ciencia política a amplia en sus funciones en cuanto a
nivel mundial. Así, finalizada la segun- áreas de estudio, funciones de investi-
Como es bien sabido, la ciencia política da guerra mundial, en el contexto de la gación, crítica a la realidad, consultora
es una disciplina de mucha tradición. redemocratización en Europa, la ciencia para actores políticos y, sobre todo, su
Se remonta a los tiempos griegos. Es la política europea retoma su camino con función de la enseñanza universitaria.
disciplina madre de muchas otras disci- nuevos bríos y nuevas orientaciones Relato esto para dar a entender que
plinas, cuando con el correr del tiempo guiada por su similar estadounidense. la ciencia política tiene una larga hist-
se formaron dentro de su seno ámbitos En Alemania, especialmente, reco- oria marcada –en cuanto disciplina
del saber que posteriormente se bra importancia gracias a su íntima re- científica– por grandes convulsiones e
desvincularon de ella y formaron disci- lación con el desarrollo de la democra- íntimas relaciones con el desarrollo po-
plinas independientes y autónomas cia. A diferencia de la sociología, que lítico mismo, o sea por factores inter-
como, por ejemplo, la economía, mejor cultiva su autopercepción y función de nos y externos a la disciplina. Es sobre
dicho la economía nacional. Esto es disciplina crítica de la realidad (piénse- todo esta última dependencia la que
cierto para varias disciplinas especiali- se en la famosa Escuela de Francfort de contribuye a que –pensando en compa-
zadas que hoy rodean a la ciencia polí- Horkheimer, Adorno, Marcuse), la cien- raciones internacionales– cada ciencia
tica. La sociología, sin embargo, no cia política, en ese país, se desarrolla política tenga características propias,
nace de su ámbito, sino que se desarro- como ciencia de y para la democracia, influida por el propio desarrollo políti-
lla independientemente y mucho más que enseña la democracia, que la apo- co del país. En Alemania, hoy en día, la
tarde, a partir de la segunda mitad del ya. Sería esa función autoadscrita la ciencia política está bien enraizada en
siglo diecinueve, justo en el momento que le facilitaría reencontrar su lugar el panorama de las humanidades. Estas
en que la ciencia política, por el proce- en el espectro de las ciencias del espíri- reflexiones sobre tal disciplina y sobre
so de desintegración que había vivido tu en las universidades alemanas. Pos- cómo enseñarla es el motivo de este
durante siglos, prácticamente había de- teriormente, con la consolidación de la trasfondo histórico y contextual.
jado de existir. A comienzos del siglo democracia y bajo la permanente in-
veinte renace: se funda en Estados Uni- fluencia de la ciencia política norte- I
dos, se refunda en Europa. Crece entre americana, la de Alemania se desarrolla
las dos guerras, merma durante los to- como una disciplina normal, una, Cuando uno plantea una pregunta no
talitarismos en Europa, pero la emigra- enraizada en las ciencias sociales, más siempre es importante recibir una res-
ción de muchos científicos europeos a
Estados Unidos –sobre todo alemanes–

da un gran impulso y mayor desarrollo * Texto de la conferencia de inauguración del año académico del Instituto de Asun-
a esta disciplina, país que, desde enton- tos Públicos de la Universidad de Chile, pronunciado el 11 de abril 2002.

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puesta. Los cuestionamientos pueden nea reside, en la enseñanza, en su con- tas” (Weber, 1983). Sin embargo, en la
también impulsar reflexiones. La pre- tribución al desarrollo del conocimien- enseñanza, me parece importante
gunta del título de nuestra charla se to de los fundamentos de la política en transmitir el alcance de la política en su
entiende como una invitación a tales cuanto a lo normativo y lo teórico, por expresión real y –aún más importante–
reflexiones. un lado, y lo metodológico en el estu- la relación e interrelación de los fenó-
Me voy a referir a cuatro dimensio- dio de la política, por el otro. menos políticos de diferentes áreas. Por
nes de reflexión: La segunda área engloba a la polí- ejemplo, si en relaciones internaciona-
▲ La primera se refiere al campo o tica comparada, que incluye las tres les la tesis más confirmada, hasta hoy
cuerpo de conocimiento que englo- dimensiones de la política que, debido día, es que los Estados democráticos no
ba la ciencia política. Allí se desa- a limitaciones idiomáticas, ni en ale- sostienen ninguna guerra entre ellos,
rrollan dos aspectos: por un lado mán ni en castellano podemos diferen- es muy importante entonces que la es-
están sus áreas, que permiten dife- ciar conceptualmente bien: polity, tudiosa / estudioso conozca la demo-
renciar internamente la disciplina politics y policy (en inglés), o sea la cracia como forma (polity) y proceso
y, por el otro, las áreas propias ne- forma, el proceso y el contenido de la (politics), las condiciones internas que
cesarias para poder formar una dis- política. llevan a que las democracias –en cuanto
ciplina temáticamente completa. La tercera área está conformada por a resultado (policy)– se comporten a
▲ La segunda se refiere –tomando en las relaciones internacionales que in- nivel internacional de manera que con-
cuenta el objeto de estudio de la cluyen, por ejemplo, la política exte- firman continuamente, desde hace si-
ciencia política y sus consecuencias rior, las organizaciones internacionales, glos, esta regla.
epistemológicas– a la lógica y la lo intergubernamental, lo intersocietal Aun más ilustrativo es el caso de
metodología de la disciplina. –cada día más– y, finalmente, lo supra- las dimensiones de la política en el área
▲ La tercera se refiere a un método nacional, si nos referimos a procesos de de la política comparada. Prácticamen-
específico cuya enseñanza me pa- integración. te no hay en esta área ningún fenóme-
rece de primer orden: el método Puede darse el caso de que un ins- no político por entender o explicar en
comparativo. tituto de ciencia política ofrezca ense- el cual no estén involucrados aspectos
▲ La cuarta dimensión, finalmente, se ñanza adecuada en las tres áreas, pues de polity, politics y policy. Tomemos el
refiere a la enseñanza de la disci- están tan íntimamente relacionadas caso de –si me permiten– cualquier
plina en un nivel de abstracción que que la falta de una de ellas pone en política pública: en el famoso círculo
dista lo suficiente de la política peligro la comprensión cabal del fenó- de una política pública (o policy cycle)
cotidiana para que el alumnado meno de la política. No en vano la cien- entran, desde un inicio de su desarro-
entienda que política y ciencia po- cia política se entiende como ciencia llo, cuestiones del sistema político, de
lítica son dos cosas distintas, por integradora: el objeto de estudio, la la institucionalidad dada, cuestiones de
los objetivos diferentes y los corres- política, no se define a través de un las relaciones de poder, de intereses y
pondientes tipos de argumentos solo concepto, una sola dimensión, un valores, la estructura de conflicto en el
que caracterizan sendos discursos. solo enfoque, un único método. La sistema de partidos políticos y los ti-
ciencia política, por consiguiente, no pos de formación de consenso, etc. Si
II se define tampoco por una sola mate- se diseñan políticas públicas, sin tomar
ria que conceptualmente se pueda aso- en cuenta esas variables de estructura
1. Respecto a la primera dimensión: ciar con la política. y procesos, no se llega muy lejos. Si no
En términos generales, hay que dife- Se observa, sin embargo, que en al- se enseña la interrelación de la policy
renciar entre tres áreas que forman gunos países las materias polity, politics con politics y polity, el o la estudiante
el cuerpo de materias de docencia en y policy están separadas en forma dis- va a desarrollar un conocimiento poco
ciencia política. persa en institutos diferentes según las realista, parcializado y poco adecuado
La primera área constituye la teoría áreas señaladas. Incluso hay casos en de la política.
política, que incluye tres campos: a) la que se han creado institutos separados 2. Respecto a la segunda dimensión,
historia de las ideas o la filosofía políti- en una misma universidad en el área de la analítica, quisiera hacer hincapié en
ca, b) la teoría política moderna, o sea la política comparada. Hay razones, en la importancia que tienen la lógica y
las grandes corrientes teóricas, las de el campo de la investigación, para enfa- el método en la enseñanza de la cien-
gran alcance y las metateorías o los tizar la especialización, pues como de- cia política. Esta orientación es espe-
paradigmas científicos y, finalmente, c) cía ya Max Weber al principio del siglo cialmente valiosa debido a la dificul-
la metodología en ciencias sociales. La pasado ”la obra realmente importante y tad que el objeto de estudio, la política,
importancia de esta área tan heterogé- definitiva es siempre obra de especialis- contiene para su análisis.

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La especial dificultad que enfrenta sociales y recordar lo que el erudito fesión de fe, para encarnar una verdad
la ciencia política se hace notable al economista Albert O. Hirschman (ya en propia de la estudiosa / del estudioso,
comparar nuestra disciplina con la eco- 1979) puso de manifiesto. Diferenció sino a un examen lógico de su alcance,
nomía, en cuanto a sus respectivos ob- entre tres categorías: valoró positiva- es decir sus límites (lo que incluye, lo
jetos de estudio y las consecuencias mente la posibilidad de la interacción que excluye) y su adecuación semánti-
científicas o metodológicas que sus di- entre ambas disciplinas, por ejemplo ca a los objetivos de conocimiento. Para
ferencias traen consigo. ”Primero, el cuando la ciencia política podría apro- dar un ejemplo: la democracia es un
economista observa los comportamien- vechar en sus estudios los resultados concepto sin definición precisa, univer-
tos económicos, comportamientos científicos de la economía. Valoró po- salmente aceptada. Se la puede definir
guiados por un solo criterio identifica- sitiva, también, la interacción en áreas en los términos de Robert A. Dahl,
do y constante: llevar al máximo el be- donde los objetos de estudio en eco- quien hizo hincapié en dos criterios:
neficio, la utilidad o el interés econó- nomía y en política ostentan estruc- participación y pluralismo político
mico. Segundo, los comportamientos turas análogas, llamando la atención (Dahl, 1971). Es una definición por
económicos son expresables (...) en al campo limitado de objetos que pre- cierto estrecha y limitada, pero bien
valores monetarios, es decir en valores sentan estas condiciones. En términos operacionalizable y mensurable. Es evi-
cuantitativos” (Sartori, 1979:62). Así, generales, estimó positivas estas dos dente que cada uno de nosotros podría
”el economista encuentra una medida categorías de interacción porque se preferir una definición más amplia, más
incorporada a los comportamientos ob- respeta la autonomía de lo político, esencialista, más normativa, en la cual
servados: el homo oeconomicus razona ”But I do not want to deny that entrara todo lo bueno y lo hermoso de
con números, con valores monetarios” occasionally there may be a third un orden deseado. Sin embargo, tal
(idem). Con base en esto, el economis- category: Here the economist would concepto no serviría mucho para el aná-
ta pudo desarrollar un lenguaje espe- transfer concepts and modes of analysis lisis científico, pues si cada uno tuvie-
cial, cuyos conceptos, por ejemplo va- originally elaborated for the purpose ra su concepto normativo del fenóme-
lor, costo, precio, mercado, están of understanding the economy to the no en estudio, resultaría difícil llegar a
claramente establecidos y no vuelven political terrain. This is clearly a case resultados intersubjetivamente trans-
a ser discutidos cada vez que se los of ‘imperialistic’ expansion of one dis- misibles.
utiliza. cipline and (...) I have serious doubts Otra dificultad se presenta al am-
El politólogo, sin embargo, obser- about the practice (for reasons other pliar el concepto del fenómeno en es-
va comportamientos políticos guiados than mere dislike of imperialism)” tudio, de tal manera que algunos facto-
por este u otro criterio, o sea, por cri- (Hirschman, 1981:261). res, que es preciso investigar, respecto
terios diferentes y cambiantes que por Vale repetirlo, los conceptos en a su relación, entren como elementos
lo demás –en su gran mayoría– son ciencia política no alcanzan el grado de del mismo concepto. El origen de esta
difíciles de expresar en términos cuan- homogeneidad y constancia que tienen conceptualización equivocada reside en
titativos. Sus métodos, por un lado, aquellos del lenguaje del economista, confundir el ámbito del problema con
tienen que contemplar la peculiaridad lo que obliga a enseñar su contenido el concepto mismo, como bien me se-
y la naturaleza sui generis de su obje- plural, su natural vinculación con in- ñaló mi asistente de investigación
to de estudio y la lógica de la investi- tereses cognoscitivos y valores en el (Claudia Zilla). Un buen ejemplo al res-
gación; por otro lado, tiene que ser lenguaje político y los criterios de su pecto lo brinda, nuevamente, el con-
discutida con relación a todos y cada formación conforme a reglas y circuns- cepto de democracia, cuando se le in-
uno de los diseños de investigación. tancias para su uso en el análisis cluyen también los problemas que la
Es obvio que la economía se encuentra politológico. Una de las mayores nece- atañen, por ejemplo, su relación con la
en una situación científica privilegia- sidades de la enseñanza de nuestra dis- sociedad. Esto se da cuando se define
da que tiene su origen en el carácter ciplina consiste en transmitirle al alum- como democracia sólo a aquel sistema
del objeto de estudio, a partir del cual nado que los conceptos no sólo son político que se erige sobre las bases de
–en el caso de la economía– fue posi- fundamentales para el análisis y el diá- una sociedad democrática. Con esta
ble un desarrollo de cientificidad me- logo científicos, que su definición no conceptualización se pierde de vista la
nos cuestionado que en el caso de la sólo es conditio sine qua non del cono- relación política y científicamente im-
ciencia política. cimiento científico, sino que además portante entre tipo de sistema político
Por esta enorme distancia que se- tienen que alejarse de ontologismos y y tipo de sociedad en términos de una
para a la ciencia política de la econo- esencialismos, y corresponder a crite- homogeneidad necesaria, en términos
mía, es conveniente referirse también rios de utilidad científica. La definición de desfases y secuencias, y en términos
a la interrelación entre ambas ciencias de un concepto no equivale a una pro- de su desarrollo en el tiempo.

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Al estudiantado se le debe enseñar ciones empíricas. Pues es importante mental (véase al respecto a los clási-
la formación y el uso de las clasificacio- señalar que para diferenciar bien y cos J. St. Mill y E. Durkheim), la ense-
nes, de los tipos, de los tipos ideales y valorar un fenómeno es imprescindi- ñanza de la ciencia política debería
de las tipologías, sus funciones y alcan- ble compararlo. abordar también la cuestión de la cau-
ces científicos. Recientemente, un ejer- El comparar, sin embargo, no es tan salidad en las ciencias sociales. Abun-
cicio con un grupo de posgraduados fácil y tiene que ser aprendido. Lo pri- dan tesis monocausales y unilineales
puso en evidencia mi falta de práctica mero que hay que enseñar es que im- en nuestra disciplina, resultado del tipo
en tal terreno. En ciencia política tra- plica escoger prudentemente con qué de formación de teorías deductivistas.
bajamos mucho con dicotomías y comparar dentro de un alto número de Respecto a la comparación, abre las
trilogías o tríadas. El ejercicio constaba posibles referentes. Vale reflexionar perspectivas adecuadas para el estudio
en encontrar, en el mundo de las for- sobre cuál de estos es racionalmente de casos empíricos que pueden operar
mas políticas, alternativas que corres- el más adecuado, el más plausible, y como casos de control. Es importante
pondieran a estos tipos de ordenamien- evitar escoger uno científicamente enseñar la función de la comparación
to de los fenómenos. Ninguna de las poco válido, pues la comparación se como instrumento de comprobación o
cinco respuestas que recibimos fue co- presta también a confusiones y falsificación de las teorías. Por lo de-
rrecta. O no se respetaba el objeto, las distorsiones que –en el campo político más, induce a la formación de teorías
formas de gobierno, o se mezclaba el o cuando la o el cientificista sólo opi- de tipo inductivista. En relación con
objeto con algo que no se refería a él, o na y se mueve en la política– a veces esta diferencia de génesis de las teo-
los fenómenos que se mencionaban no son intencionadas. rías, es importante enseñar los tipos
eran de carácter disyuntivo. Lo segundo que vale destacar, en de estas que se formulan en nuestra
En resumen: vale poner énfasis en este contexto, es el carácter de método disciplina, los tipos de teorías micro,
la enseñanza de la ciencia política en científico de la comparación, a mi modo macro, específicas y universales, etc.,
la lógica del conocimiento. Hay que en- de ver el método más típico de la cien- y señalar que las teorías de medio al-
señar a pensar lógica y sistemáticamen- cia política. Enseñar a comparar signi- cance, es decir, las que mantienen re-
te. Lo que equivale a enseñar a diferen- fica, de este modo, familiarizar al alum- lación con el espacio y el tiempo, son
ciar en lo conceptual entre niveles de nado con el método más importante de las más adecuadas y mejor experimen-
abstracción, categorías, diferencias de la ciencia política. Sin embargo, no tadas en ciencia política.
grado, etc. Saber diferenciar hace la di- existe ninguna receta válida del méto- 4. Respecto a la cuarta dimensión,
ferencia entre una interesada / un in- do comparativo para cualquier caso en no sólo la reflexión científica necesita
teresado en y una estudiosa / un estu- estudio. Por otra parte, tal método cierta distancia del quehacer político
dioso de la política. consta de diferentes estrategias de in- cotidiano, sino también la enseñanza
3. Respecto a la tercera dimensión, vestigación que consisten en jugar, en de la ciencia política. Es bien notorio el
y la sugerencia de enseñar cómo com- el diseño de la investigación, con la ho- interés en Chile, y en toda América La-
parar, vale distinguir entre dos líneas mogeneidad y la heterogeneidad del tina por referirse con prioridad a la po-
de comparación: la histórica y la in- contexto, por un lado, y, con la concor- lítica actual, para intercambiar opinio-
ternacional. Según mi experiencia, la dancia y diferencia de las variables, por nes al respecto: existe la tentación de
comparación histórica es la que se ejer- el otro. Cada diseño de investigación que el intercambio se politice, que la
ce fácilmente en América Latina. En tiene que ser estructurado de acuerdo posición ideológica sustituya al argu-
diálogo con cientificistas sociales de la con las propias características del ma- mento razonable, que la contingencia
región, me ocurrió, muchas veces, que terial en estudio y del interés de cono- política se apodere de la ciencia política
una pregunta acerca de la estructura – cimiento. El método comparativo se de modo que –al final de cuentas– esta
por ejemplo– del sistema de partidos aplica en estudios cuantitativos y cua- se perciba como parte de la política.
me fuera contestada mediante un re- litativos, cada uno con su metodología Recuérdense los tiempos de las ciencias
cuento de la historia de los partidos específica, y dentro de cada área con sociales comprometidas, cuando se pos-
políticos. O sea, la entrada a la reflexión variantes. De modo que, al tomar la tulaba que tendrían que ser parte inte-
politológica en la región es más bien decisión de aplicar el método compara- gral de la lucha por la revolución social
histórico-cronológica y mucho menos tivo, no está resuelta la cuestión del y política. Es cierto que la ciencia polí-
sistemático-comparativa. La enseñan- método, sino que recién ahí empieza tica no es neutra, no es objetiva en
za tendría que favorecer esta última justamente la reflexión metodológica. cuanto a que se pueda desvincular to-
perspectiva, nutriéndose de compara- Dado que el método comparativo es talmente de intereses cognoscitivos, de
ciones internacionales, que constitu- el método en las ciencias sociales pen- valores y de objetivos socialtecnoló-
yen la base para tipologías, y aprecia- sado para sustituir al método experi- gicos. Sin embargo, estos parámetros

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tienen su plena legitimidad sólo en el III Quisiera terminar con una observa-
contexto del surgimiento de una inves- ción más: las últimas tres sugerencias
tigación y en el de la aplicación de sus Resumamos: mis reflexiones, origina- se pueden resumir en una sola que tie-
resultados, pero tienen que suprimirse das en la pregunta de cómo enseñar ne un alcance mayor a la de la enseñan-
o desaparecer en el contexto interno de ciencia política, conducen a sugerir za universitaria de la ciencia política.
la argumentación científica. Aquí vale cuatro orientaciones: Reside en sustituir la cultura de la opi-
el argumento bien probable o bien pro- La primera se refiere al cuerpo ma- nión por la del argumento. Aunque con
bado, la teoría bien comprobada o refu- terial o contenido de la disciplina, y un significado que va más allá de la
tada por el control empírico o de con- que consiste en enseñarla integrándo- universidad, es en sus aulas donde este
sistencia teórica. Para que este proceso la con las diferentes áreas. proceso debe iniciarse.
argumentativo en el desarrollo de la in- La segunda está relacionada con las
vestigación tenga su lugar también en herramientas conceptuales de la disci- BIBLIOGRAFÍA
la enseñanza de la ciencia política, pa- plina y consiste en enseñar a saber di- Dahl, R. L. (1971), Polyarchy, Londres: New
rece conveniente distanciarse algo de la ferenciar. Haven.
sterile Aufgeregtheit (excitación estéril) La tercera es la perspectiva analítica Hirschman, A. O. (1981), Essays in
de la política cotidiana, como diría Max de la disciplina, consistente en enseñar trespassing. Economics to politics and
Weber (1983), y plantear la enseñanza el arte y método de saber comparar. beyond, Cambridge.
de la ciencia política en una esfera de La cuarta alude a la argumentación Sartori, G. (1979), La política. Lógica y méto-
abstracción más alta, algo lejana y fue- científica (Begründungszusammenhang do en las ciencias sociales, México, FCE.
ra de la política, donde sea posible ob- en alemán) de la disciplina y consiste Weber, M. (1983), El político y el científico,
servar la política sine ira et studio. en enseñar la capacidad de abstraer. México: Premià, 89 pp.

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