están mal diseñados desde el punto de vista ergonómico. Por ejemplo los montacargas están diseñados para viajar hacia adelante, pero en la mayoría de los casos no existe una adecuada visibilidad para el operador cuando el montacargas se desplaza hacia atrás. Conducir hacia atrás puede originar lesiones en espalda, cuello y hombro. Otros problemas para el operario son representados por la vibraciones, el diseño de los controles y del pedal que no cuentan con posibilidad de ajuste.