Está en la página 1de 15

CARIES Y LACTANCIA

Traducido de Allaiter Aujourd'hui, La Leche League France, pag. 16, jul - sept 1996. Publicado en Nuevo Comienzo de la Liga de
la Leche - Latinoamérica, Abril - Junio 1997. Los dentistas se preocupan, y con razón, del Síndrome del Biberón: los niños que
durante horas, a veces toda la noche, toman biberones de leche o de bebidas azucaradas, a raíz de lo cual pueden desarrollar
caries hasta el punto de encontrarse a los 3 ó 4 años sin dientes, con dificultad para alimentarse, infecciones en la boca y hasta
dolor.
Desafortunadamente, se encuentran dentistas que incluyen en su reprobación, el amamantamiento prolongado, particularmente
cuando se realiza de noche, y ordenan a las madres que desteten a sus bebés sin demora, cuando ven llegar a su consultorio
un pequeño que todavía es amamantado y tiene caries.
Es evidente que las caries pueden tener otras causas: defectos en el esmalte, hereditarios o congénitos; algo sucedió durante el
embarazo: fiebre en el bebé; mala higiene bucal; exceso de alimentos y bebidas azucaradas (din olvidar el azúcar contenido en
los medicamentos pediátricos); infección por Setreptococcus mutans, una bacteria que prospera en medios azucarados y puede
colonizar la placa dental.
Un estudio (1) encontró una fuerte correlación entre la aparición de caries dental en los niños y la presencia de numerosas
caries en la madre, sin que hayan dado explicación a este hecho.
Por otra parte, se sabe que la succión al seno es muy diferente de aquella que se realiza en el biberón. Con el biberón la leche
sale prácticamente sin esfuerzo, y el niño oprime la mamila con su lengua para controlar el flujo de leche. De ahí, que la leche
se dirige hacia la parte anterior de la boca y baña los dientes.
Por el contrario, en la lactancia, el pezón es aspirado hasta el fondo de la boca, donde se unen el paladar duro y el paladar
blando, atrás de los dientes. Un movimiento de succión es seguido automáticamente de uno de deglución, lo que impide que
los dientes se bañen en leche (la cual, adicionalmente, no contiene sacarosa).
De lo anterior es posible concluir que, si bien los niños amamantados tienen caries, es sin duda, no a causa, sino a pesar de la
lactancia. Un dentista irlandés quiso verificar esta hipótesis. Para ello, estudió 107 niños que habían sido amamantados a libre
demanda al menos por dos años. Al momento del estudio, 59 ya estaban destetados y 48 todavía amamantaban.
Fueron divididos en dos grupos: 32 de ellos tenían dos o mas caries antes de los dos años, y 75 tenían una, o no tenían caries.
El estudio (2) encontró que las caries no estaban relacionadas con la lactancia. Los dos grupos eran comparables en lo que se
refiere a la frecuencia de las mamadas tanto de día como de noche, la edad del destete y la tasa de lactosa en la leche
materna. Por el contrario, fueron identificados tres factores como responsables de la aparición de las caries: enfermedad o
estrés de la madre durante el embarazo, consumo reducido de productos lácteos y sobretodo, esmalte defectuoso, ya fuera
hereditario o congénito.
Parece entonces, un tanto abusivo impulsar a una madre a destetar a su bebé que tiene caries: por un beneficio inexistente, se
le va a privar de todos los beneficios de una lactancia prolongada. Es mejor encontrar un dentista que acepte tratar las caries,
sin hacer presiones. Es reconfortante saber, que en la mayoría de los casos, los dientes definitivos no serán defectuosos. (3)
(1) JR Serwint et al, "Child-rearing practices and nursing caries", Pediatrics, 8/93, 92: 233-37. (2) Harry Torney, "Prolonged on-
demand breastfeeding and dental caries. An investigation", tesis. (3) Especialmente cuando la causa de la caries es un defecto
congénito del esmalte. En efecto, los botones de los dientes de leche no se forman al mismo tiempo de aquellos de los dientes
definitivos. En este caso, una fiebre puede afectar la formación de los primeros, pero no los de los segundos.
http://www.enferalicante.org/~formularios/pdf/CariesYLactancia.pdf

mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm

REVISTA DE PEDIATRÍA
Caries del lactante y su verdadero significado para el médico y el odontólogo. Posibles factores
asociados
Dra. Isabel Chavarro Orjuela.
Profesora Universidad Nacional.
Estomatóloga Pediatra.
Docente Universidad Nacional.
Dr.Javier Rodrigo Cortés E.
Médico Maestria infecciones y salud en el trópico.
Universidad Nacional.
Coordinador de Diagnóstico, tratamiento y rehabilitación
Hospital San Jorge I nivel, Santafé de Bogotá.
Dr. Pedro Alberto Sierra Rodríguez.
Profesor Asistente Universidad Nacional
Departamento de Pediatría.
Hospital de la Misericordia, Servicio de Lactantes.
Pediatra Hospital de Kennedy
INTRODUCCION
De los problemas dentales, las caries, son los trastornos de salud oral que más afectan a los niños; el pediatra, el médico
general, el odontólogo y todo el personal de la salud que maneja niños, puede ayudar a prevenir las consecuencias físicas,
psicosociales y económicas que ocasionan las caries, con una evaluación adecuada de la cavidad oral, educación y la continua
recomendación de asistir a la consulta odontológica, para que el niño reciba a tiempo los cuidados que requiere.
Sin embargo, como no existe mortalidad o morbilidad grave relacionada con las caries, los médicos pediatras pueden pasar por
alto la importancia de la salud oral en los niños y con frecuencia omitir el examen dental, ya que en su formación profesional no
se hace mucho énfasis sobre los problemas odontológicos y la información recibida sobre salud oral es insuficiente, de tal
manera que el médico casi siempre inicia su examen físico a partir de la orofaringe y región amigdalar, olvidándose totalmente
de los dientes, tal vez porque desconoce la importancia de estos y especialmente la de los dientes temporales, pues se piensa
que como estos los va a cambiar, no ameritan mayor cuidado; lo cual es un concepto erróneo y son muchos los niños
diariamente hospitalizados con infecciones cervicofaciales complicadas cuyo inicio fue una caries de la dentición temporal, que
al progresar ocasiona celulitis y abscesos y en algunos casos puede producir osteomielitis del maxilar y/o meningitis, poniendo
en peligro la vida del paciente.
En muchas alteraciones congénitas o adquiridas, tales como: cardiopatias, labio paladar hendido, he
mofilias y algunas enfermedades agudas o crónicas como la endocarditis bacteriana, purpuras, alteraciones renales,
inmunodeficiencias, parálisis cerebral, leucemias, entre otros, la salud oral es de vital importancia para el paciente; y por lo
tanto el médico pediatra, quien tiene los primeros contactos con el niño y su familia debe proporcionar la información sobre los
cuidados del niño, incluyendo los de salud oral y así prevenir mayores complicaciones al paciente.
Además, de acuerdo a las concepciones modernas el manejo del paciente debe ser integral, razón por la cual consideramos
que el pediatra y el médico general deben ampliar sus conocimientos sobre los problemas dentarios de la infancia.
1. HISTORIA
La caries del lactante es un síndrome especifico, fue descrita por Jacobi en 1862, quien la definió como una severa destrucción
de los dientes anteriores, debido a la alimentación con líquidos, que contienen sacarosa, al momento de acostarse1. Massler
describe las caries del lactante como una destrucción rápida que afecta principalmente incisivos superiores y no afecta en
etapa temprana los incisivos inferiores. Más recientemente Ripa definió la caries de la lactancia como una forma específica de
caries que se presenta en los dientes temporales2.
2. IMPORTANCIA DE LAS CARIES DEL LACTANTE
La caries del lactante es un proceso patológico importante, que por su condición progresiva acarrea diferentes daños en la
salud y en la personalidad del individuo, demandando grandes inversiones en recursos económicos y el concurso de personal
especializado.
La caries del lactante es un síndrome que se presenta en los dientes temporales y afecta las superficies dentales consideradas
de relativa resistencia a la caries, potenciándose el grado de destrucción con el tiempo de exposición al factor o posibles
factores asociados, causando alteraciones de tipo funcional, estético, de fonación, esquelético, de nutrición y del desarrollo.
En estudios realizados en el Hospital Universitario de la Misericordia(1995-1996), en el departamento de salud oral, donde se
atienden niños remitidos con patología oral de alta complejidad, se encontró prevalencia de caries del lactante, en un 51%, en
menores de cinco años3.
En nuestro medio los estudios de la prevalencia de la caries del lactante es limitada, pues los datos más recientes
corresponden al estudio referenciado anteriormente (Ministerio de Salud).
3. DEFINICIÓN.
La caries dental es una enfermedad infecciosa de origen bacteriano no específico de carácter multifactorial que causa la
disolución mineral de los tejidos duros del diente por los productos finales del metabolismo ácido de las bacterias capaces de
fermentar a carbohidratos ( teoría acidógenica). La caries puede afectar el esmalte, la dentina y el cemento . Esta patología es
uno de los padecimientos más frecuentes de los seres humanos que prevalece y la padece el hombre moderno tal vez como
producto de la industrialización, la tecnología, y la economía de nuestra sociedad.
La caries del lactante, también conocida como caries del biberón, caries de la botella de crianza, caries del hábito de la
lactancia prolongada, nursing caries, es la alteración de los tejidos duros del diente en lactantes y niños que han tenido
contacto prolongado con sustancias carigénicas y una higiene oral deficiente o ausente; todo esto, influenciado por factores
psicológicos, sociales, culturales, educacionales del núcleo familiar en el que se encuentra el niño.
Inicialmente se desarrolla una banda blanca de descalcificación en el tercio gingival de los incisivos superiores, cambiando de
color que puede ser de marrón a negro y en casos avanzados las coronas de los dientes frecuentemente se fracturan por el
margen gingival. Este puede ser el primer signo en algunos casos que notan los padres de que existe un problema y pueden
acudir al odontólogo con la queja de que los dientes del niño se le fracturaron repentinamente.
El síndrome caries del biberón debe diferenciarse de la hipoplasia del esmalte, la cual resulta de las deficiencias nutricionales,
daños al nacer prematuros, ingesta de químicos como el exceso de flúor. Los defectos hipoplásicos muestran un patrón
simétrico que puede correlacionarse con la cronología de la calcificación de los dientes.
Para diferenciarlo más claramente, el síndrome caries del biberón raramente incluye los bordes incisales, y los pacientes tienen
una historia de exposición excesiva a líquidos altamente carigénicos y esto, aunado a un esmalte inmaduro de reciente
erupción y una mala higiene bucal, proporciona condiciones óptimas para la destrucción de los tejidos duros por caries, la que
progresa rápidamente en la dentición temporal.
4. EXPLORACIÓN DEL PATRÓN DE CARIES DEL LACTANTE:
La razón para que la distribución de caries sea diferente entre los incisivos maxilares y mandibulares lo mismo que la severidad
de las lesiones entre estos y los otros dientes se relaciona con tres factores:
1. La cronología de la erupción de la dentición primaria.
2. El tiempo que permanezca el hábito del biberón
3. El patrón muscular de succión del infante.
De la cronología de la erupción podemos decir que los primeros dientes en aparecer son los incisivos inferiores, entre los 6 y
los 10 meses, los cuales no se afectan, por la protección lingual, los incisivos superiores son los siguientes en erupcionar entre
los 6 y los 12 meses e inmediatamente están expuestos al medio ambiente oral; luego erupcionan los primeros molares tanto
superiores como inferiores entre los 12 y los 16 meses, luego aparecen los caninos entre los 19 y 20 meses y por último los
segundos molares entre los 20 y 30 meses.
El consumo de biberón, se elimina generalmente a los 24 meses lo que puede explicar en parte la ausencia de caries en los
segundos molares. Aunque hay estudios que muestran que una experiencia de caries en incisivos superiores incrementa el
riesgo de caries en los dientes posteriores.1
Al hablar de succión, es necesario saber que generalmente el niño se encuentra en posición horizontal con el biberón en la
boca y el chupo descansado contra el paladar, mientras la lengua en combinación con los carrillos, forza el contenido del
biberón hacia la boca. La lengua se extiende hacia fuera y entra en contacto con los labios, cubriendo al mismo tiempo los
incisivos inferiores. Al principio, la succión es vigorosa, la secreción y el flujo salivar son intensos y la deglución es continúa y
rítmica; a medida que el niño se adormece, la deglución se hace lenta, la salivación disminuye y la leche empieza a
acumularse alrededor de los dientes. Esto favorece el contacto con los dientes no cubiertos por la lengua, durante periodos
prolongados a los carbohidratos que contenga el biberón. El contenido del biberón es generalmente carbohidratos
fermentables, los cuales son metabolizados por los microorganismos orales, convirtiéndose en ácidos que van a desmineralizar
el esmalte dental.
Ardran y col. realizaron un estudio que consistió en el seguimiento del total procedimiento de amamantamiento por medio de
tomas cine-radiografía. Ellos reportaron que el pezón descansaba sobre la unión del paladar duro y blando y la acción de
succión depositaba la leche sobre la parte posterior del paladar blando. Lo mismo hicieron con niños alimentados por biberón,
hallando que estos niños a menudo no tomaban bastante leche dentro de la boca como para estimular el reflejo de la
deglución. El volumen obtenido del pezón y del tetero es similar, pero el pecho ocupa mas volumen dentro de la boca que el
pezón artificial de este modo la alimentación por tetero se acumula en la boca alrededor de los dientes hasta que el reflejo de
deglución es estimulado, esta se lleva a cabo en la parte posterior de la lengua y la orofaringe5,6.
Si el líquido del tetero es consumido por períodos prolongados y tiene carbohidratos ferméntables, estos serán metabolizados
por los microorganismos orales que desmineralizan los dientes en este medio ambiente ácido estancado, haciendo que se
desarrollen las lesiones rápidamente2.
5. APARIENCIA CLíNICA:
Generalmente, los incisivos superiores son los primeros dientes afectados; las lesiones tienen un desarrollo rápido y ocurren en
superficies que son consideradas de bajo riesgo como son las superficies vestibulares y palatinas. Los otros dientes
temporales, caninos, primeros y segundos molares pueden o nó estar involucrados, dependiendo del tiempo que perdure el
hábito del biberón. (figura No 1)2.
Figura No. 1 Uso nocturno del biberón observese las lesiones cavitaciones en incisivos inferiores, superficies
vestibulares y los incisivos inferiores se observan sanos.
6. ETIOLOGíA
La etiología de la caries del lactante ha sido atribuida a varios factores que incluyen aspectos desde el punto de vista social,
cultural, económicos, políticos, étnicos, psicológicos y biológicos, en los que se encuentra inmerso el infante y que no podemos
desconocer. Para entender más claramente la etiología, podemos considerar que existe un huésped susceptible, (niño-
dientes); un agente causal que son los microorganismos presentes en el huésped; un medio ambiente propicio general y
específico; el general dado por las factores sociales y el específico dado por el sustrato de carbohidratos, que en el caso de
está patología va a estar relacionado con el biberón y su contenido y un último factor a considerar es el tiempo, que se
encargará de determinar la severidad de la enfermedad.
En el caso de la caries de la lactancia, la causa principalmente es atribuida al uso prolongado del biberón, bien sea diurno o
nocturno, el cual contiene algún tipo de agente endulzante (azúcar, panela, miel, preparados comerciales) que va a estar en
contacto continuo con el diente; esa acumulación del contenido en la boca del infante es la encargada de iniciar la
desmineralización del esmalte, lógicamente con la participación de los microorganismos responsables de la caries.
6.1. Microorganismos
Los microorganismos son indispensables para la iniciación de las caries dental; es así como la cavidad oral del recien nacido
no tiene cepas de microorganismos cariogénicos, los cuales se creen son trasmitidos de la madre al bebé o de una persona
muy cercana a él, mediante la saliva, ya sea por besos o por la utilización de los mismos elementos de alimentación.
Es importante hablar de los microorganismos presentes en la cavidad oral de los pacientes con caries de la lactancia y
reconocer principalmente al estreptococo mutans como colonizador inicial de la cavidad oral, haciendo parte de los cocos que
inician la proliferación de la placa sobre la película del diente. El estreptococo mutans va aumentando a medida que emergen
los dientes, este microorganismo es el que se encuentra en mayor proporción en los niños con caries de la lactancia,
confirmado por el Doctor Van Houte y Col. En 1982 quién encontró que más del 50% de la totalidad de la flora cultivable
correspondió al estreptococo mutans, y su concentración en saliva es de un 10%. Los niveles de estreptococo mutans no
solamente se encontraron en la lesión cariosa cavitacional y en la zona de mancha blanca, sino que también se encuentran en
zonas aledañas a la lesión o en cierta forma distantes a esta. En el mismo estudio se encuentra que al descontinuar el uso del
biberón disminuye la concentración de estreptococo mutans. Otros microorganismos que se encontraron en este estudio fueron
varias especies de lactobacilos, los cuales estaban en los márgenes de las lesiones tanto cavitadas, como en las lesiones de
mancha blanca.
Para lograr la colonización de la cavidad oral, el estreptococo mutans requiere que exista una serie de características:7
Requiere que en la cavidad oral exista una superficie dura (dientes), por esto no se presenta antes de la emergencia dental.
Debe existir un competidor que permita la colonización de otros microorganismos para formar una flora oral madura.
Que exista un pH de 5.0
La infección ocurre generalmente por miembros de la familia especialmente por la madre.
6.2. Sustrato
Los carbohidratos de la dieta están generalmente asociados a la formación de la caries dental. Ciertos carbohidratos de la dieta
son utilizados por los microorganismos orales (estreptococo mutans) formando una matriz pegajosa de placa que facilita la
adhesión de los microorganismos al diente. Los carbohidratos también sirven en la producción de ácidos orgánicos que inician
la pérdida de minerales del diente.
Los carbohidratos asociados con la presencia de caries del lactante son:
Lactosa: Disacarido de glucosa y galactosa, el cual favorece la implantación oral de bacterias cariogénicas, desmineraliza el
esmalte dental e
incrementa la producción ácida en la placa dental cuando actúa a través de los microorganismos.
Sacarosa: Azúcar común, disacárido compuesto de fructuosa y glucosa considerado como el alimento mas cariogénico de la
dieta humana, siendo un producto fácil de metabolizar por parte de los microorganismos. La colonización del estreptococo
mutans es altamente dependiente de los niveles altos de sacarosa.
Fructuosa: Azúcar natural de las frutas. Responsable de los efectos erosivos sobre el esmalte dental, al consumir frutas.
Numerosos estudios y la realidad cotidiana muestran como al tetero se le agrega azúcar y/o panela u otros endulzantes
cariogénicos relacionado con la gratificación oral que dan los padres a sus hijos creando el habito de estar succionando8-14.
Johnsen en su estudio realizado en 1982 encontró que un 96% de los niños que presentan caries del lactante, duermen con el
tetero en la boca11.
6.3 Huésped susceptible
Aunque la unidad afectada es la pieza dental, en el síndrome de caries del lactante el huésped susceptible es el niño como ser
integral, ya que la cronicidad, y agresividad de la patología influye no solo sobre la cavidad oral sino sobre su entorno sistémico
y psicosocial o sea sobre su calidad de vida3.
Estudios indican que no existe una mayor susceptibilidad a la desmineralización en los dientes de niños con caries del lactante
que en los niños no afectados2. La progresión rápida de la lesión dentro de la dentina esta relacionada con la delgadez de la
capa de esmalte de los incisivos primarios (0.5mm comparado con mas de 1 mm de espesor en los dientes permanentes) se
resalta que el continuo ataque causado por la presencia del estreptococo mutans y el constate aporte de carbohidratos
fermentables en la dieta son los principales responsables de la progresión de las lesiones en los niños que tienen condiciones
de vida adversas8.
Otro factor asociado es la disminución en los niveles de la saliva nocturna, va a producir en el esmalte una hipomineralización
haciendo más susceptible a la caries del lactante15.
Patologías como hendidura del labio y paladar son altamente susceptibles a la caries de los incisivos primarios y se reconocen
como de cuidado dental especial16.
6.4. Comodidad de los padres.
La caries del lactante se presenta en forma de lesiones de caries amplias atribuidas principalmente al uso nocturno del biberón,
el cual contiene algún agente de tipo dulce que va a estar en contacto continuo con el diente13,14 iniciando la
desmineralización, para que así proliferen los microorganismos y sé de la destrucción dental la cual es a menudo difícil de
tratar, por ello es importante examinar y evaluar la interacción de las cuatro variables que determinen la presencia de esta17.
6.5. Medio ambiente
El medio ambiente específico está dado por la dieta; la ingesta de alimentos por vía oral es esencial para el desarrollo de la
caries. Ciertos elementos de la dieta, en especial los azúcares, la panela y otros endulzantes se han correlacionado en forma
constante con la actividad de la caries. Para que los carbohidratos de la dieta causen caries es necesario que sean
metabolizados en la interfase placa-superficie del esmalte por los microorganismos allí presentes. Para ser metabolizados
deben ser biodisponibles, lo cual a su vez depende de las propiedades físicas y químicas del almidón, lactosa y sacarosa,
principales carbohidratos presentes en la dieta infantil.
La sacarosa, la lactosa y otros disacáridos poseen bajo peso molecular, en consecuencia son solubles en saliva, propiedad que
les permite fácil difusión dentro de la placa bioplaca, por lo tanto biodisponibles para ser metabolizados a productos finales,
como el ácido láctico por los microor-ganismos acidúricos presentes en la cavidad oral del niño. Es importante anotar que la
caída del pH a un nivel crítico es inmediata después de la ingesta de sacarosa, pero puede tomar horas después de la ingesta
de almidones, pero eso no quiere decir que los almidones no sean tan cariogénicos, ya que la amilasa que se encuentra en la
saliva es capaz de desdoblar el almidón en glucosa, la cual si es biodisponible.
En cuanto al medio ambiente propicio general, o sea los factores sociales y culturales se puede reflexionar sobre algunos
aspectos de la vida moderna que hacen que nuestro pequeño paciente tenga un alto riesgo de presentar caries del lactante;
estas condiciones son:
Madres cabeza de familia; que deben trabajar durante largas jornadas y se ven obligadas a dejar a sus hijos al cuidado de
terceras personas quienes no tienen la preparación adecuada para suministrarle al infante los cuidados necesarios en cuanto a
su salud oral, utilizando el biberón para que "no molesten" y no " llorén "o sea para entretenerlo y suplir así las necesidades de
afecto y cariño con un biberón; estos niños no reciben una higiene oral adecuada ya que la madre después de su jornada
laboral está cansada o no tiene tiempo para limpiar la boca del bebé y además la mayoría de las veces lo encuentra dormido.
Madres adolescentes que no están preparadas para asumir tal rol y se ven obligadas a aceptar al niño, pero lo ven como un
obstáculo para continuar con las actividades propias de su adolescencia, y utilizan el biberón como pacificador para que no
molesten al resto de la familia.
Niños no deseados que vienen a interferir con los planes de superación personal, dichos padres presentan una baja tolerancia
hacia el llanto del niño y lo callán con el suministro de un biberón, para que concilie el sueño y deje estudiar o dormir.
Padres cuyas creencias relacionadas con el llanto del niño son que cada vez que el bebé llora es porque tiene hambre y
entonces le suministran el tetero.
La falta de integración entre el personal de Salud (médicos generales, pediatras, enfermeras nutricionistas y el odontopediatra)
encargados de vigilar el bienestar del niño, quienes carecen de la motivación sobre la importancia de la salud oral para el
preescolar.
Desde el punto de vista gubernamental y de salud existe una carencia absoluta, en cuanto a programas efectivos de
educación, promoción y prevención de salud oral para menores de cinco años; siempre se ha subvalorado la dentición decidua
o temporal.
6.6. El tiempo.
El contacto frecuente y prolongado del diente con las sustancias cariogénicas, favorecen la disminución del pH y determina la
agresividad. El paso de mancha blanca a cavitación y destrucción coronal es bastante rápido debido al espesor del esmalte
que tiene la dentición temporal que es aproximadamente 0.5mm.
El tiempo es importante en relación con la frecuencia y cantidad de exposición del contenido del biberón y determina la
agresividad de la caries. Derkson & Ponti reportaron que los niños con caries del lactante consumían tetero 8,3 horas por día;
mientras que los niños sanos únicamente consumían durante 2,2 horas al día.
La frecuente administración de tetero o leche materna en la noche y la duración de este hábito se hallan relacionados
directamente, a mayor tiempo en la duración del hábito mayor será la severidad de la caries.
El flujo salivar y la composición de la saliva son determinantes del proceso carioso. Individuos afectados por xerostomía,
presentan más agresividad del patrón de caries. Por el contrario el abundante flujo salivar baña las superficies dentarias y
puede eliminar parcialmente los restos de alimentos de la cavidad oral; además las inmunoglobulinas, los factores inmunitarios
no específicos, minerales y otras sustancias presentes en la saliva afectan el proceso carioso. Lo anterior es de vital
importancia ya que durante la noche la producción de saliva disminuye aumentándose así el riesgo de caries para el niños que
se duerme con el biberón.
Entre las características de comportamiento del lactante y/o los padres que pueden influir con la aparición de caries y otras
alteraciones por el "abuso" de la alimentación están18:
• Llamar la atención de los padres.
• Interacción emocional con la madre.
• Perturbaciones emocionales del niño y sus padres
• Dependencia : desarrollo paternal inmaduro.
• Pacificador para que el niño concilie el sueño
• Malos hábitos alimentarios familiares .
REVISTA DE PEDIATRÍA
7. CARACTERíSTICAS CLÍNICAS.
La exposición frecuente y prolongada a sustancias tales como líquidos azucarados, jugos o leche materna o chupos
tranquilizantes sumergidos en azúcar miel o agua endulzada19, producen un patrón de lesión característico intraoral donde
resultan más afectados los incisivos maxilares superiores, mientras que los menos afectados son los incisivos maxilares
inferiores. Los demás dientes (caninos, primeros y segundos molares) pueden estar comprometidos o no, dependiendo del
tiempo que dure el hábito del biberón. Pero la extensión de la lesión en estos dientes no suelen ser tan severa como en los
incisivos maxilares superiores20. Figura No 2.
Figura No. 2 Hábito del biberón diurno y nocturno obsérvese la destrucción generalizada de los
dientes tanto superiores como inferiores.

La lesión en su forma inicial se presenta como una banda de desmineralización blanca mate a lo largo de la línea gingival, a
medida que progresan las lesiones desarrollan cavidades circundando los cuellos de los dientes en forma de collar blanco o
café y posteriormente en casos avanzados las coronas pueden presentar completa destrucción de los incisivos superiores,
contrariamente los incisivos inferiores permanecen intactos21. Los caninos y molares pueden o no presentar caries,
dependiendo del tiempo en que se encuentran en boca y en contacto con el tetero o la leche materna22.
Las radiografías intraorales no permiten determinar claramente la destrucción bucogingival, por ser una imagen bidimensional.
El examen clínico detallado por parte del especialista es la mejor ayuda diagnóstica. Es por ello que las radiografìas estarán
más indicadas en el momento de instaurar el tratamiento curativo o rehabilitador23.
8. PREVALENCIA
La distribución de la verdadera prevalencia de la caries del lactante, es difícil de encontrar, primero porque los investigadores
no se han puesto de acuerdo en el criterio clínico para el diagnóstico; algunos deciden sobre la base de al menos 4 incisivos
maxilares con caries, otros sobre un mínimo de dos y/o sobre el patrón de caries vestibular o lingual.
Se reportan algunos estudios relacionados con prevalencia de caries del lactante entre los que podemos destacar los
siguientes:
Ripa en 1967 tomó 309 niños ingleses y encontró una prevalencia de 6.8%
Currier y Glinka en 1977 tomaron 180 niños, estableciendo una prevalencia del 5%.
Holt y col realizaron un estudios en Inglaterra con 555 niños encontrando una prevalencia del 3.1% en 1982.
Cook y col, realizaron un estudio entre 1987 a 1990 en una comunidad indígena de Choctaw, encontrando una de las
prevalencias más alta pues fue del 50,2%
Parker y col, en 1989 encontraron una prevalencia de caries de la lactancia de un 24% en una población Caucásica de los
Estados Unidos.
Katz y col, en 1989 realizaron un estudio en las Islas Vírgenes con 357 niños cuyas edades eran de 3 a 5 años estableciendo
una prevalencia del 12%.
En 1990, Eronal y col, encontraron una prevalencia de caries de la lactancia de 9.94% en 224 niños de 2 a 6 años.
Weinstein y col, en 1991 realizaron un estudio con inmigrantes mexicanos en Washington; examinaron 125 niños
encontrándose una prevalencia de caries de la lactancia de 29.6% y la asociaron con bajo nivel educativo de las madres.
Chavarro y col, en unos estudios realizados en el Servicio de Salud Oral del Hospital Pediátrico en 1997, con 228 pacientes,
encontraron una prevalencia del 47% de caries del lactante.
Del estudio realizado en el Hospital de la Misericordia se observó que la mayoría de los padres son de un nivel educativo y
socioeconómico bajo, aunque esto no se puede generalizar ya que también observamos esta patología en otros grupos
sociales y con niveles de educación superior.
Los hábitos de alimentación de los niños están influenciados por los factores culturales, étnicos y socioeconómicos y por lo
tanto el resultado sobre la prevalencia en los diferentes estudios no puede ser extrapolado a otros grupos étnicos, culturales o
de otros paises.
En vista de que las caries del lactante son un problema de salud pública y hay vacíos de conocimiento en nuestro medio, el
grupo de autores de este artículo está realizando un trabajo descriptivo de la prevalencia de caries del lactante en preescolares
de Santafé de Bogotá.
9. SECUELAS DE LA CARIES DEL LACTANTE24-27.
Los niños con caries del lactante presentan diferentes problemas de salud general como:
Diseminación de procesos infecciosos como celulitis, abscesos, osteomielitis y, en varias oportunidades hasta meningitis, que
ameritan tratamiento intra- hospitalario, pues se puede poner en peligro la vida del paciente.
Bajo peso, por lo general presentan el 80% de su peso ideal y se encuentran dentro del percentil 10. Esto porque el dolor
dental dificulta la alimentación; además,las prácticas nutricionales son desfavorables y pueden ser responsables de ambos
problemas, tanto de la caries, como del bajo peso.
Pérdida de espacio para los dientes permanentes, lo que hace necesario tratamientos posteriores de ortodoncia.
Se puede presentar alteración del desarrollo y crecimiento de los maxilares.
Alteraciones del Lenguaje cuando se presenta la pérdida de los incisivos superiores.
Hábitos, como el empuje lingual o la deglusión atípica que conlleva al desarrollo de maloclusiones, como mordida abierta
anterior.
Se pueden presentar también alteraciones emocionales, sobre todo cuando el paciente pierde sus dientes siendo objeto de
burla por parte de los otros niños, dificultándose la socialización de este.
10. TRATAMIENTO
El tratamiento de la caries del lactante va a depender de varios factores como, la edad y el comportamiento del niño; la
extensión de las lesiones y el grado de cooperación de los padres. El primer paso del tratamiento de esta patología es
identificar, controlar y/o eliminar el factor o los factores etiológicos.
Para poder llevar a cabo un buen tratamiento es necesario conocer la historia clínica, familiar y social del paciente; un buen
diagnóstico médico-estomatológico y social. Partiendo de lo anterior se sabe exactamente que es lo que se requiere y cual va a
ser la conducta a seguir con el niño y su núcleo familiar y social, pues en el tratamiento es necesario involucrar a la familia o a
las personas encargadas de cuidar el niño.
Si las lesiones son identificadas en estados incipientes o leves, como por ejemplo en mancha blanca, es posible intervenirlas
para que no terminen en cavitaciones.
El tratamiento debe ir encaminado a modificar los factores de riesgo, con un solo factor que se modifique se reducirán las
posibilidades de presentar la patología. Debe realizarse un análisis de la dieta y los posibles hábitos alimenticios nocivos para
corregirlos.
Una vez controlados los factores de riesgo se procedería al tratamiento curativo. Inicialmente se realizan procedimientos
intensivos de control y limitación de la caries, como la desfocalización, el monitoreo estricto de la higiene oral, y por último, se
realiza un plan de tratamiento definitivo que contempla toda la parte restaurativa y rehabilitadora; pero es indispensable
continuar controlando al paciente, buscando la motivación por parte de los padres y/o acudientes para mantener al niño sano.
Un aspecto importante que se debe tener en cuenta es el costo del tratamiento en estos niños, dada su corta edad; el costo no
es solamente desde el punto de vista económico sino también emocional; por el trauma que se puede generar en el paciente al
tener que someterlo a procedimientos odontológicos que, aunque tengan buen control del dolor, no dejan de ser experiencias
nuevas para el niño que le van a ocasionar malestar, ansiedad e inconformidad; las características de nuestra ley de seguridad
social en cuanto al tratamiento estomatológico de estos niños, son muy deficientes pues son pocas las IPS(Instituciones
prestadoras de salud) que contemplan el tratamiento bajo anestesia general; es más, ni siquiera se contempla la posibilidad
para que estos niños sean atendidos por un especialista ya sea por parte del estomatólogo pediatra o por un odontopediatra,
sino que reciben la atención por parte del odontólogo general quién muchas veces carece de la preparación y la experiencia
para manejar a estos pequeños pacientes y pueden optar por atenderlos deficientemente y simplemente rechazarlos y
recomendarle a los padres que los lleven a la consulta cuando el niño este más grande, para que colabore y no llore y así
poder realizarle el tratamiento curativo; situación que puede agravar el caso clínico del paciente y dejar mayores secuelas.
Ya contemplando el costo económico que representa una adecuada y eficiente atención odontológica para el niño; algunos
autores como Ramos Gómez en 1996 hicieron un análisis de costos de tratamiento en un grupo de niños de inmigrantes latinos
en Tabasco, México y dicen que el costo del tratamiento se incrementa directamente con la cantidad de dientes afectados y la
severidad de las lesiones. El costo promedio es de US$ 40,8 en niños con afección de 2 a 5 dientes y de US$ 173,5 en niños
que tengan que intervenir de 16 a 20 dientes. Por razones relacionadas con el alto costo un gran número de pacientes no
cumplieron las citas para el tratamiento. Situación similar se vive en Colombia- Bogotá en donde los costos de tratamiento
igualmente son altos y eso que aquí no se reconocen honorarios especiales, si es atendido por odontologo especialista o por
odontologo general; las tarifas que se aplican son las mismas, tomando las tarifas del SOAT los costos pueden oscilar entre $
100.000 (sí están afectados los 4 incisivos superiores), hasta $ 250.000 sí además de los 4 incisivos están afectados los
primeros molares (tanto superiores como inferiores). Estos costos se pueden incrementar aún más si el tratamiento es bajo
anestesia general, pues se incrementan derechos de sala de cirugía, exámenes de apoyo, valoración preanestésica,
honorarios del anestesiólogo.
Como podemaC observar los costos económicos son muy altos y son pocos los pacientes que pueden acceder al tratamiento e
igual que en el estudio realizado en México, aquí en Bogotá también son muchos los pacientes que se ausentan de la consulta
por falta de recursos económicos.
11. PREVENCIÓN.
La prevención debe estar enfocada hacia los padres y futuros padres, mediante programas de educación, en los cuales es
importante la interracción con otras áreas de la salud, (médicos, pediatras, enfermeras..) quienes en muchos casos son los que
van a tener mayor contacto con las madres y los niños en sus primeros meses de vida.
La información acerca de la caries de la lactancia debe estar al alcance de todos y no solo en las manos de los profesionales
de la salud.
Esta prevención debe estar orientada hacia la concientización de los padres en cuanto a la importancia de crear hábitos de
higiene oral , el uso racional del biberón, (especialmente el nocturno) y la utilización adecuada de endulzantes.
Por último, aunque la prevalencia de la caries del lactante no se conoce en nuestro país, pues pocos o casi nulos son los
estudios epidemiológicos realizados para menores de cinco años, es sin duda un problema bastante serio para la población
infantil que se ve afectada por esta patología.
BIBLIOGRAFÍA
1. Rowe N. Caries Dental: Principles and Practice of operative Dentistry. 2ª edición: 511-526:1981
2. Ripa L. Nursing Caries. A Comprehensive review. En Pediatric Dentistry. 1988;10(4):268-81.
3. Mora L. La Caries de la lactancia, un problema de educación. Tesis postgrado Estomatología Pediatrica, 1996
4. D.M. O´Sullivan and Tinanoff. Maxilary Anterior Associated with Increased caries Risk in other Primary eeth J. Dent
Rest Decem 1993.
5. Nesrin E, Ece E. A Comparative study of some influencing factors of rampant of nursing caries in preeschool
children.
6. Schulman. JS. Nutrition and oral health of children. Forrester, D.J. Wagner, LM, Fleming J. Pediatric Dental Medicine
Lea and Febiger, Philadelphia, 1981:353-77.
7. Dilley Gj, Dilley DH, Machen JB: Prolonged nursing habit: Aprofile of patients and their families. Journal Dent Child
March- April: 1980:26-31.
8. Eronat N, Edent E. A comparative study of some Influencing factors of rampant or nursing caries in preschool
children. In: Pediatric Dentistry. 1992;16:15
9. Thylstrup A, Fejerkov O. Caries Edición Barcelona. Ediciones Doyma, 1988;11.
10. Johensen D. Characteristic and backgrounds of children with "nursing caries". Pediatric Dentistry 1992;4(3): 218-
24.
11. Dilley Gj, Dilley DH, Machen JB: Prolonged nursing habit: Aprofile of patients and their families. Journal Dent Child
March- April: 1980:26-31.
12. Jaramillo, R. Et col. Estudio clínico de la panela en el biberón como inductor potencial de caries. Revista
federación odontológica Colombiana. Nª 187, Noviembre 95-Marzo 96.
13. Everdingen T, Eijkman M. Hoogstraten J. Parents and Nursing-bottle caries, Journal of dentristy for children 1996;
July -August:271-74
14. Weinstein P, Troyer R, Jacobi D, Moccasin M. Dental experience and parenting practices of Native American
mothers and caretakers: What We can learn for the prevention of baby bottle Tooth Decay 1999;March-April:120-6.
15. O’ Conneli, A. Bowen. Influence of rampant caries in dams on caries activitie in their offspring. Pediatric Dentistry.
1991;13(6).
16. Johnsen DC, Dixon M. Dental caries of primary incisors in children with cleft lip and palate. Cleft Palate Journal
1984;21:104-9.
17. Elice C, Fields H. Failure to trive: Review of the literature, case reports, and implications for dental treatment
Pediatric Dentistry 1990;12(3):185-9.
18. Characteristic and Backgrounds of children width nursing caries. Pediatrics Dentrics by the The American Academy
of Pedodontics, vol 4 Nª 3.1982
19. Garner DE, Norwood JR, Eisensen JE: At-will breast feeding and dental caries: four case reports. Journal Dent
Child 1977; 44:186-91.
20. Dilley Gj, Dilley DH, Machen JB: Prolonged nursing habit: Aprofile of patients and their families. Journal Dent Child
1980;47:102-8.
21. Nesrin E, Ece E: A Comparative study of some influencing factors of rampant of nursing caries in preeschool
children.
22. Kroll R, Stone J. Nocturnal Bottle- feeding as a contributory cause of rampant Dental caries in the infant and young
child. Journal of dentistry for children 1967;34:454-9.
23. Thystrup A, Fejerskov O. La Caries Ediciones Doyma, 1988: 11.
24. Koroluk M. Parental perceptions of the effects of maxilary incesor extractions in children with nursing caries.
Journal of Dentistry for Children. May June 1991;232- 6.
25. Cook H, Duncan W. The cost of nursing caries in a native American Head Start population. The journal of Clinical
Pediatric Dentistry: 1994;18(2):139-42.
26. Riekman G, Elbadrawy H. Effect premature loose of primary maxillary incisor on speech. Pediatric Dentistry
1985;7(2):173-9.
27. Morris A, Bohanan HM, Casullo D. Las especialidades Odontológicas en la practica general. Editorial
Labor:1987;1-38.
http://www.encolombia.com/pediatria35100caries2.htm

hhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh
lactancia materna
Contacto
Blog
¡Novedades!
Inicio

 Odontologia para bebés

 Embarazo y salud oral

 Lactancia materna

 Biberón

 Caries en los dientes de leche

 ¿Como evitar las caries?

 Higiene bucal

 Transmisión de bacterias

 Alimentación y caries

 Flúor y sellantes

 El chupete y el dedo

 Erupción dental

 Traumatismos dentales

 Primera visita al odontopedriatra

 Pacientes especiales

 Cambio de color en los dientes

 Preguntas más frecuentes


¿Sabías que la lactancia materna promueve una buena relación entre los maxilares?
La lactancia materna no sólo tiene
enormes beneficios nutritivos, inmunológicos
y emocionales para el bebé.
Además favorece el correcto posicionamiento
de las arcadas dentarias y con ello,
una buena oclusión dentaria
(buena mordida entre los dientes
superiores e inferiores).

video1/v4/lactancia.flv video1/v4/lactancia.flv
Todos los bebés nacen con una mandíbula "pequeña" en comparación con el maxilar superior.
La succión del pecho ayuda a que la mandíbula "avance" en su posición y con ello se obtiene una mejor relación entre el maxilar y la
mandíbula. Diversos estudios indican que con la ejercitación de los músculos masticadores y faciales al lactar, disminuyen al 50% los
indicadores de maloclusiones (malas mordidas).
Posición de la mandíbula con el pecho y con el biberón
Biberón: posición distal mandibular
Pecho: avance de la mandíbula
La lactancia materna también facilita la respiración nasal del bebé, ayuda a un correcto posicio-namiento de la lengua y a un buen desarrollo
de la musculatura oral, previene patrones de deglución anormales, promueve una correcta forma del paladar, aumenta el flujo salival, entre
muchas otras ventajas.
La mayoría de odontopediatras coincidimos en la gran importancia de la lactancia materna durante los primeros seis meses para el correcto
desarrollo de la respiración, de la boca, de la oclusión (mordida) y de la deglución (tragar los alimentos) durante la infancia.
Lactancia prolongada y caries
La lactancia materna prolongada (después del año de edad si es diurna y/o después de la erupción del primer diente de leche si es nocturna) y
su relación con la caries es un tema de gran controversia.
Al ser la caries una enfermedad infecciosa
multifactorial, estamos convencidos que no existe ningún factor que ocasione la caries por sí solo.
Sin embargo, la mayoría de madres que dan el pecho a demanda durante la noche -momento de mayor susceptibilidad al ataque bacteriano
porque el flujo de saliva es casi nulo-, no limpian los dientes después de la toma, aumentando el riesgo del bebé al combinar la ausencia de
higiene oral con la presencia de un sustrato (leche) sobre la superficie dental.
Debemos agregar que existen también otros factores que pueden aumentar el riesgo de caries tales como: niños que se despiertan varias veces
por la noche a comer (pecho o biberón); tiempo que el niño se duerme con el líquido en la boca; consumo de alimentos azucarados,
insuficiente exposición a fluoruros presencia de defectos en el esmalte (hipoplasias); transmisión temprana de bacterias; entre otros.
Debido a que cada niño presenta un riesgo diferente a desarrollar enfermedades (incluyendo la caries), los padres deben llevar a su bebé con
un profesional para que éste identifique el riesgo de caries individual y las estrategias preventivas necesarias de acuerdo a cada caso.
Nuestros consejos sobre la lactancia son:

 Recuerda que la leche materna no causa caries por sí sola; pero vemos en la consulta muchos lactantes que presentan
caries a edades tempranas cuando la lactancia nocturna se prolonga y se combina con una falta de higiene bucal; cuando el bebé
mama muchas veces durante la noche; cuando el bebé pasa mucho tiempo con la leche en la boca; cuando existen alimentos
complementarios azucarados; cuando no existe la suficiente exposición a fluoruros; cuando el niño tiene defectos del esmalte;
cuando existe una trasmisión temprana de bacterias de la saliva de los padres; etc.

 Empieza con la higiene oral tan pronto como puedas, aunque tu bebé no tenga dientes. Aprovecha el momento del baño
para limpiarle las encías con una gasa, un pañito humedecido o un dedal de silicona.

 Una vez erupcionado el primer diente de leche, disminuye gradualmente la lactancia materna durante las noches. Si
decides no hacerlo, es muy importante que realices la limpieza dental inmediatamente después de la toma.

 Lleva a tu bebé al odontopediatra antes de su primer cumpleaños para que te informe de las medidas para evitar la
aparición de caries y otras enfermedades orales.
http://www.odontologiaparabebes.com/lactancia.html

kkkkkkkkkkkkkkkkkkkkkk

NOTICIAS Y EVENTOS

práctica para una lactancia exitosa


Participa en el Blog de la Dra. Parrilla

https://www.facebook.com/pages/draparrillacom/204836192904646 https://w
ww.facebook.com/pages/draparrillacom/204836192904646
Las Caries Dentales Durante la Lactancia Materna
Por: Ana M. Parrilla Rodríguez, MD, MPH, FABM
El asunto de las caries dentales en los infantes y niños es uno por el cual los pediatras y los dentistas pediátricos están particularmente
preocupados. Cuando se discute el tema de las caries dentales en los niños existe una clara asociación entre la alimentación con botella (el
uso prolongado de la botella en la boca todo el día y acostar a los niños con ella en las noches), y la incidencia alta de caries en los incisores
superiores que comienzan a salir en las superficies blandas de las encías. Basados en la creencia de que el amamantamiento aumenta el riesgo
de caries, algunos investigadores y profesionales de la salud han recomendado que los infantes se desteten cuando los primeros dientes
deciduales salgan. Nuevas investigaciones, sin embargo, indican que el amamantamiento no aumenta el riesgo de caries dentales.
Se ha encontrado que la leche humana no es más cariogénica y que son algunas de las fórmulas para infantes las que pueden disolver el
esmalte del diente, reduciendo significativamente el pH y causando caries dentales y el envolvimiento de la pulpa. En otro estudio realizado
en Grecia se encontró que amamantar a un niño por más de 40 días puede inhibir el desarrollo de caries. Varios componentes de la leche
humana pueden proteger contra el desarrollo de caries. Las inmunoglobulinas (anticuerpos) IgA y la IgG retardan el crecimiento de la
bacteria estreptococo; por otro lado la lactoferrina tiene una acción bactericida contra streptococcus mutans, una bacteria implicada de la
formación de caries. Además, las bacterias cariogénicas no pueden usar la lactosa, la azúcar que se encuentra en la leche materna, tan
fácilmente como la sucrosa.
Algunos asumen que la leche materna es más cariogénica que las fórmulas porque contiene lactosa, la cual puede ser tan cariogénica como
cualquier otra solución de azúcar en una botella; sin embargo, la lactosa está protegida por las propiedades antibacteriales y antienzimáticas
de la leche materna. Además, la lactasa convierte la lactosa en glucosa y galactosa en los intestinos del bebé en vez de en la boca. tc
Los humanos somos la única especie de mamíferos que tienen pérdida significativa de los dientes deciduales. Los antropólogos han evaluado
cerca de 600 cráneos de nuestros ancestros prehistóricos, los cuales por supuesto fueron amamantados (no había fórmula en aquel entonces),
y no encontraron evidencia de problemas de caries dentales o pérdida de los dientes debido a éstas. El problema de la caída o pérdida de los
dientes no ha sido un problema significativo hasta hace 8,000 a 10,000 años atrás. Los antropólogos creen que el aumento en la pérdida de
los dientes se debió principalmente a la llegada del cultivo de cosechas. Algunos antropólogos piensan que hubiese sido un suicidio
evolucionario si la leche materna produjera caries y que la evolución hubiera seleccionado en contra de ella.
Se han identificado algunos factores que pudieran aumentar el riesgo de un infante hacia el desarrollo de caries. Para determinar porque un
infante tiene caries se debe hacer una evaluación profunda de los siguientes factores:tc
- La ingesta de azúcar. Esta es la causa principal del deterioro de los dientes. Esto incluye la azúcar en los alimentos por otro lado nutritivos,
tales como los jugos, cereales, panes, pasas etc. También aplica a los medicamentos con azúcar. Es importante entender que no es la cantidad
de azúcar a la cual el diente esté expuesto, sino la frecuencia de exposición lo que es la clave para desarrollar las caries.
- El momento en que se introducen a la boca del bebé y la cantidad de bacterias que causen caries. Se sabe que el steptococcus mutans está
presente en mayor concentración en las bocas de los infantes y niños pequeños que tiene caries que en las que no tienen. Estas bacterias se
transfieren más comúnmente de la madre. Las madres con niveles elevados de esta bacteria usualmente tienen un historial de caries y tienden
a pasar la bacteria a sus bebés.
- Xerostomia o resequedad de la boca – falta de flujo salivar.
- Enfermedad o estrés de la madre durante el desarrollo fetal.
- Pobres hábitos alimenticios de parte de la familia.
- Pobre higiene oral en el niño y en el resto de la familia.
- Genética familiar. Se ha encontrado que algunos factores de la saliva de ciertos individuos pueden proteger contra el desarrollo de caries;
estos incluyen una disminución en la agregación de las bacterias al esmalte y la regulación del pH que inhibe que se destruya el esmalte.
Podemos concluir que la evidencia no apoya una relación causal entre el amamantamiento y las caries en los infantes y que la leche materna
y el amamantamiento por sí solos no causan éstas. Sin embargo, los infantes exclusivamente amamantados no son inmunes al desarrollo de
caries ya que existe un sinnúmero de factores implicados en esto. Estudios recientes han documentado que el amamantamiento provee,
además, otros beneficios orales y dentales incluyendo un riesgo reducido de malaoclusión, en el colapso de las formas faciales, ronquido y en
la apnea obstructiva del sueño.
A los infantes que desarrollan caries no se les debe destetar ni tampoco achacar al amamantamiento frecuente en las noches como la causa de
éstas. Todos los infantes deben recibir una higiene dental adecuada una vez le salen sus primeros dientes. Aquellos infantes con historial
familiar de caries deben tener una evaluación dental temprana (7 a 9 meses de edad) y los que no tienen historial familiar deben tenerla a
no más tardar de los 12 meses de edad. Nunca se debe dejar a un infante dormir tomando algún líquido de una botella que no sea agua.
Por fin, en mayo de 2000 la Academia Americana de Dentistas Pediátricos, endosó la política de la AAP sobre lactancia materna, y se alejó
de su ridícula política de recomendar el destete de los infantes una vez le salieran los primeros dientes.
Ana M. Parrilla Rodríguez, MD, MPH, FABM

Referencias:
1. American Academy of Pediatric Dentistry, Council on Clinical Affairs. Reference Manual 2000-2001 – Oral Health Policies.
Breastfeeding, p19. 2000.
2. Lawrence R A, Lawrence RM. Breastfeeding: A Guide for the Medical Profession. 6th. Ed. St. Louis: CV Mosby Co. 2005.
3. Merewood A, Philipp BL. Breastfeeding Conditions and Diseases A Reference Guide. Amarillo, Tx: Pharmasoft Publishing. 2001.
4. Palmer B. Breastfeeding and Infant Caries: No Connection. ABM News and Views - The Newsletter of The Academy of Breastfeeding
Medicine. 2000; 6: 27,31.

http://www.draparrilla.com/caries.html
bbbbbbbbbbbbbbbbbbb
La lactancia no contribuye a la caries
HealthDay
Traducido del inglés
Según un estudio, los problemas dentales de los niños que están aprendiendo a caminar se relacionan más probablemente con la pobreza y el
tabaquismo materno
La lactancia no aumenta el riesgo de caries de los niños que están aprendiendo a caminar, según asegura una investigación reciente.
Las caries afectan a uno de cada cuatro niños pequeños, pero los factores que más contribuyen son probablemente fumar durante el
embarazo, ser pobre o ser estadounidense de origen mexicano, según sugiere el estudio en la edición de octubre de Pediatrics.
El hallazgo le da un nuevo giro al debate acalorado entre los defensores y los críticos de la lactancia.
La American Academy of Pediatrics recomienda la leche materna para todos los niños durante su primer año de vida. Sin embargo, los
expertos de la salud se han preocupado desde hace tiempo por la caries que aparece en los primeros dientes de leche, sobre todo en los bebes
que lactan toda la noche.
Los investigadores de la Universidad de Rochester y de la Universidad de Nueva York analizaron datos demográficos, información de salud
dental e información sobre la alimentación de los bebés de 1,576 bebés que estaban a prendiendo a caminar, cuyas familias participaron en el
National Health and Nutrition Examination Survey de 1999 a 2002.
Entre esos bebés, el 27.5 por ciento tenía al menos un diente que había sido empastado o extraído por causa de una caries. Uno de cada diez
tenía caries grave al principio de la infancia. Poco más del 40 por ciento de los niños de las familias estadounidenses de origen mexicano
tenían al menos una caries. Entre los niños que vivían por debajo del nivel federal de pobreza, el 41.3 por ciento tenía al menos una caries y
el 18.6 por ciento tenía caries grave al principio de la infancia. Los niños cuyas madres tenían 19 años o menos en el momento del
nacimiento también estaban en mayor riesgo de la enfermedad.
El estudio comenzó como un esfuerzo por comprender la relación entre el amamantamiento y la salud oral de los niños que estaban
aprendiendo a caminar, aunque el análisis descubrió factores de riesgo mucho más contundentes.
En cierto grado, los datos muestran que el amamantamiento no protege contra la caries, según Hiroko Iida, autor del estudio, porque otros
factores niegan los efectos positivos de la práctica. Iida es residente de salud pública dental de la Oficina de salud dental del Departamento de
salud del estado de Nueva York.

a rtic u lo _ la c ta n c ia .jp g

FPRIVATE "TYPE=PICT;ALT=articulo_lactancia.jpg"
"El amamantamiento se relacionó con un riesgo 40 por ciento menor de caries del inicio de la infancia, hasta que incorporamos al análisis
factores como la situación de pobreza, la edad de la madre en el momento del nacimiento y el tabaquismo materno antes del nacimiento",
explicó. Adicionalmente, los niños estadounidenses de origen mexicano amamantados y los niños pobres amamantados tenían más
probabilidades de tener caries que otros niños, incluso al ser comparados con otros que no habían sido amamantados.
La preocupación sobre la leche materna y el riesgo de caries se corroboró parcialmente en un estudio de 2005 que mostró que es más
probable que la leche materna humana promueva las caries a que lo haga la leche de vaca.
La Dra. Ruth Lawrence, pediatra, defensora de la lactancia y coautora del estudio con animales, reconoció que los resultados instaban a los
opositores de la lactancia nocturna.
Permitir que un bebé duerma con una botella que contenga cualquier cosa que no sea agua pura conlleva un mayor riesgo de estimular las
caries que la lactancia nocturna, aseguró Lawrence, quien dice que usaría el estudio actual para tranquilizar a las madres lactantes.
Sin embargo, Paul Casamassimo, vocero de la American Academy of Pediatric Dentistry (AAPD), fue más precavido.
"La literatura en general no tiene claridad sobre la relación entre la lactancia y la caries dental, aunque los informes y algunos estudios han
encontrado relaciones", dijo.
Aunque la AAPD no tiene una política establecida sobre la lactancia, Casamassimo aseguró que la academia trata de educar a los padres para
minimizar el riesgo de diabetes por cualquier alimento o bebida.
Aparte de la lactancia, Iida argumentó que los odontopediatras y los practicantes de salud pública deberían dirigir los esfuerzos directos a la
salud oral hacia los padres de hogares de bajos ingresos, madres fumadoras y hogares estadounidenses de origen mexicano.
Casamassimo arguyó que la relación entre la pobreza y un mayor riesgo de caries es bien conocida y podría explicar también, en parte, el
mayor riesgo para los niños estadounidenses de origen mexicano.
"La correlación entre la pobreza y la caries es antigua, constante y se considera que es el reflejo de una combinación de falta de
conocimientos sobre la salud, acceso limitado a la atención, dieta inadecuada, quizá un cuidado prenatal inadecuado y un cuidado personal
inadecuado", aseguró Casamassimo. "Simplemente ser de origen mexicano refleja el hecho de que con frecuencia están entre los más pobres
y, por consiguiente, reflejan los factores ya mencionados",
El tabaquismo materno también se relacionó intensamente con el riesgo de caries de los bebés, aunque el análisis no dio pistas sobre la raíz
de dicha relación.
"Como lo señalan los autores [del estudio], las madres tienden a fumar antes, durante y después del embarazo, por lo que el niño podría tener
un desarrollo inadecuado en el útero y al principio de la vida, lo que conduce a un mayor riesgo de caries", aseguró Casamassimo, quien
sugirió que fumar podría afectar el sistema inmunitario del niño o posiblemente darle sustento a bacterias de la boca de la madre que podrían
ser transferidas al niño. "Fumar puede ser una medida sustituta de algún factor que no necesariamente se haya tenido en cuenta en el estudio.
En otras palabras, podría haber una contribución a la susceptibilidad a la caries que no se está midiendo o ni siquiera se conoce".
El cuidado dental preventivo es importante para los niños que están aprendiendo a caminar, según Iida, pues la información señala que las
caries pueden comenzar a desarrollarse tan pronto haya dientes. Uno de cada diez de los niños de dos años del estudio ya tenía una caries.
Entre los niños de cinco años, casi la mitad (el 44 por ciento) tenía al menos una caries.
http://enelembarazo.com/articulos/articulo.shtml?id=3mZKqSijjrHTt2aBaPOv9NcJUtldCJ

También podría gustarte