La taxonomía de Bloom es un modelo que propone ordenar aspectos educativos con el
propósito de ilustrar al docente para atender los sistemas de enseñanza-aprendizaje
La taxonomía inicial, creada en los años 50´s ha evolucionado precisamente para adaptarse a los cambios realizados en los sistemas educativos y hoy en día a la tecnología de la información.
Mi padre solía decir “Pobre del alumno que no supera al maestro” y una muestra es precisamente que alumnos de Bloom (psicólogo por cierto), pudieron generar una actualización en los años 2000 a la taxonomía de su maestro. El primer cambio fue dar la vuelta de sustantivos como base para exaltar los verbos para atender el dominio cognitivo, sin embargo éstos no se aplican a actividades en aulas.
La Taxonomía de Bloom aplicada a la era digital nos permite conocer las diversas formas de aprender de los alumnos y sus capacidades, muchas veces no conocidas ni por ellos mismos, esta taxonomía no se aplica únicamente para el campo cognitivo, pues contiene métodos y herramientas, que permite un proceso que aplica precisamente el conocimiento.
Sin duda no puede separarse el contenido del conocimiento, nuestros alumnos deben generar conocimiento, apoyado desde luego por el asesor (docente), aplicando el proceso del aprendizaje.