- En una cacerola se mezclan los tomates, el azucar y el jerez, calentar a fuego
moderado sin dejar de mover, reducir hasta que la mezcla tenga consistencia de mermelada. - machacar un poco las chuletas de cordero con un mazo para carne. apanarlas de la siguiente manera: la leche se mezcla con el huevo, envolver las chuletas con la harina, golopearlas un poco para que se separe el exeso de harina, pasarlas chuletas por el batido de huevo y leche, sacarlas y cubrirlas completamente con el pan molido sazonado, cuidando que las chuletas esten completamente cubiertas pero sin exeso de pan. - Calentar el aceite en una sarten grande, freir las chuletas hasta que se doren por todos lados, - Finalmente justo antes de servir se colocan las chuletas en una charola para hornear, se bañan con la mermelada de tomate y se espolvorea el queso, se hornean a 450°F ( 230°C ), hasta que el queso se derrita y se dore. Se sirve inmediatamente.