Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
El Proceso de Captación es vital para una inmobiliaria, permite obtener “la mercadería para vender”, como se
dice en la jerga del negocio en Argentina.
Es claro que sin inmuebles para ofrecer no hay inmobiliaria, por lo tanto, este proceso tiene una importancia
significativa para el desarrollo de la actividad.
Ya hablamos en este BLOG del Proceso de Captación y dijimos que lo componen 4 actividades:
La búsqueda de contactos
La realización de tasaciones
El seguimiento y la negociación
La obtención de la Autorización del propietario
En este artículo nos referiremos a la Búsqueda de Contactos, actividad compleja porque estamos en la etapa
intangible del negocio inmobiliario: ¿Cómo le demostramos al propietario de un inmueble que somos la mejor
alternativa para ofertar su propiedad en el mercado y ser exitosos en la acción?
Más aún si es un corredor inmobiliario novel, sus promesas no pueden ser convalidadas por su historia, por lo
tanto, dependerá de sus habilidades de comunicación para generar confianza en sus posibles clientes.
La base de este trabajo es mostrarse al propietario como una opción confiable y creíble. Esto se genera
practicando determinados valores personales y habilidades sociales. (Ver Perfil del Corredor Inmobiliario en el
BLOG) y acumulando buenas experiencias en la realización de contactos.
Generar en las personas los sentimientos de confianza y credibilidad implica el desenvolvimiento de un trabajo
de exposición profesional permanente, pues ningún sentimiento positivo hacia una persona se produce
inmediatamente. Estos sentimientos se deben desarrollar y cultivar de forma sostenida, para luego gozar del
beneficio de los resultados.
Fuentes de contactos:
Contactar desarrolladores
Proponer proyectos de desarrollo inmobiliario a inversores
Esta clasificación tiene un criterio: las primeras actividades requieren más tiempo que dinero, mientras que las
últimas requieren más dinero que tiempo personal. Las inmobiliarias que manejan un modelo de negocio masivo
utilizan la publicidad y su trayectoria como fuente principal de generación de contactos, mientras que aquellas
que buscan un trato más personalizado se inclinan por las primeras fuentes de contactos.
Cómo prepararse
Antes de iniciar el trabajo de captación el Corredor Inmobiliario debe tener en claro a qué negocio se quiere
dedicar para saber por dónde canalizar sus esfuerzos. ¿Le interesa captar propiedades residenciales o le interesa
el negocio de oficinas, o los locales comerciales, o los establecimientos industriales o logísticos? Definir el foco
del negocio permitirá ahorrar energía. Pensar en dedicarse a todo no es conveniente ya que son mercados
diferentes con características disímiles que no son fáciles de manejar para un novel en la materia. Además
recordar lo que dice el refrán: “el que mucho abarca poco aprieta”.
En segundo lugar deberá preparar cuidadosamente, en forma prolija y con la ayuda de un diseñador gráfico, su
presentación personal. Qué entiendo por presentación personal:
Quiero ser muy explícito en este tema de la presentación personal. En esta etapa el negocio es totalmente
intangible (no estoy ofreciendo un producto que se puede tocar, estoy ofreciendo un servicio que no se puede
tocar, no se puede ver, no se puede probar), por lo tanto mi interlocutor comenzará a juzgarme por lo que
muestro, por lo que hago, por lo que digo, por lo que entrego.
Es la primera impresión que causaré en el otro y no tengo una segunda oportunidad para corregirla si no me sale
bien.
Una tarjeta personal bien diseñada, impresa con modernas técnicas, con mi fotografía, dice que estoy “dando
la cara”, que soy una persona prolija. Un folleto tipo díptico (una hoja doblada al medio) donde explicite mis
servicios, hable de mi formación y establezca un marco de valores bajo los cuales quiero manejar las relaciones
con mis clientes, habla de organización, de seriedad.
En el otro extremo, mis datos personales escritos en un papel, con una letra que no se entiende, la utilización
de viejas tarjetas personales en las que tacho datos que ya no son válidos, muchos conceptos hablados que no
presento por escrito, y cosas por el estilo hablan de desorganización, de falta de profesionalismo. El interlocutor,
posible cliente, se preguntará: ¿así manejará la venta de mi propiedad?
Por lo tanto realizar un desembolso de dinero en un diseñador gráfico que prepare mis elementos de
presentación no son un gasto sino una inversión.
A esa preparación visual se deberá agregar una preparación intelectual, teniendo conocimiento de los temas que
serán objeto de la comunicación, estando actualizados de la situación del mercado inmobiliario del lugar de
trabajo, teniendo conocimiento de la Buenas Prácticas de Negocios de la actividad inmobiliaria.
http://tecnicoinmobiliario.blogspot.com/search/label/Administraci%C3%B3n%20Inmobiliaria