Está en la página 1de 15

INTRODUCCION

El arte de la actuación, a través de un elemento fundamental en el teatro e


imprescindible desde un punto de vista pedagógico, es el uso de la Máscara
Teatral.

Lo que hoy nos concierne es la Máscara con M mayúscula. ¿Cuál es su


significado? ¿Por qué el surgimiento de la máscara? Esta es la gran pregunta.

Al principio, el hombre en contacto directo e inmediato con la naturaleza y sus


fenómenos, algunos feroces y brutales como terremotos, huracanes,
inundaciones, plagas, no poseía todavía una visión global y al mismo tiempo
sintética del universo.

La conjunción de fuerzas superiores y antagónicas, incomprensibles todavía


como el contraste entre el la noche y el día, el agua y el fuego, provocan un
profundo sentimiento de miedo que el hombre trata de controlar de dos formas:
una, a través de la adoración a esas fuerzas, lo que nos llevará a lo sagrado y
ritual. La otra, a través del engaño, lo que nos llevará inevitablemente al teatro.

En aquel entonces el hombre que era animista, es decir, que pensaba que todo
en la naturaleza poseía alma, adoraba árboles, piedras y animales que tenía
necesidad de representar con el fin de establecer una más directa y profunda
comunicación. Y lo hace tanto en imágenes esculpidas en piedra, barro o
madera como asumiendo él mismo, a través de la máscara corporal y facial, la
identidad de lo que se convertirá en una deidad o divinidad.

Si partimos de la base de que la máscara es un objeto sagrado que representa


una divinidad, y, por lo tanto un ser diferenciado, es fácil comprender la
necesidad del hombre de darle vida, de traerla del mundo invisible al mundo
visible ante el grupo o la comunidad. Es en ese momento en el que se produce
un acto mimético de formas, movimientos y dinámicas de esa deidad, que el
hombre anima a través de una danza, pretendiendo también con ello
perpetuarse eternamente en el tiempo.

La máscara teatral fue introducida por los etruscos en Occidente y no por los
griegos o romanos como muchos todavía piensan. Máscara significa persona,
del latín personae, y, éste a su vez del etrusco phersus.

No obstante, todos los grandes teatros del mundo, el Teatro Nô, el Kabuki, el
Kiogen, la Ópera de Pekín, el teatro balinés, la Comedia del Arte y todo el teatro
griego y latino se articulan a partir del objeto máscara.

El uso de la máscara teatral obliga a usar el cuerpo de una forma no cotidiana,


es decir, obliga a movimientos y formas extra-cotidianas.
Esta extra-cotidianeidad impone unas exigencias. La primera y más importante
es de ámbito físico: el CUERPO, y dentro de éste todo un juego de actitudes.

La actitud nos lleva a la representación de un estereotipo. Dado que la cara es


el espejo del alma, lugar privilegiado de la expresión humana, la máscara será
un medio para dar vida a una personalidad, para poner en valor las
características de toda una personalidad o carácter.

Pero es a principios del S.XX cuando la máscara se introduce en la formación


del actor, como elemento fundamental para devolver al teatro y al actor la
importancia del cuerpo y de lo físico en la actuación.

Algo que el mercantilismo y la decadencia del actor del XIX, había perdido,
cayendo en la grandilocuencia del texto y el gesto. Todos los grandes
renovadores del teatro en el S.XX vuelven su mirada a Oriente y a nuestra
commedia dell arte occidental, basado en el trabajo con el cuerpo y la máscara,
así podemos destacar a Artaud, Jarry, Meyerhold, Brecht, Vajtangov,
Grotowski, Kantor, Barba y sobre todo Jacques Copeau y posteriormente
Jacques Lecoq basan su pedagogía en el trabajo con la máscara neutra o noble
en la formación del actor.

La máscara neutra es una máscara única, la Máscara de todas las máscaras.


Es la máscara de base que se convierte en el punto central de la pedagogía de
Lecoq.

Es un objeto especial. Un rostro, llamado neutro, en equilibrio, que sugiere la


sensación física de calma. Debe servir para sentir el estado de neutralidad
previo a la acción, un estado de receptividad a lo que nos rodea, sin conflicto
interior. Acrecienta esencialmente la presencia del actor en el espacio que lo
circunda. Lo sitúa en un estado de descubrimiento, de apertura, de
disponibilidad para recibir. Le permite mirar, oír, sentir, tocar las cosas
elementales con la frescura de la primera vez. Cuando el actor conoce el
equilibrio expresa mucho mejor los desequilibrios de los personajes o de sus
conflictos. Con la máscara neutra se trabajan los tres aspectos fundamentales
del juego actoral: el espacio, el movimiento y el ritmo-dinámica.

Posteriormente Lecoq introduce en su pedagogía de la creación el trabajo con


la máscara larvaria emparentada con el clown (la máscara más pequeña del
mundo), el trabajo con máscaras de carácter cercanas al personaje dramático,
y por supuesto la máscara de la commedia dell arte que a diferencia de las
demás permite ya, el uso de la palabra.

Bajo todas las máscaras, expresivas y máscaras de comedia del arte existe una
máscara neutra que sostiene todo el conjunto.

Las máscaras expresivas se pueden clasificar en: máscaras larvarias,


máscaras de carácter y máscaras utilitarias. Las máscaras larvarias son formas
inacabadas de la figura humana; puntiaguda, redondas, ganchudas, ovaladas,
donde la nariz tiene una gran importancia, es la que dirige. Son, pues, rostros
no terminados que permiten un juego amplio, simple y elemental. Las hay más
animales y otras más humanas. A parte de su propio valor, pueden resultar muy
prácticas y útiles como preparación al clown.

Las máscaras de carácter están más elaboradas, siendo más concretas en los
detalles. Tienen necesidad de pequeños movimientos para producir un gran
juego. La máscara expresiva hace aparecer las líneas maestras de un
personaje.

Estructura y simplifica la actuación, ya que transmite al cuerpo las actitudes


esenciales. Depura la actuación, filtra las complejidades de la mirada
psicológica, impone actitudes guía al conjunto del cuerpo.

Si bien puede ser muy sutil, la actuación con máscara expresiva se apoya
siempre sobre la misma estructura básica que no existe en la actuación sin
máscara. Por eso este trabajo es indispensable para la formación del actor.

La máscara expresiva puede ser abordada de dos maneras: una, buscando la


psicología del personaje, lo que lleva a un determinado comportamiento, a
movimientos corporales específicos de los que surge una determinada forma;
del interior al exterior.

La otra, dejándonos guiar por la forma que nos sugiere la estructura de la


máscara. Ésta viene a ser entonces como un vehículo, transportando todo el
cuerpo por el espacio, con movimientos concretos que hacen aparecer el
personaje; del exterior al interior.

Cada máscara larvaria o de carácter se puede jugar de dos formas: el juego de


la máscara en sí misma, y el de la contra-máscara; lo mismo sucede con los
personajes. Sólo la máscara neutra no tiene contra-máscara. Todas las
máscaras enteras son mudas. Esto no quiere decir que la palabra esté
prohibida y que los gestos deban remplazarla. Es suficiente con ir a las regiones
donde la palabra no es todavía posible o ya no es más posible.

La Commedia dell arte, está considerada como la representación de más alto


nivel al que ha llegado el teatro de la máscara en Occidente, ha influido
profundamente y contribuido en el nacimiento del teatro isabelino en Inglaterra,
la comedia francesa en Francia y el teatro del Siglo de Oro español.

La comedia del arte se apoya en las pasiones del ser humano llevadas hasta
sus últimas consecuencias. Los personajes, dejándose llevar por sus deseos,
expresan lo absurdo de nuestros comportamientos. Conocerla es pues
indispensable para aquel que quiere hacer del teatro su elección profesional.
Gran depósito de actores-improvisadores, la comedia del arte ha recorrido el
tiempo durante más de dos siglos y viajado por toda Europa desde su país
natal: Italia. Estos actores eran profesionales que interpretaban el mismo
personaje durante años (muchas de las veces durante toda una vida) y
transmitían sus conocimientos de padres a hijos.

El personaje tipo era reinventado por la personalidad del actor que lo hacía
diferente cada vez.

En la comedia del arte no hay tiempo para la meditación. Es un juego de acción,


actitud y generosidad donde las pasiones humanas se muestran directa, rápida
y espontáneamente al público con una profundidad, grandeza y extensión
llevadas hasta sus últimas consecuencias, revelando finalmente lo más
absurdo del comportamiento humano. Es un teatro que no tiene nada que ver
con un divertimento elegante; todo lo contrario, expresa la urgencia de vivir,
más cercana a la supervivencia que a la vida misma la cual es ya un lujo.

Teatro popular, hecho por y para el pueblo, con personajes del pueblo en su
ingenuidad así como en su inteligencia. La comedia del arte jerarquiza la
sociedad de una manera estable, sin revueltas del servidor al cuidado de su
amo. Pero cada uno se las arregla, con todos los compromisos posibles, para
existir y satisfacer sus más inmediatas necesidades. Todo ese mundo coexiste
en una convivencia en la que cada uno intenta engañar y confundir al otro y cae
en la trampa (muchas veces su propia trampa) irrisoria. La sonrisa no existe;
reímos o lloramos.

En la comedia del arte la palabra no puede instalarse si la acción no existe; el


gesto, la actitud, la acción y palabra se encuentran unidos y se expresan al
mismo tiempo.

La comedia del arte es esencialmente trágica y gira en torno a temas


fundamentales como el miedo, el hambre, el poder, el amor, el dinero. En ella
encuéntrense y aglutinan todos los estilos teatrales.

Un teatro total donde el cuerpo y el texto, la máscara, lo físico y lo psicológico,


la danza, la música y la acrobacia forman parte del mismo universo teatral.

INFORME

SEGUIMIENTO DEL TRABAJO CREATIVO DE LOS ALUMNOS DEL VI


CICLO DE ACTUACION TEATRAL MUESTRA DEL TALLER DE
CONFECCIÓN Y EL USO DE LA MASCARA EN EL TRABAJO DEL
ACTOR.

Agradecemos de manera profunda, al maestro Marco Ledesma, por habernos


dado ésta valiosa oportunidad, de poder concluir con el objetivo final del
Taller: hacer la muestra final del taller de máscaras, en su uso, en el trabajo
individual y colectivo del actor.

Asimismo a la Dirección de la escuela, en la persona de la directora Juana


Vega V. por haber hecho eco de este pedido.

Día 22 de Diciembre.

Se vino con ideas para poder encaminar la creación. Después de escuchar a


cada participante su idea, sobre qué tema trabajar, se llegó a la conclusión
de realizar un trabajo, cuya temática principal uniera el uso de las dos
máscaras ( Media máscara y máscara completa). Antes de empezar vimos
dos videos, uno sobre una historia posible a realizar, que al final quedó
descartada. Y la segunda fue “El Actor y la Máscara”, sobre Demostración
pedagógica de Ana Vázquez de Castro y Donato Sartori.

(https://www.youtube.com/watch?v=dDVOicIHfmU)

Se decidió recrear un ritual como eje principal de la historia. De esta manera, al


necesitarse una ofrenda humana, se pidió que Paul Ruiz asumiera ese rol.

Luego se trabajó teniendo en cuenta los siguientes puntos:

Cuerpo- Voz-Espacio-Tempo- Ritmo , teniendo en cuenta el uso específico de las


máscaras, poniendo énfasis en que eran ellas, quienes deberían guiar el instrumento
del actor, en toda su magnitud y complejidad.

Se pudo crear la primera parte de la estructura de la historia a contar, en la que se


usaba solo la media máscara.

Por la premura del tiempo, se acordó trabajar todo el día, todos los días previos a la
muestra. Se usó el espacio de la Concha Acústica de Mansiche.

El horario fue: 9 A.M. a 2 P.M. – (Almuerzo grupal) – 4P.M a 8.P.M.

Día 23 de Diciembre

Al día siguiente, se revisó lo creado el día anterior, se ajustó la estructura,


teniendo en cuenta: Precisión de las acciones-Cuidado del uso del cuerpo-
La voz- El espacio- y el Tempo –Ritmo y la Dinámica. Y teniendo en cuenta
que ni la máscara, ni el alumno actor, deberían perder su presencia, al
llevarla en el rostro de cada participante. Al mismo tiempo no perder de
vista que quien modificaría el instrumento del actor, su cuerpo, seria el
tomar conciencia, de estar llevando una máscara. Hubo momentos en
blanco con respecto a cómo continuar con la historia, paralizaba al grupo,
nos dábamos pequeños descansos, la mayoría quería resolver desde la
racionalidad, otros desde la improvisación, al final una mezcla de ambas
posiciones nos dieron los posibles caminos a seguir. Se llamó al Maestro
Marco Ledesma para preguntarle sobre el hecho de estar uniendo, en una
sola historia, a las dos máscaras. Nos dio las indicaciones precisas. Sobre
todo lo más importante, sobre el uso de la máscara, por parte del alumno
actor. Que era, no olvidar que el actor está para usar su instrumento y
posibilidades actorales subordinadas al uso de la misma. La máscara no
esconde al actor, lo desnuda, le da muchas posibilidades para reconocer
sus registros actorales. La contención y dosificación de su energía, una otra
manera de encontrar su interioridad y expresividad en la escena. También
se le preguntó sobre el uso de un vestuario único, nos aclaró sobre lo
específico y diferente en el vestuario de los personajes, que nacían
precisamente de las distintas máscaras creadas, ser específicos y
diferentes en todo sentido. Se pudo crear la segunda parte y el final de la
historia. También nacieron las ideas sobre elementos a usar, a partir de este
ritual teatralizado, imágenes, símbolos, sonidos, textos, música etc. Este día
hicimos una sesión de fotos sobre el trabajo creativo y sobre las máscaras
para elaborar un aviso publicitario de la muestra a realizarse el día 26.

Se trabajó todo el día. En el mismo lugar.

Día 24 de diciembre

Hubo un calentamiento grupal para concentrar una energía grupal. Se hizo


la memorización de los textos elegidos. Se ensayó toda la creación enfocando
el trabajo en su totalidad y específicamente la incorporación de ideas finales
sobre el ritual y la parte segunda sobre la catarsis y el clímax de la
historia. La participación y relación con el sacrificado. Se decidió cómo
estaría, qué elementos escenográficos se usarían y se descartaron los
pensados al inicio. Pues lo más importante era el trabajo y uso con la
Máscara. Se puso énfasis en que a pesar de ser un trabajo grupal, se crearon
momentos individuales, en que cada uno mostrara el uso de las máscaras
para poder ser exitosos en la evaluación. Nuevamente hubo un poco de
tensión creativa, pero que al final se resolvió de la manera más democrática,
en la que todos quedaron de acuerdo con el final de la historia. Ayudó
mucho las preguntas de: ¿Porqué ¿Para qué? ¿Qué pasa? ¿Qué se quiere
contar? Y también el tener claro el conflicto, objetivos de los personajes y
súper-objetivo de la historia.

Se volvió a trabajar en el mismo espacio y en el mismo horario.

El Día 25 no se ensayaría y quedamos en encontrarnos el día miércoles


26 a las 7 de la mañana.
ANEXOS:

Fotografías
VIDEOS:

https://www.facebook.com/jerickcito.leondiaz?ref=br_rs

https://www.facebook.com/jerickcito.leondiaz?ref=br_rs

PARTICIPANTES:

ERICH ALVA RUEDA

ERIK LEON DIAZ

JEPSY TORRES LUNAVICTORIA

VICENTE PAUL RUIZ ATOCHE

SARA VEGA

MARIA DE LOS ANGELES VERA VALDERRAMA

También podría gustarte