EL CONJURO N�HUATL: UN �LENGUAJE DIFICULTOSO�

Durante la primera parte del siglo XVII, influidos por la contrarreforma, un grupo
de
p�rrocos emprenden una serie de campa�as contra las pr�cticas ind�genas tanto en el
centro de M�xico como Yucat�n:
Obedeciendo los diversos criterios teol�gicos y pol�ticos puestos en juego por
los extirpadores y los obispos que los apoyaban, estas extirpaciones se
desarrollaron
pragm�ticamente y dentro de ciertos aislamientos social y teol�gico,
en diversas comunidades ind�genas. Entre las principales campa�as de la
primera mitad del siglo XVII, se cuentan las siguientes: Pedro S�nchez de
Aguilar en el partido de Tizim�n (1597-1605); Bocanegra, Ponce de Le�n,
Prabes, Rinc�n y Tobar en el valle Toluca (1610); Ruiz de Alarc�n en las antiguas
comarcas de cohuixcas y tlalhuicas al suroeste del valle de M�xico (1613-1629);
De la Serna en Tenantzinco, Xalatlaco y Zacualpan (1620-1640); Balsalobre en
San Miguel Sola (1635 y 1654-1657); Villavicencio en pueblos chochos en
Puebla (1680-1690); y m�ltiples generaciones de dominicos y de p�rrocos
seculares en diferentes regiones de Oaxaca (1560-1704). (Tav�rez 1999: 206-
207)