as vias de comunica
pal
LOS PUENTES
DE HUERGO:
de Gales a la “chacarita”
por RENE LONGONI Y LUIS P. TRAVERSA'
EI problema los caminos en la campafia
#ongerense era de larga data y el desarrollo-de la
iat siglo XIX. exigia soluciones inmediatas.
8 se iniciaron los primeros estudios para 4
emprender la construccién de puentes en los carrinos.
rincipales surcados por arroyos y-rios. El ‘ingeniéto
Luis HUergo tue qilen asumié la responsabilidad oi
nearar el primer Plan’ Géneral de Cofstruétion ‘dé
-emla provincia de Buenos Altes;
En’
Pag. 72 * Tove xs Historia N° 415En las décades previas ala Or-
ganizacion Nacional, la situacién
vial en la campatia bonasrense no
resultaba muy diferente a la que
veniapresentando desde sighis an-
teriores. En laanomiaespacial dela
“pampa barbare", atin sin alam-
brar, las viejas “rastriladas” de los
aborigenes olos masrecientes ras-
‘ros del paso de ganado y decarte-
tas, indicaban la traza que unia
pueblos, postas y estancias: hue-
llas mas 0 menos profundas en sus
suels blandos. En les temporadas
Ge lluvia, muchos de estos ceminos
se volvien intransitables y el paso
de fos numerosos arroyos y
rios que surcan el
SSS
AS
temitorio, requeria de amplios ro-
deos —a veces de hasta 50 le-
quas— para evitar peligros y pérdi-
des.
Los largos y costosos viajes no
constituyeron un problerra serio 0
al menos una cuestién de estado,
hasta que se inicié el comercio ex
temo de lanas. oueros y tasaio, 2
través de los puertos de Buenos
Aires, de la Ensenada, de Aloo del
Tuyti. Fue aqui donde el costo de
los fletes incidié negativamente en
lacompetenciamercantl terminan-
do por desalentar a los procucto-
res.
Estas contradicciones entre pro-
yecto politico y realidad eran mone-
da corriente en un tertitorio donde
las manitestaciones del progreso
como el ferrocarril, el telégrafo, el
avance de la frontera, la agricultu-
‘a,lareconversion ganadera, fun-
Gacién de nuevos pueblos ya
organizacién municipal, por
ejemplo, convivian con el malén, el
bandidaje, las pestes y las guerras,
fraticidas, todavia no silenciadas
por el “Remington” pacificador.
Tiempos de paradojas estos enque
losvibrantes discursosy promesas
de la elite portefia no se traductan
enhechos en la olvidaca camparia,
librada a su propia suerte. Las re
pletas arcas del BancoProvinciano
olrecian un amplioy generoso cré-
dito a los productores, por el con-
trario: se dilapidaban en aventuras
especulativas.
EL PROBLEMA
DE LOS CAMINOS
EI gobernador Adolfo Alsina
(1866-68) fue de los primeros que
manifesto preocupacisn sobre la
cuestion vial: “Los intereses de la
industria rural y el adelante general
dela Campatia, reclaman imperio-
samente que la acciéntutelar de los,
Poderes Publicos se haga sentir en
la mejora de las vias de comunica-
in
“En medio de los progresos roa.
lizados en toda sentido en esta
sociedad, las vias de comunice-
cién han pasado desepercibidas.
“Las partidas votadas anualmen-
te para las obras pUiblicas y el pro-
ducto de las ventas de los terrenos
de Ejido, se han venido aplicando
casi exclusivamente a hermosear
los Pueblos de Campafia con tern
plos suntuosos, que corresponden
apoblaciones mucho mascrecidas
y provistas de recursos,
“EIPEhacrefdoconvenienteoou-
parse con preferencia, sin desaten-
de" por ello obras de tanta inportan-
cia, de la construccién de puentes
en los arroyos y rios de la Campe~
Puente sobre ef Riachuelo. Corres-
pondie al viaducto del terrocaril a ia
Ensenada, La construcsion de puen-
tes y 1ulas ere fundamental para 12
camunicacion interprovincial y ne-
clonal
‘Topo Es Hisroxia N° 415 ¢ Pag. 73Flingeniera Luis A. Huergo: una per-
sonalidad mulifacétice y emprende-
dora, Doto a la provincia de Buenos
Aires de puentes y comunicaciones
que perduran hasta nuestros das.
fia, cuyos pasos se mantienen hoy,
con rara excepcién, on ol mismo
estado que enlos tiempos del colo-
niaje.
“Resta atin como medica com-
plementaria, la traza de un sisterna
O1ed de carninos y la adopcién de
las disposicionee conducentes a
proveer a su formacién y conserva-
cin"?
Desde une década atras, fa po-
litica de viabilidad provincial pasa-
ba por la instalaci6n del ferrocarri,
ura estacién cada diez a veinte
kilometros, quedandoentonces por
resolver como acceder a cada una
de ellas. Alsina reencauzd los gas-
tos publicos hacia la apertura de
‘camino y construccién de puen-
tes, consolidacién de calles inter-
nas en los pueblos ¢ inicis la "ma-
Pag. 74 * Topo ts Historia N° 415
AN
So a
Le cupe al gobemador Adolio Alsina
(1866-1668) ccuparse de pleniticary
dotar a fa provincia de puentes
accesos .
cadamizacién” de los tres accesos
a la ciudad de Buenos Aires, a
partir de los pueblos de Belgrano,
Flores y Quilmes. Aigunas de estas
obras se coparticiparon con los
pocos municipios organizados y se
incentivé la. perticioacién privada
en otros, autorizando el cobro de
pegie.
Pero fueron el siguiente gober-
nador Emilio Castro (1868-1872) y
SU minisiro Pedro Agote, quienes
‘encararon el primerpian general de
construccién de puentes en la pro-
vincia,
En ciclembre de 1808 se dispu-
so iniciar los estudios previos para
reaiizar“losplanos respectivos para
la consiruccién de los puentes que
seen necesarics en los principales
caminos deCampafia, alinterior de
fa frontera”
UN PLAN EN MARCHA
Se designéatresingenierosres-
ponsables de cada region en que
se dividié el teritorio, La misién de
los técnicos era “ster todos los
rios, arroyos y caadas que crucen
los caminas principales y que no
cuenten con puentes; determinarel
sitio conveniente pare construir nue
vos puentes; levantar un plano y
perfilde fa rivera del lugar elegido y
presentar un plano y presupuesto
Ge cada nuevo puente, precisando
cue los materiales a emplearseran
aquellos que offezcan la solidez
convenient y la mayor economia
con relacién a la situacién de los
lugates.”*
A ingeniero Luis A. Huergo le
correspondié el “norte”, al ingenie-
10 Adolfo Sordeaux el “oeste” y al
\geniero Neville B. Mortimer, el
ur". A cada uno se le fi una
retribucion mensual de ocho mil
pesos y el reconocimiento de los
gastos de viaje.
Transcurid todo el ano 1869
hasta que se conocieran los resul-
tados: *...se requieren 119 puentes
paraiaciltar él transito de todas las
vias de la Campafia y su construc
ion importa $ 37.353.185 mic....€l
PE se apresuré a presentar a la H.
Legistatura estos estudios, acom-
pafiéndclos con un proyecto de
Ley para emitir $ 50 rrillones en
fondos puiblicos destinados a la
consiruccién de los referidospuen-
tes’.
En realidad los puentes reco-
mendados por la comisién fueron
118, a los que el gobierno les agre-
96 uno sobre el Arroyo del Medio,
limite con la provincia de Santa Fe,
cuya tramitacién era previa y corria
por seperado.
Huergo propuso 24 puentes ($
3.103.443); 41 puentes correspon-
Gian al estudio del ingeniero Sor
deaux ($ 12,000,000). ¥, finalmen-
te, para el siempre postergado Sur,
elingeniero Mortimer proyecté a53
puentes, con la salvedad que entre
estos se encontraban los de mayor
longitud ($ 22.135,530).
La construccién de dos nuevos
viaductos en el Partido del Vecino,
que atravesaban esias tierras ba-
jas por el Paso del Tigre uno, y por
la Laguna del Medio el otro, reque-
fan grandes luces: 360, 280, 180
400 metros que, junto al paso La
Postrera en el rio Salado, de 170
metros de longitud, eran ios mayo-
res puertes proyectados