Está en la página 1de 4

Embarazo no deseado

El embarazo no deseado (también denominado embarazo no previsto, no querido, no


planeado, no planificado, no intencional, inesperado, imprevisto o inoportuno) es aquel
que se produce sin el deseo y/o planificación previa y ante la ausencia o fallo de métodos
anticonceptivos pre coitales adecuados y la inefectividad o no administración de métodos
anticonceptivos de emergencia posteriores al coito que prevengan un posible embarazo.
Ante un embarazo no deseado y atendiendo a los principios de salud reproductiva de la OMS,
la mujer puede continuar con la gestación y llevar a término el embarazo o, si la legislación
vigente del país o territorio lo contempla, practicar una interrupción voluntaria del
embarazo o aborto inducido, ya sea mediante un aborto con medicamentos o un aborto
quirúrgico, dependiendo del periodo de gestación y siempre con la asistencia sanitaria
adecuada.1
En todo el mundo, el 38 % de los embarazos son no deseados, el 21 % de ellos se da en
adolescentes (de los cuales entre el 30 y el 60 % terminan en un aborto); unos 80 millones de
embarazos no deseados cada año de un total de 210 millones de embarazos en todo el
mundo
Lo que heredamos

Predisposición a ciertas enfermedades

De acuerdo con especialistas, la gran mayoría de las enfermedades no son ni puramente transmitidas

genéticamente ni se desarrollan por factores ambientales. Sin embargo, el genetista y miembro de la

Academia Nacional de Medicina de Buenos Aires, Enrique Gadow, afirma que existen casos en los cuales las

mutaciones de algún gen se transmiten a un hijo. De este modo es como se generan las enfermedades

genéticas. Ciertos tipos de cáncer, la obesidad, la miopía, la distrofia muscular, la fibrosis quística, e incluso,

la predisposición a sufrir infartos precoces, son algunos problemas de salud más comunes que se heredan de

padres a hijos.

Rasgos físicos

De acuerdo con la genetista e investigadora Noelia Cabral, los rasgos físicos que se transmiten de padres a

hijos son: el color de los ojos, el de la piel, el del pelo, la altura y el peso, entre otros. Sin embargo, factores

externos como la nutrición o la exposición al sol pueden modificarlos.

Inteligencia (de la madre)

A pesar de que se trata de una característica difícil de determinar, diversas teorías aseguran que el

componente intelectual de los individuos está ligado con el cromosoma X, es decir, el que aporta la madre.

Uno de los estudios que demuestran esta teoría, es el que realizaron los doctores Horst Hameister y Ulrich

Zechner de la Universidad de Ulm, Alemania, en el cual analizaron genes relacionados con daños cerebrales

y encontraron que en muchos de estos, se halla el cromosoma X.


Lo que no?

Caída del cabello

De acuerdo con estudios recientes, la alopecia no se hereda en forma directa de los padres, pero sí del

abuelo materno. De modo que, si tu abuelo manifestó efectos de calvicie, es muy probable que pierdas poco a

poco el cabello. Sin embargo, no todo es la herencia genética: existen muchos otros factores que la ocasionan

como estrés, problemas dermatológicos u hormonales. Si buscas una solución para frenar la pérdida de

cabello, da clic en esta liga y encontrarás información especializada sobre la alopecia y su

tratamiento. Sistema GB.

Personalidad

Este es un tema que genera mucha polémica dentro del círculo científico pues, la mayoría de los

investigadores concuerdan con que la herencia genética y el entorno social repercuten más o menos en

partes iguales en el desarrollo de la personalidad.

Sin embargo, la genetista Noelia Cabral explica que "se puede hablar de cierta predisposición o habilidad para

desarrollar ciertos tipos de actividades pero, se necesita de una estimulación apropiada para que se

potencien". Así, podemos concluir que el entorno social influye más en la personalidad que la herencia

genética.

También podría gustarte