-Tensión procede de “tensio”, que significa “acción y efecto de encontrarse
estirado”. Hay que subrayar además que es fruto de la suma de dos
componentes latinos: el adjetivo “tensus”, que puede traducirse como “estirado”, y el sufijo “-cion”, que se utiliza para indicar lo que es la citada “acción y efecto”. -Superficial, por otra parte, proviene de “superficialis”, que puede traducirse como “lo equivalente a la superficie”. En su caso es un término compuesto de tres partes: el prefijo “super-”, que se emplea para indicar “sobre”; el sustantivo “facies”, que es sinónimo de “rostro”; y el sufijo “-al”, que se usa para indicar “relativo a”.
Entre los múltiples significados de tensión,
podemos mencionar su acepción como la situación en la que se encuentra un cuerpo que está bajo la influencia de fuerzas que resultan opuestas, las cuales ejercen una cierta atracción sobre él. Superficial, por su parte, es aquello relacionado con la superficie: la apariencia exterior, el límite o la capa superior de algo. El concepto de tensión superficial se emplea en el ámbito de la física para hacer referencia a la cantidad de energía que se requiere para incrementar la superficie de un líquido por unidad de área. Dicha energía se necesita ya que los líquidos ejercen una resistencia a la hora de incrementar la superficie. La tensión superficial surge por las fuerzas que actúan cohesionando las moléculas de los líquidos. Dichas fuerzas no son iguales en la superficie y en el interior del líquido, aunque en promedio terminan anulándose. Como las moléculas de la superficie tienen más energía, el sistema tiende a minimizar el total de energía a partir de una reducción de las moléculas superficiales; de este modo, el área del líquido se reduce al mínimo. Una de las propiedades de la tensión superficial indica que, a medida que el líquido tenga mayores fuerzas de cohesión, contará con una tensión superficial mayor. De todas maneras, hay que tener en cuenta que la tensión superficial está vinculada a la temperatura, el medio y la naturaleza del líquido. Podemos entender la tensión superficial como una especie de membrana