Sobre el autor
Igor Delgado Senior nacié en Caracas, Venezuela, en 1942. Estudié literatura y
es abogado. Ha publicado varios libros de cuentos y de ensayos, y ha ganado
premios importantes. Colabora en El Nacional y en 1990 gané el Concurso de
Cuentos patrocinado por este periédico. El cuento seleccionado pertenece a su libro
Relatos de Tropicalia (1985), en el cual aparecen escenas de la vida diaria tratadas
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con humor irénico.
Gl Soenturero
La tarde es de fiesta y el sol augura un célido tiempo para que
todo brille como aceros templados. En el redondel® se mezelan muchos
dolores intrinsecos, porque Ia muerte siempre est4 de por medio.°
Hace afios, mi padre cayé en esa procelosa circunferencia, aunque no
sin aplausos. Es ldstima que la consagracién venga después de la
derrota. Hay que resignarse.
Del viejo conservo los més puros recuerdos. Puedo ver sus ojos
—como si fuera en este instante— penetrando cada punto de vida.
Pretendié sabiduria en el ruedo,° pero otras astucias fueron mds pode-
rosas. Afortunadamente, no presencié su fracaso, tampoco mi madre
ni mis pequeftos hermanos. Pese a° que hemos sido educados para los
terrores festivos, no nos acostumbramos a perder uno de los nuestros.
Mi padre fue gigante en ternura y severidad, y su fortaleza de énimo
nos permitié sobrevivir, Por eso hoy, ante el despiadado torneo, me
encomiendo a sus ensefianzas.
Ya la plaza est casi Ilena. Observo por una ranura el desbordante
color de la multitud, y sus gritos en zumbido me llegan como adverten-
cia de la enconada lucha que me aguarda. No estoy inquieto, aunque
mis masculos piensen lo contrario. Detras de las paredes, escucho las
impostoras zetas de los picadores; ellos no disfrutan® con la magnifi-
cencia de pases y capotes,° sino solamente con la sangre a borbotones.°
iQuizds cumplen su destino!
Siempre me ha gustado la musica espafiola. Ahora, sin embargo,
cuando fas notas castizas se desprenden de® la banda municipal, creo
ofr tétricas marchas funerarias, He entrevisto, también, ruidosas damas
de sombrero 0 mantén® que esperan satisfacer sadismos ancestrales
mediante combates ajenos. dios hombres —-menos complicados— se
abruman de® manzanilla para que el poderio de los vifledos® los ayude
a admirar muertes sin importancia. iAsi es la vida y este suceso de
arena y oropel*:
La trompeta anuncia la salida. Todo esté preparado. Quisiera en
‘este momento irreversible, encontrarme de nuevo en mi campo natal
para retozar con los amigos sobre el musgo° en cienes. Quisiera sentir
el amoroso tacto de mi madre, el obediente carifio de mis hermanos...
CUENTO 4
esta... is in the way
bullring
Pose... Despite
se... get intoxicated with /
vineyards
glitz (literally, tinsel)
moss35 Ya debo entrar al redondel. Me despido de ustedes en Ia soledad
compartida de la fiesta. A quienes no me conocen debo decirles, por
‘iltimo, que me llaman «El Aventurero», que peso 350 kilos,* que naci
en la Ganaderia «El Rodeo» y que haré todo lo posible por morir
con dignidad.
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