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Una meditación de apertura

Esta meditación nos ayuda a arraigarnos en un pilar energético de Luz que nos
sostiene amorosamente y de forma ininterrumpida a medida que avanzamos en
nuestro trabajo. Así pues, búsquese una silla cómoda en una habitación tranquila
y silenciosa. Siéntese con la espalda recta y los pies en el suelo; y, luego, lea
desde el principio hasta el final la siguiente meditación, a un ritmo en el que se
sienta cómodo o cómoda. 20 Meditación de apertura: El Pilar de Luz Siéntese
con las plantas de los pies en contacto con el suelo, y deje que la silla mantenga
su espalda erguida y le sustente. Tome conciencia de dónde está y dónde está
su cuerpo... Después, frótese las manos y comience a atraer energía desde el
núcleo de la Tierra. Extráigala desde el mismo centro del planeta, a través de
las plantas de los pies, y deje que recorra su cuerpo... que suba por sus piernas...
ascendiendo por el tronco... hasta llegar al cuello... y, aún más arriba, hasta la
cavidad del cráneo. Sienta cómo la energía ejerce presión en las paredes internas
de su cráneo. Mientras sigue frotándose las manos, quizás perciba que la energía
ha ido bajando por sus brazos hasta llegarle a las manos. Para entonces, deberá
tener las manos calientes. Haga uso de ellas para limpiarse el aura, el campo de
energía que rodea su cuerpo. Cepíllese físicamente el cuerpo, desprendiéndose
de toda vibración que haya en usted o alrededor de usted que no sea suya. Envíe
todas esas vibraciones a la tierra, para que las absorba y las transmute. Después,
cuando haya terminado, pose las manos con las palmas hacia arriba sobre su
regazo, o bien sobre los reposabrazos de la silla. Ahora, tome conciencia de la
infinitamente poderosa y amorosa fuente de Luz que está siempre ahí, flotando
a unos 45 centímetros por encima de su cabeza... A medida que toma conciencia
de ella, la Luz se activa más y más, y desprende algo parecido a una lluvia que
cubre su cuerpo, por delante, por detrás y a ambos lados. La Luz limpia en usted
o su alrededor todo cuanto pueda interferir con su capacidad para experimentar
su propia bondad fundamental. A medida que la Luz desciende desde la cabeza
hasta los dedos de los pies, sentirá que se va acumulando en sus pies y que
comienza a rebosar, creando una plataforma de Luz que le sustenta en este lugar,
en este instante del tiempo. La Luz no le sujeta los pies, sino que les proporciona
apoyo y sustento. Después, la Luz comienza a llenar su campo de energía. Se
trata de un espacio con forma de huevo que se extiende a su alrededor, alrededor
de 45 centímetros en todas direcciones, hacia delante, hacia atrás y a ambos
lados. La Luz comienza a llenar ese espacio... sube por sus tobillos... por las
rodillas... por las caderas... recorriendo su cuerpo hasta los hombros y, más
arriba, hasta la cabeza, de tal modo que se halla ahora sentado dentro de un pilar
de Luz. Tómese unos instantes para dejar que la Luz haga su trabajo en usted.
En primer lugar, y gracias a sus propiedades magnéticas naturales, la Luz
extraerá de usted todo aquello que no le sea de ayuda: cualquier dolor físico,
cualquier tensión o angustia que se halle presente; cualquier turbulencia
emocional, preocupación o caos; y de su mente, cualquier pensamiento que
pueda estar intimidándole o haciéndole sentir mal. La Luz puede extraer todo
eso de usted. Puede extraer cualquier cosa que esté interfiriendo desde dentro
con su experiencia de la siempre presente paz interior. No necesita decirle a la
Luz que haga eso. La Luz es una inteligencia infinita que sabe exactamente lo
que usted necesita en este momento. Simplemente, deje que haga su trabajo...
Y mientras la Luz extrae de usted todo eso merced a su naturaleza magnética,
sienta que, al mismo tiempo, y gracias a su naturaleza radiante, la Luz se irradia
en su interior. Sienta cómo se irradia dentro de usted desde todos los ángulos
posibles 21 (por delante, por encima, por debajo...), cómo atraviesa las fronteras
de su piel, y sienta cómo la Luz se convierte exactamente en todo aquello que
necesita; de tal modo que, si lo que necesita es coraje, la Luz se convierte en
coraje. Quizás necesite usted consuelo; y la Luz se convertirá en consuelo.
Ábrase y observe la Luz mientras se convierte en lo que usted necesita, mientras
satisface cualquier necesidad que pueda tener en este momento. Tómese unos
instantes para dejar que esto ocurra... Llegado este momento, debería de estar
en un estado de equilibrio razonable, listo o lista para seguir avanzando. Vuelva
a situar su atención en este mismo instante, y luego continúe leyendo.
Cuando termine la meditación, respire profundamente unas cuantas veces y
comience a enfocar su atención en el trabajo que le ha traído ahí
El Proceso de la Oración del Sendero para Acceder al Corazón de los
Registros Akásicos cuando hace una lectura para sí mismo o sí misma
ORACIÓN DE APERTURA: Cuando haga la lectura para sí mismo o sí
misma, diga esta parte en voz alta:
Y así reconocemos a las Fuerzas de la Luz, pidiendo guía, dirección, y coraje
para conocer la Verdad, en tanto ésta se revele por nuestro mayor bien y el
mayor bien de todos los que están conectados con nosotros. Oh, Espíritu Santo
de Dios, protégeme de toda forma de egocentrismo, y dirige mi atención al
trabajo que tengo entre manos. Ayúdame a conocerme a mí mismo (mí misma)
a la Luz de los Registros Akásicos, para poder verme a través de los ojos de los
Señores de los Registros, y para que comparta la sabiduría y la compasión que
mis Maestros, mis Profesores y mis Amados sienten por mí. 48 Lea esta parte
en silencio, para sí mismo. Ayúdame a conocer a (su nombre legal, actual) a la
Luz de los Registros Akásicos, para ver a (su nombre legal actual) a través de
los ojos de los Señores de los Registros, y para que pueda compartir la sabiduría
y la compasión que los Maestros, los Profesores y los Amados de (su nombre
legal actual) tienen para (el o ella). Ayúdame a conocer a (su nombre legal
actual) a la Luz de los Registros Akásicos, para ver a (su nombre legal actual)
a través de los ojos de los Señores de los Registros, y para que pueda compartir
la sabiduría y la compasión que los Maestros, los Profesores y los Amados de
(su nombre legal actual) tienen para (él o ella). Anuncie la apertura de los
Registros diciendo esto en voz alta: Los Registros están ahora abiertos.
Preguntas ¿?
No haga preguntas de inmediato después de decir, «Los Registros están ahora
abiertos». En vez de eso, permanezca en su sitio durante un rato y observe lo
que ocurre. Dado que su primera experiencia en los Registros será
completamente nueva y única, intente no juzgarla. Puede estar seguro de que
vivirá una experiencia perfecta, teniendo en cuenta quién es usted y qué necesita
en este momento. Recuerde que los Señores de los Registros le conocen y le
aman desde que nació su alma. Por tanto, alimente la certeza de que ellos le han
dicho a sus Maestros, Profesores y Amados cuál es exactamente la mejor
manera de darle la bienvenida en los Registros.

Después de dedicar alrededor de cinco o 10 minutos a sus Registros, lea la


Oración de Clausura.
ORACIÓN DE CLAUSURA: Diga esto en voz alta:
Me gustaría darles las gracias a los Maestros, los Profesores y los Amados por
su amor y su compasión. Me gustaría darles las gracias a los Señores de los
Registros Akásicos por su punto de vista. Y me gustaría darle las gracias al
Espíritu Santo de Luz por todo el conocimiento y la sanación. Los Registros
están ahora cerrados. Amén. Los Registros están ahora cerrados. Amén. Los
Registros están ahora cerrados. Amén.

Convendrá que, después de esto, tome contacto con la tierra de nuevo, saque a
pasear al perro, camine descalza o tome agua. (Como he mencionado
anteriormente, el motivo de arraigarse en la tierra consiste en reenfocarse en la
tierra física y en su vida cotidiana, para que usted se halle plenamente presente
en todo cuanto ocurra a su alrededor.)

Después, tómese un poco de tiempo para contemplar su experiencia y/o escribir


algunas notas acerca de ella.

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