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La lixiviación (leaching) es una actividad metalúrgica extractiva donde su propósito es separar

selectivamente la partícula valiosa, por medio de la disolución. La mineralogía típica requerida es de


la naturaleza óxidos, sin embargo, en la actualidad se desarrolla procesos dirigidos a minerales
sulfurados.

El proceso consiste en agregar un reactivo de lixiviación y/o agentes, los cuales se decidirán por
medio de la clasificación del mineral según su forma de disolverse.

Una vez disuelto el elemento, la solución es recolectada/captada y se denomina PLS (“Pregnant


Leach Solution”) para ser enviada a un proceso de extracción por solvente.

En lo que involucra a la industria minera-metalúrgica chilena, el principal mineral a procesar por


este método es minerales oxidados de cobre, la selección del tipo de lixiviación se basa en el
concepto de “satisfacer los requerimientos de maximizar los beneficios económicos con los costos
más bajos posibles de inversión y operación”, por lo tanto, entre los factores decisivos se encuentra:
el valor económico del metal, la recuperación metalúrgica, costos de mina, costos de conminución,
factibilidad inherente del proceso escogido.

Entre la variedad de lixiviaciones es relevante la realizada por medio de pilas (heap leaching), ya que
constituye la más utilizada en nivel nacional (¿), el mineral destinado al proceso de leaching debe
estar preparado granulométricamente, además, debe contar con una etapa de aglomeración y
curado.

La utilización es de este método involucra una planificación en cuanto a su emplazamiento, técnica


de apilamiento, forma de riego y operación de la pila. Respecto a su emplazamiento se prepara la
base de las pilas teniendo en cuenta los riesgos asociados a los productos utilizados en el proceso
(de características toxicas) y las dimensiones de la misma, la pila debe tener una base firme y
consolidada con una inclinación de 3 a 5°, sobre esta se posiciona una capa impermeable, la que a
su vez está debajo de una capa granular permeable que es por donde están los tubos colectores del
PLS, además, debe contar con un sistema de canaletas y recolección de líquidos en el contorno de
la pila. En cuanto a la técnica de apilamiento se tiene en cuenta la producción y el tamaño de la
faena, los equipos van desde sistema de camiones y correas en faenas pequeñas, hasta apiladores
sobre orugas o correas modulares articuladas en faenas grandes. El sistema de riego varía según los
requerimientos y factores climáticos, siendo dos las formas de regar; por aspersión y por goteo, la
zona podría implicar el entierro de los conductos de riego para evitar su congelamiento. La
operación de la pila implica un sistema de circulación de la solución entre pilas, requiriéndose para
esto un mínimo de dos, donde la más antigua recircula su PLS a la pila más reciente, logrando con
esto una concentración mayor en el PLS final enviado a extracción por solvente.

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