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CIUDAD REAL
SENTENCIA: 00149/2018
UNIDAD PROCESAL DE APOYO DIRECTO
Modelo: N11600
C/ERAS DEL CERRILLO, S/N 13071 CIUDAD REAL
Equipo/usuario: ACC
SENTENCIA Nº 149/2018.
I)
QUINTO.- Que por petición de las partes se solicitó el recibimiento del pleito a
prueba, debiendo la misma versar, tal y como se expone en los escritos rectores
sobre los hechos que constan en la demanda y en el expediente administrativo
remitido a los presentes autos.
FUNDAMENTOS DE DERECHO
Ante la falta de actuación del urólogo señala que se empadronó en Madrid y fue
tratado en la a lo largo del mes de Julio de 2013, que en fecha de 26 de
Septiembre de 2013 dijo que ““todos los cilindros enviados se encuentran infiltrados
por un adenocarcinoma con morfología compatible con primario de próstata, con
1.1.II) Considera por todo lo anterior que existe un retraso diagnóstico de los
servicios del SESCAM por no atender a los niveles de PSA que afirmaban la
existencia de esa enfermedad que determinó finalmente su muerte, perdiendo la
oportunidad de ser tratado y con ello de curarse, considerando que no se han puesto
a su servicio el conjunto de medios a los que la administración estaba obligada,
solicitando la indemnización que cuantifica en su demanda, pues la causa de su
fallecimiento la sitúa en los siete meses que sufrió de retraso en su diagnóstico,
según el informe pericial que aporta y defiende.
2.3º.- En el folio 203 y siguientes consta informe del servicio de urgencias del
en el que se puede leer que el paciente tiene
antecedentes de Hiperplasia benigna de próstata y que el dolor era en flanco
derecho con irradiación hacia la ingle. Hace constar de manera especial que el
propio paciente negó que disminuyera la orina. Para el diagnóstico se realizó
exploración abdominal y se diagnosticó finalmente cólico renouretral con tratamiento
adecuado al mismo. Las pruebas diagnósticas valoradas posteriormente aportan el
conocimiento relativo a los dolores y la confirmación del diagnóstico inicial. Afirma
que incluso la propia reclamación advierte que los síntomas de dicho cólico
desaparecen con el tratamiento pautado. Así en la visita siguiente, también afirma
que el cuadro que presenta el mismo era compatible con el diagnóstico de cólico que
finalmente se hace al mismo, descartando además gravedad en el mismo. Considera
que no era necesaria ni la ecografía ni la derivación a ningún especialista al ser un
cólico sin gravedad y que además ha sido objeto de tratamiento y resolución
anterior.
Consta igualmente problemas con la talla vesical que hacen que se inicie el
tratamiento permeabilizador de la sonda en cuestión. Igualmente consta que se llegó
a la conclusión de una retención de orina suprapúbica y una infección del tracto
urinario. Aporta igualmente hojas de atención médica.
Así mismo señala que se le hizo un tacto rectal que resultó negativo en urología por
retención aguda de orina en Abril de 2012, lo que implica que se trata de un
síndrome miccional lo que el causante presentaba.
Así entiende que fue 7 meses después que se procede a derivar al urólogo (Abril de
2012), sin que se siguiese un protocolo relativo a la prevención del cáncer de
próstata, puesto que el Douart estaba enmascarando el nivel real del mismo y se
sometió al paciente a una intervención para poder orinar, intervención que alivió los
síntomas pero no resolvió lo que considera que era el problema y que consistía en el
tumor, lo que hizo que pese a la operación el tumor volivera y siguiera progresando.
2.7º.- Se hizo, a petición del demandante, un informe pericial judicial por el doctor
, en el que se describe cronológicamente el nivel de PSA del
paciente y la lex artis aplicada.
Considera que en el curso de los hechos hay tres periodos diferenciados. Así el
primero va de Septiembre de 2011 a Abril de 2012, donde es remitido al servicio de
urología. Afirma que tenía un PSA de 4,17 y un nivel de 10 %, siendo que acudiendo
de manera casi mensual el diagnóstico no varió en absoluto. En Febrero de 2012 se
da un PSA de 7,44 real (pese a que con Douart el mismo tenía un 3,72),
considerando que este nivel indica que el tratamiento no era adecuado y además no
se estaban cumpliendo los requisitos.
En el segundo periodo que se inicia desde que va a urología del SESCAM hasta que
inicia el tratamiento en la , siendo que el mismo recorre
diversos servicios de urgencias y urología por problemas de micción, retención de
orina y cólico renal. Es por ello que el doctor le realiza una
fotovaporización láser. Clínicamente el paciente tenía una mala evolución y
presentaba una dilatación de ambos riñones. Considera que las demoras del
SESCAM y la falta de seguimiento son causantes de estos daños.
Afirma que la clínica del cáncer era florida y que se hizo caso omiso de la misma,
siendo la causa de ésta.
Desde ese momento entiende que se debió efectuar una biopsia. No le va a hacer
un tacto rectal. Esa biopsia de próstata hubiera permitido detectar el cáncer. De
todas las posibles patologías que pudiera padecer el cáncer es la más grave, con lo
que debería ser el primero objetivo a descartar. Cuando uno quiere negar el cáncer,
Afirma que no hay prevención. Hay diagnóstico precoz. El paciente entra con
metástasis tras dos años por no hacer este tipo de pruebas. El médico del SESCAM
le pone un tratamiento para la hiperplasia, lo que es un tratamiento para bajar el
PSA. Una subida de más de 0,75 ml por año es indicativo de cáncer. En ese
momento el riesgo quirúrgico es en relación a las biopsias. La guía no señala
limitaciones de tiempo para el PSA. Tardar tres meses es erróneo. Siete meses de
retraso supone la evolución de un cáncer y no le pide la biopsia, que estaba más
indicada aún que en Septiembre. Este cáncer es bastante agresivo. Esos tiempos en
el tipo de cáncer en cuestión es clave. Tiene que actuar rápido para evitar que se
trate de un tumor agresivo. Se impuso un tratamiento que no había sido efectivo
porque el cáncer no responde al duodar que además enmascara el diagnóstico por
no hacer la biopsia. Cuando va al urólogo lo cita 3 meses después. El paciente cada
vez se encontraba peor. Entiende lógico que se vaya a una atención externa. Es un
paciente que sangra y que tiene dificultades, que en el SESCAM le da para tres
meses y que no ha puesto remedio en ningún caso. Va a operarse para orinar. El
cáncer estaba por debajo. Entiende que asumió la hiperplasia el médico del
segundo, lo que hace que le atiende para el alivio sintomático. El peso del daño ha
sido tanto por él, tanto por el SESCAM que ha sido atendido aquí. Después es
asistido en 5 ocasiones por el doctor Ocaña. La patología urológica del paciente no
ha servido para tomar ningún tipo de decisión. La PSA la podían solicitar para
cualquier otra patología médica. Los médicos piden muchas cosas y después no
saben interpretarlas. Lo pedía como rutina. El paciente estaba en tratamiento y
seguimiento del SESCAM. El peso ha recaído en los dos años en el SESCAM. No
se diagnostica hasta que la días lo hace. No ha visto ninguna
nota o evolución para el cáncer en el SESCAM. Constata un retraso diagnóstico de
24 meses. No siguieron los criterios de las sociedades médicas. Hay una relación de
causalidad entre el retraso diagnóstico y la muerte del paciente. Hay un nexo de
causalidad claro. Se pudo evitar en un 98 % de los casos si se hubiera hecho la
biopsia.
Si el nivel supera los límites señala que asume una estadística del centro americano.
Asume el 56 % de probabilidad de que el paciente tenga cáncer. El síndrome
miccional tiene muchas patologías. El cáncer de próstata tiene su clínica. Tienen un
síndrome miccional y desde luego lo haría para descartar el cáncer. Cada uno tiene
una forma de actuar. Se habla de un tacto rectal negativo. Podría pedir un PSA a los
tres meses o al tiempo. El tacto rectal es un tacto rectal positivo y se diagnosticaba
hiperplasia. Es necesario más información clínica para determinar la cuestión. No le
han dado la historia clínica completa. La prueba estándar para el cáncer de próstata
es la biopsia. Independientemente de otros métodos esta es la estándar. Con unos
datos de PSA, con datos de tacto rectal o ambos se debería hacer una biopsia. El
tacto rectal habla de una lesión, no es sospechoso. Dice que con el PSA ya es
suficiente para la biopsia. Sólo un urólogo sería aceptable, pero que habiendo sido
En el mismo sentido hay que señalar que es absolutamente necesario para apreciar
este tipo de responsabilidad la infracción de la lex artis, tal y como se reconoce en la
STS de 10 de Julio de 2012 cuando se afirma que “…Conforme a reiterada
jurisprudencia sobradamente conocida, sustentada ya en su inicio en la inevitable
Pues bien, analizando todo lo anterior, y pese a la evidente complejidad del presente
asunto cabe señalar, sin perjuicio de superior y mejor criterio;
4.1º.- Infracción de la lex artis por ignorar los niveles de PSA existentes. Error
y retraso diagnóstico. Hay que partir de un hecho muy relevante y que es que,
pese a la posición de las demandadas dentro del proceso y la deficiente e
interrumpida tramitación del expediente de responsabilidad patrimonial, la propia
administración asume que hubo error de diagnóstico, actuaciones y tratamiento (f.
314), asumiendo igualmente que no se le derivó cuando se le debió derivar. Mayor
credibilidad que la del propio servicio médico es complejo encontrar, pues la
propuesta de resolución lo que hace es achacar a terceros la responsabilidad y
rechazar el nexo de causalidad, pero no niega ese nexo de causalidad.
A estas consideraciones cabe añadir las del propio Consejo Consultivo que
considera que, en efecto, hay una infracción de la lex artis con una pérdida de
oportunidad al mismo asociada (pág. 19 del informe).
Desde ese mismo momento se debió derivar y se debió biopsiar. Este extremo no ha
sido negado por ninguno de los peritos, pues el perito aportado por la parte
demandada, doctor , lo que ha dicho es que él hubiera actuado de esa
manera, aunque cree que se podría haber actuado de otra también. Se puede
Así hay que señalar que el peso del error debe recaer sobre el SESCAM, tal y como
ha dicho el perito judicial, el perito de la demandante y se deduce del periodo de
tiempo a que se contrae la omisión del diagnóstico, pues se remonta a Septiembre
de 2011 y constan además, pese al criterio del instructor diferentes visitas al
SESCAM los meses siguientes a Julio de 2012 (ff. 58 a 64, posteriormente
aportados nuevamente) y en las proximidades de esas operaciones también fue
analizado por el personal del SESCAM.
Pues bien, frente a ello cabe decir que no es hasta Julio de 2013 cuando el mismo
se empadrona en Madrid para ser tratado en la . Entre los meses de Agosto y
Octubre de 2012 el mismo sigue acudiendo a consultas con el dr. (SESCAM).
Ello no obstante cabe analizar en qué consistió la atención médica de los otros
participantes (clínica y Hospital ).
- Por tanto no se aporta una prueba por la administración que acredite la ruptura
del nexo de causalidad que hay entre la negligencia aceptada en parte y
acreditada en su totalidad desde Septiembre de 2011 a Julio de 2013, no siendo
asumible desde un punto de vista racional que eluda la responsabilidad porque
en el SERMAD tardara 2 meses en diagnosticar el cáncer una vez que asume la
responsabilidad del paciente por el mero hecho de una asistencia puntual en
Madrid que se basa en la historia clínica y en los diagnósticos previos del servicio
manchego o la intervención específica y concreto de la sanidad privada.
4.5º.- En conclusión hay error en el SESCAM y ese error diagnóstico y los retrasos
al mismo asociados provocan el daño, que es el fallecimiento del causante.
5.1º.- En este sentido cabe decir que es muy complejo determinar este tipo de
daños, tal y como recuerda la STSJ de Castilla La Mancha, secc. 2ª, de 31 de
Octubre de 2013 cuando afirma que conviene recordar la doctrina del Tribunal
Supremo en materia de oportunidad en la prestación de tratamiento sanitario,
Por tanto es a este porcentaje (es decir hay una estimación sustancial, pues sólo se
debe rebajar un 2 %) al que hay que atender, siendo el porcentaje que fija el consejo
6.1º.- Llegados a este punto hay que resolver sobre la procedencia o no de los
intereses del art. 20 LCS, cuestión también objeto de pronunciamientos
contradictorios y sujeta a un análisis diferente en el ámbito contencioso que en el
civil.
Dice el art. 20.3º LCS que Se entenderá que el asegurador incurre en mora cuando
no hubiere cumplido su prestación en el plazo de tres meses desde la producción del
siniestro o no hubiere procedido al pago del importe mínimo de lo que pueda deber
dentro de los cuarenta días a partir de la recepción de la declaración del siniestro. La
consecuencia de la mora se señala en el art. 20.4º LCS que dice que La
indemnización por mora se impondrá de oficio por el órgano judicial y consistirá en el
pago de un interés anual igual al del interés legal del dinero vigente en el momento
en que se devengue, incrementado en el 50 por 100; estos intereses se
considerarán producidos por días, sin necesidad de reclamación judicial. No
obstante, transcurridos dos años desde la producción del siniestro, el interés anual
no podrá ser inferior al 20 por 100. Las únicas causas de exoneración de la misma
señala el art. 20.8º LCS que son No habrá lugar a la indemnización por mora del
asegurador cuando la falta de satisfacción de la indemnización o de pago del importe
mínimo esté fundada en una causa justificada o que no le fuere imputable.
En este sentido cabe señalar la STS, Sala 3ª, de 4 de Julio de 2012 que afirma que
La postura de este Tribunal está clara al efecto, y plenamente consolidada, por las
sentencias que se citan por la recurrente y otras muchas que se han ido
produciendo, como es la reciente de veintinueve de marzo de dos mil once (recurso
de casación 2794/2009 ), que si bien se dicta en el ámbito de un accidente de trafico,
recoge afirmaciones indudablemente aplicables al presente caso: "La doctrina
reflejada en la sentencia que el motivo invoca, dictada el 10 de octubre de 2008 por
la Sala Primera de este Tribunal Supremo en el recurso de casación núm. 1445/2003
, no pone de relieve tampoco la errónea interpretación por la Sala de instancia de
Así decíamos en la STS "Sin embargo, esa razón justifica la no condena al pago de
aquellos intereses sólo mientras ha estado pendiente una situación de incertidumbre
sobre la existencia del derecho pretendido. Desaparecida esa incertidumbre con esta
sentencia, deberá regir aquel precepto, entendiendo, en aplicación de lo que dispone
su núm. 3, que la aseguradora incurre en mora si trascurre el plazo de tres meses
desde su notificación sin que se haya cumplido la obligación de pago de la
indemnización que fijamos, a cuyo abono, con carácter solidario con la
Administración, la condenamos. Es este matiz o criterio, con preferencia a otro
distinto que pudiera extraerse de la sentencia que acabamos de citar, el que
entendemos más acomodado a la finalidad o razón de ser de aquel art. 20 LCS Ley
50/1980, de 8 de octubre, de Contrato de Seguro. art. 20 (10/11/1995) , pues una
vez declarado el derecho a una indemnización asegurada, entran en juego las
distintas posiciones jurídicas que el ordenamiento predica para el asegurado y para
el asegurador; entre ellas, la concerniente a los intereses debidos."»
Por todo ello, viendo los preceptos citados y demás de general y pertinente
aplicación, en nombre de S.M. El Rey y en uso de la potestad que me confiere la
Constitución Española,