“Cuando tuve 18 años conocí a mi actual esposo, su nombre es Rómulo Egúsquiza
Villavicencio, mis padres me dijeron que ya debía casarme, así que hablaron con unos amigos que tenían y arreglaron el matrimonio entre el hijo de ellos y yo, él siempre fue malo conmigo, porque no quería casarse, él estaba enamorado de una chica del pueblo, pero su padre antes de fallecer, le dijo que se quedara conmigo porque yo le recordaba claramente a su madre y a su hija mayor.
Decisión de Carolina Egúsquiza Espinoza:
Aceptó casarse finalmente, pero nunca llegó a enamorarse porque él la maltrataba y la
engañaba, aún así siguieron juntos y lo cuidaba, pero por el tiempo compartido. Pero la razón de seguir viviendo con su esposo fue el nacimiento de sus hijos.