INTERES COMERCIAL

El interés comercial es el que resulta de aplicar la base de año comercial, esto es de 360 días. Al resultado
por este último procedimiento se le conoce como interés comercial, que resulta mayor que el que se obtiene
con la base del año natural para un mismo tiempo de devengo.

El empleo de la base de 365 días, o plazo natural, es utilizada mayoritariamente en los mercados financieros
para operaciones en las que el cómputo de tiempo se realiza por el año natural con mayor frecuencia que la
base de año comercial, puesto que ésta última eleva como decimos indebidamente los intereses y sólo está
justificada para cómputo de tiempos por año comercial.
El interés comercial tiene su origen y justificación en épocas donde la falta de calculadoras u ordenadores
originaba que fuese necesario simplificar los cálculos. Esto se conseguía considerando meses de 30 días y
años de 360 de tal manera que se podían emplear tablas con las que resolver los cálculos con mucha mayor
rapidez.
Ahora bien, todavía en países como España el crédito al consumo y numerosas operaciones de crédito con
amortizaciones mediante reembolsos periódicos sigue empleando la base de año comercial, tendencia que irá
desapareciendo al tener que incluir en la información a los clientes el tipo anual efectivo equivalente que
naturalmente pone en evidencia cómo el tipo nominal se infla por la base utilizada.