Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales. UNLP.

Curso: Protección Forestal

Tema: Enfermedad de los almácigos*

La enfermedad de los almácigos o “damping–off” provoca la muerte de las

plántulas. En nuestro país, los daños más importantes se presentan en los almácigos
de coníferas y de eucaliptos; también suele manifestarse en jacarandá, braquiquito,
timbó, casuarina, tipa, fresno, palo borracho, acacia blanca, entre otras.

Patógenos
El “damping-off” es causado por hongos habitantes del suelo (soil borne
fungi) que bajo condiciones favorables pueden tornarse patógenos.
Los géneros involucrados con esta enfermedad son: Rhizoctonia sp., Pythium
spp., Phytophthora sp., Fusarium spp. y Sclerotium sp.. Pythium ultimun Trow. y
Rhizoctonia solani Kuhn. son considerados como los principales agentes causales
del “damping-off” en nuestro país. Otras especies relacionadas con el “damping”
son: Cylindrocladium scoparium Morg.; Sclerotinia sclerotium (Lib.) Mass.; Botrytis sp.,
Verticillium sp. Helminthosporium sp., Phoma sp, Colletotrichum, etc.
La presencia de alguno de éstos patógenos no puede ser determinada a
partir de los síntomas que manifiestan las plantas afectadas. Su identificación
requiere del cultivo de los tejidos enfermos y del examen microscópico de las
colonias que se originen a partir de la siembra del material.

Signo
El signo de la enfermedad esta representado por las estructuras vegetativas
(micelio, esclerocios) y reproductivas sexuales y asexuales, (zoosporangios, oosporas,
pionotes) de los organismos involucrados en la infección.

Síntomas
Los síntomas característicos del “damping-off” son los de pre-emergencia y
los de post-emergencia.
El “damping de pre-emergencia” está asociado a los bajos porcentajes de
germinación o bien de emergencia. Esto puede deberse a la pudrición de las
semillas o a la pudrición y muerte de las plántulas antes de que sus hipocotiles pasen
la línea del suelo. Las semillas atacadas se ablandan, empardecen, contraen y
finalmente se desintegran. En cuanto a las plántulas, la infección inicial toma la
apariencia de una mancha ligeramente ennegrecida. La zona infectada se
extiende con rapidez, las células invadidas colapsan y las plantas mueren.
El “damping de post-emergencia” ocurre inmediatamente después de la
emergencia de las plántulas y durante el tiempo en que sus tejidos estén suculentos.
En este caso se observan los típicos síntomas de vuelco y marchitamiento a causa
del desarrollo de una lesión necrótica a nivel del cuello. Las raíces también se
presentan necrosadas.

Lic. Murace Mónica

Ing. Agr. Aprea Alberto
Protección Forestal 2011
 Algunos autores mencionan diferencias entre los síntomas de post-
emergencia de coníferas y latifoliadas. De acuerdo con esto, en las latifoliadas se
observan áreas necróticas a la altura de la línea del suelo o por debajo de ésta. Las
plántulas infectadas se marchitan y mueren, permanecen erectas un tiempo y se
quiebran fácilmente a la altura del cuello cuando se las extrae del suelo. En las
coníferas este síntoma se presenta entre la emergencia de las plántulas y el
desarrollo de las acículas primarias. En éstas también se observa necrosis a la altura
o por debajo de la línea del suelo. Las plántulas afectadas poseen en esta zona un
aspecto acuoso, húmedo, descolorido (amarronado) en la que rápidamente se
produce una constricción (estrangulamiento). Las plántulas afectadas vuelcan y
presentan aspecto saludable hasta que se secan totalmente. Las áreas necrosadas
en el cuello consisten de células separadas entre si por disolución de la laminilla
media.
El ataque por “damping” es factible hasta los 45-60 días posteriores a la
germinación; transcurrido este tiempo los riesgos desaparecen por engrosamiento
de la cutícula y suberización de la epidermis. Esta enfermedad es fulminante debido
a su corto periodo de incubación (24 a 48 hs), por esto en pocos días se produce la
muerte de los individuos afectados. Si bien la enfermedad típicamente se presenta
a modo de manchones, en casos graves la totalidad del/de los almácigos se ve
afectado.

Biología
Los hongos responsables de esta enfermedad sobreviven en el suelo (fase de
perpetuación) bajo la forma de estructuras de resistencia como clamidosporas
(Fusarium, Phytophthora), oosporas (Pythium, Phytophthora), esclerocios
(Esclerotinia, Esclerotium) o en restos de plantas como micelio.
Bajo condiciones favorables, en la estación de crecimiento, las estructuras de
resistencia germinan e infectan a sus hospedantes.
La infección de las plantas hospedantes ocurre por las raíces o bien a la
altura del cuello y progresa posteriormente hacia la raíz y el tallo.
Algunos autores sostienen que la infección de las plántulas de coníferas por
Rhizoctonia solani y Pythium ultimun se origina mediante la penetración del micelio
por los estomas (penetración indirecta) o por acción mecánica por cualquier punto
de la pared del cuello (penetración directa). Si el estoma esta abierto la hifa
penetra sin dificultad a través del ostíolo. En caso de que este se encuentre cerrado
la hifa ejerce presión sobre él, se adelgaza, pasa entre las células de cierre y llega a
la cámara estomática. En el segundo caso la hifa se adosa a la pared, ejerce
presión, se adelgaza y penetra. A veces la penetración se efectúa por disolución de
las capas cuticulares hasta alcanzar la pared de las células epidérmicas.
Atravesada la cutícula, la hifa separa la cutícula de la epidermis dejando pequeños
espacios llenos de micelio.
La hifa que penetra tanto por los estomas como por la cutícula invade las
células adyacentes por destrucción de la laminilla media a lo largo de la pared
celular o bien pasa a través de la pared para lo cual se adelgaza recuperando
luego su volumen inicial. El contenido celular desaparece en forma progresiva, hay
pérdida de turgencia en los tejidos afectados y en consecuencia el tallo se reduce.
Durante el transcurso de la invasión hay emisión de hifas hacia el interior del
parénquima cortical y medular. Los hongos nunca atacan los vasos.
 El ataque por Rhizoctonia es más severo que el de Pythium. Rhizoctonia
produce la destrucción completa de los tejidos colonizados. Pythium sólo destruye el
contenido celular. Con respecto a las especies de Fusarium que atacan a las
coníferas, estas penetran por las raíces de sus hospedantes. Si bien las plántulas
presentan necrosis y estrangulamiento a la altura del cuello el proceso de muerte es
algo más lento, el marchitamiento es progresivo, las plantitas permanecen por más
tiempo erectas con una coloración oscura.
La propagación de la enfermedad se produce mediante zoosporas,
zoosporangios, oosporas, conidios y clamidosporas. El damping-off también puede
ser propagado vía semillas (seed transmission) y en este caso ser causado por
hongos superficiales o bien por aquellos que se encuentran en el interior de las
semillas (seed borne fungi). Estos últimos pueden causar daños de preemergencia y
en algunas ocasiones de post-emergencia. El tipo de damping off mas frecuente es
el originado en el suelo (soil borne disease, soil borne fungi) y los patógenos mas
comunes son los géneros de hongos mencionados.
Los hongos del suelo relacionados con el “damping-off” pueden ser
“habitantes del suelo” como ciertas especies de Fusarium que se encuentran en la
mayoría de los suelos o bien “invasoras del suelo” encontradas exclusivamente en
determinados lugares y trasportados a otros. Asimismo estos soil borne fungi pueden
producir enfermedades clasificadas como parenquimáticas, como el damping, o
vasculares. En las primeras el parénquima es el centro del ataque y puede ser
desintegrado (Pythium, Phytophthora, Fusarium y Rhizoctonia). En las segundas los
tejidos vasculares y el xilema en particular son invadidos y bloqueados produciendo
marchitamientos, (Fusarium, Verticillium).

Factores predisponentes

• Alta humedad relativa.

• Alta temperatura del suelo.
• Alta humedad del suelo por drenaje deficiente.
• Exceso de materia orgánica.
• Uso de abonos orgánicos frescos.
• Excesiva densidad de siembra.
• Acidez del suelo desfavorable.
• Baja luminosidad.
• Falta de rotación de cultivos.
• Textura y estructura del suelo.
• Siembras muy profundas y en épocas no propicias.

Las temperaturas altas determinan un ataque mas intenso; en los días

calurosos se producen las mayores perdidas. Asimismo los cultivos con excesiva
sombra están más expuestos al ataque. En suelos con pH 7 o superior los ataque son
intensos. Todos los patógenos relacionados con el “damping” crecen y se
reproducen mejor cuando el pH esta por encima del optimo para el crecimiento de
las plántulas (5.2 a 5.8). Fusarium spp. se desarrolla ante situaciones de alta
temperatura ambiente y de suelo, en suelos de textura gruesa y pH ligeramente
ácido a neutro. Sclerotium sp. es un genero asociado a climas cálidos, temperaturas
entre los 30 y 35 ºC, alta humedad, suelos de textura gruesa con poco N y un amplio
rango de pH (1-8). Para Rhizoctonia la temperatura optima esta entre los 15 y 18 ºC.
Las condiciones predisponentes para el desarrollo de Pythium son los suelos
húmedos, todos aquellos factores que retarden el crecimiento de las plantas y
temperaturas entre los 10 ºC y superiores a 18 ºC. Phytophthora se desarrolla con
temperaturas entre los 15 y 23 ºC y suelos húmedos y compactos. El atraso en la
época de siembra y la presencia de malezas también predisponen a la
enfermedad.

Control
Medidas culturales de control

• Practicar rotación de cultivos.

• Elegir época de siembra adecuada, con humedad relativa baja y
temperaturas que no sobrepasen los 12 ºC.
• Usar suelos de pH bajos (5), textura media y sin exceso de materia
orgánica.
• Evitar las siembras densas y el exceso de humedad para lo cual no
conviene sombrear demasiado.
• Mantener las plantas libres de malezas.
• Usar abonos bien descompuestos; evitar abonar con estiércol fresco.
• No sembrar profundo.
• Desinfectar las herramientas de trabajo.
• Sembrar semilla sana o previamente desinfectada. La desinfección de las
semillas previa a la siembra se puede realizar con un baño en agua
caliente (50ºC).
• Usar agua de riego que no pertenezcan a depósitos contaminados.

Medidas de control químico

• Desinfección de semillas con productos químicos.

Estos tratamientos se aplican principalmente contra las enfermedades
producidas en las semillas (seed borne diseases). Son poco efectivos contra los
hongos que atacan a las plántulas en cualquiera de sus etapas de desarrollo,
después de la germinación, como también generan un control insuficiente del
damping-off post-emergente.
Los hongos que habitan en la parte exterior de las semillas pueden ser
eliminados por desinfección superficial con hipoclorito de sodio o utilizando
curasemillas como captan (producto de contacto). Asimismo pueden emplearse
productos sistémicos como por ejemplo el carbendazin que se incorporan en el
embrión.

• Desinfección del suelo mediante productos químicos.

La fumigación del suelo es la vía más efectiva para el control del damping.
Tradicionalmente se recomienda tratar el suelo (fumigar) con una mezcla de
bromuro de metilo y cloropicrina. Desafortunadamente este tratamiento tan eficaz
es nocivo para el hombre y para el medio ambiente. Asimismo reduce las
poblaciones de todos los organismos habitantes del suelo (vacío microbiológico).
Como consecuencia de esto, las área tratadas pueden ser rápidamente
reinfestadas por la falta de organismos benéficos (antagonistas de los patógenos)
cuando, posteriormente a la fumigación, se utilizan aguas contaminadas, semillas
enfermas, herramientas no desinfectadas, etc.. Un producto alternativo al uso del
bromuro de metilo es el Vapam (metil ditio carbamato de sodio), (Ver Desinfección
de suelos).

• Efectuar pulverizaciones periódicas hasta que las plantitas alcancen la

resistencia natural por engrosamiento de la epidermis.

Medidas de control físico

• Solarización
• Vapor de agua

Ver Desinfección de suelos

Otra enfermedad que afecta a las plantas jóvenes de vivero es la pudrición

de raíces. Dicha enfermedad se presenta en plantas que han entrado en la etapa
de lignificación. Algunos autores la consideran como damping-off tardío.
La pudrición o necrosis radicular es causada por los hongos del complejo
damping, (Pythium, Fusarium, Rhizoctonia, Cylindrocladium, Phytophthora,
Sclerotium) que continúan sus actividades atacando a las raíces y matando a las
plantas infectadas.
En general los primeros síntomas se observan en las raicillas. Estas se
decoloran, ennegrecen, se acortan, disminuyen en cantidad y posteriormente
mueren. Si el ataque resulta leve o moderado, las plantas afectadas desarrollan
nuevas raíces, próximas a las raíces necrosadas, configurando un sistema radicular
de estructura anormal. En varios casos la enfermedad progresa y afecta a todo el
sistema radicular. En la parte aérea, ante ataques moderados, se produce un
retraso en el crecimiento acompañado de un amarillamiento del follaje. Asimismo
hay marchitamiento, muerte descendente (top killing), clorosis y desfoliación
prematura. Las plantas mueren desecadas en pie.
Bibliografía

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