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LAS COMUNIDADES POLÍTICAS

dos antiguos' y medievales, a pesar de que su estructura difiere considerable-


mente de la que presentan los modernos. Mas a consecuencia de estas dife- IX. SOCIOLOG!A DE LA DOMINACION
rencias que ofrece la estructura de dominación es necesario el examen de las
estructuras de dominación social para poder hablar acerca de la estructura del
partido, el cual es una organización que lucha por el dominio y, por 10 tanto, I. ESTRUCTURAS y FUNCIONAMIENTO DE LA DOMINACIÓN
~,uele=: ~ambién organizado en una forma con frecuencia rigurosamente
autontana ' Por eso nos ocuparemos ahora de este fenómeno central de
todo lo social. .
Pero antes ha ue decir al o más en eneral sobre las "clases" los "esta-
mentas' os' artidos". El hecho de ue resu on an necesaria:nente una'
SaCIe a que ,a comprenda, especialmente una acción comunitaria política;
dentro de la cual se desenvuelven, no significa que ellos mismos estén vincu-
lados a los límites im uestos 'oro una comunidad olítica. Por el contrario
en--v~ u e a so 1 an a e Intereses de los oligarcas' y demócratas e~
Crecía, de los güelfos y gibelinos en la Edad Media, del partido calvinista
~n la é~oca de las luchas religiosas, de los latifundistas (Congreso agrario
rnternacional), de lós principésj Santa Alianza,' acuerdos dé Karlsbadj.; delos
-trab~jadores socia~stas, 'de los conservadores ,( solicitud por Íos conservadores
prusianos d~ una ~nterv~ción rusa en 1850), ha sido siempre muy corriente
q~e los partidos e InclUSIVelas asociaciones que tienden al empleo de la fuerza
militar hay~n ~raspasado la~ fronteras, de la comunidad política. De todos
modos, su finalidad no consiste necesanamente en la formación de una nueva
domin,ación política, internacional, territorial, sino casi siempre en la: In-
fluencia sobre las ya existentes.

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696 SOCIOLOGÍA DE LA DOMINACIÓN


ESTRUCTIJRAS y FUNCIONAMIENTO DE LA DOMINACIÓN 697
que se halle su peculiaridad económica, constitu e casi mica en favor de la liquidez de su propio capital disponible, pues los solici-
me I a un ac or econ micamente Importante y en cierta tantes se someten en su propio interés a las condiciones impuestas para la .
económicamente. concesión de crédito y deben afianzar eventualmente tal sometimiento a
.A ui nos ro onemos encontrar, or 10 ronto un rinci io en 10 asible las disposiciones ajenas por medio de garantías. Sin embargo, los bancos de
s o genera, mevIta emente poco concreto y aun por necesidad formuIable crédito no recurren para ello a una "autoridad", es decir, a un derecho a la
de modo un tanto va o acerca de las relaciones entre las formas de la econo- "obediencia", independiente de todo interés, por parte de los que están efecti-
mía y las de dominación.: A este m necesitamos una definICIón más precIsa vamente sometidos a su aldebrío. Persiguen sus propios intereses, y 10 hacen
de 10 que slgnIhca para nosotros "dominación" y de su relación .con el con- así aun cuando los que están sometidos a su jurisdicción obren de un modo
cepto general de "poder". En el sentido general de poder y, por tanto, de formalmente "libre" de acuerdo con los suyos, es decir, aun cuando estos
posibilidad de im ner la ro ia voluntad sobre la conducta a'ena la domi· últimos persigan intereses racionales dictados por las circunstancias. Todo
naci n pue e presentarse en las formas más diversas. Como ha ocurrido participante en un monopolio, aunque sea incompleto, que en un am~lio sen-
eventualmente, se pueden, por ejemplo, concebir los derechos que se con- tido y a pesar de la competencia "prescribe" los.precios a los competIdor~ y
ceden a uno contra otro o contra otros como una facultad de dar órdenes adversarios comerciales, es decir, que puede forzarles a adoptar una actitud
al deudor y, por 10 tanto, se puede concebir todo el universo del derecho conforme a sus intereses, se encuentra en la misma situación aUH cuando no
.privado.rnoderao como una descentralización de la .dcminaoién en manos de les imponga el menor "deber" de someterse a tal domini~. No ?bstante,
los .que están "autorizados" legalmente. Entonces, el trabajador dispondría toda forma típica de dominación en virtud de una constelacIón de mtereses,
de poder y, por tanto, de "dominación" frente al empresario en' fa que toca y sO'lJIeto o en virtud áela posesión de un monopolio, Ruede transfo.rmarse
a sus reclamaciones de salarios; el funcionario frente al rey en 10' que se graaüa1mente en una dominación aut.oritaria.. Por ejemplo, los bancos de
refiere a sus pretensiones de sueldo, etc., 10 cual daría lugar a un concepto. crédito exigen para la mejor comprobación del destino dado a su dinero la
termino lógicamente algo incorrecto y en todo caso sólo provisional, pues, por intervención de sus directores en el Consejo de administración de las socie-
ejemplo, los mandatos del poder judicial a los insolventes deberían ser cualita- dades anónimas que han solicitado crédito, pero el Consejo de administración
tivamente distinguidos de aquellos "mandatos" del acreedor a los deudores da órdenes terminantes a la dirección de la empresa en virtud del deber de
todavía no encausados. Por el contrario, puede desarrollarse una situación obediencia. Puede ocurrir también que un banco de emisión induzca a los
considerada como "dominante" en las relaciones sociales de salón, en un mer- grandes bancos a adoptar una serie de condiciones y persiga con ello, en
cado, en una cátedra universitaria, entre la oficialidad de un regimiento, en virtud de su poderío, una supervisión decisiva y reglamentadora de su conducta
cualquier relación erótica o caritativa, en una discusión científica o. en un frente a los clientes, ya sea para alcanzar fines de política monetaria o econó-
juego deportivo. Tomado de modo tan amplio, el concepto de "dominación" mica, o bien, en tanto que está expuesto a la influencia del poder político,
no sería, empero, una categoría científicamente utilizable. En tan amplio para alcanzar fines puramente políticos: por ejemplo, a .fin de asegur~r. la
sentido resultaría aquí imposible una completa casuística de todas las formas, preparación financiera para la guerra. Si puede conseguirse tal SUperVISIón
condiciones y contenidos del "dominar". Por eso, alIado de otras numerosas. y puede luego formularse en forma reglamentaria, se crean entonces trámites
formas posibles nos representamos dos tipos radicalmente opuestos .de domi~ especiales para la decisión de los casos dudosos. Y si esta reglamentación ad-
~ ~~p'arte;1a dominaci6n mediante una constelación de intereses. quiere un carácter cada vez más riguroso =-todo 10 cual es teóricamente posi-
(es ecialmente mediante SItuaCIOnes e. mono 010; or o a medIante la ble, la entidad en cuestión puede, por efecto del.dominio ejercido, compararse
aufon a . po er e man o y deber de obediencia). El tipo más puro de con la autoridad que posee una instancia burocrática oficial sobre los que
la pilmera forma es el dommio mono atizador de un mercado. El tipo más están sometidos a ella, adquiriendo tal subordinación el carácter de una rela-
puro de la iíltima forma es el po er ejerci o por e pa re e famIlIa, por el ción de obediencia de carácter autoritario. Lo mismo ocurre con el dominio
funcionario o por el ~ríncipe. El primero se basa, en su aspecto puro, prin. que ejercen las fábricas de cerveza que disponen de capital sobre los detallis-
clpalmente en las muencias que, a causa de cualquier posesión ·(0 de los tas, con una agrupación gremial alemana de editores en lo que respecta a los
p'recios fijados en el mercado), se ejercen sobre el tráfico formalmente "libre" libreros, con la Standard Oil Company frente a los que trafican con petróleo,
de los dominados ue se ins ira n en su ro io interés. El último se basa en con la dirección del Sindicato del Carbón frente a los que en él se abastecen.
el hecho de recurrir al deber de obe iencia con a so uta inde endencia de Mediante un desarrollo consecuente y de un modo gradual, pueden todos ellos
toda suerte de motivos e intereses. a a uno e e os se convierte aci mente transformarse en agentes de ventas a comisión de sus proveedores y quedar
en su contrario. Por ejemplo, toda gran central bancaria y todos los grandes. sometidos a la autoridad de un jefe, hasta el punto de que, al final, no podrán
bancos. de crédito ejercen con frecuencia una influencia "dorninadora" sobre ya acaso distinguirse exteriormente de los. capataces y de otros empleados
el mercado capitalista a causa de .su posición monopolizadora. Pueden impo- privados. Existe un tránsito gradual que va desde la dependencia de he~ho
. ner a los que buscan crédito ciertas condiciones para su concesión y, por lo a la esclavitud formal de la Antigüedad, así como, ya en las Edades Media y
c.tatJtc:>!puedenejercer una. influencia considerable sobre su conducta econó- Moderna, desde la dependencia del artesano de la industria de exportación
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respecto al comerciante bien introducido en el mercado a la dependencia, tan zona abarcada por su territorio era, por su mayor extensión, el mercado de~i-
varia, de la industria doméstica y, finalmente, al trabajo a domicilio sometido sivc; 10 ejercía en la Confederación germánica, en parte porque poseía la más
a la reglamentación autoritaria. Y desde aquí existe a su vez un tránsito gra- extensa red de ferrocarriles, el mayor número de cátedras universitarias, etc.,
dual hasta la situación de cualquier oficinista, técnico o trabajador que, me- y podía paralizar las administraciones correspondientes de los demás estados
diante un contrato de trabajo en el que consta formalmente una "igualdad de de la confederación que, desde un punto de vista formal, poseían iguales
derechos" y mediante aceptación formalmente "voluntaria" de lo "ofrecido", derechos; * en parte por otras razones análogas. N ueva York lo ejerce en una
se coloca, sin embargo, de hecho bajo una disciplina que no se diferencia ya esfera política más restringida en cuanto sede de los grandes poderes finan-
de la existente en un negociado oficial y, finalmente, en una organización cieros. Se trata de formas de der derivadas de constelaciones de intereses,
militar. De todos modos, la diferencia entre los dos últimos casos -el hecho i ales o arecidas a las relaciones de oder de merca o er
de que el trabajo o el empleo sean voluntariamente aceptados y abandonados, so e su desenvolvimiento se transforman fácilmente en relaciones autoritarias
en tanto que el deber impuesto por e! servicio militar (entre nosotros, en foÍmalmente establecidas o, mejor dicho, que puede socializarse en una hete·
oposición al antiguo enganche a base de soldada) es enteramente obligato- . rocrla1ia MI poder de mando y del aparato coactivo. Además, y en virtud de
rio-, esta diferencia es más importante que la existente entre e! empleo su irregularidad, la dominación condicionada por las constelaciones de inte-
oficial y el privado. Pero como también la relación de subordinación política reses o por circunstancias de mercado, puede producir una sensación más ago-
puede ser libremente aceptada y hasta cierto punto libremente perdida, lo biadora que la causada por una autoridad expresamente establecida mediante
mismo que lasdependencias feudales y en-algunos casos inclusive' las 'depen- deberes, fundados en la obediencia.' Pero ello no puede importamos para la
dencias patronales del pasado, el tránsito ala forma de relación autoritaria conceptuación sociológica. En 10 que sigue nos proponemos emplear el con-
(por ejemplo,"de los esclavos) enteramente involuntaria '1 para los sometidos cepto de dominación en su sentido limitado, que se opone radicalmente al
completamente insoluble, es también fácil y posible. Por naturaleza, inclusive poder condicionado por constelaciones de intereses, especialmente las de mer-
en toda forma de relación autoritaria basada en e! deber existe, OL lo mis- cado, poder que en todas partes se basa formalmente en el libre juego de los
mo que se obedece, una cierta proporción mínima de interés, un m vi in- intereses. En nuestro sentido es, por lo tanto, idéntico al llamado poder de
mando autoritario.
evitable de obediencia. Todo aquí es, por tanto, variable y fluctuante. A
pesar de todo, y con él fin de establecer en general distinciones útiles dentro Consi ientemente entendemos a uí or "dominación" un estado de co-¡ o,
del flu'o del acontecer real deberemos determinar ri urosamente la oposición sas or e cual una voluntad manifiesta "mandato" del "dominador" o de .'14.:
radical ue existe, r e'em lo, entre e cam 10 en e merca o re u a o ex- os "dominadores" influ e sobre los actos de otros de! "dominado" o de los
e usivamente or com romiso e intereses esto es entre e o er ' e ectivo "dominados"), de tatsuerte que en un grado socia mente relevante estos actos:
Ruramente derivado de la posesión de bienes, y el po er 'autoritario de po- tienen lugar como si los dominados hubieran adoptado por sí mismos y corno]
der de familia o del monarca que se limita a recurrir al deber de obediencia. máxima de su obrar el contenido del mandato ("obediencia")..
Pues la multiplicidad de las formas del poder no se agota en los ejemplos
1. Si se quiere tomar por base el concepto de dominación aquí indicado, es
aquí citados. La misma posesión de bienes no ejerce simplemente poder en inevitable formular la anterior definición con la reservade un "como si". Por una
la forma indicada del mercado. Como ya hemos visto, aun en las relaciones parte, no son suficientes para nuestros fines los meros resultados externos, el cum-
sociales indiferenciadas y cuando implica cierto modo de vivir, dicha posesión plimiento efectivo del mandato, pues no es indiferente para nosotros el sentido
otorga un amplio poder social que se revela en la posición ocupada por el de su aceptación en cuanto norma "válida". Por otra parte, el enlace causal que
hombre que "lleva un gran tren", "tiene una casa" o por la mujer que "abre liga el mandato a su cumplimiento puede adoptar formas muy diferentes. Desde
un salón". En ciertas circunstancias, todas estas relaciones pueden adoptar el punto de vista puramente psicológico,un mandato puede ejercer su acción me-
rasgos directamente autoritarios. Y dan lugar a una dominación, entendida diante "compenetración" --endopatía-, mediante "inspiración",** por "persua-
en aquel amplio sentido, no sólo el tráfico de mercado, sino también en las sión" racional o por combinación de algunas de estas tres formas capitales. Desde
relaciones convencionales de la vida social, desde los llamados "leones de el punto de vista de su motivación concreta, un mandato puede ser cumplido por
.los salones" hasta los privilegiados arbiter elegantiarum de la Roma imperial convencimiento de su rectitud, por sentimiento del deber, por temor, por "mera
costumbre" o por conveniencia, sin que tal diferencia tenga necesariamente un
y las 'cortes de.amor de las damas provenzales. Y tales situaciones de domina- significadosociológico. Mas, por otro lado, el carácter sociológicode la domina-
ción no se limitan a la esfera del mercado o de la relación social privada. A ción ofrece diferentes aspectos de acuerdos con las divegrencias existentes en los
veces puede ejercer una hegemonía despótica considerable, sin necesidad de fundamentos generales de su validez.
poseer un poder formal, un Empire State -mejor dicho, los hombres que 2. Como hemos visto, numerosos puntos de transición conducen desde el pri-
influyen en él autoritaria mente o por medio del mercado-, tal como lo reve- mer amplio sentido que hemos dado al hecho de "hacerse valer" una dominación
lan típicamente Prusia en la Unión aduanera y en el Imperio Alemán o, en
grado menor, la ciudad de Nueva York en los Estados Unidos de América. • Escrito antes de 19H. (E.]
La burocracia prusiana ejercía este poder en la Unión aduanera, porque la •• Ver estos conceptos en la Parte Il, cap. I, § Z. (E.]
-r .~. . ,

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. ·700 ~OLOCÍA DE LA DOMINACIÓN


ESTRUCTURAS Y FUNCIONA..\1IENTO DE LA DOMINACIÓN 701
(en el mercado, en l~s salones, en el proceso de la di¡'}lSión o donde fuere) hasta § 2. Dominar y gobierno. Naturaleza
¡lil y límites del
el limitado significado con que últimamente lo emplcrmos. Para la más rigurosa gobierno democrático
determinación de este último deseamos indicar brevemente algunos aspectos. Una
relación de dominación puede. desde luego. presentar. por lo pronto. un dobl~ I...a....Jj.Qminación~' nos interesa aquí ante todo en cuanto está .relacionadal
aspecto. Los modernos funcionarios de diferentes "negociadas" están mutuament~ ~~ ::r~im~p--ª-«...gQ.1?iem.\Í'. Toda dominación se manifiesta y funciona ~
sometidos cada uno dentro de la "'urisdicción" de otros a un oder de mando. en forma de obiemo. Todo régimen de aobiemo necesita del dominio en t!;.-i ~ I
Esto no presenta dificultades para su comprensi n, ~ero cuando se encar~an. por a ~~.~~ pues para su desempeño siempre se deben colocar en manos de:l <::
ejemplo. un par de botas a un zapatero. (domina" éste sobre el cliente Q d cliente alguien poa,eres imperativos. El poder de mando puede tener una modesta, I
!
sobre aquél? La respuesta a esta pregunta sería muy distinta según los casos, pero apariencia Leljefe puede_~nsiderarse com2 =.un "seryidor" de los domin~~os, !.{,
puede decirse.casi siempre que la voluntad de cada uno de los dos sobre un sector
parcit1l del proceso influye, y en este sentido también "domina" la voluntad del otro
E~!,?_<2.c.!:!rr~.c~s.1sleIEflre en el lraiñaCfo gObierno dlrecta'f!lente democrdtIC.Q.¡ 0;
Se llama "democrá~~.(t por dos razones que no coinciden necesariamente: 1) -'
inclusive contra su resistencia. Por este motivo es difícil elaborar un concepto pre·
ciso de la dominación. y así ocurre asinúsmo en todas las relaciones de intercam- porque se basa en la suposición de 3ue todo el mundo esd en QrinQpio igual:
bio, inclusive en las de ti ideal. Además, cuando, por ejemplo =-como ocurre menteCaTíficaaopaIala direCCión de-fOs"'asuntos~comunes; 2} l!0rgue reduc,f!.
con ecuencia en las aldeas asiáticas- un artesano trabaja en virtud de un norn- aToffiínimo el alcance de! poder 5~e man<lQ.. En tal régimen, -las funciones.
. bramiento fijo, ¿es dominador .dentro de su "competencia" profesiona]. o. está do- de gobierno se transmiten simplemente mediante un sistema de turnos o se:
minado? Y en este último caso, ¿por quién lo está? Se tiende aquí a-rechazar la ejercen mediante suertes o por elección directa .durante un breve periodo, ¡;.:./ ¡
aplicación del concepto de "dominación", excepto cuando, por un lado, se aplica reservándose a los miembros de la comunidad todas las decisiones importan-i
a los posibles operarios sometidos a su poder, y cuando, por otro, se refiere a los tes y correspondiendo a los funcionarios sólo la preparación y ejecución de las:
que pueden ejercer una autoridad sobre el artesano, es decir, a las persqnas que disposiciones, así como la "dirección de los asuntos corrientes" de acuerdo'
ejercen sobre él un poder de mando o de "inspección". Esto es, empero, lo quesig-
nificaba la limitación a nuestro concepto más restringido. Mas la situación de un
con lo~ decretos establecidos por la asamblea de los miembros. Siguen el an- i
terior esquema el régimen de gobierno de muchas entidades privadas, de algu-I
alcalde de aldea y,. por tanto, de una "autoridad" puede estar determinada de la nas entidades políticas (en cierta medida todavía en la actualidad, por lo'
misma manera que la de dicho artesano .. Pues la diferencia entre un "negocio" menos en principio, lo hacen las comunidades rurales suizas y los municipios'
privado y el "desempeño de un cargo" público, tal como exis.te entre nosotros, es
sólo el roducto de una evolución en ,modo al no está en todas ~artes tan bien
de Estados Unidos), de nuestras universidades (en tanto que se halla en I
__ a_o ara a concepci n popu ar norteamericana, por e¡emplo, a "autondad" . manos del rector y de los decanos) y de numerosas agrupaciones análogas. No I
de un juez no constituye un business diferente del de un banquero. El juez es un obstante, por reducida que sea la esfera de! poder, deberán siempre confiarse I
hombre dotado del privilegio de dictar una sentencia (decisio7T) en favor de una a algún funcionario ciertas facultades de mando, con lo cual su situación,
parte por medio de la cual ésta puede obligar a la otra a realizar algo o, al revés, le pasará insensiblemente de la simple administración a una auténtica y expresa
permite defenderse contra sus pretensiones. En virtud de este privilegio disfruta jefatura. A tal transformación se oponen justamente los límites "democráti-
de utilidades directas e indirectas, legítimas e ilegítimas, por cuya posesión paga cos" de sus funciones. Pero con frecuencia se atienen a la "paridad" y "re-
una parte de sus honorarios Jfee) al jefe del partido político que le ha proporcio- ducción, a lo mínimo" del poder de los funcionarios inclusive los gremios,
nado su situación. Por nuestra parte. atribuiremos una "dominación" al alcalde anstocráticos dentro y frente a los miembros de la propia capa dominante, :
de aldea, al 'uez al ban uero v al artesano solamente cuando exi'an en un rado Así ocurre con la aristocracia veneciana, 10 mismo que con la espartana o con
SOCIa mente fe evante) encuentren "obediencia" en sus mandatos Un concepto :Ios profesores titulares de una Universidad alemana, todos los cuales adop-
de amplitud adecuado sólo puede obtenerse haciendo referencia al "poder de man-

ª
tan las mismas formas "democráticas"( sistema de turnos, suertes o elección'
do", si bien no hay que olvidar que en la realidad de la vida todo es "fluctuante". por breves periodos).
Es completamente comprensible que a los efectos de la consideración sociológica
Esta forma de obierno tiene lugar normalmente en asociaciones ue re-
sea determinante, no el aspecto "ideal" de tal poder deducible en forma dogmático-
jurídica de una norma, sino el aspecto fáctico; esto es. se comprende que el ejercicio sentan as siauientes características: 1 limitación local, 2 limitación en el
de una pretendida autoridad para dar determinadas órdenes produzca efectivamente número de participantes, 3) poca diferenciación en la posición social de os
consecuencias socialmente importantes. Sin embargo, la consideración sociológica artici antes. Además resu one 4 tareas relativamente sim les y estables
se apoya naturalmente en el hecho de que el poder de mandar "fáctico" suele exi- y, a esar e e! o 5) una no escasa instrucción ráctica en la determinación' r>

gir el complemento de un "orden" normativo legal, y opera así forzosamente en o jetiva de los medios y fines apropiados. (Así ocurre en e regimen e go- \'d
relación con el sistema de nociones jurídicas. blemo directamente democratlco que se encuentra en Suiza y en Estados Uni-
dos, lo mismo que dentro de! ámbito administrativo de! "Mír" ruso). Por lo
tanto, no significa a uí para nosotros un tí ¡co unto de artida históñCaC'l'C
una sene evo utlva , silla pnnclpa mente un caso Imite tlQol gico e gus:
arrancamos en nuestra indagación. Ni el sistema de turnos, ni la insaculación,

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702 SOCIOLOGiA DE LA DOMINACIÓN
ESTRUC11JRAS y FUNCIONA.'dIENTO DE LA DOMINACIÓN 703
en el seno de las comunidades locales y, por tanto, en particular dentro de
una asociación de vecinos. Lo único que ocurre es que el predominio de los
honoraiiores en los tiem os anti os tiene, or 10 pronto, un carácter comple-
tamente istinto del de la actual "democracia directa" racionalizada. La causa
de la cualidad de notable es primitivamente la edad. Independientemente del
prestigio que otorga la ex eriencia, los "ancianos" son or sí mismos de mod~
I~table.!. 100000000rcrtlOres natura es en to as as actividades sociales gue
se basan exclusivamente en la "tradición" , or tanto, en las comunidades
orienta as en a convenci n, en el derec o consuetudinario y en el derechó
sag!a"Oo:-Fuescomo conocen la tradición, sus pareceres, su sabiduría, su pre:'
vio placet (1tQo/ioVAEf.lU) o su ratificación posterior iautoritas) garantizan la
corrección de los juicios formulados por los miembros de la comunidad frente
a las potencias celestiales y constituyen el arbitraje más eficaz en los casos
de litigio, Los "ancianos" son, cuando existe una igualdad aproximada en la
situación económica de los miembros -de la comunidad, simplemente los más
viejos'en años y casi siempre los más viejos de las comunidades domésticas,
clanes y vecindarios.
El relativo prestigio de la edad en cuanto tal dentro de una comunidad
cambia de un modo considerable. Cuando las posibilidades de vida son muy
escasas, el sujeto que no tiene ya capacidad física para el trabajo suele resultar
gravoso, Cuando hay un estado de guerra crónico, se desvanece en general
la im ortancia de la edad frente a los ue ueden llevar las armas sur 'endo
con ecuencla una consigna "democrática" de los jóvenes contra su prestigio
(sexagenarios de ponte), Lo mismo ocurre en todas las épocas de reorgani~
zación económica o política, militar o pacífica, así como cuando no está sóli-
damente desarrollado o se encuentra en decadencja el poder práctico ejercido
tor las creencias religiosas y, por tanto. el temor ante el carácter sagrado de
a tradición. En cambio, se conserva la estima por la edad siempre que se
reconoce el valor objetivo de la experiencia o el poder subjetivo de la tradi-
ción. Sin embargo, el destronamiento de la edad como tal no tiene lugar
re u1armente en favor de la 'uventud sino en favor de otras formas del res-
ti~io social. Cuando existe una diferenciación económica o estamenta, os
"Consejos de ancianos" (gerusias griegas, senados) suelen conservar su carác-
ter ori inario sólo de nombre, ro 'de hecho son ocu ados or honoratiores
en e sentI o antes mencIOna o - onoratlOres e tIpo econ mIco - o p?r
privile iados "estamentales", cu o oder se basa siem re, en última lOstancla,
en a cuantía o especie e sus lenes. rente a e o y en ocasiones a as, ~
consIgna de la obtenCIón o conservacIón del régimen "democrático" a favor
de los desposeídos o de los grupos poseedores económicamente poderosos, pero
excluidos del "honor" social, puede convertirse en un medio de luchar contra
los honotaiiores. Pero como los honoratiores, a causa de su prestigio estamen-
tal y de las personas que dependen económicamente de ellos, están en dispo-
sición de procurarse una "tropa de protección" constituida por desposeídos, la
lucha tenderá a convertirse en cuestión de partidos. Sin embargo, con la apa-
• Véase supra, p. 233. En este parágrafo gobierno = administración pública en sentido amplio rición de l~.lucha de los partidos por el poder, la democracia directa pierd~
(véase Parte II, cap. VD!, § 6). necesariamente su carácter ecífico ue contiene la "dominación" sólo en
germen. ues to' o partí o es una organización que lucha específicamentc¡

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704 . SOCIOLOGÍA DE LA DOMINACIÓN ESTRUCTURAS Y FUNCIONAMIENTO DE LA DOMINACIÓN 705
posición de éstos junto con un círculo interesado de personas, en virtud de la
participación en el mando y en sus ventajas, colaborando así en el ejercicio
de los poderes imperativos y coactivos encaminados a la conservación de la
dominación ("organización"). Nos proponemos llamar "señores" a los dirí-
zentes cuyo poder de mando efectivamente ejercido no procede de una dele-
gación de otros señores. Y llamaremo.s ·"aparato" (de mando) al conjunto
de personas que se ponen a su disposición en la forma antes mencionada, La
estructura de una forma de dominación recibe su carácter socjológjco ante
todo del modo característico general. en que se efectúa la relación entre el
señor o señores y el aparato de mand.Q, y entre ambos y los dominados, así.
como de los rinci ios es ecíficos de la "organización", es decir, de la distrj·
ucion de los poderes de mando. Pero, adernás.oo recibe de múltiples facto-
res que permiten determinar los diversos principios sociológicos que rigen la
clasificación de las formas de dominación. Sin embargo, para los fines lirni-
: tados que aquí perseguimos, nos remontamos a los tipos fundamentales de
dominación que se revelan cuando nos formulamos la siguiente pregunta: ¿~
qué últimos principios puede apoyarse la validez, la legitimidad de una forma
de dominio, es decir, la exigencia de una obediencia por parte de los "funcio-
narios" frente al señor y por parte de los dominados frente a ambos?
Al hablar del "o~g.~l!.~E]i~iurídico" hemos encontrado ya este problema
de la "legitimidad", problema cuya significación tendremos que fundarrienta~
aquí de un modo más general. El hecho de que el fundamento de la legiti-
mwad de esta fOrma de dominación no sea una mera cuestión de especula~
ciónteorica o filosófica, sino que da origen a diferencias reales entre las dís-
tintas estructuras em ¡ricas de las formas de dominación se debe a ese otro
§ 3. La dominación mediante "organización". Los fundamentos
hec o eneral inherente a toda forma de dominación e inclusive a toda ro-'
de su legitimidad
ba i idad en la vida~ la_a,utojustificaci n. a mas senci a o servacion muestra
~a posición dorriinante de las personas pertenecientes a la organización men- que en todos los contrastes notabíes que se manifiestan en el destino y en la
cionada frente a las "masas" dominadas se basa siempre en lo que recien~ situación de dos hombres, tanto en lo que se refiere a su salud y a su situa-
temente se ha llamado la "ventaja del pequeño número", es decir, en la . ción económica o social como en cualquier otro respecto, y por evidente que
posibilidad que tienen los miembros de la minoría dominante de ponerse sea el motivo puramente "accidental" de la diferencia, el que está mejor
rápidamente de acuerdo y de crear y dirigir sistemáticamente una acción so- situado siente la urgente necesidad de considerar como "legitima" su posición
ci~taria racipnalmente ordenada y encaminada a la conservación de su posi..,. privilegiada, de considerar su propia situación como resultado de un "mérito"
cien dmgente. De este modo, la actuación amenazadora de las masas o de la y la ajena como producto de una "culpa". Esto se manifiesta también en las
com~nidad podrá ser fácilmente reprimida, siempre que los que oponen resis- . relaciones existentes entre los grupos humanos privilegiados en sentido posi-
tenc;a no ?ayan adopta.do precauciones igualmente eficaces para. dirigir una tivo y negativo. La "leyenda" de todo grupo privilegiado es su superioridad
accion societana encaminada a la obtención de un dominio. La "ventaja del natural y, si cabe, su superioridad "sanguínea". En las relaciones que se
pequeño número" a?quiere su pleno valor por la ocultación de -las propias manifiestan en la distribución estable de poderes, así como en la articulación
,.
o.·
intenciones, por las firmes resoluciones y saber d~QminadQ~ Todo esto de los "estarnentos", sobre todo cuando hay una escasa racionalización del
se hace más difícil e improbable a medida que aumenta su número. Todo pensamiento sobre la forma de la ordenación jerárquica, tal como resulta natu-
aumento del "~ecreto del car~o" constituye un síntoma de la intención que ral para las masas en tanto que por la fuerza de las circunstancias no se hacen
tienen lo~ dommadores. de afirmarse en el poder o de su creencia en la ame- de ello "problema", las capas en situación negativa de privilegio aceptan
naza c~eclente que se cierne sobre el mismo. Toda dominación que pretenda asimismo tal leyenda. En las épocas en que la situación de las clases es evi-
la continuidad es hasta cierto punto una dominación secreta. No obstante las dente e inequívoca y se considera como obradora del destino, la mencionada
disposiciones específicas adoptadas mediante la socialización con vistas al' do- leyenda de los privilegiados acerca de la suerte merecida del individuo cons-
minio consisten, de un modo general, en el hecho de que una persona acos- tituye con frecuencia uno de los motivos que más apasionada~ente irri~an a
tumbrada a obedecer los mandatos de los íefes se ponga constantemente a dis- las capas privilegiadas en sentido negativo. Esto ocurre en ciertos penados

.,.
1.:-
DOMINACIÓN LEGÍTIMA 707

II. Los TRES TIPOS PUROS DE LA DOMINACIÓN LEGÍTIMA H

Legitimidad ,de la cfuminación; fundamentos de la legitimidad. 1, Dominación legal.


II, Dominación tradicional, HI, Dominación carismaríca.

La ~ominaci6n, O sea la probabilidad de hallar obediencia a un mandato


'f,'
® determinado, puede fu~darse .en diversos motivos: puede depender directa~
ment~ de ~a const~lacI6n de mtereses. o sea de consideraciones utilitarias de
v~taJas e mcon~~mentes ?O~.parte de.l que obedece; o puede depender tam-'
~I~n de la mera costumbre . de la ciega habituación a un comportamiento
Ulveterado. o puede fundarse. por fin, en el puro afecto, en la mera inclina-
ción personal del s~bdito ". Sin embargo, la dominaci6n que sólo se fundar~
en tales móviles sena relativamente inestable, ~n las relaciones entre dorni-

.: Véase supra, pp, 40 s. [E.] ,


Primera impresión en Preussísche Jahrbücher ("Anuarios prusianos"), vol. CLXXXVU 19Z2
pp. 1 ss. ,,' ,

---~---------------~- -
.....•
708
DOMINACIÓN LEGÍTIMA

• Cf. Parte 1, cap. m, § 7; también la página siguiente.

••
\ .....
" -,

DOMINACIÓN LEGf:n:MA 711


710 . SOCIOLOGÍA DE LA DOMINACIÓN
que rompe
...
-

712 . SOCIOLOCÍA DE LA DOMINAC16N DOMINAC16N LEGÍTIMA 713


dícional. De ahí, también, sólo mientras dichas cualidades le son atribuidas, o
sea mientras su carisma subsiste. En cambio, cuando es "abandonado" por
su dios, o cuando decaen su fuerza heroica o la fe de los que creen en su
calidad de caudillo, entonces su dominio se hace también caduco. El cuerpo
administrativo es escogido según carisma y devoción personal, V no por
razón de su calificación rofesional como el funcionario , de su clase (como
el cue o administrativo de clase o de su e en encla om tIca o en a gu-
na otra forma personal (como es el caso con e! cuerpo a mirustrativo patnar-
cal). Falta aquí el concepto racional tanto de la "competencia" como del
"privilegio" de clase. Son exclusivamente determinantes de la extensión de la
legitimidad del secuaz designado o del apóstol la misión de! señor y su cali-
ficación carismática personal. La administración -en la medida en que pue-
da hablarse de tal carece de toda orientación por reglas, sean éstas estatuidas
o tradicionales. La caracterizan, antes bien, la revelación o la creación ac-
tuales, la acción y el ejemplo, las deCÍ'sione~pa¡ticulare~J!n.-todo cal;o
-medido con la escala de las ordenaciones estatuidas- el e!émento irracio-
nal. No se halla ligada a la tradición: "está escrito, pero yo os digo... " se .
aprrca al profeta, en tanto que para el héroe guerrero las ordenaciones legíti-
mas desaparecen frente a la nueva creación por la fuerza de la espada y, para
el demagogo, en virtud del "derecho natural" revolucionario por él procla-
mad.o y sugeri,do. La forma genuina de la jurisdicción y e! zanjamiento de
litigios cansmáticos es la proclamación de la sentencia por el señor o el "sa-
bio" y su aceptación por la comunidad (de defensa o de credo), y esta sen-
tencia es obligatoria, siempre que no se le oponga otra, concurrente, de
carácter asimismo carismático. En este caso nos encontramos ante una lucha
de caudillos, que en última instancia sólo se puede resolver por la confianza de
la comunidad -y en la que el derecho sólo puede hallarse a uno de los dos
lados, en tanto que al otro lado sólo puede existir la injusticia merecedora
de castigo.
a) El ?PO de dominación carisinática ha sido descrito espléndidamente
p~r vez pnmera -~un SIn apreciado todavía como tipo-- por R. Sohm en su
Kirchenrech: [iit die altchristliche Cemeinde ("Derecho eclesiástico para la
antigu~ comuni~ad cristiana"); a partir de entonces la expresión se ha veni-
do utilizando .relteradamente, pero sin apreciarse su extensión por completo.
El asado antImo sólo conoce al lado de intentos insi nificantes de dominio
"estatuido", ue sin duda no faltan totalmente a ivisi n e con'unto e
to as .as re aciones de dominio en tradición carisma. Al lado del "cabecilla
económico" (sachem) de los indios, tipo esencia mente tradicional, figura
el princ:pe guerrero carismático (que corresponde al "duque" alemán) con
su séquito, La caza y las campañas bélicas, que requieren una y otras un
caudillo personal adornado con cualidades poco comunes, constituyen el área
mundana del caudillaje carismático, en tanto que la magia constituye su ám-
bito "espiritual". A partir de entonces, la dominación carismática de los
profetas y los príncipes guerreros se extiende sobre los hombres, en todas
las épocas, a través de los siglos. El ~lítico carismático -"demagogo"-
es un roducto de la ciudad-estado occlentaI. En la ciudad-estado de [eru-
sa n s o aparecla con vesti ura re igiosa, como profeta; en Atenas, en carn-

-------------~.
714 ~OLOCÍA DE LA DOMINACIÓN DOMINACIÓN Ü.CÍTIMA 715
se ~efiere a las relaciones del señor con el cuerpo administrativo, es de apli- pectivamente, de "preelección" es secundaria. Este concepto moderno ha de
~élón. en general la frase según la cual: por lo regular, el señor, en virtud del descartarse por completo. En efecto, de ~cuerdo co~ la idea originaria no se
aislamiento de los miembros de dicho cuerpo y de la solidaridad de cada trata de una "votación" referente a candidatos elegibles entre los que se dé
uno de ellos con él mismo, es el más fuerte frente a cada individuo renitente, una elección libre, sino de la comprobación y el reconocimiento del "v~da-
pero es en todo caso el más débil si éstos -como ha sido ocasionalmente el
dero", del señor calificado carismáticamente y llamado a asumir la sucesión.
caso tanto en el pasado como en el presente- se asocian 'entre sí, Sin
Una elección "errónea" constituía, por consiguiente, una injusticia que había
embargo, se requí~re u~ acuerdo cuidadosamente planeado de los miembros
del cuerpo administrativo para paralizar por medio de obstrucción o de con- que expiar. El postulado propiamente dicho era: tenía que ser .posible conse-
tratación deliberada la influencia del señor sobre la actuación de los asociados guir unanimidad, ya que lo contrario comportaba error y debilidad. ,
y, con aquélla, su dominio. Y se requiere asímismo la creación de un cuerpo En todo caso, la creencia ya no era directamente en la persona como tal,
administrativo propio. sino en el señor "correcta y válidamente designado" (y eventualmente entro-
~) L:adominación carismática es una relación social ewecíficamente extra- nizado) o instaurado en alguna otra forma en :~l poder, a la manera de un
ordinaria y puramente personal., En caso de subsistencia continuada, a más objeto de posesión. ,. ', " .
Q tardar con la desaparición del portador del carisma tien e la re aci n e 0- 3) Por "carisma hereditario", en la idea de que la cahficacIOn cansmatica
U minio --en el último caso citado cuando no se extin e de inmediato sino reside en la sangre,
, El pensamiento, obvio en sí, es prim~o el de un '''der~cho de sucesión"
<Lue,subsiste en' al na for¡na, asando la autori ad del ~eñot ,a sucesores--
a nvertirse en cotidiana: 1 or tra iClOnalzaci n e las ordenaciones. En en el dominio. Este pensamiento sólo se Impuso en el OCCidente en la Edad
Media:. Con frecuencia, e! carisma sólo está ligado a la familia, y e! nuevo
luga~ ~e la ~ueva creación carismática proseguida en el derec o y en a orden
administrativa por el portador del carisma o por el cuerpo administrativo ea- portador actual ha de determinarse primero es~ecialment~, según una .~e las
reglas y métodos mencionados bajo 1 a 3. Allí donde existen reglas fijas en
rismáticamente calificado se introduce la a~toridad de los prejuicios o de los
relación con la persona, éstas no son uniformes. Sólo en el OCCidente me-
p~eced~ntes q.ue ~a.protegen o le son atribuidos; 2) por paso del cuerpo admí-
dieval yen e! Japón se ha impuesto sin excepción y de modo unívoco e! "rj~r~-
nistrativo cansmatico, del a ostolado o del s uito, a un cue o le al O de
cho hereditario de primogenitura", con refuerzo considerable de!. dominio
clase, me la~te asunci n e derec os e omllllO mternos eu os, preben-
das) o apropiados por privilegio; 3) por transformación del sentido del propio correspondiente, ya que todas las demás formas daban ocasión a conflict~s.
r..tgJ~,ellcia no es entonces directamente en la persona como tal, SIllOel}
ca~. Es determinante para ello la clase de solución de la cuestión palpi-
el "timo" de la dinastía. El carácter uramente actual exm-
tante, tanto por mot~vos'ideales como materiales (a menudo ante todo), del
ordinario del carisma se transforma en sentido acentua amen te tra IClOna"y
problema de la ~c~6n. Esta puede darse de diversos modos: la mera espera
pasIVade la aparición de un nuevo señor carismáticaIriente acreditado o cali- . también e! concepto "por la gracia de D~oszzse mod~fica por co~pleto en su
sentido (= señor por pleno derecho propI.o,y no en VIrtud de cansrna personal
ficado suele ser reemplazada -sobre todo si se hace esperar y si poderosos
reconocido por los súbditos). La pretensión al dominio es en este caso total-
mteres~, sean de l.a clase que fueren, se hallan ligados a la subsistencia de la
aSOClaCIOn de dominio -por la actuación directa en vista de su obtención. mente independiente de las cualidad~s personales, .
4) Por objetivacióri ritual de! cansma: la creenCia,de que se trata d~ una
a) Por la bús ueda de si os de la calificación carismática. Un tipo bas-
~ tante puro: la búsqueda del nuevo Dalai Lama. caracter estrictamente cualidad mágica transferib1e o produéible por medIO de una determmada
clase de hierurgia: unción. imposición de manos u otros actos sacramentales,.
(t- ) personal y extraordinario del carisma se convierte de este modo en una cua-
La creencia no está ligada ya entonces a la persona del portador del C?-
l> lidad que se confirma por reglas.
risma -de cuyas cualidades, la pretensión de d<:>m~n~o (COm? se lleva a tér-
b) Por medio del oráculo, de la suerte o de otras técnicas de desi ación.
La creencia en a persona e ca i ca o carisrnáticarnente se convierte aSI en
ñiiñO en forma particularmente clara en el pnnClplO católIco. del carác.ter
creencia en la técnica correspondiente.
indelibilis del sacerdote) es más bien absolutamente independiente-, S!!!!!
c) Por design~cjón del calificado carismáticamente. '.' '. . a la eficacía del acto sacramental en cuestión.
1) Por el propio portador del carisma: designacioo de sucesor. forma m1,ly 5) El principio carismático de legitimidad. intemretado conforme a su si~-
nificado rimario en sentido autoritario uede int retarse en forma anb~
frecuente, tanto .e~tr~ los profetas como entre los príncipes guerreros. _La
creencia en la legitimidad propia del carisma se convierte con ello en la creen- autoritaria. La validez efectiva de la ominaci n carisrnática se asa en e
cia .en la adquisición legítima del dominio en virtud de designación 'jurídica reconOCImiento de la persona concreta, como carismáticarnente calífi~da y
o divina, acreditada, por parte ?e .los súbditos '. Conforme a ~a conce~c~ón genwna d~J
. 2) Por un apost?Iado o un séquito carismáticamente' calificados con adi- carisma este reconocimiento es debido al pretendIente legItimo, en cuanta
ción del recon~Imlento por la comunidad religiosa o respectivamente mili- calificado. Sin embargo, esta relación uede int retarse fácilmente r
tar. La concepción de este procedimiento como derecho de "elección" o, res- desviación, en e se 1 o e ue e reconoclmlent-o 1 re o
ditos, sea a su vez el su uesto de la le itimidad su fundamento
716 . SÓCIOLOCÍA DE LA DOMINACIÓN DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 717
son asignados (medios coactivos de tipo físico, sagrado o de cualquier otra
índole). 3) Para el cumplimiento regular y continuo de los deberes así dist~-
buidos y ara el ejercicio de los derechos corres ondientes se toman las m~dl.
as necesanas con V1stasa nom ramiento e ersonas con a tItudes bien
determma as.
- Estos tres factores constituyen, en la esfera oficial, el carácter esencial de
. una autoridad burocrática o magistratura" y en la esfera de la economía
privada la sustancia de un despacho. En este sentido, tal institución se ha
desarrollado completamente en las comunidades políticas y ec1esiá~ticass619
cOlJ...1a
aparición del Estado moderno, y en la esfera d.e l~ economla pnvada
sólo con la aparición de las formas avanzadas .dtOlcawtahsmo.; En orgaruza-
ciones políticas tan extensas como las del Antiguo Onente, asi como en los
imperios gennánico y mogol formados mediante la conqU!~ta, y en m.uchos
.0Fganismosfeudales, ~as magistrat~~as permanentes con atribuciones fiJas.no
constituyen la regla, SITIO la excepclOn. El soberano hace cumplir las medrdas
más importantes por medio de comisionados personales~ de. comensales ~ de
servidores de palacio, a quienes se dan encargos .o autonz:¡clOn~ ~ta~lecldos
momentáneamente para el caso particular y no sIempre bien delimitados. /::?\
II. Rige el principio de la jerarquía. fync;íonal v de la.tra~itación, es..Jzir, (.s;.:.
J
ti'
!
un sístelllahrmemente or anizado de mando subordmacl6n mutua de las
au on a es me lante una mspeccI n e las in erioJes por las supenores, SIS-
~ , '
tema que ofrece al dominado la posibilidad s~lidamente regulada de apelar
de una autoridad inferior a Una instancia supenor.. Cuando este tipo de orga-
niZación ha alcanzado todo su desarrollo, tal jerarquía oficial se halla dispuesta
en forma monoctáiica. El principio de la tramitación jerárquica se encuentra
.tanto en las organizaciones estatales y eclesiásticas como en todas l~s demás
organizaciones burocráticas, como, por .ejemplo~e~ las grandes organizaciones
de partido y en las grandes empresas pnvadas, sm Importar para el caso que se
- r •quiera llamar o no "autoridades" a sus instancias privadas. Sin embargo, cuan-
III. ESE."iCIA, SUPUESTOS y DESARROLLO DE LA DOMINACIÓN BUROCRÁTICA do el principio de las "atribuciones" ha. sido .Ileva?O.a sus últimas ~ons~cue.n-
cias, y por lo menos dentro de los funclonan?s pubh~os, la sub~rdmacló,~ Je-
Características de 12 burocracia. Situación dd funciorurio. Los supuestos y fundamentos rárquica no es equivalente al poder que tIen~,.ra I~sta~,cla supenor de
de la burocratizacióo:· l. B= económicas y financieras. 2 El desarrollo cuantitati-
vo de las tareas administrativas. 3, Sus transformaciones cualitativas. 4. Las ventaj;u ocuparse simplemente de los quehaceres de los inferiores", La norma es lo
técnicas de la orgnización burocrática. 5. La concentración de los medio. administra· contrario, y por eso en el caso de quedar vacante una plaza ya establecida su -c.
tivos. 6. Lo nivelación de las diferencias sociales. Carácter permanente del aparato
reemplazo es inevitable. . (7;)
burocrático. Consecuencias económicas y sociales de 1. burocratización. El poderío
de la burocracia. Las fases de su desarrollo. La "racionalización" de la educación y de nI. La administración mo?erna se basa en documentos ex edlerites 0
b. formación cultur:Jl. conservados en borradores o mmutas, y en un cuerpo de empleados suba ter-
nos y de escribientes de tod~ da.se., El conjunto ~e los empleados que
de la burocracia moderna quedan expresadas del trabajan a las órdenes de un Jefe ¡unto con sus archivos de documentos y
expedientes constituye un "negociado" (llamado con frecuencia "despacho"
cuando se trata de empresas privadas). La organización moderna burocrática
distingue en principio entre la oficina y el despacho particular, pues separa
en general la actividad burocrática, co~~ sector espe~ial, de ~a esfera de la
vida privada, y los medios y recursos oficiales de los bienes pnvados del fun-
cionario. Se trata de una situación que en todas partes es sólo el producto

• Ver este concepto en Parte 1, cap. tu, § 5. [Ed.]


". I

DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 719


718 ' SOCIOLOGÍA DE LA DOMINACIÓN
en. el carácter de de.her. de la posición del empleado, por el cual queda deter-
de una evolución muy larga. Actualmente se encuentra tanto en las oficinas
~~nada del modo siguiente la es~ctura interna de.sus relaciones: la ocupa-
públicas como en las privadas, y en-estas últimas se extiende en rigor inclusive
clan de un cargo no es de hecho rn de .derecho considerada como la posesión
hasta los. mismos ~presari~s dirigentes. El despacho rel hogar, la corres-
d~ una fue~te de emolumentos, o rentas producidos por el cumplimiento de
pondencia c?m.er.clal y la pnvada, los bienes comerciales 'y los particulares se
Ciertas funciones -como ocurna normalmente en la Edad Media y reitera-
hallan en pnnClplO separados en toda organización comercial de tipo moderno
damente ?asta los ~mbrales de la Edad Moderna. Tampoco es estimada
-los comienzos de este proceso se encuentran ya. en la Edad Media. Como
como un intercambio remunerado de funciones, como ocurre en el contrato
particularidad del empresario moderno puede enunciarse el hecho de que
libre de ~abajo. La ocupación del cargo es considerada, inclusive en las em,-
actúa como el "primer empleado" de su empresa, así como el jefe de un Es-
presas pnvad~s, como la aceptación de un deber específico de fidelidad al
tado moderno especificarnente burocrático es designado como su "primer
cargo a cambIO de la garantía de una existencia asegurada. Para el carácter
servidor". La idea de que la actividad oficial burocrática y la actividad buro-
específico de la ~ealtad moderna al car~o, es decisivo el hech'o de que, cuando
crática que tiene lugar en los negocios privados son cosas esencialmente dis-
se trata de un. tipo puro, no se subordina =-como, por ejemplo, sucede en la
tintas entre sí, es propia de la Europa continental y, en oposición a nuestras
forma .de dO~llnaclOn feudal o patrimonial- a una persona a modo de señor
costumbres, es completamente extraña a los norteamericanos.
o patnarca, sino que se pone al servicio de una finalidad obietiva impersonal.
IV. La actividad burocrática, por lo menos toda actividad burocrática
Cierto es que, aureolándola ideológicamente y como sucedáneo de los sobera-
especializada '~y es ésta la específicamente moderna- presu~one norm'!r
nos personales terrenales o divinos, suele haber tras esta finalidad objetiva una
mente un conCienzudo a rendlza e roleslona:l. Esto resulta váll o tanto para
los je es y empleados modernos de una empresa privada como para los' fun- ~,eried~ :'~a~?r~ cul~ur~~es:: realizad?,s en una co~unidad: "Estado", "Iglesia",
Municipio", Partido", Empresa. El funCIOnario político, por ejemplo
cionarios públicos.
-cuando menos en un Estado moderno avanzado-, no es considerado como
V. En un cargo propiamente dicho, su desempeño exige todo el rendi-
el emple~do particular de un soberano. Pero tampoco el obispo, el sacerdote
miento del funcionario, sin detrimento de la circunstancia de que pueda estar
y ,el predicad~r son c~nsiderados hoy .obj.etivamente -al revés de lo que ocu-
bien determinado el tiempo que esté obligado a permanecer en la oficina
ma en los pnmeros tiempos del cnstiamsmo- como portadores de un caris-
cumpliendo con sus deberes. Esto es también normalmente el resultado
ma puramente personal cuyos bienes de salvación u!tramundanos han recibido
de una larga evolución tanto en los empleos públicos como en los privados.
personalmente del Señor, y sólo delante del cual son responsables, ofrecién-
En cambio, o más normal era antiguamente en todos los casos la tramita-
dolos a t~dos l.os que. los soliciten} parezcan dignos de recibidos. A pesar de
ción de los asuntos de modo "marginal".
la superVIVenCia parcial de la antigua teoría, son sólo funcionarios al servicio
VI. El d~e:mE.eño del cargo por parte de los funcionarios se realiza según
d~, una fi.nalidad. ~bjetiva que toma cuerpo en la "Iglesia" actual y que tam-
normas generales susceptibles de a rendiza e, más o menos bJas mas o
C\ menos completas. El conocimiento e estas normas representa, por an o,
bien ha Sido glorificada desde el punto de vista ideológico.
II. La Eosición f>!'sonal del funcionario resulta configurada de acuerdo f:::\
introduccíóÍl de -una tecnología especial (que es, según los casos, la jurispru-
dencia, la administración, las ciencias comerciales) en cuya posesión se en-
con los sigUIentes prIncipIOs:,' \S.:;'
cuentran los empleados. 1. E~ funciona~o. moderno, tanto público como privado, pretende siem-
pre_y .Q¡sfI1!.ta_C!!SISlempre, frente al dominado, de una estimación social
La vinculación al reglamento está, en la actualidad, tan perfectamente deter- "estamental" e~ecíficamente realzada. Su osición social se halla aran tiza:
minada que la moderna teoría científica, por ejemplo, admite que la competencia da or msf:ñlcclOnes ue se re ieren al ran o ocu ado en e caso s
atribuida legalmente a cualquier funcionario para establecer ordenanzas no le auto- fmiclOnarios políticos, por disposiciones penales especiales dirigidas contra
riza a decretar normas especiales para cada caso particular, sino que le obliga a las "ofensas a funcionarios" contra el "des recio" manifestado a los funcio-
limitarse a una reglamentación abstracta. Esto constituye una radical oposición n~nos, e sta o y de a Iglesia, etc. La categoría social efectiva del fun-
a la forma de reglamentación puramente basada en el dominio, que, como vere- cionano .queda normalmente. bien asegurada cuando en los viejos países civili-
mos, es propio del patrimonialismo y que, realizada por medio de privilegios y
zados e~ste la urgent,e nec~ldad de un régimen administrativo especializado,
favores individuales, afecta a todos los asun tos no establecidos ya por la tradición
cuando Impera al mismo tiempo una sólida y estable diferenciación social
sagrada.
y cuando el funcionario, por la distribución del poder social o a consecuencia
del elevado costo de la formación profesional requerida y de las convenciones
es~amentales que le vinculan, procede sobre todo de las capas social y econ6-
ml.cament~ privilegia~as. ~~ influencia que ejercen los diplomas acreditativos
-mfIuencla que se discutirá en otro lugar-," cuya posesión suele determinar

• Véase el fínal de este capítulo y el capitulo VtI. [E.]

"~7.. t ,"
, SOCIOLOGÍA DE LA DOMINACIÓN DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 721
libre por el jefe elegido--, los partidos no suelen tornar corno
unto de referencia las a titudes rofeslOnales SIDO los servicIos restados
ajQs adalides del partido, La oposición entre am os uncionarios es, cierta-
mente, relativa. En efecto, pues, ocurre algo análogo inclusive allí donde los
monarcas legítimos y sus subordinados nombran a los funcionarios. Pero en
este último caso no pueden ser comprobadas las influencias ejercidas por el
séquito. Allí donde es considerable la necesidad de una administración :spe-
dalizada, como ocurre hoy inclusive en Estados Unidos, y donde los adictos
a un partido deben contar con una "opinión pública" muy desarrollada, inte-
ligente y que actúa con libertad (opinión que falta en Estados Unidos en
todas partes donde el elemento inmigrante actúa en las ciudades como "una
masa de electores sin opinión propia"), el nombramiento de funcionarios no
calificados recae sobre el partido dominante, especialmente en los casos
en que los funcionarios son designados por el jefe. Por lo tanto: la ~lección
popular, no sólo del jefe de gobierno, sino. también de l?s. funclOnanos a él
s~ados por lo menos e~IgamzaclOnes admmlstratlvas extensas
,. y dif'c'lment abarcables a sim le vista- suele oner en a:ave eli ro tanto.
la de endencia 'erár uica como las a titudes es eClales de los emp ea os
'. y el funcionamiento reciso e mecanismo urocratIco. s un ec o cono-
ci O a supenor aptitu e integn a e los jueces federales nombrados por

consideraciones de partido. En cambio, las grandes transformaciones


==
el Presidente frente a los jueces designados por elección en Estados Unidos,
bien que ambas clases de funcionarios hayan sido elegidos todo por
de la
administración municipal en las grandes ciudades se debieron en Estados
Unidos esencialmente a alcaldes (Mayors) elegidos, los cuales trabajaron
con un cuerpo de funcionarios nombrados por ellos mismos y, consiguiente-
mente, "de un modo cesáreo". El rendimiento del "cesarismo" -a que da
~!' luzar con frecuencia la democracia- en lo que toca a la organización, se
ba~a principalmente, considerado desde el punto de vista técnico, en la posi-
ción ocupada por el "César" en cuanto hombre de confianza de las masas
(del ejército o de los ciudadanos) desligado de toda tradición, y en cuanto
soberano ilimitado y jefe de un cuadro de oficiales y funcionarios altamente
ca-lificados, seleccionados libremente por él sin atender a la tradición o a otras
'Consideraciones. Este "dominio del genio personal" está, sin embargo,
en contradicción con el principio formalmente "democrático" de la burocra-
cia electiva.
3. En las organizaciones burocráticas oficiales y en las cercanas. a ellas, f(;!
.gero también cada vez más en otras, eXiste normalmente una perpetUIdad del \:::J
ear o, e etuidad ue se resu one corno norma fáctica inclusive cuando
tienen uaar revocaciones o ratl icaciones eno lcaS. am ien en a empresa
prÍvaa c~ractenza norma mente este rasgo a los empleados, en oposición a
los obreros. Sin embargo, esta perpetuidad de hecho o de derecho no es con-
siderada, como ocurría en muchas formas de dominio aun del pasado, corno
un "derecho de osesión" al car o. Cuando --corno acontece entre nosotros
para o os os uncionarios judiciaies, así corno en modo creciente para los
funcionarios administrativos- se han originado garantías jurídicas contra la
destitución o el traslado arbitrarios, estas garantías tienen por finalidad prin-
722 SOCIOLOCfA DE LA DOMINA~I6N DOMlNACIÓN BUROCRÁTICA 723
cipal ofrecer una seguridad con vistas al cumplimiento rigurosamente obje- cionario está colocado en un esc#6n que va desd~ los puestos inferiores,
tivo y exento de toda consideración personal del deber específico impuesto menos im rtalites menos bien a ados a los su enores .. Co~o es natu~al,
por e! correspondiente cargo. Por lo tanto, la proporción de la "independen- e promedio. de los. ~uncionarios aspira. a la mayor determ~naclón mecánica
cia" otorgada por aquella garantía jurídica dentro de la burocracia no es en posible de las c.ondlcIO,nes d,t; ~scenso, SI no. e? ~?S cargos mISm?S, por lo me-
manera alguna una causa de incremento de la estima "convencional" =-esta- nos en los salarios, segun el tiempo de 'sefVlClOS, y cuando el. SIstema de .exá-
mental- de! funcionario así garantizado. Con frecuencia, y especialmente menes está muy desarrollado, teniendo en cuenta las calificaciones obtenidas,
en comunidades de antigua cultura y diferenciación social, ocurre todo lo todo lo cual otorga al cargo un carácter indeleble vitalicio '. Junto con ~l
contrario. Pues en ellas sucede que cuanto más rigurosa es la subordinación al pretendido fortalecimiento del derecho al cargo y con la .creclente tendencia
poder de! jefe tanto mejor queda garantizada la conservación del estilo seño- a una organización corporativa y a un~ segundad económica, ,;1 desarrol:? de
rial del modo de vida. Y aSÍ, la estima convencional de! funcionario puede estas características llega a hacer considerar los cargos c?mo prebendas. ob-
inclusive experimentar un aumento a consecuencia de la ausencia de dichas tenidas por los que están cualificados en virtud de los diplomas acreditativos,
garantías jurídicas, tal como aconteció durante la Edad Media con e! respeto T a necesidad de considerar las aptitudes generales personales y espirituales
manifestado a los "ministeriales" a costa de los libres, y a los jueces reales a ~on independencia de las cualidades, con. frecuencia subalternas, c~rrespon-
costa de los jueces populares. Entre nosotros, el oficial o el funcionario ad- dientes al título especializado, ha conducido al hecho"de. que prec~~amente
ministrativo puede ser en todos los casos más fácilmente depuesto que e! juez los cargos políticos más altos, en especial los puestos ~mlstenales,. hayan
"independiente", a quien no suele costarle nunca el cargo la más ruda infrac- sido cubiertos por principio independientemente de todo dIploma. acred.l~atIvo.
ción contra el "código de honor" ni la contravención de las convenciones Los su uestos sociales económicos de esta moderna confi raClOn del
sociales. Mas por este mismo motivo "el rango social" del juez frente a los car~o son os SIguIentes: .'. . r

ojos de la capa dominante es, en las mismas circunstancias, mucho menor que . Desarrollo de la economía monetana, SIempre que se de. la forma. de
la poseída por aquellos funcionarios cuya mayor dependencia de! soberano a o a lOs funcionarios ue es ho redominante. Este factor tiene gran im-
representa una más sólida garantía para !levar un tipo de vida "estarnental" portarrcra para a estructura total de la burocracia. De.todos modos, este solo
Como es natural, el término medio de los funcionarios aspira a la posesión factor no es en modo alguno decisivo para su eXIstenCIa. Los eJem~los histó-
de un "estatuto de funcionarios" que, con la seguridad material en la vejez, ricos cuantitativamente más importantes de un burocratisrno hasta CIerto pun-
aumente las garantías contra la privación arbitraria del cargo. No obstaI)J!!, to claramente desarrollado son los siguientes: a) Egipto en la época ,del.I~-
esta aspiración tiene sus límites. Un fuerte progreso de! "derecho al cargo" perio Nuevo, aunque existía una fuerte tendenci~ pa~rimo?ial; b) el Princi-
dificulta naturalmente, la rovisiórr de vacantes de acuerdo con las conside- pado romano tardío, especialmente la monarqUla dI?cleClana y e! Es~ado
raciones de utilidad t cmca aSI como one tra as a as OSI I I a es e carrera bizantino basado en ella, también con fuertes tendencla~ feudales, y patnmo-
de los candidatos a anosos. Esta circunstancia, y espeCIa mente a ten encia niales: c) la Iglesia católica romana, sobre todo desde fines del SIglo XIII; d)
a preferir depender de sus semejantes que de los dominados socialmente sub- China desde los tiempos de Shi-Hoang-Ti hasta el presente, pero con, fuertes
ordinados, hace que los funcionarios no experimenten en general la depen- tendencias patrimoniales y prebenda-les; e) en una ~orma cada vez mas pura,
dencia "de arriba" como algo penoso. El actual movimiento conservador que el Estado europeo moderno, y de modo cada vez. mas intenso todas las corpo-
tiene lugar entre los eclesiásticos de Baden, ante el miedo impuesto por la raciones públicas desde el desarrollo del absolutIsm?, real; f) la gr~n empresa
amenaza de separación entre el Estado y la "Iglesia", fue manifiestamente capitalista moderna, y ello en tanta mayor proporclOn cuanto. mas grande y
motivado por e! deseo de no "pasar de señor de la comunidad a ser su ser- complicada sea. Los casos a) hasta d) se basan en gran medld~, y en parte

. vidor"."
4. El funcionario percibe normalmente una remuneración en forma de
de modo preferente, en e! pago en espeCIes a los funcionarios. Sm ern-
barzo muestran mucho de los rasgos característicos y efectos propIOS de la

@
c.1, un esti endio fi'o así como un retiro de ve'ez or medio de una ensión. El
sa ario no qUeda determinado, en principio, e acuer o con el trabajo reali-
burocracia. El modelo histórico de todas las burocracias posteriores -el Nue-
vo Imperio egipcio- es al mismo tiempo uno de los más grandi~sos eje~plos
de una organización basada en una economía natural. Tal comcldencla se
zado', sino más. bien de acuerdo con las "funciones" desem eñadas con el
-"rangorr)"y eventuaImente segÚn la duración de tiempo de servicios. La segu- explica, ciertamente, por la existencia de condiciones completamente pecu-
ridad relativamente grande de! porvenir del funcionario y, Junto a ello, la liares. Pues en general, las considerables restricciones que deben h~cerse en
compensación que representa la estima social, hacen que en países que care- la adscripción de tales organizaciones al buroc~atismo, se hallan prec;samente
cen ya de oportunidades de lucro de tipo colonial los cargos sean muy buscados condicionadas por la economía natural. Un CIerto grado de economla mone-
_ y los salarios establecidos para ellos sean casi siempre relativamente bajos. taria constitu e un su tiesto normal si no ara la formación, cuando menos
1:'-,\ 5. Correspondiendo a la ordenación jerárquica de las aútoridades. el fun- para a prosecución inalterada de lo~ re Ímenes u:~mente burocráticos. P~es,
Ü .. como la experiencia nos muestra, sin esta ·con
se que la estructura burocrática modifique considerablemente
enas evitar-
su naturaleza
• Escrito antes de la guerra de 1914-1918. [E.]
"-:'~"~?":t'·'I;··'~~:~~~~:r:~~!-,.r~·"'N;~~'~"'l'~i

.' '") .•.

724 , SOCIOLOGÍA DE LA DOMINACIÓN DOMIN ACIÓN BUROCRÁTICA 725


o inclusive se transforme en otra. Ya la asignación de porciones naturales por medio de un reglamento. Según esto, puede ofrecer rasgos muy diferentes el
fijas procedentes de las existencias habidas en los graneros del sober,ano, o arrendamiento o transferencia de las contribuciones, Y según la mayor o menor
de las .tributaciones naturales corrientes -tal como Imperó durante rnilenios relaci6n existente entre el soberano y el arrendador, puede privar el interés del
último en una libre explotación de la capacidad tributaría de los dominados o el
en Egipto y China, y luego desempeñó un papel importante en la época im-
interés de! soberano en la continuidad de la tributaci6n. La cooperacón y con-
perial romana e inclusive en otras ocasiones- significa fácilmente, un pr:mer traposición de los motivos mencionados -exclusi6n del carácter inestable de los
paso hacia la apropiación por los funcionarios de las fuentes tnbutanas y ingresos, posibilidad de estatificaci6n, afianzamiento de la productividad de los súb-
su disfrute en calidad de posesi6n privada. Las porcion~ en especie wotegen ditos mediante la protección contra la explotaci6n irracional, inspección de los
a los funcionarios contra las frecuentes y bruscas oSCllaclOnes expenmenta- ingresos obtenidos por e! arrendador con vistas a una apropiación máxima de
das por e! poder adquisitivo de! dinero. Pero si los cobros basados en tribu~ los mismos por el Estado--, todo esto constituye el fundamento esencial, por ejern-
tos naturales ~omo sucede en todos los casos en que sobreVIene una re-o - plo, de la estructura adoptada por el sistema de arrendamiento de tributos en el
ducción de los esfuerzos realizados or el oder soberano a este efecto-- imperio de los Ptolorneos, en el cual el arrendador sigue siendo todavía, como en
se efectúan irre larmente el funcionario este o no abilitado ara e o, se Grecia y Roma, un capitalista privado, pero en donde la recaudación de los tribu-
tos se realiza burocráticamente y queda sometida a inspección oficial, de suerte
diri e directamente a los contribu entes situa os dentro de la es era e sus
que la ganancia del arrendador consiste sólo en una participaci6n en los posibles
atri uciones. ,Así es mu natural la idea de ase urar al ncionario .contra
excedentes obtenidos de su recaudación, lo cual equivale en rigor a un fondo de
ta es osci aciones mediante empeño o .transferenciá de los tributos ,v, con elIo,
garantía. El riesgo que corre entonces el capitalista consiste en recaudar una can-
dei oder tributario o bien mediante la concesi6n de bienes raíces fructffe- tidad inferior a la que representa el fondo establecido.
ros poseídos por el soberano. Y todo po er central no rigurosamente organi-
zacw bene que recurnr a ello de un modo espontáneo u obligado por l?s
mismos funcionarios, Esto puede suceder de tal manera que el funcionario
se contente con el disfrute de lo que corresponde a su salario y restituya lo
restante o bien -pues esto contiene evidentes tentaciones y proporciona al
soberano resultados insatisfactorios-, de suerte que el funcionario "pague
en dinero fijo", tal como aconteci6 de diversas maneras en los primeros tiem-
pos de la burocracia alemana, y en gran medida en todas las satrapías orien-
tales. El funcionario entrega entonces una suma fijada y se queda con el resto.

En este caso, el funcionario se parece bastante, desde el punto de vist~ econó-


mico, a un empresario de arrendamientos y hasta puede producirse una situación
de arrendamiento de cargos con adjudicación de los mismos a los mejores postores.
En el terreno de la economía privada, la transformación del sistema de villicación *
en un sistema de arrendamientos constituye uno de los más importantes ejemplos
entre los numerosos que existen a este respecto. De este mo~o, el jefe puede in-
clusive encargar g los funcionarios arrendadores la transformación en dinero de las
remuneraciones en especie. Esto ha ocurrido con algunos sátrapas orientales de
la Antigüedad. El arriendo de la recaudación de impuestos, en vez de.s.u monopo-
lio está al servicio de tal finalidad. De ahí resulta ante todo la posibilidad de un
importantisirno progreso en la organización, financier~ ,~a~ta alcanzar un sistema
de estatificacion, es decir, que en vez de ese' vivir al dia típico de todos los pruru-
tivos estadios de hacienda pública a base de recaudaciones rnudables, puede esta-
blecerse un presupuesto fijo en el que queden bien determinados los ingresos y los
gastos. Por otro lado, con ello se renuncia a una inspección y a una explotación
completa de la capacidad tributaria en beneficio del soberano; y según sea el
alcance de la libertad oerrnítida al funcionario o al arrendador de cargos y tributos,
se pone asimismo en 'peligro su continuidad a causa de la explotación ilimitada,
pues un capitalista no tiene en tal continuidad un interés tan permanente y con~-
tante como un soberano. En compensación; se procura asegurar esta permanenCIa

• Véase el concepto de villicus, en .~. Weber, Historia económica general, 3~ ed., México, 1961,
p. 78. (E.]
726 , SOCIOLOGÍA DE LA DOMINACIÓN DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 727
sido con gran frecuencia de tipo "prebendal" la dotación eConómica del sacer- Por consiguiente, si el desarrollo coinpleto de la economía monetaria no es
dacio, pero la jnísma forma se ha manifestado también en los demás sectores ninguna condición revia indisensab1e ara la burocratización el hecho
casi en todos los tiempos. En el derecho sagrado chino, el carácter "preben- es Jue ta, en cuanto constituye una estructura específicamente continua,
dal" especifico de todos los cargos tiene como consecuencia que la prescrip- es vinculada a un su uesto: la existencia de utilidades erTTUlnentes ara su
ción de abstenerse de disfrutar de los bienes durante el tiempo ritual de luto conservaci n. Cuando éstas no pueden ser extraídas de las ganancias privadas
por el padre y otras autoridades familiares (originariamente a ~usa de la --como en la organización burocrática de las grandes empresas modernas-
malevolencia del amo fallecido a quien pertenecía tal disfrute) obliga a los en- o de contribuciones de la tierra --como en los señoríos territoriales- la exis-
lutados a renunciar a sus cargos, los cuales eran considerados justamente, de tencia de un sistema fijo de impuestos re resenta la condición revia ~
un modo puramente prebendal, como productores de rentas. Otro grado or¡@Ílzac¡ón ennanente e re ¡men administrativo burocrático, Mas, por
de alejamiento de la pura burocracia asalariada tiene lugar cuando se otorgan las razones genera es ya conocidas, el desarrollo de la economía monetaria
no solamente derechos económicos, sino también derechos señoriales, imno- constituye su única base segura. Por lo tanto, el grado de la burocratización
niéndose como contraprestación al soberano servicios persolU11es. Tales dere- de una administración en las ciudades con un! economia monetaria muy
chos pueden ser muy diferentes: Por ejemplo, .en el caso de funcionarios desarrollada ha sido, con frecuencia, relativamente mucho ma or ue el exis-
políticos pueden ser de cadcter más feudal o más oficial. En ambos casos, tente en os sta os coetaneos muc o mas extensos, Ciertamente, tan pronto
pero sobre todo en el último, tiene lu ar una destrucción de la eculiaridad como estos ú.ltimos pudieron organizar un sistema fiscal regular, la burocracia
es ea lca e a or anización burocrática. Nos encontramos a uÍ en la esfera se' desarrolló en ellos con mayor amplitud que en los Estados-ciudad, don-
de a or amzaCl n eu e a ommaCl 1). de, mientras su extensión se ha mantenido dentro de límites moderados, la
Todas estas 'asignaciones de productos y utilidades naturales a los funcio- tendencia a una administración colegial plutocrática por honotatiotes ha sido
narios, muestran cierta tendencia a un aflojamiento del mecanismo burocrá- siempre la más adécuada. Pues el suelo más propicio para fomentar la buro;
tico, especialmente a un debilitamiento de la subordinación jerárqui~a., E~ta cratízación de la administración ha sido desde siem re la existencia de un
subordinación alcanza el más riguroso desarrollo en la moderna disciplina mo o típico de evolución de las tareas administrativas, y ante todo:
burocrática. Sólo cuando la subordinación de los funcionarios frente al señor 2. Su desarrollo cuantitativo En los sectores políticos, por ejemplo, el
-inclusive la puramente personal- fue absoluta y, por tanto, en el régimen suelo clásico sobre el cual se ha edificado la burocratización ha sido el an
escJavista o formado por funcionarios tratados como esclavos, se alcanzó un Esta o y e partido de masas. .
rigor análogo, por lo menos cuando existía una dirección enérgica,. como la
que se manifiesta en la organización burocrática del moderno Occidente. Enunciamos lo anterior, no ciertamente en e! sentido de que toda gran orga-
nización estatal históricamente conocida haya implicado una administración buro-
En la Antigüedad, en los países de economía natural, los funcionarios egipcios crática. Pues ante todo, la subsistencia temporal de cualquier gran Estado o la
son, si no legalmente, por lo menos efectivamente, esclavos de! Faraón. En los unidad de la cultura implicada por el mismo no dependen siempre de una estruc-
latifundios romanos, se confiaba fácilmente a los esclavos por lo menos la tesorería tura burocrática. Ambas cosas ocurren, por ejemplo, en gran medida en el Imperio
a causa de la posibilidad de tortura, En China se persigue un fin análogo median- chino, La continuidad de los numerosos grandes imperios negros y de análogas
te el frecuente empleo del bambú como medio disciplinario. Sin embargo, las organizaciones estatales ha sido efímera sobre todo a causa de la ausencia de un
probabilidades para el funcionamiento continuo de medios coactivos d,irectos son aparato burocrático. Del mismo modo, la unidad estatal del Imperio carolingio
poco favorables, Por esto, la experIencIa muestra que una remuneración segura, se desintegró con la decadencia de su organización .burocrática, la cual presentaba,
unida a la probabilidad de una carrera que no depende puramente del ~zar y de la ciertamente, un carácter patrimonial más bien que burocrático. En cambio, con-
arbitrariedad, una disciplina e inspección rigurosas que respete el sentido de! ho- siderados desde e! punto de vista puramente temporal, el imperio de los Califas
nor así como el desarrollo del honor estamental y la posibilidad de una crítica r sus predecesores en suelo asiático, con una organización burocrática esencial-
pública, ofrecen las mayores oportunidades para alcanzar y conservar una rigurosa mente patrimonial y prebendal, y e! Sacro Imperio Romano, a pesar de una
mecanización del aparato burocrático, de tal suerte ~ue funclOn~ entonces ~ás completa ausencia de burocracia, han perdurado durante mucho tiempo, y han
seguramente que cualquier régimen basado en ,la es~laVItud, .Y, en ngor, u~a sólida representado, por lo menos aproximadamente, una tan sólida unidad cultural como
conciencia estamental por parte de los funcionarios, no sólo es compatible con la que suelen crear las organizaciones oficiales burocráticas. Y el antiguo Imperio
una voluntad de subordinación completa a los jefes, sino que --como ocurre entre romano, a pesar de su creciente burocratízación, y justamente durante el desarrollo
los oficiales- en su consecuencia como compensación exigida por su sentimiento mayor de la misma, se ha desintegrado intemamente a consecuencia de la forma
de dignidad personal. El carácter profesional puramente "objetivo" del carg~,. con de distribución de los cargos públicos que implicaba esa burocratización y que
su separación en principio entre la esfera privada y la que afecta a su actividad favorecía la economía natural. Pero, ciertamente, la consistencia temporal de las
oficial, facilita la incorporación en las. condiciones objetivas, dadas de una vez organizaciones citadas, consideradas desde el punto de vista de la intensidad de
para siempre, del mecanismo fundado en la disciplina. su unidad puramente política, quedaba reducida esencialmente a un conglomerado
inestable y nominal con una capacidad de acción política cada vez menor. Y su
unidad culttaal, relativamente considerable, era el producto en parte de organiza-
728 SOCIOLOCÍA DE LA DOMINACIÓN DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 729
ciones ecIesiástü::as s61idamente unificadas -en el Occidente medieval creciente-
mente burocráticas-, y en parte de una vasta unidad en la estructura social, que
era a su vez la .consecuencia y la transformaci6n de la primitiva unidad política.
Ambas eran producto de una estereotipación cultural vinculada a la tradici6n y
susceptible de favorecer un estado de equilibrio inestable. Las dos poseían una tal
firmeza, que aun grandiosos intentos de expansión como los representados por las
cruzadas, a pesar de faltarles una sólida unidad política, pudieron ser hechos, por
así decirlo, en calidad de "empresas privadas", cuyos fracasos y cuyo decurso polí-
ticamente irracional guardaron relaci6n con la ausencia de un poder público sólido
y unificado. Y es indudable, no s610 que los gérmenes de la formaci6n de los Esta-
dos "modernos" en la Edad Media han surgido en todas partes junto con el des-
arrollo de las organizaciones burocráticas, sino también que han sido las formas
políticas burocráticamente más desarrolladas las que, finalmente, han disgregado
aquellos conglomerados esencialmente basados en un estado de equilibrio inestable.
La decadencia del antiguo Imperio romano fue condicionada justamente en
parte por la búrocratización de su ejército y de sus funcionarios. Esto fue posible
sólo por la aplicación simultánea de un sistema de distribución de los cargos públi-:
cos que debía conducir a una creciente difusi6n de la economía natural. Por lo 3. Lo que incita a la burocratización es, todavía más que la dilatación
tanto, concurren siempre en ello factores particulares. También el hecho de que extensiva y cuantitativa, la am ¡¡ación intensiva cuali"tativa el desarrollo
la "intensidad" de la acción estatal hacia fuera y hacia dentro -hacia fuera como in erno e as tareas a ministrativas. La dirección en que se mueve esta evo-
energía expansiva y hacia dentro como influencia oficial en la cultura- se halle en
luci6n y sus razones pueden ser muy diferentes. En el país en que ha habido
relaci6n directa con el grado de la burocratización puede ser considerado sólo como
más tempranamente una organización burocrática del poder público, en
algo "normal", pero no como algo válido sin excepción. Pues dos de las organiza-
ciones políticas más expansivas -el Imperio romano y el Imperio británico- se Egipto, fue la fatalidad técnico-económica de la distribución de las aguas para
han basado sólo en parte, y justamente·en su periodo de expansión, en fundamen- todo el país lo que creó el aparato de escribas y funcionarios que, ya muy
tos burocráticos. El Estado normando en Inglaterra ha creado un~ organización pronto, encontró su segunda esfera de aplicación en las monumentales cons-
rigurosa a base de la jerarquía feudal. Sin embargo, su unidad y energía han sido trucciones militarmente organizadas. Como ya se ha indicado, han actuado
proporcionadas en gran medida por la burocratización de la hacienda real (Exche- casi siempre en la formación de la bu.rocratización necesidades que se han
quer), burocratizaci6n que ha sido relativamente disciplinadísima en comparación originado por la creación de ejércitos permanentes exigidos por la expansión
con otras organizaciones políticas de la época feudal. El hecho de que el Estado política, y Ror el desarrollo simultáneo de la hacienda pública. Dentro del
inglés no haya participado luego en la evolución continental hacia el burocratismo, Estado moderno, cooperan en la misma dirección las crecientes exigencias
sino que se haya seguido basando en una administración de honoraiiores, ha sido administrativas motivadas por la complicación cada vez mavor de la cultura.
debido -lo mismo que el régimen republicano de Roma-, junto a la ausencia Mientras algunas expansiones muy importantes, especialmente la exp;¡!lsió~
(relativa) del carácter continental, a circunstancias peculiares que actualmente están ultramarina, han sido impulsadas justamente por Estados en que dominaban
en vías de desaparición. Entre estos factores se cuenta la superfluidad de un ejér- 103 honoraticres (Roma, Inglaterra, Venecia}, Ia "intensidad" de la admi-
cito permanente tal como el que necesita el Estado continental cuando manifiesta
nistración, es decir, la aceptación del mayor número posible de tareas para
las mismas tendencias expansivas. Por eso en Roma la burocratización progresa
a medida que el imperio se convierte de costero en continental. Por lo demás, su continua elaboración y tramitación dentro de la esfera del Estado por parte
en la estructura de dominación romana, el rendimiento técnico de un. aparato de las capas de honoraitores dominantes, especialmente en Roma e Ingla-
burocrático, la precisión y la armonía en el funcionamiento de la administración, terra, se ha desarrollado -<:omo se mostrará también luego- de un modo
especialmente cuando tiene que funcionar fuera de los límites de "la ciudad! fue relativamente muy débil comparado con los Estados burocráticos. Mejor
reemplazado por el carácter rigurosamente militar de los magistrados en una pro- dicho: la estructura del poder público ha influido en ambos casos considera-
porci6n desconocida por todos los demás pueblos. Y la continuidad de este régi- blemente sobre la cultura. Pero ha influido relativamente poco a través de las
men fue garantizada por la situación también única ocupada por el Senado. Un funciones y de la inspección del Estado. Esto se aplica tanto a lo que se
factor que no debe olvidarse entre los que condicionaron esta superfluidad de la refiere a la justicia como a lo que toca a la educación. Por otra parte, las
burocracia consistió en Roma, como luego en Inglaterra, en el hecho de que crecientes exigencias culturales están condicionadas, aun cuando en diferente
el poder público "redujo" cada vez más en el interior la esfera de sus funciones, medida, por el desarrollo de la riqueza de las capas más influyentes del Estado.
es decir, se limitó a lo que exigía absolutamente la directa "razón de Estado". Los
La creciente burocratización es, pues, una función de la posesión cada vez
poderes úblicos continentales de los comienzos de la é oca moderna se han
acumu ado en manos de a uellos (lnci es ue han recurrido del modo más enér- más consuntivamente disponible y. consuntivamente empleada, así como de
gico a la burocratizaci n e a es era a rrurus a iva. S evi en e que e
una técnica crecientemente refinada en correspondencia con las posibilidades

'.
DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 731
730 SOCIOLOCÍA DE LA DOMINACIÓN

dadas del estilo de vida. En su repercusión sobre el nivel de necesidades esto


condiciona una creciente imprescindibilidad subjetivafde la procuración colec-
tiva e interlocal, es decir, de la intervención burocrática en las más diferentes
necesidades vitales, necesidades que antes fueron desconocidas o que eran
satisfechas de un modo local o mediante la economía privada. Entre los fac-
tores puramente políticos influye con especial persistencia, en la tendencI~
a la burocratización la creciente necesidad de una sociedad acostumbrada a
una pacifiCación ab~oluta por medio de la aplic~ci6n del orden y la proteé,:
ción ("polic~a") en todos los sectores. Un carruno ~ontmuo conduce desde
la influencia meramente sagrada o meramente arbitral sobre la venganza
privada -que hace radicar enteramente la garantía jurídica y de seguridad
del individuo en el deber de juramento y de venganza por parte de sus com-
pañeros de c1an- hasta la actual situación del agente ~e poli.cíacomo "r~pre-
sentante de Dios en la tierra". Entre otras razones intervienen en pnmer
lugar los diversos cometidos "político-social~", que el Estado moderno tiene
que asumir en parte por abandono de los ciudadanos y que en parte us~rpa
por motivos imperialistas o ideológicos. Como es .natural, se hallan condicio-
nados en ran medida r circunstancias económIcas.. Fmalmente, entre los
factores esencialmente técnicos ha ue consi erar como romotores e a
burocratización, los medios de comunicación específicamente modernos, os
cuales deben entrar en el cuadro de la administración pública en parte por
necesidad y en parte por conveniencias técnicas (vías fluviales y. terrestres,
ferrocarriles, telégrafos, etc.}. En la actualidad, desempeñan el mismo pa~l
que acaso desempeñaban en el Antiguo Oriente los canal~ de Mes?potamIa
y la regulación del Nilo. Por otro lado, el grado de ~~lucIón ~~nmentad~
por los medios de comunicación representa una c~ndICIO?no decISI~a:pero .SI
importantísima para la posibilidad de una adm~mstraCIón bu~ocrahca. Sin
la vía fluvial del Nilo la centralización burocrática basada casi enteramente
en una economía natural no hubiera alcanzado seguramente nunca en Egipto
el grado que efectivamente alcanzó. En la Per~ia mode~a, se ha confiado
oficialmente a los funcionarios de telégrafos la información acerca de todos
los acontecimientos que tienen lugar en las provincias al mismo S.ha,pasando
por encima de las autoridades locales y, además, todo el mu.ndo tiene el dere-
cho de manifestar por telégrafo sus reclamaciones con el fin de fomentar la
centralización burocrática. En cambio, como efectivamente acontece, el Esta-
do moderno de Occidente sólo puede ser administrado porque es dueño de la
red telegráfica y se baIlan a su disposición los correos y les ferrocarriles.

Estos factores guardan muy intima relacióncon la evoluciónde .un gran tráfico
de mercanCíasinterlocaI que.forma parte de los fenómenos concomItantes caus~es
que intervienen en la formación"delos Estados modernos. Pero, como hemos VIsto
aEtes,_esto no rige incondicionalmente para el pasado,

4. La razón decisiva que explica el progreso de la ~rganización ~uro~rá~


tica ha sido siempre su superioridad técnica sobre cualqUIer o~ra orgamzacI?,n.
Un mecanismo burocrático perfectamente desarrollado actua con relacIOI.I
a las demás organizaciones de la misma forma que una máquina con rela-

=o...~ _
- --""-.- --~~~
~:!;=:
~ +ñ-~..•..
~""~,,,-",,"."
732 SOCIOLOGÍA DE LA' DOMIN ACIÓN
DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 733
puntos de vista objetivos, distribuyendo los trabajos especiales entre funciq-
dición. La justicia empírica, por otro lado, puede sublimarse en una técnica y
nanas especializados y que se van adiestrando con la práctica constante.
úedar sometida a una racionalización. Como -según se indicará en otro lugar-
Resolución "objetiva" significa, 'en primer lugar, resolución "sin acepción
formas de dominación no burocráticas revelan, por una parte, una vinculación
de personas", según reglas previsibles. "Sin acepción de personas" es también 'gurosa a las tradiciones y, por otra, un arbitrio y gracia del soberano, son muy
el lema del "mercado" y de toda prosecución de meros intereses. La imposi- eeceectes en ellas las combinaciones y las formas de transición entre ambos prin-
ción consecuente de la dominación burocrática significa la nivelación del ¡;;ipios. En Inglaterra, por ejem¡:>l?---:-según ha puesto de reliev~ Mendelssohn-,
"honor estarnental": por lo tanto, si no se limita al mismo tiempo el prin- una vasta capa inferior de la justicia sigue correspondiendo todavía al tipo de "jus-
cipio de la libertad de mercado, eJ dominio universal de la "situación de 'cja de Cadí" en una proporción que los países del Continente no comprenden
clase". Si esta consecuencia del dominio burocrático no se presenta siempre cilrnente. Nuestra justicia a base de jurados, que excluye la indicación de las
paralelamente con el grado de burocratización, se debe a la diversidad de los ..ones del veredicto, funciona manifiestamente en la práctica de un modo con
principios posibles que pueden inspirar la cobertura de necesidades de la ecuencia análogo, de suerte que, en general, hay que abstenerse de creer que los
incipios "democráticos'.' son idénticos a la jurisprudencia "racional" (en el sen-
comunidad política. Pero el segundo elemento, "reglas previsibles". tiene en
la burocracia moderna significación predominante. La peculiaridad de la cul-
:40 de una jurisprudencia formal). Como se indica. en otro lugar, ocurre lo con-
~. '0. Por otro lado, la justicia inglesa iv norteamericana) de los Tribunales
tura moderna, es~~almel!te' su subestructura técnico-económica, exige esta u remos es todavía en an medida una 'usticia em ¡rica en articular una
"previsibilid¡¡d" o calculabilidad del resultado. La burocracia en su desarrollo ,usticia basada en recedentes: El motivo de ue en n aterra se a an ustra o
pleno se halla también, en sentido especrríCO, bajo el principio sine ira ac - os os mtentos de codificación racional, así como de admisión de derecho
studio. Su peculiaridad específica, tan bienvenida para el capitalismo, la des- amano, radica en la eficaz resistencia o uesta or el ran remio de abo ados
arrolla en tanto mayor grado cuando más se "deshumaniza", cuanto más .~a e onoratíares de cuyo seno han surgi o los jueces e as gran es cortes d~
completamente alcanza las peculiaridades específicas que le son contadas t,lStiCla.Estas personas han recibido una educación juddica en forma de un arte
como virtudes: la eliminación del amor, del odio y de todos 'Ios elementos sen- ,píriCo, altamente desarrollado desde el punto de vista técnico, y han luchado
sibles puramente personales, de todos los elementos irracionales que se sus- n éxito contra los esfuerzos encaminados a la codificación de un derecho ·racio-
traen al cálculo. En vez del jefe de las organizaciones antiguas movido por ~-al,esfuerzos que, procedentes sobre todo de los jueces eclesiásticos y temporal-
la sim atía <;rsonaI, el favor, la racia la recom ensa la civilización mo- e~te también de las universidades, constituían una amenaza para su posición
derna eXige Justamente para e aparato externo que a protege un especialista cial y material. La lucha de los partidarios del Common Law contra el derecho
emano y eclesiástico y contra la autoridad de la Iglesia en general fue, pues, rnoti-
rigurosamente "objetivo" y tanto menos interesado en las cosas propiamente
ada en gran parte por sus intereses económicos, tal como lo muestran claramente
humanas cuanto más complicada sea la civilización de referencia. La estruc- las intervenciones de! rey en la misma. Pero la autoridad que alcanzaron en el
tura burocrática ofrece todo esto en las condiciones más favorables. Especial- curso de esta victonosa lucha estaba condicionada por la centralización política.
mente en 10 gue toca a la administración de lajusticía, tal estructura crea la \or motivos preferentemente políticos ha faltado en Alemania una capa de honora-
base para la organización de un derecho sistematizado' y racional fundado en ~ores SOCialmente poder,os~s que" de modo análogo a los abogados ingleses, hayan
'1eyes", tal como en su mayor perfección técnica 10 creó la época imperial SIdo el sostén de una practica jurídica nacional, hayan elevado el derecho nacional
romana. Durante la Edad Media, la admisión de este derecho corrió parejas al rango de un arte basado en una doctrina y hayan opuesto resistencia a la penetra-
con la burocratización de la judicatura, con la penetración del especialisrno ción de las enseñanzas técnicamente superiores de los juristas formados en el
racionalmente entrenado en lugar de la decisión jurídica subordinada a la derecho romano. Pero no fue acaso la mejor adaptación del derecho romano ma-
tradición 6 a supuestos irracionales. ,tenaZ a las necesidades del capitalismo naciente 10 que decidió en este caso su
victoria -Justamente todas las instituciones específicas jurídicas del capitalismo
A la justicia "racional" a base de nociones jurídicas rigurosamente formales se • moderno son ajenas al derecho romano y tienen un origen medieval. Fue su forma
op'one una especie de justicia que ante todo gueda vinculada a las tradicione:; ,raclCnal y ante todo la necesidad técnica de poner en manos de especialistas racio-
sagradas, pero que soluciona el caso concreto ue no se uede deterrmnar de la nalmente entrenados -es decir, de especialistas que habían estudiado en las uní-
anterior manera por medIO C!eilña"revelaclón' concreta. orácu os, sentencias pro- versidades el derecho romano-e- los procedimientos judiciales, en vista del precedí-
fétícas, juicios de Dios) -justicia "carismática"- o bien -y éstos son los únic~ ,mIento racional de prueba requendo por la creciente complicación de los casos
casos que aquí nos interesan-: 1) &e un m05!0 n2_formal y de acuerdo con JUICIos lltig¡osos y en vista de la imposibilidad de aplicar en una economía cada vez más
de valor éticos concretos o de otra mdole practica: la "justicia de Cadí" (como la racionalizada la simple determinación de la verdad mediante la revelación concreta
ha llamado acertadamente R. Schmidt ; 2 de un modo formal. ero no medIante o la anuencia sagrada propia de los estadios primitivos. Como es natural, esta situa-
la subordmaCl6n a noclOnes raciona es, sino e~Eleando la "analogía" y apoyándose . ción fue condicionada en gran medida por la estructura transformada de la eco-
en "precedentes JudiCIales" concretos: "¡uStícla emp~ "justicia de Cadí" no nomía. Pero tal factor influyó en todos los países, incluso en Inglaterra, donde el
comprende considerandos en absoluto; la justicia empinca en su tipo puro no con- poder real introdujo los procedimientos racionales de prueba especialmente a favor
tiene "considerandos" racionales. El carácter estimativa concreto de la primera de los comerciantes. Pero, como ya se ha puesto de manifiesto, la razón princi-
forma de justicia mencionada puede llegar hasta la ruptura profética con toda pal de la diferencia existente en la evolución jurídica de Inglaterra y Alemania
110 ha consistido en esto, sino que se ha originado por las particularidades de cada
734 SOCIOLOCÍA DE LA DOMINACIÓN DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 735
una de las estructuras de dominación existentes en dichos países: en Inglaterra, una
justicia centralizada y, al mismo tiempo, un dominio por parte de los hanoratiores;
en Alemania, una ausencia de centralización política y una simultánea burocratiza-
ción. El primer país que ha experimentado en la época moderna un eleva~o des-
arrollo desde el punto de vista capitalista -Inglaterra- ha conservado. una justicia
menos racional y menos burocrática. Pero e! capitalismo pudo compagInar allí con
tal forma de justicia, porque el modo de la organización judicial y de los procedi-
mientos procesales equivalió hasta la época moderna a denegar la justicia. a los
económicamente débiles. Por otro lado, este hecho y e! elevado costo en tiempo
y dinero de las enajenaciones de tierras motivado por los intereses. económicos
de los abogados, ha influido también considerablemente sobre la organización agra-
ria de Inglaterra a favor de la acumulación e inmovilización de las tierras.
Por su parte, la 'uris rudencia romana era en la é oca de la Re ública una
mezcla muy artiCü'l;u e e ementos moona es, em mcos e inc uslve de e ementos
procedentes de la l ama a usticla e al. nom ramlento e os ura os y
" las actiones in acrom el retor conce 1 as e caso en caso contenlan un e-
mento de la última es ecíe. La' 'UIlS rudencia caute ar" ad cautelam todo
lo ue rocede de ella -inclu endo una arte e a ráctica e las "res uestas ,
e os unstas c áSlcos- tema un c:uacter em mea. cam 10 ecísivo de pen-
samiento Jun ICO en un pensamiento raciona uc; preparado ante todo p?r la
forma técnica de la instrucción procesal mediante las fórmulas basadas en nociones
jurídicas del edicto del pretor. (En la actualidad, con e! dominio de! principi~ d;
sustanciación, en que la relación de hechos. decl~e cuál es .el punto de. VIsta jun- ,
dico que fundamenta la demanda, falta tal forzosidad para una elaboración formal
unívoca del alcance de los conceptos tal como lo creó la elevada cultura técnica
de! derecho romano.) Por lo tanto, intervenían aquí factores pertenecientes esen-
cialmente a la técnica procesal que sólo indirectamente procedían de la estructura
del Estado. Pero en cuanto sistema com leto cerrado científicamente a licable,
la racionalización e erec r --que o diferencia tan rigurosamente del
que produjo el Oriente y e! he!enismo-- surgió solamente en la época de la buro-
cratización del Estado.
Un ejemplo tlpico de justicia no racional y, sin embargo, de justicia "racio-
nalista" estrechamente vinculada a la tradición, lo constituyen las "respuestas" de
los rabinos en el Talmud. Finalmente, una pura "justicia de Cadí" desvinculada
de la tradición lo es todo veredicto profético del tipo: "Está escrito, pero yo os
digo ... " Cuanto más acentuado es el carácter religioso de la 'posición as~ida
por e! Cadí (o por e! juez), tanto más libremente se intercala el dictamen arbitrario"
sobre e! caso individual dentro de la esfera no vinculada a la tradición sagrada.
Por ejemplo, el hecho de que el juez eclesiástico (Chara) de Túnez decidiera sobre
la propiedad "discrecionalrnente" --como lo expresa el europeo-- ha constituido
para una generación después de la ocupación francesa un sensible retraso en la
evolución de! capitalismo. En otro lugar estudiaremos los fundamentos socioló-
gicos de dichas antiguas formas de justicia dentro de la estructura de dominación.

Ahora bien, es erfectamente cierto ue la "ob 'etividad" la "es eciali-


dad" no coinciden necesariamente con e imperio de la norma general abs-
tracta. Ni siquiera tiene esto lugar dentro de la esfera de la administración
moderna de justicia, La idea de un derecho sin lagunas ha sido, en principio,
viOlentamente combatida. Y la concepción del juez moderno como un autó-
mata a quien se entregan las actas y las costas con el fin de que formule un
"

736 SOCIOLOCÍA DE LA DOMlNACIÓN DOMlNACIÓN BUROCRÁTICA 737


nómicas y sociales enfrente de los poseedores, y solamente pueden desempeñar
esta función cuando asumen un carácter no formal, es decir, un carácter sus-
tancialmente "ético" (o de "Cadí"). No solamente se opone al curso racio-
nal de la justicia y del gobierno -tan fuertemente y a veces más fuertemente
de lo que podría hacerlo la "justicia ministerial" ,de un soberano "absoluto"-
toda clase de "justicia popular" -que no suele interesarse por "razones" y
"normas" racionales-, sino también toda clase de influencias ejercidas sobre
el gobierno por la llamada "opinión pública", es decir, cuando existe una
democracia de masas, por una acción social brotada de "sentimientos" irracio-
nales preparados y dirigidos normalmente por los jefes de partido y- por la
prensa.
S. La estructura burocrática corre parejas con la concentración de los me-
dios materia1esen manos del jefe. Así ocurre, en una forma típica bien cono-
cida, en la evolución de las grandes empresas capitalistas privadas, las cuales
, se caracterizan [ustarnente por tal estructura. Pero las mismas 'condiciones se
cumplen en las comunidades de tipo oficial. Frente a los ejércitos de masas
de raíz agraria, frente a los ejércitos antiguos compuestos de ciudadanos, frente
a las milicias de Ias ciudades de los primeros siglos de la Edad Media y fren-
te a todos los ejércitos feudales, el ejército de los Iaraones burocráticamente
dirigido, el ejército de la última época dé la República romana y de! Princí-
pado, y ante todo los ejércitos de los modernos Estados militares, se carac-
terizan por e! hecho de que mientras en los primeros es lo normal el apro-
visionamiento y sustento de sí mismo y del propio séquito, en los ejércitos
burocráticos se realiza a base de los almacenes que posee el soberano. La ac-
tual guerra mecánica hace tan necesaria desde el punto de vista técnico eso
última condición como es indispensable en la época maquinista industrial la
concentración de, los medios de producción. En cambio, los ejércitos burocrá-
ticos de! pasado equipados y sustentados por el soberano han surgido casi
siempre cuando e! desarrollo social y económico ha reducido de un modo
absoluto o relativo el número de los ciudadanos capaces de abastecer eco-
nómicamente a sí mismos, de tal suerte que no han sido ya suficientes para De modo enteramente análogo, y en otras distintas esferas, la burocratiza-
la formación de las tropas requeridas. O cuando menos, no 10 han sido de ción del gobierno corre are'as con la concentración de los medios administra-
un modo re!ati~ es decir, en relación con el poder requerido' por el Estado, • tivos. antiguo regrrnen a rninistrativo e os satrapas y proconsu es, así
Pues s?lo el ej~~ito burocrático ha h~c..ho_posibl(! la organización de ejércitü, como la administración y gobierno por medio de arrendadores y compradores
profeslOnaresPermanentes como los que han sido necesarios para la pacifica: de puestos o a base de caballeros feudales, descentralizan tales medios. Las
ción de Estados de gran extensión o para er desarrollo de una ~uerra contr~ necesidades locales de la provincia, incluyendo el costo del ejército y de
enemigos muy alepdos, especla[mente en el mar., La misma dlsclphna militar - los empleados subalternos, son cubiertos mediante los ingresos locales, y sólo
y el mismo entrenamiento tecnicos sólo pueden desarrollarse' normalmente el excedente va a parar a la caja central. El funcionario investido con un feudo
de un modo completo, por lo menos en el grado modernamente alcanzado, realiza la administración a base de sus propios bienes. En cambio, el Estado
dentro del ejército burocrático. burocrático, carga todos los gastos producidos por la administración a su pro-
pio presupuesto y satisface las necesidades de funcionarios locales con los
medios administrativos dis onibles, ue somete a norma e ins ección. En lo
que se re iere a a uena a ministración", esto significa lo mismo que la gran
empresa centralizada desde el punto de vista capitalista.

Aun en el terreno de la investigación-y la enseñanza científicas, la burocratiza-


ci6n en los "Institutos" permanentes de las universidades (cuyo primer ejemplo
738 , SOCIOLocU. DE LA DOMINACIÓN
DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 739
importante lo constituyó el labor~torio de liebig en Giessen) es una función de
las :reCIentes necesldad~ de m~os maten~es d~ producción. Y por su concen-
tración en manos de 1?SJef~ oficialmente privilegiados se produce una separación
en~e la masa de ~os investigadores y profesores, y sus "medios de producción",
an.aloga a la ,que nene lugar en la empresa capitalista en tre los trabajadores y los
mismos medios.

="-------------- - -- - - , >f!WU
740 SOCIOLOGÍA DE LA DOMINACIÓN DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 741
La pérdida. de la posici6n ocupada en Rusia por la antigua nobleza feudal me- una alanca de democratización activa sino fundamental-
diante la reglamentaci6n del Miescñtchiielstvo (jerarquía) y la consiguiente mezcla 'mente DaSIva.. o es debido, con certeza, a que el antiguo ejército de ciuda-
de esta antigua nobleza con la nobleza oficial constituye un característico fenó- dwos se basaba económicamente en el equipo de cada uno por sí mismo,
meno intermedio en la evolución hacia la burocratizaci6n. En China, la determí- mientras ~it.cito moderno se basa en el aprovisionamiento de tipo buro-
naci6n del rango según el número de exámenes sufridos y la aptitud profesional
por ello condicionada significa algo análogo, pero de modo más consecuente, por crátic;Q.:.
lo menos desde el punto de vista te6rico. En Francia, la Revolución, y de un modo El hecho de que el progreso de la estructura burocrática se haya basado en su
decisivo el bonapartisrno, han hecho todopoderosa a la burocracia. En la Iglesia . superioridad "técnica" ha dado lugar, como ocurre en toda la esfera de la técnica,
católica, la eliminaci6n primero de los poderes intermedios feudales y luego de
a que este avance se haya r~lizado del modo más .lento precisamC!!-te.allí d0Il:de
todos los poderes locales aut6nomos (iniciada por Gregario VII j' completada por las antiguas estructuras han runcionado con posibilidades de adaptación técmca
e! Concilio tridentino, por el Vaticano y por las disposiciones de Pío X), trans-
a las necesidades existentes especialmente desarrolladas. Esto ha ocurrido, por
formados en puros funcionarios del 6rgano central, junto con el aumento continuo
ejemplo, con el gobierno inglés de los honotatiotes¿ gobierno que ha sido el más
de la importancia de los capellanes formalmente subordinados, debida ante todo
lento de todos en someterse a la burocratización que s6lo en parte está a punto de
a la organizaci6n política de partido del catolicismo, represent6 asimismo un
sucumbir a ella. Se trata del mismo fen6meno que se manifiesta en el hecho
avance de la burocracia, así como de la ..democratización por decido :así "pasiva",
de que una compañía de gas o una compañía ferroviaria fundadas con grandes
es decir, un progreso hacia la nivelaci6n de los dominados. La sustituci6n del
capitales se opongan enérgicamente a la electrificaci6n como algo que abre nuevos
, ejército com uesto' de honaratiores ue a ortan sus' ro ias armas r el e'ército
horizontes.
burocrático es tam Ien en to as artes un roceso e emocrahzacI n aSlva en
e mIsmo sen o en ue o es a un aClOn e una manar Ula mI Itar a so uta
Una burocracia muy desarrollada constituye una de las organizaciones! /'.
eLugar del Estado feudal o de la República de notables. A pesar de todas sus
peculiaridades especiales, esto se aplica también a la evoluci6n que experimentó sociales de más difícil destrucción. La burocratización es el rocedimiento ' / G I
ya el Estado egipcio. En el Principado romano, la burocratización del gobierno específico de transformar una "acci n comumtana en una aCClOn societa: '\ ,j ;

de las provincias -por ejemplo, en la esfera de la adrninistracjón fiscal- corri6 ria" racionalmente ordenada. Como instrumento de la "socialización" ~ <:>
parejas con la eliminación de la plutocracia formada por una clase capitalista que reIaClOnes Ge ommaci n a sido es un recurso de der de rimera clase
fue todopoderosa durante la República y, por tanto, con la eliminación de! mismo Era a_que que dIspone _ e :lR¡¡r~o b!.tr~láti\;"Q •• Pues dadas las mismas proba- :
antiguo capitalismo. bílidades, la "acción societaria" metódicamente ordenada y dirigida es supe- "
rior a toda acción contraria de las "masas" o a toda "acción comunitaria" que )
se le oponga. _Allí donde se ha llevado íntegramente a cabo la burocratizaci6n
del régimen de gobierno se ha creado una forma de relaciones de dominio
prácticamente inilliebr.antable. El sim121e funcionario no puede desprenderse. ~
de la organización a la cual está sujeto.rEn oposición a los honoratiores, que
administran y gobiernan honoríficamente y corno al margen, el funcionario
profesional está encadenado a su labor con toda su existencia material e ideal.
En casi todos los casos el funcionario no es más que un miembro al que se
-mcargan cometidos especializados dentro de un mecanismo en marcha ince-
sante que únicamente puede ser movido o detenido por la autoridad superior,
y que es la que le prescribe la ruta determinada. Por todo ello se halla some-
tido al interés común de todos los funcionarios insertados en tal mecanismo,
Rara que siga funcionando v persista el dominio socializado ejercido por J~
burocracia, Por su lado, los dominados no pueden prescindir de! aparato de
dominio burocrático ya existente ni sustituirlo por otro, pues se basa en una
metódica síntesis de entrenamiento especializado, división de trabajo y dedi-
cación fija a un conjunto de funciones habituales diestramente ejercidas. Si el
mecanismo en cuestión suspende su labor o queda detenido por una fuerza
poderosa, la consecuencia de ello es un caos para dar fin al cual difícilmente
pueden improvisar los dominados un organismo que lo sustituya. Esto se
refiere tanto a la esfera del gobierno público como a la de la economía privada.
La vinculación del destino material de la masa al funcionamiento correcto y
continuo de las organizaciones capitalistas privadas organizadas de una manera

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742 SOCIOLOCÍA DE LA DOMINACIÓN DOMINACIÓN BUROCRÁTICA. 743


cada vez más burocrática va siendo más fuerte a medida que pasa el tiempo, y especialmente en Nortearnérica existen reguhrmente mecenas que las finan-
y la idea de la posibilidad de su eliminación es, por tanto, cada vez más cian y que pueden por tal hecho influir considerablemente sobre ellas. El
utópica. Los "expedientes", por un lado, y la disciplina burocrática, por otro, mecenazgo, por ejemplo, de las cervecerías en Inglaterra, de la llamada indu.s-
es decir, la sumisión de los funcionarios a la obediencia rigurosa dentro de su tría pesada y de la Liga Hanseática, con su fondo de e!ecCI?nes,en ~lema~la
labor habitual; constituyen cada día más dentro de las esferas pública y pri- son hechos bastante conocidos. También la burocratización y la nivelación
vada el fundamento de toda organización. Pero ante todo lo constituye -por social dentro de las organizaciones políticas y especialmente oficiales, junto
prácticamente importante que sea el expedienteo- la "discipl'na". La inge- con la eliminación de los privilegios locales y feudales opuestos a ellas, ha
nua idea del bakuninismo, es decir, la idea de que por la destrucción de los favorecido con zran frecuencia en la época moderna los intereses del capita-
expedientes podrá aniquilarse la base de los "derechos adquiridos" y de la lismo y se ha r~alizado muchas veces en íntima relación con éste. Así ha
"dominación" olvida que independientemente de los expedientes permanece ocurrido con la zran alianza histórica entre el poder absoluto de los reyes y
la sumisión de los hombres a la observancia de las normas y de los regla- los intereses capitalistas. Pues, en general, una nivelación jurí:lica y la disolu-
mentos habituales. Toda reorganización de formaciones militares derrotadas ción de las organizaciones locales dominadas pOl los honoratiores suelen amo
y disueltas, así como todo restablecimiento de un orden administrativo des- pliar el campo de acción del capitalismo. Mas ~mbién .se podría producir en
truido por revueltas, pánico u otras catástrofes, se efectúa formulando un el curso futuro de la evolución lo que ha ocurndo en diferentes ocasiones de
llamamiento a la disposición habitual que tienen los funcionarios y los domi- gran alcance histórico, especialmente en la Antigüedad: un ~,roces.ode bur.o-
nados a incorporarse obedientemente a las organizaciones correspondientes, cratización favorable a los intereses pequeñoburgueses en sus medios de eXIS-
llamamiento' que, cuando tiene éxito, puede volver a "disparar", por decido - tencia" tradicionales o favorables a un socialismo de Estado que limite las
así, el mecanismo. Por otro lado, el carácter inevitablemente objetivo del probabilidades de lucro de los particulares. El efecto muy distinto producido
aparato ya existente, en unión de su característica "impersonalidad", hace que en cada caso por una organización política, en principio cuando menos muy
-en oposición a las organizaciones feudales basadas en la devoción perso- parecida, dentro de Egipto, bajo ~osfaraones, y J~ego en la.s épocas helení~-
nal=- se halle fácilmente dispuesto a trabajar para todo el que sepa apoderarse tica y romana, muestra las muy diferentes posibilidades de influencia econo-
de él. El sistema burocrático racionalmente ordenado sigue funcionando mica de la burocratización según el carácter de los demás componentes. El
cuando e! enemigo ocupa el territorio y se apodera de los puestos superiores, mero hecho de la organización burocrática no enuncia nada unívoco sobre
pues los habitantes.y ante todo el mismo enemigo, tienen interés vital en que el sentido concreto de su influencia económica; por 10 menos, no tanto como
así ocurra. Después que Bismarck, en el transcurso de un largo dominio, puede enunciarse de su efecto social relativame~te niv,ela~or. Y t~mbién en
hubo sometido a sus colegas ministeriales a una incondicional dependencia este respecto hay que considerar que la burocracia, en SImisma un instrumen-
burocrática mediante la eliminación de todos los estadistas independientes, to de precisión, puede ponerse al servicio de muy diferentes intereses de
tuvo que comprender, con gran sorpresa suya, que al retirarse seguían gober- dominio, tanto de tipo puramente político como puramente económico o
nando como si él no fuera el genial jefe y creador de tales criaturas, sino una de otra Índole. Por este motivo, no debe exagerarse por típico que sea su
figura cualquiera que.dentro del mecanismo burocrático, había sido sustituida paralelismo con la democratización. Las mismas capas de señores feudales
por otra. El aparato del dominio ha seguido siendo el mismo en Francia han tomado a veces aquel instrumento a su servicio. Y se ha dado también
desde la época del primer Imperio. Como este aparato -siempre que dis- la posibilidad y el hecho -<:omo en el Principado romano y en algunas orga-
ponga de los modernos medios de información y de comunicación (te!é- nizaciones estatales absolutistas en su forrna- de que una burocratización
grafo)- hace cada vez más imposible desde e! punto de vista técnico el de! gobierno se haya vinculado deliberadamente con el ré~men estamenial o
desencadenamiento de una "revolución" en el sentido de la creación enérgica haya quedado fundido con él en nombre de los grupos SOCIalesde poder eXIS-
de organizaciones de dominio enteramente nuevas, las "revoluciones" se han tentes. Son muy frecuentes las asignaciones expresas de puestos a determina-
sustituido -como lo demuestra Francia de un modo "c1ásico"- por los "gol- dos estamentos. Y son más frecuentes todavía las asignaciones de hecho a
pes de Estado", pues todas las transformaciones que han tenido éxito se basan ciertos grupos. La democratización real o sólo formal. de la sociedad en c~n-
allí en tales procesos. . junto, en el sentido moderno de la palabra, es, en ngor, una base especial-
Es evidente, por otro lado, que la organización burocrática de una estruc- mente favorable, pero en modo alguno la única posible, para los fenó~enos. de
tura social y especialmente de una estructura política puede tener y tiene regu- la burocratización en general, los cuales pretenden solamente la nivelación
larmente amplias consecuencias económicas. ¿Cuáles? Ello depende, por natu- de los poderes que se oponen a ella en todas las esferas que intentan o~upar.
raleza, de la particular distribución de los poderes sociales y económicos, y y hay que tener muy presente e! hecho que hemos encontrado ya diversas
especialmente del campo que ocupa el naciente mecanismo burocrático, es veces y que tendremos que discutir luego nuevamente, que la "democracia"
decir, de la dirección que le hacen seguir los poderes que se sirven de él. El en cuanto tal, a pesar de fomentar inevitablemente y sin quererlo la burocra-
resultado de ello ha sido con gran frecuencia una distribución cripto-p!utocrá- tizacíón, es enemiga del "dominio" de la burocracia: y a, este efest~ opon;:
tica de poderes. Tras las organizaciones burocráticas de partido en Inglaterra muy sensibles obstáculos e inconvenientes a la orgarnzacion burocrática. ASI,
,.
. ~.

744 . SOCIOLOCfA DE LA OOMlNACI6N OOMINACI6N BUROCRÁTICA 745


habrá que proceder en cada caso histórico particular al examen de en qué la influyente burocracia. La tendencia al secreto se deriva en determinados.
sentido especial ha transcurrido la burocratización. sectores de gobierno de su misma naturaleza y se manifiesta siempre allí don-
Deberá quedar aquí sin decidir si justamente los Estados modernos cuya de se trata de los intereses de poder hacia fuera mantenidos por la organiza-
burocratización progresa en todos los sentidos, muestran sin excepción un ción correspondiente, ya sea frente a los competidores "económicos de una
increme~to ?,el poder ~e.la burocracia dentro del gobierno. El hecho de que empresa privada, o bien, cuando se trata de orga~izaciones P?líticas, frente ~
la orgamzacion burocrática ponga los recursos de poder técnicamente mejor organizaciones extranjeras potencialmente enemIgas. La aC~!VIdad.de la .dl-
desarrollados en manos del que dispone de ella nada enuncia todavía acerca Plomacia, si quiere. ,conseguir éxito, sólo puede ser .sometida a inspección
de la fuerza que puede proporcionar la burocracia como tal a sus concepcio- pública en proporciOn muy escasa. Al aumentar la importancia de los ele-
nes dentro de la organización social considerada. Y también la "necesidad mentos puramente técnicos, la dirección ~ilitar debe atenerse cada, vez más
absoluta" cada vez mayor de una burocracia incrementada hasta alcanzar cifras al secreto de sus más importantes disposiciones. Los partidos políticos no
d~ millones decide sobre ello tan poco como, por ejemplo -según la opio ' actúan de modo diferente, y a pesar de la ostensible publicidad d= 1~.,~sam-
níón de algunos representantes del movimiento proletario-, la necesidad bleas católicas y de los congresos de partido 10 cierto es que ~cul~~n sus mte~-
a:hsoluta de los proletarios decide la medida de su posible poder social y polí- ciones en la misma proporción en que aumenta la burocratización. La polí-
tico. Pues en ese caso, cuando predominaba el trabajo de los esclavos, el tica comercial conduce, por ejemplo, en Alemania, al secreto de las estadísticas
hecho de que los hombres libres salieran aborrecer el trabajo. corno algo infa- de producción. Toda actitud bélica de las organizaciones sociales contra ele-
ma~t~, hubiera hecho que los "indispensables" esclavos tuvieran 'una gran mentos exteriores influye siempre en el sentido de fortalecer la posición de
posición de poder. Por lo tanto, no puede' decidirse a priori, basándose en quienes ocupan el poder. Mas el puro int~rés en el poder .mantenido por la
tales razones, si el poder de la burocracia como tal aumenta. La admisión burocracia trasciende este terreno de la actitud secreta motivada de un modo
de otros interesados o de otros especialistas no funcionarios o, al revés, de repre- puramente objetivo. El concepto del "secreto del carg?" es su descubrimi~nto
sentant~ de profanos ajenos a toda especialización, la creación de órganos específico, y nada es defendido por ella con tal fanatI~m.o como esta actitud
locales, ínterlocales o centrales de tipo parlamentario, corporativo o de otros que no puede ser motivada de un modo puramente objetivo fuera de .aquellas
órganos representativos parece oponerse directamente al aumento del poder esferas específicamente cualificadas. Si la burocracia se enfrenta con un Par-
de la burocracia. Determinar hasta qué punto esta apariencia es verdadera lamento, lucha con un seguro instinto de poder contra todo ensayo realizado
pertenece a otro capítulo que no se ocupe, como el presente, de un examen por éste para procurarse por sus propios m~dios conocimientos espe~iales (por
puramente formal y casuístico del problema. Aquí podrá decirse en general ejemplo, el llamado "derecho de encuesta ). Un Parlamento mal informado
poco más o menos lo que sigue: . .
y, por tanto, sin poder, es naturalmente mejor .acogido por la burocracia, .siem-
El poderío alcanzado por una burocracia bien desarrollada es siempre muy pre que tal ignorancia sea conciliable con sus p,ropios interes~ .. Inclus~ve el
grande, y en circunstancias normales considerable. Tanto si el "señor" al . monarca absoluto, y en cierto modo justamente el, se halla casi sIempre Impo-
cual sirve es un "pueblo" pertrechado con las armas de la "iniciativa legal", tente frente al superior conocimiento especializado burocrático. Todas las
del "referé~dum" y de la destitución de los funcionarios, como si es un parla- airadas disposiciones tomadas por Federico el Grande sobre la "supresión de
mento elegido de acuerdo con una base más o menos aristocrática o "demo- la servidumbre" fracasaron al ponerse en práctica, porque el mecanismo buro-
crática" y poseedor del derecho y la autoridad del "voto de desconfianza" un crático las ignoró simplemente, considerándolas como antojos ocasionales de
colegio aristocráti~o formado legal o fácticamente, un Presidente elegido' por un "dílettante", Siempre que existe una coincidencia de opiniones con una
el pueblo o un monarca hereditario "absoluto" o "constitucional" en todos parte socialmente importante de los dominados, el rey constitucional ejerce
estos casos se habrán de encontrar frente al funcionario especializado en la con frecuencia un influjo sobre la actividad de la administración, que él pue-
empresa administrativa en la misma posición en que se encuentra el "dile- de controlar a causa de la relativa publicidad de la crítica, más importante
tante': frente al "especialista". Toda burocracia procura incrementar esta su- que la que puede ejercer el monarca absoluto, quien tiene que depender ex-
penan dad del saber profesional por medio del secreto de sus conocimientos clusivamente de la información proporcionada por la burocracia. El zar ruso
e. intenciones. El g?bierno burocrático es, por su misma tendencia, un go- del antiguo régimen estaba raramente en condiciones de imponer en lo más
bierno que excluye la publicidad. La burocracia oculta en la medida de lo mínimo su voluntad en aquello que disgustaba a su burocracia y que se oponía
posible su saber y su actividad frente a la crítica. Las autoridades eclesiásticas a los intereses de ésta. Como lo ha hecho notar ya certeramente Leroy-
prusianas amenazan con medidas disciplinarias a los párrocos que comuni- Beaulieu los ministerios sometidos directamente a él en calidad de autócrata
quen a un tercero las indicaciones u otras normas dirigidas a ellos, pues de formaban un conglomerado de satrapías que luchaban entre s.í con todos los
este modo se "acarrean" la posibilidad de una crítica. Los funcionarios de ha- recursos de la intriga personal y que se bombardeaban continuamente con
cienda del Sha persa convirtieron su ciencia financiera en una doctrina esoté- voluminosos memo randa frente a los cuales resultaba impotente el monarca
rica "1 se sirvieron de una escritura secreta. La estadística oficial prusíana en su calidad de dilettante. La concentración del poder de la burocracia
publica en general sólo aquello que no puede perjudicar a los propósitos de central, inevitable en todo progreso hacia el constitucionalismo, su someti-
746 . SOCIOLOCÍA DE LA DOMiNACIÓN OOMINACI6N BUROCRÁTICA 747
miento a una autoridad monocrática, al Presidente del Consejo de Ministros, de las tareas administrativas y COIl'el carácter absolutamente necesario del especia. ..
por cuyas manos ha de pasar todo lo que tiene que llegar al monarca, colocó lismo se produce en forma muy típica el fen6meno de que al soberano no le baste
todavía más a este último bajo la tutela del jefe de la burocracia, contra lo la consulta ocasional de algunas personas de confianza o una asamblea de las mis-
mas convocada intermitentemente en las situaciones difíciles, de suerte que se rodea
cual luchó Guillermo II en su conocido conflicto con Bismarck para tener
-los "consejos áulicos" representan un característico fen6meno de transición- de
.muy pronto que retirar sus ataques contra aquel principio. Bajo el dominio
corporaciones que se reúnen periódicamente para deliberar colegiadamente (Canseil
del espe~ialismo, au.n el influjo real del monarca solamente puede alcanzar áÉtat, Privy Council, Generaldirekiocium; Gabinete, Diván turco, Tsungli- Yamen,
algun~ firmeza mediante el trato continuado, metódicamente dirigido por la Weíwupu, etc.). La posición que ocupan es, naturalmente, muy diferente según
autoridad central de la burocracia, con el jefe de esta última. Al mismo constituyan por sí mismas la más elevada autoridad gobernante o existan a su lado
tiempo, el constitucionalismo vincula a la burocracia y al soberano en una una o diversas autoridades centrales monocráticas. Es también muy distinta según
comunidad de intereses contra las aspiraciones al poder del jefe del partido en sus procedimientos --en su tipo completamente desarrollado se reúnen en principio
el Parlamento. Pero el monarca constitucional resulta impotente contra la o de un modo ficticio bajo su presidencia-, y todos los asuntos importantes son
burocracia cuando no tiene ningún apoyo en el Parlamento. La caída en Ale- solucionados por acuerdo después de un examen exhaustivo mediante informes y
mania de los "grandes del reino", de los ministros prusíanos y de los altos ponencias de los especialistas y vot?S m?~vados de otros mien:bros, siendo luego
funcionarios ha puesto todavía en noviembre de 1918 a un monarca en situa- sancionados o rechazados por una dISpOSICióndel soberano o senor. Esta forma de
magistraturas colegiadas* constituye, por tanto, la manera típica en que el sobe.
ción parecida a la que se produjo en el añ~ 1056 sobre la base del Estado
rano, que es cada vez más "diletante", utiliza a los especialistas y procura -lo que
feudal. De todos modos, esto es siempre una excepción. Pues la situación
con frecuencia 'Se olvida- oponerse al poder creciente del especialisrno y afirmarse
del monarca frente a los funcionarios burocráticos, debido a los deseosos de en su posición dominante. Domina a un especialista por medio de otro e inten-
ascenso, con los cuales puede sustituir fácilmente a los funcionarios indepen- ta formarse por aquel procedimiento complicado una imagen clara y amplia de la
dientes, un poco incómodos es, en general, todavía más sólida que en el Fondo situaci6n con el fin de que no le sean atribuidas decisiones arbitrarias. Espera ob-
feudal y que en el Estado patrimonial "estereotipado". Sólo los funcionarios tener la garantía de un máximo de influencia propia menos por su presidencia
económicamente independientes, es decir, sólo los funcionarios pertenecientes personal que por los dictámenes que le son presentados. Federico Guillermo 1,
a las capas poseedoras pueden en las mismas circunstancias arriesgarse a per- cuya influencia efectiva sobre el gobierno. fue. considerable, casi nunca concurria
der el cargo. El reclutamiento de capas desposeídas aumenta, hoy como siem- personalmente a las sesiones ministeriales que se realizaban de un modo estricta.
pre, el poder de los soberanos. Y solo los funcionarios que pertenezcan a una mente colegial, sino que daba sus respuestas a los informes escritos mediante decre-
capa socialmente influyente, con la cual el monarca crea que debe contar en tos u observaciones al margen que eran entregados al ministro por los "correos de
cuanto protectores de su persona (como en Prusia los llamados "rebeldes gabinete" tras asesorarse con los funcionarios pertenecientes a éste y personalmente
adictos al soberano. El gabinete, contra el cual se dirigía el odio de la burocracia
del canal"), pueden paralizar entera y sustancialmente su voluntad.
especialista, así como, en el caso de fracasos, la desconfianza de los dominados, fue
Superior a la competencia de la burocracia lo es sólo la competencia de surgiendo así -tanto en Rusia como en Prusia y en otros Estados- como la for-
los miembros de una empresa privada en el terreno de la "economía". Esto taleza personal a la cual se acogía el soberano frente al especíalísmo y a la "objetí-
es debido ~ que el cono~imie~to exacto de los hechos de su esfera tiene para vización" del gobierno.
ellos una importancia VItal directamente económica. Los errores en una es- Además, por medio del principio de la colegialidad el soberano intenta estable-
tadística oficial no tienen consecuencias económicas directas para el funcío- cer una especie de síntesis de los especialistas hasta la constitución de una unidad
nano culpable. Los errores en los cálculos de una empresa capitalista le colectiva. Pero ello no es, en general, suficiente. El fenómeno mismo, es común a
acarrean pérdidas y acaso dan al traste con ella. Y aun el "secreto" como muy diferentes formas estatales, desde el Estado patrimonial y feudal hasta el pri-
medio del P?der está todavía más seguramente a salvo en el Libro Mayor de mitivo burocratismo. Pero, ante todo, es típico del naciente absolutismo monár-
un empresano que en los expedientes de las autoridades. Por este motivo la quico. Fue uno de los más importantes medios educativos para alcanzar la "objeti-
influencia oficial sobre la vida económica en una época capitalista queda dete- vidad" de la administración. Mediante la intervenci6n de particulares socialmente
influyentes permitió también que cierta proporción de la autoridad dimanada de la
nída dentro de tan angostos límites, y por eso también las medidas que toma
calidad de honotatiores y de los conocimientos de la economía privada se unieran
e~ Estad~ en este t~rreno desemboc;an tan frecuentemente en caminos irnpre- con el especialismo de los funcionarios profesionales. Las magistraturas colegiales
Vistos e unpremed;tados o se convierten en ilusorias por los conocimientos fueron una de las primeras instituciones que permitieron llegar al concepto moder-
superiores que los interesados tienen sobre la materia. no de una "magistratura" concebida como una forma perenne e independiente de
la persona.
Como el conocimi~nto ~specializado es en creciente medida la base del poder Mientras el especialísmo en los asuntos administrativos fue exclusivamente el
alca.nzado por los funcionarios, la forma en que ha podido utilizarse tal saber con resultado de un largo entrenamiento empírico, y las normas de gobierno no perte-
el fin de, que no se apr?vechara exclusivamente en su favor, sino que tendiera a la necieron a un reglamento, sino que fueron partes integrantes de la tradición, el.
pr?tecclOn de la posrcion ocupada por el soberano, ha sido desde muy pronto un
objeto de la preocupación de este último, Con la creciente ampliaci6n cualitativa • Vé= Parte 1, cap. ID, § 15. [E.]
~ •.. 4L.'1T1ff~~¡·
."'. ~::,,_. . ::-

748 , SOCIOLOGÍA DE LA. DOMINACIÓN DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 749


Consejo d~ los ancianos, con frecuente participación de los sacerdotes, de los "anti- prefectos que se sigue en Francia tiene en estas condiciones modernas grandes
.~
~os estadistas" Y,de los honoratiotes, fue de modo típico la forma adecuada asu- posibilidades de hacer retr?Ceder en todas partes las antiguas formas, completado

J.'
.' I
mida por las autoridades consultivas que, por constituir organizaciones permanentes
frent~ a los soberanos cambiantes, llegaron a apoderarse del poder verdadero. Así
ocu~ó con el Senado romano y el Consejo veneciano, así como con el Areópago
atemense hasta su derrocamiento a favor del dominio del "demagago". Pero, como
es natural, a pesar de los, múltiples puntos de transición, hay que distinguir riguro-
probablemente por la admisión ya mencionada cada vez más frecuente y más for-
malmente ordenada de gremios consultivos de interesados procedentes de las capas
económica y socialmente más influyentes. Especialmente esta última evolución,
que intenta poner la pericia concreta de los interesados al servicio de la adminis-
tración racional de funcionarios especializados, tiene seguramente un importante
samente entre tales magistraturas competentes y las corporaciones surgidas en vir- porvenir y ha de incrementar todavía más el poder de la burocracia. Es sabido
tud de la ~~zaci6n racional y del dominio del saber técnico a que aquí nos que Bismarck se sirvió del proyecto de un "Consejo de Economía nacional" como
esta~os refiriendo. Por otro lado, hay que distinguidas de las corporaciones con- recurso contra el Parlamento y que con ello reprochó a la mayoría que se oponía
sultivas tan ~ecuentes en el Esta,do moderno y brotadas de los círculos privados a su plan -mayoría a la cual nunca había concedido el derecho de encuesta en la
de personas interesadas; corporaciones en las cuales los funcionarios no constitu- forma admitida por el Parlamento inglés- que intentaba en interés del poder
yen el, núcleo. Finalmente, hay que distinguidas sociológicamente de las autori- parlamentario impedir a la burocracia que fuera "demasiado inteligente". Por lo
dades inspectoras (Consejo de Administración) que se encuentran en las actuales demás, no nos corresponde por ahora determinar la posición que podrán ocupar
organizaciones burocráticas de la economía privada (sociedades anónimas), aun en lo sucesivo las asociaciones de miembros interesados dentro de la esfera de la
c?'lndo estas ~ltimas se completan con frecpencia por la intervención de honara- administración.
nores .pr?Cedentes d~ c!rculos no directamente interesados, ya sea en virtud de sus Sólo la burocratización del Estado y del derecho reconoce en general la defini-
conocimientos especializados o bien como recursos empleados con fines de propa- tiva posibilidad de una rigurosa distinción conceptual entre un orden jurídico "ob-
ganda. Pues estas organizaciones no contienen normalmente en su seno los que jetivo" y los derechos "subjetivos" de los individuos por él garantizados, así como
poseen ,conocimien~ especializados, sino los principales interesados desde el pun- la separación entre el derecho "público", que concierne a las relaciones entre las
to de VIStaeconómico en ellas, especialmente los bancos capitalistas. Y estos últi- autoriclpdes y los "súbditos", y el "derecho privado", que regula las relaciories de
~os no ocupan meramente un puesto consultivo, sino por lo menos una posición los individuos dominados entre sí. La burocratización presupone la separación
Inspectora, y con frecu:encia asumen una actitud dominante. Pueden compararse abstracta entre el "Estado", en cuanto sostén abstracto de los derechos de mando
más bien, (aunque,no SIn alguna violencia) con las asambleas de los grandes señores y creador de las "normas jurídicas", y todas las "atribuciones" personales de los
feu?ales md;J?endlent:s y de otros miembros socialmente poderosos de las organi- individuos. Se trata de ideas que están todavía muy lejos de las estructuras de
zaciones políticas patrimoniales o feudales, los cuales han sido a veces los precur- dominio preburocráticas, especial~ente de las estructuras de dominio patrimonia-
sores de los "Consejos" surgidos a consecuencia de la creciente intensidad de las les y feudales. Estas Ideas han podido realizarse y se han realizado ante todo a base
tareas del gobierno y todavía con más frecuencia los precursores de las corporacio- de las comunidades urbanas siempre que éstas hayan nombrado a sus funcionarios
nes estamentales, ~edi.ante elecciéti perió~ica y siemJ(re que el individuo que ha "ejercido" el dorni-
Dicho principio de la corporación burocrática pasó regularmente de la autoridad rno, incluyendo el superIOr, no ha Sido ya notoriamente idéntico al que ha poseído
central a las más diferentes autoridades subordinadas. Como se ha indicado opor- el dominio como Un "derecho propio". Pero sólo la completa despersonalización de
tunam~te, dentro. de las unidades locales y en particular dentro de las unidades las funciones en la burocracia y la sistematización racional del derecho han con-
municipales el gobierno mediante corporaciones se presenta originariamente como ducido en principio a la mencionada separación,
una fo~a del dominio de los honoratiotes (por medio de colegios de "consejeros".
Aquí no pueden ser analizados los importantes efectos culturales que pro-
de "magistrados", "decuriones" y "jurados" primitivamente elegidos y luego cuan-
duce al desarrollo de la estructura de dominio racional burocrático en cuanto
do menos parcialmente cooptativos). Por este motivo son partes integrantes de la
organización de la "administración autónoma", es decir, de la resolución de los tal y con absoluta independencia del campo que abarca. Como es natural, se
asuntos administrativos por los miembros locales bajo la inspección de autoridades halla al servicio de la penetración del "racionalismo" en la forma de vida.
burocráticas oficiales. Los mencionados ejemplos del Consejo veneciano y todavía Pero este concepto admite muy diferentes contenidos. De un modo entera-
más del Senado romano son una transposición a grandes imperios ultramarinos de mente general sólo puede decirse que la evolución hacia la "objetividad" racio-
la forma de dominio ejercido por los honotatiotes en las asociaciones políticas nal, hacia la "humanidad profesional y especializada", con todas sus múltiples
locales. Dentro del Estado burocrátíco, desaparece de nuevo la administración consecuencias, es impulsada muy intensamente por la burocratización de todo
cole~al tan pronto como por el progreso de los medios de tráfico y de las exigencias dominio. Aquí solamente puede indicarse brevemente un importante factor
técnicas de la administración surge la necesidad de decisiones rápidas y unívocas de este proceso: el efecto producido sobre la forma de la educación y de la
y aparecen en primer plano los otros motivos que conducen a la burocracia com- instrucción, Nuestras instituciones educativas occidentales y continentales,
pleta y a la monocracia. Pero ante todo desaparece tan pronto como la evolución especialmente las superiores -Universidades, Institutos técnicos y comercia-
de las instituciones parlamentarias y, junto con ello, el incremento y publicidad de
les, Escuelas preparatorias y ciertas instituciones de enseñanza secundaria- se
la crítica desde el exterior revela que la completa uniformidad en la dirección
encuentran bajo la influencia predominante de la necesidad de atender a
del gobierno es el elemento más importante desde el punto de vista de los intere-
aquella "formación cultural" que cultiva las enseñanzas cada día más indis-
sc:s,del señor ~ lo que respecta a la escrupulosidad en la preparación de sus de-
cisiones. El sistema enteramente 'racionalizado de ministros especializados y pensables para el burocratismo moderno: la enseñanza de especialidades. Las
750 SOCIOLOCU DE LA DOMINACIÓN DOMINACIÓN BUROCRÁTICA 751
"pruebas especiales", en el sentido actual de esta expresi6n, se han encontrado
por parte de los a~pirantes .a! diploma. Si en to~a~ las esferas advertimo~ la
y se encuentran también fuera de las organizaciones propiamente burQCI3- eXigencia de una introducción de pruebas especializadas, ello no es debido,
ticas; así ocurre hoy para las profesiones "libres" del médico y del abogado naturalmente, a un súbito "deseo de cultura", sino a una aspiraci6n a la limi-
y en los oficios gremialmente organizados. No es tampoco un fen6meno con- .tación de las ofertas de puestos y a su monopolio a favor de! poseedor de
comitante indispensable de la burocratización. La burocracia francesa, inglesa ,tliplomas acreditativos. Y el "examen" es, en la actualidad, el medio universal
y norteamericana se han visto privadas de ellas en cierta medida o de <de llegar a este monopolio; de ahí su propagación irresistible. Y como el pro·
modo absoluto, siendo sustituidas por el entrenamiento y la actividad dentro ceso educativo necesario para la obtención de! diploma requiere gastos consi-
de la organización de partido. La "democracia" se enfrenta con las pruebas 'derables y mucho tiempo, la mencionada aspiración significa al mismo tiempo
especiales, como con todos los fenómenos de la burocratización impulsada por .·Ia eliminación de los dones naturales (del "carisma") a favor del poseedor de
ella misma, de dos maneras diferentes. Por una parte, significan o parecen títulos, pues el esfuerzo "intelectual" que exige la obtención de los ~i~loma,
significar una "selección" de las personas calificadas procedentes de todas las 'es cada vez menor y disminuye todavía más con la masa que participa de
capas sociales en lugar del dominio ejercido por los honoratiores. Por otro ellos. La exigencia de un modo de vivir caballeresco en la antigua calificación
lado, la democracia teme de las pruebas y de los títulos acreditativos el naci- 'feudal es sustituida entre nosotros por la participación en sus actuales rudi-
miento de una "casta" privilegiada y, en consecuencia, lucha contra ellos. Y,
finalmente, tales pruebas. se encuentran ya en épocas preburocráticas º -rnentos dentro de las asociaciones estudiantiles de los institutos que confieren
los diplomas, y en los países anglosajones por las asociaciones deportivas y
semiburocráticas. Su primera manifestación histórica está constituida regu- :"clubes~'. Por otro lado, la burocracia aspira siempre al desarrollo de una es-
larrnente por las dominaciones organizadas sobre' una base brebendal. La.espe- pecie de "derecho al cargo" por la creación de un procedimiento disciplinario
ranza de obtención de prebendas, ante todo eclesiásticas --como en el Oriente regulado, por la eliminación de la disposición arbitraria de los "superiores"
islámico y en la Edad Media occidental- y luego mundanas --como en •con respecto a los funcionarios; intenta tambié~, asegura,r .Ios }scensos y la.5
China- es la recompensa típica en virtud de la cual la persona estudia y se {pensiones y con ello se apoya en las tendencias democráticas de los dorni-
somete a pruebas. Pero estas pruebas ofrecen s610 en parte. un verdadero :;nados a una reducción del poder a lo mínimo, tendencias que creen poder
carácter "especializado". Sólo la moderna burocratizaci6n lleva a sus últimas . , descubrir en toda debilitación del poder discrecional de! jefe sobre los fUNCIO-
consecuencias los exámenes racionales especializados. La civil seTYÍce refonn narios una disminuci6n del poder mismo. Por consiguiente, la burocracia,
introdujo gradualmente en Norteamérica la enseñanza y los exámenes espe- : tanto dentro de los despachos comerciales como dentro del serv!cio públi.co,
cializados, penetrando asimismo en todos los demás países desde los princi- es la base de una evolución específicamente "estarnental" en el rrusrno sentld~
pales focos europeos, primeramente desde Alemania. La creciente burocra- -en que pudieron serlo los muy distintos funcionarios del pasado. Y se llamo
tización de la administración ha adquirido en Inglaterra cada vez mayor , ya antes la atención sobre el hecho de que estas cualidades estamentales sue-
importancia; e! intento de sustituir el antiguo burocratismo semipatrimoniaI len ser utilizadas a su modo para el cumplimiento de las tareas específicas
por e! moderno lo encontramos también en China (en lugar de los antiguos que plantea la burocracia. Ahora bien, contra este carácter inevitablemente
exámenes de tipo completamente distinto); la burocratízación del capitalismo
"estarnental" reacciona la tendencia que tiene la "democracia" a sustituir los
y sus exigencias de técnicos, de empleados, especialistas, etc., se han extendido funcionarios nombrados por una elección de funcinarios a corto plazo, a sus-
por todo e! mundo. Esta evoluci6n ha sido impulsada ante todo por el pres-
tituir mediante el plebiscito los procedimientos disciplinarios regulados por la
tigio social de los títulos acreditativos adquiridos mediante pruebas especiales,
simple destitución y, por consiguiente! a sustituir el poder arbitrario de los "se-
ye!lo tanto más cuanto que han podido transformarseen ventajas ec.on6micas.
ñores" jerárquicamente superiores por el poder igualmente arbitrario de los
Lo que fue en e! pasado la prueba del linaje como base de- paridad y de
dominados, es decir, de los jefes de partido,
legitimidad y, allí donde la nobleza ha seguido siendo poderosa, corrm base
inclusive de la capacidad de ocupar un cargo oficial, lo es en la actualidad E1 prestigio social basado en e! disfrute de una determinada educación y de una
e! diploma o título acreditativo. La creación de diplomas concedidos por las determinada instrucción no es por sí mismo algo específico de! burocratismo .. Al
Universidades y los Institutos técnicos y comerciales, el clamor por la creación contrario. En otras estructuras de dominaci6n se basa en fundamentos esencial-
de títulos en todos los sectores en general se hallan al servicio de la forma- mente distintos. En la estructura feudal, teocrática o patrimonial, en la adrninis-
ción de una capa privilegiada en los negociados oficiales y en los despachos traci6n inglesa de honoratiores, en la antigua burocracia patrimonial china, en el
particulares. Su posesi6n apoya el derecho al matrimonio con los honotatiores dominio ejercido por los demagagos en la llamada democracia helénica, l~ .fina-
(inclusive en los despachos pueden esperarse posibilidades de casarse con la lidad de la educación y la base de la estimación social, por mucho que difieran
hija de! jefe), a ser admitido en el círculo de los que tienen un "código de entre sí, no era e! "especialista", sino -para emplear una expresión ?pica- el
honor", a una remuneración según e! "honor estamentaI" (honorarios) en "hombre culto". Tal expresión es empleada aquí sin. darle una valoración y.sola-
vez del salario de acuerdo con el trabajo realizado, al ascenso y a la jubilación mente en el sentido de mostrar que el fin de la educación no era un entrenarmento
y, ante todo, al monopolio de los puestos social y económicamente ventajosos especializado, sino una cualidad en el modo de vivir estimada como. "cul~a". La
personalidad culta en e! sentido caballeresco o ascético o (como en Chma) Iiterario
752 SOCIOLOCÍA DE LA DOMINACIÓN DOMINACIÓN PATRIARCAL Y PATRIMONIAL 753
o (corno en Crecia) gimnástico-musical o (corno en los anglosajones) en la forma
convencional del, gentleman era el ideal educativo determinado por la estructura IV. DOMINACIÓN PATRIARCAL Y PATRIMONIAL
de dominio y podas condiciones sociales de la pertenencia a la capa de los señores,
Las aptitudes que determinaban la pertenencia a la capa de los señores no se basa- Naturaleza y origen de la dominación pamarcal. Dominio de los "honoratíores" y "a·
ban en un suplemento de saber especializado, sino en un suplemento de "aptitud rríarcalismo puro. El patrimonialismo. Organizaciones patrimoniales estatales. Poderío
del soberano patrimonial por medio de tropas de esclavos, mercenarios, delegados, súb-
cultural" (en el sentido enteramente variable que acompaña Slempre. a este con- ditos "alistados", erc, El poderío en virtud de la tradición. Uniones litúrgicas y asocia-
cepto), Corno es natural, era profundamente atendido el sab~r especial guerrero, ciones forzosas. Cargos y funcionarios patrimoniales. El sustento de los funcionarios
teol6gico y jurídico, Pero tanto en el proceso educativo helénico corno ~n el me- patrimoniales. Beneficios partitivos y rernuneratfvos. Estereotipación de la administra.
dieval y en el chino constituían e! centro de gravedad elementos educativos muy ción. La "individualidad" en lugar de la "competencia". La defensa de la unidad de
la dominación patrimonial contra los funcionarios. Ejemplos: 1. El antiguo Egipto; 2.
distintos de los "útiles" con vistas a la especialidad. Tras todas las discusiones del
China; 3. Cercano Oriente y Occidente. Dominio señorial local y señor patrimonial.
presente en tomo a los fundame,~tos de la ~~ltura se encuentra ,;n algún pun~? Administración pstrímoníal de los "honoraríores" en Inglaterra por medio de los jueces
decisivo el combate del tipo del especialista contra el antiguo hombre c~lto , de paz. Formación del "gentleman": consecuencias polítiC1,', económicas y estamenta-
combate que en todas las más Íntimas cuestion~ culturales se haIla determma?o les. El patrimonialismo zarísta, Patrímoníalísmo y honor estamentaí.
por la incesante propagaci6n de la burocratización de todas las formas d,e pooer
públicas y privadas y por la importancia cada vez mayor de! saber especializado, Ahora bien, entre los principios estructurales preburocráticos el más impor-
tante es el que se refiere a la estructura patriarcal de la dominación. En su
En el curso de su progreso, la organización burocrática 'no ha ..tenido s~lo esencia no se basa en el deber de servir a una "finalidad" impersonal y ob-
que dominar los obstáculos esencialmente negativos muchas veces ya mencio- jetiva yen la obediencia a las normas abstractas, sino justamente en lo contra-
nadas que se oponen a la nivelación por ella exigida, sino que con ella se han rio: en la sumisión en virtud de una devoci6n rigurosamente personal. Su
cruzado y se ehtrecruzan formas de la estructura administrativa que se basan germen radica en la autoridad de un dominus dentro de una comunidad
en principios heterogérieos y que en parte ya han sido examinados, Entre doméstica. Su posición autoritaria personal tiene de común con la domina-
ellos mencionaremos aquí de un modo breve y por medio de un esquema ción burocrática puesta al servicio de fines objetivos la continuidad de su sub-
sencillo, no desde luego todos los tipos realmente existentes -pues esto nos sistencia, el "carácter cotidiano". Además, ambos encuentran, en última ins-
conduciría demasiado lejos-, sino algunos principios estructurales especial- tancia, su apoyo en la obediencia a "normas" por parte de los que están
mente importantes. El examen debe hacerse no sólo, pero sí siempre bajo sometidos a un poder. Pero estas normas son en la dominaci6n burocrática
:/
las interrogaciones siguientes: 1) ¿Hasta qué punto están sometidos los prin- racionalmente creadas, recurren al sentido de la legalidad abstracta y se basan
.,. cipios a condiciones económicas o hasta qué punto les proporcionan las pro- en un ejercicio técnico, en tanto que en la dominación patriarcal se basan en
babilidades de evolución otras circunstancias, por ejemplo, circunstancias la "tradición", en la creencia en el carácter inquebrantable de lo que ha sido
puramente políticas, o una "legalidad propia" radicada dentro de su misma siempre de una manera determinada. Y la significación de las normas es
estructura técnica? 2) ¿Cuáles son los efectos económicos específicos --en el fundamentalmente distinta para ambas formas de dominación. En la domi-
caso de que-existan-e- que tales principios por su lado desarrollan? En esto nación burocrática es la norma establecida y que crea la legitimidad de! que
no debe perderse, naturalmente, de vista desde los comienzos e! hecho de la manda para dar órdenes concretas. En la patriarcal es la sumisión personal
continuidad e interacción mutuas de todos estos principios de organización. al señor la que garantiza como legítimas las normas procedentes del mismo.
Sus tipos "pur~" deberán ser considerados como casos límites indi,spensa,hles .En este caso, s610 el hecho y los límites de su poder proceden de "normas"
y en especial valiosos para e! análisis, caso~ entre los cual~ la re~J¡dad histó- que, aunque no han sido escritas, se han visto consagradas por la tradición.
rica manifestada casi siempre en formas mixtas, se ha movido y aun se mueve. Pero esto presupone siempre el hecho de que este señor concreto es, en la
'La estructura burocrática es .en todas partes un producto tardío. de la conciencia de los sometidos, "el señor" por excelencia. Y en tanto que su
¡ evolución. Cuanto más retrocedemos en el proceso histórico tanto .más típico poder no está limitado por la tradición o por poderes opuestos. En cambio,
t para el funcionario burocrático rige el principio de que una orden concreta
nos resulta para las formas de dominación el hecho de la ausencia de una
! burocracia y de un cuerpo de funcionarios. La burocracia tiene un carácter
"racional": la norma, la finalidad, el medio y la impersonalidad "objetiva"
sólo alcanza vigencia cuando puede apoyarse en una "competencia"
consignada en una "regla". El fundamento
especial
objetivo del poder burocrático
1l· dominan su conducta. Por lo tanto, su origen y su propagación han influido es su absoluta necesidad técnica basada en los conocimientos especializados.
siempre en todas partes "revolucionariamente" en su sentido especia.l a que En el caso' de la autoridad doméstica, las antiquísimas situaciones naturales
I
¡ luego nos referiremos, tal como suele hacerla el progreso del racionalismo en
todos los sectores. La burocracia aniquiló con ello formas estructurales de
constituyen la fuente de la creencia en la autoridad fundada en la piedad.
Para todos les que están sometidos a la autoridad familiar, es la convivencia
personal, permanente y específicamente Íntima dentro del hogar, con su co-
1- dominación que no tenían un carácter racional en este sentido especial con
que empleamos la palabra. Nos preguntamos, por tanto: ¿cuáles eran estas munidad de destino externa e interna. Para la mujer, es la superioridad nor-
j
mal de la energía física y espiritual del hombre. Para el muchacho, su nece-
},. formas?
i

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