os Brevirios del FONDO DE CULTURA ECONOMICA
constituyen la base de una
Yeesidad al hogar, paniendo al
‘mujer no especializados los grandes temas del con
‘miento moderno. Redactados por especialistas de
dito universal, cada uno de estos
tado sumario y completo sobre la mat
su titulo: en su conjunto, cuidadosa
forman esa biblioteca de consulta y of
cultura de nuesto tiompe hace indispensable.
ARTE @ LITERATURA @ RELIGION ¥ FILOSOFIA
HISTORIA @ PSICOLOGIA Y CIENCIAS SOCIALES
CIENCIA TECNICA
Charles-Olivier Carbonell « LA HISTORIOGRAFIA
LA
HISTORIOGRAFIA
CHARLES-OLIVIER
CARBONELL
¢ BREVIARIOS
e@ Fondo de Cultura Economi
3536 LA MEMORIA INMOVILIZADA,
de establecerrelaciones causales através de las
barteras cronométicas, rechazo de una perspectva
Tincal en benelicio de ciclo repeitivos.«Esribir,
historia noes conocer veridicamentenicompren-
der el pasado. ex poner en orden.
‘Ast a civilian dela duacion dela adicin,
de la memoria ey, de todas las eulturas que han
tuber el mundo, uns de las menos pas para la
V. CRISTIANDAD E HISTORIA.
LA LEYENDA DE LOS SIGLOS OSCUROS
{FUE Ia Edad Media esa “gran noche” durante la
cual la actividad histérica habria, como lo ha
afirmado Ch.-V. Langlois, “vuelto a la infancia"?
No faltan las pruebas de su decadencia.
@DECADENCIA?
Inmediatamente después de las invasiones germani-
cas, la historia, como todas las formas de vida
cultural, parece periclitar. La Cronica atribui
Fredegario, que fue escrita hacia 660, cuenta tantos
barbarismos y solecismos como palabras. Su fondo
no vale mas que la forma, si hemos de creer el juicio
que da de ella Adolfo Bartoli: “Credulidad,
confusién ¢ ignorancia exceden en ella todo limite:
hos encontramos en un mundo en el que el pen:
imiento ha caido tan bajo que mueve a compasion,
tun mundo en el que ya no existe el concepto de
historia.” Cien afios antes, en el otro extremo del
mundo cristiano, en aquel imperio de Oriente que,
sin embargo, ha escapado a la catistrofe, un retorico
sirio, Juan Malala, habia compuesto otra historia
tuniveisal, una Cronografia, no menos mediocre.
‘Abandonando el griego clisico por un idioma
popular desordenado, acumulaba los hechos mas
‘extraordinarios en una especie de enciclopedia de lo
fantastico en la que pululaban errores histérices.
a4
CRISTIANDAD E HISTORIA
Semejante regresién no fue, sin embargo, ni
general, ni duradera. En los dos extremos de ese siglo
Vu nocturno, que ilustra de barbara manera el
pseudo-Fredegario, brillan dos Crénicas que no
carecen de cualidades, obras de hombres de cultura,
Isidro, obispo de Sevilla, y Beda, un monje det
Durham. Mas tarde, vemos a los fundadores de
imperios pedir a Clio lustre y legitimidad para sus
fragiles construcciones: Eginardo (c. 775-844),
superintendente de la corte de Carlomagno, escribe
una Vita et gesta Caroli Magni: el poeta Ermoldo el
Negro, de la abadia de Aniane, canta a su sucesor,
Luis el Piadoso; el monje Widukind y el obispo
Liudprando en la segunda mitad del siglo 1x, glo-
rifican la dinastia otoniana. Un nieto de Carlomag-
no, Nithard, se hace el historiador de las luchas que
‘oponen a los herederos del Imperio carolingio.
Alfredo el Grande (871-901), rey de Inglaterra, que
tradujo él mismo al inglés la Historia del Mundo de
Orosio, dio un impulso decisivo a la continuacién
de los Anales reales (Anglo-saxon chronicle), donde
fueron recogidos todos los textos relativos a la histo-
ria de la Gran Bretafia desde los comienzos de la
conquista romana. El emperador bizantino Cons-
tantino Porfirogeneta (911-959) no desdeitd, él
tampoco, entregarse a trabajos historicos: bidgrafo
de uno de sus predecesores, Basilio el Macedonio
reunid en una gigantesca recopilacién las principa-
les obras de los historiadores griegosy latinus. Cierto
€s que en Bizancio las condiciones eran mas
favorables que en el Occidente: la tradici6n cultural
hhelenistica se dejaba semtiralli de manera positivaen
CRISTIANDAD E HISTORIA 0
tanto que en el resto de Europa, hasta el siglo
renacimientos no cran sino efimeras resurgencias, en
focos dispersos, de una latinidad degradada.
La historia no es, pues, un género abandonado
durante la primera Edad Media. Tampoco es un
género homogéneo, practicado de manera idéntica,
Debe mis su unidad a los historiadores que la
practican que a las obras que la constituyen
(CLERICS HISTORIADORES E HUSTORIAS RELIGIOSAS
mis alld del afio mil, la gente de Iglesia ejerce
en la cristiandad occidental un casi monopolio
historiografico. Dan a la historia un estilo esencial-
‘mente religioso; por su perspectiva, teoldgico; por sty
tema, eclesiistico; por su finalidad, ético.
Indudablemente los clérigos no ignoran cierta
forma de historia politica y militar; nacional
primero, recién formados los reinos germénicos;
dindstica después, con los renacimientos imperiales.
Enure 50 y 750, Jordannes, obispo de Ravena;
Gregorio, obispo de Tours; Isidoro, obispo de
Sevilla, y dos monjes, Beda de Jarrow y Paulo el
didcono de Monte Cassino, escriben respectiva y
sucesivamente la historia de los osirogodos, la de los
francos, la de los visigodos, la de los anglosajones y
ta de los lombardos. Eginardo —abad del monaste~
rio de Fontenelle—, Ermoldo de Aniane, Widukind
—monje de Corvey— y el obispo de Cremona,
Liudprando, reintroducen, en los siglos 1x y x, la
biografia cortesana, Gesta regnum, facta regnum,