El trabajo flexible significa esencialmente lo que implican las palabras: sistemas que

aseguren a los empleados oportunidades para llevar a cabo el trabajo de sus

empleadores en formas que mejor se adapten a sus propias necesidades, al tiempo
y por supuesto, teniendo en cuenta las necesidades de la empresa. El trabajo
flexible se refiere a todo un abanico de posibilidades de trabajo, desde trabajar en
casa hasta a tiempo partido, desde trabajo compartido hasta en horario flexible.7

LACATON&VASSAL: El lujo del vacío

En un mundo ahogado en el sistema capitalista, donde todo queda reducido a los costes, a
la máquina, a la producción en serie, donde sólo existen las masas, donde todo ha de ser
máximo rendimiento y rentabilidad, parecen olvidadas las verdaderas necesidades de la
humanidad.

Los arquitectos Lacaton&Vassal hacen con su arquitectura un ejercicio de concienciación:

nos recuerdan los verdaderos objetivos de la arquitectura. Ellos no olvidan que la principal
función es dar cobijo a las personas y tampoco olvidan que las personas son eso, personas
(no números o símbolos del euro). Trabajan con la máxima sensibilidad y emoción,
construyen desde y hacia el respeto.

Partiendo de un análisis crítico de la vivienda social europea, trazan unas bases que serán
denominador común en sus proyectos, poniendo en práctica sus ideales morales, y que les
han valido su reconocimiento internacional. Estos principios se pueden resumir en los
siguientes puntos clave:

Transformar vs derribar: aprovechar, añadir y mejorar.

“Cortar un árbol está muy mal visto. Deberíamos pensar lo mismo para los
edificios y las ciudades”

Concepto de espacio: vivido y flexible

“El espacio puede ser mental. No está sólo definido por paredes, sino también
por sensaciones”
 Crear ambiente: (re)introducir el placer

“La arquitectura debería estar hecho con todos los elementos que contribuyen
a conferir placer: ver el cielo, dejar que entre el sol, tener una vista,…”

Para entender la práctica de estas ideas podemos analizar el proyecto que los arquitectos
franceses llevan a cabo en laBanlieue[1] de París.

Frente a la propuesta de derribo (ojos que no ven, corazón que no siente) de las torres de
la periferia, Lacaton & Vassal, inician una campaña de concienciación. Consiguen mantener
los edificios (y su capacidad y su poesía) y comienzan a estudiar las tipologías para
transformar las viviendas en respuestas dignas a habitantes dignos.

Bloque de viviendas en la banlieue de París

Proyectan una ampliación del espacio habitable (confrontando la idea moderna de la vivienda
mínima) (2). Este espacio interior es menos dogmático (habitaciones que pueden ser lo que
tú quieras, es una arquitectura que no te da órdenes en cuanto a tu casa o tu modo de vivir),
flexible y sensual, límites débiles y permeables, que no se construyen con paredes sino con
usos y siempre invitados a la reconfiguración. Se huye de nuestra “cultura cartesiana”.

Espacio extra

Finalmente hay que llenar el espacio. Pero no tiene por qué llenarse con acabados, se puede
forrar de ambiente y placer (fundamental y sostenible). A través de una envolvente ligera y
transparente que se adapte al clima, aprovechando la naturaleza, que deje entrar la luz
natural, que permita visuales, que embellezca la vida facilitando el sentido del bienestar.
 Reestructuración de la vivienda en banlieue de París

Es un trabajo humano y sensible, que reconoce el valor real de la vivienda. Los tiempos de
crisis siempre son escenario de reflexiones y replanteamientos de nuestros sistemas de
actuación, Lacaton & Vassal hacen propuestas de cambio a todas las escalas: en las ciudades,
en los bloques, en la forma de vida. Dan a los individuos espacio para ser quién realmente
son y para vivir como realmente quieran, disfrutando del estado del bienestar que merecen.

Palais de Tokyo