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Manifiesto Político de Luis Enrique Santesteban

¿Por qué Colombia no progresa? Porque es incapaz de abandonar los imaginarios socio-
culturales y rechaza el cambio. En Colombia siempre ha habido un discurso guiado por la
ambición y exclusión social por parte de la derecha apoyada por la iglesia, quien interviene
en los asuntos del estado. Pero no hay que dejar atrás la irresponsabilidad de la izquierda
quien cuando llega al poder, lo único que busca es destrozar a la derecha. Por esa razón
prefiero en el centro del espectro político, guiado por discursos liberales laicos. A pesar de
lo anterior admiro el liderazgo del conservador Winston Churchill y el pensamiento del
cardenal John Henry Newman.

Existe el reto de darle mucha prioridad al mercado local y a las alianzas público-privadas
para el beneficio de toda la comunidad. La salud, la vivienda y la educación deben ser las
bases, si queremos vivir en un mejor país, donde la institución tenga como pilar la ética y el
interés de desarrollo social sostenible y a la vez valore la individualidad de cada ciudadano.
La salud al igual que los servicios públicos deben ser gratuitos. La educación debe ser de
jornada única con un programa bilingüe y que valore la autonomía del estudiante. Esta
educación se pagara con una pensión de no muy alto precio y que promueve becas tanto
internas como externas.

La pobreza también ha marcado a Colombia. La derecha busca el beneficio de unos pocos,


pero claro, existen sectores e ideólogos de esta rama política que hacen actividades o
programas de interés social en sus empresas y movimientos políticos, siendo un desarrollo
social mediado por el neoliberalismo o lo que llama Slavoj Zizek: un capitalismo moral, lo
cual, no es tan malo para el desarrollo del país. La izquierda busca la absurda distribución
equitativa de las riquezas, independientemente del esfuerzo realizado, siendo esta una
injusticia debido a que lo correcto seria pagar según el esfuerzo y el trabajo realizado, pero
claro esta que no se debe dejar una brecha tan grande en cuanto a la premiación del
trabajo. El tema socioeconómico colombiano es muy delicado que si se sabe trabajar y
moldear con cuidado. ¿Como hacer esto? Propongo:

• Lo principal es que cada ciudadano puede hacer con sus riquezas lo que le plazca.
• Un salario mínimo mas alto que le permitan tener una mejor calidad de vida, al igual
que un salario máximo en su trabajo oficial, sin embargo no repudio la idea de que
se gane dinero extra durante el tiempo libre, siempre y cuando no se lastime al
prójimo.
• Fortalecer el turismo nacional.
• Promover la agroindustria, el desarrollo tecnológico, la investigación medica y el
ecoturismo como fuentes de ingreso económico y generación de empleos.
• Legalización de la marihuana e inversión para la investigación medica.
• Fortalecer el sistema educativo para los técnicos y promover el desarrollo de nuevas 

tecnologías y comodidades para la comunidad.
• Promover que las micro-industrias se unan en cooperativas financieras
internacionales.
• Impuestos bajos y delimitación de la burocracia
• Una educación social que valore la autonomía ciudadana y el desarrollo colectivo.

Otro gran problema que está atravesando Colombia es la injusticia de la justicia. Los
organismos jurídicos solo favorecen a la clase burocrática y encierra a cualquiera de clase
media o baja por cualquier cosa. Es indignante que a los asesinos y violadores les den ocho
años de carcel con derecho a rebaja, mientras que a un vendedor ambulante lo encierran
por 20 años bajo el único crimen de mantener a su familia. ¿Porque se genera esto? Por
una falta de educación, conciencia de pertenecía colectiva y respeto por la individualidad
del otro. La justicia es aquel ente que debe garantizarle a toda la población, con
responsabilidad social y ética, la protección a los inocentes y castigo a los culpables de un
crimen de violencia o corrupción.

Estos problemas han causado que Colombia se desangre en una guerra que lleva mas de
medio siglo con las FARC-EP y otros grupos insurgentes como el ELN y como
consecuencia los paramilitares. Afortunadamente, en Agosto del 2016, se finalizaron los
diálogos de paz (después de cuatro años) con las FARC-EP en La Habana, Cuba. Estos
diálogos son la única forma de llegar a la paz. Pero, esto solo es el primer paso, por que
nos hace falta mucho para alcanzar lo que se quiere como nación.

Desde el patriotismo y el sentido colectivo me surge la necesidad de soñar con una


Colombia más pacífica y desarrollada. Mi sueño siempre ha sido ver que Colombia
desarrolle un sistema jurídico- económico más incluyente y sostenible. Con la firma del
proceso de paz, los colombianos seguimos con un sueño llamado paz, pero nos
polarizamos en cuanto al camino que toca tomar para llegar a este. Sostengo firmemente
que todos los seres humanos nos merecemos una segunda oportunidad, y para mí, el
simple hecho de querer llegar a una paz negociada, implica dar una segunda oportunidad y
que cada lado sea capaz de ceder, tal y como hicieron los entes negociadores. Dos de las
terceras partes cedieron, el siguiente paso es el plebiscito (qué se llevara a cabo el 2 de
Octubre del 2016) donde se dará a conocer la voluntad popular mediante la consulta
popular definida como democracia, pero antes de eso es imperativo, que todos nos
cuestionemos, cada uno como individuo, ¿qué debo ceder yo?

Lo que viene no es fácil. Nuestra economía va a tambalear. Habrá levantamientos civiles


apoyando el sí o el no. Pero no se llega al segundo piso en un solo paso, se requiere estar
en cada escalón de la escalera en la cual encontraremos un reto, pero el punto no es
devolverse sino, aceptar el reto y seguir subiendo la escalera.

El tema de la participación política de las FARC era algo inevitable, pero claro está que uno
hubiera deseado unos años de prisión para la totalidad del movimiento. La cantidad de
curules (5 en el senado y 5 en la cámara de representantes) con voz pero sin voto,
otorgados para los guerrilleros, es una cantidad muy pequeña comparado con los curules
de los demás congresistas, que muy seguramente les darán poco apoyo. Esos pocos
representantes guerrilleros no harán gran cosa, por lo tanto no entiendo el discurso de "le
entregarán el país a la guerrilla..... seremos como Venezuela". Sin embargo me preocupa el
incremento de ciudadanos que tienen la idea del que el socialismo es viable, cuando ya la
historia ha demostrado lo contrario.

La solución final de la guerra, el narcotrafico y la pobreza es sencilla en el papel, pero igual


que todo, requiere de voluntad política y cooperación cívica. A nivel general creo que para
llegar a la muy deseada y necesaria paz y hacer de Colombia un país mejor es crear una
educación completa y laica respetando la individualidad ante la institución. Y para terminar,
propongo un sistema político-económico basado en la meritocracia.

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