EL TEATRO EVANGELIZADOR FRANCISCANO,
EN NUEVA ESPANA
por Francisco Javier ORDIZ VAZQUEZ (Universidad de Le¢n)
INTRODUCCION
Desde el momento en que Hernin Cortés y sus soldados desembarcan en
las costas de Veracruz se inicia un periodo trascendental y apasionante en el
proceso que supone el nacimiento de las colonias espaitolas en el Nuevo
Mundo. El conquistador, favorecido por el grave error de los aztecas que
veian en él la encarnacién del mitico Quetzalcdatl que venia a restaurar su
reino perdido, se adentrara hasta el corazén del Imperio de Moctezuma que
poco después vera su final tras un largo asedio. En 1521 cae rendido Tenoch-
titlin y empieza la historia del México colonial. Numerosas crénicas de la
Epoca, obra tanto de vencedores como de vencidos, han legado a la posteri-
ddad la noticia épica de una conquista que exige de inmediato una ardua labor
de consolidacién en la que ocupa un lugar de primer orden la implantacién
de la religion cristiana en el pueblo recién dominado. Se abre de este modo
tuna segunda etapa en el proceso de asentamiento de Espafia en el Nuevo
Mundo, que tendra como objetivo la «conquista espiritual», de cuyo proceso,
dobjetivos y esperanzas también nos han dejado constarcia algunos de sus mas
directos protagonistas '.
No cabe duda de que la labor mas importante realizada en este terreno en
los primeras afios del México colonial corre a cargo de la orden franciscana,
Los franciscanos, Hegados cinco aftos después de la caida de Tenochtithin,
van a abordar de inmediato una empresa evangelizadora que se halla estre=
cchamente conectada con los fundamentos milenaristas de su pensamiento,
Como han puesto de relieve investigadores como J. Phelam o G. Baudot, la
verdadera intencién de la orden serifica residia en su intento de erear una So-
ciedad indocristiana, alejada por completo de Ia posible wcontaminacién» de
la cultura espafiola, que diera forma a ese paraiso de Cristo en la tierra»
profetizado por Joaquin de Fiore en el siglo XII? Esta comunidad estaria
controlada en todos sus aspectos por la Orden y habris de estar presidida por
(1) Esta definicidn provede del excelent libro de Robert Ricard La conquista espiri-
tal de México, (México, Jus y Polis, 1947),
(Q) Ver PHELAM, John L: El reino milenario de las fane'scanos en el Nuevo Mun-
cdo (México, UNAM, Instituto de Investigaciones Histricas, 1972) Y BAUDOT, Geor-
ies: Uopia e Historia en México Madrid, Espasa Calpe, 1983)
orPranciscoswieRoroizvazourz
{in evo Mesias, que gobernaria en paz durante un milenio, antes del defini-
tivo Apocalipsis
Jas Tafces milenarists del pensamiento franciscano constituyen la piedra
angular sobre la que gira toda su actuacién en los primeros aos de le cole,
é ica emprendida por
Olmos, Motolinia o Mendieta, tiene como finalidad primordial el cence,
lento profundo de la cultura autéctona como paso previo para crear las bar
Ss del nuevo orden. También a esta intencién responde la fundacion de ce.
etas 4 colesios para los indigenas, como ei de Santa Cruz de Tlatelolco, y
'a prohibicién de emplear en estas tareas educativas la lengua castellans,
{2% Males serdficos van a aprovechar numerosos contenidos procedentes
ca cultura indigena en su labor de evangeizacion, que adaptardn al peoee,
para los discursos tericos y moralizantes. Se trata de la primera Ver en auc
Un enero como el teatro es empleado como instrumento para la evangelion,
ion de un pueblo, y de uno de los més inteesantes testimonios que hey din
Poseemos del comienzo de la sintesis cultural en Hispanoamencs
tumo como teatro. fech decal y canto cuadrado de altura de dos extados y
eiserepe 0 st punto de as apeciacione de Othon Arnie quien sostiene que
Sikhs limitar considerablemente el papel jugado por la tradicion aulsctonsens eee
saeldn sa0rme late y afrma que wos ranciscanoscreadores el entre de eve
Zacién parten, por asi decilo, de
Mexico, UNAM, 1979, p11}
68‘medio (..) el cual tenian ellos para euando hacian alguna fiesta y juegos, que los
representadores de ellos se ponian ali porque toda Ia gente del mercado ylos que
cestaban en bajo y encima de los portales, pudieran ver lo que se hacia
Fray Diego Duran, afios més tarde, nos offece una completa descripcién
del caracter de estos «juegos» y arepresentaciones» a que alude el conquista-
dos. Por las noticias del dominico sabemos de la existencia de un tipo de ma-
nifestaciones teatrales en el México antiguo, que é1 mismo denomina «entre
‘meses», y que conllevaban una cierta complejidad escénica:
-chavia en medio dest patio un pequefio teatro detreinta pies en quadro muy en-
Calado en cual enrramavan y aderecavan para aquel dia coa toda la puligiaposs-
ble eereandolo de arcoshechos de toda diversidad de rossasy rica plumera col-
‘gando a trechos muchos y diferentes pajros y conejos y otras cossas fesibales y a
la visa apacibles donde despues de haver comido (..) saan los representantes
dondf el primero que salia era un entremes de un buboso fingiendose estar muy
Tastimado(..) lo qual no se representava sin misterio porque yba fundado en que
‘este ydolo Quetzalcoatltenian por abogado de las bubasy del mal de los os y
del romadico y tosse donde en los mesmosestremeses mesclaban palabras depre-
catibasa este ydolo pidiendo salud’
De las palabras de Durén deducimos que se trataba de expresiones festivas
relacionadas estrechamente con una celebracién religiosa y profundamente
entroncadas con la simbologia de un dios determinado. En ellas ocupaban un
lugar destacado el canto, el baile y la misica, asi como una cuidada y multi
color escenografia, en la que abundaban las flores, las plumas y los ropajes
vistosos. En su descripcién de las fiestas en honor de Tlaloc, el fraile pone
asimismo de relieve la importancia que tenia la Naturaleza en estas represen-
taciones:
‘Todos estos juegos y fiestas se hagian en un bosque que se hacia en el patio del
{enplo delante de ymagen del ydoto tlaloc en medio del qual bosque yncavan un
arbolaltissimo el mas alto queen el monte podian halla
‘También en su relato queda constancia de la costumbre de los actores de
disfrazarse para representar la escena:
Pueso alli todos los mancebos que dixe se bestian y adereeaban de caradorescon
sus arcos y fechas en las manos y todos puestos en escuadron con gran alarido y
ferita arremetian acia el macilento bijo que representava al ydolo y disparavan.
mucha cantidad de fechas enbiandolas alo alto porno ofender al ydolo
(4) CORTES, Herndn: Cartas de Relacién, México, Pornia, 1979, p. 157
(3) DURAN, Fay Dies: Ris tess de les atu mexicanas. México, Eo-
rial Innovacion, 1980, pp. 122-123.
(6) Ibid. p. 140.
(7) Ibid: p. 129.
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